11.05.2013 Views

Frank LLoyd Wright_Gregorio Cabrera_USBCTG_2012.pdf

Frank LLoyd Wright_Gregorio Cabrera_USBCTG_2012.pdf

Frank LLoyd Wright_Gregorio Cabrera_USBCTG_2012.pdf

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

[0]<br />

GREGORIO CABRERA GARCIA<br />

FRANK LLOYD WRIGHT<br />

UN RELATO IMAGINARIO


[1]


[2]<br />

FRANK LLOYD WRIGHT<br />

UN RELATO IMAGINARIO<br />

GREGORIO CABRERA GARCIA


FRANK LLOYD WRIGHT, UN RELATO IMAGINARIO<br />

© 2012, <strong>Gregorio</strong> <strong>Cabrera</strong> García<br />

© De esta Edición<br />

2012, Editorial Bonaventuriana<br />

[3]<br />

CABRERA GARCÍA, <strong>Gregorio</strong><br />

<strong>Frank</strong> Lloyd <strong>Wright</strong>: un relato imaginario/ <strong>Gregorio</strong> <strong>Cabrera</strong> García. -- Cartagena: Programa de<br />

Arquitectura, Universidad de San Buenaventura, c2012<br />

Descripción física: 45 p.: il., fig. ; 27 x 19 cm.<br />

ISBN Electrónico: 978-958-8590-22-6 (PDF)<br />

1. <strong>Wright</strong>, <strong>Frank</strong> Lloyd - crítica e interpretación. 2. Arquitectos estadounidenses - relatos. I. Tit.<br />

Dewey: 720.92973C117<br />

Catalogación: Biblioteca Central Fray Antonio de Marchena OFM.<br />

Programa de Arquitectura<br />

Universidad de San Buenaventura, seccional Cartagena<br />

Calle Real de Ternera No. 30-966<br />

PBX (5) 653 5555 – Fax (5) 653 9590<br />

Cartagena de Indias - Colombia<br />

www.usbcartagena.edu.co<br />

Rector: Fray Nelson Pérez Cano<br />

Decano: Leopoldo Villadiego Coneo<br />

Coordinador Editorial y de Investigaciones: Howard Villarreal Molina<br />

Diseño, Edición y Diagramación: Jaime Martínez Cañaveras / Howard Villarreal Molina<br />

Prohibida la reproducción total o parcial de este libro, por cualquier medio, sin permiso escrito de la Editorial.<br />

Créditos: Fotografías suministradas por el autor. La fotografía del Museo Guggenheim New York adaptada de<br />

www.skyscrapercity.com. La Fotografía de <strong>Frank</strong> Lloyd <strong>Wright</strong> adaptada de www.wikipedia.com.<br />

ISBN Electrónico: 978-958-8590-22-6 (PDF)<br />

Deposito legal: Se da cumplimiento a lo estipulado en la Ley 44 de 1993, Decreto 460 de 1995.<br />

Impreso en Colombia - Printed in Colombia.


Este libro es dedicado a mis<br />

padres:<br />

JOSÉ SANTOS CABRERA y<br />

EDELMIRA GARCÍA, con<br />

profundo amor.<br />

[4]<br />

Agradecimientos especiales a<br />

la Universidad de San<br />

Buenaventura por su<br />

publicación y al señor Rector:<br />

Fray NELSON PEREZ CANO.<br />

Al Decano de la Facultad de<br />

Arquitectura: LEOPOLDO<br />

VILLADIEGO CONEO, a los<br />

profesores, mis amigos y<br />

aliados en el difícil arte de<br />

enseñar.


[5]


[6]<br />

INDICE<br />

PROLOGO…………………………………………………...<br />

“LA VIDA EN TALIESIN DE FRANK LLOYD<br />

WRIGHT Y SUS APRENDICES”………………………..<br />

“TALIESIN WEST (OESTE)”……………………………<br />

“DESAYUNO EN TALIESIN”……………………………<br />

“COSAS QUE DEBEMOS ELIMINAR” ………………..<br />

“LAS SEÑORAS CASADAS DE TALIESIN”………….<br />

“OLGIVANNA”……………………………………………..<br />

“VISITA AL JAPON”……………………………………...<br />

EPILOGO: “QUE SUCEDE CON LA NATURALEZA<br />

HUMANA? SU RELACIÓN CON LA<br />

ARQUITECTURA”…………………………………………<br />

“CREACIONES INTEMPORALES DE FRANK<br />

LLOYD WRIGHT”…………………………………………<br />

1<br />

3<br />

13<br />

17<br />

25<br />

27<br />

29<br />

30<br />

31<br />

33


[1]<br />

PROLOGO<br />

La tarea de introducir al lector , a través de unas pocas líneas, a un<br />

relato basado en la exitosa y contrastante vida de un genio de la<br />

historia de la arquitectura como lo es <strong>Wright</strong>, no es tarea fácil; no<br />

obstante, significa todo un honor cuando el relato es la opera prima<br />

de un estimado colega, amigo y maestro como l o es el profesor<br />

<strong>Gregorio</strong> <strong>Cabrera</strong> García; elogiado y venerad o maestro del programa<br />

de Arquitectura de la Universidad de San Buenaventura Cartagena,<br />

quien a diestra y siniestra ha dedicado su esfuerzo, compartido su<br />

conocimiento y experiencia de más de 50 años de vida profesional,<br />

durante más de 10 años en la fa cult ad, convirtiéndose en un bastión<br />

irremplazable en la construcción de nuestra institucionalidad.<br />

El “profe´ <strong>Cabrera</strong>”, nació en Cartagena de Indias en el año 1933, su<br />

temperamento afa ble, jovial y caballeroso contrasta con su caminar<br />

lento y misterioso, al i gual que su vitalidad y loz anía física contrastan<br />

con su edad; paradójica coincidencia con los contrastes que abundan<br />

en la vida y personalidad de su admirado <strong>Frank</strong> Lloyd <strong>Wright</strong>.<br />

Su trasegar por la vida lo ha llevado a ocupar profesi onalmente<br />

posi ci ones estratégicas en los ámbitos público y privado, desde esa<br />

calurosa tarde de 1958, cuando reci bía su t itulo de Arquitecto,<br />

ot orgado por la Universidad Nacional de Rio de Janeiro, Brasil, en<br />

donde conoci ó a rutilantes figuras de la arquitectura com o Lucio<br />

Costa y Oscar Niemeyer, nada más y nada menos que l os creadores de<br />

la cuidad de Brasilia, y en cuya empresa inicio practicas<br />

profesi onales.<br />

A su regreso a Cartagena, lo esperaron tareas no menos desa fiantes,<br />

como la de crear una de las primeras empresas cons tructoras de la<br />

ciudad, sacar adelante a su hermosa familia y contribuir al desarrollo<br />

de la ciudad y la región desde posi ciones como la de Arquitecto jefe<br />

de la Gobernación de Bolí var (1960 -1965), Presidente de la Sociedad<br />

Ingenieros y Arquitectos de Bolí var (1970), Secretario de Planeación<br />

Municipal (1985-1987) y Alcalde encargado de Cartagena (1986).<br />

<strong>Cabrera</strong> García es la materialización misma del tesón y el incansable<br />

esfuerzo; a su edad sigue construyendo ejem plo para todos y en<br />

especial para nuestros alumnos, a quienes demuestra con su quehacer<br />

diario lo que el mismo pregona cándidamente: “ nunca es tarde para


[2]<br />

nada”; de hecho, este año 2012 recibi ó el titulo de Especialista en<br />

Medi o Ambi ente Urbano y Desarrollo Territorial, siendo uno de los<br />

primeros egresados de ese posgrado y en adición con altas<br />

califica ciones, al tiempo en que era homenajeado, por la Soci edad<br />

Col ombiana de Arquitectos Regional Bolí var, con el premio<br />

“Arquitecto t oda una vida -Augusto Tono Martínez” . Tal vez el<br />

ejemplo que él nos i mpone sea producto de su fascinación por<br />

<strong>Wright</strong>, cuya vida nos enseña que a pesar de las circunstancias, el<br />

tesón del ser humano muchas veces a caba por imponerse y por<br />

permitir que cada uno de nosotros alcance su pequeño Taliesin.<br />

A grandes rasgos Tali esin era una especie de “ refugio para la<br />

felicidad”, un hogar, un sitio de paz y de tranquilidad; fue el casi<br />

inalcanzado, pero constante sueño de <strong>Wright</strong>, construido y<br />

reconstruido h asta 3 veces y donde experimentó sus cel ebres t eorías e<br />

ideas de lo que debe ser la arquitectura.<br />

<strong>Cabrera</strong>, erudito y frenético admirador de la vida y obra de <strong>Wright</strong>,<br />

nos deleita con un relato imaginario de tinte academicista, lenguaje<br />

anecdótico y sentencias paradigmáticas, en el que se narran eventos<br />

que comunican el pensamiento organicista del cél ebre arquitecto, al<br />

fil o sospechoso de crear una historia en el que autor se revela a sí<br />

mismo com o discípul o y apóst ol.<br />

Howard Villarreal Molina


[3]<br />

FRANK LLOYD WRIGHT<br />

UN RELATO IMAGINARIO<br />

“LA VIDA EN TALIESIN DE<br />

FRANK LLOYD WRIGHT Y SUS APRENDICES”<br />

Nuestras reuniones en la sociedad Taliesin, especialmente los sá bados<br />

y domingos empezaron en octubre de 1932 y continuaron en Taliesin<br />

West en (Arizona).<br />

Nos reuníamos para la cena y aprovechábamos para oír un conciert o,<br />

hacer una lectura y quizás entablar una amena discusión. Estas<br />

reuniones las veníamos haciendo desde hacía 10 años. Eran<br />

compuestas no solo de buen material, es decir, música, com ida, gente<br />

joven entusiasta, si no de algo intangible y deli cado que esta ba en el<br />

ambiente en esos eventos ca seros.<br />

La música era lo primordial, para los ojos y para los oídos y el<br />

ambiente agradable adornaba el alma.<br />

Mi esposa Olgi vanna, decía que la sociedad nuestra en Taliesin,<br />

parecía poseer la ira de Dios durante la sema na, considerando la<br />

agitación durante los días de trabajo, y por lo tanto, debía<br />

ennoblecerse los fines de semana, depurarse ella misma, y ponerse sus<br />

mejores prendas los domingos.<br />

Las muchachas en esos días estaban especialmente elegantes, y eran<br />

un ejemplo y una justifi caci ón para nuestro trabajo com o diseñadores.<br />

A los muchachos, escasamente los reconocía, bi en vestidos, como mis<br />

compañeros de trabajo durante la semana. El ambiente era espléndido<br />

e irradiaba felicidad, en estas ocasi ones, cuando t odos co la boraban<br />

entre sí, y desea ban tomar parte en todas las entretenciones que<br />

habían estado preparando. Estoy convencido que esta armonía se debía<br />

en parte, a que ellos esta ban donde querían estar y voluntarios com o<br />

eran, hacían lo que querían hacer.<br />

Estoy seguro que ninguno ol vidará, estas simples pero mem orables<br />

ocasiones, y aunque la sociedad cambi e con el tiempo, est os eventos,<br />

guardarán su carácter y simpatía a través de él.


