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Consagracion al Inmaculado Corazon de Maria (33 dias - Recursos ...

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PREPARACIÓN PARA LA CONSAGRACIÓN AL TRIUNFO DEL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA<br />

94<br />

TEORÍA DE LA VIDA MARIANA<br />

Obrar por María<br />

En el sistema Montfortiano <strong>de</strong> espiritu<strong>al</strong>idad esta expresión<br />

encierra tres i<strong>de</strong>as:<br />

1. Obrar por el impulso <strong>de</strong> María, en virtud <strong>de</strong> la gracia recibida por<br />

medio <strong>de</strong> María.<br />

2. Servirse <strong>de</strong> la mediación <strong>de</strong> la Virgen en toda acción y oración.<br />

3. Proponerse a la dulce Reina <strong>de</strong> los corazones como razón y móvil<br />

inspirador <strong>de</strong> todos los actos.<br />

En la primera acepción María es caud<strong>al</strong> espiritu<strong>al</strong> que impulsa nuestra<br />

vida.<br />

En la segunda es el medio <strong>de</strong> que nos servimos en todo.<br />

En la tercera es el motivo amoroso que nos impulsa a obrar.<br />

Admirable fecundidad la <strong>de</strong> esta sencilla frase: ¡POR MARIA!<br />

Prodigiosa eficacia la suya en or<strong>de</strong>n <strong>al</strong> progreso espiritu<strong>al</strong>. Aún<br />

siendo religiosas o sacerdotes necesitamos el acicate <strong>de</strong> un i<strong>de</strong><strong>al</strong> que<br />

nos fascine, nos arrastre y nos eleve sobre las pequeñeces <strong>de</strong> nuestra<br />

existencia, necesitamos <strong>de</strong> un i<strong>de</strong><strong>al</strong> que ilumine, consuele, transforme<br />

y eleve nuestra vida. Lo tenemos en esta sencilla frase: Por María. Una<br />

vida encuadrada en este marco <strong>de</strong> santidad, regulada por t<strong>al</strong> causa,<br />

ayudada por t<strong>al</strong> medio e impulsada por t<strong>al</strong> motivo se perfecciona<br />

in<strong>de</strong>fectiblemente, se transforma, se diviniza.<br />

El <strong>al</strong>ma que constituye a María causa y motivo <strong>de</strong> sus acciones<br />

forzosamente arroja <strong>de</strong> si otras causas y motivos que vician y adulteran<br />

nuestros actos; ¡fuera, pues, el amor propio la propia voluntad, la<br />

insubordinación y la terquedad! Las acciones resultan santas por la<br />

causa y por el impulso vigoroso que reciben.<br />

Quien para todo se v<strong>al</strong>ga <strong>de</strong> la mediación eficacísima <strong>de</strong> María,<br />

tiene asegurado el éxito. La Virgen es un medio que no f<strong>al</strong>ta jamás,<br />

camino que nunca yerra, lazo <strong>de</strong> unión que nunca f<strong>al</strong>ta. El <strong>al</strong>ma<br />

conocerá fracasos espiritu<strong>al</strong>es. Si la Virgen, como dice San Luis María,<br />

es el univers<strong>al</strong> suplemento, el <strong>al</strong>ma nada tiene que temer y todo pue<strong>de</strong><br />

esperar. Si María es la razón y motivo <strong>de</strong> sus actos, el <strong>al</strong>ma tiene ante<br />

los ojos un i<strong>de</strong><strong>al</strong> atrayente y po<strong>de</strong>roso y un móvil seductor y eficacísimo.

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