Biblioteca de México - Dirección General de Bibliotecas
Biblioteca de México - Dirección General de Bibliotecas
Biblioteca de México - Dirección General de Bibliotecas
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
humorística dirigida a su amigo André Coyné. En<br />
1939, Moro y Westphalen corrieron juntos otra<br />
aventura, la publicación <strong>de</strong>l primer y único número<br />
<strong>de</strong> El uso <strong>de</strong> la palabra; la revista anunciada en<br />
la contratapa el catálogo <strong>de</strong>l 35; cuya presentación<br />
<strong>de</strong>cía:<br />
"Contra las aves negras <strong>de</strong>l oscurantismo, los<br />
cuervos sombríos <strong>de</strong>l imperialismo fascista <strong>de</strong><br />
sesos <strong>de</strong>scolgados en <strong>de</strong>scomposición, <strong>de</strong> los<br />
imperialismos <strong>de</strong>mocráticos <strong>de</strong> lengua <strong>de</strong> hormiguero<br />
y cola <strong>de</strong> ratón , <strong>de</strong> la burocracia stalinista<br />
con una colmena <strong>de</strong> moscas en cada ojo, oponemos<br />
nuestra confianza en el <strong>de</strong>stino <strong>de</strong>l hombre y<br />
en su próxima liberació n. En 1925 sitúan los<br />
surrealistas el fin <strong>de</strong> la era cristiana. EL USO DE<br />
LA PALABRA preten<strong>de</strong> recordar que estamos en<br />
1939. "<br />
Como observa Américo Ferrari, esta revista "en<br />
una época marcada por todos los imperialismos<br />
<strong>de</strong>fine <strong>de</strong> una vez por todas la irrestricta libertad<br />
<strong>de</strong>l poeta."9<br />
Ese mismo año, Moro escribe e l pró logo al<br />
catálogo d e la Expos ició n Internacio nal d e l<br />
Surrealismo, que organiza con el pintor Wolfgang<br />
Paalen, en <strong>México</strong>, y a la que asiste André<br />
Breton. Esa oportunidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>finir su versión <strong>de</strong>l<br />
arte no pasó <strong>de</strong>saprovechada por quien creía en<br />
la capacidad <strong>de</strong> respuestas propias que la imaginación<br />
creadora podía oponer a un mundo en<br />
ruinas. Moro empieza por el principio, y fecha el<br />
fin <strong>de</strong>l siglo XIX en 1910, en que Picasso inicia su<br />
exploración, "con el impropio nombre <strong>de</strong> cubismo";<br />
prosigue con la constelación subversiva <strong>de</strong><br />
los surrealistas. Y suma al tiempo <strong>de</strong> los cambios<br />
dos espacios privilegiados, <strong>México</strong> y Perú. Dice:<br />
"Por primera vez en <strong>México</strong>, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> siglos, asistimos<br />
a la combustión <strong>de</strong>l cielo, mil signos se confun<strong>de</strong>n<br />
y se distinguen en la conjunción <strong>de</strong> constelaciones<br />
que reanudan la brillante noche precolo<br />
mbina . La n oche purísima <strong>de</strong>l Nuevo<br />
Continente en que grandiosas fuerzas <strong>de</strong> sueño<br />
entrechocaban las formidables mandíbulas <strong>de</strong> la<br />
civilización en <strong>México</strong> y <strong>de</strong> la civilización en el<br />
Perú. Países que guardan, a pesar <strong>de</strong> la invasión<br />
<strong>de</strong> los bárbaros españoles y <strong>de</strong> las secuelas que<br />
aún persisten, millares <strong>de</strong> puntos luminosos que<br />
<strong>de</strong>ben sumarse bien pronto a la línea <strong>de</strong> fuego<br />
<strong>de</strong>l surrealismo inte rnacional. "10 No en vano,<br />
recobrado el sentido en la utopía <strong>de</strong> un arte radicalmente<br />
opuesto, Moro concluía retornando al<br />
origen <strong>de</strong> esta fe proteica en el futuro: "Olvidado<br />
el lenguaje , se cumplirá la profecía <strong>de</strong>l Cisne <strong>de</strong><br />
Montevi<strong>de</strong>o: 'LA POESlA DEBE SER HECHA POR<br />
TODOS, NO POR UNO'."<br />
La amistad y colaboració n d e Moro y<br />
Westphalen continuó a comienzos <strong>de</strong> los años<br />
cuarenta en la magnífica revista Las moradas, que<br />
Westphalen publicó en Lima. Westphalen <strong>de</strong>jó <strong>de</strong><br />
escribir poesía aunque publicó algunos ensayos<br />
<strong>de</strong> complejidad poética y agu<strong>de</strong>za crítica. En<br />
