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Revista Tierra del corazón Mayo 2018

Nuevo magazine edicion Mayo 2018.

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Año 9 - Num. 4 - <strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong>


Directorio<br />

<strong>Tierra</strong> <strong>del</strong> Corazón<br />

Director General<br />

Lic. Martha E. Olivares Ahumada<br />

(232) 118 2788<br />

Diseño y diagramación:<br />

William Smith Villalón (271) 1091388<br />

Ventas:<br />

Reina Pérez<br />

Cel. (232) 322 2100<br />

Dirección:<br />

Emiliano Zapata 98<br />

Col. Emiliano Zapata<br />

Martínez de la Torre, Ver.<br />

Síguenos:<br />

www.facebook.com/t<strong>del</strong>corazon/<br />

Todos los derechos reservados<br />

Tienes en tus manos<br />

la edición de <strong>Mayo</strong>,<br />

un hermoso mes en<br />

el cual celebramos<br />

a nuestras madres, figura<br />

central en la vida de todos,<br />

ya que gracias a su amor,<br />

dedicación y cuidados<br />

estamos plantados<br />

fuertemente en el mundo,<br />

ellas merecen toda nuestra<br />

gratitud, nuestro amor y<br />

nuestra honra.<br />

En ésta ocasión<br />

reflexionaremos juntos<br />

acerca <strong>del</strong> carácter, la familia,<br />

la constancia, el amor y la fe,<br />

estoy segura que a través de<br />

cada página Dios hablará a<br />

tu <strong>corazón</strong> y te confortará y<br />

guiará.<br />

Asimismo hemos incluido<br />

una <strong>del</strong>iciosa receta <strong>del</strong><br />

pollo agridulce en los<br />

sabores de mi tierra para<br />

que lo disfrutes con tu<br />

familia y amigos.<br />

Notas <strong>del</strong> director<br />

Es mayo y celebramos a<br />

nuestras madres, ¡ellas<br />

lo merecen! Sus brazos<br />

siempre se abren cuando<br />

necesitamos un abrazo. Su<br />

<strong>corazón</strong> sabe comprender<br />

cuando necesitamos una<br />

amiga. Y su fuerza y su amor<br />

nos han dirigido por la vida<br />

y nos han dado las alas que<br />

necesitabamos para volar.<br />

Es tiempo de honra, si tienes<br />

una madre en casa, ¿qué<br />

estás haciendo por ella?.<br />

Dios te da una oportunidad<br />

hoy, ámala y demuéstrale lo<br />

agradecido que estás con<br />

ella... ¡Estás a tiempo!<br />

Que Dios bendiga tu vida<br />

entera y nos leemos en la<br />

próxima<br />

Martha Olivares<br />

Heartland México<br />

<strong>Tierra</strong> <strong>del</strong> <strong>corazón</strong> pertenece a Heartland AC


