UNA DECADA DE HISTORIA Y ALGO MÁS… - Berabevú
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ealizado una campaña proselitista adecuada por falta de tiempo y<br />
recursos necesarios.<br />
El gobierno de Veggi fue notoriamente desordenado en materia de<br />
finanzas, lo que se puso de manifiesto en el hecho de que la<br />
economía de la Comuna se vio seriamente comprometida, en<br />
aproximadamente ochocientos mil dólares o pesos en ese momento,<br />
suma ésta, ampliamente desproporcionada para la cantidad de<br />
habitantes del pueblo y la capacidad contributiva de éste. La<br />
situación de los empleados comunales era complicada ya que hacía<br />
cinco meses que no se les abonaba el salario. Los proveedores<br />
tampoco recibían sus pagos y el crédito comunal estaba cortado.<br />
Estos patéticos acontecimientos eran conocidos en la zona y en<br />
algunos sectores del Gobierno Provincial que veían los mismos con<br />
cierta preocupación y pasividad.<br />
Desde los programas de radio “Charlando Realidades” que<br />
compartía con María Isabel de Sorribas y su esposo Marcelo, (que se<br />
emitía los jueves por la tarde) y “El Raconto de la semana” que<br />
compartía con Carlos Vignatti, Celina Natali y Joaquín Eixarch,<br />
(que salía al aire los sábados por tarde), ambos desde la FM Joven,<br />
marcábamos los groseros errores de la gestión de Veggi, entre otras<br />
cosas.<br />
Los asados anteriormente mencionados tenían lugar generalmente<br />
en el quincho de Gerardo Mazzoni. En él nos reuníamos: Gerardo, su<br />
esposa Lucrecia, Héctor Gasparini, Jorge Pautasso, Rubén<br />
Hernández, Miguel Castanetto, Carlos Vignatti, Jorge Bellini y yo,<br />
entre otros. En estas oportunidades dialogábamos enfervorizados<br />
sobre la crisis política en que estaba inmerso nuestro pueblo, además<br />
de los acontecimientos políticos del país y de la provincia, sin<br />
descuidar los temas personales, que son los que verdaderamente<br />
hacen a una relación de amistad que aún hoy mantenemos, a pesar de<br />
los lógicos desencuentros que la vida nos va proporcionando.<br />
Las charlas en el bar, las tenía con Oscar Roveda, quien me<br />
proveía de libros y recortes de diarios que yo utilizaba en los<br />
programas de radio, con Rubén Hernández con quien analizábamos<br />
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