Turanga Leela - Nosolorol

Ultimátum a la Tierra
Calculon
(Nueva York) ROBOT de 1001 años: es la estrella de “Todos mis
circuitos”, una exitosa serie de TV. En una de sus primeras formas
fue el actor de TV David Duchovny.
«Eres solo un humano»
«Mira, estoy programado para ser un robot muy ocupado. A no ser
que puedas calentar agua a 212 grados, no me interesa»
«¡Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!»
Eres CALCULÓN, el mejor actor de todos los tiempos. No ha sido un camino fácil, has
tenido que subir muchos escalones pisando a todo aquel que se te pusiera por delante, y
es que el mundo del espectáculo puede ser cruel, pero independientemente de si lo es o
no, la mortalidad entre los actores es altísima. Un día estás en la cima y otro día te
empujan y caes doscientos metros hasta hacerte fosfatina contra el suelo.
Aprendiste con los mejores. De hecho has evolucionado durante siglos hasta convertirte en
la forma robótica superior que eres ahora. Aún te acuerdas de tus principios allá por el
siglo XX cuando te hacías llamar David Duchovny. La Fox comía de vuestra mano –si no
hubiera sido por aquella zorra de Gilliam Anderson... pero tuvo su merecido. El caso es que
ahora tu carrera es tan dura como tu carcasa, eres lo que se llama un actor consagrado, o
al menos en el área de la Orden Democrática de Planetas. Pero la verdad es que en el
espacio exterior hay multitud de razas que aún no saben nada del gran éxito de audiencia
que protagoniza CALCULÓN: “Todos mis circuitos”.
Por eso cuando Mamá, la misma que hace ya casi un siglo te dio tu primer cuerpo robótico,
te ofreció la oportunidad de participar en la mayor producción que ha visto el universo,
hiciste como que consultabas tu base de datos por que tuvieses ya algún otro compromiso,
y aceptaste sin usar ni un ciclo de CPU.
La sorpresa llegaría cuando descubriste que la producción, cuyo título de trabajo era
“McNeal: el episodio inédito”, no era otra que la trasnochada serie de TV del siglo XX
“Jenny McNeal: Abogada Soltera”. Conocías la serie y la protagonista era una mujer
anoréxica de mediana edad haciéndose pasar por una jovencita dinámica de libido
descontrolada. ¡¿Y dónde encaja CALCULÓN en todo esto?! Es fundamental que les
hagas ver que cualquier papel que pueda hacer una humana raquítica puedes hacerlo tú un
zillón de veces mejor. Además... ¡¿quién querría ver a una abogada promiscua de corta
minifalda pudiendo ver al gran CALCULÓN?!
Y el caso es que quizás no te sea muy difícil meterte a esta gente en el bolsillo. Otra
sorpresa que te has llevado, al llegar al plató en el que vais a rodar, es que conoces a uno
de los que cortan el bacalaó, un tipo que también data del siglo XX.
En el momento en que se emitía Jenny McNeal, bajo el nombre de David Duchovny,
trabajabas en la misma cadena que producía la serie. Y así, de manera casual, te
enteraste que un patán había tirado cocacola sobre una mesa de montaje y debido a esto
se había fastidiado la emisión del último episodio de la serie. Fue algo muy sonado. Aquel
patán era el tipo que siempre traía las pizzas al estudio, un tal Fry.
Parece que después de un milenio el tipo a conseguido medrar algo, aunque la verdad es
que sigue pareciendo el mismo pringaó. Pero eso a ti te da igual, mientras puedas sacar
tajada. No se trata de delatarle, con eso no ganarías nada, el chantaje puede ser mucho
más útil.
Estás dispuesto hasta a ponerte peluca si hace falta, con tal de protagonizar la
producción. Ya lo está viendo: CALCULÓN es Jenny McNeal (solo en Fox).
Futurama: Ultimátum a la Tierra © 2006, Rosendo Chas y Manuel J. Sueiro para NOSOLOROL Ediciones
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