integración de proyectos en una iniciativa comunitaria - Instituto ...

INTEGRACIÓN DE PROYECTOS EN UNA INICIATIVA
COMUNITARIA
Biól. Ramírez Santiago, Gustavo.
Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad. México
Tel. 55-28-91-36; Fax. 55-28-91-31; e-mail. santeang@ecologia.edo.mx
Un aspecto importante a atender en cualquier proyecto de gestión integral de
recursos naturales y de desarrollo comunitario es el reto de que la comunidad
pueda controlar el proceso y ser la tomadora de decisiones. Ante lo confuso
que puede resultar toda la gama de proyectos que se puede realizar con el
patrimonio naturale de las comunidades y ejidos, se propone el siguiente
programa (Ordenamiento Comunitario del territorio OCT) que puede manejarse
desde el nivel de parcela hasta un predio comunal completo. De esta manera
se propone crear los paisajes diversificados que requiere la conservación de la
biodiversidad y compatibilizar la demanda social con la oferta ambiental e
institucional.
GESTION AMBIENTAL COMUNITARIA PARA LA CONSERVACION DE LA
BIODIVERSIDAD, OFERTACION DE SERVICIOS AMBIENTALES, BIENES
DE CONSUMOS AMIGABLES CON LA BIODIVERSIDAD Y ENERGIA.
1.- INTRODUCCION DEL PROYECTO
GESTION AMBIENTAL COMUNITARIA PARA LA CONSERVACION DEL
PATRIMONIO NATURAL.
INTRODUCCION : AREAS COMUNALES PROTEGIDAS
Creo que un estudio cuidadoso confirmará mis observaciones de campo de
que la mayoría de la biodiversidad del mundo no está dentro de reservas
protegidas patrulladas, sino en paisajes manejados por gente local. La mayor
parte de la biodiversidad está en aguas y tierras manejadas por grupos
tradicionales marginales a la economía mundial.
Janis Alcorn
Nunca antes en la historia se había tenido el nivel de concientización
sobre la necesidad de la conservación de la biodiversidad actual. Sin embargo,
poco sabemos cómo hacerlo. Ante esta ignorancia el mundo entero ha

aceptado la creación de redes nacionales e internacionales de áreas
protegidas, como una respuesta fácil al problema. Poco se ha evaluado o
cuestionado su eficacia. Las únicas reglas aceptadas han sido que más áreas
son mejores que menos, y que las grandes áreas son mejores que las
pequeñas.
Sin embargo aún quedan muchas preguntas sin respuesta: ¿cuál es el objetivo
central de la conservación a través de áreas protegidas?; ¿la biodiversidad?;
¿ecosistemas prístinos?; ¿satisfacción de nuestra biofilia?; ¿nostalgia? Cada
pregunta a su vez genera muchas más: ¿qué biodiversidad queremos conservar?,
¿tienen igual valor todas las especies?, ¿debemos hacer el mismo esfuerzo para
conservar por igual todas las especies de plantas, animales y microorganismos?
Quizá lo más preocupante es que la mayor parte de las especies de nuestro
planeta aún están por descubrirse, ¿cómo podemos proteger lo que
desconocemos?
Es evidente que quizá ante la falta de respuestas para estas preguntas,
nuestra única opción ha sido la de apoyar ciegamente una sola acción: crear
más áreas protegidas. Intuimos que hacer esto es mejor que no hacer nada.
México ha seguido y sigue este camino, sin embargo sabemos que no es
suficiente.
México posee una gran diversidad biológica. La riqueza de endemismos de la
biota mexicana la hace una de las más importantes del mundo (véase
Sarukhán y Dirzo, 1992) y al mismo tiempo constituye un reto para lograr
su conservación. En México se han utilizado como instrumento de
conservación diferentes esquemas como : parques nacionales, zonas
protectoras forestales y más recientemente las reservas de la biósfera.
Sin embargo, actualmente adolecen de los problemas ya conocidos y
algunos son tan severos que ponen en entredicho el papel de muchas de
las Areas Naturales Protegidas ya decretadas
Otro tipo de iniciativa de conservación sin decreto de gran importancia
son los predios propiedad de ejidos o comunidades indígenas que se dedican