[4]<br />

Muchos de est os jóvenes vinieron porque han leído algo de l o que<br />

escribí, y esperaban algún día trabajar conmigo. Ha bían venido con<br />

dinero prestado de t odas partes, muchos de países extranjeros, todos<br />

agradecidos y esperando dar de sí lo mejor para nuestra sociedad de<br />

Taliesin.<br />

Algunos eran individualistas por naturaleza, y con un se ntido est ético,<br />

que rechazaba lugares comunes, sobre t odo l a artificialidad, que<br />

simulaba ser arte, y no tenía lugar en los pensamientos y en los<br />

instintos nuestros y los de ell os.<br />

Todos ell os rechazaban las convenciones, fueran sociales o est éticas.<br />

El espíritu del diseño estaba siempre presente, como un movimiento<br />

perpetuo, com o una búsqueda de ilusi ones, que debería guiarnos para<br />

el futuro milenio.<br />

Debemos insistir que la disciplina exterior debí a ser tan severa como<br />

la disciplina interior.<br />

Esa norma aplicada a nuestro trabajo diario, se efectuaba en los<br />

acostumbrados trabajos de decoración, o en los diseños especiales,<br />

con materiales nativos. Las semillas del buen diseño, ca yer on sobre el<br />

lugar tan naturalmente, como las manzanas caían de los árbol es, o las<br />

espinas de las coronas de los cardos.<br />

Nuestros diseños, aún en esas fi estas, eran como el mismo aire puro<br />

que nos rodea ba, porque todo ello, llenaba y exci taba la mente.<br />

Desarrollar unos diseños, era como ese mismo aire, que respirábamos<br />

tan simple com o ser un miembro de la sociedad Taliesin.<br />

Cada miembro de la soci edad, del primero al último, estaba al servici o<br />

del Diseño Orgánico.<br />

Desde la primera vez, habíamos tenido placenteras y distinguidas<br />

compañías.<br />

Los fines de semana cuando nos reuníamos, al comienzo los invitados<br />

eran escasos, porque no está bamos preparados para ellos, aunque<br />

siempre eran bienvenidos.<br />

Después del primer año, con profesi onales tocando música clásica,<br />

hicimos nuestro propio trío y cuarteto. Formamos nuestro propio coro<br />

femenino, con música de Bach, espirituales negros, y otras buenas<br />

melodías.


[5]<br />

“Svetlana”, la hija adoptiva toca ba la flauta, y nosotros mezclamos<br />

arpas, piano, cuerdas y voces. El arpa de Iova nna, permanecía a su<br />

lado.<br />

Cuando yo era un niño, acostumbraba estar acostado pero despi erto,<br />

escuchando las notas de la “Sonata Patética” con mi padre al piano, en<br />

el primer piso de la casa que habitábamos, si endo él ministro de la<br />

iglesia Bautista, en la poblaci ón de Weym outh.<br />

Así voy de regreso a mi infancia cuando oigo esa sonata, lo mismo<br />

que las sinfonías, tan familiares a mí en esa época.<br />

Da gusto sentarme en la sala de música, con algunos aprendices con<br />

talento musical, oyendo sus comentarios, pero en realidad sabiendo<br />

poco de la composici ón musical e intercambiando críticas.<br />

Esto me recuerda, a mi amigo el gran historiador, “John Fiske”, quien<br />

cenaba a veces con mi padre, ajeno a las críticas acerca de su trabajo<br />

de historia, pero atento a la menor observaci ón sobre sus a fici ones<br />

musicales, cuando cantaba acompaña do al piano por mi padre.<br />

Hi cimos un esquema de rotaci ón de nuestro trabajo, con un jefe que<br />

estaba libre para escoger su ayudante personal.<br />

Un día, mi esposa “Olgivanna” me dijo: “Tom a mucho tiempo para<br />

que los jóvenes, ligados a este trabajo, arrojen fuera de sí, los viejos<br />

concept os de la escuela académica. Al principio, estarán infelices,<br />

porque no están todo el tiempo sobre la mesa de di bujo. Ellos se<br />

sienten ahora lanzados dentro de un mundo de disciplina interior, sin<br />

reglas escritas. Esa nueva di sciplina los deja expuest os a sus propi os<br />

recursos y l os hace actuar de acuerdo con su propia conciencia”.<br />

El concept o de que todo trabajo es importante, es nuevo para ellos.<br />

El trabajo de campo es tan importante com o la mesa de di bujo, o la<br />

jardinería, la culinaria, o el servici o en los comedores.<br />

Esto en principio, parece difí cil de a cept ar por los jóvenes<br />

americanos.<br />

Alguno que tuvo muchas reticencias para trabajar en la cocina, al<br />

cabo de un tiempo, sugirió nuevos sist emas de servir los alimentos,<br />

que podían eliminar desperdicios. Estaba al final, tan interesado por<br />

ese trabajo, como en cualquier otro. Su conoci miento en la cocina y


[6]<br />

comedor fue ganado por él por el camino de la real experiencia, y no<br />

por la vía superficial e inadecuada de la teoría.<br />

Esta participación en nuestras labores cotidianas, tiene una fuerza y<br />

un efecto unificador sobre el grupo. Y así, Taliesin ha llegado a ser su<br />

propio hogar.<br />

Cada mañana, los jóvenes trabajan en el jardín una o dos horas,<br />

después van a la sala de dibujo, otr os a sem brar árboles, de l os cuales<br />

debe haber cientos de ellos, plantados alrededor de Taliesin. Otros<br />

revisan cercas, cargan gravilla, clasifican piedras. Aprenden a<br />

seleccionarlas, para construir paredes, y l evantar pilares. Asimismo,<br />

aprenden a trabajar con maderas, metales y textiles.<br />

Arreglan sus propios cuartos, reconstruyen los interiores, de acuerdo<br />

a sus propios planos, para ser sometidos post eriormente a la<br />

aprobaci ón de su maestro.<br />

La gran sala de dibujo, es como una floresta abstracta, con la luz<br />

derramándose desde el ciel o-raso, entre maderos de roble. La<br />

atmósfera interior, es si empre de intensa y reposada concentración, lo<br />

que algunas veces mantiene a los jóvenes trabajando hasta avanzadas<br />

horas de la noche.<br />

La misma sala de dibujo, respon de a la constante inspiración, cuando<br />

servimos el t é a las cuatro de la tarde, reunidos todos alrededor de la<br />

chimenea, discutiendo problemas comunes, o m ezclando a todo est o<br />

problemas sociales.<br />

Es agradable planear comidas con nuestros jóvenes. Por ejemp lo<br />

deben buscar en viejos li bros de cocina, de más de cincuenta años,<br />

ol vidadas recetas americanas, rusas, yugoeslava s, polacas y de otras<br />

naciones. Siempre aprendiendo nuevas y exci tantes formas en la<br />

preparación. Y cuando llega la estaci ón del vino, todo s vamos en<br />

autos, camiones, vagones, haciendo meriendas, reuniendo uvas<br />

calentadas por el sol del ot oño, y retornamos a casa.<br />

Las siguientes semanas se nos van en la preparación del vino.<br />

También reunimos manzanas, y muchas vasi jas son llenadas con sidra,<br />

extraída con nuestras propias manos, y el sobrante nos sirve para el<br />

próximo verano.


[7]<br />

Al llegar esos días comenzaban los preparativos del baile anual de<br />

máscaras, en Halloween .<br />

Lo primero era constituir el comité de di versi ones. Pequeños grupos<br />

de trabajo esta ban funcionando, y t odos éramos sensibl es a las<br />

inquietantes sensaciones que se ext endían por todas partes.<br />

Cada uno de los jóvenes, debía usar su talento con imaginación.<br />

Muchos de ellos com o ya dije, son músicos, y tienen programas que<br />

preparar los fines de semana. El salón ha estado en existencia por<br />

cinco años, t ocando a Ba ch y Beethoven , Brahms, Ha ydn. El coro es<br />

de 18 voces, cantando viejas canciones inglesas y americanas.<br />

Algunas veces ponemos en escena una obra de teatro. También vem os<br />

cine, con películas que nos llegan de todas partes del mundo. La vida<br />

social de los fines de semana, es al final de la jornada de trabajo,<br />

cuando todos vestidos con nuestras mejores ropas, recibim os algunos<br />

invitados, entre ellos artistas famosos. Las reuniones fr ecuentemente<br />

se disuelven formando grupos, compromet idos en tranquilas<br />

discusi ones, que gradualmente se desvanecen, hasta que la quietud<br />

desciende sobre Taliesin, todo presidido por la enorme figura de<br />

Buda, que imperturbable, se proyecta dentro del espaci o.<br />

Entre tanto, la vida de la soci edad, sigue dentro del planteamiento<br />

original, o sea, trabajando o diseñando.<br />

Nuestros muchachos están aprendiendo a desarrollar sus propios<br />

diseños: abstracciones de plantas vivas, estudios de la naturaleza y<br />

especialmente a construir ladrillos con sus propi os manos. Lo más<br />

importante, es que tienen que convivir con sus propios errores al<br />

construir, ya que creo firmemente que aprendemos más de nuestras<br />

fallas, que de l os a ciertos, especialmente si tenemos la oportunidad de<br />

corregirlos.<br />

Algunos invitados dejaron huellas profundas, como ocurrió con la<br />

visita de “Mi es Van de Rohe”, quien está profundamente interesado en<br />

mi trabajo. Me había invitado a una cena dada en su honor, en la cual<br />

ocupé un sitio, entre arquitectos y di gnatarios. Mi turno pera hablar<br />

llegó después de escuchar aburridos discursos, con elogi os por<br />

doquier para el talentoso alemán.


