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Historia: Dr. Ramón Carrillo / Médicos argentinos ... - Revista Ambo

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nº 2 - año 1 - diciembre 2009<br />

<strong>Historia</strong>: <strong>Dr</strong>. <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong> / <strong>Médicos</strong> <strong>argentinos</strong><br />

por el mundo / Visitamos los hospitales Garrahan y<br />

Pirovano / Liniers / Agenda de congresos y eventos


Editorial<br />

“Mirar el río hecho de tiempo y agua<br />

y recordar que el tiempo es otro río.<br />

Saber que nos perdemos como el río<br />

y que los rostros pasan como el agua.”<br />

J. L. Borges<br />

El hombre vive inclinado hacia el futuro. Indiferente a su finito tiempo, sueña y desea que<br />

sus actos perduren en el tiempo: trascender sus años, sus meses, sus días en una cósmica<br />

rebeldía a las inexorables páginas de su calendario personal.<br />

Kalendae era el primer día del mes, momento en el cual los romanos debían pagar las<br />

cuentas. Los primeros almanaques fueron calendarios que recordaban fechas festivas religiosas.<br />

Al-manakh, palabra árabe, significa parada en un viaje.<br />

Diciembre es nuestro al-manakh, es el remanso breve a un año que se ha ido a raudales.<br />

Detenerse en esta fecha y contemplar, con más o menos asombro, todo lo transcurrido.<br />

El inicio de la vida profesional, enfrentando los miedos e inseguridades hasta advertirse,<br />

de pronto, nadando como uno más en la corriente: con desafíos, renuncias y un perpetuo<br />

cansancio.<br />

Es un buen momento para recordar, también, aquellas vidas en las cuales nos hemos ido<br />

fraguando. Aquellos hombres que han inspirado nuestras decisiones, esas vidas que hemos<br />

intentado emular.<br />

Ocasión para tantear nuestra mochilita diaria para descubrir si aún se encuentra en ella<br />

eso otro que amamos, esa pasión a la que le hemos arrebatado el tiempo y dedicación:<br />

sean libros, amigos, o demás formas de artística felicidad.<br />

De partidas también está colmado el año, lugar frecuente en la vida profesional: un nuevo<br />

hospital, renovados compañeros, otra especialidad, otro país, otra cultura. Cada partida<br />

tiene su precio, y la suma total también se alza en la copita de despedida del año.<br />

Un humilde recuerdo al padre de la salud pública, <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong>. Quien abandonó su<br />

promisoria carrera quirúrgica para dedicarse a la construcción de una salud más equitativa.<br />

Estandarte de los avances sociales, infatigable, inefable, destinado a trascender sus días: a<br />

reflejarse por centurias en su legado. El mismo que muere exiliado, calumniado, separado<br />

de su familia, sin trabajo y en la pobreza de Belém do Pará a días de Navidad.<br />

Les deseamos que sus kalendae los encuentren erguidos y gozosos de los precios que<br />

han de abonar a cambio de la profesión elegida. Felices Fiestas.


Índice<br />

4<br />

8<br />

14<br />

18<br />

22<br />

Resisten<br />

Espacio de expresión médica<br />

<strong>Dr</strong>. <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong><br />

Primer Ministro de Salud<br />

de la Nación<br />

Expresión AMBO<br />

Paredes que hablan<br />

OUTSIDE<br />

<strong>Dr</strong>. Santiago Zuccardi<br />

Entre salas y pasillos<br />

Hospital <strong>Dr</strong>. I. Pirovano<br />

Staff<br />

Contacto:<br />

info@revistaambo.com<br />

Dirección:<br />

Lic. Pablo Aragone<br />

Lic. Gonzalo Aragone<br />

Comercial:<br />

Lic. Gonzalo Aragone<br />

Desarrollo de Contenidos:<br />

Lic. Pablo Aragone<br />

<strong>Dr</strong>. Mario Díaz<br />

Diseño Gráfico:<br />

Mariana Tavella<br />

<strong>Médicos</strong> por el mundo<br />

Hoy: España<br />

Mundo Macanudo<br />

Entrevista a Liniers<br />

10 grandes<br />

descubrimientos<br />

Películas y pandemias<br />

Eventos y congresos<br />

Bonus<br />

Humor<br />

Corrección de Textos:<br />

María José Verna<br />

Colaboraciones:<br />

<strong>Dr</strong>. Jorge Albin<br />

<strong>Dr</strong>a. Ana Cirio<br />

Agustín Shaw de Estrada<br />

Agradecimientos:<br />

<strong>Dr</strong>. Santiago Zuccardi<br />

F. Daniel Barrios<br />

<strong>Dr</strong>. Ignacio Hernández<br />

<strong>Dr</strong>. Martín Mesa<br />

Las opiniones vertidas en esta revista son de exclusiva responsabilidad de sus emisores y no representan necesariamente la<br />

opinión de la revista AMBO. Queda prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos de la presente publicación,<br />

por cualquier medio, sin la expresa autorización de sus propietarios. <strong>Revista</strong> AMBO es propiedad de Gonzalo Aragone, Pablo<br />

Aragone y Lucía Eugenio Heguy<br />

30<br />

38<br />

46<br />

52<br />

58<br />

60


4 5<br />

por Ana Cirio<br />

R1 Pediatría<br />

Hospital Garrahan<br />

Resisten<br />

Espacio de<br />

expresión médica<br />

“Hace apenas seis meses que empezamos y, sin embargo, parece que<br />

fue hace mucho más, aunque, por momentos, nos sorprendemos de<br />

cómo cambiaron tan rápidamente nuestras vidas”.<br />

En junio de 2009 (epidemia de gripe<br />

A), fue nuestro primer día en la residencia,<br />

y estábamos en el pase de la guardia,<br />

por donde me tocó rotar los primeros<br />

tres meses. Los médicos anotaban,<br />

en su hoja de pase, los datos de los millones<br />

de pacientes internados, y yo no<br />

entendía cómo hacían para escribir tanto,<br />

tan rápido y en un espacio tan chiquito<br />

de papel. Después del pase, vino el momento<br />

cultural: unos minutos para que,<br />

cada día, alguno contara sobre un tema<br />

de interés (como leer una historia, escuchar<br />

una canción) o, simplemente, un<br />

tiempo para conocernos. Y después de<br />

eso, a trabajar.<br />

Los primeros días fueron una mezcla de<br />

felicidad, ansiedad y mucha desorientación:<br />

desde no saber cómo pedir un examen<br />

de laboratorio hasta no entender<br />

cómo hacía el residente superior para<br />

acordarse vida y obra de cada paciente,<br />

mientras que yo no podía acordarme ni<br />

de las caras. Y ni hablar de tener que aspirarle<br />

las secreciones a un bebé y pedirle<br />

con vergüenza, y casi disculpándome, a<br />

una enfermera que me ayudara.<br />

De a poco, el hospital en el que, al principio,<br />

estábamos como perdidos, se<br />

va transformando en un lugar del cual<br />

nos sentimos parte. Ahora saludamos a<br />

Hugo, en el comedor, por su nombre;<br />

a muchas enfermeras con un beso, o a<br />

los médicos con más confianza, y a veces<br />

con complicidad. Eso hace que nos<br />

vayamos encariñando con este trabajo.<br />

Los jefes de residentes nos acompañan y<br />

aconsejan en todo, y eso es muy valioso<br />

en esta etapa.<br />

Lo que a mí me está costando más es<br />

"De a poco, el hospital<br />

en el que, al principio,<br />

estábamos como<br />

perdidos, se va<br />

transformando en un<br />

lugar del cual nos<br />

sentimos parte".


6<br />

Resisten<br />

Espacio de expresión médica<br />

7<br />

adaptarme al sacrificio que implica una residencia,<br />

estar menos tiempo en casa, y<br />

con pocas fuerzas para dedicarle a otras<br />

cosas que me gustan. En las guardias, a<br />

veces hay gente esperando durante horas<br />

para ser atendida, cansada de esperar. Y<br />

nosotros, yendo y viniendo, con los pies<br />

hinchados, y pidiendo a gritos una cama<br />

para dormir.<br />

Igualmente, aunque el ritmo es cansador,<br />

estoy muy contenta. En el hospital nos<br />

recibieron muy bien el primer día, y eso<br />

no cambió hasta hoy. Uno de mis miedos<br />

era que, por ser un hospital tan grande,<br />

se perdiera el trato personal entre todos.<br />

Pero, por suerte, encontramos personas<br />

que nos escuchan con atención, nos tratan<br />

de igual a igual, con predisposición<br />

para enseñarnos y acompañarnos, y para<br />

reírse con nosotros.<br />

Lo más lindo de todo es que lo que hay<br />

de fondo es el servicio. Cada uno, desde<br />

donde puede: trabajando en una reanimación<br />

o llevando una muestra al laboratorio;<br />

cada uno, con sus años de experiencia<br />

o recién empezando, trabaja para<br />

ayudar a alguien. En esa ayuda, se aprende<br />

a trabajar en equipo, a colaborar entre<br />

residentes, o a ver al paciente como<br />

una persona, en una familia que necesita<br />

no solamente intervención, sino también<br />

contención.<br />

Y los pacientes pediátricos son un mundo<br />

aparte. Tienen sus propios códigos,<br />

son transparentes a la hora de transmitir<br />

que están contentos o enojados. Tienen<br />

un lenguaje diferente, y es un trabajo<br />

llegar a ellos y ganarse su confianza. Un<br />

movimiento en falso mientras auscultás a<br />

un bebé, y puede ser el comienzo de un<br />

llanto que no te deja escuchar nada más.<br />

Pero, otras veces, pasa lo contrario: te<br />

sonríen, juegan con tu estetoscopio o te<br />

saludan con un beso.<br />

Todavía queda muchísimo por vivir, aprender<br />

y equivocarnos en estos cuatro años<br />

de sacrificio, de dejar muchas cosas de<br />

lado, pero de ganar en aprendizaje sobre<br />

Medicina y sobre relaciones humanas.


por F. Daniel Barrios<br />

postasur@gmail.com<br />

8<br />

9<br />

<strong>Dr</strong>. <strong>Ramón</strong><br />

<strong>Carrillo</strong><br />

Primer Ministro de<br />

Salud de la Nación<br />

“No hay política sanitaria sin política social”.<br />

El movimiento que nacía con la llegada<br />

de Perón al poder no sólo estaba<br />

basado en lo que su líder podía<br />

dar, sino también en la tarea de<br />

numerosos hombres capaces que<br />

brillaron en muchas áreas. Uno de<br />

ellos fue el doctor <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong>,<br />

el primero en aplicar en la Argentina<br />

una política sanitaria.<br />

<strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong> nació en Santiago del Estero<br />

el 7 de marzo de 1906, hijo del profesor<br />

<strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong> y de la señora María<br />

Salomé Gómez <strong>Carrillo</strong>. Pasó sus primeros<br />

años de vida en su ciudad natal. Cursó<br />

sus estudios primarios en la Escuela<br />

Manuel Belgrano y los secundarios, en el<br />

Colegio Nacional de Santiago del Estero.<br />

Obtuvo su título de bachiller en 1923, con<br />

Medalla de Oro. Cuando todavía cursaba<br />

el secundario, escribió una temprana obra<br />

literaria en la que ya dejaba ver su interés<br />

por los temas sociales.<br />

En 1924, viajó a Buenos Aires para cursar<br />

estudios en la Facultad de Medicina. Inició<br />

las clases con sólo 17 años de edad, y fue<br />

el más joven de su curso. En 1927, obtuvo,<br />

por concurso de calificaciones, el cargo<br />

de Practicante Externo del Hospital de<br />

Clínicas y, casi al mismo tiempo, comenzó<br />

sus tareas como redactor de la <strong>Revista</strong><br />

del Círculo Médico Argentino y Centro de<br />

Estudiantes de Medicina, de la que llegaría<br />

a ser subdirector. Ese mismo año, conoció<br />

al doctor Manuel Balado, importante<br />

neurocirujano argentino con formación<br />

en los Estados Unidos, con quien publicaría<br />

trabajos científicos que fueron calificados<br />

como los primeros editados en serie<br />

y que presentaban una alta calidad en sus<br />

métodos de investigación.<br />

Pese a estar compenetrado en sus estudios,<br />

tuvo tiempo para ocuparse de la situación<br />

social que lo rodeaba, sentía que<br />

faltaba un movimiento político que contuviese<br />

a la masa de necesitados. Expresó<br />

sus críticas a la prensa, las letras y las artes,<br />

ya que pensaba que no representaban cabalmente<br />

a la Argentina, en especial al interior,<br />

sino que estaban impregnadas de<br />

ideas extranjeras.<br />

A los 22 años de edad, recibió su título de<br />

médico. En 1930, gracias a sus altas calificaciones<br />

y a la calidad de sus trabajos,<br />

ganó la beca de la Universidad de Buenos<br />

Aires, que consistía en tres años de perfeccionamiento<br />

en Europa.<br />

Eligió capacitarse en Holanda, Francia y<br />

Alemania. Su paso por Europa, además de<br />

servirle para aumentar sus conocimientos


<strong>Dr</strong>. <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong><br />

