Libro 8 - Paul-Timothy

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Preparación y Movilización – Libro 8
© 2004 Patterson y O´Connor
LA CREACION
Por orden del Padre, Jesucristo hizo los cielos y la tierra, por medio del Espíritu
Santo. Siendo Dios, Jesucristo existía siempre, aun antes de nacer como hombre.
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra.” Gen. 1:1.
“Y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.” Gen. 1:2.
“En El (Cristo) fueron creadas todas las cosas.” Col. 1:16.
LA ENCARNACIÓN DE CRISTO
Por orden del Padre, el Hijo fue concebido en María por medio del Espíritu Santo:
“El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra;
por lo cual también el santo ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios.” Luc. 1:35.
Hay un solo Dios. Por esto, todo lo que hace tiene que ser relacionado con las
tres personas inseparables de la Trinidad.
EL BAUTISMO DE JESUCRISTO
Así también las tres personas inseparables de la Trinidad se
manifestaron en el bautismo de Jesucristo.
Dios el Espíritu no entró en una paloma. La forma de paloma
fue una señal, para que los hombres percibieran lo invisible de
Dios. Dios usó señales para confirmar la palabra de su Hijo:
Juan 20:30-31.
EL SACRIFICIO ETERNO Y LA RESURRECCION
VIVIFICANTE
Dios el Hijo murió por el pecado, entonces se ofreció al Padre,
por medio del Espíritu Santo: “Cuánto más la sangre de Cristo,
el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios,
limpiará vuestras conciencias de obras muertas.” Heb. 9:14.
“. . . Fue declarado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la
resurrección de entre los muertos.” Rom. 1:4.