Dios anhela que seas<br />

fuerte, tanto que<br />

cuando eres débil lo<br />

primero que hace es<br />

fortalecerte, necesitas<br />

estar consciente de que<br />

tu naturaleza no es de<br />

debilidad sino de poder,<br />

tienes la voluntad para<br />

hacerlo.. no permitas<br />

que nada te derrote, Dios<br />

te ha dado su semejanza<br />

para que nada te asuste<br />

ni nada te atemorice..<br />

tú eres mas grande<br />

que todo lo que pueda<br />

derrumbarte.. Levántate<br />

hoy!!<br />

4.- Cuando sea viejo<br />

5.- El regalo<br />

8.- uno+uno<br />

9.- Canasto de carbón<br />

10.- Zanahoria, huevo o café<br />

11.- El hermano<br />

14.- Mi otra mujer<br />

17.- El coraje<br />

19.- Pequeñeces<br />

20.- Las manos de mamá<br />

24.- ¿Y donde está tu paraguas?<br />

25.- ¿Cual es mi nombre?<br />

26.- Deja un espacio vacío<br />

27.- La Granja<br />

28.- un simple gesto<br />

contenido<br />

32.- Sabores... Pollo agridulce a la primavera


cuando sea viejo<br />

La edad trae una etapa en la vida<br />

que no siempre es fácil de llevar,<br />

y donde tenemos que ser más<br />

comprensivos que nunca.<br />

El día que esté viejo y ya no sea el mismo,<br />

ten paciencia y compréndeme.<br />

Cuando derrame comida sobre mi camisa<br />

y olvide como atarme mis zapatos,<br />

recuerda las horas que pase enseñándote<br />

a hacer las mismas cosas.<br />

Si cuando conversas conmigo, repito y<br />

repito las mismas palabras que sabes de<br />

sobra como termina, no me interrumpas<br />

y escúchame. Cuando eras pequeño(a)<br />

para que te durmieras tuve que contarte<br />

miles de veces el mismo cuento hasta que<br />

cerrabas los ojitos.<br />

Cuando estemos reunidos y sin querer<br />

haga mis necesidades, no te avergüences<br />

y compréndeme que no tengo la culpa de<br />

ello, pues ya no puedo controlarlas. Piensa<br />

cuantas veces cuando niño(a) te ayude y<br />

estuve paciente a tu lado esperando a que<br />

terminaras lo que estabas haciendo.<br />

No me reproches porque no quiera<br />

bañarme; no me regañes por ello.<br />

Recuerda los momentos que te perseguí<br />

y los mil pretextos que te inventaba para<br />

hacerte más agradable tu aseo. Acéptame<br />

y perdóname. Ya que soy el niño ahora.<br />

Cuando me veas inútil e ignorante frente<br />

a todas las cosas tecnológicas que ya<br />

no podré entender, te suplico que me<br />

des todo el tiempo que sea necesario<br />

para no lastimarme con tu sonrisa<br />

burlona. Acuérdate que yo fui quien te<br />

enseñó tantas cosas. Comer, vestirte y<br />

tu educación para enfrentar la vida tan<br />

bien como lo haces, son producto de mi<br />

esfuerzo y perseverancia por ti.<br />

Cuando en algún tiempo mientras<br />

conversamos me llegue a olvidar de que<br />

estamos hablando, dame todo el tiempo<br />

que sea necesario hasta que yo recuerde,<br />

y si no puedo hacerlo no te burles de mí;<br />

tal vez no era importante lo que hablaba y<br />

me conforme con que me escuches en ese<br />

momento.<br />

Si alguna vez ya no quiero comer, no me<br />

insistas. Sé cuanto puedo y cuanto no<br />

debo. También comprende que con el<br />

tiempo ya no tengo dientes para morder<br />

ni gusto para sentir.<br />

Cuando me fallen mis piernas por estar<br />

cansadas para andar, dame tu mano tierna<br />

para apoyarme como lo hice yo cuando<br />

comenzaste a caminar con tus débiles<br />

piernas.<br />

Por ultimo, cuando algún día me oigas<br />

decir que ya no quiero vivir y solo quiero<br />

morir, no te enfades. Algún día entenderás<br />

que esto no tiene que ver con tu cariño o<br />

cuanto te ame. Trata de comprender que<br />

ya no vivo sino que sobrevivo, y eso no<br />

es vivir.<br />

Siempre quise lo mejor para ti y he<br />

preparado los caminos que has debido<br />

recorrer. Piensa entonces que con el<br />

paso que me a<strong>del</strong>anto a dar estaré<br />

construyendo para ti otra ruta en otro<br />

tiempo, pero siempre contigo.<br />

No te sientas triste o impotente por<br />

verme como me ves. Dame tu <strong>corazón</strong>,<br />

compréndeme y apóyame como lo hice<br />

cuando empezaste a vivir. De la misma<br />

manera como te he acompañado en<br />

tu sendero te ruego me acompañes a<br />

terminar el mío. Dame amor y paciencia,<br />

que te devolveré gratitud y sonrisas con el<br />

inmenso amor que tengo por ti.<br />

Éxodo 20:12 (NVI)<br />

»Honra a tu padre y a tu madre,<br />

para que te vaya bien y disfrutes<br />

de una larga vida en la tierra que<br />

te da el Señor tu Dios.


