La fotografía en la publicidad: archivos, bancos de ... - RedIRIS

6.‐ ConclusionesLa sociedad actual se alimenta y alimenta todo un sistema de imágenes, tantofotografías como vídeos. Durante varias décadas, en el siglo pasado, la fotografía fue elprincipal recurso gráfico de los medios escritos, fundamentalmente las revistasgráficas. También la publicidad se benefició de imágenes creativas de fotógrafos que seabrieron hueco en el arte y la creatividad gracias a los productos que habíanfotografiado.La televisión vino a ensombrecer, a dar luz al blanco y negro de las imágenes, peroéstas siguieron siendo importantes para la publicidad, ya que los sistemas visualesproporcionan más información que los escritos; entre otras razones, porque no todo elmundo es capaz de leer, pero le resulta más fácil ver el objeto (producto) en unaimagen.Las últimas décadas del siglo XX han servido para que la publicidad siga confiandoparte de sus trabajos a los fotógrafos, especialmente aquellos que resultan máscomplicados o lo que demandan un trabajo especial, con unos criterios determinados yunos resultados diferentes. La idea creativa se puede completar con el trabajo de unfotógrafo para hacer que un producto luzca más, se vea mejor y se sienta más cercapor parte del consumidor. Durante esos años se produce una transición hacia trabajosfotográficos en los que la imagen es un complemente ideal que no requiere supresencia. Entonces toman fuerza los archivos, bancos de imágenes y centros dedocumentación que gestionan las imágenes y que comercializan los trabajos demultitud de fotógrafos que previamente han realizado imágenes que puedentransmitir ideas, marcas o productos. Sin estos bancos de imágenes, el trabajo de lospublicitarios resultaría más complicado, pues aunque no siempre se utilicen lasimágenes como propuesta principal, muchas fotografías pueden servir al creativo paramejorar, madurar, crear o producir una nueva idea. Archivos, bancos de imágenes ycentros de documentación trabajan para dar visibilidad a los fotógrafos, asegurarlesuna parte de beneficios y sobre todo mantenerse firmes ante sus derechos, para quelos usuarios que utilicen sus fotos, lo hagan bajo las condiciones pactadas entre elfotógrafo y el banco de imágenes que cede temporalmente ese producto. Es, pues, unintermediario que ofrece al sector publicitario la garantía de un buen producto gráficoy fotográfico y que además le da resuelto el tema de los derechos.El siglo XXI trajo la expansión de Internet y con este nuevo sistema de comunicación,una manera diferente de presentar las fotografías. Se crean espacios que facilitan a losusuarios acceso a imágenes de otros autores. Estas comunidades de fotografía no sepueden comparar a los archivos y/o bancos de imágenes; al menos, la mayoría, pero síalgunas que se recogen en el último apartado y que de forma sencilla organizan ygestionan el trabajo de fotógrafos profesionales que han apostado por esta manera deLa fotografía en la publicidad: archivos, bancos de imágenes y centros de documentación enel siglo XXI Página 20