MANMagazine Bus 02/2016 España

ARTÍCULO ESPECIAL IAA
02/2016
Nueva generación: la fábrica de
MAN en Nuremberg produce los
motores Euro 6 para camiones
(dcha.) y autobuses (izda.).
requerido el trabajo conjunto de los equipos de
desarrollo de motores y cajas de cambio, construcción,
integración de vehículos y gestión de
procesos y productos desde el segundo semestre
de 2014. Casi 100 empleados de MAN de una
amplia gama de disciplinas han participado en
esta iniciativa”, explica Weiskirch.
ENTRE LOS ESPECIALISTAS DE MAN estaba
Thorsten Oberpenning, director de proyecto
del motor D2x de MAN. El ingeniero mecánico
y de automoción se hizo cargo del proceso
de innovación a lo largo de toda la fase de proyecto.
“Euro 6c es otro importante reto tecnológico”,
dice Oberpenning. “La idea es reducir
POTENCIA EN
ESTADO PURO
La nueva norma Euro 6c para vehículos industriales entra en
vigor en 2017. Los desarrolladores de la fábrica de motores de
MAN en Nuremberg han elevado el rendimiento y la eficiencia
de la nueva generación de motores a un escalón superior.
© Florian Generotzky
Estación importante en la línea de
montaje: la culata preensamblada
se integra en el cárter.
“Objetivo: menos
emisiones y más
rendimiento”.
Thorsten Oberpenning, director de proyecto
Motor D2x de MAN
C
asi en completo silencio, el motor
abandona la fase final de la
línea de montaje del D2x a las
12:58 horas. Una puerta de plexiglás se cierra.
Transportado en ascensor y cinta transportadora,
el bloque pasa a la zona de pruebas, en la
que los motores deben demostrar su fiabilidad.
Todos los días salen alrededor de 250 motores
de la planta de Nuremberg, el 70% de los cuales
cumple la norma Euro 6. Sin embargo, hoy es
un día un poco distinto: el primer motor de la
nueva generación Euro 6 sale de la línea de producción
en condiciones rutinarias. Esta señalada
ocasión es celebrada por el Dr. Christian
Weiskirch, director del departamento de rendimiento
y emisiones del D2x, y su equipo. «Este
es el resultado de dos años y medio de desarrollo
intenso», explica el ingeniero Weiskirch. El
objetivo: refinar la tecnología Euro 6 para cumplir
el siguiente paso, la norma Euro 6c, que será
de obligado cumplimiento en Europa a partir de
enero de 2017.
Uno de los puntales del reglamento es que
los nuevos procedimientos de medición analizarán
valores bajos de emisiones en condiciones
de conducción reales, no solo en el banco
de pruebas. El paso «6c» reduce una vez más el
umbral de autocontrol (diagnóstico a bordo u
OBD), que acarrea indirectamente una reducción
aún mayor de las emisiones. “Ha sido, y
sigue siendo, un proyecto complicado, que ha
aún más las emisiones de CO2 de motores ya
muy sofisticados de por sí. Simultáneamente,
es importante seguir aumentando la eficiencia
y garantizar valores de emisiones estables
hasta los 700.000 kilómetros”. La aplicación
del nuevo sistema de medición de emisiones
portátil (PEMS) permite controlar las emisiones
de CO2 durante la conducción. “Logramos
mejorar el rendimiento del motor D26 en 20
CV y su par en 200 Nm, manteniendo emisiones
bajas estables”, dice orgulloso Oberpenning.
Gracias al par optimizado, el motor exige
muchos menos cambios de interposición
para alcanzar o mantener el rendimiento pleno
del par. “Esto incrementa considerablemente
el confort de conducción”, explica el
director del proyecto. Y por último, el “500”
vuelve a la puerta del D26. El número de CV
sigue siendo un factor importante para los
operadores de camiones y autobuses. Y no
menos importante es haber conseguido reducir
el consumo de combustible alrededor de
un 2,5%. “A las empresas de transporte y los
operadores de flotas que tanto se preocupan
por los costes y el rendimiento les encanta
este dato”, afirma Thorsten Oberpenning.
Lo que ahora se puede expresar con exactitud
en cifras y valores de rendimiento precisos
surgió de un proceso de innovación muy
complicado para los desarrolladores. “La complejidad
de las tareas aumentaba notablemente
a medida que nos acercábamos al nivel
Euro 6c. Para lograr nuestros ambiciosos objetivos,
todos los participantes debían salirse
de los convencionalismos e intensificar la comunicación
dentro del equipo. Todos aporta-
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