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Reflexiones
José Cervantes Govea
jocegovea@yahoo.com
Lealtad y complacencia
Contador Público egresado de la UABC
y abogado egresado de Univer Tijuana
El pluralismo democrático
y el gobierno de coalición
están en ascuas.
El primero no rindió ni
generó lo que esperábamos, sino
por el contrario produjo el nefasto
pactismo y la partidocracia,
y el segundo no se ve ni en
el más lejano horizonte: ni en los
Estados ni en el gobierno federal.
Aun subsisten el divisionismo
y visión grupal de siglo XIX:
El liberalismo del sistema político
mexicano establecido por
los revolucionarios practicantes
sempiternos del reformismo y
el “cambio para que todo siga
igual”, y el conservadurismo liberal
–válgame la expresión- de
los místicos y estoicos promotores
y defensores de los valores y
derechos humanos. Los síndromes
presidencialistas y patrimonialistas
infectaron a toda la
clase política.
Después del bypass panista de
12 años en el gobierno federal,
24 años de gobiernos perredistas
en el distrito federal y la alternancia
en presidencias municipales
y algunas gubernaturas,
siguen brillando por su ausencia
la transparencia, la rendición de
cuentas y el combate a la corrupción.
La intangibilidad y el volumen
transaccional de algun@s
áreas del servicio público, la
discrecionalidad en el ejercicio
presupuestal de los recursos públicos,
el escaqueo burocrático,
la falta de especificidad y la desciudadanización
de la “cosa pública”
han permitido y facilitado
el maluso y abuso de los recursos
públicos.
La transición democrática está
en crisis porque los servidores
públicos no se atreven a sancionar
a quienes por acción u
omisión afectan el patrimonio
público. Su filiación partidista,
grupal, familiar o amistosa les
significa “conflicto de intereses”,
lo saben pero no lo aceptan
ni mucho menos lo evitan. Las
atribuciones fiscalizadores de
l@s diputad@s, esto es revisar,
auditar, verificar y comprobar la
justificación del gasto público de
los tres poderes, incluido el Legislativo
desde luego, son simple
ornato.
L@s 500 Diputad@s y 128
Senadores y Senadores, salvo
honrosas excepciones, se han
convertido en cómplices de la
malversación de los recursos de
la nación mexicana. Juntos se re-
parten como “botín de guerra”
los recursos de la nación mexicana.
El gobierno está encarnado
en uno solo: complaciente y
tácitamente en el Presidente.
Los otros Poderes –Legislativo
y Judicial- se conducen como vasallos
del Presidente. Los partidos,
sin excepción, salvo en años
electorales, también le dan su beneplácito
al Jefe del Ejecutivo en
todo –veése http://www.sinembargo.mx/07-02-2015/1242646-.
Nuestra hibrida y simulada democracia
trajo la alternancia y
el retorno sospechoso y antidemocrático
del PRI con Enrique
Peña Nieto. Un hombre que cada
día nos sorprende por la falta de
inteligencia y voluntad, y excesiva
ignorancia y arrogancia para
entender lo que todo el mundo
entiende, menos él, sus colaboradores
y asesores.
La “clase política” conformada
por la “alta burocracia” de los
tres poderes y de los tres niveles
de gobierno, están en contubernio
cínico y descarado contra
las garantías y derechos individuales
y colectivos de la población.
Juntos fomentan el rancio
patrimonialismo repartiéndose
y repartiendo a diestra y siniestra
recursos públicos a partidos
y medios de comunicación para
fortalecer y sostener régimen
que no da para más.
Segundos Más por Lalo Saavedra
lalo-saavedra@hotmail.com
Ideas Verticales
Por Jorge Alberto Gutiérrez Topete*
*Arquitecto tijuanense
Pueblo Bicicletero…
Referirse a una población de
manera despectiva o demeritoria
como “pueblo bicicletero”,
presupone un lugar donde el
imperio del automóvil como medio de
transporte primordial y dominante es lo
perfecto y deseable.
Esto, en una visión moderna de lo que
es bueno para una ciudad y sus habitantes
está muy lejos de ser así. En países
más avanzados que el nuestro, se ha
vuelto un verdadero problema poseer
un automóvil para utilizarlo como el
principal medio de transporte.
En estas ciudades, la vía pública es
compartida de manera equitativa por
el peatón, la bicicleta, la motocicleta,
el transporte público y los automóviles,
aplicando políticas públicas con un
10 Opinión jueves 12 de febrero de 2015 INFOBAJA.INFO
marcado énfasis en inhibir el uso del automóvil
reduciendo de manera notable
el espacio disponible para estos tanto
para circular como para estacionarse,
generando carriles y espacios prioritarios
para bicicletas, peatones y transporte
público.
En países como Holanda, ha sido tan
marcada la preferencia por el uso de la
bicicleta como medio de transporte primario,
que hay un registro total de 16.5
millones de bicicletas, para 16.6 millones
de habitantes. O sea, 99.1% de la población,
posee una bicicleta y están orgullosos
de ser un “Pueblo Bicicletero”.
Los beneficios de esto, son muy amplios
e inciden de manera positiva en
temas ambientales, de salud y congestionamiento
vial.
Se estima que en Amsterdam, la capital
de Holanda, el 40% de los viajes de sus
habitantes se hacen en bicicleta. Existe ahí
una conexión lógica y complementaria
entre los 400 km de ciclo vías y la red de
transporte público de la ciudad que hace
indeseable el uso del automóvil.
Hace 11 años, durante los últimos meses
de la administración municipal de
Jesús González Reyes, se planeó, diseñó
y construyó infraestructura para la que
en su momento sería la primera “Ruta
Troncal” en México. Este visionario
proyecto quizá no fue perfectamente
consensuado y comunicado, provocando
que a partir de la presión de los operadores
del transporte, cuando identificaron
el riesgo que corrían sus actuales
negocios, fuera cancelado y demolido
durante los primeros meses de la siguiente
administración, negándole así a
nuestra ciudad el inicio de un nuevo y
mejor sistema de transporte.
En estas últimas semanas, hemos escuchado
voces críticas que buscan echar
abajo la ciclo vía que se construye sobre
el bulevar Benítez y Paseo de los Héroes.
Hasta en tono de burla buscan “culpables
y responsables” de su diseño y construcción;
algunos de los argumentos
vertidos se basan en conceptos urbanos
obsoletos que denotan completa ignorancia.
Es una lástima que una buena idea
como esta pueda fracasar en nuestra
ciudad. Hay que escuchar a las voces calificadas
y modificar lo que se tenga que
modificar, ya que cualquier proyecto es
perfectible aún después de haberse ejecutado.
La existencia de esta ciclo vía y
su posterior éxito, se vuelve sumamente
necesario para finalmente empezar a revertir
la dominancia de los vehículos. Es
además un augurio del rechazo que pudiera
recibir la futura ruta troncal de no
comunicarse el proyecto correctamente.
Espero que la autoridad municipal se
sostenga en su voluntad de llevar a bien
este proyecto, ya que de no ser así, tendríamos
un fracaso más y habría que renunciar
a algún día ser un gran “pueblo
bicicletero”.