REVISTA AUTOBUSES No.135

“Hago un llamado de participación porque no es nada
más el interés de lo que hacemos como transportistas
si no es el interés del país en el que vivimos”
tinto al que se está gestando en la sociedad,
la tecnología nos afecta en todo, nos
facilita mucho las cosas, pero también
puede aislarnos. Lo que a mi me preocupa
de la cuarta generación es cómo lograr que
entiendan a la sociedad como un espacio
en donde la convivencia y el otro son fundamentales,
no por WhatsApp, esto que
estamos haciendo tú y yo es fundamental.
Hasta la tercera generación hemos estado
en contacto con la realidad, pero la cuarta,
mis nietos (tengo nueve), me inquieta que
pierdan esa sensibilidad. Te voy a contar,
tengo una casa en Xalapa, un día me dije:
los voy a llevar en autobús pues siempre
habían ido en coche y a partir de entonces
no quieren más que ir en autobús. Este
hecho que te estoy comentando es un
indicio de que, si forzas a que se conecten
con la realidad, con las capacidades que
tienen, lo van a hacer muy bien, pero si
no los incitas a esas experiencias, es probable
que nuestra industria la lleven hacia
abajo. Necesitamos focalizarlos a que
éste es un medio de transporte que sirve
al estrato medio bajo de la sociedad y lo
que no quiero que piensen es que como
ya tenemos dinero pues entonces vamos
a dedicarnos a otras cosas que no tengan
que ver con esa parte de la sociedad y la
gran riqueza de México.
Agustín Irurita, un hombre de pensamiento
ágil, estratégico, capaz de generar
confianza a través de su liderazgo, es
también un devorador de libros, amante
de la naturaleza, cuyo destino favorito es
Xalapa, Veracruz. Ha probado los sabores
del mundo y, además, es una persona
como todos los demás que disfruta la fortuna
de tener una familia con valores y
amor por México.
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