por voluntad de la misma comunidad a la conservación ecológica. En éstos se
incluyen no sólo las zonas forestadas con poca perturbación, sino también sus
diversos agroecosistemas que constituyen el reservorio genético más
importante de plantas cultivadas (Rzedowski, 1992).
Es costumbre antigua de muchas comunidades indígenas mantener porciones
de sus bosques y selvas con un mínimo grado de perturbación. Estos sitios son
sus “reservas” para el futuro. En ellos se encuentran sus plantas medicinales,
sus semillas y múltiples productos necesarios. Se han estudiado estos sitios en
la Huasteca, la región zapoteca chinanteca, en la zona totonaca y en la maya.
Se sabe de su existencia en muchos otros sitios más pero no se cuenta con
descripciones precisas.
En el pasado, la legislación agraria no favorecía estas iniciativas de
conservación campesina, ya que incluso las penalizaba a través de la Ley de
las Tierras Ociosas que declaraba enajenables las tierras no utilizadas. Muchos
campesinos se vieron en la necesidad de desmontar terrenos para evitar que
se los quitaran. Afortunadamente, otros muchos no lo hicieron y hoy en día la
mayor parte de las zonas bien conservadas del país están en manos de
comunidades indígenas y campesinas. Este hecho nos ha permitido ver la
enorme posibilidad y el potencial que tienen las iniciativas campesinas para la
conservación efectiva sin decreto o con el apoyo de otros instrumentos legales. Es
indispensable buscar las mejores formas para estimular, compensar y
reconocer estas acciones conservacionistas campesinas. Hasta ahora, el costo
de la mucha o poca conservación de la naturaleza en México ha estado
recayendo en los más pobres.
A pesar de esto, muchos campesinos han decidido crear sus propias reservas.
Estas reservas creadas por iniciativa y bajo la responsabilidad de campesinos
las hemos llamado “reservas campesinas”. Pueden o no tener algún
documento legal que las acredite (decreto, acuerdo, etc.); en realidad esto no
es lo que importa, lo fundamental es que las reconozcamos, estimulemos y
apoyemos. Ésta es una gran oportunidad para lograr una conservación a nivel
nacional cuyo foco primordial sean las comunidades de base.

Un ejemplo notable de reserva campesina es la llamada Reserva Comunal de
la Sierra de la Cojolita acordada en asamblea de la comunidad lacandona. Fue
creada por ellos y constituye la única conexión selvática entre la Reserva de
Montes Azules y las áreas protegidas de Guatemala. Es un corredor ecológico
formado por campesinos. Otra reserva campesina es la de Mazunte en
Oaxaca, creada por acuerdo de la comunidad y con la finalidad de proteger las
selvas, que son atractivo para las actividades ecoturísticas que ellos
promueven. Las iniciativas de reserva campesina más importantes por su
extensión y complejidad son la de Sierra Norte de Oaxaca y Los Chimalapas,
las cuales están siendo desarrolladas a través de procesos de Gestión
Territorial Comunitaria. La Reserva de Yum Balam, en el norte de Quintana
Roo, es otro ejemplo de reserva creada por iniciativa de campesinos. En este
caso la zona tiene además un decreto presidencial.
Sin lugar a dudas las zonas denominadas como áreas forestales permanentes
caen en este tipo de reserva campesina. Son áreas bajo aprovechamiento de
los bosques y selvas naturales que se mantendrán como zonas forestales. El
estado de Quintana Roo con su Plan Piloto Forestal ha estado a la vanguardia
en esta iniciativa y tiene aproximadamente 500,000 ha de áreas forestales
permanentes.
En la mayor parte del México rural, las antiguas instituciones indígenas que
sustentaban la acción colectiva y el trabajo cooperativo se han derrumbado
(García-Barrios, et al., 1991). Como consecuencia muchas prácticas de
estímulo para la productividad y de conservación del ambiente han
desaparecido o se han deteriorado. Un conjunto de acuerdos y normas
establecidos entre los individuos y las clases sociales locales regulaban la
acción social y productiva de la población indígena mediante distintos métodos
de generación de consenso, coerción y compulsión económica. Luego, el
desarrollo de la localidad provocó la reorganización de las estrategias de vida y
acumulación. El aprovechamiento de los recursos naturales afrontó la
introducción de innovaciones tecnológicas y productivas, de esta manera,
muchas veces socavó las bases mismas de las instituciones de acción