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 05<br />

La cosas que se ven son<br />

temporales, pero las que no se<br />

ven son eternas<br />

el regalo<br />

Un joven muchacho estaba a punto<br />

de graduarse de la universidad<br />

, hacía muchos meses que<br />

admiraba un hermoso auto<br />

deportivo en una agencia de autos,<br />

sabiendo que su padre podría comprárselo<br />

le dijo que ese auto era todo lo que quería.<br />

Así como se acercaba el día de Graduación,<br />

el joven esperaba por ver alguna señal de<br />

que su padre hubiese comprado el auto.<br />

Finalmente, en la mañana <strong>del</strong> día de<br />

Graduación, su padre le llamó a que fuera<br />

a su privado. Le dijo lo orgulloso que se<br />

sentía de tener un hijo tan bueno y lo<br />

mucho que lo amaba. El padre tenía en<br />

sus manos una hermosa caja de regalo.<br />

Curioso y de algún modo decepcionado,<br />

el joven abrió la caja y lo que encontró fue<br />

una hermosa Biblia de cubiertas de piel y<br />

con su nombre escrito con letras de oro.<br />

Enojado le gritó a su padre diciendo:<br />

“¿Con todo el dinero que tienes, y lo único<br />

que me das es esta Biblia?” y salió de la<br />

casa… Pasaron muchos años y el joven<br />

se convirtió en un exitoso hombre de<br />

negocios. Tenía una hermosa casa y una<br />

bonita familia, pero cuando supo que<br />

su padre que ya era anciano estaba muy<br />

enfermo, pensó en visitarlo. No lo había<br />

vuelto a ver desde el día de su Graduación.<br />

Antes que pudiera partir para verlo, recibió<br />

un telegrama donde decía que su padre<br />

había muerto, y le había heredado todas<br />

sus posesiones, por lo cual necesitaba<br />

urgentemente ir a la casa de su padre para<br />

arreglar todos los trámites de inmediato.<br />

Cuando llegó a la casa de su padre,<br />

una tristeza y arrepentimiento llenó su<br />

<strong>corazón</strong> de pronto. Empezó a ver todos<br />

los documentos importantes que su padre<br />

tenía y encontró la Biblia que en aquella<br />

ocasión su padre le había dado.<br />

Con lágrimas, la abrió y empezó a hojear<br />

sus páginas. Su padre cuidadosamente<br />

había subrayado un verso en Mateo 7:11<br />

“Y si vosotros siendo malos, sabéis dar<br />

buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto<br />

más nuestro Padre Celestial dará a sus hijos<br />

aquello que le pidan?”<br />

Mientras leía esas palabras, unas llaves<br />

de auto cayeron de la Biblia. Tenían una<br />

tarjeta de la agencia de autos donde<br />

había visto ese auto deportivo que había<br />

deseado tanto. En la tarjeta estaba la fecha<br />

<strong>del</strong> día de su graduación y las palabras:<br />

TOTALMENTE PAGADO.<br />

Cuantas veces hemos rechazado y<br />

perdido las Bendiciones de Dios porque no<br />

vienen envueltas en paquetes hermosos,<br />

como nosotros esperamos? Los mejores<br />

regalos de Dios no siempre parecen<br />

ser maravillosos, algunas veces vienen<br />

disfrazados de dolor o de lágrimas.<br />

Te invito para ver cada situación difícil que<br />

se te presente como una oportunidad<br />

para comprender el amor de Dios<br />

manifestándose en tu vida, y que a través<br />

de esa situación puedas aprender a confiar<br />

en Dios.<br />

Hay cosas que seguramente han sido de<br />

los mejores regalos que hemos recibido.<br />

Preciosos regalos envuelto en un papel<br />

de dolor. La próxima vez que creas recibir<br />

de Dios algo que no es lo que pediste,<br />

no te enojes, no te alejes de El, decide<br />

seguir y amar a Dios sobre todas las cosas<br />

y sobretodo decide continuar confiando<br />

en El, porque en su perfecto amor sabe<br />

mucho mas acerca de ésta vida que lo que<br />

nosotros podamos comprender.<br />

“Si por la noche hay llanto, por la mañana<br />

habrá gritos de alegría” Salmos 30:5


uno + uno<br />

Cuenta la historia que en medio<br />

de la nada, en un remoto<br />

bosque, se encontraba un<br />

ciego. A cierta distancia, pero<br />

perdido también en la inmensidad<br />

<strong>del</strong> mismo bosque, se encontraba<br />

un paralítico. Ambos querían<br />

abandonar el bosque, pero de forma<br />

independiente, cada uno por su lado,<br />

no lograban salir de aquél lugar.<br />

Fue un día cualquiera, cuando de<br />

repente ambos, el ciego y el paralítico,<br />

se encontraron. No se conocían ni<br />

se habían visto nunca. Pero tras una<br />

breve conversación descubrieron en<br />

seguida que tenían el mismo objetivo:<br />

salir de aquel lugar. Ahora que ya eran<br />

un equipo, empezaron a pensar cómo<br />

podrían salir <strong>del</strong> bosque.<br />

– Si no he salido antes de este sitio<br />

es porque a causa de mi ceguera, no<br />

consigo ver el camino correcto para<br />

salir – dijo el ciego.<br />

El paralítico le miró fijamente y le<br />

contestó.<br />

– Pues yo, ¿sabes por qué no logro<br />

escapar de aquí? Porque no puedo<br />

caminar. De nada me sirve ver el<br />

camino, así que estamos igual.<br />

De repente, el ciego vio claramente<br />

la solución al problema. Era tan<br />

obvio que pensó cómo podía no<br />

haberse dado cuenta desde el primer<br />

momento.<br />

– ¡Ya lo tengo! ¿Sabes cómo podemos<br />

salir de aquí? Ven que te suba a<br />

mis hombros, y tú me guiarás, así<br />

podremos avanzar gracias a mí y<br />

podremos hacerlo en la dirección<br />

correcta gracias a ti. De esta forma,<br />

¡juntos podremos encontrar la salida!<br />

Dicho esto, en estos tiempos de crisis<br />

y en cualquier tiempo en el que uno<br />

solo no puede conseguir siempre sus<br />

objetivos, es una buena idea unirse a<br />

otros para compartir y compensar las<br />

capacidades y cualidades humanas. Lo<br />

que uno por sí mismo no es capaz de<br />

lograr, a veces, uniéndonos, todo se<br />

hace mucho más sencillo. Y todo esto,<br />

la moraleja <strong>del</strong> cuento <strong>del</strong> ciego y el<br />

paralítico, se puede aplicar al mundo<br />

laboral, al personal y prácticamente<br />

a cualquier situación de la vida. ¿Y tú,<br />

estás de acuerdo en que uno más uno<br />

son más que dos?<br />

Donde nuestras<br />

fuerzas, nuestro<br />

ánimo y nuestra<br />

capacidad terminan,<br />

comienza algo<br />

mucho mas grande<br />

y poderoso de lo que<br />

podamos entender<br />

y ver. Tomar ésta<br />

verdad con fe, activa<br />

en nuestras vidas<br />

lo sobrenatural<br />

y extraordinario<br />

de Dios, nuestras<br />

oraciones son<br />

contestadas y somos<br />

testigos de milagros<br />

y prodigios. El anhela<br />

revelarse a ti con<br />

todo su poderío y<br />

majestad, recuerda..<br />

lo que es imposible<br />

para ti es posible para<br />

El


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 09<br />

El da esfuerzo al cansado y<br />

multiplica las fuerzas <strong>del</strong> que<br />

no tiene ningunas<br />

canasto de carbón<br />

Cuenta la historia de un anciano<br />

que vivía en una granja en las<br />

montañas de Mendoza con su<br />

joven nieto.<br />

Cada mañana, el abuelo y su nieto se<br />

sentaban a la mesa de la cocina para leer la<br />

vieja y estropeada Biblia.<br />

Un día el nieto le preguntó: - abuelo, yo<br />

intento leer la Biblia, me gusta mucho<br />

pero no la entiendo y lo poco que logro<br />

entender se me olvida enseguida.<br />

¿Por qué necesitamos leer la Biblia? ¿Qué<br />

tiene de bueno?<br />

El abuelo que escuchaba, mientras echaba<br />

carbón en la estufa, respondió: - Querido<br />

hijo, toma el canasto de carbón ve al río y<br />

tráemelo lleno de agua.<br />

El nieto obedeció a su abuelo, aunque<br />

toda el agua se perdió antes de que él<br />

pudiera volver a la casa.<br />

El abuelo se rió y dijo: - Tendrás<br />

que caminar más rápido y lo envió<br />

nuevamente al río con el canasto <strong>del</strong><br />

carbón para hacer un nuevo intento.<br />

Esta vez el niño corrió todo lo que pudo,<br />

pero de nuevo el canasto estaba vacío<br />

antes de que llegara a la casa.<br />

Casi sin respiración, le dijo a su abuelo. -<br />

Llevar agua en un canasto de carbón es<br />

imposible, nunca lo lograré. Si tú quieres<br />

que traiga agua iré con otro tipo de<br />

recipiente.<br />

Pero el anciano dijo: - Es que yo no quiero<br />

un recipiente de agua, quiero un canasto<br />

de agua.<br />

- Tú puedes lograrlo, trata de ir más rápido<br />

y lo conseguirás.<br />

El anciano salió, para ver lo que hacía su<br />

nieto. El niño sabía que era imposible, pero<br />

quería demostrar a su abuelo que aún<br />

cuando corriese tan rápido como podía,<br />

el agua se saldría antes de que llegase a<br />

la casa.<br />

Al llegar de nuevo con el canasto vacío,<br />

dijo: - ¡Mira abuelo, es inútil!<br />

- ¿Por qué piensas que es inútil? Le<br />

preguntó el anciano. Mira dentro <strong>del</strong><br />

canasto, ¿no ves algo diferente? El niño<br />

miró el canasto y no vio nada especial,<br />

pero de pronto se dio cuenta de que en<br />

lugar de estar sucio y lleno de restos de<br />

carbón, estaba muy limpio.<br />

-Hijo, le dijo el abuelo, esto es lo que pasa<br />

cuando tu lees la Biblia, tal vez no puedes<br />

entender o recordarlo todo, pero a medida<br />

que la vas leyendo te limpia por dentro.<br />

“Ésa es la obra de Dios en nuestra vida.<br />

Para transformar nuestro interior, debe<br />

lavarnos lenta y constantemente hasta<br />

producir una limpieza, que le permita<br />

obrar sin ningún tipo de obstáculos”


zanahoria, huevo o café<br />

Una joven fue a ver a su madre. Le<br />

contó sobre los momentos que<br />

estaba viviendo y lo difícil que le<br />

resultaba salir a<strong>del</strong>ante. No sabía<br />

cómo iba a hacer para seguir luchando y<br />

que estaba punto de darse por vencida<br />

y abandonar todo. Ya estaba cansada<br />

de luchar y empeñarse por vencer los<br />

obstáculos. Tenía la impresión de que tan<br />

pronto lograba encontrarle la solución a un<br />

problema, inmediatamente surgía otro.<br />

Su madre le pidió que la acompañara a<br />

la cocina. Llenó tres ollas con agua. En la<br />

primera colocó zanahorias, en la segunda<br />

huevos y, en la última,colocó granos de<br />

café molidos. Sin decir una palabra esperó<br />

que el agua de las ollas empezara a hervir.<br />

Unos veinte minutos más tarde apagó las<br />

hornallas.<br />

Retiró las zanahorias y las colocó en un<br />

recipiente. Hizo lo mismo con los huevos.<br />

Luego, con un cucharón, retiró el café<br />

y también lo puso en otro recipiente.<br />

Dirigiéndose a su hija, le preguntó: “Ahora<br />

dime lo que ves”.<br />

“Veo zanahorias, huevos y café”, fue la<br />

respuesta de la hija. La madre le pidió que<br />

se acercara y tocara las zanahorias. Estaban<br />

blandas. Después le pidió que tomara<br />

un huevo y lo pelara. Una vez retirada la<br />

cáscara, pudo observar que el huevo se<br />

había endurecido. Finalmente, le pidió que<br />

tomara un trago <strong>del</strong> café. La hija sonrió<br />

al oler el rico aroma que desprendía la<br />

infusión.<br />

Entonces la hija preguntó: “¿A qué viene<br />

todo esto, mamá?” La madre le explicó<br />

que cada uno de esos objetos había<br />

tenido que enfrentar la misma adversidad<br />

-el agua hirviendo- pero cada uno había<br />

reaccionado de una manera diferente.<br />

La zanahoria era dura, resistente en el<br />

momento de haber sido colocada en el<br />

agua. Sin embargo, al ser sometida al<br />

agua hirviendo, quedó blanda y débil. La<br />

frágil cáscara exterior había protegido al<br />

líquido <strong>del</strong> interior <strong>del</strong> huevo. Pero, una<br />

