EL ESPÍRITU SANTO Y LA REALIDAD Watchman Nee - Centro de ...
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que siempre viene a nuestra mente es: ¿Y si al emitir un juicio, la iglesia se<br />
equivoca? En los versículo que ya mencionamos, el Señor se refirió a la realidad<br />
<strong>de</strong> la iglesia. Cuando el juicio es incorrecto es porque no proce<strong>de</strong> <strong>de</strong> la realidad<br />
y, por supuesto, no viene <strong>de</strong>l Espíritu Santo, sino <strong>de</strong>l hombre. Para el Señor la<br />
iglesia es real y nadie pue<strong>de</strong> cambiar este hecho.<br />
Pablo dijo en sus epístolas que la iglesia es un pueblo llamado y santo, y es la<br />
casa <strong>de</strong> Dios (Ro. 1:7; 1 Co. 1:2; Ef. 2:22). El apóstol Juan reiteró lo dicho por<br />
Pablo. Las siete iglesias <strong>de</strong> Asia tenían muchos <strong>de</strong>fectos; sin embargo, Juan las<br />
llama iglesias. El Señor Jesús también dijo: “Los siete can<strong>de</strong>leros son las siete<br />
iglesias” (Ap. 1:4, 20).<br />
Para los apóstoles, los siete can<strong>de</strong>leros eran siete iglesias. Esto era una realidad.<br />
Para ellos, la iglesia falsa no existía. Esto no significa que no existan iglesias<br />
falsas en el mundo, sino que aquel que no ve la realidad <strong>de</strong> la iglesia, siempre ve<br />
algo malo en ella. Los que tienen una i<strong>de</strong>a superficial <strong>de</strong> la iglesia dicen que sólo<br />
existe la iglesia verda<strong>de</strong>ra; y aquellos que la ven mentalmente, dicen que hay<br />
iglesias falsas y verda<strong>de</strong>ras. Pero para quienes han tocado la realidad espiritual,<br />
la iglesia es espiritual.<br />
Quisiera compartir algo en cuanto a la práctica <strong>de</strong> la vida <strong>de</strong>l Cuerpo. Es<br />
importante que veamos que la vida <strong>de</strong>l Cuerpo no consiste en comportarse<br />
según ciertas reglas, sino que es un asunto <strong>de</strong> realidad espiritual. Cuando<br />
tenemos esta realidad tocamos la iglesia, y como resultado, no actuamos en<br />
forma in<strong>de</strong>pendiente, sino que seguimos el mover <strong>de</strong>l Cuerpo en todo lo que<br />
hacemos. Supongamos que tenemos que hacer algo importante y queremos<br />
practicar la vida <strong>de</strong>l Cuerpo. Esto no significa que <strong>de</strong>bemos llamar a todos los<br />
hermanos a fin <strong>de</strong> discutir el asunto, para luego llegar a un acuerdo y actuar<br />
siguiendo un procedimiento específico y ortodoxo. Pero sí <strong>de</strong>bemos tener<br />
comunión con otros hermanos (sin importar cuántos sean), y tocar la realidad<br />
<strong>de</strong> la vida <strong>de</strong>l Cuerpo. Si no tocamos la realidad espiritual, aunque recibamos la<br />
aprobación unánime <strong>de</strong> toda la congregación, lo que obtendremos será<br />
simplemente opiniones proce<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> la carne. Unicamente los que tocan la<br />
realidad espiritual pue<strong>de</strong>n vivir la vida <strong>de</strong>l Cuerpo. El capítulo 15 <strong>de</strong>l libro <strong>de</strong><br />
Hechos nos muestra lo que es la vida <strong>de</strong>l Cuerpo. Los hermanos se reunieron<br />
para discutir si <strong>de</strong>bían circuncidar a los gentiles, y Jacobo, al final, espresó una<br />
<strong>de</strong>cisión que procedía <strong>de</strong>l Espíritu Santo. En la carta que escribieron <strong>de</strong>cía:<br />
“Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros” (v. 28). Como<br />
po<strong>de</strong>mos ver, la <strong>de</strong>cisión fue <strong>de</strong>l Espíritu Santo. Esto es tocar la realidad<br />
espiritual. Aunque Jacobo fue el que habló, los apóstoles y los ancianos, con<br />
toda la iglesia (v. 22), pudieron <strong>de</strong>cir amén. Esta es la vida <strong>de</strong>l Cuerpo, la cual<br />
po<strong>de</strong>mos expresar cuando en el Espíritu Santo tocamos la realidad. Así que no