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29. festival internacional del nuevo cine latinoamericano / del 4 al 14 de diciembre Viernes 14 de diciembre de 2007
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Primer Plano
MARIANA RONDÓN
(Venezuela, 1966). Directora, guionista y productora. Estudió Animación
en París y en la EICTV. Debutó en el largo con A la media noche y
media, seleccionado por 36 festivales, y premio Opera Prima en
Providence.
MARIEM PÉREZ RIERA
(Puerto Rico, 1972). Estudió en la Universidad de Nueva York y en la
EICTV. Dirigió el documental Cuando lo pequeño se hace grande,
premiado por ocho festivales.
MARILÍA ROCHA
(Brasil, 1978). Ha realizado 11 documentales, filmes y experimentales,
entre ellos Aboio, exhibido en el MOMA y ganador de É tudo
verdade.
MARISOL JASSO MÉNDEZ
(México, 1975). Estudió Licenciatura en Artes Audiovisuales. Guionista
de cortometrajes y mediometraje. Ojos que no ven ganó la convocatoria
que lanzan la Academia Jalisciense de Cinematografía e
IMCINE.
MARIO RIVAS
(Cuba, 1939). Uno de los más prestigiosos realizadores de animados
cubanos. Graduado de San Alejandro, acumula una extensa filmografía
que incluye episodios de Elpidio Valdés, Filminutos, Historia
de las abejas y Fernanda.
MARTÍN CARRANZA
(Argentina, 1968). Estudió Dirección en el CERC y Fotografía en TEA.
Fue asistente de dirección en más de veinte filmes de Alejandro Agresti,
Alberto Lecchi, Carlos Saura y Héctor Olivera.
MIGUEL ANAYA BORJA
(México, 1966). Realizó un diplomado de Cine, Arte y Comunicación.
Tomó también talleres de Guión y Fotografía en el CUEC. De la
vista nace el amor ha sido exhibido en más de 20 festivales.
MIGUEL ÁNGEL VIDAURRE
(Chile, 1969). Ensayista, crítico de cine, guionista, comentarista radial
y de televisión, y académico de diversas instituciones en las áreas de
Historia y Estética del Cine.
NAZLY LÓPEZ DÍAZ
(Colombia, 1979). Graduada de Ciencias Políticas y egresada de la
EICTV. Pucha Vida ganó el Premio Caracol de la UNEAC de Fotografía.
OLALLO RUBIO
(México). A los diecisiete años comenzó como conductor radiofónico.
Al poco tiempo, es director creativo de una emisora y luego director
general.
OMAR PROENZA
(Cuba, 1983). Animador principal de los Estudios de Animación ICAIC.
Ha trabajado en numerosos cortos, spots televisivos, Filminutos y video
clips, así como en la serie Fernanda.
PABLO FENDRIK
(Argentina, 1973). Se graduó en 1995 en el Centro de Investigación
Cinematográfica. El asaltante, su opera prima, obtuvo premio al Mejor
Actor en BAFICI y estuvo en la Semana de la Crítica de Cannes.
OTTO GUERRA
(Brasil, 1965). En los 80 y 90 realizó comerciales, pero se fue moviendo
hacia la ficción. Wood y Stock: sexo, orégano y rock’n roll obtuvo
Premio Especial del Jurado, a la Mejor Banda Sonora y al Mejor
Personaje Secundario en Cine-Pé.
PABLO LOBATO
(Brasil, 1976). Estudió Fotografía y se graduó de Comunicación y Artes.
Es fundador de TEIA. Accidente fue seleccionado por Locarno, Sundance
y Rotterdam, y resultó Mejor Documental en FestRio.
PABLO POLLEDRI
(Argentina, 1975). Licenciado en Publicidad. A partir de 2003 realiza
cortos animados. Los pecadores ha sido premiado en festivales de
Italia, España y Argentina.
El Clavel Negro
Por ORLANDO CONTRERAS
Llegué a Santiago de Chile la noche del 10 de septiembre
de 1973 en vuelo desde La Habana. En el mismo avión iba
toda la compañía de un ballet ruso, muy bueno, que se
presentó en el gigantesco Teatro Karl Marx. Días antes del
inesperado viaje a Chile había ido a verlo. Trabajaba entonces
en Prensa Latina y teníamos noticias de que la situación
en que se encontraba el gobierno de la Unidad
Popular no era buena. Había paro de camioneros en el país
más largo de América Latina, que comienza en el desierto
del Norte y termina bordeando los glaciares del Polo Sur.
Sin camiones colapsa la economía de Chile en esa loca
geografía.
No está de más recordar una reunión en la Casa Blanca
entre Nixon, Kissinger y el embajador norteamericano
en Santiago. En sus memorias, Kissinger recuerda que su
Presidente dio un golpe cargado de ira en el buró y ladró:
“Hay que aplastar (smach) a ese son of a bitch”.