vez hervido, el interior se endureció. Sin<br />

embargo, los granos de café molidos eran<br />

singulares. Una vez colocados en el agua<br />

hirviendo, fue el agua la que cambió.<br />

“¿Con cuál de estos elementos te puedes<br />

identificar?” le preguntó a la hija. “Cómo<br />

le respondes a la adversidad cuando ésta<br />

golpea a tu puerta?<br />

¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano<br />

de café? Piensa en esto: ¿Qué soy? ¿Soy<br />

la zanahoria que parece ser fuerte pero,<br />

con el dolor y la adversidad me marchito<br />

y pierdo mi fuerza? ¿Soy el huevo que<br />

al principio tiene un <strong>corazón</strong> blando,<br />

pero cambia con el calor? ¿Es que tuve<br />

un espíritu fluido pero, después de una<br />

muerte, una separación, un problema<br />

económico o alguna otra situación difícil,<br />

me he vuelto dura y rígida? ¿Será que el<br />

aspecto de mi cáscara no cambió pero, por<br />

dentro, me he convertido en una persona<br />

amargada y difícil, con un espíritu rígido y<br />

un <strong>corazón</strong> endurecido?<br />

¿O es que soy como los granos de café?<br />

De hecho, el grano hace cambiar al agua<br />

caliente, precisamente a la circunstancia<br />

que le produce dolor. Cuando el agua se<br />

calienta, el grano libera la fragancia y el<br />

sabor. Si tú eres como el grano de café<br />

entonces, cuando las cosas han llegado a<br />

su peor momento, tú empiezas a mejorar<br />

y a cambiar la situación creada alrededor<br />

tuyo. ¿Te puedes elevar a otro nivel en los<br />

momentos más sombríos y al enfrentar<br />

enormes desafíos?<br />

¿Cómo enfrentas la adversidad? ¿Eres una<br />

zanahoria, un huevo o un grano de café?


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 11<br />

el hermano<br />

La vida nos<br />

demanda<br />

fe, valentia,<br />

creatividad, y un<br />

inquebrantable<br />

espíritu de lucha..<br />

y por ello no nos<br />

ha dado Dios un<br />

espíritu de temor,<br />

sino de poder, de<br />

amor y de dominio<br />

propio<br />

A<br />

Paul, un amigo mío, su hermano<br />

le regaló un automóvil por su<br />

cumpleaños.<br />

Cuando Paul salía de su trabajo,<br />

encontró un muchachito de la calle<br />

dando vueltas alrededor <strong>del</strong> brillante<br />

coche nuevo, admirándolo.<br />

—¿Es éste su coche, señor? —le<br />

preguntó. Paul asintió con la cabeza.<br />

—Me lo regaló mi hermano por mi<br />

cumpleaños —respondió. El chico se<br />

quedó atónito.<br />

—¿Quiere decir que su hermano se lo dio<br />

y a usted no le costó nada? Vaya,<br />

ojalá... —se interrumpió, vacilante.<br />

Por cierto, Paul sabía ya lo que el chico<br />

iba a decir: que ojalá él tuviera un<br />

hermano así. Pero lo que realmente dijo<br />

lo conmovió hasta lo más hondo.<br />

—Ojalá YO PUDIERA SER UN HERMANO<br />

ASÍ —continuó.<br />

Paul lo miró, atónito, e impulsivamente<br />

añadió:<br />

—¿Te gustaría dar una vuelta en mi<br />

coche?<br />

—Oh, sí. Me encantaría.<br />

Tras un corto recorrido, el chico le<br />

preguntó:<br />

—Señor, ¿le importaría pasar frente a mi<br />

casa?<br />

Paul esbozó una sonrisa, pensando que<br />

sabía lo que deseaba el chico: que sus<br />

vecinos vieran que él podía volver a casa<br />

en un gran automóvil. Pero otra vez se<br />

equivocaba.<br />

—¿Puede detenerse allí, donde están<br />

esos dos escalones? —preguntó el niño.<br />

Subió los escalones corriendo y casi en<br />

seguida Paul lo oyó regresar con lentitud.<br />

Venía trayendo en brazos a su hermanito<br />

inválido.<br />

Lo sentó en el escalón inferior y,<br />

abrazándolo fuertemente, le señaló el<br />

coche.<br />

—¿Ves, es como yo te dije? Su hermano<br />

se lo regaló por su cumpleaños y a él no<br />

le costó ni un centavo.<br />

Algún día yo te regalaré a ti uno igual a<br />

éste... para que tú puedas ir solo a ver<br />

todas las cosas bonitas que hay en la<br />

ciudad, las que yo he tratado de contarte<br />

cómo son.<br />

Paul bajó <strong>del</strong> coche y sentó al pequeño<br />

en el asiento inmediato al <strong>del</strong> conductor.<br />

Con los ojos brillantes, el hermano mayor<br />

se instaló junto a él y esa tarde los tres<br />

iniciaron un memorable paseo.<br />

Paul aprendió cuál había sido la intención<br />

de Jesús al decir: «Más vale dar que<br />

recibir...».


