Los favoritos del viejo lobo-BP - The Dump
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CAPITULO XI<br />
PÁJAROS SALVAJES Y PÁJAROS DOMÉSTICOS<br />
Precisamente ahora apenas puedo escucharme a mi mismo porque muchos amigos míos<br />
continuarán hablando sin siquiera parar para tomar aliento. Siguen así todo el día, de la<br />
mañana a la noche.<br />
No me puedo imaginar lo que sacan de tanta conversación, pero ahí están, y nunca<br />
paran.<br />
“¡Ca-caw, ca-caw, caw-ca!” es lo que dicen.<br />
Y debe haber mucho significado en ello, para mis amigos que son un montón de grajos<br />
sobre los árboles vecinos, y los grajos “nunca hablan sin caws”, ¿o no? ( es un juego de<br />
palabras: caw es graznar – N.d.T.)<br />
Precisamente ahora están construyendo sus nidos, y ese trabajo les lleva un montón de<br />
problemas.<br />
Sobre el suelo, bajo ellos, hay cientos de palos esparcidos, pero ellos no cogen esos para<br />
construir sus nidos. Ellos vuelan lejos hasta árboles distantes y les arrancan pequeñas<br />
ramitas verdes y las traen de regreso para hacer sus nidos.<br />
Hablando todo el día<br />
Es un trabajo terriblemente difícil empezar un nido en la copa de un árbol que se<br />
balancea al viento, y tu quieres un simple palito que llevarás en tu boca para colocarlo<br />
atravesado en la horquilla de una rama hasta que puedas conseguir más para apilarlos<br />
sobre él. Si ese palo se resbala y cae, como ocurre generalmente, el pobre grajo no baja<br />
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