Los camioneros estaban manejados por una cúpula
gremial oportunista y mafiosa. Negociaron con los gringos
el precio del paro total en Chile. Les pagaron como si estuvieran
trabajando… sin mover un camión. El escenario
estaba listo para el Golpe, que comenzó por la Marina de
Guerra en Valparaíso y en el extremo sur del país, con una
violencia desconocida hasta entonces. Se decretó el toque
de queda de 24 horas, se anunció por los medios que el
ciudadano que fuera sorprendido con un arma, cualquiera,
sería ejecutado in situ. Media hora después, las emisoras
tomadas por los militares anunciaban la ejecución en el
Ustedes tienen la palabra
Por JULIO C. BETANCOURT
“Siempre es una alegría venir, porque este foro es maravilloso.
Siempre estamos contentos por recibir el calor de los
cubanos. No se puede faltar a esta cita.”
Gonzalo López (Latino Film Festival)
“En esta edición he encontrado gran variedad de géneros y
temáticas; hay para los cinéfilos más exigentes y también
para los cineros.”
René Canales (Estudioso del cine)
“Al menos en los de la calle 23, se nota la mejoría de los
cines. Siempre es mejor ver películas en cines lindos y
cómodos.”
Mabel Cruz (Económica)
“Es mi primera vez en La Habana y aunque me resulta complejo
entender la dinámica del evento, me siento maravillado
por este espacio para encontrarse los cineastas todos.”
Roberto Asquieri (Radio Chilena)
mismo sitio de la detención, en la calle, en un parque, en
un apartamento, donde lo sorprendieran. Ejecución donde
te cogían. El terror como arma de combate.
Llegué a Santiago de noche. Me fue a buscar mi cuñado.
Cruzamos casi todo Santiago desde el aeropuerto al
llamado barrio alto. Conversamos sobre lo que estaba pasando
con un par de botellas de buen vino. Y a dormir.
Dormí poco. Me despertaron con la noticia del Golpe. En
un Fiat 600 me llevaron unos muchachos al centro de la
ciudad. Me dejaron en la estación Mapocho. Comenzaron
los tiros y segundos después no había nadie en las calles,
solo soldados ocupando posiciones. Pegado a las paredes
fui avanzando hasta llegar a Prensa Latina, en Unión Central
1010, no se me olvida, entre Ahumada y Bandera. En el
piso 11 estaban las oficinas. Allí estuvimos dos días. Al
tercero, nos fuimos a la Embajada cubana y se parlamentó
la salida. Mario García Incháustegui, el Embajador, argumentó
mi condición de periodista y los militares me dieron
por fin el salvoconducto.
Éramos muchos y podíamos caer en una trampa fatal.
El embajador Edelstam, de Suecia, dijo que él iría con nosotros
y no se movería del aeropuerto hasta que el avión
hubiera despegado. Nos dijo también que el Embajador de
México se unía a la caravana. Nos fuimos en unas pequeñas
“guagüitas” verdes de carabineros, con militares apuntando
hacia la calle y hacia nosotros. ¿Qué podía pasar en
el trayecto? Que un comando de la resistencia al ver esas
caravanas de guaguas de la policía dispararan. Y nos hubieran
liquidado entre el fuego enemigo y amigo. Escoltados
por el Embajador Edelstam y el Embajador mexicano llegamos
al aeropuerto, tomado por la Fuerza Aérea, con despliegue
de ametralladoras de distintos calibres. A la hora
de pasar por inmigración, vi una cara que me parecía conocida
de otros viajes. Pasaporte, me dijo. El único documento
que llevaba arriba era un carné de prensa del Uruguay,
de mis tiempos de trabajo en ese país inolvidable.
Cuando se lo entrego al funcionario, levantó los hombros
como diciendo, ¿y esto qué es? Yo hice un gesto similar. Y
pasé. Buen viaje, me dijo el funcionario. Ese no era golpista.
Cuando caminábamos hacia el avión rodeados de militares
de la Fuerza Aérea golpista, en una atmósfera tensa,
el Embajador Edelstam estaba también allí, velando para
que no se cometiera otro atropello o un nuevo crimen.
Treinta y cuatro años después de esos sucesos que conmovieron
al mundo, parte de esos hechos renacieron en El
Clavel Negro, película del 29. Festival Internacional del Nuevo
Cine Latinoamericano que vi en el Payret, a teatro lleno.
Los aplausos no eran solo para los cineastas. Edelstam,
que murió hace años, bien merecía ese recuerdo.
“Me encanta el público, en el cine Yara, cuando se empieza
a pelear con la película. Es una experiencia que todo director
tiene que vivir; si no, no ha aprendido nada de la vida.”
Mariana Rondón (Directora de Postales de Leningrado)
“Este es el mejor Festival para ver tu película con la gente,
saber su reacción sobre la historia.”
Mariem Pérez Riera y Carlitos Ruiz (Directores de
Maldeamores)
“Creo que hay tanto nivel en un filme como Cobrador…
que en El infierno. Poder apreciar películas como La boda de
Tuya es algo extraordinario.”
Yorleidys Pompa (Estudiante de Bioquímica)
“La Habana siempre es maravillosa y su gente mejor.”
Hanna Schygulla (Actriz alemana)
“Sigo teniendo el mismo amor entrañable por Cuba desde
mi primer viaje, en 1978.”
Luis R. Vera (Director del filme Fiestapatria)