Con el eco fuerte y claro, día con día en tu<br />

vida, de la promesa que Dos te ha hecho, de<br />

-ESTAR CONTIGO SIEMPRE-, no debe existir<br />

NADA demasiado grande, demasiado terrible,<br />

demasiado fuerte o demasiado decepcionante<br />

que no puedas superar


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 15<br />

mi otra mujer<br />

Tú sabes que la amas” -me dijo un día,<br />

tomándome por sorpresa.<br />

La vida es muy corta, dedícale tiempo.<br />

•”Pero yo te amo a Ti” - protesté.<br />

•Lo sé. •Pero también la amas a Ella.<br />

La otra mujer a quien mi esposa quería<br />

que yo visitara, era mi Madre, viuda desde<br />

hace unos años, pero las exigencias de mi<br />

trabajo y mis hijos hacían que sólo la visitara<br />

ocasionalmente.<br />

... Esa noche la llamé para invitarla a cenar y al<br />

cine.<br />

“¿Qué te ocurre? ¿Estás bien?” me preguntó.<br />

• Mi madre es el tipo de mujer que una llamada<br />

tarde, en la noche o una invitación sorpresiva<br />

es indicio de malas noticias.<br />

• “Creí que sería agradable pasar algún tiempo<br />

Contigo”, le respondí. “Los dos solitos”....... ¿Qué<br />

opinas?<br />

Reflexionó sobre ello un momento. “Me<br />

gustaría muchísimo”, dijo.<br />

Ese viernes mientras conducía para recogerla<br />

después de mi trabajo me encontraba nervioso,<br />

era el nerviosismo que antecede a una cita........<br />

Y, Por Dios, cuando llegué a su casa, vi que Ella<br />

también estaba muy emocionada! Me esperaba<br />

en la puerta con su viejo abrigo puesto, se<br />

había rizado el pelo y usaba el vestido con el<br />

que celebró su último aniversario de bodas,<br />

su rostro sonreía, irradiaba luz como un ángel.<br />

•”Les dije a mis amigas que iba a salir con mi<br />

hijo y se mostraron muy emocionadas”- me<br />

comentó mientras subía a mi auto- •”No podrán<br />

esperar a mañana para escuchar acerca de<br />

nuestra velada”. Fuimos a un restaurante no<br />

muy elegante, pero sí muy acogedor, mi Madre<br />

se aferró a mi brazo como si fuera “La Primera<br />

Dama de la Nación”.<br />

•Cuando nos sentamos tuve que leerle el menú.<br />

Sus ojos sólo veían grandes figuras.<br />

•Cuando iba por la mitad de las entradas,<br />

levanté la vista; mi Mamá está sentada al otro<br />

lado de la mesa y sólo me miraba.<br />

•Una sonrisa nostálgica se le <strong>del</strong>ineaba en los<br />

labios.<br />

• “Era Yo quien te leía el menú cuando eras<br />

pequeño ¿Recuerdas?“ “Entonces es hora de<br />

que te relajes y me permitas devolver el favor”<br />

-respondí.<br />

Durante la cena tuvimos una agradable<br />

conversación, nada extraordinario, sólo<br />

ponernos al día uno con la vida <strong>del</strong> otro.<br />

•Hablamos tanto que nos perdimos el cine<br />

•”Saldré Contigo otra vez, pero sólo si me dejas<br />

invitar,” dijo mi madre.<br />

•Cuando la llevé a su casa, la sentí, la besé, la<br />

abracé, le dije cuanto la quería.<br />

•¿”Cómo estuvo la cita?” - quiso saber mi esposa<br />

cuando llegué aquella noche.<br />

•”Muy agradable, gracias, la miré complacido<br />

diciéndole, Mucho más de lo que imagine”.<br />

Un mes más tarde mi Madre murió de un<br />

infarto, todo fue tan rápido, no pude hacer<br />

nada.<br />

Al poco tiempo recibí un sobre <strong>del</strong> restaurante<br />

donde habíamos cenado mi Madre y Yo,<br />

contenía una nota que decía:<br />

“La cena está pagada por anticipado, estaba<br />

casi segura que no podría estar allí, pero igual<br />

pagué para dos, para tí y tu Esposa, jamás podrá<br />

entender lo que aquella noche significó para Mi.<br />

¡Te amo”!<br />

Tu Mamá.<br />

En ese momento comprendí la importancia de<br />

decir a tiempo “TE AMO” y darles a nuestros<br />

seres queridos el espacio que se merecen; nada<br />

en la vida será más importante que Dios y tu<br />

Familia, dales tiempo porque ellos no pueden<br />

esperar.<br />

Éxo 20:12 “Honra a tu padre y a tu madre, para<br />

que disfrutes de una larga vida en la tierra que<br />

te da el Señor tu Dios.


Este espacio<br />

puede ser tuyo<br />

Llámanos (232) 322 2100


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 17<br />

el coraje<br />

—Entonces, ¿tú crees que soy<br />

valiente? —preguntó la muchacha.<br />

—Claro que sí.<br />

—Quizá lo sea, pero es porque he<br />

recibido la inspiración de algunos<br />

maestros. Te hablaré de uno. Hace<br />

muchos años, cuando trabajaba<br />

como voluntaria en el hospital de<br />

Stanford, conocí a una niña, Liza,<br />

que sufría una rara enfermedad muy<br />

grave. Al parecer, su única posibilidad<br />

de recuperación era una transfusión<br />

de sangre de su hermanito de<br />

cinco años, que había sobrevivido<br />

milagrosamente a la misma<br />

enfermedad y había desarrollado<br />

los anticuerpos necesarios para<br />

combatirla. El médico le explicó la<br />

situación al niño y le preguntó si<br />

estaría dispuesto a donar sangre a su<br />

hermana. Lo vi vacilar<br />

apenas un momento antes de hacer<br />

una inspiración profunda y responder:<br />

«Sí, lo haré si es para salvar a Liza».<br />

Mientras se realizaba la transfusión,<br />

el niño permaneció en una cama<br />

junto a la de su hermana, sonriendo,<br />

como todos los presentes, al ver<br />

cómo el color volvía a las mejillas de<br />

Liza. Después, su rostro palideció y se<br />

esfumó su sonrisa. Levantó los ojos<br />

hacia el médico y le preguntó con voz<br />

temblorosa:<br />

«¿Empezaré a morirme ahora mismo?».<br />

En su inocencia de niño, había<br />

entendido mal al médico y pensaba<br />

que tenía que dar a su hermana toda<br />

su sangre.<br />

—Sí —añadió la narradora, he<br />

aprendido a ser valiente porque he<br />

tenido maestros inspirados.<br />

No es el tamaño<br />

de tu fe el que<br />

cuenta, sino<br />

el poderío y la<br />

majestad <strong>del</strong><br />

Dios en el que has<br />

decidido creer<br />

Si buscas a Dios<br />

con todo tu<br />

<strong>corazón</strong>, El ha<br />

prometido que<br />

vas a encontrarlo


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 19<br />

Una señora de edad había<br />

esperado toda la vida la<br />

oportunidad de viajar en<br />

tren. Quería contemplar,<br />

devorar cada paisaje con los ojos<br />

y disfrutar todo cuanto pudiera en<br />

los kilómetros que iría a recorrer.<br />

Entró muy decidida en el vagón<br />

de pasajeros y cuando el tren<br />

partió, comenzó a acomodar los<br />

paquetes y cestas que traía, trató<br />

de arreglar confortablemente su<br />

asiento y acomodar las cortinas,<br />

y colocarse en situación cómoda<br />

pero de repente cuando ya<br />

estaba lista para comenzar la<br />

contemplación <strong>del</strong> paisaje, el<br />

conductor voceó el nombre de la<br />

estación a la cual iban…<br />

¡Habían llegado!<br />

“Qué pena” si hubiese sabido que<br />

pequeñeces<br />

llegaríamos tan pronto no habría<br />

perdido tiempo en “PEQUEÑECES”<br />

No perdamos el enfoque real en<br />

nuestra vida. Las pequeñeces<br />

muchas veces nos desvían y<br />

distraen <strong>del</strong> verdadero paisaje,<br />

de las cosas grandes que Dios<br />

tiene para nosotros…démosle a<br />

Él, el lugar que merece. “El primer<br />

lugar”<br />

Mateo 6:33 dice: “Más buscad<br />

primeramente el reino de Dios y<br />

su justicia y todas las cosas serán<br />

añadidas”<br />

Dios no nos pide<br />

hacer grandes cosas<br />

por los demás, pero<br />

sí nos llama a que<br />

hagamos pequeñas<br />

cosas con amor.<br />

El ingrediente<br />

que mantiene<br />

funcionando la<br />

gracia y el favor de<br />

Dios sobre tu vida se<br />

llama gratitud


las manos<br />

de mamá<br />

Jesús dice.. “Hágase de acuerdo a tu fe.” Así que<br />

nosotros elegimos cuántas respuestas obtenemos,<br />

nosotros elegimos la clase de vida que llevaremos,<br />

la fe es la llave que nos abre las puertas al triunfo,<br />

a la victoria. Es por ello que debemos aumentar,<br />

desarrollar y reforzar nuestra fe. Porque la fe nos<br />

asegura lo mejor de Dios para nuestra vida.


