el_amor_es_hoy_libro

A los tres días después de haber concluido el paseo, a
Felipe le dio un derrame cerebral, y allí empezó su fase
final, la cual duró 10 días.
Luego de estar un poco delicado, seguíamos jugando
cartas encima de su cama, ya que no le permitan
levantarse. De esa manera veíamos pasar día tras día,
hasta el 22 de septiembre del 2004 que le dio un nuevo
derrame. El médico que lo atendió nos informó que ya no
había nada que hacer, el cerebro estaba completamente
dañado y entraría en coma en cualquier momento.
Al salir el médico, Felipe preguntó: “¿Que dijo el doctor?”.
Le contestamos: “Ya no hay nada por hacer, hijo, es
el momento de partir”. Y, sus últimas palabras fueron:
“Recuerden que el Amor, la unión y la paz con que
hemos vivido este proceso es lo único que nos
ha permitido estar unidos. Vivan mi partida con
el mismo Amor que yo siempre los acompañaré,
siéntanme que ahí permanentemente estaré”.
Trascendió el 23 de septiembre dejando en nuestro
corazón un Amor infinito, un agradecimiento profundo
y un compromiso de entrega, que nos acompañará
en nuestro camino hasta que dure nuestra existencia,
sabiendo que luego nos reencontraremos con él en la
dimensión de la Luz.
Después de su partida, Gigi Moramarco su jefe, quien
durante toda su enfermedad estuvo siempre presente,
no solamente con la ayuda material que necesitábamos,
sino también acompañándonos día a día, nos mostró
muy conmovido un mensaje enviado por Felipe a su
celular pocos días antes de su muerte, en donde le decía
“El mayor regalo que me has dado es tu tiempo,
gracias por ello”
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