10 médicos, le permitió ver los cambios po-<br />

se hizo cargo de la presidencia.<br />

“A los fines de la Salud Pública, es más im- 11<br />

<strong>Dr</strong>. <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong> junto a Juan Domingo Perón<br />

Pese a estar compenetrado<br />

en sus estudios, tuvo<br />

tiempo para ocuparse de<br />

la situación social que<br />

lo rodeaba, sentía que<br />

faltaba un movimiento<br />

político que contuviese a<br />

la masa de necesitados.<br />

líticos que estaban produciéndose en ese<br />

momento (1930-1933).<br />

En octubre de 1932, <strong>Carrillo</strong> representó<br />

a la Argentina en el Primer Congreso de<br />

Neurología, en Berna, Suiza, donde fue el<br />

participante más joven y uno de los más<br />

activos. Retornó al país en 1933, y lo encontró<br />

en medio de una gran crisis económica<br />

y política, propia de la Década Infame,<br />

y en esa etapa continuó buscando<br />

el modelo nacional que faltaba en ese momento.<br />

Cuando las discusiones entre aliadófilos,<br />

germanófilos y neutralistas ya lo<br />

aburrían, conoció a Juan Domingo Perón,<br />

quien trabajaba para salirse de esos moldes<br />

preestablecidos y buscaba elaborar<br />

un plan nacional y popular. <strong>Carrillo</strong> trabajó<br />

con Perón en un proyecto que abarcaba<br />

la Salud Pública y la Educación.<br />

El 17 de octubre de 1945 lo encontró<br />

como Jefe del Servicio de Neurocirugía<br />

del Hospital Militar, lo que lo convirtió en<br />

un testigo privilegiado de la llegada de Perón<br />

en las primeras horas de ese día. Según<br />

cuentan allegados a <strong>Carrillo</strong>, después<br />

de una reunión con Perón, salió del hospital<br />

con una serie de misivas para activos<br />

participantes de tan histórica jornada.<br />

Después de las elecciones que llevaron<br />

al Partido Laborista al poder, el doctor<br />

<strong>Carrillo</strong> pasó a ocupar un lugar importantísimo<br />

en la estructura del naciente<br />

peronismo. El 23 de mayo de 1946, en<br />

acuerdo general de ministros, se creó la<br />

Secretaría de Salud Pública, con rango de<br />

ministerio (pasaría a ser ministerio con la<br />

reforma constitucional de 1949). El 29<br />

de mayo, mediante un decreto del Poder<br />

Ejecutivo, el profesor doctor <strong>Ramón</strong><br />

<strong>Carrillo</strong> fue designado secretario de Salud<br />

Pública, y asumió el día 4 de junio de<br />

1946, cuando el general Juan D. Perón<br />

Al iniciar sus funciones, el doctor <strong>Carrillo</strong><br />

se encontró con una gran desorganización,<br />

con instalaciones sanitarias inadecuadas,<br />

y con falta de camas, de equipamiento<br />

médico, de insumos y de personal capacitado.<br />

Esto fue lo que lo motivó a comenzar<br />

a trabajar en una serie de cambios, representados<br />

en tres puntos que el mismo<br />

Perón enunciaría:<br />

> Todos los hombres tienen igual<br />

derecho a la vida y a la salud.<br />

> No puede haber política sanitaria<br />

sin política social.<br />

> De nada sirven las conquistas de<br />

la técnica médica si ésta no puede<br />

llegar al pueblo por los medios adecuados.<br />

<strong>Carrillo</strong> marcó un interés especial en áreas<br />

que el Estado no había profundizado hasta<br />

entonces: la medicina preventiva, la medicina<br />

social y la atención materno-infantil.<br />

Como ejemplo de su pensamiento podemos<br />

referirnos a sus dichos:<br />

“La Medicina moderna tiende a ocuparse<br />

de la salud y de los sanos, y el objetivo<br />

principal es ya no curar al enfermo, sino<br />

evitar estar enfermo”.<br />

“La Medicina no sólo debe curar enfermos,<br />

sino enseñar al pueblo a vivir, a vivir<br />

en salud, y tratar de que la vida se prolongue<br />

y sea digna de ser vivida”.<br />

“Las tareas de los higienistas no rendirán<br />

frutos si previamente no se consolidan las<br />

leyes obreras destinadas a dignificar la tarea<br />

en fábricas y oficinas, a mejorar sueldos<br />

y salarios, y lograr los beneficios de jubilaciones<br />

y pensiones”.<br />

portante proporcionarle a la madre los medios<br />

para que, una vez que tenga al hijo,<br />

pueda defenderse de las contingencias posibles,<br />

o bien otorgar al padre los medios<br />

materiales para atender al nuevo hijo”.<br />

Para la organización de su Secretaría, elaboró<br />

un plan de más de cuatro mil páginas,<br />

el Plan Analítico de Salud Pública, en<br />

el que preveía hasta el más mínimo detalle.<br />

Todos los puntos del funcionamiento<br />

hospitalario estaban contemplados en<br />

este plan: cada empleado debería atender<br />

su función específica y todos ellos eran<br />

importantes por igual. El cuerpo médico<br />

dependía de que las áreas de mantenimiento,<br />

intendencia, lavandería, ropería,<br />

administración, contable, compras y personal<br />

cumplieran acabadamente con sus<br />

funciones.<br />

<strong>Carrillo</strong> también otorgó a la arquitectura<br />

hospitalaria una relevancia que no había<br />

tenido hasta entonces, y promovió la<br />

construcción de centros de salud espaciosos,<br />

luminosos y funcionales. Incluso alentó<br />

la creación de una cátedra de Arquitectura<br />

Hospitalaria, así como también la organización<br />

de cursos de instrumentación quirúrgica,<br />

enfermería, administración hospitalaria,<br />

hemoterapia, radiología, anestesiología, alimentación<br />

y muchos otros.<br />

Como parte de su estrategia para mejorar<br />

la estructura sanitaria, <strong>Carrillo</strong> dividió<br />

el país en zonas sanitarias y planificó para<br />

cada una de ellas la atención específica de<br />

sus problemas, procurando lo que denominó<br />

centralización normativa y descentralización<br />

ejecutiva, es decir, que todos<br />

en la órbita de la Secretaría de Salud se rigieran<br />

con las mismas normas y criterios,<br />

pero las decisiones y la atención directa<br />

quedaban bajo la disposición de cada uno<br />

de los centros de salud, aun en el caso de


<strong>Dr</strong>. <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong><br />

12 Coll); la creación de EMESTA, primera fá-<br />

Co., que tenía un emprendimiento a unos La labor de <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong> al frente del 13<br />

los más pequeños. Como ejemplo del<br />

buen funcionamiento de su estrategia,<br />

puede mencionarse la llegada de la vacunación<br />

antivariólica y antidiftérica hasta los<br />

pueblos más aislados y distantes.<br />

Pese a que algunos sostuvieron lo contrario,<br />

la gestión de <strong>Carrillo</strong> siempre colaboró<br />

con la Fundación Eva Perón, y coordinó<br />

con ella el establecimiento de Hogares<br />

para la Ancianidad (lo que podría decirse<br />

que fue el inicio de la geriatría en nuestro<br />

país) y Hogares Escuela, en donde se albergaba,<br />

educaba y alimentaba a los niños<br />

más necesitados.<br />

Como hechos relevantes de su incansable<br />

obra al frente de la Secretaría de Salud,<br />

podemos destacar que el doctor <strong>Carrillo</strong><br />

fue el primero en todo el mundo en llevar<br />

a cabo una campaña exitosa para erradicar<br />

una endemia (la campaña contra el<br />

paludismo, dirigida por los doctores Carlos<br />

Alberto Alvarado y Héctor Argentino<br />

brica nacional de medicamentos; y el apoyo<br />

a los laboratorios nacionales por medio<br />

de incentivos económicos para que<br />

los remedios estuviesen disponibles para<br />

toda la población sin tener que depender<br />

de la voluntad de los laboratorios extranjeros<br />

(que preferirían volcar sus productos<br />

en los mercados europeos).<br />

Su fecunda actividad se vio resentida por<br />

una enfermedad de la que había sufrido<br />

una recaída en 1951. Padecía de hipertensión<br />

arterial con cefaleas intensas, lo cual<br />

dificultaba su trabajo.<br />

A pesar de su devoción por la Secretaría<br />

y su labor constante, comenzó a recibir<br />

cuestionamientos –muchos de ellos injustificados–<br />

por parte de otros miembros<br />

del gabinete de Perón. El 31 de julio de<br />

1954, le envió una carta al Presidente, a<br />

quien había intentado ver infructuosamente<br />

días antes. La carta, que comenzaba diciendo<br />

“Querido jefe”, explicaba en uno<br />

de sus párrafos los motivos de su alejamiento:<br />

“Cuando todo estaba por hacerse,<br />

no chocaba con nadie ni recibía tiros<br />

desde ningún ángulo, pero, con el ministerio<br />

armado y en perfecto funcionamiento,<br />

concluyó para mí la paz”.<br />

Pocos meses después, viajó a Nueva York,<br />

junto con su esposa Susana y sus cuatro<br />

hijos, para tratarse de su enfermedad. La<br />

Revolución Libertadora lo encontró lejos<br />

de su patria. El gobierno de Lonardi lo<br />

acusó de enriquecimiento ilícito e impuso<br />

interdicción a dos departamentos que<br />

tenía, y confiscó sus cuadros y sus libros,<br />

pese a la justificación que <strong>Carrillo</strong> hizo de<br />

todos y de cada uno de sus bienes a través<br />

de su hermana.<br />

En los Estados Unidos, decidió emplearse<br />

en la empresa Hanna Mineralization and<br />

kilómetros de Belem do Pará, en Brasil.<br />

Llegó a su nuevo lugar de trabajo el 1º de<br />

noviembre de 1955, donde además colaboró<br />

desinteresadamente con el hospital<br />

local. Como consecuencia de su enfermedad,<br />

el 28 de noviembre de 1956,<br />

sufrió un accidente cerebrovascular. Falleció<br />

el 20 de diciembre de 1956. Fue enterrado<br />

en el Cementerio Santa Isabel de<br />

Belém do Pará hasta que, en 1972, sus hijos<br />

repatriaron sus restos para enterrarlo<br />

en su provincia natal.<br />

> Preservación, conservación y<br />

restitución de la salud de la población.<br />

> Tratamiento de los problemas de la higiene.<br />

> Profilaxis y tratamiento<br />

de las enfermedades.<br />

> Defensa sanitaria de las fronteras<br />

y cooperación internacional.<br />

> Medicina preventiva.<br />

> Fiscalización sanitaria y<br />

bromatológica de los alimentos.<br />

> Protección médica integral<br />

de la madre y el niño.<br />

> Higiene y medicina infantil.<br />

> Higiene y medicina del trabajo.<br />

> Prestación médica de los seguros<br />

de accidentes, maternidad, sin<br />

enfermedad y vejez que correspondan.<br />

> Readaptación y reeducación<br />

de los enfermos e inválidos.<br />

> Higiene de la vivienda urbana.<br />

> Higiene y medicina en el deporte.<br />

> Aspectos higiénico-sanitarios<br />

primer Ministerio de Salud Pública no está<br />

debidamente reconocida. Pese a la tarea<br />

de muchos historiadores, aún falta una<br />

obra que refleje al hombre, al médico y al<br />

servidor público abnegado que fue.<br />

<strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong>, un hombre al que se le<br />

deben muchas cosas y, entre ellas, un justo<br />

reconocimiento a su tarea como organizador<br />

del sistema de salud argentino.<br />

Objetivos fundamentales de la Secretaría de Salud<br />

Pública bajo la dirección de <strong>Ramón</strong> <strong>Carrillo</strong>:<br />

del suministro de agua potable<br />

y de las redes cloacales.<br />

> Reglamentación y fiscalización del<br />

ejercicio de las actividades de la Salud<br />

Pública y las profesiones médicas.<br />

> Fiscalización de lo atinente a la<br />

producción de productos médicos,<br />

biológicos, alcaloides, estupefacientes,<br />

dietéticas, insecticidas y de tocador,<br />

drogas, aguas minerales, yerbas<br />

medicinales y material e instrumental<br />

de aplicación médica.<br />

> Creación y dirección de<br />

establecimientos para fines de Salud<br />

Pública y fiscalización de los privados.<br />

> Control de los subsidios a entidades<br />

públicas y privadas de salud.<br />

> Inspección y fiscalización técnica del<br />

funcionamiento de institutos y sanatorios.<br />

> Demología sanitaria de la Nación.<br />

> Educación higiénicosanitaria<br />

para la población.<br />

> Fiscalización de la aplicación de los<br />

conocimientos de las ciencias médicas.