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 21<br />

Un joven fue a solicitar un<br />

puesto directivo en una gran<br />

empresa. Pasó la entrevista<br />

inicial, y ahora se reuniría con<br />

el director para la entrevista final.<br />

El director descubrió a partir de su<br />

currículum que los logros académicos<br />

<strong>del</strong> joven eran excelentes.<br />

Él preguntó: “¿Obtuvo becas para<br />

estudiar en la escuela?” el joven<br />

respondió “no”.<br />

“¿Fue su padre quien pagó las<br />

colegiaturas de la escuela?”<br />

“Mi padre murió cuando yo tenía un<br />

año, fue mi madre quien pagó los<br />

gastos y colegiaturas de mi escuela.”,<br />

Respondió.<br />

“¿Dónde trabaja su madre?”<br />

preguntó-<br />

“Mi madre trabaja lavando ropa<br />

ajena.”<br />

El director pidió al joven que le<br />

mostrara sus manos.<br />

El joven mostró un par de manos que<br />

eran lisas y perfectamente cuidadas.<br />

“¿Alguna vez ha ayudado a su madre<br />

a lavar ropa?”<br />

“Nunca, mi madre siempre quiso<br />

que estudiara y me preparara<br />

adecuadamente. Además, yo veo que<br />

mi madre puede lavar la ropa más<br />

rápido que yo, yo no sé hacer eso..<br />

El director dijo: “Voy a pedirle algo,<br />

cuando vuelva a casa hoy, vaya y<br />

limpie las manos de su madre, y<br />

luego venga a verme mañana por la<br />

mañana.<br />

El joven sintió que su oportunidad de<br />

conseguir el trabajo era grande.<br />

Cuando volvió a casa, le pidió a su<br />

madre que le permitiera limpiar<br />

sus manos. Su madre se sentía<br />

extraña, feliz pero con sentimientos<br />

encontrados, así que mostró las<br />

manos a su hijo.<br />

El joven limpió las manos de su<br />

madre lentamente. Sus lágrimas<br />

cayeron mientras lo hacía, era la<br />

primera vez que se dio cuenta de<br />

que las manos de su madre eran tan<br />

arrugadas, y había tantos moretones<br />

en ellas.<br />

Algunos moretones eran tan<br />

dolorosas que su madre hizo una<br />

mueca cuando los tocaba.<br />

Esta fue la primera vez que el joven<br />

se dio cuenta de que se trataba de<br />

este par de manos que lavaban ropa<br />

ajena, todos los días para que él<br />

pudiera pagar las cuotas escolares.<br />

Los moretones en las manos de la<br />

madre eran el precio que la madre<br />

tuvo que pagar por su educación, sus<br />

actividades escolares y su futuro.<br />

Después de limpiar sus manos de la<br />

madre, el joven en voz baja se dirigió<br />

al montón de ropa que quedaba por<br />

lavar a su madre.<br />

Esa noche, madre e hijo hablaron<br />

durante un tiempo muy largo.<br />

La mañana siguiente, el joven fue a la<br />

oficina <strong>del</strong> director.<br />

El Director notó las lágrimas en los<br />

ojos <strong>del</strong> joven, cuando le preguntó:<br />

“¿ Puede decirme qué has hecho y<br />

aprendido ayer en tu casa”<br />

El joven respondió: “He limpiado las<br />

manos de mi madre, y también he<br />

terminado de lavar toda la ropa que<br />

ella aun tenía pendiente”<br />

“Ahora sé lo valiosa que es.<br />

Sin mi madre, yo no sería quien soy<br />

hoy.<br />

Al ayudar a mi madre, me doy<br />

cuenta de lo difícil y duro que ha<br />

sido para ella conseguir cada peso, y<br />

he valorado todo lo que ella es, y lo<br />

ingrato que he sido en no ver antes<br />

todo lo que ha hecho por mí.<br />

El director dijo: “Esto es lo que estoy<br />

buscando en un gerente. Quiero<br />

contratar a una persona que pueda<br />

apreciar la ayuda de los demás, una<br />

persona que valore y conozca los<br />

sufrimientos de los demás para hacer<br />

las cosas, y una persona que no<br />

pondría el dinero como su única meta<br />

en la vida. “


Este espacio<br />

puede ser tuyo<br />

Llámanos (232) 322 2100


¿Y donde está tu paraguas?<br />

En un pueblito de zona rural<br />

en los años 50, se produjo<br />

una larga sequía que<br />

amenazaba con dejar en la<br />

ruina a todos sus habitantes, debido<br />

a que subsistían con el fruto <strong>del</strong><br />

trabajo <strong>del</strong> campo. A pesar de que<br />

mayoría de sus habitantes creían<br />

en Dios, ante la situación límite,<br />

marcharon a su iglesia y dijeron a<br />

su líder:<br />

-Si Dios es tan poderoso, pidámosle<br />

que envíe la lluvia necesaria para<br />

revertir esta angustiante situación.<br />

-Está bien, le pediremos al Señor,<br />

pero deberá haber una condición<br />

indispensable.<br />

-¡Díganos cuál es! respondieron<br />

todos.<br />

-Hay que pedírselo con fe, con<br />

mucha fe, contestó el líder.<br />

-Así lo haremos, y también<br />

vendremos a la iglesia todos los<br />

días.<br />

Los campesinos comenzaron a ir<br />

a la iglesia todos los días, pero las<br />

semanas transcurrían y la esperada<br />

lluvia no se hacía presente. Un día,<br />

fueron todos a enfrentar al hombre<br />

y reclamarle:<br />

-Usted nos dijo que si le pedíamos<br />

a Dios que enviara la lluvia, Él iba<br />

a acceder a nuestras peticiones.<br />

Pero ya van varias semanas y no<br />

obtenemos respuesta alguna.<br />

-¿Han ustedes pedido con fe<br />

verdadera?, les pregunto el líder.<br />

-¡Sí por supuesto! respondieron al<br />

unísono.<br />

-Entonces, si dicen haber pedido<br />

con Fe Verdadera… ¿porqué<br />

durante todos estos días ni uno<br />

solo de ustedes ha traído paraguas?<br />

Tenía razón… ¿no lo creen ustedes?<br />

Esto es muy cierto, si creemos que<br />

el Señor nos contestará la petición<br />

que le hacemos, nuestras acciones<br />

para demostrar esa fe tiene que<br />

estar a la vista. Creer que Dios va ha<br />

contestar cualquier petición que le<br />

hagamos, es tener esa fe cuando no<br />

se ve nada.<br />

Jesús le dijo: Si puedes creer, al que<br />

cree todo le es posible. Mateo 9:23<br />

Ahora bien, la fe es la certeza de lo<br />

que se espera, la convicción de lo<br />

que no se ve Hebreos 11:<br />

Alégrate de la vida<br />

porque ella te da la<br />

oportunidad de amar,<br />

de trabajar, de jugar y<br />

de mirar a las estrellas<br />

Actúa con Justicia,<br />

Ama con misericordia y<br />

camina con humildad.


