17.05.2013 Views

Padres tan machos como mamá - Cash Luna

Padres tan machos como mamá - Cash Luna

Padres tan machos como mamá - Cash Luna

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Ministerios <strong>Cash</strong> <strong>Luna</strong><br />

http://www.cashluna.org<br />

<strong>Padres</strong> <strong>tan</strong> <strong>machos</strong> <strong>como</strong> <strong>mamá</strong><br />

El mundo ha cambiado, ahora todo es diferente, especialmente en la familia. Aunque algo que no ha<br />

cambiado es el protagonismo de la madre en la vida de los hijos y dentro de la sociedad. Por ejemplo,<br />

para cualquier fiesta o evento, pareciera que nos bombardean con la presión por agradar a <strong>mamá</strong> para<br />

navidad, para el día del cariño, para el día de las madres, en fin, todo momento es propicio para recordar<br />

a <strong>mamá</strong> y su amor, pero ¿qué pasa con papá? ¿Acaso no es impor<strong>tan</strong>te? ¡Claro que sí! Aunque es<br />

innegable que la madre lleva ventaja, ya que al nacer su bebé, se ha relacionado íntimamente con él<br />

durante 9 meses. Y muchas veces lo papás, frente al recién nacido, no sabemos qué hacer o qué decir, y<br />

terminamos por hacer mil muecas que a los ojos de otros pueden verse divertidas. Pero también nos<br />

entregamos, especialmente en la lucha por proveer a nuestros hijos.<br />

Como les explicaba, ahora las cosas han cambiado. Antes aprendíamos a honrar a nuestros padres.<br />

Recuerdo que por la tarde, cuando papá regresaba de trabajar, todos corríamos a saludarlo, ni el perro<br />

se quedaba atrás, al contrario, creo que en casa un par de perros se murieron del corazón por la alegría<br />

que les provocaba ver a papá o si no se morían, ¡se les recalentaba la cola de <strong>tan</strong>to moverla! Ahora,<br />

cuando papá entra a casa, solo lo recibe el silencio, ni el perro se le acerca porque está entretenido junto<br />

a los niños que juegan en la computadora. Y si el papá se acerca donde están sus hijos, ellos, con los<br />

ojos pegados a la pantalla y los dedos en los controles, le dicen: “Espera papá, ya casi estoy pasando al<br />

otro mundo”. A lo que el padre responde: “¡Al otro mundo te enviaré si no me saludas, caramba!”<br />

Tanto han cambiado las cosas que la tecnología atropella a los padres. Ahora, si le regalas un celular a tu<br />

papá, él te dirá que te lo vendieron dañado porque no tiene botones y puede que te lo devuelva roto<br />

porque de pronto lo vio vibrar solo y le dio de escobazos pensando liberarlo de algún espíritu inmundo. A<br />

pesar de todo, los padres intentamos ponernos al día para comprender a nuestros hijos, porque ser papá<br />

es un trabajo que no tiene jubilación. A veces me aterra ver la imagen de padre que nos vende la<br />

publicidad: un hombre fuerte y lleno de vitalidad, capaz de llevar en hombros a su hija de más o menos 10<br />

años, tomar con la mano derecha a otro de sus hijos y con la mano izquierda tomar a su esposa, al<br />

tiempo que corren atravesando un prado de girasoles. Al verlo, me digo: “Ese hombre tiene columna<br />

vertebral de hierro, porque la otra noche intenté llevar a mi hija dormida a su cama y luego de medio<br />

metro, ¡ella tuvo que cargarme a mi!”. Así que realmente no somos siempre <strong>tan</strong> fuertes <strong>como</strong> se ve en los<br />

anuncios de televisión. Cometemos errores y aprendemos con el tiempo a mejorar. Pero también<br />

envejecemos y nuestro humor cambia. Seguramente nos volvemos irritables y difíciles por las cargas de<br />

la vida, sin embargo, necesitamos comprensión y cariño.<br />

Pocos logran darse cuenta del enorme esfuerzo que hace un padre por sostener una familia. Esta tarea<br />

es realmente difícil y la hacemos sin esperar nada a cambio, aunque el agradecimiento de los hijos<br />

nunca sobra y cae muy bien. Incluso, La Palabra dice que honrar a los padres es garantía para que a los<br />

hijos les vaya bien en la vida. Algunas familias deberían revisar su situación porque la falta de honra<br />

podría ser la razón por la cual no fructifican los esfuerzos por superar las dificultades financieras. Revisa<br />

la relación con tus padres y hónralos si quieres te vaya bien. La Biblia no dice que se honre a los padres<br />

que lo merecen, dice que los honres y punto. Si tu padre fue un vago, irresponsable y borracho, él tendrá<br />

que dar cuentas de sus actos, pero tú debes obedecer al Señor y honrar a tu padre, porque también<br />

darás cuentas de tus actos y decisiones.<br />

El mal se vence con el bien, en cualquier relación, especialmente en la relación con tus padres.<br />

Devuelve siempre amor y afecto, nunca digas algo negativo de tus padres porque tú también serás<br />

juzgado y lo mejor es que seas identificado <strong>como</strong> alguien que dio amor a pesar de todo y sin restricciones.<br />

El lugar más triste sobre el planeta son los funerales y los cementerios, no por la persona que muere,<br />

sino por quien se queda y se lamenta porque tiene una deuda de cariño que no podrá pagar. El tiempo es<br />

inexorable, lo que no dijiste y lo que no compartiste con tu padre será algo que no podrás recuperar. Lo<br />

mejor es expresar en vida lo que sea necesario, para que al final, puedas decir: “Papá te extraño, pero<br />

guardo hermosos recuerdos de los momentos que pasamos juntos, nada me debes y nada te debo<br />

porque te amé y honré hasta el último momento de tu vida”. Entre los cristianos está prohibido tener


deudas de amor con los padres.<br />

Cuando somos padres, asumimos un compromiso que no termina ni siquiera con la muerte, porque<br />

nuestra imagen perdura por generaciones. Por eso, y <strong>como</strong> padre de familia, motivo a los varones a<br />

esforzarse por ser dignos ejemplos para los nietos de los nietos de sus hijos. Pidamos al Padre por<br />

excelencia que nos otorgue sabiduría, fuerza y amor para enfrentar nuestros retos y responsabilidades<br />

con los hijos que nos ha regalado.<br />

A los hijos les aconsejo que no se queden con el recuerdo de las lágrimas y los regaños de papá, mejor<br />

guarden en su corazón la ternura y el agradecimiento que ustedes les regalaron a ellos, incluso por<br />

aquello que nunca recibieron. Honra a tu padre con todo tu ser, tal <strong>como</strong> Jesús honró al Suyo. Además,<br />

corre al encuentro de tu Padre celestial quien te dice: “Eres Mi hijo amado, Yo te espero con los brazos<br />

abiertos”.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!