Expresión AMBO<br />

14<br />

15<br />

por <strong>Dr</strong>. Martín Mesa<br />

Paredes<br />

que hablan<br />

Entre los e-mails que nos llegaron<br />

luego del primer número de<br />

AMBO, nos encontramos con uno<br />

que nos contaba sobre un mural<br />

pintado en una sala de residentes<br />

del Argerich.<br />

Conocimos a su autor, Martín Mesa (R4<br />

de Neurocirugía), quien nos contó esto:<br />

“El mural representa la interacción humana.<br />

En este caso, lo hice en mi sala durante<br />

las guardias de mi segundo año de<br />

residencia. Amor, odio, amistad, indiferencia,<br />

sexo y más son algunas de las cosas<br />

que suceden en cualquier grupo de gente<br />

que comparte un mismo lugar durante<br />

un tiempo. En esta obra, hay alrededor<br />

de setenta personas buscando su lugar de<br />

privilegio, interactuando en la pared, cayendo<br />

del cielo, desnudos, solos y compitiendo<br />

por el éxito.<br />

Ahora estoy en cuarto año de residencia.<br />

Nunca estudié arte, pero siempre disfruté<br />

de dibujar o tallar piedra, que es lo que<br />

más me gusta”.


16<br />

17<br />

AMBO es un espacio de diálogo y reflexión abierto<br />

para toda la comunidad médica, y queremos invitarte<br />

a participar, ¿Hace tiempo que tenés guardados<br />

en algún cajón ideas, notas, cuentos, historias o te<br />

gustaría que visitemos tu hospital y que salga en<br />

nuestros próximos números?<br />

Contactate con nosotros y vas a encontrar en estas<br />

páginas un lugar para comunicarte.<br />

Escribinos a info@revistaambo.com


18<br />

¿Dónde estudiaste?<br />

drama. Mi personaje recrea al hermano 19<br />

OUTSIDE<br />

Seguimos con la sección Outside, presentándote a<br />

distintos médicos y residentes que, además de dedicar<br />

su tiempo al estudio y a la atención de los pacientes,<br />

se abren camino por otras actividades que llenan y<br />

complementan sus vidas.<br />

Hoy es el turno de Santiago Zuccardi,<br />

cirujano, quien –por cuestiones del<br />

azar– hace ocho años llegó al teatro.<br />

Cuenta que cuando estaba en tercer<br />

año de Medicina –cursaba Salud mental–,<br />

el profesor a cargo de la clase<br />

les pidió que improvisaran una situación<br />

médico-paciente y recuerda: “Mis<br />

compañeros no se animaban. Yo di un<br />

paso al frente. El resultado de la improvisación<br />

no fue el mejor, pero sentí una<br />

sensación rara de explicar, pero muy<br />

gratificante. A la semana, me anoté en<br />

un taller teatral, y así comenzó todo”.<br />

Me formé durante tres años en el taller de<br />

Hedy Crilla, cuyo director es Julio Ordano.<br />

Luego, hice un curso intensivo de un<br />

año de duración en el Centro Cultural Rojas.<br />

También realicé cursos con Roberto<br />

Ponce y Cristian <strong>Dr</strong>ut, entre otros.<br />

¿Sentís el teatro como una válvula de escape<br />

de tu profesión?<br />

No lo siento como un escape. Estoy muy<br />

contento con mi profesión. Sí creo que<br />

ayuda mucho a relajarse en lo que uno<br />

hace, ya que la cirugía inconscientemente<br />

genera un estrés. Muchas de las situaciones<br />

que se presentan en el quirófano necesitan<br />

la tranquilidad y el temple del médico,<br />

y creo que el teatro me aportó una<br />

cuota importante en estas situaciones.<br />

Además, ser médico y poder vivir situaciones<br />

extremas me ayuda, semana a semana,<br />

a evolucionar en los distintos personajes<br />

que tuve que recrear a lo largo de<br />

estos años y a representar esos momentos<br />

al máximo.<br />

¿Qué tipo de teatro practicás?<br />

Se trata de un movimiento creado por un director<br />

ruso llamado Konstantin Stanislavsky,<br />

en el que desarrolla el naturalismo, el realismo.<br />

Todos los directores y profesores<br />

que tuve hasta el momento se inclinaron<br />

por este movimiento. El actor recrea un<br />

personaje a partir de sus propias experiencias<br />

y emociones. Desarrolla el “yo”,<br />

por decirlo de alguna manera.<br />

¿Están preparando alguna obra para presentar?<br />

En este momento, estoy ensayando una<br />

obra de Antón Chéjov, Tres hermanas,<br />

que se estrenará en abril de 2010. Es un<br />

de las tres hermanas, un jugador compulsivo,<br />

violinista, que sufre una frustración<br />

muy grande, ya que su vida, su trabajo,<br />

su mujer no eran lo que él había deseado.<br />

Una alegría bárbara. (Risas)<br />

¿Cómo podrías explicar la sensación de estar<br />

arriba de un escenario?<br />

Es difícil de contar claramente. Se generan<br />

tantas sensaciones al mismo tiempo, tristeza,<br />

alegría, euforia... Siento mucha adrenalina.<br />

Cuando las cosas salen bien, es<br />

una gratitud inmensa, difícil de explicar, y<br />

cuando salen mal, una frustración también<br />

complicada de describir con palabras. Pasar<br />

por varios estados de ánimo en dos o<br />

tres horas, algo que en la vida real puede<br />

llevar meses o años, es increíble.<br />

Vivo esto apasionadamente. Cuando entro<br />

al teatro, algo de mi vida cotidiana cambia.<br />

Lo disfruto muchísimo e intento mejorar<br />

día a día. Cruzo la puerta del teatro,<br />

pongo la mente en blanco y me dejo llevar<br />

por las emociones. Las distintas situaciones<br />

"Pienso que la<br />

sensibilidad de uno<br />

aparece reflejada en<br />

ambas profesiones. En<br />

mi caso, una depende de<br />

la otra, y viceversa. Por<br />

suerte, no son celosas<br />

y se realizan las dos<br />

perfectamente".


20<br />

OUTSIDE<br />

que uno puede llegar a vivir en un ensayo<br />

de pocas horas son sorprendentes. Se lo<br />

recomiendo a todas las personas y, en especial,<br />

a los cirujanos. (Risas)<br />

¿Alguna vez fueron a verte tus colegas?<br />

¿Qué opinaron?<br />

Sí. Cuando estaba en la facultad, fueron<br />

mis compañeros. En esa oportunidad, vieron<br />

una comedia. Les gustó mucho y, al<br />

mismo tiempo, les llamo la atención. Uno<br />

de ellos comenzó a estudiar poco después.<br />

¿En algún punto, encontrás conexión entre<br />

la Medicina y la actuación?<br />

Creo que se complementan. Pienso que<br />

la sensibilidad de uno aparece reflejada en<br />

ambas profesiones. En mi caso, una depende<br />

de la otra, y viceversa. Por suerte,<br />

no son celosas y se realizan las dos perfectamente.<br />

Diego Peretti fue, primero, médico psiquiatra<br />

y, después, se inclinó por la actuación.<br />

¿Pensás que, en algún momento, tu<br />

carrera puede dar ese giro?<br />

En su caso, el dejó la Psiquiatría. Creo<br />

que nunca podría dejar de ser médico.<br />

Son dos actividades que me llenan profundamente.<br />

Espero no tener que elegir,<br />

y poder practicar Medicina y ser actor<br />

al máximo y con la mayor dedicación.<br />

Se puede. De hecho, lo hago desde hace<br />

ocho años.