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 25<br />

¿Cual es mi nombre?<br />

No tengo respeto por la justicia.<br />

Mutilo sin matar, rompo corazones y<br />

arruino vidas.<br />

Soy astuto y malicioso y me vuelvo más<br />

fuerte al paso <strong>del</strong> tiempo.<br />

Entre más sea mencionado más crédito se<br />

me da.<br />

Mis víctimas están indefensas, no tienen<br />

escapatoria, no pueden protegerse pues<br />

no tengo nombre ni cara.<br />

Es imposible rastrearme, mientras más<br />

trates de descubrirme, me vuelvo más<br />

escurridizo.<br />

Soy el amigo de nadie. Una vez que<br />

mancho la reputación de alguien, nada<br />

vuelve a ser igual.<br />

Derribo gobiernos y destruyo matrimonios.<br />

Arruino trayectorias profesionales y causo<br />

noches de insomnio, heridas e indigestión.<br />

Engendro suspicacia y genero agravios.<br />

Hago que la gente inocente llore sobre sus<br />

almohadas.<br />

Hasta mi nombre sisea.<br />

Se me conoce como ¡¡¡~ Chismeeeeeee ~!!!<br />

Chisme en el trabajo, chisme en la familia,<br />

chisme en la fiesta, chisme en el teléfono.<br />

Provoco encabezados y dolores de cabeza.<br />

Por eso antes de que repitas alguna<br />

historia o comentario,<br />

Pregúntate a ti mismo:<br />

¿Es cierto?<br />

¿Es justo?<br />

¿Es necesario?<br />

Si la respuesta es no...<br />

¡CALLATELO!<br />

“Los chismes son como ricos bocados: se<br />

deslizan hasta las entrañas”. Proverbios<br />

26:22 NVI<br />

“El perverso provoca peleas; el chismoso<br />

es causa de enemistades”. Proverbios<br />

16:28 DHH<br />

En nuestras vidas<br />

nada sucede sin<br />

compromiso, el<br />

compromiso es<br />

lo que convierte<br />

nuestros sueños en<br />

realidad. Hay mucha<br />

gente soñando en el<br />

mundo, pero nada<br />

ocurre hasta que<br />

despertamos y nos<br />

comprometemos<br />

a trabajar por esos<br />

sueños. Haz hoy un<br />

compromiso con<br />

Dios y conviértete en<br />

todo lo que El quiere<br />

que seas!!


deja un espacio vacío<br />

Tienes el hábito de juntar objetos<br />

inútiles, creyendo que un día... (no<br />

sabes cuándo)...vas a necesitarlos?<br />

¿Tienes el hábito de juntar dinero,<br />

sólo para no gastarlo pues piensas que en<br />

el futuro podrá hacerte falta?<br />

¿Tienes el hábito de guardar ropa, zapatos,<br />

muebles, utensilios domésticos y otras<br />

cosas <strong>del</strong> hogar que ya no usas desde hace<br />

mucho tiempo?<br />

¿Y dentro tuyo...?<br />

¿Tienes el hábito de guardar enojos,<br />

resentimientos, tristezas, miedos y demás?<br />

¡Eso jamás lo hagas! ¡Va contra tu propia<br />

vida!<br />

Es preciso que dejes un espacio, un vacío,<br />

para que cosas nuevas lleguen a tu vida.<br />

Es preciso que te deshagas de todo lo<br />

inútil que hay en ti y en tu vida, para que tu<br />

propósito se cumpla.<br />

Mientras estés, material o<br />

emocionalmente, cargando de<br />

sentimientos viejos e inútiles, no tendrás<br />

espacio para nuevas oportunidades.<br />

Los bienes necesitan circular... limpia los<br />

cajones, los armarios, el cuarto de enseres,<br />

el garage...<br />

Dona todo aquello que ya no uses...<br />

La actitud de guardar un montón de cosas<br />

inútiles solo encadena tu vida.<br />

No son los objetos guardados los que<br />

estancan a ti...<br />

Sino el significado de la actitud de<br />

guardar...<br />

Cuando se guarda, se considera la<br />

posibilidad de falta, de carencia...<br />

Se cree que mañana podrá faltar, y<br />

que no tendrás manera de cubrir esas<br />

necesidades...<br />

Deshazte de lo que ya perdió el color y el<br />

brillo...<br />

Deja entrar lo nuevo de DIOS a tu vida...<br />

“No amontonen riquezas aquí en la tierra,<br />

donde la polilla destruye y las cosas se<br />

echan a perder, y donde los ladrones<br />

entran a robar. Más bien amontonen<br />

riquezas en el cielo, donde la polilla no<br />

destruye ni las cosas se echan a perder ni<br />

los ladrones entran a robar. Pues donde<br />

esté tu riqueza, allí estará también tu<br />

<strong>corazón</strong>”. Mateo 6: 19 al 21 DHH<br />

La belleza es el<br />

resultado de<br />

una profunda<br />

transformación<br />

interna, no existen<br />

tratamientos para<br />

ello... solamente<br />

la bondad, la<br />

honestidad, el<br />

amor, el valor y la<br />

humildad hacen<br />

verdaderamente<br />

hermosa a una<br />

persona, es de<br />

adentro hacia<br />

afuera y no a la<br />

inversa...


