Educación Paliativa - Captel

comunidades sin acceso legítimo a bienes de consumo, así como también los excluyó y
repelió de los capitales simbólicos culturales.
―Huele a shopping tu libertad, la televisión puede más que la escuela.‖ (Arbolito, 2002)
Los medios de comunicación influyen en la formación de la opinión pública, marcan
tendencia y credibilidad lesionando el vínculo social, sosteniendo la idea de que: ―algunos
grupos‖, ―algunos sectores‖; siempre es el otro el que irrumpe en lo instituido, caracterizado
como ―peligroso‖, adjudicándole además juicios de valor: migrantes ilegales, villeros
indocumentados, marginales.
(Silvia Duchatzky, Carlos Skliar; 2000)
Alejandro Cañada, 1991
Tal como ya se ha señalado, siguiendo a E.
Bordoli, actualmente la mayoría de los chicos
pobres están condenados a ser ―cadáveres
sociales‖, en tanto y en cuanto sean considerados
mano de obra barata y un voto seguro, porque
estarán fuera de una sociedad que demanda
saberes y éxitos, naturalizando en esa normalidad
aparente que estén ―sin ser‖.
―Necesitamos del otro para, en síntesis,
poder nombrar la barbarie, la herejía, la
mendicidad, etc. Y para no ser, nosotros
mismos, bárbaros, herejes y mendigos.‖
En las escuelas se analiza el signo, algo que se puede medir, cuantificable, palpable –como
la fiebre, el tumor, la inflamación– y no el síntoma, que es lo que siente el otro –dolor,
agobio, indiferencia. El signo se traduce en el mapeo de los bolsones de fracaso escolar que se
cuantifican en distritos escolares, las estadísticas con sobreedad y de deserción que se
publican.
El desafío es la resistencia activa, continuar intentando el enlace sociocultural, ofrecer la
posibilidad de ampliar el entramado social, estar disponible para acompañar la entrada al
mundo, dar cuenta y reconocimiento de marcos de referencia distintos, habitar ocasiones para
compartirlos, afiliar a una genealogía cultural, arbitrar las condiciones para que se construya
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