cooperativa y limitó los fundamentos que entonces mantenían un manejo
sostenible. Más aún, el patrón de desarrollo económico y político del lugar no
estimuló la aparición de nuevas conductas, normas y regulaciones que
indujeran la productividad y ayudaran a preservar los recursos naturales y las
sociedades locales se vieron limitadas para crear la tecnología y las
instituciones económicas que se adaptaran al nuevo contexto económico y de
trabajo.
Afortunadamente, en muchas de las comunidades indígenas que poseen
áreas bien conservadas, muchos de estos problemas han sido resueltos a
través de la participación colectiva, lo que ha reforzado no sólo la integridad
misma de las comunidades, sino también el papel de las instituciones
campesinas para el control del acceso y aprovechamiento de los recursos
naturales y las ha transformado y habilitado para el control sobre el acceso y
distribución de la riqueza generada definiendo así a las nuevas instituciones
económicas creadas para adaptarse a las condiciones económicas, sociales, y
legales actuales. Sin embargo, las comunidades siguen soportando grandes
costos en capital financiero, social y humano para lograr la conservación de su
patrimonio natural sin que hasta la fecha se definan mecanismos mediante los
cuales el resto de la sociedad que disfruta de los beneficios en forma de
servicios ambientales, bienes de consumo y energía pueda colaborar en dichos
esquemas de conservación, o bien los esfuerzos de colaboración son tan
limitados que el efecto es prácticamente nulo.
Es por ello que proponemos la creación de un programa para conciliar el
desarrollo rural y la conservación de áreas naturales, que además apoye el
reforzamiento de las instituciones campesinas que controlan el acceso,
aprovechamiento y distribución de los recursos naturales y financieros a través
de incrementar las capacidades organizativas, técnicas, jurídicas,
administrativas y financieras de las comunidades indígenas con el objetivo de
desarrollar un instrumento de gestión para la conservación de espacios
naturales comunitarios, donde los organismos externos como universidades,
organizaciones no gubernamentales, centros de investigación e instituciones
gubernamentales provean de información, medios y recursos a las

comunidades locales y de esta manera puedan tomar decisiones adecuadas
para el aprovechamiento sustentable y conservación de sus recursos naturales
y particularmente de la biodiversidad.
La estrategia prevista es la de determinar a partir de procesos comunitarios de
ordenamiento territorial y la discusión de los intereses de cada una de las
comunidades los proyectos y actividades concretas a realizar dentro de varios
rubros (Planificación; Financiamiento; Protección; Investigación y Estudios;
Infraestructura; Coordinación y Vinculación; Normatividad; Educación,
Comunicación y Difusión; Control y Vigilancia; Uso Sostenible y Capacitación),
para ir construyendo paulatinamente un programa integral de protección y uso
sostenible de la biodiversidad en cada una de las localidades.
El fin último del proyecto debe ser compatibilizar la demanda social con la
oferta ambiental e institucional para la conservación y manejo sostenible de los
recursos naturales, principalmente de la biodiversidad, por lo que es necesario
atender la demanda formulada e iniciar un proceso para ir construyendo
paulatinamente un programa integral de protección y uso sostenible de la vida
silvestre en cada una de las localidades, que sea adoptado por las propias
comunidades y su ejecución trascienda la relativamente corta participación de
las organizaciones externas.
Asimismo, potenciar las capacidades locales apoyándolas y fortaleciendo la
organización y el interés local; ampliar el alcance, perspectivas y horizonte de
las iniciativas puntuales de uso de especies de la vida silvestre y sus hábitats,
complementando el manejo forestal ejemplar( p. Ej. Noh bec en Quinata Roo) y
de sistemas agroforestales basado en café que han conducido las
Comunidades (p. Ej. Mahomut y Motozintla en Chiapas ); poner en marcha de
manera formal un Programa Integral, que implica la definición precisa de los
niveles de trabajo y responsabilidad de cada una de las partes involucradas;
proveer medios y oportunidades para el aprendizaje mutuo y la
complementaridad de esfuerzos y capacidad; y sistematizar el conocimiento, la
información y documentar toda la experiencia que de esta experiencia se

