ENFOQUES ...Los pequeños cambios actuales, así como los gran<strong>de</strong>s cambiosen el pasado, evi<strong>de</strong>ncian <strong>de</strong> forma clara que las comunida<strong>de</strong>sbiológicas no se <strong>de</strong>splazan en conjunto.Al contrario, es la especiela que se <strong>de</strong>splaza sola, cada una a su propia velocidad y en supropia dirección, en la búsqueda <strong>de</strong> condiciones específicas. Demanera que frente a la posible aceleración <strong>de</strong>l cambio climático,el eco<strong>sistema</strong> que conocemos actualmente colapsará y las especiessupervivientes se agruparán en eco<strong>sistema</strong>s difíciles <strong>de</strong> imaginar<strong>de</strong> antemano. Manejar el proceso constituirá un gran <strong>de</strong>safío.¿La <strong>de</strong>saparición <strong>de</strong> la Amazoniapodría ser inminente?Otro gran reto que pudiera perfilarse en el horizonte es la eventual<strong>de</strong>saparición <strong>de</strong>l bosque lluvioso <strong>de</strong>l Amazonas, en suspartes sur y sureste. Prevista en un primer momento por el mo<strong>de</strong>lo<strong>de</strong>l Hadley Centre (Reino <strong>Un</strong>ido) <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> un calentamientomundial <strong>de</strong> aproximadamente 2,5 °C, podría producirse, según unaproyección revisada en 2005, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el nivel <strong>de</strong> 2 °C.¿Y si el clima cambiase bruscamentecomo en el pasado?No hay duda, a<strong>de</strong>más, que todo cambio eventualserá más brusco que los que hemos observadodurante las últimas décadas. Ello es evi<strong>de</strong>ntementeel caso para el <strong>sistema</strong> climático. Por ejemplo,la zona suroeste <strong>de</strong> los Estados <strong>Un</strong>idos, conocidapor sus cultivos <strong>de</strong> cítricos, ya son víctimas <strong>de</strong> unasequía consi<strong>de</strong>rada excepcional no solamente en términos<strong>de</strong> duración sino también <strong>de</strong> severidad y <strong>de</strong> extensión geográfica.Lamayoría <strong>de</strong> lasnegociaciones tratan sobrelos métodos <strong>de</strong> reducir a 2 °Cel calentamiento planetario.No obstante, 1,5 °C aparececomo un objetivo másrazonable.Más recientemente, el Banco Mundial ha invertidoun millón <strong>de</strong> dólares en un estudio <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>lización<strong>de</strong> los efectos <strong>de</strong>l cambio climático, <strong>de</strong> la<strong>de</strong>forestación y <strong>de</strong> los incendios en la Amazonia.Por primera vez estos fueron mo<strong>de</strong>lados juntos; el<strong>de</strong>terioro <strong>de</strong> la Amazonia podría aparecer a partir<strong>de</strong> una <strong>de</strong>forestación <strong>de</strong> un 20%, actualmente ya haalcanzado 18%. Lo que es inquietante es que la mayorsequía histórica <strong>de</strong> la Amazonia tuvo lugar en 2005,pero fue seguida <strong>de</strong> una mucho más fuerte en 2010.Son estos, quizás, signos precursores <strong>de</strong> lo que nos espera.Se sabe que la « cinta transportadora » global que distribuyeel calor alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> los océanos ha <strong>de</strong>jado <strong>de</strong> funcionar en lasépocas geológicas. El « salto » más reciente <strong>de</strong>l clima tuvo lugaral final <strong>de</strong> la edad <strong>de</strong> hielo, hace aproximadamente 12 000 años,cuando el <strong>de</strong>shielo <strong>de</strong> las capas <strong>de</strong> hielo <strong>de</strong> América <strong>de</strong>l Norteliberaron masas <strong>de</strong> agua dulce en el Atlántico Norte, provocandoque la cinta transportadora se parase y que las temperaturas en laregión <strong>de</strong>l Atlántico Norte <strong>de</strong>scendieran 5º en una década.Lluvia ácida sobre los océanosIncluso un aumento <strong>de</strong> 2 °C podría serperjudicial para la biodiversidadDurante este tiempo, la mayoría <strong>de</strong> las discusiones y <strong>de</strong> lasnegociaciones han tratado sobre las posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> reducira 2 °C como promedio el calentamiento <strong>de</strong>l planeta a lo largo <strong>de</strong>este siglo. Para ello, según los escenarios actuales, las emisionesmundiales <strong>de</strong>berían estabilizarse en 2016. No obstante, este objetivoya es evi<strong>de</strong>ntemente <strong>de</strong>masiado tardío para un buen número<strong>de</strong> glaciares y para los eco<strong>sistema</strong>s <strong>de</strong>l planeta.<strong>Un</strong> gran cambio sistémico está en curso, siendo su signo más evi<strong>de</strong>ntela acidificación <strong>de</strong> los océanos. Ampliamente relegado hasta2005 (cuando podía incluso ser constatado en los laboratorios<strong>de</strong> química por los estudiantes <strong>de</strong> secundaria), el exceso <strong>de</strong> CO 2absorbido por los océanos ha reaccionado produciendo suficienteácido carbónico para hacer disminuir en 0,1 unida<strong>de</strong>s el pH <strong>de</strong>los océanos 6 . Esta cantidad pue<strong>de</strong> parecer <strong>de</strong>spreciable,sólo que como la escala <strong>de</strong>l pH es logarítmica, ellosignifica que la aci<strong>de</strong>z <strong>de</strong> los océanos ha aumentadoun 30% en relación con 1950.La acidificación <strong>de</strong> los océanos implica consecuenciasconsi<strong>de</strong>rables para todos los organismosmarinos que fabrican sus conchas y esqueletosa partir <strong>de</strong>l carbonato <strong>de</strong> calcio. El equilibrio <strong>de</strong>este carbonato es sensible a la temperatura y al pH:es más bajo en un agua más ácida o más fría. La incapacidad<strong>de</strong> las ostras para reproducirse en el Estado <strong>de</strong> Washington,en los Estados <strong>Un</strong>idos, ha sido atribuida al aumento <strong>de</strong> la aci<strong>de</strong>z.La mayoría <strong>de</strong> los minúsculos organismos que pululan en númeroastronómico en la base <strong>de</strong> las ca<strong>de</strong>nas alimentarias se encontraránen peligro, como los pterópodos –minúsculos caracoles que tienen«un pie» modificado que pue<strong>de</strong> batir como un ala para mantener elorganismo a un nivel dado en la colonia <strong>de</strong> agua– así como el resto<strong>de</strong> la ca<strong>de</strong>na alimentaria. La acidificación constituye un profundocambio para los océanos que ocupan los dos tercios <strong>de</strong>l planeta.Alre<strong>de</strong>dor<strong>de</strong> 50 ppm <strong>de</strong> CO2podrían ser secuestradas enun período <strong>de</strong> 50 años por lareforestación, una mejor gestión <strong>de</strong>los bosques, la restauración <strong>de</strong> laspra<strong>de</strong>ras y los pastos <strong>de</strong>gradadosasí como los eco<strong>sistema</strong>sagrícolas.A todas luces, lo que habría que hacer para apoyar la resiliencia<strong>de</strong> los eco<strong>sistema</strong>s, es restaurar las vías <strong>de</strong> circulación natural enlos paisajes (creando, por ejemplo, los corredores ecológicos comoel que une el Parque Yellowstone con los Parques Territoriales <strong>de</strong>lYukón en América <strong>de</strong>l Norte) y reducir los otros factores <strong>de</strong> tensióncon el fin <strong>de</strong> evitar las sinergias negativas con el CambioClimático. Pero incluso, la supresión <strong>de</strong> esos factores<strong>de</strong> tensión no representará mucho comparado conlos efectos <strong>de</strong>l calentamiento global.En fin, una elevación <strong>de</strong> 2 °C <strong>de</strong> la temperaturapromedio <strong>de</strong>l planeta (aproximadamente450 ppm <strong>de</strong> CO 2) será excesiva. <strong>Un</strong>a tasa <strong>de</strong>lor<strong>de</strong>n <strong>de</strong> 350 ppm <strong>de</strong> CO 2–equivalente máso menos a una elevación <strong>de</strong> la temperatura <strong>de</strong>1,5 °C– sería un objetivo más razonable.Restaurar los eco<strong>sistema</strong>s evitaría laproducción <strong>de</strong> una gran masa <strong>de</strong> carbonoLa agenda <strong>de</strong> la energía es evi<strong>de</strong>nte y urgente pero es a<strong>de</strong>másindispensable evitar que lleguen a la atmósfera cantida<strong>de</strong>s consi<strong>de</strong>rables<strong>de</strong>l CO 2exce<strong>de</strong>nte para evitar el calentamiento queprovocaría. Ello pudiera parecer Quijotesco 7 pero la historia <strong>de</strong>la vida en la Tierra muestra que el planeta ha conocido, en dosocasiones, una concentración <strong>de</strong> CO 2extremadamente elevada y8<strong>Un</strong> <strong>Mundo</strong> <strong>de</strong> CIENCIA, <strong>Vol</strong>. 10, No. 1, Enero–marzo 2012
que por dos ocasiones, regresó a los volúmenes preindustrialespor simple efecto biológico.La primera disminución acompañó la aparición <strong>de</strong> vegetalescontinentales, bajo el efecto <strong>de</strong> la fotosíntesis y <strong>de</strong> la acumulación<strong>de</strong> la biomasa vegetal. Al mismo tiempo, la formación <strong>de</strong>suelos redujo el CO 2–no únicamente por el proceso físico sinotambién con la complicidad <strong>de</strong> la biota <strong>de</strong>l suelo. En cuanto ala segunda disminución, esta se produjo con la aparición <strong>de</strong> lasplantas <strong>de</strong> flores mo<strong>de</strong>rnas que han <strong>de</strong>sempeñado con más eficaciael mismo papel.Estas dos gran<strong>de</strong>s alteraciones <strong>de</strong> la composición <strong>de</strong> laatmósfera tomaron <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> millones <strong>de</strong> años y el potencial<strong>de</strong> la biología pudiera parecer totalmente <strong>de</strong>sproporcionadocon relación a ellas. Sí, pero durante los tres últimos siglos,entre 200 y 250 miles <strong>de</strong> millones <strong>de</strong> toneladas <strong>de</strong> carbonose han acumulado en la atmósfera <strong>de</strong>bido a la <strong>de</strong>strucción ya la <strong>de</strong>gradación <strong>de</strong> los eco<strong>sistema</strong>s por la <strong>de</strong>forestación,el <strong>de</strong>terioro <strong>de</strong> las pra<strong>de</strong>ras y las prácticas agrícolasque liberan el carbono <strong>de</strong>l suelo. <strong>Un</strong> retorno a larotación <strong>de</strong> los cultivos, por ejemplo, podríareducir la erosión <strong>de</strong>l suelo que libera en laatmósfera mucho carbono enterrado. Los exce<strong>de</strong>ntesactuales <strong>de</strong> CO 2tienen la mitad <strong>de</strong> unorigen biológico mo<strong>de</strong>rno y pue<strong>de</strong>n en una granmedida ser evitados mediante una restauración <strong>de</strong>los eco<strong>sistema</strong>s a escala planetaria.La reducción <strong>de</strong>CO2 es infinitamentepreferible a casi todos losplanes <strong>de</strong> geo-ingeniería. Estosplanes sólo pue<strong>de</strong>n tratarlos síntomas y no lacausa.el planeta es ciertamente más complicado <strong>de</strong> hacer que <strong>de</strong> <strong>de</strong>ciry las acciones <strong>de</strong>berán tomar en cuenta la necesidad <strong>de</strong> alimentaruna población incrementada en al menos 2 mil millones <strong>de</strong>personas, pero el potencial existe. Tal solución presenta igualmentela inmensa ventaja <strong>de</strong> convertir la biodiversidad y loseco<strong>sistema</strong>s más resilientes ante la amenaza <strong>de</strong>l cambio globaly <strong>de</strong> otros factores <strong>de</strong> tensión que la afectarán.En la medida en que esto no sea suficiente, visto la ten<strong>de</strong>nciaactual <strong>de</strong> las emisiones, es