SoloEventos, Edición 2

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¿POR DONDE EMPEZAMOS?
SALONES DE FIESTAS Y EVENTOS
EL
EVENTO
DONDE
TÚ
eres la
PRO
TAGO
NISTA
Las fiestas de quince años,
representan una tradición muy latina
que marcan la transición de niña a
mujer que vive cualquier jovencita y
progresivamente, se ha convertido
en una presentación formal a la
sociedad.
Elaborar un programa en torno al tipo de celebración que deseas
así como el orden en que quieres que ocurra el evento, son algunos
aspectos que te sirven de apuntador para que no pierdas los detalles
de manera que todo fluya en armonía y con la mejor organización,
(algo que tus invitados percibirán y a apreciarán).
Es recomendable que la organización de la fiesta debes iniciarla
aproximadamente seis meses antes del evento porque las
celebraciones en la actualidad, son más complejas y requieren de
mucha más producción. Por ello, es importante llevar una agenda
así como también delegar funciones a tu organizador de confianza
e incluso, compartir las ideas con familiares o amigos, siempre y
cuando las decisiones más importantes las tomes tu misma, porque
a fin de cuentas es la celebración más trascendental de tu juventud y
como protagonista debes disfrutarla.
En ese sentido, si tu presupuesto es limitado, no descartes la
posibilidad de celebrar tus 15 primaveras en un crucero puesto que
un barco puede ser más económico que alquilar un salón de fiestas y
de esa manera, el festejo será en la plenitud del mar.
Pero si tu primera opción es la celebración de una fiesta, en “Solo
Eventos Magazine”, te ofrecemos los detalles más importantes.
Generalmente, si la quinceañera es católica, la festividad empieza
con una misa de acción de gracias. Debes acudir a la eucaristía con
un vestido formal (llamativo y creativo, similar al de una “princesa”).
El programa de celebración tradicional incluye tu entrada triunfal, el
brindis, cambio de zapatillas, el vals con tu papá, el vals familiar
y el vals principal. Sin embargo, este último es un factor que ha
sufrido transformaciones puesto que en la actualidad consiste en la
adaptación de la coreografía con el ritmo de tu preferencia, que
seguramente corresponderá con la temática de la fiesta, si la tienes.