Estudio morfoclimático del Cabeçó d'Or - Publicaciones de la ...

Trinidad Sánchez Navarro
Estudio morfoclimático del Cabeçó d’Or
consiguiente va ensanchando las grietas ayudando igualmente
a la gelifracción y el desprendimiento del derrubio.
Este mecanismo, que en distintos momentos del Cuaternario
pudo presentar una actuación continuada, actualmente se
encuentra bastante limitado y su efectividad se circunscribe
a lugares escogidos por presentar condiciones de exposición
y altitud favorables. Los efectos actuales del hielo no hemos
de limitarlos a los escasos días de nieve que cubren el macizo,
ni tampoco al número de días con registros térmicos
negativos, ya que en ambos casos se está falseando la realidad,
pues no todos los registros térmicos negativos van
acompañados de la formación de hielo. Por ello se ha realizado
un vaciado de los registros climáticos para relacionar la
coincidencia de días con temperaturas negativas posteriores
a los días de lluvia, y así poder evaluar las posibilidades de
la crioclastia. Se han contabilizado un total de 93 ocasiones,
en una serie de 20 años (Jijona 195675) en que los registros
térmicos negativos van precedidos de días de lluvia, dato
que permite aventurar la existencia hoy de fenómenos de
gelifracción en el macizo. Máxime cuando a la altitud del
macizo habría que sumar la abundancia de precipitaciones
ocultas que no pueden contabilizarse pero que indudablemente
elevan las posibilidades de hielo. A ello habría que
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