EDITORIAL

A partir de ese año, bajo el mando de Buddy Bailey, los
bengalíes comenzaron una racha de seis campeonatos
en 12 campañas, incluido un tricampeonato, que los
colocó en lo más alto del béisbol nacional.
“Considero que los Tigres son la máxima expresión
de ser aragüeño, es decir, hace 100 años Maracay ni
siquiera era la capital del estado. Era un pueblito que,
gracias a la dictadura de Gómez y a la creación de
parques industriales en los 60 se transformó en ciudad,
razón por la cual la mayoría del 1.5 MM habitantes
de los 8 municipios del área metropolitana no son de
aquí”, explicó Jorge Montenegro, administrador de la
página Tigreros Oficiales, periodista de profesión y
encargado de empresa de telecomunicaciones.
“Por ejemplo, mi familia paterna es de La Victoria,
pero mi mamá es de Altagracia de Orituco. Eso crea
desapego de los habitantes. Mucha gente que dice
“Maracay es un pueblo” son caraqueños que se
cansaron de las colas. También hay mucho andino
y llanero y la sensación es que realmente nadie es
de aquí. Sin embargo, de parte de los menores de
25 años existe una gran identificación gracias a esta
reciente década y que, efectivamente, ellos si se
sienten orgullosos de ser aragüeños porque nacieron
aquí”.
Según una encuesta de la gerencia de mercadeo de los Tigres de Aragua, la cual se realizó hace unos cuantos
años atrás, tres de cada cuatro aragüeños menores de 25 años de edad son tigreros, y mucho de eso se lo
deben a la era Bailey y al nacimiento de otro ídolo, quizás el más grande que ha pasado por los Tigres: Miguel
Cabrera.
“Mucha gente con poder
adquisitivo sigue siendo de
Caracas, Magallanes, incluso Lara,
Zulia y Tiburones, pero los niños
usan el 24 de Miguel”, agrega
Montenegro, quien no está de
acuerdo en que los aficiones de
los Tigres sean considerados
radicales. “Yo no lo veo así.
Barquisimeto, Caracas, Maracaibo
e incluso Valencia son más
conflictivas que Maracay. Lo que
existe es resentimiento de parte del
tigrero hacia la prensa nacional que
solo escribe o transmite los juegos
de dos equipos y que se acentuó
en los 90 con las finales Caracas
y Magallanes, pero que gracias a
Dios ha cambiado. Hoy en día se
hacen más trabajos especiales
sobre los ocho equipos y se siente
un mayor respeto”.
Batazos memorables como el de Alex Romero en un séptimo juego de la final para dejar en el terreno a
los Navegantes del Magallanes, un tricampeonato, remontadas históricas, peloteros de talante grandeligas
y la garra de no darse nunca por vencidos en el terreno de juego, son algunas de las tantas cosas que han
caracterizado en los últimos años a los Tigres y que han influenciado a una fanaticada que juego tras juego llena
el José Pérez Colmenares de Maracay.
EDICIÓN ESPECIAL 50 ANIVERSARIO
39