hacia un enfoque del derecho procesal que responda a ... - EGACAL
hacia un enfoque del derecho procesal que responda a ... - EGACAL
hacia un enfoque del derecho procesal que responda a ... - EGACAL
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Revista Iberoamericana de Derecho Procesal Garantista 2006<br />
Reconocer en toda su extensión la importancia <strong>del</strong> <strong>derecho</strong> <strong>procesal</strong> a principios <strong>del</strong><br />
siglo XXI implica necesariamente reparar en aspectos habitualmente relegados <strong>que</strong><br />
conllevan a <strong>un</strong> indispensable de visión.<br />
Hete aquí el desafío: aceptar <strong>un</strong> alentador cambio sistémico y de mentalidad, donde la<br />
tutela judicial deja de entenderse como <strong>un</strong>a gracia, favor o concesión <strong>que</strong> otorga el<br />
Estado a las personas para concluir comprendiendo de <strong>un</strong>a vez por todas <strong>que</strong> se trata de<br />
<strong>un</strong> <strong>derecho</strong> constitucional <strong>que</strong> tiene cada habitante. Las consecuencias de esta<br />
modificación de <strong>enfo<strong>que</strong></strong> son numerosas e importantes.<br />
De tal manera, el <strong>derecho</strong> <strong>procesal</strong> debe contemplarse y comportarse como <strong>un</strong> sistema<br />
de garantías integrado por preceptos constitucionales a los <strong>que</strong> responde y a la vez<br />
refleja fielmente en el procedimiento 8 .<br />
Este nuevo ángulo de observación <strong>del</strong> fenómeno se centra en la persona – en sus<br />
<strong>derecho</strong>s y en su libertad -.Únicamente es compatible con el Estado de Derecho, pues<br />
destierra todo autoritarismo y totalitarismo. Reivindica el papel destacado <strong>del</strong> <strong>derecho</strong><br />
<strong>procesal</strong>, a la vez <strong>que</strong> lo coloca en íntima relación con el orden constitucional.<br />
Este protagonismo <strong>del</strong> <strong>procesal</strong>ismo, no se ha generalizado lo suficiente. No olvidemos<br />
<strong>que</strong> repetidamente se lo relega asignándole <strong>un</strong>a restringida participación aduciendo <strong>que</strong><br />
se trata de <strong>un</strong> mero instrumento <strong>del</strong> <strong>derecho</strong> de fondo 9 .Ello conduce a <strong>que</strong> se lo atienda<br />
inadecuadamente en los programas de estudio de muchas <strong>un</strong>iversidades y no se incul<strong>que</strong><br />
entre los jóvenes futuros operadores <strong>del</strong> sistema- <strong>un</strong>a óptica prof<strong>un</strong>da, moderna y proactiva<br />
de la materia.<br />
El <strong>derecho</strong> <strong>procesal</strong> abre sus puertas al razonamiento y al pensamiento; no se trata<br />
solamente de la explicación e interpretación de normas formales <strong>que</strong> sólo dan cabida a<br />
comentadores <strong>del</strong> artículo de los códigos. Por el contrario, notables intelectuales se<br />
enrolaron – y enrolan – en sus filas para contribuir a su desarrollo con la inteligencia y<br />
la pasión. En su legado figura <strong>un</strong>a misión para todos nosotros: aprender a pensar el<br />
<strong>derecho</strong> <strong>procesal</strong>.<br />
Pensar el <strong>derecho</strong> <strong>procesal</strong> implica abandonar la costumbre de considerarlo como <strong>un</strong>a<br />
rama abstracta, estática y circ<strong>un</strong>scripta a <strong>un</strong>a faceta absolutamente mecanicista, para<br />
abrir paso a <strong>un</strong>a apreciación amplia por cuyo intermedio se sientan los presupuestos <strong>que</strong><br />
debe abarcar la norma procedimental – <strong>que</strong> tiene carácter dinámico-, siempre orientada<br />
por el sendero <strong>que</strong> señala la Constitución.<br />
Sólo de este modo comprenderemos la razón por la cual, en <strong>un</strong> Estado de Derecho –<br />
donde el poder se subordina al <strong>derecho</strong> y no al revés, el proceso configura nada menos<br />
<strong>que</strong> el centinela de la libertad y los <strong>derecho</strong>s <strong>del</strong> hombre, contrarrestando todo embate<br />
sobre éstos.<br />
Sin detenernos en el panorama actual <strong>que</strong> presenta la administración de justicia, pues es<br />
más <strong>que</strong> conocido por el lector, preferimos esbozar alg<strong>un</strong>os aspectos conceptuales<br />
relevantes para comenzar a transitar, dando inicio a <strong>un</strong> debate de ideas, el sendero <strong>que</strong><br />
8<br />
Y dado – como se explicará más a<strong>del</strong>ante – <strong>que</strong> el procedimiento es el género y el proceso la especie, es<br />
evidente <strong>que</strong> también los refleja en éste.<br />
9<br />
Sin olvidar la célebre – mal <strong>que</strong> nos pese- calificación dada por Cónsolo: la “tomba <strong>del</strong> diritto”.<br />
3