i ,) AMEP NA. Cuarta Epoca. No. 352 Noviembre-Diciembre 1989
i ,) AMEP NA. Cuarta Epoca. No. 352 Noviembre-Diciembre 1989
i ,) AMEP NA. Cuarta Epoca. No. 352 Noviembre-Diciembre 1989
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
y aunque sé que en su busca me deshago,<br />
otra vez lo persigo y lo reclamo.<br />
Bajo las contorsiones del gigante,<br />
aúllo a veces -oh enemigo blancoy<br />
dentro de mí mismo estoy cantando.<br />
¡Oh sombra musculosa, oh nube grave!<br />
Derrótame una vez para que caiga,<br />
o de una vez ROMPEME EL PECHO Y<br />
ABREME<br />
entre los dos reflejos de tu ESPADA.<br />
MORIR<br />
En el más cariñoso lecho<br />
ME SIENTO MORIR,<br />
cunado en la naturaleza,<br />
toda mansa como jardín.<br />
Muelle, EL ALA DEL ANGEL BLANCO<br />
- ¡qué piedad, qué ternura al fin!-,<br />
primera vez roza mis hombros<br />
como el arco roza el violín.<br />
Esta frescura de saber<br />
que también nos vamos de aquí,<br />
¡qué novedad en la conciencia,<br />
qué persuasión blanda y sutil!<br />
¡Qué conformidad, qué tersura,<br />
qué dejarse ir!<br />
SUS FILOS Y PUNTAS los actos<br />
redondean al llegar a mí.<br />
Ni la SANGRIA del estoico<br />
que se amenguaba sin sentir,<br />
ni el ASPID que apenas besaba<br />
el botón de ansioso carmín:<br />
Lento declive, y tan seguro<br />
-hinchado de síque<br />
ni da lugar a lamentos<br />
ni a temores, ni<br />
siquiera al vago cosquilleo<br />
de ese minuto por venir<br />
en que se ha de abrir a mis ojos<br />
algo que se tiene que abrir.<br />
¡Qué natural lo que se acaba<br />
cuando ya se acaba por sí!<br />
Voy con la razón satisfecha,<br />
dormido, contento, feliz.<br />
¡Y yo que viví tantos años,<br />
tantos años como perdí,<br />
sin dar oídos a la ESFINGE<br />
que susurraba junto a mí!<br />
Yo no sabía que la vida<br />
se reclina y se tiene así<br />
en esa gula de la nada<br />
que es su diván, es su cojín.<br />
UNDECIMILIA<br />
Atadas atrás las manos<br />
y dobladas las rodillas,<br />
el CUELLO TRONCHADO alarga<br />
la virgen Undecimilia.<br />
LA CABEZA REBOTABA,<br />
libre ya de las fatigas<br />
de administrar las contiendas<br />
de los sentidos en liza,<br />
y el gozo de verse libre<br />
NORTE/17