derive, no solo en cuanto a vida silvestre y su utilización, sino incluso en cuanto
al trabajo colectivo y cooperación entre las diversas organizaciones.
4 PASOS PARA LA IMPLEMENTACION DE LA INICIATIVA INTEGRAL
A través de procesos de ordenación colectiva del territorio se pretende que los
beneficiarios desarrollen Sistemas Comunitarios de Planeación Territorial,
Sistemas Normativos Comunitarios de Regulación del Acceso, Uso y
Control de Recursos Naturales, generen carteras de proyectos especificos
para la venta de servicios ambientales, bienes de consumo amigables con la
BIODIVERSIDAD y energia. Asimismo se requiere desarrollar un contexto
adecuado para el soporte de las Iniciativas Comunitarias de Conservacion
de la Biodiversidad. La idea es fortalecer las capacidades técnicas,
administrativas, organizativas, juridicas y financieras de las comunidades para
la conservacion de la biodiversidad a traves de procesos participativos donde
las comunidades y organizaciones locales integrando el conocimiento local
(tradicional) y científico desarrollen las siguientes etapas
DIAGNOSTICO COLECTIVO DEL TERRITORIO
El diagnóstico participativo para la autogestión local de los recursos naturales,
requiere de una buena preparación y labor de convencimiento previo, con la
definición clara de los objetivos. ¿Qué se pretende lograr con el diagnóstico
participativo?. Lo problemas detectados y las propuestas de solución deben
plasmarse en un potencial programa de gestión de los recursos mediante la
detección de oportunidades agroecológicas, agroforestales, forestales, y
acuícolas que partan de la experiencia propia y puedan enfrentar exitosamente
los problemas económicos, sociales y ambientales. Como mínimo el
diagnóstico debe responder a las preguntas:
QUE ES LO QUE TENGO (en términos de patrimonio natural)
EN QUE ESTADO ESTA
PARA QUE ME PUEDE SERVIR (potencialidades de uso )

De esta manera se conforma un Diagnóstico Colectivo del Territorio en
conjunto con especialistas de apoyo (academia, ong y otros) y se definen los
lineamiento e insumos para la siguiente etapa donde las Comunidades
establecen estrategias y acuerdos (SISTEMAS NORMATIVOS
COMUNITARIOS) para definir la:
PLANEACION COLECTIVA DEL TERRITORIO
El proceso de planificación comunitaria del manejo del territorio tiene que pasar
por varias etapas, de manera que todas las preocupaciones de la comunidad
sean consideradas. Para una planificación eficaz hay que tomar en cuenta que
no hay una sola idea de “comunidad”, sino que los diferentes grupos de interés
dentro de la misma tienen preocupaciones distintas. Muchas veces, esas
preocupaciones son encontradas o contradictorias. También es muy común
que los grupos de interés dentro de la comunidad no tengan completamente
claras sus demandas, y que sea necesario un tiempo para madurar sus puntos
de vista. El proceso de planificación debe dirigirse hacia planes específicos de
acción, con objetivos bien definidos, con responsables para ejecutarlos, con
recursos específicos y fechas para lograr sus metas. Básicamente las
preguntas a responder son las siguientes:
QUE ES LO QUE QUIERO HACER CON MIS RECURSOS NATURALES
DONDE LO QUIERO HACER
COMO LO QUIERO HACER
CUANDO LO QUIERO HACER
Determinando de esta manera un Plan Comunitario de Uso del Territorio
que permita definir Areas de Preservación, Areas de Protección, Areas de
Restauración y Areas de Uso sostenible como un primer paso para la
estructuración de Iniciativas Comunitarias para el Conocimiento y Uso
Sostenible de la Diversidad Biológica.

