PYMES MAGAZINE - ENERO 2020

DEPORTE, SALUD Y COMER
Los tres pilares del éxito de tu negocio
Beneficios de tener un entrenador
personal
Entrenar con una persona al lado que
te enseñe, ayude y motive es un enorme
acierto. Contar con un entrenador
personal tiene multitud de ventajas.
En primer lugar te motivará en cada
momento y te ayudará a conseguir
esa energía para practicar ejercicio.
Además, al tener a alguien que te
plantea un plan de trabajo entrenarás
de manera constante al saber que tendrás
que rendirle cuentas a alguien. Es
decir, se acabaron las excusas. Por ello
trabajarás más duro al ser más honesto.
Otra ventaja fundamental es que tendrás
un entrenamiento personalizado
con ejercicios específicos para mejorar
tu cuerpo y mente. De esta manera
irás perfeccionando tu ejercicio,
aumentando tu intensidad de manera
continua y controlada. Normalmente
te preparará actividades que se ajusten
a tus metas y estará pendiente en todo
momento de evitar lesiones. Todo
esto será de manera variada y eficiente,
ya que tendrás a tu lado a un profesional.
Así que no lo dudes, este año
déjate de excusas y cuenta con un
profesional.
Dietas saludables
Llevar a cabo una dieta equilibrada
te ayudará a sentirte mejor y
enfermar menos. Te proponemos
algunos consejos y hábitos que
puedes introducir en tu dieta para
mejorarla. Es fundamental que haya
una variedad notable de alimentos,
que introduzcas en ella verduras y
frutas, que reduzcas las grasas, que
moderes las cantidades y que tomes
mucho líquido. Algunos trucos
en el desayuno por ejemplo son
cambiar la leche entera o semidesnatada
por leche desnatada y el pan
normal cambiarlo por pan integral.
Asimismo debes introducir una
pieza de fruta.
A media mañana y en la merienda
también podrías tomar una pieza
de fruta, un zumo de frutas o un
bol de cereales muesli con fruta.
Los frutos secos también son una
idea genial para comer en esta
franja horaria, te aportarán energía
para continuar el día. Respecto al
almuerzo y la cena tienes infinidad
de opciones pero te aconsejamos
que alternes carne, con verduras, legumbres,
pescado, huevos y cereales.
Especialmente por la noche deberían
ser alimentos más ligeros para
favorecer la digestión.
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