evi<strong>de</strong>nte que se <strong>de</strong>berán buscarmétodos no biológicos para eliminar el CO 2no sólo <strong>de</strong> las altaschimeneas pero también <strong>de</strong> la atmósfera. Es necesario por ello<strong>de</strong>sarrollar métodos económicos aceptables. Podríamos imaginar,por ejemplo, un proceso en el cual el CO 2se combinaríacon otras moléculas para convertirse en una sustancia inertecomo el hormigón.La reducción <strong>de</strong>l CO 2es infinitamente preferible a prácticamentecualquier plan <strong>de</strong> geo-ingeniería para reducir latemperatura, excepto localmente. Los planes <strong>de</strong> geoingeniería<strong>de</strong>stinados a disminuir la temperatura<strong>de</strong>l planeta tratan solamente el síntoma y nola causa. No combaten en ninguna medida laacidificación <strong>de</strong>l océano y, al ser planetarios,sus inconvenientes serán por <strong>de</strong>finición tambiénplanetarios. Por otra parte, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que cese laintervención, la temperatura <strong>de</strong>l planeta aumentaríaexactamente hasta el punto que hubiera alcanzado antes.La cifra es aproximada pero alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> 50 ppm <strong>de</strong> CO 2podrian ser secuestrados en un periodo <strong>de</strong> 50 años –sea ladiferencia entre los 350 ppm y el valor actual, que se acerca alos 400 ppm. Si se reforestaran y administraran mejor los bosques,se lograría secuestrar aproximadamente 500 millones <strong>de</strong>toneladas <strong>de</strong> carbono al año; igual cantidad si se restauraran laspra<strong>de</strong>ras y los pastos <strong>de</strong>teriorados –para una mejor alimentación<strong>de</strong>l ganado– y una tercera cantidad similar administrando loseco<strong>sistema</strong>s agrícolas <strong>de</strong> manera a restablecer las reservas <strong>de</strong>lsuelo en carbono –lo que mejoraría su fertilidad. Administrar asíSería preferible controlar nuestro planeta vivo precisamentecomo tal, utilizando los <strong>sistema</strong>s vivos <strong>de</strong> la Tierra para rever<strong>de</strong>cerlay hacerla más fácil <strong>de</strong> habitar para todas las formas<strong>de</strong> vida.Thomas LovejoyEncontrar este artículo en Tracking Key Trends in BiodiversityScience and Policy, ver también página 24Foto: Con la autorización <strong>de</strong> Bent, Flicker1. Joppa, L.N. ; Roberts, D.L. et S.L. Pimm (2011) : How manyspecies of flowering plants are there ? Proceedings of the RoyalSociety (B) 278:554–5592. La UNESCO ha aportado su contribución a esta evaluación.Ver <strong>Un</strong> <strong>Mundo</strong> <strong>de</strong> <strong>Ciencia</strong> <strong>de</strong> julio 20053. Ver: www.teebweb.org4. Portando la oscura <strong>de</strong>nominación <strong>de</strong> «crecimiento porintussuscepción».5. En el original, el área <strong>de</strong> distribución <strong>de</strong> este insecto perjudiciala los cultivos se limitaba a China, Japón y República <strong>de</strong> Corea.6. De un pH <strong>de</strong> 8,2 en 1950 a un valor <strong>de</strong> 8,1 en la actualidad.7. Personaje <strong>de</strong> la literatura española <strong>de</strong>l siglo XVII.Don Quijote es un soñador i<strong>de</strong>alista, un justiciero autoproclamado.En abril 2010 la erupción <strong>de</strong>l volcán islandés Eyjafjallajokull paralizó el tráfico aéreo por encima <strong>de</strong> Europa durante varios días. Puestoque la materia expulsada enfría la atmósfera bloqueando la radiación solar, algunas personas imaginan una posible geo-ingeniería<strong>de</strong>l <strong>sistema</strong> climático mediante inyección <strong>de</strong> aerosol en la estratosfera con el objetivo <strong>de</strong> <strong>de</strong>morar el recalentamiento global.<strong>Un</strong> <strong>Mundo</strong> <strong>de</strong> CIENCIA, <strong>Vol</strong>. 10, No. 1, Enero–marzo 20129