APLICACIÓN DE INSTRUMENTOS ESPECIFICOS PARA EL
CONOCIMIENTO Y USO SOSTENIBLE DE LA BIODIVERSIDAD
Una vez que se ha llevado a cabo los procesos de Diagnóstico Colectivo y
Planeación Colectiva del Territorio, la comunidad y las organizaciones locales
deben llegar a acuerdos para el buen manejo de los recursos naturales, hacer
propuestas específicas de subproyectos, priorizarlos y analizar cómo mejorar
los sistemas productivos en las distintas unidades ambientales. Junto con la
revaloración de los sistemas agrícolas, conocimientos y principios agrícolas y
agroforestales tradicionales se requiere aprovechar la gran diversidad
ambiental y la necesidad de enfrentar el creciente deterioro ambiental, social y
económico con la competencia de nuevas actividades para el aprovechamiento
sustentable de los recursos naturales, los cuales denominamos Instrumentos
Específicos para el Conocimiento y Uso Sostenible de la Biodiversidad.
Captura de Carbono
Servicios de Educación e Investigación
Manejo de Vida Silvestre
Ecoturismo
Forestería Comunitaria
Sistemas Agroecológicos Y Agroforestales
Captación y Venta de Agua
Mantenimiento de la Biodiversidad
Plantaciones Forestales con especies nativas
Apicultura
Certificación de Bienes de Consumo Amigables con la Biodiversidad (Madera,
café, miel, etc.)
De esta manera se consolida la tercera etapa que es Aplicación de
Instrumentos Específicos para la Conservación de la Biodiversidad.

FORMACIÓN DEL CONTEXTO INSTITUCIONAL DE APOYO A LAS
INICIATIVAS COMUNITARIAS DE CONSERVACION DE LA BIODIVERSIDAD
Por ultimo para la CONSOLIDACION DEL PROCESO Y el fortalecimiento de
los Sistemas Comunitarios de Resguardo del Patrimonio Natural se requiere el
desarrollo de un Contexto Institucional propicio donde se otorguen instrumentos
legales, técnicos, organizativos y financieros para la defensa y resguardo de su
patrimonio natural. Dentro de estos destaca la formación de un Fondo
Comunitario para la Conservación de la Biodiversidad con participación de
organismos Nacionales e Internacionales.
RESULTADOS ESPERADOS
1)Establecimiento de una zona extensa bajo resguardo comunitario, dentro de
los territorios de las comunidades y organizaciones participantes
2)Formación de un Fondo Comunitario Ambiental que se integre con la venta
de servicios ambientales y bienes de consumo amigables con la biodiversidad,
asi como la venta de energía hidroeléctrica. Estos serian comprados por
entidades publicas y privadas
EL PROBLEMA A ABORDAR
En el contexto nacional y mundial se discute si las comunidades indígenas y
locales serán capaces o no de conservar la diversidad biológica presente en
sus territorios. La posición actual de las entidades privadas y gubernamentales
es de incertidumbre y por lo tanto no promueven inversiones hacia la
conservación de la diversidad biológica en territorios indígenas y campesinos,
lo cual ha limitado enormemente el desarrollo de capacidades en las
comunidades para seguir cumpliendo la labor de conservación de la
Biodiversidad. De esta manera se va concretando un circulo vicioso en el cual
las comunidades no adquieren o fortalecen capacidades y ante nuevos
desafíos el panorama que se les presenta es incierto. Ante ello hay un grupo

de comunidades en todo el país que han sido exitosos en comenzar y operar
planes de manejo comunitarios para la conservación y uso sustentable de la
biodiversidad, enfrentado con ello numerosas limitaciones y retos que han
logrado superar e ir de manera paulatina consolidando sus iniciativas
comunitarias para el conocimiento y uso sustentable de la biodiversidad. Sin
embargo, un programa continuo de soporte que les permita ganar mayores
capacidades técnicas, administrativas, organizativas, jurídicas y financieras
sigue faltando en los planes gubernamentales y de otros organismos, por lo
cual los resultados son difíciles de alcanzar y parciales en el enfoque. La
exigencia de que las comunidades conserven sigue patente y también
continua la falta de iniciativas para darles herramientas que les permitan hacer
esto frente a nuevos problemas.
IMPACTO MAS AMPLIO.
El programa busca desarrollar esquemas innovadores de mantenimiento de la
diversidad biológica. Al basarse en el fortalecimiento de las capacidades
comunitarias, complementa y aun supera los esquemas mas convencionales y
poco exitosos de conservación basada en las iniciativas de organismos
gubernamentales como son las Areas Naturales Protegidas. Las lecciones
aprendidas podrían ser de suma utilidad para desarrollar esquemas semejantes
de mantenimiento y usos sostenible de la diversidad biológica, al menos para
Mesoamérica coadyuvando con los esfuerzos que se desarrollan actualmente
como el Corredor Biológico Mesoamericano, CONAFOR, PRODERS,
PRODEFOR, PROCYMAF, y otros.

