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13 de abril
La voluntad de Dios
Propósito del programa
Comprender la importancia de cumplir con la voluntad de Dios.
Al director
Los participantes pueden estar sentados con la congregación. Debe buscar un canto para
el momento de la bienvenida, que estimule la expresión de afectos (abrazos, darse
las manos). Los presentadores pueden entrar juntos o realizar entradas y salidas.
Recomendaciones
Prepare souvenirs para entregar a la entrada de la iglesia.
Seleccionar personas que den testimonios sobre cómo Dios les mostró su voluntad.
« No os conforméis a este mundo, sino transformaos por medio de
la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál
es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta»
Romanos 12:2
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Introducción
Sábado 2 – La voluntad de Dios • 67
«Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud» (Salmo
143:10). Estas preciosas palabras deberían ser la oración que presentemos a Dios diariamente, decirle: Ayúdame
a no hacer mi voluntad sino la tuya. Y pedirle que nos muestre cuál es su propósito para cada momento
de nuestra vida.
La voluntad tiene que ver con el poder de decidir, y está vinculada con nuestros deseos. A pesar de que cuando
Dios creó al hombre le dio la capacidad de hacer uso de su voluntad libremente, no dejó de instruirlo respecto
a cuál era su propósito para con Él. «En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme
al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad» (Efesios 1: 11). Vamos ahora
a analizar las historias de algunos personajes, que ya sea de forma sutil o en abierta rebelión hicieron su voluntad
dejando a un lado las instrucciones dadas por el Señor. Bienvenidos a esta programación. ¡Bendiciones!
Bienvenida
Presentador 1: Buenos días para todos, estamos muy agradecidos por la presencia de cada uno de ustedes esta
mañana en este lugar. Nuestro programa se titula: La voluntad de Dios, y el hecho de que ustedes se encuentren
aquí, es una muestra de que se han negado a ustedes mismos al dejar la comodidad de sus hogares, levantarse
temprano y dejar de hacer otras actividades que el mundo realiza, para venir a adorar y permitirle al
Señor que se manifieste en sus vidas. Bienvenidos sean todos a la casa de nuestro Dios. El momento es propicio
para cantar el cantito de bienvenida mientras nos saludamos con un abrazo (elija uno de su preferencia).
Lectura bíblica
Presentador 2: Estamos viviendo en un mundo donde la complacencia propia y la adquisición de recursos materiales
son los objetivos principales y de esta manera se le resta importancia a lo que dice la Palabra de Dios.
Busquemos en nuestras Biblias el libro de Romanos 12:2 (leerlo en voz alta). Nuestro entendimiento es renovado
cuando leemos las Sagradas Escrituras, ya que nos muestra cuál es la voluntad del Señor para cada momento
de nuestras vidas.
Oración
Presentador 3: Muchos creen que hacer la voluntad de Dios es muy difícil, y poco agradable, y que es casi imposible
mantener la comunicación con Él. Otros creen que está tan ocupado con otros casos especiales que no
nos puede prestar atención. Pero veamos qué dice 1 Juan 5: 14, 15 al respecto. (Leerlo en voz alta.) Postrémonos
para comunicarnos con nuestro Dios y pedirle que nos bendiga conforme a su voluntad.
Presentador 3: Muchos creen que hacer la voluntad de Dios es muy difícil, y poco agradable, y que es casi imposible
mantener la comunicación con Él. Otros creen que está tan ocupado con otros casos especiales que no
nos puede prestar atención. Pero veamos qué dice 1 Juan 5: 14, 15 al respecto. (Leerlo en voz alta.) Postrémonos
para comunicarnos con nuestro Dios y pedirle que nos bendiga conforme a su voluntad.
Presentador 1: En una ocasión escuché a un predicador decir que habían tres tipos de personas que ofenden a
Dios: el primero es el que hace su voluntad en oposición abierta a la voluntad de Dios, el segundo es el que hace
su voluntad y piensa que está haciendo la de Dios y el tercero el que hace en parte la voluntad de Dios y le
agrega un poco de la suya. ¿Alguno de ustedes puede decirme cual personaje de la Biblia se relaciona con el
primer caso?
Himno
1 er participante (sale del público)
El primer caso me recuerda a Caín, él sabía que Dios había mandado que se sacrificara un cordero como un
medio para obtener perdón por sus pecados, ya que simbolizaba el sacrificio expiatorio de Jesús. En las Sagradas
Escrituras encontramos que Dios desde un principio ordena y describe de forma explícita todo lo concerniente
a su adoración para que lo hagamos conforme a su voluntad.
