15.05.2013 Views

25 años de amor y compromiso - Cash Luna

25 años de amor y compromiso - Cash Luna

25 años de amor y compromiso - Cash Luna

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Ministerios <strong>Cash</strong> <strong>Luna</strong><br />

http://www.cashluna.org<br />

<strong>25</strong> <strong>años</strong> <strong>de</strong> <strong>amor</strong> y <strong>compromiso</strong><br />

Sonia y yo hemos cumplido <strong>25</strong> <strong>años</strong> <strong>de</strong> matrimonio y damos gracias a Dios por ello ya que han sido <strong>años</strong><br />

llenos <strong>de</strong> retos, satisfacciones y <strong>amor</strong> sin límites. Por eso, ahora <strong>de</strong>seamos compartir algunas <strong>de</strong><br />

nuestras experiencias.<br />

Mejor dos que uno<br />

Eclesiastés 4: 9-12dice: Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga <strong>de</strong> su trabajo. Porque si<br />

cayeren, el uno levantará a su compañero; pero !!ay <strong>de</strong>l solo! que cuando cayere, no habrá segundo que<br />

lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno<br />

solo? Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón <strong>de</strong> tres dobleces no se rompe<br />

pronto.<br />

Ambos estuvimos <strong>de</strong> acuerdo en que Jesús sería parte <strong>de</strong> nuestra relación. Él es el tercer doblez que<br />

fortalece nuestro cordón. Cuando éramos novios, hicimos un pacto: si alguno <strong>de</strong> los dos quería hacerle<br />

algo al otro, primero <strong>de</strong>bía hacerlo a Jesús. Esta condición nos hizo tomar conciencia <strong>de</strong> lo cuidadosos<br />

que <strong>de</strong>bemos ser en nuestro trato. Nunca hemos recibido un curso matrimonial, pero nuestro principio<br />

inquebrantable es tenerle a Él como centro <strong>de</strong> la relación. Creemos que si somos buenos cristianos, la<br />

vida espiritual <strong>de</strong> la familia será la sumatoria <strong>de</strong> la vida espiritual <strong>de</strong> cada uno. Dos siempre son mejor<br />

que uno.<br />

Como esposa, me emociono al ver el vi<strong>de</strong>o <strong>de</strong> nuestro <strong>compromiso</strong> y boda. Durante mucho tiempo<br />

pensamos que no existía tal vi<strong>de</strong>o pero lo hemos <strong>de</strong>scubierto y es conmovedor ver nuestros rostros<br />

en<strong>amor</strong>ados. Ahora comprendo porqué nuestros padres nos permitieron casarnos tan jóvenes.<br />

Realmente el <strong>amor</strong> se nos notaba y al verlo ahora, puedo <strong>de</strong>cir que amo a <strong>Cash</strong> como en ese tiempo,<br />

como el día que me pidió en matrimonio. A veces las personas que sienten mal por amar así, pero yo les<br />

digo que lo disfruten porque ese <strong>amor</strong> sobrenatural solamente pue<strong>de</strong> venir <strong>de</strong>l Señor, ya que por<br />

nuestros medios humanos es imposible. Yo le doy gracias a Dios por el intenso y genuino <strong>amor</strong> que<br />

compartimos con mi esposo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace <strong>25</strong> <strong>años</strong>.<br />

Escuchar a Sonia hace que la ame aún más y me comprometa con ella, como antes y para siempre.<br />

Cuando se tiene una convicción, la única forma <strong>de</strong> <strong>de</strong>mostrarlo es hacer un <strong>compromiso</strong>. Si estás<br />

convencido que tu novia es la mujer para ti, busca comprometerte. Soy fiel creyente <strong>de</strong> la convicción y el<br />

carácter. Sonia y yo hicimos el <strong>compromiso</strong> <strong>de</strong> amarnos para toda la vida, por eso nos casamos y hemos<br />

prevalecido a pesar <strong>de</strong> las dificulta<strong>de</strong>s y diferencia naturales <strong>de</strong>l matrimonio. Mantener el <strong>compromiso</strong><br />

<strong>de</strong>sarrolla el carácter necesario para avivar el <strong>amor</strong> y sostener el romance.<br />

Nuestros hijos dicen que admiran la forma cómo nos <strong>de</strong>cimos piropos y hemos aprendido a hacer<br />

muchas cosas juntos. Yo siempre encuentro la oportunidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>cirle lo hermosa que se ve, ¡aunque se<br />

acabe <strong>de</strong> levantar por la mañana! Ella también me halaga cuando me dice que le encanta cómo me visto<br />

y me <strong>de</strong>svisto, lo cuidadoso que soy con mi presentación personal. Ambos reforzamos lo bueno <strong>de</strong> cada<br />

uno.<br />

Es verdad, siendo esposa <strong>de</strong> <strong>Cash</strong>, admiro su elegancia y he aprendido a compartir con él muchos <strong>de</strong><br />

sus pasatiempos e intereses. Incluso acepté el reto <strong>de</strong> apren<strong>de</strong>r a bucear y me siento orgullosa <strong>de</strong><br />

haberlo logrado. Lo mismo sucedió con el golf porque me interesa acompañarlo y compartir el mayor<br />

tiempo posible con él, ¡aunque en mi intento, incluso he <strong>de</strong>rribado algunas aves!<br />