[8]<br />

Todo era de lo más superficial, así que cuando me levanté para hablar,<br />

puse mi brazo sobre l os hom bros de Mies y di je: “Damas y caballeros,<br />

les presento a Mies Van de Rohe, lo admiro como arquitecto y com o<br />

persona”. Repentinamente, suspendí la presentación y caminé hacia la<br />

salida.<br />

Cuando “Mies” com enzó a hablar lo hizo en alemán, porque hablaba<br />

poco inglés, y para mi sorpresa, él se expla yó en los orígenes de su<br />

admiración por mí, y de l o mucho que me debía, y se sentía orgulloso<br />

de estar ahí y decirlo públicamente.<br />

Los muchachos de Taliesin, siempre se com portaron con mucho<br />

respeto, aunque los primeros años hubo algunas excepcio nes. En los<br />

10 años de funcionamiento de la escuela, no vimos un solo act o de<br />

indisciplina, ni desgano para el trabajo.<br />

El espíritu de lealtad fue destacado, y cuando miro hacia atrás, me<br />

siento asom brado y enormemente gratificado.<br />

En los primeros años, r eacondicionamos el viejo edi fi cio de la<br />

escuela, la que había sido de mis tías, y tratamos de terminar uno<br />

nuevo, destinado a poseer 16 salas de dibujo, todas para aprendices.<br />

Esos primeros años de Taliesin pasaron rápidamente. Los jóvenes<br />

cruzaban a dedo el continente, para juntarse a nosotros, y nos vimos<br />

obligados a rechazar a más de 400 por falta de medios. Hubiera tenido<br />

yo mejores medi os económicos, para alojarlos y alimentarlos, hubiera<br />

comenzado la ciudad ideal, “Broadacre City”. Y entonces un día ,<br />

cuando esperábamos ocupar nuestros edi fici os, llegó el tornado en<br />

forma de Recesi ón. El gobierno, en forma inexplicabl e, col ocó a<br />

nuestros trabajadores particulares en una posición, en donde sin<br />

trabajar recibían salario del mismo gobierno. Naturalmente estaban<br />

complacidos y satisfechos, por lo cual decidieron renunciar y tomar<br />

ventaja de la Recesión. No tuve argumentos que oponer, porque el<br />

único argumento que los hubiera llevado de vuelta al trabajo, era el<br />

dinero, y yo no lo tenía.<br />

Para hacer este asun to más grave, demandaron nuestros acuerdos<br />

laborales, exigiendo el pago inmediato de salarios, como si la obra<br />

estuviera terminada y en pleno funcionamiento, como constaba la<br />

relación entre nosotros previ o contrato.


[9]<br />

No había construcciones, poco dinero ci rculaba, y durante muchas<br />

semanas, hubo indignantes escenas. Uno de esos trabajadores, un<br />

problemático ca becilla, me atacó en el estudio una tarde, y gracias a<br />

la ayuda de mi secretario logré salir ileso.<br />

Mi fi el secretario, era incansable y lleno de rec ursos, pero esta ba<br />

realmente asustado. Posi blemente lo que agravó todo, fue un incidente<br />

que tuvo lugar, en una oscura calle de Ma dison. Ha bían estado<br />

llegando cartas de amenazas de un acreedor y esa noche nos vio<br />

cargando mercancías de otra tienda y la de sesperación lo llevó a<br />

tomar otras medidas.<br />

Ha bíamos hecho las compras, y esta ba listo para regresar al carro,<br />

cuando alguien me golpeó fuertemente en la cabeza por detrás. Al<br />

vol verme vi al tendero, e instintivamente lo abracé y rodamos por el<br />

suel o, caímos dentro de un arroyo a su espalda. Después de una breve<br />

lucha me golpeó con sus botas en la nariz, lo que me produjo una<br />

cicatriz considerable, y que conservaré por siempre.<br />

A mis aprendices, les sigo proporci onando todo lo que puedo<br />

conseguir, ya sea con mis esquivos honorarios o la venta de algunas<br />

de mis objet os. Est oy frecuentemente sin un centavo en el bolsillo,<br />

pero me he acostumbrado, ya que al final alguna a yuda siempre llega.<br />

Estaría más tranquilo, si me deshiciera de esos comerciantes, de es a<br />

banda de explotadores, aunque yo sé que las cartas de extorsión<br />

seguirán llegando.<br />

Debo decir que sol o unos pocos fueron decentes conmigo, media<br />

docena o algo más, debido a la tragedia de la situación así creada, por<br />

mi esfuerzo de enfrentar “ideas + tra bajo” contra “dinero +<br />

autoridad”.<br />

Dejem os esta labor de detalles, para decir que desde la llegada de la<br />

recesi ón, y sus enormes consecuencias, est uvimos fuera de la<br />

construcción, except o por lo que l os muchachos podían hacer, durante<br />

casi 5 años.<br />

Entonces mi trabajo de arquitectura comenzó a mejorar, y pude<br />

agregar mis honorarios, a la enseñanza de los aprendices.


[10]<br />

Al fin había entendido que esta ba inmerso, en algo posibl e sol o para<br />

personas con amplia capacidad económica, y el hecho que me hubiera<br />

sostenido, en esas circunstancias, fue una gran sorpresa para mí.<br />

“Yo no sé si eres un santo, o eres un tonto” me dijo mi abogado, a lo<br />

que respondí que posi blem ente era las dos cosas.<br />

Pero yo había hecho una promesa valiosa que debía mantener, al<br />

recordar a mis tías abuelas, “Nell y Jane”, y especialmente a mi<br />

madre. Y a menudo desee que ellas pudieran mirar hacia nosotros<br />

ahora, a lo que hemos edi ficado.<br />

En Taliesin también hubo bodas. En esas ocasi ones, la vieja capilla,<br />

con sus altos maderos que yo había a yu dado a col ocar, cuando era un<br />

muchacho, era un festivo arco, derramándose en ramas verdes,<br />

doradas por el sol.<br />

Una reliquia de familia, nuestro viejo piano “Steinwa y”, me recordó a<br />

mi padre, golpeando mis dedos, en las clases fa miliares, por estar en<br />

posi ci ón incorrecta. Olgivanna col oca ba altas velas blancas, debido<br />

tal vez a su educa ción ortodoxa. Iovanna, con su carpa, tocando<br />

música de Debussy, mientras se efectuaba la ceremonia.<br />

Las som bras de la noche, dibuja ban el obelisco de mármol, en el patio<br />

de la capilla, con simples leyendas inscritas en él, y referentes a los<br />

viejos Ll oyd Jones, mis antepasados. Alrededor del obelisco, habría<br />

piedras, marcando las tumbas de l os 5 hijos y las 5 hijas pioneras.<br />

Más allá las lápidas de los nietos, todas reunidos en el clan familiar.<br />

Yo, a veces me acom odo ahí, y pienso, recordando mi propia tragedia<br />

en Taliesin, que la naturaleza ha enviado su parte correspondiente<br />

hacia mí, para compartir lápidas entre esta familia de pioneros.<br />

El sol se ha puest o, el resplandor está disminuyendo en el ciel o, y yo<br />

recuerdo a mi madre sobre sus rodillas, presionando sus labios sobre<br />

el frío monumento de mármol, y yo detrás, esperando por ella.<br />

Entre otras cosas conseguimos, un espa cio pequeño para recreación, y<br />

lo llamamos “la ca sa del teatro”, a falta de otro t ítulo, para conciertos<br />

y cine.<br />

El salón era agradable, considerando que estábam os en plena<br />

Recesi ón.


[11]<br />

Puedo confesar ahora, que de todo l o hecho, l o más sobresaliente, es<br />

mi propia educación.<br />

Debo también confesar, que esper amos a yuda financiera de alguna<br />

parte, que tal vez vendrá, cuando podamos mostrar la naturaleza de<br />

nuestro esfuerzo cultural.<br />

La a yuda que hemos t enido, ha sido poca y esporádica. Este esfuerzo<br />

no merece placas de honores, y pienso que debemos seguir adela nte de<br />

todas formas o vernos abocados al fracaso. Sol o las instituciones<br />

pueden salvarnos y yo no deseo ser parte de ninguna institución.<br />

Deseamos ser nosotros mismos de muchas maneras, con nuestra<br />

propuesta, fi eles a nuestros principios, algo que pertene ciera a<br />

nuestro tiempo y lugar, algo natural y vi vo com o la corteza de un<br />

árbol, con su alma dentro, com o el mismo árbol, desde el cual, se<br />

abren las hojas a la luz del sol, lleno de dolor, pero feliz y de acuerdo<br />

a los principios dentro de él.<br />

Nosotros cr eemos haber plantado un árbol, y esa siem bra y<br />

recol ecci ón puede traer su propia dimensión en el futuro.<br />

Cuando estaba construyendo la casa de “Edgar Kaufman” (la cascada),<br />

yo t enía uno de l os aprendices a cargo, asunto que disgust ó al dueño,<br />

y quiso provocar su retiro, a lo que me opuse con este argumento: “Tu<br />

con eso contribuyes a la educa ción de esos jóvenes, los futuros<br />

arquitectos de América, porque ellos están haciendo algo que el<br />

dinero no puede comprar, y es un vivo y entusiasta interés en nuestro<br />

trabajo y la ansiosa cooperación que va con él”.<br />

“Yo sé que l o que digo es intangible, pero tu construcción estará en el<br />

lado correcto, y tu tendrás una forma de vida, tan buena como la<br />

mejor y est o tampoco lo puede comprar el dinero”. Todos conocem os<br />

el resultado que produjo esa casa.<br />

Los muchachos agregaron un gran interés humano a todos l os<br />

elementos en cada casa que construimos.<br />

Es justo decir que todos l os edi fi cios que he construido con la<br />

sociedad “Taliesin”, unos 37, me han proporci onado la más amp lia<br />

cooperación, que me hicieron salir de experimentados profesi onales y<br />

muy lejos de caminos trazados.


[12]<br />

Yo comprendo que la proximidad mía al trabajo realizado, es más que<br />

nunca esencial, y he gastado un gran tiempo entrenando buenos<br />

constructores.<br />

Tenemos una lista de aprendices, que podrían hacer un buen trabajo,<br />

si los respaldamos con capital, pero ese tiempo aún no ha llegado. De<br />

todas maneras miramos hacia adelante, para no forjar arquitectos sol o<br />

de mesas de dibujo.<br />

Puedo confirmar esto con mis prop ios clientes, que manifiestan su<br />

alegría y satisfacci ón, en las casas realizadas por nosotros, opinando<br />

que para ellos son las mejores que he construido.<br />

Las casas a que me refiero, son usualmente disfrutadas por personas<br />

que poseen virtudes di ferentes al apego del dinero. Parece que nuestro<br />

trabajo es inversamente proporcional al estado financiero de la<br />

persona comprometida.<br />

Pero algunas veces cuando el trabajo no aparece, regresamos a ellas a<br />

corregir errores pasados, faltas a veces comet idas por los mism os<br />

propietarios. Por eso nuestros edifi cios tienen distinción, aunque<br />

provocan esceptici smo, aún entre arquitectos.<br />

No hacemos casas de moda, porque nuestros experimentos no son la<br />

búsqueda en novedad, sino l o que nos proponemos, porque<br />

consideramos que t odo edi fici o construido es una figura pública.


