Nac_2017_3_ABR-MAY_Comprimida

Editorial
Entre los compromisos de esta directiva, resalta, el incremento de
la membresía porque, más que compromiso de una directiva en particular,
debiera ser una obligación fundamental de todas y cada una de las
directivas pasadas, presentes y futuras ya que los asociados son, al mismo
tiempo la vida y la razón de ser de cualquier asociación, no obstante,
el reto de mantener una membresía constante y deseablemente creciente,
no es tarea fácil en estos tiempos, como muy probablemente, nunca
lo ha sido.
Ing. José Luis García Mar,
Presidente de la Directiva AMGP
No es tarea fácil, reunir en algún momento a casi 1,000 profesionales
capaces, creativos y competitivos, comprometidos con su trabajo
personal, con sólo el objetivo común de fomentar el desarrollo de su profesión
y más aún, mantenerlos unidos, dispuestos a aportar y compartir
su tiempo, esfuerzo y conocimientos en beneficio de un gremio o una
comunidad técnico-científica, sin más satisfacción que la propia, al sentir
cumplido, un deber autoimpuesto. Es más, semejante logro, no puede
deberse a una persona o a un grupo directivo sino a la conciencia y el
deseo compartido de los mismos asociados.
En cambio, sí es obligación de la directiva en turno, facilitar las
condiciones para que esta reunión ocurra y es por ello que en este número
de La Nacional, dedicamos un buen espacio a compartir con todos, la
satisfacción de ver ese deber, parcialmente cumplido:
Por una parte, se propicia y logra la reactivación de la Delegación
Coatzacoalcos que congrega más de 40 asistentes en su asamblea de
mayo, después de un receso en su actividad.
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