Nuestro Socio del Mes - Cámara Chileno-Suiza de Comercio AG

Newsletter Nº 17 – Julio/Agosto 2010
económico sino también bien ecológico. Además
hay otra posibilidad que mucha gente no
contempla y que es la vía fluvial desde Basel,
hasta Rotterdam y Amberes. Entonces, la primera
etapa, sería ir con un contenedor vacío a buscar
la carga en origen, volver el contenedor cargado
al lugar de salida del ferrocarril o puerto fluvial y
de ahí hacia el puerto de embarque designado.
De puerto a puerto hay un tiempo de tránsito que
depende de la distancia, ruta y otros factores. En
el caso de Chile éste puede llegar a 20-30 días.
En el puerto de llegada en Chile se procede a
desaduanar para posteriormente llevarla al
destino final por camión. Una alternativa es
descargar el camión en el puerto o ir con el
contenedor completo hacia domicilio, que es lo
que normalmente. Ahí se descarga y se devuelve
inmediatamente el contenedor.
Cuántas personas se ven involucrada en este
proceso?
Afuera es sumamente simple. En Suiza, sólo se
ocupa una persona de coordinar el camión, la
reserva del buque, todo lo referente a la
documentación. En general así se hace en Suiza.
En Chile, puede ser una persona que hace el
seguimiento de la carga (que puede ser un
customer service). Otra persona se encarga de la
documentación y una tercera persona hace el
despacho de aduana, como en nuestro caso,
hasta domicilio.
Si bien pareciera que hay mucha gente
involucrada, bien organizada, hoy en día mover
carga no es difícil.
En Suiza se les va a facilitar el trabajo con el
proyecto NEAT?
Cuando hay proyectos, siempre estamos
interesados, porque aparte tenemos una división
de proyectos que esta involucrada en proyectos
de energía a nivel global. Hoy en día en la parte
de proyectos Panalpina es una de las empresas
más importantes del mundo. Es una división que
reporta directamente a casa matriz. Cada vez que
hay proyectos Panalpina se interesa y le hace
seguimiento. Por ejemplo, en un proyecto de
túneles, lo que más nos interesa son
maquinarias pesadas o con sobre medidas que no
se puede transportar simplemente en un
contenedor. Ahí se requieren de otras
herramientas y de otro tipo de logística
especializada en este rubro. A nosotros un
proyecto similar en Chile nos podría beneficiar.
No solamente en maquinarias sino que en todos
los insumos que pueden llegar a acompañar un
proyecto de esta índole.
Que le pareció la iniciativa de una chilena en
Suiza para la campaña de donación.
Yo diría que esto es algo típicamente suizo. El
suizo piensa en algo y quiere rápidamente
concretar. Aparte de la ayuda humanitaria, de
los beneficios locales, pienso que definitivamente
es algo extraordinario. Si hubiera más gente
como ella, un montón de desgracias se podrían
manejar de manera más humana y más rápida.
Me complace que una persona allá haya tenido
esta iniciativa y que pueda además ver el fruto de
su trabajo. En este caso puntual, con el
seguimiento que le damos, ella va a ver
directamente el impacto que ha tenido su
iniciativa.
Qué significa para usted en lo personal, ser
el eslabón entre Suiza y Tirúa.
Para nosotros, tanto a nivel de empresa como en
lo personal, es algo que teníamos que hacer. No
podemos decir no si se nos pide ayuda. Es algo
que al final del día podríamos interpretar como
trabajo pero finalmente es muy grato de hacer.
No se trata de mover una máquina o productos
químicos con fines comerciales. Esto es mover
carga con fines humanitarios. Por eso me gustó
involucrarme. La gente acá lo hizo con más
ganas. El hecho de que la Cámara haya pedido
ayuda a Panalpina, nos permitió involucrarnos
mucho para traer esta carga.
Como ven sus pares suizos esta cruzada
para Chile. Nos ven muy lejanos?
Panalpina es una empresa global y hoy en día hay
una integración global. Todo lo que antes podría
ser lejos, hoy en día con los medios de
comunicación que hay (teléfono, email, internet,
etc.) hace que todo sea muy cercano. El punto es
que ellos sabían lo que pasó acá, porque nosotros
también nos vimos damnificados. Estuvimos sin
operar 2 días. Entonces ellos estaban en total
conocimiento y además preocupados. Cuando se
les planteó la posibilidad de ayudar, hicieron un
esfuerzo adicional, tomando en cuenta que están
acostumbrados a mover otro tipo de carga.
Tomaron contacto con la gente en Suiza que
organizó todo. Panalpina como empresa, con
aviones propios que está muy presente en países
que siempre requiere ayuda, como por ejemplo
Africa, ha tomado esta ayuda a Chile en cierta
manera, como algo “normal”.
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INFORMACIONES DE
LA CAMARA
RENUNCIAS DEL DIRECTORIO
Lamentamos informar a nuestros socios que por
motivos estrictamente personales, durante el
presente mes de agosto han renunciado al
Directorio de la Cámara Chileno-Suiza de
Comercio A.G. los señores Eduardo Couyoumdjian
y André Boeck.
El Directorio agradece profundamente el
constante esfuerzo y muy valiosos aportes
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