[13]<br />

“TALIESIN WEST (OESTE)”<br />

Taliesin West es una amplia mirada sobre la altura del mundo. Y<br />

acordamos su nombre después de pensar muchos y rechazarlos.<br />

Finalmente llegamos al mismo nombre anterior con una corta adición,<br />

la palabra West.<br />

El cost o de vi vir dentro del Taliesin original, nos hace pensar en<br />

movernos hacia el oeste, para hacernos cargo de un trabajo en<br />

Arizona.<br />

El viaje hacia allá, largo y di fícil, comenzó en noviem bre de 1932 y<br />

fue un even to de primera magnitud, la salida con grandes maletas y<br />

sacos para dormir, equipo para exteriores, lonas cubriendo los<br />

camiones, carros y remolques para 35 personas, fue un verdadero<br />

acontecimiento.<br />

Para conquistar el desierto, teníamos primero que domina r más de<br />

3.000 kms. en pleno invierno.<br />

Al comienzo estuvimos en la hacienda de un amigo, pero al fin<br />

decidimos construir para nosotros, lo que es una verdadera hazaña.<br />

La regla principal de la sociedad, es hacer algo, mientras se descansa.<br />

Yo esta ba ganan do algo de dinero como arquitect o, con lo que<br />

podíamos conseguir materiales, pero primero debíamos conseguir un<br />

sitio.<br />

Era una vasta y desierta región, con lugares insospechados, en donde<br />

hacíamos meriendas, y dormíamos en talegos en pleno suel o.<br />

Finalmente descubrí un sitio a 25 millas de Phoenix, a través del<br />

vast o desierto de Paradise Valley, sobre una meseta en la montaña de<br />

Arizona.<br />

Faltan palabras para describirlo, con una llamativa vegeta ción del<br />

desierto, pero sin una buena ruta.<br />

Conseguimos unas 400 hectáreas, una parte comprada y otra<br />

arrendada, porque necesitábamos espaci o para nuestra familia que<br />

crecía. Los planos fueron inspirados por el carácter y belleza de ese<br />

notable sitio, con la luz bañando todo. El mundo así creado con todos<br />

los col ores y formas, sin estorbos para la imaginación, todo más allá<br />

del alcance de la finita mente. Era un mundo nuevo. Para el diseño de<br />

nuestros edi fici os, ci ertas formas abundaban, con siluetas


[14]<br />

características, montones de rocas quemadas por el sol, y listas par a<br />

ser usadas.<br />

Conseguimos hacer cosas, en este paisaje espléndido, donde Dios es<br />

todo y el hom bre es nada. Un dibujo de una planta llamada “Ocatillo”,<br />

nos inspiró para construir la primera cubierta de l ona en el desierto,<br />

con el entusiasmo de los jóvenes. Los superlativos son para agotarse,<br />

y a menudo pueden ser incomprendidos, pero nosotros vivim os, nos<br />

mudamos, y realizamos nuestra existencia en forma grandiosa, sin<br />

lugar a aburrimientos.<br />

Hi cimos una especie de campanario, con jardines y una gran proa,<br />

levantada sobre la meseta, mirando hacia el extenso mundo, una<br />

piscina triangular, sitios de juegos, habitaciones placenteras sobre la<br />

ancha cubierta, mirando hacia la meseta.<br />

Un nativo del lugar, nos dijo que no había agua en ese lado del valle.<br />

Pero nosotr os tratamos y conseguimos agua subterránea a 150 mts. y<br />

brot ó de manera espectacular en la piscina preparada para ello.<br />

“Olgivanna” dice, que la construcción completa parece algo que<br />

estuviéramos excavando y no construyendo. Parece haber estado ahí<br />

por siglos.<br />

En esta labor estábam os prácticamente aislados, 5 días a la semana,<br />

con el agravante que el desierto podría enviarnos t ormentas de arena<br />

que desde lejos parecían olas del mar.<br />

Era común que nuestros visitantes terminaran perdidos en el desi erto,<br />

con los naturales inconvenientes que est o acarreaba.<br />

Mi esposa y yo estuvimos por cerca de 7 años en el desierto y<br />

terminamos con resentimientos de salud.<br />

La educaci ón formal ha sido siempre un escollo en Taliesin, y esta<br />

formación es a veces un impedimento, a ntes de llegar a ser lo<br />

sufi cientemente receptivos para percibir la maestría, que de manera<br />

inconsciente podría emularlos y guiarlos. “Nada puede col ocarse en<br />

las manos cuando están cerradas, solo cuando están abiertas, las<br />

palmas hacia arriba, puestas jun tas en la posi ción de la verdadera<br />

humildad, entonces y sol o entonces, es la hora de reci bir sin temor de<br />

desperdiciar lo que se recibe”.


[15]<br />

Las mujeres no tienen un lugar especial en Taliesin, y est o nos obliga<br />

a pensar en un lugar especial, con el propósito de criar sus propios<br />

hijos.<br />

Tal vez sol o debamos aceptar mujeres adultas, responsables de sí<br />

mismas, y que hayan encontrado satisfa cci ón en ser artistas, basadas<br />

en una especi e de idealismo, que no sa crifique su femineidad, si no<br />

que la intensifique.<br />

Estas mujeres creo yo, son especialmente raras.<br />

Nuestras universidades instruyen a los jóvenes para ser un engranaje<br />

en la búsqueda del dinero. Aquí en Taliesin, no estamos constituidos<br />

para eso.<br />

Nosotros desde esta especi e de trinchera, podemos escasamente<br />

escapar del sistema de la educación americana, que lleva a la rutina.<br />

Una Nación así necesita cada hombre asalariado como esclavo, com o<br />

los necesita en una guerra para ser alistado. Sol o que en vez de un<br />

comandante militar tendría un banquero.<br />

A nosotros n os miran con sospecha, y nos clasi fican com o una especi e<br />

de Club Campestre Cultural para estudiantes de artes, o como una<br />

especi e de secta.<br />

Otros aseguran solo seguir rutas transitadas anteriormente, o nos<br />

detestan por hacer algo diferente.<br />

Mis aprendices son una forma legítima del otro Yo. “Jesús” tuvo<br />

discípulos sin cambiarles su propia naturaleza, y tal vez por eso,<br />

ocasionalmente viajaba a sitios distantes para descansar de ellos.<br />

Ellos aquí son una ventana abierta a través de la cual podemos mirar<br />

hacia un mundo natural, un mundo donde su otro Yo egoísta, pueda<br />

crecer independiente por el camino de la sinceridad, y su propia<br />

devoci ón a su Maestro.<br />

Entrar sinceramente dentro del espíritu del Maestro, permaneciendo<br />

leal a su trabajo, siempre me ha parecido a mí, que he tenido el mejor<br />

en “Louis Sullivan”, el más grande privilegio que cualquier<br />

principiante pueda tener.


Ventajas de la sociedad Taliesin:<br />

[16]<br />

1. Un honesto ego en un cuerpo sano.<br />

2. Amor a la verdad y a la naturaleza.<br />

3. Sinceridad y coraje.<br />

4. Ha bilidad para actuar.<br />

5. Sentido estéti co.<br />

6. El trabajo com o idea, y la idea com o trabajo.<br />

7. Fertilidad de imaginación.<br />

8. Capacidad para la fé y la rebeldía.<br />

9. Indiferencia para lugares comunes.<br />

10. Cooperación instintiva.


[17]<br />

“DESAYUNO EN TALIESIN ”<br />

Pude hacer otros desa yunos, pero ninguno como en una de las 7<br />

terrazas de Taliesin, en donde la vista es la mejor y donde el vi ento es<br />

más agradable.<br />

En el fondo música de Ha ydn, derramándose por la colina esta<br />

mañana.<br />

Tan fresca com o el rocí o, la brisa está l lena de perfumes del campo, y<br />

los pájaros cantan con delirio. Sentado en una amplia silla, con<br />

amplio ropaje de seda china col oreada. La decoración de la mesa es<br />

especial, con ancho vaso con anémonas, anidando en una gran rama de<br />

helechos. Dentro del agua, cintas o lazos com o blancas nieblas en la<br />

mañana soleada, mientras las nubes son aún anchas y largas.<br />

“Olgivanna”, pintoresca con su gran sombrero para librarse del sol<br />

que brilla en sus ojos, preside t odo. Mi hija “Iovanna”, con su<br />

cabellera encrespada, por la brisa y lista para la escuela.<br />

Yo t engo una apretada chaqueta con anchas mangas, y holgados<br />

pantalones apretados en los tobillos, que complementan mi atuendo.<br />

Iniciamos con frescas fresas, depositadas en una vieja taza china, que<br />

todavía tienen sobre ellas el rocí o de la mañana. Después a vena<br />

escocesa, huevos frescos con tocineta, también tibios del nido.<br />

Después un enorme plato de espárragos cortados hace poco, con su<br />

peculiar col or haciendo juego con el plato, y al lado, un gran vaso de<br />

nuestra fresca leche de va cas que se di visan en la verde pradera.<br />

Después miel, y jamones preparados por la misma “Olgivanna”, con<br />

un olor y sa bor extraordinarios. Al final café y t ostadas.<br />

Siempre he mirado las acciones de los jóvenes, por el camino de las<br />

herramientas manuales como el hacha, la sierra, el cepill o, el martillo,<br />

la hoz, la pala, el rastrillo, el cincel para piedra, la brocha, así com o<br />

las labores de cocinar y lavar, y me si ento mejor y pienso cuando se<br />

debe usar la regla T y la escuadra en la mesa d e di bujo. NO más<br />

dibujantes al estilo antiguo. Aquí en este trabajo en TALIESIN,<br />

estamos forjando y construyendo en los jóvenes, esa fuerza moral<br />

acompañada del gozo en el trabajo, con los cuales sean capaces de<br />

asir la vida de nuevo y en cualquier lugar q ue la vida les depare.


