1t2NW03
1t2NW03
1t2NW03
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
No eres cristiano si amas tus posesiones<br />
“Negarnos a nosotros mismos es comportarnos con nosotros como<br />
lo hizo Pedro con Jesús cuando lo negó tres veces. El verbo es el<br />
mismo (aparneomai). Renegó de él, lo repudió, le dio la espalda.<br />
La autonegación no es negarnos a nosotros mismos lujos tales<br />
como chocolates, pasteles, cigarrillos y cócteles (aunque esto se<br />
podría incluir); es verdaderamente negarnos o renegar de nosotros<br />
mismos, renunciando a nuestro supuesto derecho de seguir nuestro<br />
propio camino. ‘Negarse a uno mismo es… arrepentirnos de la<br />
idolatría del egocentrismo’”. 1<br />
¿Puedes ver por qué no puedes seguir a Jesús sin negarte a<br />
ti mismo Alguien tiene que mandar en tu vida. O tú, o<br />
Jesús. No puedes decir que sigues a Jesús sin negarte a tí<br />
mismo.<br />
Entonces, considera cómo Jesús sube el listón. No solo<br />
debes negarte a tí mismo, sino que debes tomar tu cruz. No<br />
podemos ni imaginarnos lo duras que habrán sido estas<br />
palabras para los discípulos. Nosotros estamos acostumbrados<br />
a las cruces. Las llevamos como joyas. Cantamos canciones<br />
sobre ellas. Están por todas partes. Pero en los días de<br />
Jesús, una cruz era algo asqueroso y repugnante. Era un<br />
método cruel de ejecución, usado por los romanos para evitar<br />
que la gente de provincias lejanas se rebelara. La sola<br />
mención de una cruz probablemente produciría una respuesta<br />
visceral en los oyentes de Jesús; el mismo efecto que<br />
“linchamiento” nos produce a nosotros hoy. Y los discípulos<br />
probablemente habían visto personas llevando sus cruces.<br />
Los romanos hacían que los condenados a muerte cargaran<br />
el travesaño de la cruz hasta el lugar de la ejecución. Sabían<br />
que era un viaje sin retorno. Los que llevaban su cruz no<br />
regresarían nunca más.<br />
Ahora, Jesús no está hablando de morir literalmente<br />
(aunque seguir a Jesús exigirá la vida de algunos). Él está<br />
hablando acerca de morir a tu antigua manera de vivir. Él<br />
quiere que crucifiquemos nuestra antigua forma de vida,<br />
127