Estatutos G.O.E. - Gran Logia Provincial de las Islas Baleares

ESTATUTOS
Y
REGLAMENTOS GENERALES
DEL
GRANDE ORIENTE ESPAÑOL
MÉXICO D. F.
1946.
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De los Masones
LIBRO PRIMERO
DE LOS MASONES Y TALLERES MASÓNICOS
DE LOS MASONES EN GENERAL
TÍTULO PRIMERO
CAPITULO PRIMERO
Articulo 1º— Son masones todos los que hayan visto la luz masónica en
Talleres constituidos con sujeción a uno de los ritos reconocidos por la
Francmasonería universal.
Art.2º— El acto de la iniciación masónica determina la investidura masónica.
Art.3º— Pierde la investidura masónica todo el que sea legalmente
despojado de su cualidad de masón.
Art.4º— Los masones se clasifican en regulares e irregulares.
MASONES REGULARES
CAPITULO SEGUNDO
Art.5º— Son masones regulares:
Primero. — Los que pertenecen o han pertenecido a una Logia del Grande
Oriente Español.
Segundo.— Los que han pertenecido a una Logia del Gran Oriente Nacional
de España o del Gran Oriente de España, antes del 25 de Mayo de 1889, en cuya
fecha dichos Orientes quedaron regularmente extinguidos para la Constitución
legal del Grande Oriente Español.
Tercero.— Los que pertenezcan o hayan pertenecido a una Potencia
masónica regular extranjera reconocida por el Grande Oriente Español o la Gran
Logia Española.
Art. 6º— El masón regular ha de tener en su poder el titulo o diploma del
grado que posea.
Art. 7º.— El masón regular puede ser de dos clases: activo y en Sueños.
Art. 8º— Es masón regular activo el afiliado en un Taller regular.
Art. 9º — Para ejercer cualquier cargo o dignidad en un Taller, excepto el de
Venerable, es indispensable ser miembro activo del Oriente en una Logia
Simbólica con tres meses, por lo menos, de actividad en la misma.
Art. 10º— Es masón regular en sueños el que procede de un Taller regular y
posee título o diploma de su grado y la correspondiente plancha de quite, siempre
que desde la expedición de ésta no haya trabajado en un Taller irregular.
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MASONES IRREGULARES
CAPITULO TERCERO
Art. 11.—Son masones irregulares:
Primero.— Los iniciados en Logias no regulares.
Segundo.— Los afiliados en cualquier Taller irreguIar.
Tercero.— Los promovidos a cualquier grado en Talleres irregulares.
Cuarto.— Los que sin previa autorización legal hayan iniciado o conferido
grados masónicos.
Quinto.—Los que sean declarados tales, en virtud de sentencia, por
cualquier Tribunal masónico.
Sexto.—Los iniciados o afiliados en Talleres de Orientes extranjeros no
reconocidos por el Grande Oriente Español.
CAPITULO CUARTO
MODO DE OBTENER LA REGULARIDAD
Art. 12.—Todo profano irregularmente iniciado, o todo masón irregular,
puede obtener la regularidad en cualquier Taller Simbólico previa la formación de
expediente en que conste:
Primero.. Solicitud de regularización en plancha oficial suscrita por el
interesado, apoyada y firmada por tres Maestros del Taller en que la solicite.
Segundo. Declaración escrita de su nombre, apellido paterno y materno,
fecha de su nacimiento, naturaleza, estado civil, profesión u ocupación residencia
habitual y domicilio.
Tercero.- Declaración, también escrita, de su nombre simbólico, si lo tuviere,
fecha, lugar y Taller en que fue exaltado al grado que ostente, acompañando los
documentos justificativos.
Cuarto.- Promesa escrita y formal de renunciar a todas las ventajas, grados y
cargos que le hubieren conferido en el Taller u Oriente irregular de procedencia y
de aceptar la Constitución los Estatutos, Reglamentos, leyes y Decretos del
Grande Oriente Español.
