Hacer del mundo un lugar mejor - Scientology Volunteer Ministers
Hacer del mundo un lugar mejor - Scientology Volunteer Ministers
Hacer del mundo un lugar mejor - Scientology Volunteer Ministers
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
54<br />
El programa de purificación es el único<br />
en su género en el <strong>m<strong>un</strong>do</strong> realmente efectivo,<br />
como lo confirma <strong>un</strong> doctor en medicina<br />
de la ciudad de Ámsterdam, en<br />
Holanda. Al examinar drogadictos antes,<br />
durante y después <strong>del</strong> programa de purificación,<br />
dijo:<br />
“En mi opinión, el programa de purificación<br />
que desarrolló L. Ronald Hubbard es el<br />
único que ha demostrado ser efectivo en la<br />
práctica. Hablo por experiencia, ya que tuve<br />
contacto con adictos antes de que empezaran<br />
el paso de desintoxicación <strong>del</strong> programa de<br />
purificación. Al hacer los pasos preparatorios<br />
al principio <strong>del</strong> programa, la persona ya ha<br />
cambiado tanto, que a veces creo que me he<br />
equivocado y que no estoy frente a <strong>un</strong> antiguo<br />
adicto a la heroína”.<br />
Reflexiones de <strong>un</strong> padre sobre su hijo,<br />
Robert, a lo largo de <strong>un</strong> período de tiempo<br />
de cuatro años:<br />
“Hace cuatro años, después de entrenarse<br />
en la Infantería de Marina, Robert<br />
llegó a casa muy callado y retraído, sin interés<br />
en el trabajo o el juego; sin el impulso<br />
normal para encontrar su camino en el<br />
<strong>m<strong>un</strong>do</strong>. Parecía empeorar cada semana, muy<br />
indiferente y deprimido; mi candidez me<br />
impidió pensar que las drogas fueran el problema.<br />
“Después de muchas visitas a médicos y<br />
clínicas, los doctores decidieron prescribirle<br />
Ritalin, <strong>un</strong>a droga endiablada, para ‘<strong>mejor</strong>ar<br />
su forma de pensar’. Se supone que esta<br />
droga, que está controlada por el gobierno, le<br />
ayudaría a empezar a ‘pensar de <strong>un</strong>a manera<br />
normal’ y a hacer lo que hacen otras personas<br />
‘normales’.<br />
“Robert se volvió adicto a esta droga<br />
hasta el p<strong>un</strong>to de tomar cientos de píldoras<br />
cada semana. A<strong>un</strong>que la droga estaba supuestamente<br />
restringida, médicos sin escrúpulos se<br />
dedicaban a prescribir el medicamento. Se volvió<br />
<strong>un</strong> drogadicto legal. Teniendo en cuenta mi<br />
situación, lo que hice fue llamar a esos médicos<br />
y amenazarles con acciones legales; pero<br />
Robert simplemente encontraba otro médico<br />
que estaba ansioso por hacer dinero fácil y<br />
conseguía más medicamento.<br />
“Era muy difícil vivir con él y se volvió<br />
tan despreciable que podía robarnos, y mentir,<br />
y amenazar a su madre. Finalmente hice<br />
que lo arrestaran por robo, con el único objetivo<br />
de conseguir que dejara nuestra casa; y<br />
con la esperanza de darle <strong>un</strong> susto para que<br />
viera la realidad. El juez lo dejó salir en<br />
libertad condicional, y Robert continuó<br />
tomando Ritalin.<br />
“Estábamos en <strong>un</strong> p<strong>un</strong>to crítico y considerando<br />
enviarlo a prisión antes de que se<br />
lastimara a sí mismo o lo hiciera yo (Dios no<br />
lo quiera).<br />
“Una mañana, mientras veía la televisión,<br />
vi a dos jóvenes hablando sobre los problemas<br />
de las drogas e insistiendo en que<br />
ayudarían a la persona que llamara por teléfono,<br />
y así lo hice. Después hablé con mi hijo<br />
y acordamos <strong>un</strong>a re<strong>un</strong>ión. Así que Robert fue<br />
a <strong>un</strong> centro en Los Ángeles que usa la tecnología<br />
<strong>del</strong> señor Hubbard. Empezaron a trabajar<br />
con él las veinticuatro horas <strong>del</strong> día para<br />
ayudarle a dejar las drogas.<br />
“Robert empezó a cambiar para bien; ¡y<br />
menudo cambio! Nada de drogas. Venía a<br />
casa los fines de semana y estaba tranquilo,<br />
sosegado y empezaba a hablar con inteligencia<br />
y a actuar con cordura.<br />
“Han pasado cuatro meses, y Robert<br />
<strong>mejor</strong>a cada semana, ya no molesta a su<br />
madre, ya no pide lo imposible ni ‘deforma’<br />
las cosas para poder salirse con la suya.<br />
“Él ha vencido realmente a la droga y va<br />
camino de hacer algo valioso.<br />
“Ahora nuestros amigos y otras personas<br />
nos preg<strong>un</strong>tan cómo hicimos para