Consejo de la Magistratura DIPUTADOS VT ... - Get a Free Blog

68 (',1 1181 D1 UlPlii:AD(rS DN_L A NAt toN Reunión 49"
repartición del poder político en el país. Bajo
esa atmósft*ta, en ese choque entre la idoneidad
}• la intemperie, se gestaron no sólo los artículos
114y 115 que hoy están o¡ debate sino también
algunas otras normas que se parecen a la sonrisa
de L,, Gíoconda porque admiten toda clase de
interpretaciones. Poreiemplo lajoyita del aitícu-
Io 120. que fije incluido a último momento ericienila
aes bueno que así se haya hecho al
Ministerio Público con categoría constitucional.
pero como un cuarto poder del Listado al igual
que el [jecuriyo. el Legislativo y el Judicial, lo
que parecía funcionar a las mil maravillas. Sin
embargo, se olvidaron (le que para ser un poder
ndepend¡ente debía contar con estabilidad. y en
ese caso ello no estaba previsto.
Respecto del artículo 114, ha habido una
infortunada redacción que es el origen de este
debate. Si el articulo hubiera estado correctamente
redactado- nn estaríamos en I^entadoá en
posiciones que nos llevan a la imrv,sibilidad de
licuar a un consenso. 1lay tanta intleternlinación
e imprecisión en el lenguaje que hasta se
taedamn años en sancionar la ley reglamentaría,
ello porque las pujasen torno al alcance que
hahia que dar a tal o euai palabra-como hemos
visto en el dchate- va surgieron en aquel momento.
no constituyera una novedad (le hoy.
1 lasca tuvo que corregirse la primera ley casi
tic inmedi[no. a ¡os pocos días o semanas.
l;u ese entonces se creó un órgano que respetase
la Constitución y que tuviera muchas
potestades. Esto también complicó la situación.
porque va no se trataba de un organismo para
seleccionar' candidatos a malti^rtrados, sino que
se lo dotó de poder de gobierno y administrauso,
otorgandosele facultades económicas y
gnitúndole a la Corte la potestad reglautentaria
que tenia por la Constitución de 1853.
',; e k, dio poder disciplinario se creó un enorme
espacio pohtico, que l r el imaginario de quien
pudiera llegar a ocuparlo o e erccrlo le,itinta-
ti lcn te provocaba una la seria auió;ri muy pa rticular.
pires no era una simple entidad auxiliar para
ase orar respecto de nomhrainicntosludieiales.
l hit sucedió hasta el 2002 espués de ese
,dio? Señalo ese año porque el 4 on cio no ha
tenido un comportamiento rectilíneo y uniforme,
sino que ha presentado sus altiba,os. Quiero
Pegar rápidamente al balance final con respecto
a la gestión .-.palabra que ahora está de
nada- que ha cumplido el Consejo al cabo de
varios aüos.
Copio ya he die di alguna otra vez. ocur rió une
las vacancias de cargos judiciales subían por ascensor
japonés de ultima generación, a altísima
velocidad, y las ^oherturas de esas vacancias
subían por la escalera, con borceguíes de plomo.
con lo cual el col Ipso de tino o mis Cueros judiciales.
tanto de la tapital Federal como en la justicia
federal del interior. fue evidente, debiendo
recurrirse a una 1 y de s;brogancia.
Curiosamente, también por discrepancias
políticas o por ca1nícho de alguien en alguna de
las dos Cámaras, 1icbainicialivasólohabíasitio
sancionada por Dqrutados a comienzos de 2002.
amvirtiéndose d finitivamente en Iev recién el
17 de diciembre de 2003 casi dos años dcMpues,
citando el . toa ya llegaba a la altura del
cuello ,y era ruuy difícil normalizar la situación
de trabajo de los !ribunales del país.
No voy a defender al Consejo de la Matristratura,otaiaisrnoaqueseleofrecicronposibi1idades
para que gest iouara su retbima por vía de la
autonomía, lo que era preferible a la heterononila.
Vale decir qu se le dio la oportunidad de
determinar. a parir de su propia experiencia qué
es lo que podía m.,diticarse para alcanzar resultados
que hieran más positivos que los que ostensiblemente
» se habían logrado hasta ese
momento. Nune ^ presentó ninguna propuesta
dirigida al Poder Legislativo o Ejecutivo. Simplemente.
se abt gveló en sí mismo en una especie
de coraza siguió actuando.
Es cierto que uejoraron la letra.y el enorme
atraso que en ee entonces era imputable al
Consejo de la Magistratura. ahora podríamos
atribuirlo al Poder l;jecutivo o al Senado, porque
el Consejo h tratado de cinprolijar la situación
para no sea objeto de un reproche tan constante
por parte te la sociedad.
¿Qué pasa ah' ra? A los integrantes del Consejo
les sucede io que se merecen, pero aclaro
que gnien no se merece esta refornna es la salud
de la Repúbl en la integridad de las instituciones.
Quieto d e jar a salvo esta distinción. Circo
que la reforma , el Consejo es necesaria, pero
no estoy de acuerdo con la oportunidad ni con
la forma en que e la quiere establecer.
¿Qué si unificado encierra la sanción del Senada)
que llega a itueatra decisión? Para ser breve,
merece dos ,onsideraeiones, una referente
a su orientación c' otra a su oportunidad.
La orientación de esta reforma ha llevado una.
sospecha generalizada, no sólo en el país sino