[18]<br />

La debilidad y la indolencia en los hábitos de la vida universitaria, no<br />

son buenos ejemplos aquí y así no t endríamos posibilidad de éxit o.<br />

Ha y muchos jóvenes en est e lugar disfrutando su trabajo, l o que<br />

prueba que la madurez es esen cial para alcanzar el potencial de estos<br />

insatisfechos universitarios.<br />

Estos propósitos deben servir, para darnos una idea de donde está la<br />

excelencia. Ellos deben producir también la clase de actitud que se<br />

necesita en estos tiempos. Por semanas he estado buscando madera<br />

por estos valles, y otros materiales com o piedra y cal, y especialmente<br />

trabajadores asalariados. Nosotros tenemos poco dinero para cancelar<br />

est os ansiados suministros.<br />

Al fin podemos instalar nuestro horno de cal, con una luz nocturna, l a<br />

que miramos desde nuestro TALIESIN, como una especi e de lejana<br />

esperanza. Es un gusto ver a los muchachos con taparrabos, como<br />

esti badores de barcos, metiendo madera en el fondo del improvisado<br />

horno.<br />

“Un orden viejo esta blecido, sol o puede ceder poco a poco, cuando<br />

está soca vado, o cuando falla por sus propios excesos”.<br />

La vida familiar de los pi oneros tan nombrada aquí, y tan apreciada<br />

por nosotros, en este amado VALLE, del cual no queremos salir, aún<br />

en ciertas circunstancias apremiantes, com o l e ha s ucedido a algunos<br />

parientes dispersos en lejanos puebl os. Este VALLE, la tierra que mis<br />

antepasados labraron y amaron profundamente, conservando los<br />

árboles de las colinas, y recogiendo l os ansiados cultivos.<br />

Por lo tanto, esta búsqueda de nuestra democrát ica FORMA es<br />

revoluci onaria, una revoluci ón esencial para nuestra vida. Desde que<br />

estamos aquí, desde 1932, hasta ahora 1942, hemos estado juntos<br />

formando una entidad cultural en 10 años, lo que para los demás<br />

puede parecer ilegítimo, a menos que se produz ca un milagro en sus<br />

mentes. Si miramos hacia atrás, vemos las penas que se levantan de<br />

sucesi vas derrotas, parecidas a la muerte, a la sol edad, a la<br />

desolaci ón, y la desesperación.<br />

Pero de esas cosas negativas, nuestros muchachos fueron<br />

consiguiendo una nueva forma de ver las cosas, que me hicieron a mí<br />

regresar a la niñez. Ellos ya no estuvieron apartados de la realidad,


[19]<br />

que yo quería conocieran, como yo l o hice cuando comencé mi vida, y<br />

que ha sido omitida por la vida universitaria.<br />

TALIESIN era con los días una especie de horno gigante que<br />

consumía no sólo madera, sino trabajo, materiales y alimentos.<br />

Yo l es digo a mis aprendices que la mente servil , es una amenaza para<br />

todos, y para la democracia y vi ene de los más ba jos fondos de la<br />

sociedad, que así pueden soca varla, y además es un estorbo en la<br />

lucha por la independencia.<br />

No muy lejos de la mente servil, está el complejo de inferioridad,<br />

pero ést e es más peligroso porque es más difí cil de diagnosticar y<br />

tratar. Es alto tan sutil, que podría darle vergüenza a un joven,<br />

levantar un bastón de un viejo que lo ha dejado ca er<br />

involuntariamente, por miedo a parecer servil. Sol o el hombre que<br />

cree en sí mismo, puede ser leal a una idea, o ser fiel a las enseñanzas<br />

de alguien.<br />

El complejo de inferioridad se muestra a sí mismo, innecesario e<br />

impropio, tratando de crear en los otros una fingida imagen. Es lo<br />

contrario de modestia, y tiene miedo de ser tan pequeño, com o la<br />

misma definición de la democracia, diferente a la aristocracia que es<br />

anti-natural, porque es hereditaria.<br />

Un día que el ci el o en Taliesin era oscuro y triste, HIB Y JACK<br />

LOUIS, herederos de la compañía de Ceras S.C. JOHSON, llegaron a<br />

nuestra vivi enda, y parecían mensajeros en blancos ca ballos<br />

anunciando buenas nuevas. Estaban complacidos pe ro escépti cos, todo<br />

est o agravado con el hecho de que nuestra arquitectura, no tenía<br />

ninguna difusión por radio. Poco después regresaron, en julio de<br />

1936, visita que se tornó muy placentera, y a su regreso enviaron una<br />

nota con dinero, en donde expresaban su confor midad con lo visto y<br />

me pedían un proyect o para el edificio de Administración.<br />

Ha ciendo t odo esos planos, me brotaba una gran energía creativa, y<br />

las ideas revol otea ban sobre el papel. El esquema tenía una gran<br />

simplicidad, pero tuve grandes problemas con los sindicatos y con los<br />

códigos de construcci ón, muy severos en WISCONSIN. Aunque nunca<br />

me preocupé, las m olestias comenzaron con la construcción, porque<br />

los gastos se incrementaron con l os inusuales pil otes, pero la


[20]<br />

curiosidad general era enorm e, porque nadie había construido un<br />

edifi ci o para administración de esa categoría. Todo el edi fi cio t enía<br />

instalación contra incendio, aire acondicionado, calefacci ón, muebles<br />

apropiados diseñados por mí, todo esto era nuevo en la construcci ón<br />

de edi fici os.<br />

Cuando el edifi cio fue a bierto al público, todos parecían estar<br />

esperando el evento y ríos de papel empezaron a salir de las rotativas.<br />

Hubo descripci ones como ésta: “Es una mujer desnuda nadando en la<br />

corriente”.<br />

Un compet ente publici sta, empleado a S.C . JOHSON calcul ó que<br />

varios millones de dólares gratis se habían generado en publicidad, en<br />

revistas especializadas, todo a compañado de una gran cantidad de<br />

visitantes.<br />

Para este edi fici o hicimos importantes pruebas y nuevos precedentes<br />

fueron establecidos para concreto armado.<br />

Esto me recuerda mi cita con la comisi ón de TOKIO en 1914, para la<br />

construcción del HOTEL IMPERIAL, y sus preocupaci ones acerca de<br />

tembl ores. No podían aceptar mis diseños porque nunca habían visto<br />

algo parecido, pero al final estu vieron de a cuerdo conmigo, aunque<br />

dijeron que seguirían observándome de cerca, con la esperanza de que<br />

el “ma yor arquitecto del mundo”, pudiera realizar su trabajo. Ellos al<br />

final estuvieron complacidos con el resultado.<br />

Aquí en mi PAÍS, sólo obtuve un per miso condicionado para la<br />

construcción de la fábrica de Ceras JOHSON, com o tampoco tuve<br />

permiso para los originales ladrillos de CALIFORNIA, ni muchas<br />

casas en diferentes estados.<br />

El concept o con el que creamos est e edi fici o, es el ORGÁNICO, y es<br />

el mismo con que se hacen las catedrales, com o una especie de<br />

sencilla y mística adoración.<br />

El hecho principal de la construcción fue una repetición de los<br />

delgados, huecos y m onolíticos, TALLOS, en forma de árboles<br />

invertidos.<br />

La gran estructura completa parece fl otar en el espacio, con grietas de<br />

luces, t odo en acero soldado, unido en una malla reunida de manera<br />

monolítica.


[21]<br />

El edifici o principal, en el cual los tallos de á rboles están flotando,<br />

está col ocado en la parte de atrás y afuera puse bandas col oreadas<br />

dividiendo las paredes principales de ladrillos, desde l os mismos<br />

andenes, disimulando y adornando el deprimente vecindario.<br />

Dentro del gran vacío a bierto para los trabajadores, hay pocos<br />

espaci os cerrados y los sanitarios están debajo y se llega a ellos por<br />

pequeñas escaleras circulares. Desde que recuerdo, las pruebas de<br />

supervi vencia de mis edifi cios han sido una constante, y la prueba<br />

máxima fue a raíz del terremoto que est remeció al HOTEL<br />

IMPERIAL. Pero antes de haberlo terminado, hubo pruebas de plac as,<br />

de voladizos, de pisos ext endiéndose com o brazos abi ertos y por<br />

último la estabilidad flexi bl e del HOTEL. Casi cada estructura que he<br />

construido, requirió muchas pruebas, para pisos, para nuevas paredes,<br />

chimeneas, techos con nuevos materiales.<br />

Cuando la naturaleza pone una idea en práctica, es decir, cuando<br />

experimenta con un nuevo tipo de especie, enseguida planta su propio<br />

enemigo al lado, con lo cual mantiene un equilibrio permanente y así<br />

mantiene el sentido de proporción en todo. Cuando probamos cosas,<br />

tratamos de descubrir el secreto interior o la ley de proporci ón<br />

inherente a su propio diseño. Por lo tanto desconocem os su equilibrio,<br />

porque es una hechura de DIOS. Pero con alturas, fuerzas, volúmenes<br />

y pesos, podemos hacer que tengan sentido ant e nuestros ojos, porque<br />

los arquitectos podem os llegar más cerca de algunos secretos de la<br />

naturaleza, si ellos en su práctica diaria, son seguidores de l o<br />

“ORGÁNICO”.<br />

El pensador “HE RÁCLITO”, tenía razón cuando afirmaba que la vida<br />

era un río, donde estaban pasado, presente y futuro.<br />

Inevitablemente, un burócrata es un hombre corto de ideas, que vi ve<br />

permanentemente en el limbo, y hace alarde de su autoridad que es su<br />

única fuerza.<br />

La tradición es su única fórmula y cualquier cosa diferente le molesta.<br />

La fatal debilidad de la democracia es la burocracia, y se apoya en la<br />

callada y sumisa actitud hacia la autoridad manejada por los<br />

burócratas.


[22]<br />

En el caso del edi fici o JOHSON, el código de construcción sol o<br />

permitía para una columna de 30 centímetros, una altura de 3 metros.<br />

Para alcanzar la altura de 8 metros de mis col umnas como árbol es,<br />

debían tener según el código casi 1 metro de ancho lo que era un<br />

absurdo. Mi columna fue pensada com o forrada en una malla de acero,<br />

unida en frío, para después vaciar el concreto.<br />

El resultado fue obtener más fuerza, más allá de cualquier estructura<br />

de acero, sobre la cual el código esta ba construido. También por<br />

primera vez, agitamos el concreto mientras se vaciaba, por lo que se<br />

aumentó la resistencia.<br />

El sitio para la prueba de la columna se decidi ó abrirlo al público, sin<br />

est orbo ninguno para la publicidad, y con una pala de vapor en lo alto<br />

comenzamos a verter el concreto y después en la mesa que habíamos<br />

hecho en la parte superior, comenzamos a poner toda clase de piedras<br />

previamente pesadas. Ahí estaban reunidas con la comisi ón, la prensa<br />

y el público en general como atentos obser vadores. Yo me senté con<br />

un abrigo de lana por el frío reinante, en compañía de algunos<br />

aprendices, tratando de observar las primeras gri etas en la columna.<br />

Pronto me a burrí y com encé a pasear alrededor, mientras la grúa<br />

seguía vertiendo materiales, dando vueltas y más vueltas, hasta que el<br />

sol se ocultó. Hacía tiempo que los requerimientos de la comisi ón<br />

habían sido superados.<br />

El escenario era increíble, con la policía a cargo, alrededor de las<br />

cuerdas que habían rodeado el sitio, separando la gente del delgado<br />

tallo de mi columna, que parecía una graciosa adolescente en puntillas<br />

de pie.<br />

El peso acumulado llegó 60 ton eladas, 6 veces el pes o exigido, y solo<br />

entonces com enzaron a aparecer delgadas fisuras en la parte superior,<br />

con lo que la enorme masa se vino al suel o, con el eje central todavía<br />

intacto. El comisi onado guardó silencio y salió del lugar sin decir<br />

palabra. Su silencio era muy el ocuente.<br />

Me acuerdo también de la IGLESIA EN KANSAS CITY, MISSOURI,<br />

con el esquema más simple que se pueda imaginar, una suave y<br />

flexi bl e estructura de acero en forma de HEXÁGONO.