22 23<br />

Entre salas<br />

y pasillos<br />

Hoy: Hospital “<strong>Dr</strong>. I. Pirovano”<br />

En los años que llevás en Medicina,<br />

¿quiénes fueron tus referentes?<br />

Tuve un maestro, el <strong>Dr</strong>. Mamianetti, que,<br />

cuando hice la carrera, me despertó bastantes<br />

inquietudes desde el punto de vista<br />

médico y fue el primero que me prendió<br />

la lucecita de esto. Durante la carrera,<br />

hubo otras personas a las que me apegaba<br />

más, pero ya dentro de la especialidad<br />

y no tanto de los libros. Tomé un poco<br />

de cada uno.<br />

Sebastián Denuchi<br />

Anestesiología


Entre salas y pasillos<br />

24 25<br />

En el hospital, somos como una familia.<br />

Estamos acá las 24 horas durante mucho<br />

tiempo. La cirugía es algo muy absorbente.<br />

A todos nos une una cuestión sentimental.<br />

Quienes están “arriba” han vivido lo que<br />

nosotros transitamos ahora, y nos aconsejan<br />

en lo profesional y en lo personal. Esta<br />

residencia tiene más de treinta años. Entonces,<br />

existe una cultura residencial, dedicada<br />

a la formación de nuevos cirujanos.<br />

Cuando entré, admiraba muchísimo a mi<br />

feje, por la seguridad con que se manejaba,<br />

por lo que me enseñaba y por los conocimientos<br />

que tenía. Y también sentía<br />

"Cuando entré,<br />

admiraba muchísimo a<br />

mi feje, por la seguridad<br />

con que se manejaba,<br />

por lo que me enseñaba<br />

y por los conocimientos<br />

que tenía".<br />

admiración por los de cuarto y tercero. El<br />

100% de los médicos del servicio se dedica<br />

ampliamente a nuestra formación. De<br />

hecho, es un hospital en el que los residentes<br />

operan entre el 80 y el 90% de<br />

las patologías. Esto hace que todos estén<br />

abocados a la docencia.<br />

Manuel Cisneros<br />

Jefe de Residentes de Cirugía<br />

Cuando decidí que iba a estudiar Medicina,<br />

no tenía otros referentes, pero sabía,<br />

desde antes de cursar la carrera, que iba a<br />

ser cirujana, porque me encantaba la serie<br />

ER. Cuando estaba en cuarto año del colegio<br />

y empezó el programa, dije: “Quiero<br />

hacer esto”.<br />

En el Pirovano, tenemos grandes referentes<br />

que ya no están. En cirugía de paredes<br />

abdominales, el <strong>Dr</strong>. León Herszage,<br />

y en cirugía esofágica, el <strong>Dr</strong>. Adolfo Badaloni,<br />

dos médicos muy reconocidos, que<br />

dejaron un legado muy importante en el<br />

hospital. Se especializaron en lo que hacían,<br />

con gran experiencia durante muchos<br />

años.<br />

Susana Park<br />

R4 Cirugía<br />

Estudié Medicina por herencia, quizá, y<br />

creo que siempre me gustó la profesión.<br />

Hasta ahora, conocí a muchos médicos<br />

respetables, pero, de los que recuerdo,<br />

no hay ninguno de quien pueda decir:<br />

“Me gustaría ser como él”.<br />

Esteban Couto<br />

R1 Infectología


Entre salas y pasillos<br />

26<br />

27<br />

Para mí, un referente fue Favaloro, como<br />

ejemplo de persona, como médico rural<br />

que se dedicó a establecer todos sus conocimientos<br />

en la ciudad. El modo de vida<br />

que llevó me hizo reflexionar sobre cómo<br />

se puede ser equilibrado en la vida de un<br />

médico.<br />

Muchas veces, se piensa en los cirujanos<br />

como personas frías, que solamente conocen<br />

al paciente en el quirófano, lo operan,<br />

y ahí se terminó, pero es completamente<br />

distinto. Y un gran ejemplo de eso<br />

fue él.<br />

Otro referente es el <strong>Dr</strong>. Gianatiempo, en<br />

"Para mí, un referente<br />

fue Favaloro, como<br />

ejemplo de persona,<br />

como médico rural que<br />

se dedicó a establecer<br />

todos sus conocimientos<br />

en la ciudad".<br />

cirugía laparoscópica, reconocido internacionalmente,<br />

quien hace hincapié en nosotros<br />

y nos forma. Ahora nosotros tenemos<br />

parte de la responsabilidad de lo<br />

que recibimos. Así como alguien nos formó<br />

cuando recién entrábamos, ahora nosotros<br />

tenemos esa responsabilidad. Y es<br />

parte del alma residencial.<br />

Federico Carballo<br />

R3 Cirugía<br />

Soy hija de médicos, por lo que mi inclinación<br />

fue más que nada por ese lado.<br />

Además, para las consultas o dudas que<br />

me surgían, acudía a ellos. A pesar de que<br />

tuve excelentes profesores, no tengo un<br />

referente en especial y, de los autores<br />

que estudié, uno sería Salvador Jordi.<br />

Laura Fishov<br />

Lic. en Nutrición<br />

Concurrente


Entre salas y pasillos<br />

28<br />

29<br />

Por el amor que tiene hacia la Medicina<br />

y los pacientes, para mí siempre fue un<br />

ejemplo de médico mi viejo. Soy de Paraná,<br />

y siempre me impresionó el cariño<br />

que él recibía en la calle. Estudié en<br />

la Universidad Austral, y los médicos, en<br />

general, me gustaron bastante porque tenían<br />

muchos valores humanos, además<br />

de mucho nivel y exigencia en lo científico.<br />

Humanizaban la Medicina y defendían<br />

la vida. De los que leí, Eduardo Ortiz de<br />

Landázuri, un médico catedrático español<br />

muy importante, al que le pidieron que<br />

dejara todo para ir a fundar la universidad<br />

en Navarra. Además, también tenía mucho<br />

valor en la vida de las personas.<br />

Florencia Negri<br />

R1 Clínica<br />

Desde los quince años, quiero hacer esto,<br />

dedicarme a la gente y, principalmente, a<br />

los chicos. No tengo ningún familiar médico<br />

que me haya dando un contacto<br />

con la Medicina previamente. En cambio,<br />

sí fueron referentes varios profesores,<br />

y uno piensa que le gustaría ser como<br />

ellos, como por ejemplo el <strong>Dr</strong>. Rey, de la<br />

Fundación Barceló. Y si la historia que me<br />

contaron de Favaloro es cierta, puede ser<br />

también un muy buen referente.<br />

Bruno Espinaci<br />

R1 Traumatología


30 31<br />

<strong>Médicos</strong> por<br />

el mundo<br />

Hoy: España.<br />

Ignacio Hernández tiene 32 años,<br />

está casado y tiene un hijo de 3<br />

años. Estudió Medicina en la UBA<br />

y, en 2003, ingresó a la Residencia<br />

de Medicina Interna del Hospital<br />

Naval de Buenos Aires, con la intención<br />

de formarse con una visión<br />

amplia de la Medicina y después<br />

volcarse a emergencias. Para fines<br />

de 2006, antes de terminar su residencia,<br />

ya estaba trabajando en el<br />

Servicio de Emergencias del Hospital<br />

Italiano y, según nos explica,<br />

para él esto lo había hecho sentir<br />

tan afortunado como quien cumple<br />

un objetivo para el que largamente<br />

había trabajado, pero rápidamente<br />

aclara: “Después, reventó la burbuja.”<br />

Hoy, su camino lo encuentra a<br />

varios kilómetros de Argentina.<br />

¿En que andaba tu vida antes de irte para<br />

España?<br />

A principios de 2008, en pleno burn out<br />

(o surmenage, que es más fino) de por<br />

lo menos un año de evolución, mi mujer,<br />

también médica, recibió un llamado<br />

telefónico de un conocido, en el que le<br />

ofrecieron trabajo en España. Ella es especialista<br />

en Diagnóstico por Imágenes. Al<br />

comentarles que yo también era médico,<br />

esta gente propuso, además, un puesto<br />

para mí.<br />

Si sacamos una foto de mi vida en el momento<br />

en que se abrió la posibilidad de<br />

venir a España, la imagen es exactamente<br />

la del punto álgido de la montaña rusa: recién<br />

salido de la residencia, trabajando en<br />

el Italiano y en CEMIC (estuve unos meses<br />

de 2008, también en Emergencias), mi<br />

futuro parecía promisorio. Estaba en dos<br />

"Me fui un poco por<br />

culpa del país y de su<br />

sistema sanitario, y un<br />

poco por culpa mía.<br />

Sí, culpa mía. El exilio<br />

pocas veces es un<br />

mérito".


<strong>Médicos</strong> por el Mundo<br />

32 de los mejores hospitales del país. Tenía hace hoy menos de un año. Invierno, frío<br />

“fuenteovejunezco” de Favaloro, políticos “ibericidio” en masa.<br />

33<br />

que bajar un poco la intensidad y esperar<br />

a que el tiempo se convirtiera en carrera,<br />

la carrera, en estabilidad y la estabilidad,<br />

en calidad de vida. Pero esta novela estaba<br />

ambientada en la Argentina.<br />

Cuando proyectaba a diez o quince años<br />

y observaba a compañeros de trabajo mayores<br />

que yo, mejor formados que yo,<br />

trabajando en el mismo lugar “promisorio”<br />

que yo, veía que no sólo no habían podido<br />

conseguir esa calma y ese orden, sino que<br />

algunos sufrían en su vida síntomas de desintegración<br />

personal, familiar y social.<br />

En conclusión, a principios de 2008, cuando<br />

sonó el teléfono por el llamado desde<br />

España, yo era tierra fértil para subirme a<br />

cualquier avión o “bondi” que me dejara<br />

fuera de la furiosa Buenos Aires. Salió España<br />

como podría haber salido Trelew o<br />

cualquier otro lugar.<br />

¿Desde cuándo estás allá?<br />

Aterrizamos en Madrid en enero de 2009,<br />

" La Argentina es<br />

una adolescente<br />

tremendamente<br />

hermosa, conflictuada<br />

porque no sabe si jugar<br />

a las muñecas o ponerse<br />

implantes mamarios.<br />

Es muy difícil vivir con<br />

una compañera así".<br />

invierno europeo. Subimos al avión con<br />

35 grados, porteños y bajamos con cero<br />

grados, nieve y soledad.<br />

¿Por qué decidiste irte?<br />

La respuesta interesante quizá no sea a<br />

por qué me fui, sino a por qué motivos<br />

no me fui. Es muy importante saber bien<br />

a qué cosas le tenemos apego y a cuáles<br />

no, porque son estas cosas, materiales<br />

o espirituales, las que nos definen como<br />

personas.<br />

No me fui porque la Argentina sea un mal<br />

país para vivir. No me fui porque me fuera<br />

mal en términos materiales, sí sociales. No<br />

me fui pegando un portazo, insultando a<br />

jefes, compañeros, familiares y amigos.<br />

No me fui, tampoco, sintiendo pena por<br />

ellos, pensando que esos pobres seres se<br />

quedaban en Bananolandia. No me fui<br />

enojado ni jurando venganza ni no volver<br />

nunca jamás. Me fui un poco por culpa del<br />

país y de su sistema sanitario, y un poco<br />

por culpa mía. Sí, culpa mía. El exilio pocas<br />

veces es un mérito.<br />

Visto desde más lejos, nuestro país es<br />

excelente, aun con todas sus pobrezas y<br />

defectos.<br />

El argentino es un personaje hipercrítico,<br />

ambicioso tanto para bien como para mal,<br />

permanentemente activado en busca de<br />

ser mejor, tener algo mejor, llegar más lejos,<br />

aunque ese llegar más lejos signifique<br />

un palco en la cancha de Boca o “tunear”<br />

la cupé Fuego. De esta búsqueda por<br />

superarse, emergen nuestros premios<br />

Nobel en Medicina, un Favaloro, un Maradona<br />

del fútbol (no de la vida), Gardel<br />

y el tango, el Colón, escritores a raudales<br />

y mil etcéteras más. Pero también tenemos<br />

el Maradona de la vida, el asesinato<br />

y militares que han rifado el país al peor<br />

postor (también, militares heroicos que<br />

han dado su vida, no así los políticos). La<br />

Argentina es una adolescente tremendamente<br />

hermosa, conflictuada porque no<br />

sabe si jugar a las muñecas o ponerse implantes<br />

mamarios. Es muy difícil vivir con<br />

una compañera así.<br />

¿Qué pasos seguiste para conseguir trabajo?<br />

A nosotros nos llamaron, pero si querés<br />

conseguir trabajo, acá las opciones son dos:<br />

contactos o MIR. Si querés venir a trabajar<br />

a España, tenés que tener un amigo o conocido<br />

que te suelte información. Otra opción<br />

es venir directamente a rendir el MIR,<br />

que no es más terrible que rendir en la Argentina,<br />

y entrás siempre (aunque no en la<br />

especialidad que quieras, eso es cierto). La<br />

tercera opción es la del mochilero médico:<br />

abrís Internet, buscás una oferta de trabajo<br />

y te postulás, pero, como dicen acá, “que<br />

Dios te coja confesado”. La última opción,<br />

generalmente rara, es venir como estudiante<br />

a hacer un fellow, que hay pocos y<br />

no sé cómo se barajan.<br />

¿Cómo te sentiste al llegar y cuáles fueron<br />

las primeras impresiones del sistema de<br />

salud español?<br />

Es la pregunta más compleja. Bajarse de<br />

un avión con visa de trabajo y residencia,<br />

y un título académico te da ventajas, no<br />

garantías. Uno no se da cuenta de lo difícil<br />

que es armar las cosas en un lugar nuevo<br />

donde, en la realidad, no tenés ni documentos<br />

útiles ni estás registrado en ninguna<br />

parte. La verdad es que, una vez pasada<br />

la fiebre del viaje, la mudanza y ver por<br />

primera vez tu casa, el hospital, la ciudad,<br />

etc., te atropella la realidad. Nosotros llegamos<br />

con las mejores expectativas y, a<br />

los veinte días, quería cometer un urgente<br />

Mi experiencia no es la del argentino que<br />

vuelve a Buenos Aires de vacaciones y<br />

dice que acá es todo recopado, que el<br />

euro es una moneda del carajo y que te<br />

cansás de tomar cervecita en el Mediterráneo.<br />

Bien por ellos, pero no les creo.<br />

Aunque sí hay algo cierto: inmediatamente,<br />

te subís al nivel de vida europeo, donde<br />

siendo médico casi seguro que no vas<br />

a tener problemas de plata; vas a vivir en<br />

una casa o departamento más grande y<br />

lindo que el que dejaste en la Argentina,<br />

y vas a laburar la mitad o menos. Eso, que<br />

se dice rápido, eso es lo que te mantiene<br />

fuera de la Argentina porque tenés la certeza,<br />

falsa o no, de que en los próximos<br />

treinta años no vas a conseguirlo en tu<br />

país. Para que se den una idea, mi mujer,<br />

mi hijo y yo debemos haber quintuplicado<br />

el tiempo que pasamos juntos con<br />

sólo llegar a España. Esto es irrefutable y<br />

tan sólido que es capaz de mantenerte a<br />

10.000 km de tu casa pagando un precio<br />

inestimablemente alto.<br />

La gente, cuando hablás individualmente<br />

con ellos, es “normalita”. Ni más buenos<br />

ni más malos. La sociedad en conjunto no<br />

te abre las puertas. Te dejan entrar, pero<br />

no te invitan. Sin ánimos de redundar en<br />

comentarios típicos, debo decir que la<br />

gente es más fría, distante y menos comprometida<br />

que nosotros.<br />

El Sistema Nacional de Salud (SNS) te garantiza<br />

universalidad de atención aunque<br />

seas ilegal, narcotraficante y pederasta. España<br />

tiene unas estadísticas que hacen que<br />

se te caiga la cara de asombro: 2/1000 de<br />

mortalidad infantil (mientras que la Argentina<br />

tiene 10/1000), y una expectativa de<br />

vida de 78 años para los varones y 84 para<br />

las mujeres (en la Argentina, 72 y 78, respectivamente).