CUADRO RESUMEN
OBJETIVOS RESULTADOS ESPERADOS
Establecer un Sistema
de Areas
Comunitarias
Protegidas en donde
Cada Comunidad
defina el Plan de
Gestión Territorial y
la regulación de
acceso, uso y control
de los recursos
naturales
Desarrollar formas de
uso sostenible de los
recursos naturales
(Suelo, Agua y
Vegetación) dentro
de los predios de las
Comunidades
participantes
Desarrollar formas de
uso sostenible de la
Diversidad Biológica
(variedades, especies,
hábitats, paisajes)
Establecer
mecanismos de
acceso, uso y venta
de servicios
ambientales, bienes
de consumo
amigables con la
biodiversidad y
energía que generen
ingresos a las
comunidades
participantes
Corto Plazo: Realizar o mejorar X Planes Comunitarios de Gestión Territorial
Mediano Plazo: Realizar 1 Plan Regional de Uso del Suelo como soporte a Corredores
Biológicos (Unas 500,000 Ha bajo resguardo comunitario explícito)
Corto Plazo: Establecer X Programas de Desarrollo Agropecuario Adaptativo
Mantener o establecer X Programas de Manejo Agroforestal Sostenible, Definir X
nuevas Areas Comunales de Preservación
Mediano Plazo: Establecer X Programas Regionales de Desarrollo Agropecuario
Adaptativo: Establecer 4 nuevos Programas Regionales de Manejo Agroforestal
Sostenible; Establecer 4 Sistemas Regionales de Mantenimiento de la Biodiversidad
Corto Plazo; Establecer 3 centros regionales para la diversidad biológica que incluyan
personas e instalaciones para la propagación de especies silvestres, y para la
investigación científica administradas por Comunidades y Organizaciones Regionales
Mediano Plazo: Establecer los Centros para el Conocimiento de la Biodiversidad para
que tengan capacidad de recibir y atender a diferentes tipos de visitantes: científicos,
voluntarios, estudiantes o turismo.
Corto Plazo: Formular un Programa de Capacitación en sistemas agroforestales.
Silvicultura Comunitaria, Usos sostenibles de la Biodiversidad,
Mediano Plazo: Establecer un sistema de venta de Certificados de Desarrollo
Amigable con el Ambiente para Servicios Ambientales, Bienes de Consumo y
Energía. Consolidar el Fondo Comunitario.
Fuente: Seminario, E (1986). “Marco conceptual del manejo de cuencas”, en
Fundamentos del Manejo de Cuencas, ed. por Basterrechea, M., Centro Agronómico Tropical
de Investigación y Enseñanza. Guatemala.
Fuentes: Leonard, H. J. (1986). Recursos naturales y
desarrollo económico en América Central: un
perfil ambienta regional. Instituto Internacional
para el Ambiente y el Desarrollo / Earthscan.
San José, Costa Rica.
Hartshorn, g. (1982). Costa Rica, Pertil Ambiental, Estudio de Campo. Elaborado para la
Agencia Internacional para el Desarrollo, perteneciente al Gobierno de los Estados Unidos.

Boege, E. P. Encino & G. Ramírez. 2000. Protegiendo lo Nuestro: Manual para la Gestión
Ambiental Comunitaria, Uso y Conservación de la Biodiversidad de los Campesinos Indígenas
de América Latina. México, D.F. PNUMA-INI-Fondo Indígena. 165 pp.