[23]<br />

Todo estaba descansando en pocos pilares, com o en el JOHNSON. El<br />

delgado esquel et o de acero debía ser cubierto con papel especial<br />

contra ruido, para ser usado dentro y fuera. Para mí éste es el más<br />

famoso avance hecho en construcción, muy económico y aislante.<br />

El primer problema surgió con el comisionado, por el uso de piedras<br />

en esa forma, porque decía que no conocía fundaciones de ese tipo, a<br />

lo que le dije que l os rieles del ferrocarril, usaban ese sist ema hacía<br />

más de 200 años.<br />

Su preocupa ción era el tiempo seco de esa región que podría producir<br />

grietas, a lo que repliqué q ue las rocas sueltas nivelarían las<br />

diferencias, pero dijo que sól o permitiría concreto común y corriente.<br />

Fue un golpe para mí, porque yo contaba con esa necesaria<br />

flexi bilidad, lo que no conseguiría si se fija ba la estructura a un<br />

concreto sólido en el fondo, l o que provocaría una contracción que no<br />

se presentaría con rocas sueltas.<br />

Yo debería haber detenido la construcción donde esta ba, y ser<br />

removido de mi responsabilidad. El concepto fundamental de la<br />

IGLESIA, estaba destruido, porque la flexi bilidad n ecesaria para la<br />

estructura en forma de Hexágono no podía realizarse con seguridad, y<br />

por lo tanto aparecerían grietas en lo sucesi vo.<br />

Apelamos entonces a l os a bogados, y fuim os con ell os ante la<br />

comisión sin resultado.<br />

Lo que me duele es que no hubiera podido construir un edificio para<br />

personas dignas, por su precio razonable, con absoluto confort,<br />

belleza y distinción.<br />

Esta ciudad hubiera podido construir algo parecido a una JOYA, pero<br />

he comprendido que en esta Ciudad y en este Est ado no hay lugar para<br />

la IGLESIA del futuro.<br />

Ha blando de otra cosa, el cost o de una casa, es el ma yor problema<br />

arquitectónico o el más difícil. El principal problema es que la gente<br />

en este PAIS, no sabe cóm o vivir, además de sus absurdos gust os y<br />

predilecci ones.<br />

Para ser más especí fi co, una casa pequeña puede ser agradable, sino<br />

trata de imitar las casas grandes, com o l os pueblos pequeños NO<br />

deben imitar las grandes ciudades.


[24]<br />

Yo estoy seguro que cualquier aproximación a esta nueva casa,<br />

necesita una cultura indígena, una forma más simple, y al mismo<br />

tiempo debe ser gratificante para vivir.<br />

No obstante, para mejorar este producto, o sea , la “pequeña casa<br />

americana”, es urgente y necesario que el camino sea, EL SENTIDO<br />

COMÚN.


[25]<br />

“COSAS QUE DEBEMOS ELIMINAR”<br />

1) Techos complicados son cost osos e innecesarios.<br />

2) Los garajes deben ser del tamaño de los carros.<br />

3) Anulación de los sótanos.<br />

4) Interiores adornados no son necesarios.<br />

5) Suprimir los radiadores para calentar las casas. Se deben calentar<br />

las casas promedio de tuber ías entre los pisos.<br />

6) Suprimir las luces directas por indirectas.<br />

7) Tratar de incluir los muebles dentro de las paredes para ahorrar<br />

espaci o.<br />

8) Uso de mínimas capas de pintura para la madera. Cubrirla solo con<br />

aceite.<br />

9) No debe usarse yeso en las construcciones .<br />

Para este plan debem os usar estos materiales: madera, ladrillo,<br />

cem ento, papel y vidrio. Construir con ladrillos es cost oso, luego en<br />

las paredes debe usarse madera afuera y adentro, y entre ellas papel<br />

para insolación. Todo esto previamente tratado para evitar alimañas y<br />

preparadas contra el fuego. La cubierta puede ser construida primero<br />

y las paredes hechas más tarde.<br />

10) Los accesorios eléctricos y de plom ería deben ser independientes<br />

de las paredes para facilitar arreglos posteriores.<br />

En una visita hecha en el JAPÓN cuando residía allá, en pleno<br />

invierno, era difícil mantenerse tibio, a causa de la humedad del<br />

ambiente. Se calentaban con un proceso que ell os llamaban HIBACHI:<br />

un redondo recipiente situado sobre el piso, lleno de blancas cenizas,<br />

pedazos d e carbón de leña, sentados todos alrededor, donde<br />

calentaban las manos. El resultado para nosotros los occidentales, no<br />

era satisfactorio y la respuesta estaba en sus interiores de lana que los<br />

protegían con largas mangas, pantalones también largos, y por encima<br />

unos fl otantes y gruesos quimonos.<br />

Aun conociendo est os antecedentes acepté la nueva invitación del<br />

Barón OKURA, a cenar. Como esperaba, el com edor estaba muy frío,<br />

y no pude pasar alimento. Después de la frugal comida, el Barón nos<br />

llevó al cuarto “COREANO”, com o él lo llamaba. Era pequeño con


[26]<br />

una alfom bra roja y pesada, y las paredes severamente lisas. Ahí nos<br />

arrodillamos a la usanza de ellos, y conversamos tomando café turco.<br />

El clima parecía haber cambiado, casi era primavera. No se veía<br />

ninguna clase de calefacción, pero el calor parecía venir del suelo.<br />

Los traductores me explicaron, que el cuarto “COREANO”, significa<br />

un espacio calentado ba jo el piso, con el calor proveniente de un<br />

fuego en una esquina, que corre por duct os especiales, y sal e por<br />

rajaduras abiertas en el piso. Para mí fue un descubrimiento.<br />

De regreso al HOTEL IMPE RIAL, instalé elementos eléctricos en los<br />

pisos de los baños, y quité el ci elo raso para crear un espacio donde<br />

generar calor, por lo que las baldosas esta ban siempr e tibias e ir al<br />

baño era sumamente placentero.<br />

Esta fue una buena oportunidad para crear un clima saludable,<br />

suprimiendo todos los radiadores que molestan tanto.<br />

Siempre he considerado que el EXCESO de calefa cci ón, resiente al<br />

organismo y produce mol esti as al cuerpo, porque así es más difícil<br />

habituarse al frío exterior.<br />

Entonces decidí usar este sistema en mi PAÍS en la primera<br />

oportunidad. Comencé a construir el edifici o JOHNSON, pero casi<br />

todos l os profesi onales de la calefa cci ón, rechazaron el asunto ,<br />

except o sol o uno. Pero la oportunidad, llegó con la casa JACOB<br />

donde se hizo la primera instalación, y cuando llegaron los<br />

inspectores, pusieron sus manos deba jo de las alfombras de donde<br />

salía el calor, y se mostraron satisfechos. Entonces comenzaron a<br />

aparecer artículos en donde se habla de “Calor Radiante”, que era<br />

simplemente calor viniendo de abajo y subi endo en forma natural.


[27]<br />

“LAS SEÑORAS CASADAS DE TALIESIN”<br />

Mientras estuve solo en TALIESIN, después de mi regreso del<br />

JAPÓN, estaba acompañado por 3 amigos con sus esposa, MOSER,<br />

NEUT RA, TSUCHIURA, provenientes de ZURICH, VIENA y TOKIO,<br />

y no puedo imaginar que hubiera hecho sin ellos, especialmente por la<br />

compañía femenina, quienes me ayudaron mental, moral y<br />

emoci onalmente.<br />

Oíamos mucha música, rodeados de sus hijos. Ellos eran mi familia, y<br />

los aprendices hacían que mantuviera mi mente sobre el trabajo. Las<br />

esposas de mis amigos me brindaban atenciones, y mantenían la casa<br />

llena de flores, lo cual me hizo sentir menos solo, antes de la llegad a<br />

de OLGIVANNA. Yo pienso que la compañía de esas jóvenes parejas,<br />

me empujaron suavem ente por el precipici o del divorci o, y hacia un<br />

nuevo matrimonio, con el cual pude empezar a vivir de nuevo.<br />

Los jóvenes aprendices tenían 3 diferentes individualidades. Ellos<br />

eran talentosos, y sus mujeres especiales. Miro hacia atrás, hacia ese<br />

período de TALIESIN, y la comparo con la calma antes de la<br />

tempestad, que estalló cuando OLGIVANNA apareció en escena, días<br />

antes que ellos se fueran.<br />

Entre ell os recuerdo especialmente a RICHARD NEUT RA, que había<br />

estado t ocando mi puerta desde VIENA, para ser admitido. Al cabo de<br />

3 años vino a mí, para hablar conmigo sin encontrarme y con mucha<br />

paciencia me esperó. T odas mis realizaciones tenían gran reputación<br />

en sus países de origen.<br />

Reci entemente recibí una carta del padre de uno de ellos, que decía<br />

así: “Querido Sr. WRIGHT, en esta terrible guerra en EUROPA, hay<br />

poca satisfacci ón en nuestra arquitectura”.<br />

“Ha y una gran necesidad de una producci ón clara y directa. Usted<br />

puede demostrar en su larga vida de trabajo, un continuo desarrollo,<br />

expresado en una gran variedad de aplicaciones, basado en el mism o<br />

principio. Su trabajo es un consuelo hoy en día, para todos los<br />

arquitectos sensi bles y con coraje, que no renuncian a sus id eales,<br />

porque muestran una profunda y enraizada creencia en todo lo que es<br />

positi vo actualmente, con la posibilidad de expresarlo bellamente con<br />

los elem entos característicos de su ti empo. Yo he tenido el placer de


[28]<br />

seguir sus ideas nuevas, en las recientes publi caciones, con un real y<br />

espontáneo interés, en todas sus realizaciones. Fue una gran<br />

experiencia comparar sus trabajos con los nuestros, lo que nos<br />

permitió ver más de cerca nuestras debilidades. Mucha falta de<br />

imaginación, coordinación y fortaleza”.<br />

“Naturalmente no se puede reemplazar una MENTE ingeniosa, pero se<br />

puede seguir su idea bási ca. En su trabajo perci bimos la fuerza de la<br />

juventud, lo que inspira a otros más jóvenes con respecto a la<br />

imaginación y al coraje”.


[29]<br />

“OLGIVANNA”<br />

Ha bía nacido en CETTINJE, MONTENEGRO, y educada por su<br />

hermana de BAT UM, RUSIA y había llegado a PARIS, con su hija,<br />

SVETLANA de 7 años, y esta ba en CHICAGO en consultas de<br />

negoci os con su marido de quien estaba di vorciada. Ella estaba<br />

intentando regresar a PARIS, donde tenía su hogar. El atractivo<br />

nombre de OLGIVANNA, era una unión de OLGA + IVANONNA,<br />

hecho por sus amigos. Ha bía sido alumna del instituto GORDJIEFF,<br />

para el desarrollo de la personalidad. Era un grupo asiático traído y<br />

relacionado con EL CARNEGIE HALL, para personas con probl emas<br />

de personalidad de todos l os estratos sociales, para relacionarlos<br />

mejor, más vivos, y más útiles a otros.<br />

OLGIVANNA y otros fueron los líderes en la enseñanza de esa teoría.<br />

Yo la conocí en un festi val de tea tro, y algunos días después la invité<br />

a conocer a mis huéspedes, con los cuales tuvo una gran afinidad.<br />

Pronto pasamos a vivir juntos.