<strong>Médicos</strong> por el Mundo<br />

34 En concreto, el SNS está hecho de abajo<br />

hacia arriba. Cuenta con un nivel de aten-<br />

¿Creés que los médicos se van a España principalmente<br />

por una mejor remuneración?<br />

gentina y 34/10.000 en el resto). ¿Por qué<br />

los europeos dicen que les faltan médicos<br />

Cuando perdés la dirección, estás en problemas,<br />

pero cuando perdés el sentido,<br />

35<br />

ción primaria bastante bueno, pero, a medida<br />

que subís en complejidad, el sistema<br />

empieza a temblar. No creo que esto sea<br />

una mala estrategia, pero tiene sus costos.<br />

El SNS tiene el vicio de las grandes burocracias,<br />

que es no poder responder rápidamente<br />

a las necesidades que impone la<br />

realidad, no generar competencia, debido<br />

a que acá la gente se “abulona” a sus puestos<br />

y no los saca nadie y, en resumen, ten-<br />

No pondría el dinero como primer motivo<br />

de migración. Sería más amplio y diría<br />

“calidad de vida”, que lleva implícito cierto<br />

poder adquisitivo de base. Poca gente<br />

acepta un trabajo por mucho dinero en<br />

Djubuti o en Mongolia, posiblemente por<br />

la gran diferencia cultural que hay con esos<br />

países respecto de la Argentina y porque<br />

poco tienen que aportar en el día a día, en<br />

la vida cotidiana. La aproximación cultural<br />

y nosotros decimos que nos sobran? Es<br />

un problema de distribución tan profundo<br />

que hasta el sistema fiscal entra en juego.<br />

Les doy mi ejemplo: acá, trabajo 36 horas<br />

por semana y gano lo que ganaba en la<br />

Argentina trabajando 58. Ese excedente<br />

de 22 horas se las estaba “robando” a<br />

otro colega, lo que es igual a excluir a otro<br />

médico solamente porque yo tuve más<br />

suerte que él (llegué antes).<br />

mejor que alguien te tire un salvavidas. A<br />

mí me lo tiraron. Tuve suerte.<br />

En general, los <strong>argentinos</strong> que viajan sienten<br />

que el nivel médico es más bajo pero,<br />

sin embargo, el sistema de salud funciona<br />

mejor, mientras que a nosotros nos pasa<br />

todo lo contrario. ¿Cómo se explica esto?<br />

Esta pregunta es casi una analogía de la<br />

selección de fútbol. Vos podés tener once<br />

der a la mediocridad; es un Stradivarius que con Europa, particularmente con España,<br />

La Argentina expulsa médicos por muchas troncos en la cancha, pero, si cada uno<br />

necesita que lo pulan un poco y lo vuelvan sumada al factor económico y la estabili-<br />

razones, desde idiosincrásicas hasta pura- sabe lo que tiene que hacer, lo que va a<br />

a afinar. De todas formas, prefiero sin dudad que ofrece, son determinantes a la<br />

mente económicas. En la Argentina, todos hacer el compañero y todos confluyen en<br />

das trabajar en el SNS que en la privada. hora de tomar una decisión. Todo esto re-<br />

queremos trabajar en los mejores lugares. una misma idea, tenés un equipo compe-<br />

Respecto de los médicos, me ha sorprendido<br />

más la ignorancia de algunos profesionales<br />

locales que su sabiduría, no porque<br />

no haya buenos médicos, sino porque los<br />

malos son unos cuantos y muy malos, a<br />

pesar de los cinco años de residencia en<br />

el Primer Mundo.<br />

"Las tasas de médico<br />

por habitante en la<br />

Argentina, España,<br />

Alemania y Francia<br />

son similares (...). ¿Por<br />

qué los europeos dicen<br />

que les faltan médicos<br />

y nosotros decimos que<br />

nos sobran?".<br />

dunda en una mejor calidad de vida, que<br />

no siempre se obtiene con dinero.<br />

Existe también la idea de que en un país<br />

del Primer Mundo hay más orden, más<br />

respeto hacia el profesional, más posibilidades<br />

de trabajar en mejores condiciones<br />

y un eventual acceso a la élite de la medicina<br />

mundial, siempre y cuando a uno<br />

le interese. Eso es parcialmente cierto. La<br />

gente es más respetuosa, pero no siempre<br />

es simple poder trabajar en hospitales<br />

grandes y bien conformados (algo que va<br />

más allá de tener la última tecnología).<br />

Respecto de llegar a la élite científica, hay<br />

que pensar que el inmigrante médico promedio<br />

sudamericano no tiene el perfil del<br />

médico académico. Ese tipo de profesionales,<br />

desde la Argentina por lo menos,<br />

apuntan a otros países.<br />

La otra parte de la respuesta se relaciona<br />

con por qué la Argentina expulsa tantos<br />

médicos (alrededor de 600 en 2005,<br />

cerca del 10% de los que produce anualmente).<br />

Las tasas de médico por habitante<br />

en la Argentina, España, Alemania y Francia<br />

son similares (30/10.000 para la Ar-<br />

Los mejores lugares son pocos, desproporcionadamente<br />

mejores que el resto, y<br />

los que llegan a sus cargos o puestos procuran<br />

aferrarse a ellos en forma vitalicia,<br />

y no hay ni ley ni persona que los jubile.<br />

Entonces, quienes vienen de abajo, si no<br />

entraron por la puerta chica (por accesibilidad)<br />

del hospital grande (por prestigio o<br />

academia), quedan casi automáticamente<br />

fuera de concurso. En la Argentina, hoy,<br />

no existe la carrera médica; existe sólo la<br />

profesión. El problema se llama “proyección”.<br />

Creo que, por lo menos la mitad<br />

de los que hacen una segunda residencia<br />

en la Argentina, lo hacen sólo por tener<br />

trabajo unos años más, no por vocación,<br />

esperando que en el camino pase algo<br />

que les abra las puertas de Dios sabe qué<br />

y encuentren la luz.<br />

Personalmente, en la Argentina, no vi mi<br />

proyección personal. Hice Clínica, me dediqué<br />

dos años a un proyecto de Emergencias<br />

hospitalarias que se ralentizó demasiado<br />

y dejé de preguntarme “¿después<br />

qué?” para preguntarme “¿para qué?”,<br />

para qué trabajar en instituciones que te<br />

prometen cosas que nunca te van a dar.<br />

titivo. Ahora bien, si tenés once jugadores<br />

excelentes, pero que no saben el nombre<br />

del que juega al lado, que juegan once<br />

estilos distintos de fútbol y ni ellos saben<br />

dónde se van a parar en la próxima jugada,<br />

tenés once voluntades dispersas. Eso<br />

es lo que pasa acá: en general, hacen lo<br />

que tienen que hacer, no lo que cada uno<br />

quiere. Es la banda de jazz contra la sinfónica.<br />

Conclusión, el sistema funciona.<br />

El médico argentino es una suerte de Rambo<br />

de la Medicina. Es un individuo que fue<br />

atado a un paracaídas, lo tiraron desde un<br />

avión en el delta del Paraná, sin agua ni alimentos,<br />

solo con un cuchillo, y si sobrevive,<br />

es a prueba de todo. Cuidado, preguntémonos<br />

también cuántos residentes hemos<br />

visto abandonar o fracasar bajo nuestro sistema.<br />

Yo vi a varios, decenas quizá.<br />

Pero en su rusticidad y mediocridad, los<br />

tipos han aprendido a defenderse. Si les<br />

dicen que tienen que hacerle un tacto rectal<br />

a todos los que entren con una fractura<br />

de codo, se lo hacen y punto. Es precisamente<br />

eso: el sistema funciona porque<br />

es más importante el sistema que las per-


<strong>Médicos</strong> por el Mundo<br />

36 sonas que lo componen. De eso se trata dicos latinoamericanos. Es un problema<br />

estuviera en otro hospital de esta misma objetivos que nos planteamos al salir hacia 37<br />

