PERSONAE ESTILO DE VIDA Sol, Arena y Mar… ¡Ah! y… ¡Vino! Marzo, ¡mes mes de inicio de la primavera! CoinCoincide también con la climatología y los días de asueto de Semana Santa que muchos aprovechan para salir a visitar y disfrutar nuestras maravillosas playas mexicanas. Cuando hablamos de primavera y verano, en términos enológicos, solemos referirnos al estilo de vinos que, como sommeliers, asesores de nuestros consumidores, recomendamos y que, normalmente, estarán enfocados al consumo de vinos blancos, espumosos y rosados. A pesar del ya desgastado paradigma que aún escucho en conferencias y catas “el mejor vino blanco es un tinto”, hoy por hoy, los blancos han venido ganando terreno, ya que son ideales para la temporada de calor, porque la temperatura de servicio, junto con la acidez de las cepas blancas, como chardonnay, sauvignon blanc, albariño, verdejo, chenin blanc, viognier, etc., contribuyen proporcionarnos una sensación de frescura. Un vino blanco tiene particulares e interesantes características de concentración de aromas y de sabores, en el cual prevalecen los aromas primarios (aquellos que proceden de las uvas) y a nivel de sabor, la acidez es una de sus mayores cualidades. 1 2 P E R S O N A E Presenta calidad en sus procesos de elaboración al igual que los tintos. Por lo tanto, también hay calidad en sus resultados. Existe una gran variedad de estilos: secos o avocados; varietales o coupages; jóvenes o con crianza; de consumo inmediato o con posibilidad de guarda; cosechas tardías o botritizados, etc. Tienen personalidad específica, y Por último, contienen Propiedades Salutíferas que comparten con el vino tinto. En este último punto, un estudio realizado en el marco del Proyecto Ciencia, Vino y Salud, de la Universidad Católica de Chile, cuyos resultados se presentaron en el Congreso Vinsalud 2002, ha comprobado que el consumo moderado de vino blanco ejerce efectos hipotensores. Los resultados de este estudio coinciden con los de la Universidad de California, que comprobó los beneficios del consumo de vino blanco en la mejora de la función respiratoria por medio de la dilatación bronquial. Otro de los datos obtenidos en este estudio señaló que el vino blanco permite aumentar el colesterol bueno, principalmente por los antioxidantes provenientes de la pulpa de la uva, incremento que fue menos marcado con el consumo de fruta y verdura. Por otra parte, el vino blanco es siempre una excelente opción para consumirse en primavera y verano, ya que la acidez característica es refrescante y la temperatura de servicio, entre los 5º y los 12º C., según el tipo de vino. Es ideal para la temporada de calor ya sea para consumirlo como aperitivo, maridando los diferentes tiempos de una comida o cena, o bien, incluso como digestivo, recordando que existen las opciones de vino espumoso (finalmente un blanco) o los vinos de postre o de hielo. En nuestra sección de vino recomiendo el Vino Chivite Finca de Villaturerta 100% Chardonnay de Navarra y el Rosado Primavera de L.A. Cetto 100% Cabernet Sauvignon, como excelentes opciones. Y, en materia de gastronomía, una excelente alternativa para nuestros vinos es el Restaurante Decrab. ¡Salud! Pilar Meré (*) www.pilarmere.com Consultora y periodista enogastronómica. Directora General de Pilar Meré, Comunicación Integral Especializada: Wine, Food & Lifestyle. Directora Comercial de <strong>Revista</strong> <strong>Personae</strong>.
COLABORADOR INVITADO P E R S O N A E 1 3