Así es, Sonia ha sabido ser una excelente compañera y <strong>de</strong> paso, cazadora. Es la mejor anfitriona en<br />

nuestra casa don<strong>de</strong> siempre hay gente a quienes atien<strong>de</strong> con cariño. Por eso, ahora que me pidió una<br />

refrigeradora más gran<strong>de</strong> no se la negué, porque sé que siempre recibimos invitados. Ella sabe <strong>de</strong><br />

basquetbol, fútbol americano y golf, es una esposa <strong>de</strong>dicada, atenta y nos divertimos juntos.<br />

Antes <strong>de</strong> conocer al Señor mis noviazgos no eran muy largos y siendo novio <strong>de</strong> Sonia, mi mamá, que me


conoce muy bien, me dijo: “Ya duraste con esa joven, ¿vas a jugar con ella o te casarás?” Entonces me<br />

<strong>de</strong>cidí y le respondí: “Tienes razón, me casaré”. Luego me confesó que nunca pensó que le respon<strong>de</strong>ría<br />

así. Yo digo que no me casé por <strong>amor</strong> sino por fe porque el Señor nos dijo que <strong>de</strong>bíamos hacerlo para<br />

aten<strong>de</strong>r Su llamado. Yo ya la amaba, pero nos casamos en ese momento por obediencia. ¿Verdad<br />

Sonia?<br />

Sí, así fue. Recuerdo que en esa época yo anhelaba servir al Señor y no quería tener novio, pero cuando<br />

apareció este chinito se me olvidó todo lo que dije. Cuando estábamos recién casados, él inició una<br />

empresa en la que invirtió mucho dinero. Yo, como su esposa, siempre intenté ser su apoyo y en esa<br />

oportunidad, estudié para ser asistente <strong>de</strong> gerencia. Luego, al <strong>de</strong>dicarse a los seguros, yo le ayudaba<br />

con los archivos y papelería. Y al tener la boutique, yo hacía los arreglos a la ropa.<br />

Exactamente, Sonia siempre ha sido ayuda idónea. Recuerdo que al casarnos realmente no teníamos<br />

mucho dinero. Yo había invertido en un negocio y trabajaba para pagar esa inversión. Sin embargo, el<br />

Señor proveyó generosamente porque le obe<strong>de</strong>cimos. Ahora, las parejas <strong>de</strong>sean tener todo para casarse<br />

y es bueno planificar y prepararse, pero el factor económico no es lo más importante ya que cuando les<br />

falte algo o afronten una crisis, buscarán separarse. Debe unirlos el <strong>amor</strong> y <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> construir una vida<br />

juntos, no la situación económica.<br />

Esposas sujetas y esposos sabios<br />

1 pedro 3:1 aconseja a las esposas: Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para<br />

que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta <strong>de</strong> sus esposas<br />

Yo, siendo su esposa, he aprendido a ser una mujer sujeta que le sirve y se preocupa por él y por<br />

nuestro. Sé que esa es mi responsabilidad y lo hago con <strong>amor</strong> porque mi <strong>compromiso</strong> es mostrar una<br />

buena conducta para ganarme a <strong>Cash</strong> y dar un buen ejemplo que gane personas para el Reino.<br />

1 pedro 3:7 aconseja a los esposos: Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando<br />

honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a cohere<strong>de</strong>ras <strong>de</strong> la gracia <strong>de</strong> la vida, para que vuestras<br />

oraciones no tengan estorbo.<br />

A la vez, <strong>Cash</strong> ha sido un esposo sabio y <strong>amor</strong>oso que me motiva a sujetarme espontáneamente. Le<br />

agra<strong>de</strong>zco mucho su paciencia porque no es fácil compren<strong>de</strong>r a las esposas. ¡Muchas veces ni yo sé lo<br />

que siento y me suce<strong>de</strong>! Pero él me ha honrado como a vaso frágil, ha vivido sabiamente en momentos<br />

cuando ni yo me aguanto.<br />

Matrimonio correcto<br />

Recuer<strong>de</strong>n que la perfección no existe. No hay matrimonios perfectos sino correctos. Incluso en las<br />

discusiones, busquen respetarse y <strong>de</strong>cirse las cosas <strong>de</strong> la mejor forma posible. Siempre habrán<br />

momentos <strong>de</strong> tensión pero el respeto <strong>de</strong>be prevalecer. En nuestro hogar, muchas veces nos hemos<br />

pedido perdón por <strong>de</strong>cirnos las cosas <strong>de</strong> la forma menos apropiada y hemos aprendido <strong>de</strong> nuestros<br />

errores.<br />

Los dos, Sonia y yo, somos perfeccionistas. Yo creí que nunca me casaría porque tenía un carácter<br />

