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40 años de Agenda Regional de Género

Hace casi 40 años se celebró la Primera Conferencia Regional sobre la Integración de la Mujer en el Desarrollo Económico y Social de América Latina (La Habana, 1977), que abrió un espacio de intercambio regional después de la Conferencia Mundial del Año Internacional de la Mujer (Ciudad de México, 1975). Este espacio apostaba por que las demandas sociales en favor de los derechos de las mujeres y la igualdad de género que empezaban a cruzar los países se convirtieran en compromisos gubernamentales. En aquella ocasión se acordó el Plan de Acción Regional para la Integración de la Mujer en el Desarrollo Económico y Social de América Latina, que fue la primera hoja de ruta que tuvo la región para avanzar hacia el reconocimiento del aporte de las mujeres a la sociedad y para hacer visibles los obstáculos que enfrentaban para mejorar su situación. Fue también en esa oportunidad cuando los Gobiernos de la región le entregaron a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) el mandato de convocar, con carácter permanente y regular y en intervalos no superiores a tres años, una Conferencia Regional sobre la Mujer.

Hace casi 40 años se celebró la Primera Conferencia Regional sobre la Integración de la Mujer en el Desarrollo Económico y Social de América Latina (La Habana, 1977), que abrió un espacio de intercambio regional después de la Conferencia Mundial del Año Internacional de la Mujer (Ciudad de México, 1975). Este espacio apostaba por que las demandas sociales en favor de los derechos de las mujeres y la igualdad de género que empezaban a cruzar los países se convirtieran en compromisos gubernamentales. En aquella ocasión se acordó el Plan de Acción Regional para la Integración de la Mujer en el Desarrollo Económico y Social de América Latina, que fue la primera hoja de ruta que tuvo la región para avanzar hacia el reconocimiento del aporte de las mujeres a la sociedad y para hacer visibles los obstáculos que enfrentaban para mejorar su situación. Fue también en esa oportunidad cuando los Gobiernos de la región le entregaron a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) el mandato de convocar, con carácter permanente y regular y en intervalos no superiores a tres años, una Conferencia Regional sobre la Mujer.

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Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)<br />

DECLARACIÓN DE EL SALVADOR SOBRE EL CONSENSO DE QUITO<br />

El Salvador en su oportunidad se unió al consenso <strong>de</strong>l Programa <strong>de</strong> Acción <strong>de</strong> la Conferencia Internacional<br />

sobre Población y Desarrollo <strong>de</strong> El Cairo, Egipto, en 1994, y realizó una serie <strong>de</strong> reservas que hoy en día<br />

continúan vigentes,<br />

Consi<strong>de</strong>rando que El Salvador es consecuente con su vocación <strong>de</strong>mocrática, se une al consenso <strong>de</strong> la<br />

<strong>de</strong>claración <strong>de</strong> Quito convencidos <strong>de</strong> que este documento será útil para la promoción y a<strong>de</strong>lanto <strong>de</strong> la mujer.<br />

En este sentido, reafirmamos nuestra voluntad <strong>de</strong> promover el contenido <strong>de</strong>l presente Consenso con las<br />

siguientes reservas,<br />

Reiteramos la reserva al numeral 8 <strong>de</strong> la presente Declaración, específicamente la frase referida a... “el<br />

carácter laico <strong>de</strong> los Estados”, <strong>de</strong>bido a que su redacción no es compatible con lo establecido en nuestra Carta<br />

Magna que en su artículo 85 reconoce que el Estado es republicano, <strong>de</strong>mocrático y representativo,<br />

Asimismo, reiteramos nuestra reserva al numeral 17 <strong>de</strong> la presente Declaración, cuando menciona “las<br />

relaciones familiares al interior <strong>de</strong> los diversos tipos <strong>de</strong> familia” <strong>de</strong>bido a que esta redacción no es compatible<br />

con nuestra legislación interna, tal como lo señalamos en las reservas planteadas en el Plan <strong>de</strong> Acción <strong>de</strong> Cairo,<br />

“al referirnos a la familia en su pluralidad <strong>de</strong> formas, en ningún caso po<strong>de</strong>mos cambiar el origen y fundamento<br />

<strong>de</strong> la familia, que es la unión el hombre y la mujer, <strong>de</strong> la que se <strong>de</strong>rivan los hijos.”,<br />

A<strong>de</strong>más, señalamos nuestra reserva al numeral 23 <strong>de</strong> esta Declaración cuando señala “relacionados a los<br />

<strong>de</strong>rechos sexuales” ya que el país reconoce únicamente la existencia <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos reproductivos <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>recho a la salud,<br />

En lo relacionado a la frase “en virtud <strong>de</strong>, entre otros, el aborto en condiciones <strong>de</strong> riesgo” presentamos nuestra<br />

reserva ya que nuestra Constitución señala en su artículo primero referido a la persona humana, que “...reconoce<br />

como persona humana a todo ser humano <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el instante <strong>de</strong> la concepción”, y que no se promoverá el aborto<br />

como método <strong>de</strong> planificación familiar ni como un servicio <strong>de</strong> salud,<br />

Reiteramos nuestra reserva al numeral 1 inciso xxiv porque igualmente hace mención a los <strong>de</strong>rechos<br />

sexuales como parte <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos humanos y El Salvador solamente reconoce los <strong>de</strong>rechos reproductivos<br />

en el marco <strong>de</strong>l <strong>de</strong>recho a la salud,<br />

Asimismo, reiteramos nuestra reserva al numeral 1 inciso xxv cuando hace referencia a “servicios <strong>de</strong> salud<br />

sexual y reproductiva” ya que si bien el país apoya las acciones encaminadas a promover la salud sexual y<br />

reproductiva <strong>de</strong> hombres y mujeres, como ya lo mencionamos anteriormente, nunca <strong>de</strong>berá incluirse el aborto<br />

en esos conceptos, ni como servicio ni como método para regular la fecundidad,<br />

Por lo antes expresado, solicitamos incorporar las mencionadas reservas como parte integral <strong>de</strong>l documento<br />

que emane <strong>de</strong> la presente reunión y <strong>de</strong> la Declaración <strong>de</strong>l Consenso <strong>de</strong> Quito.<br />

Reservas y <strong>de</strong>claraciones<br />

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