[30]<br />

“VISITA AL JAPÓN”<br />

Invitado a construir el nuevo HOTEL IMPERIAL, durante esos 4 años<br />

de residencia y una visita preliminar en 1906, aprendí algunas cosas<br />

acerca de esa cultura que había estudiado y amado desde hacía mucho<br />

tiempo.<br />

Yo estoy seguro que el ESTE y el OESTE NO deben encontrarse,<br />

porque nosotros, no tenemos comprensión para el otro lado. CHINA Y<br />

JAPON, han preservado un gran sentido de bell eza y arte, y de paso<br />

nos consideran com o bárbaros, y desde su punto de vista creo que<br />

verdaderamente lo somos.<br />

JAPÓN, cuya religión es la SHINTO, posee un lema que es<br />

“LIMPIEZA” de t odo.<br />

La tierra del SOL NACIENT E, ha estado influenciada por extranjeros<br />

con piel blanca, ojos diferentes, hombres vulga res que no piensan y<br />

sin espíritu para el coraje.<br />

Rápidamente, los jóvenes escolares fueron modelados com o los<br />

alemanes, y ese sistema fue germanizando a los japonese s y por eso<br />

muchos ofi ciales estuvi eron por muchos años viajando a ese PAÍS.<br />

Así los arquitectos alemanes construyeron el PRIME R HOTEL<br />

IMPERIAL, y la U. del JAPÓN llegó a ser virtualmente alemana.<br />

Muchos años después cuando yo esta ba construyendo el segund o<br />

HOTEL IMPE RIAL, llegaron noticias de que un estadista americano<br />

había declarado que ellos eran una raza inferior, lo que provocó una<br />

enorme furia y una gran indignación.<br />

Es corriente decir, bajo la bandera del SOL NACIENTE, que la tierra<br />

del ESTE es el Amanecer y que el OESTE es el Atardecer. Todos los<br />

suci os secretos com erciales fueron arrojados contra los amarillos, y<br />

siendo un pueblo más viejo, fueron más fácilmente degenerados, y<br />

desm oralizados.<br />

JAPÓN siempre ha adorado a la MADRE TIERRA CHINA, com o<br />

nosotros adoramos a INGLATERRA.


[31]<br />

EPÍLOGO<br />

“QUE SUCEDE CON LA NATURALEZA HUMANA? ...<br />

…SU RELACIÓN CON LA ARQUITECTURA”<br />

“Un joven aprendiz que estuvo un año en Taliesin me envió una carta,<br />

en donde me dice que mi idea es buena, y mi trabajo con la socieda d<br />

deberá tener éxito, except o que yo predico mucho sobre la naturaleza<br />

humana”.<br />

A este amigo le respondo: “TALIESIN está predicando un evangelio<br />

impopular, fomentando un sistema de trabajo, que ha sido debilitado<br />

por el camino de inflar la vieja educa ción, y no es fácil comprender<br />

este concept o del trabajo creativo, con una realización diaria y<br />

dificult osa”.<br />

Aquí tenemos muchos jóvenes que vienen con estudi os superiores, y<br />

muchos años empleados y al cabo de un tiempo, han salido de aquí<br />

con solo una constan cia, sabiendo com o yo, que merecen muchos más.<br />

Cualquier labor manual que implique esfuerzos físicos, está por<br />

encima de ellos y los supera con creces.<br />

Usar bien ciertas herramientas com o hacha, cavador, o pala, es mucho<br />

mejor que golpear una pelota de golf o correr detrás de un balón.<br />

Tener un buen trabajo en el campo, o construir un edifici o requiere<br />

más actividad que cualquier deporte, y es mucho más placentero,<br />

porque se puede mostrar en el futuro. “El hombre que planta un árbol<br />

sabe la profunda satisfacci ón que deja esta actividad”. Y si este<br />

experimento nuestro falla, puede ser a causa de que nuestros jóvenes<br />

hayan perdido su capacidad de desarrollar sus propias aptitudes, en<br />

una rica y variada forma, como digo yo juntando cabeza y manos.<br />

Así, yo mir o con creciente disgusto y alarma la confusi ón que se está<br />

fraguando sobre la soci edad por el camino de una UNIVERSIDAD,<br />

que congrega miles de novatos, t odos buscando su propia identidad,<br />

fuera de la única FUENTE verdadera: la energía creadora de su propia<br />

y completa madurez, proyectada con gozo dentro de útiles y<br />

avanzadas empresas, ba jo el imperio de la mente creativa unida al<br />

trabajo físico. Yo l o comparo con un hombre con un musculoso brazo<br />

unido a un cuerpo poco desarrollado.


[32]<br />

Las especialidades se han desarrollado a expensas de la mente del<br />

hombre complet o.


[33]<br />

“CREACIONES INTEMPORALES<br />

DE FRANK LLOYD WRIGHT”<br />

El nuevo ideal estético no requiere que l os edi fici os sean parecidos<br />

entre sí, ni tampoco que sean todos de acero, concreto y vidrio por el<br />

sol o hecho de ser modernos.<br />

Todos l os materiales pueden ser bell os y su belleza depende de la<br />

manera como sean usados.<br />

Es verdad que los ornamentos son tan vastos, tienen tan significación<br />

humana que no es un asunto para cualquiera, except o para las más<br />

imaginativas mentes que con habilidades artísticas, puedan darnos<br />

esos regalos engalanados y proporcionados.<br />

Debemos ir más alto en el reino de la imaginación, porque así nos<br />

ingresamos al resplandeciente mundo de la poesí a.<br />

Ornamento significa no sol o superfi cie matizada por la imaginación<br />

humana, sino también un producto natural, como recurso decorativo.<br />

Esto para mí es nuevo en arquitectura y lo he llamado Ornamento<br />

Integral.<br />

Las fl ores creadas por Dios com o regalos al hombre, son el alimento<br />

del alma.<br />

Lo que yo he llamado Ornamento Integral, es la misma orgánica<br />

simplicidad que concibi ó Beethoven en su quinta sinfonía.<br />

La Quinta Sinfonía de Beethoven, es una resplandeciente revolución<br />

de sonidos, en un tumulto de espl endor, construida sobre 4 tonos en<br />

un ritmo, que un niño podría tocar con un sol o dedo sobre un piano.


[34]<br />

La Quinta Sinfonía de Beethoven, suprema creación alcanzada con 4<br />

repetidos acordes es un ritmo simple, dentro de un gran poema<br />

sinfónico, muy proba blemente el más grande e difici o de pensamientos<br />

construido.<br />

Arquitectura es música con su capacidad para lo sinfónico y l o<br />

grandioso.<br />

Yo creo que esta nueva demanda de la vida com o orgánica, es una<br />

forma noble de arquitectura, porque se parece a la vida.<br />

Debemos leer estas fresca s lecci ones, en el gran libro de la creación,<br />

despreciando con el fervor de los jóvenes, todo l o que produzca<br />

vergüenza o temor, para poder vivir honestamente con verdadero<br />

orgullo de vida.<br />

Yo creo que las próximas generaciones, entenderán que ex ist en una<br />

gran diferencia entre sentimiento y sentimentalismo.<br />

Yo vi en las lejanas colinas de mi hogar en TALIESIN, como l os<br />

himnos sobrantes del canto de la pradera, reposaban ahí como tributo<br />

diario.<br />

Al fin comprendo que la eternidad es ahora, y qu e sol o divide el a yer<br />

del mañana, por lo que debem os gozar de la eternidad presente.<br />

Mi autobiografía ha sido hecha como un acto de FE muy profundo.<br />

Cada palabra escrita es real, pero l os hechos por sí solos NO<br />

constituyen la verdad, como la madera, el l adrillo y el mortero, no son<br />

arquitectura. Sól o la imaginación, usando esos factores honestamente,<br />

puede crear temas con espíritu, para hacer que la vida del hombre,<br />

inspire nuevas formas y el constante trabajo de hacer ARTE.


[35]<br />

Yo sé con sufici entes razon es, que el amor con que construyo, debe<br />

ser la base para una verdadera democracia. El amor NO sol o debe<br />

formar nuestros edi fici os, sino hacer la vida apropiada para vivir en<br />

ellos.<br />

De cualquier forma la democracia honestamente tratada, consiste en la<br />

resoluci ón de hablar claramente y en el acto de vi vir verdaderamente.<br />

Entonces estaremos segur os de desarrollar la inteligencia y a sí<br />

encontrar recursos, para dar con la verdad social, económica y<br />

política.<br />

La moda es una forma de ignorancia. Todo est o pue de ser cierto para<br />

un gusto educado, per o con el eclecticism o a hora tan popular, lo<br />

podemos considerar un retraso en el camino de la verdad estética.<br />

Yo NO creo que en nuestra AMÉRICA merezcamos pasar de la<br />

barbarie de la degeneración, sin haber conocid o la verdadera<br />

civilización.<br />

Com o personas podem os ascender o descender culturalmente. Cuando<br />

hacemos cosas bellas ascendemos, y cuando hacem os cosas falsas y<br />

groseras descendemos.<br />

Obt engamos un consuelo para nosotros pensando que no estamos<br />

degenerados y no l o estamos, porque esta generación aún no ha<br />

conocido el verdadero ARTE.<br />

En el pasado las casas y los edi fi cios públicos pasaron de las cavernas<br />

a fortificaci ones. NO estaremos regresando a lo mismo? Los a ctuales<br />

edifi ci os fortificados no serán grandes cavernas?


[36]<br />

Con la llegada de la nueva arquitectura y l os ideales de luz y espaci o<br />

que conquistaron el mundo, podem os considerar la vieja arquitectura<br />

como un material escultural con huecos en su interior y no podemos<br />

imaginar a nadie viviendo a hí.<br />

MIGUEL ANGEL, levantó en ROMA sobre la parte más alta de la<br />

estructura, la forma más hermosa de adulaci ón. El resultado de esta<br />

impulsiva inventiva fue llamada la CÚPULA DE SAN PEDRO. Pero<br />

aunque esta advenediza CÚPULA vi ol ó t odos l os principios de<br />

construcción, llegó a ser un símbol o sagrado y no sagrado. YO la<br />

considero un anacronismo que ha llegado a ser aceptado ofi cialmente<br />

en todos los países, con numerosos ejemplos, que partieron de la falla<br />

de un gran ARTISTA. Tal vez, todo se explique por el hecho<br />

conocido, de no ser MIGUE L ANGEL, un arquitecto.<br />

La forma en que vivían los primeros cristianos, fue la forma más<br />

humana y simple. Toda esta forma de vida debi ó ser ennoblecida a<br />

través de est os 20 siglos con la simplicidad innata de Jesús.<br />

POESÍA es el sonido del corazón, complementada con la mano del<br />

poeta. ARQUITECTURA es música interior engalanada con la<br />

imaginación del artista.<br />

La arquitectura debe ser integral y ser la expresión de una nueva<br />

realidad. NO debe existir un interior y un exte rior, porque lo externo<br />

debe estar compenetrado con lo interno.<br />

Las cosas crecen, se tornan viejas y desaparecen rápidamente. Pero<br />

nuestra personalidad bendecida por el camino en donde usamos las<br />

cosas es INMORTAL, más allá del alcance de l a edad, desarr ollada y<br />

fortalecida, y trae la más atractiva de las calificaci ones y es la<br />

experiencia.