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68 • PROGRAMAS PARA LA ESCUELA SABÁTICA
Caín con su actitud demostró menosprecio por las instrucciones dadas por Dios. Él es un ejemplo perfecto de
una persona que hace su voluntad, desafiando abiertamente la autoridad divina. Y debemos tener cuidado de
que no actuemos como Caín, que confiando en nuestra propia sabiduría rechacemos las recomendaciones dadas
por Dios. Vamos puestos en pie a cantar el himno N° 245 (N° 260 del himnario antiguo).
Marcando el Rumbo
2do Participante (levantando la mano desde el público)
La segunda persona me recuerda al rey Saúl. Todavía me sorprende cuando leo en la Biblia que luego de haber
recibido la orden explícita por parte de Jehová: «Ve, pues, hiere a Amalee, destruye todo lo que tiene y no te
apiades de él; mata hombres, mujeres y niños, aun los de pecho, y vacas, ovejas, camellos y asnos» (1 Samuel
15: 3). La respuesta que Saúl da a al profeta fue (léalo textualmente en 1 Samuel 15:13-19), y saben hermanos él
estaba tan ciego, espiritualmente hablando, que miren la respuestas que él le dio a Samuel en el versículo 20.
Al leer esta historia me hace pensar que debemos cada día implorar la dirección divina para que podamos reconocer
sus designios. Este hombre fue un ungido de Dios, pero con el tiempo su relación con Dios se debilitó
hasta que ya no pudo comprender cuál era la voluntad de su Señor. Quiero compartir con ustedes un mensaje
que se encuentra en Marcando el Rumbo que trata de...
Parte especial
Presentador 2: Gracias hermano por tan valiosa aportación. 1 Tesalonicenses 5: 18 (leerlo en voz alta). Vamos a
dar gracias a Dios a través de la música especial.
Misión
Presentador 3: Me he quedado pensando en el tercer personaje. ¿Qué clase de persona es capaz de hacer la voluntad
de Dios a medias, y también poder hacer parte de la suya?
División de clases
3er Participante (se pone de pie desde el primer asiento)
Me gustaría que me den la oportunidad de expresarme. Creo que el mejor ejemplo es Balaam. A pesar de que
sabía que Israel era el pueblo escogido de Dios, recibió la visita de los representantes del rey de Moab, escuchó
su petición y los hospedó en su casa, para luego consultar a Jehová, cuando el Señor le prohibió que fuera con
ellos y mucho menos que maldijera el pueblo. Eso debió bastarle para que él les explicara que su petición estaba
en contra de la voluntad de Dios; sin embargo, se limitó a decir que Dios no quería que él fuera con ellos.
Elena de White nos dice: «El soborno de los regalos costosos y de la exaltación en perspectiva excitaron su codicia.
Ávidamente aceptó los tesoros ofrecidos, y luego, aunque profesando obedecer estrictamente a la voluntad
de Dios, trató de cumplir los deseos de Balac. Y aunque ya se le había comunicado la voluntad de Dios
en forma definitiva, rogó a los mensajeros que se quedaran, para que pudiese consultar otra vez a Dios, como
si el infinito fuera un hombre sujeto a la persuasión. No procuraba hacer la voluntad de Dios, sino que decidía
su conducta y luego se esforzaba por obtener la sanción del Señor» (Patriarcas y profetas, pp. 468, 470).
Presentador 3: Gracias por su participación hermano, la verdad es que estas historias están escritas para que
podamos aprender de ellas y sacar las mejores enseñanzas. Hacer la voluntad de Dios a medias, al igual que
las otras mencionadas anteriormente es una muestra de desobediencia. La Biblia es la guía que nos indica cuál
es la voluntad de Dios. En estos momentos vamos a quedar divididos en clases.
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Conclusión
Sábado 2 – La voluntad de Dios • 69
El salmista David al igual que muchos otros personajes, se regocijaba en hacer la voluntad de Dios, porque él
mantenía la ley de Dios, es decir su Palabra, en su corazón. Él dijo: «El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha
agradado, y tu Ley está en medio de mi corazón» (Salmo 40: 8). ¡Ojalá! y cada uno de nosotros al igual que el
rey David podamos encontrar deleite en hacer la voluntad de Dios.
Himno final
Nº 245 (N° 260 del himnario antiguo).
Oración final
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