Art. 13.— Los masones irregulares a que se contraen los casos 1º, 2º, 3º y 6º
del articulo 11 que ostenten grado simbólico, pueden obtener la regularidad en las
Logias, reconociéndoles el grado que plenamente justifiquen poseer, siempre que
se hallen en las condiciones exigidas por estos Estatutos y Reglamentos.
Art. 14.—Los masones irregulares comprendidos en los casos 1º, 2º, 3º y 6º
del articulo 11 que ostenten grados superiores al de Maestro masón (grado 3º) sólo
podrán adquirir la regularización en los tres primeros grados ante una Logia.
El reconocimiento y regularización de los grados superiores al 3º únicamente
puede hacerlo el Supremo Consejo del grado 33.
Art. 15.—Todo masón regularizado en el grado que se le reconozca, pierde
la antigüedad en él, para los efectos del ascenso, considerándosele como
exaltado a dicho grado en la fecha en que se efectúe su regularización. Este dato
se hará constar en el Titulo o diploma que se le expida.
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Art. 16.— Al masón irregular que antes hubiera pertenecido al Grande
Oriente Español, solo se le reconocerá el grado que justificare poseer con la
presentación del título o diploma expedido por este Grande Oriente.
Art. 17.— Los masones irregulares a que se refiere el caso 4º del artículo 11,
sólo podrán ser regularizados admitiéndolos como Aprendices.
Art. 18.— Los comprendidos en el caso 5º del artículo 11, solo pueden
recobrar la regularidad:
Primero.— Por extinción de la condena, si el carácter de ella lo permite.
Segundo.— Por indulto.
Tercero.— Por amnistía.
Art. 19.—En cualquiera de los casos, la regularización solo puede hacerse a
petición del interesado y previa la formación del oportuno expediente.
CAPITULO QUINTO
CUALIDADES, DEBERES Y DERECHOS DE LOS MASONES
Art. 20.—Es perfecto francmasón, miembro activo del Grande Oriente
Español, todo el que se halle afiliado en un Taller de la Federación, poseyendo
diploma o titulo de su grado.
Art. 21.—Para ser admitido a la iniciación o como miembro activo en un
Taller, es indispensable estar domiciliado o ser residente en cualquiera de las
poblaciones del territorio jurisdiccional del Grande Oriente.
Si en la población donde esté domiciliado o resida el solicitante existiera
Logia o Triángulo, a ellos preferentemente deberá acudir el interesado.
Caso de que no lo haga y se dirija a Taller radicado en localidad distinta a su
residencia, se precisará autorización del organismo inmediato superior para
proceder a la iniciación, afiliación o regularización.
Art. 22.—Los masones de un Taller pueden ser de tres categorías:
Primero.—HH∴afiliados u obreros activos del mismo.
Segundo.—Obreros honorarios.
Tercero.- Lowetones o menores adoptados por los Talleres Simbólicos.
Art. 23.— Son deberes de los obreros masones:
Primero.- Cumplir exactamente la Constitución, los acuerdos de las
Asambleas Nacionales, las de sus Asambleas Regionales y los Reglamentos,
leyes, decretos y disposiciones del Grande Oriente Español.
Segundo.—Reconocer como h∴ a todo legitimo francmasón.
Tercero.—Defender al h∴, aún con peligro de la vida, de todo atentado o
injusticia.
Cuarto.— Amparar, proteger y socorrer al h∴ necesitado, así como a su
viuda y huérfanos, concurriendo y cooperando además con su persona, facultades
e influencias a cuanto constituya bien para la Humanidad.
Quinto.— Someterse a los acuerdos de su Taller, aunque éste los hubiera
tomado en su ausencia.
Sexto.— Guardar el secreto masónico y el más absoluto silencio sobre los
trabajos.
Séptimo.— Concurrir asiduamente a las tenidas masónicas.
Octavo.—Cumplir los mandatos de su Taller y los que en representación del
mismo les confiera el Presidente o quien le sustituya.
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Noveno.—Desempeñar con celo los cargos y comisiones que se le confíen.
Décimo.—Satisfacer con puntualidad las cuotas, impuestos y derechos
legalmente establecidos, pudiendo ser eximido temporalmente de estas
obligaciones si por razón de su situación económica, y a juicio del Venerable
Maestro del Taller, así se dispusiera.
