Copa de .1969 - Athletic TV

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Fundador: JAIME GRAU CASTELLi(
PESANLOSVEINTE.
T1TULOS BILBAINOS, PERO
ELCHE PUEDEDARLA.
CAMPANA
EL ATLETICO DE BILBAO LLEGA A LA FINAL
SIN HABER CONOCIDO LA DERROTA
MAI)R1D. (De nuestro envia
do especi&, José Mifi.)
Es cierto que si repasamos los
historiales de la final de Copa,
llegaremos a la conclusión de
que «el pez grande se come al
chico».
Pero en esta ocasión no puede
considerarse al Elche tan chiqui
liii —pongamos por caso— como
lo fuera el Granada en 1959 fren
te al Barcelona o en apariciones,
en otras finales, de Valladolid• y
Celta.
Se trata de una final, en que
si bien es verdad, que va a jugar
lebre frase del «Atlético de Bil
bao y otro», esta vez, el otro, es
un equipo que ha cumplido ya
los diez años consecutivos de per
manencia en Primera División y
si bien esverdad, que va a jugar
su primera final, existen una senc
de circunstancias para esperar
un intcrcsantísimo juego de con
trastes por parte de un Elche que,
fisicamente, se le puede valori
zar hasta incluso superior al gran
rey de las finales y que procur
rá igualarle en empuje y entu
siasmo.
Cada equipo tendrá su «orfe
ón» en el Bernabeu, sin duda más
nsuneroso el bilbaíno, contrarres
tado este detalle por el importan
te factor neutral, que casi siem
pre suele simpatizar, en un prin
cipio, por el más débil. Tras nues
tra llegada a la capital, hemos
podido cercioramos de la inva
sión bilbaina y la masiva pre
sencia ilicitana. Los oxpediciona
- ríos siguen llegando sin cesar.
De cualquier forma y sea cual
fuere el resultado de esta final,
que en interés no le anda a la
zaga a la que se disputó el año
pasado entre el Barcelona y Real
Madrid, igualmente nos congratu
laremos, mañana, en saludar el
titulo que sumaría el nómero 21
para el club histórico de San
Mamás, por el detalle simpático
de tratarse de un equipo román
tice que lucha por las victorias,
que no llegaron en los (iltiinos
años, cori elementos formados en
equipos vascós, ya muy lejanos
los tiempos en que SUS primeros
títulos los obtuvo con algunos ju
gadores forasteros. Y de igual
manera creemos sería una sana
aportación al equilibrio del fút
bol español, un triunfo del entu
siasta Elche, que dejaría una es
tela de incertidumbre e interés
ante las futuras luchas en el pri
mer plano nacional.
Para que el fútbol nacional
goce de la buena salud del inglés,
hará falta que, como en la Liga
inglesa, sea posible que no haya
solamente un par: de favoritos.
Cualquier equipo puede ganar la
Liga inglesa. Veamos si no como
en los últimos años hemos visto
en Copa de Europa al Ipswich
o al Gurley y en la próxima edi
ción al United, por vez primera.
La igualdad de fuerzas, en re
sumen, asegura un alto nivel
que, en el fútbol español, no se
ha alcanzado en el orden inter
nacional de selecciones. Los éxi
tos en las competiciones de clubs,
en el fondo, son consecuencia,
también, del desnivel existente
eñ el resto de competidores.
Afortunadamente, aquí está el
Elche en la final de Copa, para
acreditar sus fundadas aspiracio
nes futuras.
Su campaña en la Liga, con
once punto8 conquistados en
campo contrario, con victoriaa
en Zaragoza y Las Palmas, y
meritorios empates en Chamar
tin, «Camp Nou», Manzanares
y Sarriá, entre otros, atestiguan
que el equipo ilicitano ha alcan
zado un meritorio nivel. Es un
conjunto que se entiende bien y
de los que mejor sabe jugar al
- contrataque Y si no estuvo más
arriba kl final de la pasada Li
ga, fue, seguramente, porque su
juego actual merece una nueva
proyección, que le vedó las minimes
dimensiones de su campo
de Altabix, donde perdió la frio
-lera de doce puntos debido a que
el estredilsimo cerco defensivo
de sus visitantes no favorecía,
precisamente, su actual j ncgo. Ee.
ta es, por lo menos, nuestra opi
nión.
Pero la veteranía es un gra
do y no vamos a ser nosotros
quienes desestimemos las pósi
bilidades del Atlético.
Ante el pronóstico está en el
fiel de la balanza, con el equi
librio que justifica todo el in
terés que el partido decisivo ha
despertado en Bilbao, Elche, Ma
drid y toda España.
El viernes, el trío selecciona
dor daba a conocer su lista de
22 preselecc.onados para el pró
ximo encuentro en Helsinki fren
t’s a Finlandia. En ella figuran
tres jugadores del Elche: Balles
ter, Llompart y Asensi, junto
con Clemente, uno de los bilbaí
nos más «cachorros».
Por otra parte, el Bilbao llega
a la final sin haber conocido
una sola derrota, mientras que
el Elche perdió en dos de sus
actuaciones una de ellas
dio ocasión a desempate, salió
de ella bien librado, frustrando
la esperanza de una final vasca.
Si el Atlético de Bilbao ha
visto rechazada su candidatura
en la Copa de Ferias, tiene an
te sí su gran oportunidad para
estar en la Recopa, competición
en la que nunca intervino toda
vía, pues en 1958, último cam
peonato que ganó, todavía la
UEFA no había creado su com
petición para campeones de
Copa,
Pero el motiesto y entusiasta
Biche también se ha encariñado
con la idea de respirar aires de
internacionalidad, en los que van
a oxigenarse, por vez primera,
Las Palmas y Sabadell en la pró
xima temporada.
Lo curioso es que los dos fi
nalistas llegan a ella sin contactos
directos con los que al
empezar la Copa eran señalados
como máximos favoritos.
El Atlético de Madrid fue
quien dejó en la cuneta al Real
Madrid. La . Real Sociedad al
Barcelona y Atlético de Madrid.
Aunque por su parte el Elche
eliminó al Valencia y el Bilbao
al Zaragoza.
En fin, una serie de resultados
La tajiIia de aspaüa registra uiia edadera invasión de bilbaínos
e ilicitanos, deseosos de prestar aliento a su equipo en el trascenden
tal partido de esta noche. Ni que decir tiene que éstos que posan
junto al símbolo de Madrid, van a enronquecer animando a los
«leones» (Foto CIFRA)
que justifica se hablara estos
cijas de la rebelión de los mo
destos. Pero sus campañas han
despertado interés y simpatía
que justifican un ambiente que
recuerda el de las más clásicas
finales en la historia de la com
petición.
A esperar, pues, que el señor
Camacho, a las nueve de la no
che, señale que ha llegado la
hora de la verdad.