la socialdemocracia europea. Por más de<br />

derecha que se crean algunos en Europa,<br />

para nosotros son de izquierda, son socialistas<br />

(y lo bien que está). Como decíamos<br />

antes, si vos les criticás el sistema, ellos<br />

vienen, te muestran sus estadísticas y te<br />

mandan a callar.<br />

Obviamente, las cosas no son tan así, sino<br />

que lo cuento gráficamente para que se<br />

entienda. Lo cierto es que saben que lo<br />

que tiene que funcionar es el sistema, a<br />

expensas de perder en calidad individual.<br />

La crítica a esto es que me da la impresión<br />

de que no tienen sistemas de rescate de<br />

esos médicos que pueden ser superiores<br />

al sistema, pero no lo sé realmente. Tienen<br />

tres o cuatro cerebros, pero no una<br />

escuela española de Medicina real.<br />

¿Cómo es el trato con los demás colegas y<br />

los pacientes?<br />

En España, los colegios médicos, por<br />

razones políticas, vienen haciendo una<br />

campaña de desprestigio contra los mé-<br />

"En España, hay una<br />

imagen histórica de<br />

la Argentina como<br />

un país grande y<br />

generoso mezclada<br />

con apreciaciones de<br />

‘actualidad’ nefastas".<br />

relacionado con lo que mencionaba antes<br />

acerca de la homologación de especialidades,<br />

por lo cual, la versión oficial dice que<br />

los médicos no españoles están muy mal<br />

formados y deberían prácticamente ser<br />

expulsados.<br />

Siguiendo el viejo proverbio de Goebbels<br />

que reza “Miente, miente, que algo quedará”,<br />

en la calle se forma una imagen de<br />

desconfianza frente al médico “latino”. De<br />

todas formas, también existe una buena<br />

fama del profesional argentino. Para bien<br />

o para mal, al argentino se lo considera<br />

más, como diría mi cuñada, GCU (Gente<br />

Como Uno), con lo cual se hace una<br />

suerte de prejuicio positivo a favor nuestro.<br />

En España, hay una imagen histórica<br />

de la Argentina como un país grande y<br />

generoso mezclada con apreciaciones de<br />

“actualidad” nefastas (se quedaron con el<br />

corralito y, de ahí para acá, no tienen ni<br />

idea de qué pasó). En resumen, si sos argentino,<br />

te maltratan un poco menos, le<br />

bajan el voltaje a la picana.<br />

No sé si los pacientes son realmente más<br />

respetuosos. Son más sumisos. Hay un<br />

nivel más bajo de tensión y agresión en la<br />

sociedad que se transmite a las personas<br />

individuales. Aun así, hay casos de agresión<br />

a médicos, tema que más de una vez<br />

llegó a los tribunales locales.<br />

¿Qué es lo que más extrañás de la vida<br />

médica en la Argentina?<br />

Hablar de Medicina con amigos. Sin duda,<br />

esto es lo que más extraño de la vida profesional,<br />

aunque no lo único. También se<br />

extraña ver más cantidad de pacientes,<br />

más complejos y con mayor preocupación<br />

por la excelencia. Quizá esta sea una<br />

circunstancia particular que viene dada<br />

por el tipo de lugar en el que trabajo. Si<br />

ciudad, tal vez estaría pidiendo que dejen<br />

de hacerme ver pacientes.<br />

¿Estás conforme con tu viaje?<br />

Como dice un viejo amigo en Buenos Aires:<br />

“¿En qué sentido me lo decís?”. Cada<br />

uno sabe lo que busca. Terminando mi<br />

primer año en España, puedo decir que<br />

fue el año de adaptación, el año en el que<br />

tenés que sembrar y no cosechás nada.<br />

No es un año en cero, vacío, pero justificar<br />

toda esta movida no es algo que se<br />

haga tan rápidamente. Los proyectos que<br />

tenemos con mi mujer necesitan, por lo<br />

menos, dos años más para dar frutos,<br />

quizá más. No obtener los resultados<br />

esperados puede ser interpretado como<br />

un fracaso, pero no hay que olvidarse de<br />

que una gran parte de nuestra estancia<br />

en España no tiene resultados medibles.<br />

¿Cómo medís la experiencia de mudarte<br />

a otro país, de conocer Europa, otra Medicina,<br />

ver cuánto hay de verdad y de fantasía<br />

en lo que creemos que es el mundo?<br />

No puedo decir ni “sí” ni “no”. Ni conforme<br />

ni disconforme, sigo a la expectativa<br />

porque esto es algo que requiere mucho<br />

más tiempo.<br />

¿Pensás volver?<br />

En casa, tenemos una máxima que es algo<br />

así: vivir como si nos fuéramos a quedar<br />

toda la vida; proyectar como si fuéramos<br />

a volver a la Argentina.<br />

Esto significa que no podés vivir midiendo<br />

si te comprás un mueblecito que después<br />

no sabés cómo vas a mudar a Buenos<br />

Aires (es carísimo mudar muebles) y si te<br />

gastás veinte euros de más, en lugar de<br />

ahorrarlos para la vuelta.<br />

Por otra parte, también significa que hay<br />

plazos que cumplir respecto de algunos<br />

España. Por ejemplo, no puedo pasarme<br />

cuatro años en Europa y volver con la<br />

misma formación con la que vine.<br />

Estamos convencidos de que volveremos,<br />

aunque no sabemos ni cómo ni cuándo.<br />

Creo que eso llegará sólo. Las plantas<br />

crecen y sus frutos maduran si uno está<br />

detrás regándolas.<br />

Saint-Exupéry dijo: “Mi patria es mi infancia”.<br />

La mía está en la Argentina. Eso está<br />

claro. Pero, además, hay otra infancia, que<br />

es la de los hijos. Uno reedita su infancia<br />

en la de sus hijos. Por eso todos, si hemos<br />

tenido una infancia feliz, queremos que la<br />

de nuestros hijos sea igual, con los mismos<br />

juegos, en los mismos lugares, con las<br />

mismas personas. Mi hijo, a pesar de sus<br />

tres años, no habla fluidamente aún. Para<br />

mí, va a ser una experiencia contradictoria<br />

oírlo hablar con el acentito peninsular.<br />

A muchos les causará gracia un enano de<br />

tres años hablando así; a mí me causa algo<br />

de pesar, porque mi hijo no se estará pareciendo<br />

a mí. “La herida narcisista”, diría<br />

algún psicólogo incauto. Yo diría, a lo<br />

Larralde: “¡Qué vida puta, qué lo parió!”<br />

(este fragmento puede ser cambiado por<br />

otra cita de Larralde, pero el problema<br />

es que será menos explícita: “Habrá que<br />

seguir escuchando el alegre canto de los<br />

pájaros tristes…”).<br />

Para comunicarte con Ignacio:<br />

<strong>Dr</strong>. Ignacio Hernández<br />

drobelix@hotmail.com


38<br />

Mundo<br />

Macanudo<br />

Liniers es el seudónimo de Ricardo Siri, creador de un<br />

mundo de duendes, pingüinos que hablan, hombres<br />

misteriosos, gatos reflexivos y otros fantásticos<br />

personajes que cobran vida en su tira Macanudo, del<br />

diario La Nación.<br />

A los 36 años, casado y con la llegada de<br />

Matilda, su primera hija, su historia no es<br />

muy distinta a la de otras personas, salvo<br />

por una diferencia: posee un espíritu bien<br />

optimista que le permite combinar la realidad<br />

cotidiana con un mundo surrealista y<br />

soñador que, paradójicamente, suele tener<br />

los pies bien sobre la tierra.<br />

Para llegar a su profesión y al reconocimiento<br />

que ganó como historietista, primero<br />

debemos atravesar un camino de<br />

búsqueda y rebotes constantes. Confiesa<br />

que, después de terminar la secundaria en<br />

el Colegio St. Brendan’s, estaba “perdido<br />

y sin la menor idea de qué hacer”. Estudió<br />

por Pablo Aragone<br />

Foto liniers: Gentileza Taina Azeredo<br />

unos meses de Derecho y dejó, probó<br />

con Ciencias de la Comunicación, tampoco,<br />

Publicidad, lo mismo. Mientras todavía<br />

cursaba esta última carrera, decidió aprovechar<br />

sus tardes libres para asistir a un taller<br />

de historietas y se fue entusiasmando.<br />

Se animó a publicar en un diario universitario<br />

algunos de sus dibujos, y afirma: “Esa<br />

fue una gran felicidad, equivalente a cuando<br />

me enteré de que iba a publicar en La<br />

Nación o, ahora, que me van a publicar en<br />

Francia y España”. Por fin se decidió: iba a<br />

dejar su tercera carrera y dedicarse de lleno<br />

a su verdadera vocación, y por lo que<br />

se ve, tan mal no le fue.<br />

39


Entrevista a Liniers<br />

40 ¿De verdad no sabías qué era lo que te te de nuestra infancia, algo de esto guar- 41<br />

gustaba o no te animabas a tomar la decisión?<br />

No tenía la menor idea. Seguro que Picasso,<br />

a los 16 o 17 años, sabía que era<br />

un artista, pero yo no era el que mejor dibujaba<br />

de la clase, ni tampoco tenía una<br />

pulsión tan grande para el dibujo. A esa<br />

edad, para mí era lo mismo ver tele, jugar<br />

a los “fichines”, leer a Stephen King o<br />

dibujar (risas). Es difícil saber de antemano<br />

lo que a uno puede o no gustarle. Lo descubrí<br />

haciéndolo, y así conocí gran parte<br />

de mi profesión.<br />

¿Sentís que los años previos al dibujo<br />

fueron una pérdida para tu<br />

profesión?<br />

¡Nooo, al contrario! Si<br />

hoy puedo vivir de las<br />

historietas, es por todo<br />

lo que hice antes.<br />

Es como la película El<br />

efecto mariposa (un film<br />

sobre la manipulación del<br />

tiempo): si alterás algo del pasado,<br />

quizá el presente se modifique, y si<br />

no hubiera estudiado lo que estudié, tal<br />

vez no llegaba a lo que soy hoy. Por todo<br />

lo que pasé, fueron como “un montón<br />

de buenas mini noticias” que me acercaban<br />

a mi profesión. Todo es para bien.<br />

Lo que uno estudia te enseña a pensar y<br />

a conocer.<br />

¿Es verdad que muchos historietistas son<br />

muy tímidos?<br />

Sí. Es una constante en el 90% de los dibujantes.<br />

Este trabajo es una evasión enorme<br />

y es muy antisocial. Metemos la cabeza<br />

en el escritorio y, durante tres o cuatro<br />

horas, no le hablamos a nadie (se ríe).<br />

Todos nosotros tenemos, en alguna par-<br />

dado. Por ejemplo, conozco a muy pocos<br />

historietistas que jueguen bien al fútbol.<br />

En mi caso, cuando estaba en el colegio<br />

y había un partido, como jugaba mal,<br />

me quedaba en clase dibujando; y si hubiera<br />

jugado bien, por ahí ahora sería abogado<br />

(risas).<br />

¿Te dio cierto desahogo poder comunicarte<br />

a través del dibujo?<br />

Sentí que le ponía voz a mi timidez. Cuando<br />

era chico, me acercaba a las mujeres<br />

y les decía (con voz baja y finita): “¿Hola,<br />

querés bailar?”. Entonces, me decían que<br />

no, y me iba destrozado. Ese “querés<br />

bailar” no era mi verdadera<br />

voz; era apenas una vocecita<br />

llena de pánico. La<br />

historieta fue una manera<br />

de contar lo que<br />

me pasaba.<br />

¡Entonces fue un recurso<br />

para levantar minas!<br />

(Carcajada) ¡No, porque ya había<br />

conocido a mi mujer! Me enamoré<br />

y hoy estoy con ella. ¡Un desperdicio total<br />

de posibilidades! Ése es el humor cruel<br />

que tiene Dios. A los 18 años, me decía a<br />

mí mismo: “¡Dónde están las minas!”. Y<br />

ahora que vienen un montón a pedir que<br />

les firme el libro, no puedo hacer nada…<br />

Una desgracia.<br />

¿Cómo evolucionaron tus tiras hasta llegar<br />

a Macanudo?<br />

Arranqué en Página/12, con Bonjour, que<br />

salía muy escondido una vez por semana<br />

en un suplemento, y buscaba llamar la<br />

atención. No estaba tan preocupado por<br />

lo que decía o cómo hacía, y cada idea ex-


Entrevista a Liniers<br />

42 traña la ponía. Cuando pasé a hacer Macanudo,<br />

descubrí que podía tranquilizar-<br />

subestima mucho al espectador o al lector,<br />

en mi caso. Las cosas buenas son bue-<br />

43<br />

me, ir a las cosas “más chiquitas” y que nas porque alguien se sentó a pensar ideas<br />