Decimoprimero.— Ser tolerante con las opiniones de sus hh∴, empleando en
toda discusión o escrito la mesura, templanza y buenas formas, propias de la más
correcta educación y de hombres que mutuamente se aman y respetan.
Decimosegundo.—Contribuir al fondo de Beneficencia en la forma y manera
establecidas por la Orden.
Decimotercero.—Abstenerse de odios y rivalidades, aún contra profanos,
rechazando en absoluto el duelo, que desde luego queda terminantemente
prohibido.
Decimocuarto.—Ajustar su conducta a la más estricta moralidad, tanto en el
mundo masónico, como en el profano.
Decimoquinto.- Respetar las fórmulas, ceremonias y exigencias del Rito
adoptado.
Decimosexto.—Llevar siempre al mundo profano en toda ocasión los
principios de equidad y justicia del espíritu masónico.
Art. 24.—Son derechos de los obreros masones:
Primero.— La igualdad absoluta ante la ley masónica.
Segundo.— La justa protección, defensa, socorro y amparo de los demás.
Tercero.— La Petición y proposición ante su Taller.
Cuarto.— Ser elector en todos los casos y elegible según los grados y con
arreglo a lo consignado en estos Estatutos y Reglamentos Generales.
Quinto.—Emitir y defender con absoluta libertad toda opinión que se juzgue
útil al bien general de la Orden o del Taller en particular.
Sexto.—Pedir que una votación sea pública o secreta, según los casos y lo
que determinen las leyes, Estatutos y Reglamentos.
Séptimo.—Emitir su opinión y voto en la Cámara a que asista como visitador,
en todos los asuntos que no se relacionen con el Tesoro ni con la vida interior del
taller.
Octavo.— Aspirar el aumento de grado, siempre dentro de las condiciones
señaladas por la ley y por el Rito.
Noveno.—Ser juzgado por su propio Taller; con apelación ante el Cuerpo a
quien corresponda.
Décimo.—Tener a cubierto su honra y reputación por parte de los HH∴,
quienes la defenderán en el mundo profano, sin perjuicio de lo que hubiera lugar
dentro de la Institución.
Decimoprimero.—Obtener el certificado de retiro (plancha de quite) y también
el de cualquier hecho o acta legítimo que le conviniera acreditar.
El derecho de obtener la plancha de quite solo se reconoce cuando se han
cumplido todos los deberes.
Art. 25.— Son obreros honorarios de un Taller los masones nombrados por el
mismo con este carácter.
Art. 26.— Los honorarios gozan del derecho de asistir a todos los trabajos
del Taller de que lo fuesen, en las Cámaras a que correspondan por su grado.
Tiene voz y voto en todos los asuntos, excepto en aquellos que se refieran a
la parte económica del Taller.
No votan, sin embargo, en las elecciones ni pueden ejercer cargo alguno.
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Gozan asimismo de todos los demás derechos y están sujetos a todos los
deberes de la fraternidad en general.
Están exentos de cotización:
Art. 27.—Son Lowetones, los hijos menores de edad de los masones activos
u honorarios de un Taller, que para este efecto fuesen presentados al mismo por
sus padres o tutores.
Por la adopción adquiere el adoptado el derecho de que el Taller adoptante
vele por él, le proteja, le guíe en su buena fortuna y le ayude en sus días de
desgracia, si a ello se hace merecedor por su conducta.
A los 18 años tiene el derecho de solicitar el grado de Aprendiz gratuitamente
en su Taller adoptante, previo los requisitos, reglas y condiciones expresados en
estos Estatutos.
Asisten a los trabajos cuando lo determina el Taller, conforme a las
prescripciones que rigen a la adopción.
Art. 28.— Todo masón del Grande Oriente Español, ha de ser
necesariamente miembro activo de una Logia Simbólica (Constitución, artículo 18).
Art. 29.—Para gozar de los derechos de francmasón es necesario haber sido
reconocido y proclamado como tal por un Taller regular de la Federación, después
de prometer solemnemente ser fiel al honor, a su patria, a las leyes generales del
país y a las peculiares de la Institución y del Grande Oriente.