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 27<br />

Manténte fiel a lo<br />

que tu crees. Se<br />

valiente y Se fuerte<br />

porque se requiere<br />

de una cantidad<br />

enorme de valor<br />

para enfrentar<br />

los desafíos<br />

comunes de la<br />

vida cotidiana y se<br />

requiere de mucho<br />

coraje para vivir y<br />

hacer lo correcto<br />

conforme a la<br />

verdad de Dios.<br />

Un hombre compró una granja a<br />

alguien que se fue <strong>del</strong> pueblo para<br />

buscar diamantes. Un día mientras el<br />

hombre plantaba sus semillas, encontró<br />

una piedra extraña. Llevándola a la casa<br />

la puso sobre la repisa de la chimenea.<br />

Esa misma noche un amigo suyo miró<br />

la piedra y la tomó, luego, con los ojos<br />

muy abiertos, se dirigió al nuevo dueño<br />

de la granja y le dijo:<br />

-¿Sabes lo que tienes aquí? Este debe<br />

ser el diamante más grande que se<br />

haya encontrado jamás.<br />

Investigaciones posteriores probaron<br />

que tenía razón. Y en poco tiempo se<br />

descubrió que la granja entera estaba<br />

literalmente cubierta con piedras<br />

magníficas similares. La granja resultó<br />

ser una de las minas de diamantes más<br />

ricas y productivas en todo el mundo.<br />

la granja<br />

Los tiempos no han cambiado mucho,<br />

¿no es cierto? Tal como el hombre<br />

que se apresuró a vender su granja,<br />

muy pocos se toman el tiempo para<br />

valorar lo que ya tienen, fracasamos en<br />

reconocer la riqueza en nuestro propio<br />

patio.<br />

Que no te suceda lo mismo que el<br />

hombre de ésta historia, no pierdas<br />

de vista lo que tienes, cuida tu jardín,<br />

cultívalo, atiende a tus hijos, valora tu<br />

trabajo, ama a tu esposa (o), que nadie<br />

más descubra la belleza que tú no has<br />

mirado.<br />

Pro 6:4 No permitas que se duerman<br />

tus ojos; no dejes que tus párpados se<br />

cierren


Tu puedes ser éste día<br />

un instrumento de Dios<br />

para ayudar a los demás.<br />

Puedes ser sus manos para<br />

trasmitir a los demás calidez<br />

y compañía, puedes ser sus<br />

brazos para dar ese amor<br />

fraternal que alguien pide en<br />

silencio, puedes ser su boca<br />

para pronunciar palabras<br />

amables que alegren al<br />

mas triste, puedes ser sus<br />

oídos para escuchar al que<br />

necesita conversar.<br />

Tu fe debe estar<br />

puesta en Dios<br />

porque no te dejará<br />

hasta que todas<br />

las promesas se<br />

cumplan en tu vida.<br />

Tú no puedes<br />

cambiar a nadie,<br />

pero Dios es<br />

especialista<br />

en cambiar los<br />

corazones.


<strong>Mayo</strong> <strong>2018</strong> 29<br />

un simple gesto<br />

Todo lo que<br />

necesita el mal<br />

para triunfar es<br />

que la gente que<br />

puede hacer algo<br />

bueno no haga<br />

absolutamente<br />

nada..<br />

Las grandes<br />

personas que<br />

han marcado<br />

generaciones<br />

enteras han<br />

sido gente<br />

común con una<br />

extraordinaria<br />

determinación.<br />

Todo el mundo puede ser grande...<br />

porque cualquiera puede servir.<br />

Para eso no necesitas tener un título<br />

universitario. No necesitas hacer que<br />

sujeto y verbo concuerden. Lo único que<br />

necesitas es un <strong>corazón</strong> pleno de gracia, un<br />

alma nacida <strong>del</strong> amor.<br />

Martin Luther King<br />

Mark volvía caminando de la escuela cuando<br />

advirtió que el muchacho que caminaba<br />

<strong>del</strong>ante de él había tropezado y se le<br />

habían caído todos los libros que llevaba,<br />

además de dos jerséis, un bate de béisbol,<br />

un guante y un pequeño magnetófono.<br />

Mark se arrodilló para ayudarle a recoger los<br />

objetos desparramados y, como iban por<br />

el mismo camino, le ayudó a llevar parte de<br />

la carga. Mientras caminaban, supo que el<br />

chico se llamaba Bill, que le encantaban los<br />

vídeo-juegos, el béisbol y la historia, que<br />

tenía muchos problemas con las demás<br />

asignaturas y que acababa de romper con<br />

su novia.<br />

Primero llegaron a casa de Bill, donde<br />

invitaron a Mark a que entrara a tomar un<br />

refresco y a ver la televisión un rato. La tarde<br />

pasó agradablemente, entre algunas risas y<br />

algo de charla intrascendente, luego Mark se<br />

fue a su casa.<br />

Los dos chicos siguieron viéndose en la<br />

escuela, almorzaron juntos un par de veces<br />

y, finalmente, ambos terminaron la primaria.<br />

Casualmente fueron a la misma escuela<br />

secundaria, donde siguieron teniendo<br />

breves contactos durante años. Finalmente,<br />

llegado el tan esperado último año, tres<br />

semanas antes <strong>del</strong> día que finalizaban los<br />

cursos, Bill le preguntó a Mark si podían<br />

conversar un rato.<br />

Le recordó aquel día, años atrás, en que se<br />

habían conocido, y le preguntó: —¿Nunca te<br />

extrañaste de que ese día volviera a casa tan<br />

cargado de cosas?<br />

Había vaciado mi armario porque no quería<br />

cargar a nadie con ese desorden.<br />

Había ido guardando algunas pastillas para<br />

dormir de mi madre y volvía a casa con<br />

intención de suicidarme. Pero después de<br />

haber pasado un rato contigo, charlando<br />

y riéndonos, me di cuenta de que si me<br />

hubiera matado habría perdido aquellos<br />

momentos y muchos otros que podían<br />

haberles seguido.<br />

Entonces, Mark, ya ves que aquel día,<br />

cuando me recogiste los libros, hiciste<br />

mucho más... Me salvaste la vida.<br />

Nunca sabremos el bien que puede hacer<br />

a alguien, un gesto de bondad, un poco<br />

de amor. Hay tantas personas solitarias en<br />

el mundo que lo único que necesitan es<br />

saberse aceptados, valorados.<br />

No dudes nunca en dar un gesto de amor,<br />

en extender tu mano a aquel que se sienta<br />

solo y triste, ganarás mucho porque habrás<br />

abierto tu <strong>corazón</strong> a lo que realmente vale la<br />

pena.. amar a los demás.<br />

“En todo tiempo ama el amigo; Y es como<br />

un hermano en tiempo de angustia”<br />

(prov:17:17)


Pollo agridulce a la primavera<br />

Ingredientes<br />

1 cucharadita de caldo de pollo<br />

3 cucharadas de aceite<br />

550 g de pechuga de pollo sin piel sin<br />

hueso cortada en cubos<br />

1/2 taza de piña en almíbar en trozos<br />

drenada<br />

1/4 taza de salsa inglesa<br />

1/2 taza de catsup<br />

Ajo, pimienta y cominos al gusto<br />

100 gramos de chícharos pelados<br />

100 gramos de zanahorias cortadas en<br />

cubitos<br />

Media cebolla mediana fileteada en lunas<br />

Modo de preparación<br />

En un sartén calentar el aceite y sofreir la<br />

cebolla en lunas, sellar por ambos lados la<br />

pechuga de pollo, bajar la flama y Agregar<br />

los condimentos y verduras.<br />

Complementar con el resto de los<br />

ingredientes y dejar cocinar por 15<br />

minutos hasta que la salsa haya quedado<br />

espesa.<br />

Acompañar de Arroz blanco.<br />

Buen provecho!!<br />

Hay muchos grandes<br />

soñadores en el<br />

mundo, pero nada<br />

sucede hasta que no<br />

te despiertas de tu<br />

sueño y te pones a<br />

trabajar. Es tiempo<br />

de avanzar y realizar<br />

lo que Dios tiene<br />

preparado para ti,<br />

No dudes. La duda<br />

hace que te pierdas lo<br />

mejor de Dios. Sigue<br />

a<strong>del</strong>ante, avanza,<br />

hasta ver que tus<br />

sueños se hacen<br />

realidad. Hay más<br />

para ti.

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