no tenía la necesidad de hacer un chis- y no por el atajo del rating.<br />

te tras otro; no quería fórmulas armadas.<br />

Macanudo viene a ser como una columna.<br />

Es escribir cada día sobre algo distinto.<br />

¿Por qué te personificás a vos mismo como<br />

un conejo en Macanudo?<br />

Con eso me saqué la obligación de tener<br />

que rematar cada chiste. Además, no me<br />

considero la gran cosa como para pensar<br />

que no van a entender mi genialidad si no<br />

tiene un remate (risas). Tengo un nivel de<br />

entendimiento básico y normal, así que no<br />

subestimo a nadie.<br />

Es una mezcla de muchas cosas. Otros<br />

artistas, como Matt Groening (creador<br />

de Los Simpsons), también usan conejos,<br />

y descubrí que era mucho más fácil hablar<br />

de mí mismo con un disfraz. Al principio,<br />

en la tira Bonjour, me dibujaba tal cual<br />

soy, pero me daba vergüenza y creía que<br />

la gente iba a pensar que era un gil. Entonces,<br />

hacía que todos<br />

los personajes me<br />

agredieran o terminaba<br />

llorando porque no<br />

tenía ideas. Todo eso<br />

era por miedo a hablar.<br />

Más tarde, descubrí<br />

que me gustaba<br />

poder ser autorreferente,<br />

contar las cosas<br />

que me pasaban de<br />

verdad, y lo logré gracias<br />

a ese disfraz. Pero<br />

no es el único personaje<br />

que me identifica.<br />

Soy una mezcla de todos y elijo a cada<br />

uno según lo que quiero contar.<br />

¿Cómo es el proceso creativo de una tira?<br />

Creo que no hay<br />

respuesta para explicar<br />

cómo nacen las<br />

ideas. Tenemos un<br />

espacio en blanco;<br />

el cerebro empieza<br />

a hacer “ping-pong”<br />

con un montón de<br />

cosas, quizá aparece<br />

algo que funciona, y<br />

me pongo a dibujar.<br />

Pero el proceso nunca<br />

es el mismo. Me<br />

gustan las sorpresas.<br />

Por eso mi registro de humor es tan cambiante:<br />

a veces es tierno, absurdo, cruel<br />

o gracioso.<br />

Busco trabajar de la manera que a mí me<br />

gustaría leer una historieta. Lo mismo me<br />

pasa con el cine y los escritores. No me<br />

gusta lo prefigurado. El primer gesto para<br />

salir de esto es no subestimar al lector.<br />

Para eso ya está la tele (risas). A veces<br />

tengo la sensación de que los productores<br />

se preguntan: “¿Qué quiere ver la gente?”.<br />

Respuesta: “A Nazarena desnuda”. Y listo,<br />

a no pensar más. ¡Creen que eso es<br />

lo que quieren todos, pero no es así! Se<br />

¿Cómo nacen tus personajes?<br />

Cada personaje nace por la necesidad de<br />

encontrarle la vuelta a algo que quiero decir.<br />

Por ejemplo, “Oliverio la Aceituna”<br />

aparece porque quería hacer humor negro.<br />

Como en La Nación tengo muchos<br />

lectores variados, no puedo publicar cualquier<br />

cosa como en Página/12. Entonces,<br />

encontré que a una aceituna podía matarla<br />

las veces que quisiera o ponerla en peligro<br />

de muerte. Otros personajes, como


44<br />

Entrevista a Liniers<br />

“La vaca cinéfila” o “El traductor”, aparecieron<br />

porque me gusta mucho el cine y<br />

quería contar cosas ridículas que veo en<br />

las películas. Para el surrealismo están los<br />

duendes, y de esa forma sigue la lista. Todos<br />

tienen algo para decir.<br />

Por momentos, pienso que la tira carece<br />

de personajes malos, porque en el fondo<br />

a todos siempre se los termina queriendo.<br />

¿Te pasa lo mismo en tu vida cotidiana?<br />

Creo que sólo hay malos y buenos en las<br />

películas. Nadie es el más malo del mundo<br />

o el más bueno. Pienso que la maldad<br />

es la falta de identificación y empatía con<br />

los demás, y todos pasamos por eso en algún<br />

momento. Cuanto más vivimos en la<br />

ciudad, esto aparece como un mecanismo<br />

de defensa. La gente va por la calle tratando<br />

de no hacer contacto visual, se deshumaniza<br />

y ése es el germen de la maldad.<br />

¿Por eso aparece tanto la Patagonia en tus<br />

dibujos?<br />

Claro. En el silencio, se puede pensar mucho<br />

mejor. Es más lógico que alguien saque<br />

una conclusión en la Patagonia, que<br />

en Córdoba y Santa Fe… (silencio, lo veo<br />

más pensativo). ¡En realidad, esas calles no<br />

se tocan! ¡Imaginate la falta de comunicación<br />

que hay!<br />

Pero vos vivís justo al lado de la 9 de Julio.<br />

Sí. Por abajo de mi casa, pasan cinco líneas<br />

de colectivos, pero me veo viviendo en<br />

algún momento en el Sur. Ahí voy a tener<br />

tanta paz, que las tiras van a ser al revés:<br />

todas mala onda (se ríe).<br />

¿Cómo definirías tu vocación?<br />

¡Con incredulidad! Jamás imaginé que esto<br />

podía ser un trabajo, y es increíble que<br />

lo que antes hacía gratis y por disfrute se<br />

haya transformado en mi profesión. No lo<br />

puedo creer.


46<br />

10 grandes<br />

descubrimientos<br />

¿Cómo sería una operación sencilla, como la extracción<br />

de una muela, si no existiera la anestesia? ¿Cuántas<br />

vidas salvaron los antibióticos desde que Alexander<br />

Fleming descubrió, en 1928, la penicilina?<br />

La revista especializada BMJ (British<br />

Medical Journal) realizó una<br />

encuesta entre cientos de lectores<br />

y expertos en Medicina para determinar<br />

cuáles fueron los grandes hallazgos<br />

médicos de los últimos dos<br />

siglos. De mayor a menor importancia,<br />

éstos son los resultados:<br />

1. Anestesia<br />

(del griego anaiszesía, que significa ‘insensibilidad’).<br />

En marzo de 1842, en Danielsville, Georgia,<br />

Estados Unidos, el doctor Crawford<br />

Williamson Long fue el primero en usar<br />

anestesia (éter) durante una operación, al<br />

administrarla a un niño antes de extirparle<br />

un quiste del cuello. Luego, fue el doctor<br />

odontólogo Horace Wells quien comenzó<br />

a utilizar el óxido nitroso como anestesia,<br />

después de haber visto al autotitulado<br />

profesor y químico Gardner Q. Colton incluir<br />

este componente en sus espectáculos,<br />

que consistían en administrar este gas<br />

a voluntarios del público. Esto los ponía en<br />

un estado de euforia y excitación (a veces,<br />

violentos), y perdían sus inhibiciones, para<br />

deleite del público. En una ocasión, uno<br />

de los voluntarios, bajo el efecto del gas,<br />

se hirió, y el doctor Wells observó que no<br />

sentía dolor. Sobre la base de esta experiencia,<br />

decidió comprobar sobre sí mismo<br />

si el óxido nitroso eliminaba el dolor y,<br />

el 11 de diciembre de 1844, tras aspirar el<br />

gas, su ayudante, John Riggs, le sacó una<br />

muela sin que Wells se quejara. Al desper-<br />

47


10 grandes descubrimientos<br />

48 nismos y que son derivadas de otros organismos<br />

vivos. Esa definición, por ende, excluye<br />

a aquellas sustancias naturales, como<br />

el jugo gástrico y el peróxido de hidrógeno,<br />

que pueden matar a un microorganismo,<br />

pero que no son producidas por<br />

otros microorganismos.<br />

49<br />

tar, Wells exclamó: “Una nueva era en la<br />

extracción de dientes”. Sin embargo, sólo<br />

dio a conocer esta información tiempo<br />

más tarde. Desde finales del siglo XIX, la<br />

anestesia continúa evolucionando.<br />

2. Antibióticos<br />

(del griego anti, ‘en contra’, y biotikos,<br />

‘dado a la vida’).<br />

Se trata de una sustancia secretada por<br />

un microorganismo que tiene la capacidad<br />

de afectar a otros microorganismos.<br />

El uso más remoto de los antibióticos co-<br />

Selman Waksman<br />

rresponde a los antiguos chinos, hace más<br />

de 2.500 años. En ese entonces, se sabía<br />

que la aplicación de la cuajada mohosa de<br />

la soya sobre ciertas infecciones traía beneficios<br />

terapéuticos.<br />

El primer antibiótico descubierto fue la<br />

penicilina, en 1897, por Ernest Duchesne,<br />

en Francia, cuando dio con las propiedades<br />

antibióticas de la especie Penicillium.<br />

Finalmente, el término fue utilizado<br />

por primera vez por Selman Waksman en<br />

1942 para describir ciertas “influencias antibióticas”,<br />

es decir, aquellas formulaciones<br />

antagonistas al crecimiento de microorga-<br />

3. Clorpromazina<br />

Es un medicamento neuroléptico hallado<br />

en 1950 por el francés Paul Charpentier y<br />

dado a conocer por otro francés, el doctor<br />

Henri Laborit. Este compuesto sorprendió<br />

al ver que actuaba como tranquilizante<br />

sin sedar, es decir, manteniendo la<br />

conciencia, lo que sugirió la idea de utilizarlo<br />

en pacientes psiquiátricos. Lo más<br />

curioso es que fue creado como antihistamínico;<br />

cuando un cirujano francés observó<br />

que, administrado antes de una<br />

operación (con el fin de disminuir una hinchazón),<br />

tenía efecto calmante, se pensó<br />

en su uso con pacientes psicóticos. Y<br />

fue un éxito: calmaba a los esquizofrénicos<br />

agitados y activaba a los embotados.<br />

La clorpromazina permitió que muchos<br />

esquizofrénicos abandonasen los manicomios<br />

e hiciesen una vida relativamente<br />

“normal”, y se la denomina la “Cuarta revolución<br />

en Psiquiatría”.<br />

4. Las computadoras<br />

La Medicina ha ido asimilando la introducción<br />

de las computadoras para agilizar y<br />

mejorar los procesos de apoyo médico,<br />

con gran influencia, que continúa aumentando,<br />

cada día más, con la incorporación<br />

de la Inteligencia Artificial en la vigilancia<br />

del paciente a través de complejos equipos<br />

biomédicos, la realización del procesamiento<br />

voluminoso de información para<br />

la toma de decisiones y diversas aplicaciones.<br />

Es posible hablar, entonces, del sur-<br />

gimiento de la Informática Médica, que<br />

comprende una amplia gama de cuestiones<br />

de la organización y del uso de la información<br />

biomédica.<br />

5. El descubrimiento de la<br />

estructura del ADN<br />

El ADN fue aislado por primera vez durante<br />

el invierno de 1869 por el médico suizo<br />

Friedrich Miescher. La función biológica<br />

del ADN comenzó a dilucidarse en 1928,<br />

con una serie básica de experimentos de la<br />

genética moderna realizados por Frederick<br />

Griffith. En los siguientes quince años, estos<br />

experimentos iniciales fueron duplicados.


10 grandes descubrimientos<br />

50 recobrado de un ataque, podían cuidar a<br />

los enfermos sin contraer la enfermedad<br />

por segunda vez. Muchas otras sociedades<br />

antiguas poseen referencias de este<br />

fenómeno, pero no fue sino hasta los siglos<br />

XIX y XX cuando el concepto fue llevado<br />

a la teoría científica.<br />

51<br />

Rayos X<br />

En 1944, Oswald Avery, Colin MacLeod<br />

y Maclyn McCarty. Espacio de más extrajeron<br />

la fracción activa (el factor transformante)<br />

y, mediante análisis químicos, enzimáticos<br />

y serológicos, observaron que no<br />

contenía proteínas, ni lípidos no ligados, ni<br />

polisacáridos activos, sino que estaba constituido<br />

principalmente por “una forma viscosa<br />

de ácido desoxirribonucleico altamente<br />

polimerizado”, es decir, ADN. A pesar<br />

de que la identificación del ADN como<br />

principio transformante tardó varios años<br />

en ser universalmente aceptada, este descubrimiento<br />

fue decisivo en el conocimiento<br />

de la base molecular de la herencia, y<br />

constituye el nacimiento de la genética molecular.<br />

Finalmente, el papel exclusivo del<br />

ADN en la heredabilidad fue confirmado<br />

en 1952 mediante los experimentos de Alfred<br />

Hershey y Martha Chase, en los cuales<br />

comprobaron que el fago T2 transmitía su<br />

información genética en su ADN, pero no<br />

en su proteína. Desde entonces, el estudio<br />

del genoma humano ha permitido grandes<br />

progresos en el estudio de enfermedades<br />

hereditarias.<br />

6. La Medicina basada<br />

en la evidencia<br />

Este término, acuñado en la Universidad<br />

de Ontario, en Canadá, implica que los<br />

tratamientos médicos se basarán siempre<br />

en el uso racional y actualizado de la mejor<br />

evidencia científica. Además, se asienta<br />

sobre la revisión sistemática.<br />

7. Teoría de los gérmenes<br />

A mediados del siglo XIX, el científico<br />

francés Louis Pasteur explicó que el origen<br />

y la evolución de las enfermedades eran<br />

semejantes a los procesos de fermentación.<br />

Es decir, la enfermedad surge por el<br />

ataque de gérmenes que están fuera del<br />

organismo, igual que los microorganismos<br />

no deseados invaden la leche y causan su<br />

fermentación. El descubrimiento de esos<br />

“asesinos invisibles” llamados gérmenes<br />

provocó que, a principios del siglo XX, la<br />

mortalidad causada por infecciones disminuyera<br />

del 30% al 4%.<br />

Louis Pasteur La tecnología aplicada a la Medicina<br />

8. Rayos X y otras técnicas de la imagen<br />

(ecografías, tomografías, etcétera)<br />

Los rayos X fueron inventados por Wilhelm<br />

Röntgen hace dos siglos cuando investigaba<br />

los efectos de ciertos gases al<br />

aplicarles descargas de energía. Estos experimentos<br />

se desarrollaban en un tubo<br />

vacío, y electrodos para generar corrientes<br />

de alto voltaje. El tubo, al estar cerca<br />

de placas fotográficas, generaba en ellas<br />

algunas imágenes borrosas. De esta manera,<br />

se reveló al mundo qué existía dentro<br />

de nuestros organismos y se propició<br />

la creación de nuevas técnicas de cirugía.<br />

9. Inmunología (del latín inmunis,<br />

que significa ‘exento’).<br />

La inmunología clásica está involucrada en<br />

los campos de la epidemiología y la Medicina.<br />

Estudia la relación entre los sistemas<br />

corporales, patógenos, e inmunidad.<br />

El escrito más antiguo sobre la inmunidad<br />

se refiere a la plaga de Atenas en el 430 a.<br />

C. Tucídides notó que quienes se habían<br />

10. Píldora anticonceptiva<br />

En 1944, Russell Marker comenzó a producir<br />

progesterona (binomio hormonal<br />

femenino), a partir de un compuesto llamado<br />

diosgenina, hallado en la raíz de la<br />

planta denominada “Cabeza de negro”.<br />

Para mediados del siglo XX, laboratorios<br />

Synthesis y, simultáneamente, G. D. Searle<br />

anunciaron la elaboración de dos derivados<br />

de la progesterona: la noretindrona<br />

y el noretinodrel. A la larga, serían los<br />

gestágenos de los primeros anticonceptivos<br />

orales utilizados. Por la misma época,<br />

la Worcester Foundation for Experimental<br />

Biology patrocinó los trabajos de John<br />

Rock, en Harvard, y de Gregory Pincus y<br />

M. C. Chang, en Worcester. En 1956, en<br />

San Juan de Puerto Rico y en Haití, administraron<br />

bajo supervisión médica el primer<br />

anticonceptivo oral combinado, y la<br />

primera píldora de gestágeno solamente.<br />

En 1960, se introdujeron masivamente en<br />

todo el mundo los anticonceptivos orales.<br />

Desde entonces, John Rock y Gregory<br />

Pincus son considerados los padres de<br />

la píldora anticonceptiva. Elevada como<br />

“bandera de la liberación”, la píldora ofrece<br />

a las mujeres la posibilidad de decidir<br />

en qué momento quedar embarazadas.<br />

Fuente: BMJ (British Medical Journal)