1974, en sus conmovedoras memorias sobre "Los<br />
poetas en la Lima <strong>de</strong> los años treinta", Westphalen<br />
9 América Ferrari, "Césa r Moro y la libertad <strong>de</strong> la palabra (tres<br />
bosquejos) " en su Los sonidos <strong>de</strong>l silencio (Lima, Mosca Azu., 1990,<br />
pp.51-60).<br />
10 El Prólogo apareció en el Ca tálogo <strong>de</strong> la Exposición Internacional<br />
<strong>de</strong>l Surrealismo (<strong>México</strong>, enero-febrero , 1940); se reproduce<br />
en Los anteoj os <strong>de</strong> azufre y en La tortuga ecuestre y otros textos.<br />
pp. 107-109<br />
<strong>Biblioteca</strong> <strong>de</strong> <strong>México</strong><br />
29<br />
Viñeta '<strong>de</strong> César Moro, firmado con su nombre <strong>de</strong> pilo , 1922<br />
escribió: "Bajo la influencia <strong>de</strong> César Moro se<br />
intensificó mi interés en el arte, en el psicoanálisis,<br />
el marxismo, la antropología. Con él asistí a<br />
un curso <strong>de</strong> siquiatría que dictaba en el Hospital<br />
Larco Herrera el Dr. Honorio Delgado para los<br />
estudiantes <strong>de</strong> San Fernando." Como para que no<br />
que<strong>de</strong> duda, allí mismo dice: "En la poesía, en la<br />
revolución y en el amor veo actuantes los mismos<br />
imperativos esenciales: la falta <strong>de</strong> resignación, la<br />
esperanza a pesar <strong>de</strong> toda previsió n razonable<br />
contraria." En el Núm. 5 <strong>de</strong> Las moradas (1948) ,<br />
publicó su traducció n al castellano <strong>de</strong> Lettre<br />
d'Amour, uno <strong>de</strong> los gran<strong>de</strong>s poemas <strong>de</strong> Moro.<br />
Pero quizá el momento más <strong>de</strong>slumbrante <strong>de</strong> esta<br />
amistad propicia, fu e el encuentro fecundo <strong>de</strong> los<br />
años treinta, animados por la poesía subvertora,<br />
la alegría irónica <strong>de</strong> la iconoclastia , los riesgos a<br />
nombre, como dijo Moro, <strong>de</strong> un "arte quitasueños<br />
contra el arte adormi<strong>de</strong>ra." Una profesora puertorriqueña<br />
que visitó Perú en 1938, <strong>de</strong>jó, gracias a<br />
su simpatía , un vívido retrato <strong>de</strong> ambos. En su<br />
libro Entrada en el Perú (941) Concha Melén<strong>de</strong>z<br />
escribió: "Westphalen es alto, <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s ojos <strong>de</strong><br />
asombro y <strong>de</strong> muy escasas p alabras. Vive un<br />
mundo poético sobrerrealista parte <strong>de</strong>l cual se ha<br />
mostrado en sus libros ... Mi última visita fu e con<br />
Westphalen y César Moro, gran conversador éste,<br />
y quizás por eso buen amigo <strong>de</strong> Westphalen, que<br />
lo sabe escuchar. César Moro, pintor y poeta, ha<br />
vivido en París largas temporadas, adquiriendo<br />
exigencias en el gusto que lo hacen mordaz, <strong>de</strong>s<strong>de</strong>ñoso<br />
y <strong>de</strong>sarraigado en Lima. Prepara entonces<br />
un viaje a <strong>México</strong>. Pequeño, <strong>de</strong>lgado, es un haz<br />
<strong>de</strong> nervios rebel<strong>de</strong>s. Tenía consigo aquella noche,<br />
repasándola, la Nadja <strong>de</strong> André Breton. Al salir<br />
<strong>de</strong> "Pancho Fierro" preferí caminar hasta el hotel.<br />
Pasamos frente a la Catedral <strong>de</strong>sdibujada en la<br />
sombra. La escultura ecuestre <strong>de</strong> Pizarro, situada<br />
en el atrio durante las fiestas <strong>de</strong>l cuarto centenario<br />
<strong>de</strong> la fundación <strong>de</strong> Lima , parecía pronta a<br />
correr a través <strong>de</strong> la Plaza Mayor b uscando su<br />
casa solariega hoy <strong>de</strong>saparecida. Tuve una sensación<br />
<strong>de</strong> peligro, <strong>de</strong> que íbamos a ser arro llados<br />
por las patas <strong>de</strong>l caballo en fuga. Westphalen y<br />
Moro rieron cuando les comuniqué mi aprensión.<br />
Les gusta la ironía. Son autores <strong>de</strong> una invectiva<br />
satírica, tremenda, titulada Vicente Huidobro o el<br />
obispo embotellado. " Es a ri sa d e Mo ro y<br />
Westphalen en la noche limeña y frente al caballo<br />
<strong>de</strong> Francisco Pizarro se escucha como un conjuro.