[37]<br />

Si la EDAD no trae recompensas a las personas, algo está<br />

verdaderamente equivocado en la sociedad. Yo recuerdo a una amiga<br />

que decía que si una mujer no era atract iva a los 20 años, no era por<br />

su culpa, pero si era culpable a los 50.<br />

El tiempo y las circunstancias destruyen las promesas, como la<br />

distancia borra las visiones lejanas.<br />

Yo creo ahora, desde l o más profundo de mi SER, que cualquier cosa<br />

deseada con anhelo la tendremos, porque primero estuvo un nuestro<br />

corazón.<br />

Continuamente insultamos lugares sagrados y hacem os vi olencia sobre<br />

la propiedad de pequeñas y valiosas criaturas, cuando horadamos la<br />

tierra para construir edificios.<br />

Si mi madre NO hubiera decidido por mí que fuera un ARQUITECTO,<br />

podría haber sido un gran MÚSICO. La mente requerida para la<br />

grandeza, en cualquier ARTE es la misma. YO debería estar al lado de<br />

BEETHOVEN.<br />

En la música de BEETHOVEN yo perci bo la mente maestra,<br />

consciente de las cualidades del corazón, que remontan la imaginación<br />

y hacen a un hombre vislumbrar a DIOS. Cuando escucho su música,<br />

comprendo su esfuerzo t otal, único en su di versidad, y profundo en el<br />

diseño, que reposa en la expresión final, com o patrón entre grand es<br />

arquitectos y grandes músicos. Es como un mensaje del alma, nunca<br />

descifrado por humanos.<br />

La música de BEETHOVEN es la más grande prueba de armonía<br />

vi viente, en el espíritu humano. Como radiantes fl ores y frutos se<br />

extienden hacia el exterior bajo la cambiante luz del sol, difundiendo<br />

el universo de su alma.


[38]<br />

Cuando diseño oigo las sonatas de BEETHOVE N, y estoy seguro que<br />

él con su música hace edi fici os com o l os mí os, no importa la forma<br />

que hayan tomado en su mente.<br />

Existe un parentesco entre nosotros, pero mi contacto con el más allá<br />

es más abstracto, con comunes espíritus que interpretan mis<br />

creaciones, aún en una forma más concisa que en la música.<br />

Ha y una similitud entre la creación de música y arquitectura. Solo la<br />

naturaleza y el uso de l os materiales difieren. La creación de la<br />

música es mucho más profunda.<br />

La idiosincrasia de los cli entes, no existe para los músicos, así com o<br />

tampoco las regulaciones, impuestas por las leyes físi cas. Pero ambos<br />

necesitan conocer y superar los mismos per juici os y retrasos<br />

culturales. Las limitaciones humanas ponen su perspicacia, aunque<br />

sigo pensando que ellas son las mejores amigas de un verdadero<br />

ARTISTA.<br />

La arquitectura y la música pueden equipararse, porque la música<br />

construye y la arquitectura canta, creando ambas poder y pasi ón con<br />

su propio brillo interior.<br />

La maestría no es un misterio, sino simples principios de la<br />

naturaleza, aplicados con peculiar énfasis a todo l o que l os maestros<br />

hacen. Un esquema de acuerdo con la naturaleza de los materia les,<br />

que revel e la belleza de las cosas, en el tono y textura que ellos<br />

poseen. Pero l o que produce l os resultados de la maestría, es un<br />

misterio de inspiración divina.


[39]<br />

Los ritmos de BEETHOVEN son integrales, porque están basados en<br />

la naturaleza: su progresión planeada, la evoluci ón temática, la<br />

variedad sin fin, son ornamentos integrales que se complementan<br />

naturalmente, siguiendo la más simple insinuación en la idea inicial,<br />

sobre la cual toda la estructura está basada.<br />

Desde que el carácter ORGÁNICO se establece, ese trabajo es para<br />

siempre, com o el sol, la luna, los árboles, las estrellas y las fl ores,<br />

permanecen para siempre y estarán donde el hombre se establ ezca.<br />

Permanezco humilde al lado de BEETHOVEN y agradecido con su<br />

música, porque está a mi lado cuando dice: “E l que oye mi música,<br />

está a salvo de las heridas del mundo”.<br />

Un experto es usualmente un hombre que ha estado det enido en el<br />

tiempo y capaz de seguir toda su vida por un camino equi vocado. En<br />

mi trabajo, he desarrollado un a técnica propia, muy flexi ble, que<br />

continúa creciendo con cada edifici o y constituye una nueva<br />

experiencia.<br />

La democracia necesita un nuevo ideal para el éxito. Lo valorado<br />

actualmente causa más daño que benefici o. El éxito a través del<br />

dinero, no añade cualidades, si al obtenerlo, sól o se gratifica su<br />

obtenci ón.<br />

De l o único que el hom bre no puede escapar, es de sí mism o y por lo<br />

tanto no puede permitirse el lujo de ser egoísta.<br />

El gran poeta WALT WHITMAN dijo que amaba la compañía de los<br />

animales, porque no se preocupaban, ni preocupaban a otros y<br />

especialmente no inquirían sobre sus almas.


[40]<br />

La vida si empre camina hacia la victoria, no a través de los istm os,<br />

sino a través de la directa responsabilidad de lo individual. Se<br />

sostiene por la inici ativa. Si la iniciativa es individual será fuerte,<br />

activa y operante, como una eterna primavera.<br />

LOUIS SULLIVAN, el gran arquitecto y mi maestro, escribi ó li bros<br />

que no he l eído, ni necesito l eerlos, porque él fue para mí un libro<br />

abierto.<br />

Yo creo que cuando la máquina se incremente, nos col ocará en el<br />

lugar a que pertenecemos, permitiendo a la vida humana ser venturosa<br />

y provechosa. Solo así entonces la cultura nativa o indígena nos<br />

llevará hacia una verdadera democracia.<br />

Lo que cualquier democracia debe proporcionarnos es bell eza de vida,<br />

que es un derecho adquirido por el hombre al nacer. Con este<br />

apropiado ideal, es posi ble aliviar o mitigar el horror de la vida,<br />

atrapada bajo la más moderna de las máquinas que es la Ciudad.<br />

Estar contra la estandarización, desechar las mareas com erciales de la<br />

publicidad, propiciar la descentralización, deben ser los objetivos de<br />

todos los arquitectos.<br />

FIN


[41]


[42]<br />

REFERENTES BIBLIOGRAFICOS<br />

- BENÉV OLO , Leonardo ( 1994)<br />

“ HISTORIA DE LA ARQUITECTURA MODERNA” . B a r c e l o n a : E d i t . G u st a v o G i li.<br />

- BROO KS PFE IFFER , Bruce – L ARK IN , Davi d ( 1 998)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT” . B a r c e l o n a : E d i t . G u s t a v o G i l i S . A .<br />

- BROO KS PFE IFFER , Bruce ( 2004)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT – CO NSTRUIR PARA LA DEMOCRACIA” . Col o n i a : E d i t .<br />

T a s c h e n .<br />

- FORSE E, Ay lesa ( 1960)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT – SU VIDA Y SU OBRA” . B u e n o s A i r e s : E d i t . V i ct o r L e r u<br />

Can ga l l o .<br />

- HEIN Z, Thom as A. ( 1994)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT - PORTFOLIO” . Hon g K o n g: Edi t . Re ge n t P u b l i s h i n g<br />

S e r v i c e s .<br />

- KAUFM ANN JR , Edgar ( 1986)<br />

“ FALLING WATER”. Nuev a Y o r k : E d i t . AB B EV I L L E P RES S I NC.<br />

- MUMF ORD , Lew is ( 1959)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT Y OTROS ESCRITOS”. B u en o s A i r e s : E d i t. I n f i n i t o ,<br />

T a l l e r e s G r á f i c o s T o r f a n o .<br />

- SECRES T, Mery le ( 1992)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT – A BIOGRAPHY”. Chi c a go : E d i t . T h e Uni v e r s i t y o f<br />

Chi c a go .<br />

- STIPE , Margo ( 2004)<br />

“ FRANK LLOYD WRIGHT – THE INTERACTIVE PORTFOLIO” . F i l a d e l f i a / E E UUA A ,<br />

L o n d r e s / RU: E d i t . Runni n g P r e s s .<br />

- STORR ER, W i l liam Al l in ( 1978)<br />

“ THE ARCHITECTURE OF F RANK LLOYD WRIGH T” . B o s t o n : E d i t . T h e<br />

M a s s a c h u s e t ts I n st i t u t e o f T ec h n o l o gy ( M I T ) .<br />

- TAFEL , Ed gar ( 1979)<br />

“ APRENDIZ DE GENIO – MIS AÑOS J UNTO A FRANK LLOYD WRIGHT” . Nuev a<br />

Y o r k : E d i t. Mc G r a w – Hi l l .


- TIETZ , Jurgen ( 1998)<br />

[43]<br />

“ HISTORIA DE LA ARQUITECTURA DEL SIGLO XX” . Hon g K o n g: E d i t . S i n g<br />

Cheon g P r i n t i n g Co. Chi n a .<br />

- W RIGHT , <strong>Frank</strong> L loyd ( 1943)<br />

“ AN AUTOBIOGRAPHY” . S c o tt s d a l e : E d i t. B a r n e s a n d Nobl e I n c .<br />

- ZEVI , Bruno ( 1954)<br />

“ HISTORIA DE LA ARQUITECTURA MODERNA” . B u en o s A i r e s : E d i t . E m e c é<br />

E d i t o r e s .


[44]


[45]<br />

<strong>Gregorio</strong> <strong>Cabrera</strong> García<br />

Arquitecto cartagenero, nacido en 1933, especialista en Medi o<br />

Ambiente Urbano y Desarrollo Territorial, Docente Universitario.<br />

Arquitecto jefe de la Gobernación de Bolí var (1960 -1965), Presidente<br />

de la Sociedad Ingenieros y Arquitect os d e Bolívar (1970), Secretario<br />

de Planeación Municipal (1985 -1987), Integrante del equipo gestor<br />

de la denominación de la ciudad de Cartagena de Indias como<br />

Patrimonio Hist órico y Cultural de la Humanidad -UNESCO (1984),<br />

Alcalde encargado de Cartagena (1986) , Premio SCA Bolívar –<br />

“Arquitecto t oda una vida -Augusto Tono Martínez ” (2012).


[46]


[47]<br />

© 2012, <strong>Gregorio</strong> <strong>Cabrera</strong> García<br />

ISBN: 978-958-8590-22-6 (PDF)

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!