52<br />

53<br />

Películas y<br />

pandemias<br />

Luego de la primera entrega de Películas y Pandemias, donde<br />

abordamos la difteria, el cólera, la fiebre amarilla, la peste<br />

negra y el ébola, llega la segunda parte. Una pandemia,<br />

como su nombre lo indica, es una “enfermedad de todo el<br />

pueblo”, y es por esto que, a lo largo de los casi 114 años de<br />

vida que tiene el cine, sus directores y guionistas vieron en<br />

estas desgracias fuertes motivos para llevarlas a la pantalla<br />

grande.<br />

Fiebre Tifoidea<br />

También llamada fiebre entérica, es una<br />

enfermedad infecciosa producida por Salmonella<br />

typhi (bacilo de Eberth), o Salmonella<br />

paratyphi A, B o C. Su reservorio<br />

es el hombre, y el mecanismo de contagio<br />

es fecal-oral, a través de agua y de alimentos<br />

contaminados con deyecciones.<br />

En el período de incubación, que dura entre<br />

10 y 15 días, se aprecian trastornos<br />

del estado general, una fase de bacteriemia<br />

con fiebre que aumenta progresivamente,<br />

hasta alcanzar los 39-40 ºC –y se<br />

mantiene–, cefalea, estupor, roséola en el<br />

vientre, tumefacción de la mucosa nasal,<br />

lengua tostada, úlceras en el paladar y, a<br />

veces, hepatoesplenomegalia y diarrea. Si<br />

no se somete a un tratamiento adecuado,<br />

pueden presentarse complicaciones<br />

graves, como hemorragia y perforación<br />

intestinal, y shock séptico.<br />

Fundoshi Isha (1960), de Hiroshi Inagaki:<br />

siglo XIX, un joven médico entrenado en<br />

las tecnologías modernas del momento<br />

asiste a un anciano doctor rural que se<br />

empeña en utilizar sus tradicionales prácticas<br />

por sobre las nuevas modalidades<br />

que el muchacho pretende introducir.<br />

Una epidemia de fiebre tifoidea ofrece<br />

la oportunidad de evaluar ventajas y desventajas<br />

de lo nuevo y lo viejo en el campo<br />

de batalla que representan las vidas de<br />

la población.<br />

Sarampión<br />

Se trata de una enfermedad infecciosa,<br />

exantemática como la rubéola y la vari-<br />

cela, bastante frecuente, especialmente<br />

en niños o adolescentes, causada por un<br />

virus, específicamente un paramixovirus<br />

del género Morbillivirus. Se contagia<br />

a través de la respiración (contacto con<br />

fluidos nasales y bucales de una persona<br />

infectada, ya sea directamente o a través<br />

de vía aérea) y es altamente contagiosa:<br />

el 90% de las personas que no posean<br />

inmunidad y se pongan en contacto con<br />

una persona infectada la adquirirán. Se<br />

caracteriza por típicas manchas en la piel<br />

de color rojo (exantema), fiebre y un estado<br />

general debilitado. En algunos casos<br />

de complicaciones, también puede causar<br />

inflamación en los pulmones y el cerebro,


Películas y pandemias<br />

54 55<br />

orden, que tratan de atrapar a la persona<br />

que puede estar diseminando la infección<br />

sobre la gran ciudad.<br />

que amenazan la vida del paciente.<br />

En la mayoría de los países, la enfermedad<br />

debe ser declarada obligatoriamente<br />

a las autoridades de salud social.<br />

Hawaii (Hawai, 1966), de George Roy<br />

Hill: narra las complejas situaciones que<br />

se viven en las islas de Hawaii durante las<br />

décadas de 1820-1830 desde el punto<br />

de vista de los misioneros que tratan de<br />

evangelizar a los nativos, y también desde<br />

la postura de los hawaiianos de abandonar<br />

las tradiciones de incesto y paganismo, y<br />

abrazar una nueva fe. En este ámbito, una<br />

terrible epidemia de sarampión liquida a<br />

cientos de nativos y, por supuesto, no faltará<br />

quien atribuya el flagelo a ese nuevo<br />

y cruel Dios.<br />

Viruela<br />

La viruela es una enfermedad infecciosa<br />

grave, contagiosa, causada por el Variola<br />

virus, que en algunos casos puede causar<br />

la muerte. No hay tratamiento especial<br />

para la viruela, y la única forma de prevención<br />

es la vacunación. El nombre viruela<br />

proviene de la palabra latina que<br />

significa “manchado”, y se refiere a los<br />

abultamientos que aparecen en la cara<br />

y en el cuerpo de una persona infectada.<br />

Según la OMS, la viruela es la única enfermedad<br />

que está totalmente erradicada<br />

del planeta.<br />

A matter of who (Un caso extraño, 1961),<br />

de Don Chaffey: los más influyentes<br />

empresarios petroleros del mundo co-<br />

mienzan a morir de una extraña dolencia<br />

(viruela). Un agente de WHO (World<br />

Health Organization) viaja al Oriente Medio<br />

a investigar el asunto, descubriendo<br />

una trama siniestra llevada a cabo por un<br />

empresario para controlar a sus competidores.<br />

The killer that stalked New York (Mensajera<br />

de la Muerte, 1950), de Earl McEvoy:<br />

una pareja que contrabandea diamantes<br />

de Cuba a Nueva York trae también un<br />

misterioso cargamento: viruela. La mujer,<br />

insospechadamente enferma, debe sortear<br />

el seguimiento de un agente del Tesoro<br />

y se oculta en el hotel de su hermana.<br />

Cuando cae enferma, acude a un doctor,<br />

quien piensa que sufre de un resfrío. Pero<br />

cuando una niña que también estaba en<br />

el consultorio muere repentinamente de<br />

viruela, la verdadera situación surge a la<br />

luz. La alerta cunde entre las fuerzas del<br />

VIH sida<br />

El sida (de SIDA, acrónimo de Síndrome<br />

de Inmunodeficiencia Adquirida; en inglés,<br />

AIDS) es una enfermedad que afecta<br />

a los humanos infectados por el VIH<br />

(virus de inmunodeficiencia humana).<br />

Una persona padece de sida cuando su<br />

organismo, debido a la inmunodepresión<br />

provocada por el VIH, no es capaz de<br />

ofrecer una respuesta inmune adecuada<br />

contra las infecciones que aquejan a los<br />

seres humanos. Se dice que esta infección<br />

es incontrovertible.<br />

Cabe destacar la diferencia entre estar<br />

infectado por el VIH y padecer de sida.<br />

Una persona infectada por el VIH es seropositiva<br />

y pasa a desarrollar un cuadro de<br />

sida cuando su nivel de linfocitos T CD4<br />

(que son el tipo de células a las que ataca<br />

el virus) desciende por debajo de 200 células<br />

por mililitro de sangre.<br />

El VIH se transmite a través de los fluidos<br />

corporales, tales como sangre, semen, secreciones<br />

vaginales y leche materna.<br />

And the band played on (Y la banda siguió<br />

tocando, 1993), de Roger Spottiswoode:<br />

la acción transcurre en un centro de<br />

control del sida en Atlanta, donde un investigador<br />

y sus colegas luchan contra la<br />

enfermedad, y contra la falta de fondos<br />

y la indiferencia general para aislar el virus.<br />

Pero no todo es desinteresado, pues<br />

otros trabajan en la misma dirección, pero<br />

en la búsqueda de la gloria personal.


Películas y pandemias<br />

56 57<br />

Longtime Companion (Amigos inseparables,<br />

1990), Norman René: esta película<br />

relata la historia de un grupo de amigos en<br />

los primeros años del flagelo del sida, contada<br />

por capítulos divididos por fechas.<br />

Philadelphia (1993), de Jonathan Demme:<br />

Andrew Beckett (Tom Hanks) es joven,<br />

inteligente y tiene un brillante futuro<br />

en la prestigiosa compañía donde trabaja<br />

como abogado. Pero Andrew es también<br />

homosexual, tiene un amante latino y ha<br />

contraído el sida. Cuando los primeros signos<br />

de su enfermedad empiezan a hacerse<br />

evidentes, es repentinamente despedido,<br />

acusado de negligencia profesional. Andrew<br />

sabe que la razón de su despido ha<br />

sido otra y decide presentar una demanda<br />

contra la empresa. Joe Miller (Denzel Washington)<br />

es el único abogado de la ciudad<br />

que se atreve a aceptar el caso.<br />

Un año sin amor (2004), de Anahí Berneri:<br />

narra la vida de un joven escritor enfermo<br />

de sida, que pelea día a día contra su<br />

enfermedad. En esa batalla, se introduce<br />

en prácticas sadomasoquistas. A través<br />

del goce del dolor, busca la fuerza para<br />

seguir viviendo y encontrar un amor verdadero.<br />

Kids (Kids: golpe a golpe, 1995), de Larry<br />

Clark: relata las 24 horas frenéticas<br />

de la vida de un grupo de adolescentes<br />

neoyorquinos que, como tales, se creen<br />

invencibles, y sólo viven pensando en el<br />

sexo y las juergas. Todo se acaba cuando<br />

una de las chicas del grupo descubre que<br />

se contagió de sida en la única relación<br />

sexual que ha tenido. Una historia que<br />

afronta la realidad de la sexualidad, forzándonos<br />

a reconocerla aún cuando ésta<br />

nos moleste.


58<br />

DICIEMBRE<br />

Wilderness Medicine Educational<br />

Conference & Aconcagua Climb<br />

59<br />

viernes 11 y sábado 12<br />

Mendoza, Argentina<br />

Eventos y<br />

Congresos<br />

DICIEMBRE 2009 / MARZO 2010<br />

Jornadas Multidisciplinarias de<br />

Gerontología y Geriatría<br />

Catamarca 147, Mendoza<br />

Info:<br />

www.gerontogeriatria.org.ar<br />

viernes 11<br />

Taller Multidisciplinario de Cáncer<br />

de Recto<br />

Paraguay 2155., CABA<br />

Info:<br />

4827-6300 interno 325<br />

debenedetto@diagnosticomedico.com<br />

lunes 14 y martes 15<br />

Curso Universitario de Medicina Familiar<br />

y Práctica Clínica Ambulatoria<br />

Sarmiento 4553, CABA<br />

Info:<br />

4959-0381 y 4959-0200 int. 5288<br />

www.fundacionmf.org.ar<br />

ENERO<br />

miércoles 6 a sábado 23<br />

Info:<br />

info@andesmountainguides.com<br />

MARZO<br />

jueves 11 a sábado 13<br />

1º Congreso Internacional de<br />

Carreras de Grado y Pregrado de<br />

Gerontología<br />

Universidad Maimónides, Hidalgo 775, CABA<br />

Info:<br />

(011) 4905 1159 / (011) 4905 1179<br />

gerontologia@maimonides.edu<br />

jueves 18 a sábado 20<br />

VI Conferencia Internacional de<br />

Enfermedades Raras y <strong>Dr</strong>ogas<br />

Huérfanas / Global Approaches to<br />

Accessibility and Neglected Diseases<br />

Palais Rouge, Jerónimo Salguero 1433, CABA<br />

Organiza International Conferences<br />

for Rare Diseases and Orphan <strong>Dr</strong>ugs<br />

(ICORD).<br />

Info:<br />

0800-333-RARAS<br />

fundgeiser@yahoo.com.ar<br />

www.icord.se / www.fundaciongeiser.org


60<br />

Bonus<br />

Humor<br />

61

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