345 PRESIDENTES DE LA IGLESIA.pdf - Cumorah.org
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(13-17) Enseñó que nosotros<br />
también tenemos el derecho de<br />
recibir esta comprensión<br />
"Al avanzar en años y acercarnos<br />
a lo que generalmente consideramos<br />
como la época en que dejaremos<br />
esta vida, nos sentimos más<br />
inclinados a dedicar nuestros pensamientos<br />
y reflecciones a aquellas<br />
cosas que anticipamos recibir<br />
en la siguiente vida . . . Tenemos<br />
perfecto derecho de comprender<br />
algo de lo que quizás vamos a<br />
recibir en ella. Muchas son las<br />
cosas que debemos sufrir al cumplir<br />
con los deberes que nos son<br />
impuestos mientras avanzamos<br />
por el camino que hemos escogido<br />
.. . Ha resultado ser muy cierto<br />
entre los Santos de los Últimos<br />
Días lo que Jesús dijo en cierta<br />
ocasión, cuando comparó el reino<br />
de Dios a un hombre que buscaba<br />
perlas, y habiendo encontrado<br />
una de gran valor, fue a vender<br />
todo lo que poseía para obtenerla.<br />
Entonces de nuevo lo comparó<br />
con un hombre que encontró un<br />
tesoro en el campo, el cual, al<br />
encontrarlo, fue y vendió todo lo<br />
que tenía para poder poseerlo.<br />
Ese ha sido el caso de los Santos<br />
de los Últimos Días. Hemos sido<br />
llamados a sufrir y sacrificar lo<br />
que para nosotros es más caro<br />
aun que nuestras propias vidas, y<br />
algunos han sido llamados a sacrificar<br />
su existencia mortal, habiendo<br />
sido colocados en circunstancias<br />
en que no pudieran evitar<br />
sufrir la pérdida de sus vidas. Diariamente<br />
somos llamados a hacer<br />
sacrificios. Habiendo el Señor requerido<br />
esto de nosotros, y habiendo<br />
cumplido en general, es<br />
nuestro privilegio saber algo relacionado<br />
con el futuro, para saber<br />
cuál será el resultado de este sacrificio,<br />
y de viajar por este sendero.<br />
Por lo tanto, un Santo de los Últimos<br />
Días casi no puede permanecer<br />
en la Iglesia de Dios a menos<br />
que tenga algunos conocimientos<br />
de este tipo, los cuales no pueden<br />
ser puestos en claro por la sabidu-<br />
LORENZO SNOW ENSEÑO QUE<br />
EL HOMBRE PUE<strong>DE</strong> RECIBIR<br />
AQUÍ <strong>LA</strong> CERTEZA <strong>DE</strong>L<br />
<strong>DE</strong>STINO QUE LE ESPERA<br />
ALLÁ<br />
(13-16) El sabía lo que sucedería<br />
con los fieles<br />
"Me dediqué a ser digno de recibir<br />
algo que ningún hombre mortal<br />
puede recibir excepto mediante<br />
el espíritu y poder del Espíritu<br />
Santo, y el Señor me ha mostrado<br />
cosas y me ha hecho comprenderlas<br />
tan claramente como el sol de<br />
mediodía respecto al destino de<br />
aquellos Santos de los Últimos<br />
Días que sean fieles a sus llamamientos<br />
. . .<br />
Hay muchos pasajes que se relacionan<br />
con este punto, y yo creo<br />
en él. Creo que somos hijos e<br />
hijas de Dios, y que El nos ha<br />
ot<strong>org</strong>ado capacidad de sabiduría y<br />
conocimiento infinitos, porque El<br />
nos ha dado una porción de sí<br />
mismo." (Lorenzo Snow, en Conference<br />
Report, abril de 1898,<br />
págs. 62-63.)<br />
Tabernáculo de St. Ge<strong>org</strong>e, en donde recibió la revelación sobre el sacrificio<br />
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