<strong>de</strong>licado. Si no memorizaba correctamente una lección <strong>de</strong>l colegio, ¡me arrancaba el pelo! Pero al recibir<br />

al Señor empecé a someterme al Espíritu Santo. De esa forma aprendimos que lo perfecto no da la<br />

felicidad. Conozco parejas que tiene hogares impecables pero no son felices y por el contrario, conozco<br />

familias don<strong>de</strong> hay incluso un poco <strong>de</strong> <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>n en la casa, pero hay armonía y alegría.<br />

Aprendamos a i<strong>de</strong>ntificar las cosas que realmente afectan nuestro matrimonio y las que no. Hay <strong>de</strong>fectos<br />

que ponen en peligro nuestra relación pero hay otros que pue<strong>de</strong>n pasar <strong>de</strong>sapercibidos con un poco <strong>de</strong><br />

tolerancia. En nuestra relación sucedió. Yo soy or<strong>de</strong>nado con ciertas cosas, aunque no lo soy con mis<br />

papeles y bosquejos <strong>de</strong> prédicas. También soy algo in<strong>de</strong>ciso y <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nado con mis corbatas. Si Sonia<br />

se pusiera histérica por eso, no estaríamos cumpliendo <strong>25</strong> <strong>años</strong> <strong>de</strong> matrimonio, pero ha aprendido a ser<br />

paciente y se lo agra<strong>de</strong>zco. Nos hemos relajado y bromeamos al respecto.<br />

Ella por ejemplo, es algo distraída. Cierta vez iba a subir a nuestros hijos al bus equivocado, <strong>de</strong>l mismo<br />

colegio, pero diferente número. En otra ocasión metió las llaves <strong>de</strong>l carro en el congelador junto con unos


helados que compró y aseguraba que yo no se las había dado. Las llaves aparecieron dos semanas<br />

<strong>de</strong>spués. En otra oportunidad, ella llegó muy afligida porque <strong>de</strong>cía que había chocado mi carro, pero al<br />

revisarlo, el golpe que tenía era uno que yo le había dado hace tiempo. Curiosamente, ese mismo día,<br />

me chocaron su camioneta y ¡fui yo quien tuvo que pedir perdón! Sin embargo no hemos permitido que<br />

esas cosas nos roben la felicidad, al contrario, le agregan un poco más <strong>de</strong> sabor a la relación.<br />

Es mejor no molestarse tanto por las cosas. Yo perdí mi argolla <strong>de</strong> matrimonio y me sorprendió que ella<br />

no me hiciera un drama. Muchas veces no estamos juntos para celebrar nuestra fechas importantes,<br />

aniversarios, cumple<strong>años</strong>, etc. Pero nos compren<strong>de</strong>mos y aprendimos a buscar el momento para<br />

celebrar en familia. No hemos hecho una lista <strong>de</strong> “lo que no me gusta <strong>de</strong> ti”, sino <strong>de</strong> “lo que puedo<br />

arreglar en mi para no molestarte”. Con <strong>amor</strong> y un poco <strong>de</strong> humor, po<strong>de</strong>mos salir a<strong>de</strong>lante.<br />

El <strong>amor</strong> prevalece<br />

Cantares 8:7 expresa: Las muchas aguas no podrán apagar el <strong>amor</strong>, ni lo ahogarán los ríos. ? Si diese el<br />

hombre todos los bienes <strong>de</strong> su casa por este <strong>amor</strong>, <strong>de</strong> cierto lo menospreciarían.<br />

Ese es el verso que escribimos en nuestra invitación <strong>de</strong> bodas y ha sido una profecía <strong>de</strong> vida<br />

matrimonial. No hemos podido evitar que las aguas nos alcancen, es <strong>de</strong>cir las dificulta<strong>de</strong>s, pero sí<br />

hemos evitado ahogarnos en ellas.<br />

No somos perfectos, tenemos muchos <strong>de</strong>fectos, pero nos amamos y aprendimos a vivir <strong>de</strong> la mejor<br />

forma. Ama a tu pareja como es, acéptala y aprendan a disfrutar la vida juntos. Nunca le pedí a Dios una<br />

mujer como la que me dio, Sonia es un regalo por el que doy gracias todos los días porque Él sabía qué<br />

tipo <strong>de</strong> esposa necesitaba. Haz tú lo mismo y agradécele por tu pareja. Confía porque tu hogar se<br />

llenará <strong>de</strong> perdón, tolerancia y bendición si entregas tu matrimonio en las manos <strong>de</strong>l Señor para que lo<br />

haga crecer y sea reflejo <strong>de</strong> Su <strong>amor</strong>.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!