Art.30.— Nadie, bajo pretexto alguno, puede ser obrero activo de dos o más
Talleres dentro del Grande Oriente Español. Sin perjuicio de ello los Diputados
Grandes Maestres de las Grandes Logias regionales pueden autorizar a hh∴ de
su Jurisdicción para que en comisión, previo decreto motivado, integren cualquiera
de los Talleres que la jurisdicción sin perder la afiliación de origen.
Art. 31.— El masón que haya sido expulsado de su Taller por causa de delito
o falta masónica, y que fuese indultado de su pena, no podrá volver al seno de
aquel, sino en el caso de que así lo acordase la mayoría.
Art. 32.—El penado por delito común en los Tribunales de Justicia de
cualquier país, y que por esta causa haya sido separado de la Orden, en ningún
caso, ni por ningún concepto, puede ser miembro activo del Grande Oriente
Español.
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DE LOS TALLERES EN GENERAL
TÍTULO SEGUNDO
De los Talleres
CAPITULO PRIMERO
Art. 33.— Reciben el nombre de Talleres masónicos los diferentes grupos
masones que, reuniendo las condiciones previstas en la Constitución y en estos
Estatutos y Reglamentos, tiene por objeto el ejercicio y práctica de las doctrinas de
la Orden.
Art. 34.— Los Talleres se clasifican en Logias y Triángulos, según estén
constituidos.
Art. 35.— Las Logias dependen de las Grandes Logias Regionales o
directamente del Gran Consejo Federal Simbólico, según el lugar donde radiquen,
de acuerdo con la división territorial promulgada en la Constitución.
Art. 36.— Un Taller se halla legalmente constituido cuando está autorizado
para el trabajo y posee la correspondiente Carta Constitutiva.
Art. 37.— El número de los Talleres de la Federación del Grande Oriente
Español no puede ser limitado.
Art. 38. — Sólo pueden disolverse los Talleres:
Primero.— Por sentencia del Tribunal Masónico competente.
Segundo.— Por devolución voluntaria a! correspondiente Poder ejecutivo de
la Carta Constitutiva, sellos, libros oficiales y archivo, siempre y cuando
cumplieren todas sus obligaciones con el Gran Tesoro de la Regional o del Gran
Consejo, según los casos y no haya siete miembros activos del Taller que se
opusieren a ello.
Tercero.— Por separación de la jurisdicción del Grande Oriente Español sin
cumplir los requisitos legales.
Cuarto.— Por acuerdo de la Asamblea general.
Quinto.— Pueden ser suspendidos, pero no disueltos, por decreto del poder
Ejecutivo correspondiente como medida de buen gobierno, si la desorganización
del Taller o su actividad así lo exigiese dando cuenta en su día a la asamblea
general.
CAPITULO SEGUNDO
DISPOSICIONES COMUNES A TODOS LOS TALLERES
Art. 39.— Ningún Taller que forme parte del Grande Oriente Español podrá
estar a la vez bajo la obediencia de otra Potencia Masónica.
Art. 40.— Los Talleres escogen un título distintivo, y procurarán que no sea
igual al adoptado por otro anteriormente.
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Art. 41.—El título distintivo de un Taller no debe contener alusión alguna a
idea política o religiosa determinada.
Art. 42.— Ningún Taller podrá ejercer supremacía sobre otro, cualquiera que
sea su número en la Federación.
Art. 43.— Ningún Taller podrá conferir exaltación a un grado superior al 3º.
Art. 44.—.Los Talleres, dentro de las facultades de su jerarquía masónica,
sólo conferirán grados a los masones que, además de poseer la instrucción del
grado que ostente, sobresalgan por su capacidad, celo o servicios prestados a la
Orden o a la Humanidad, y hayan cumplido el tiempo reglamentado.
Art. 45.—Todos los Talleres Simbólicos (Logias) se entienden directamente
con las Grandes Logias Regionales o con el Gran Consejo Federal Simbólico,
según dependan directamente de unas o de otro.
Art. 46.— Los Triángulos se entenderán con el organismo que les haya
facilitado el permiso para los trabajos.
Art. 47.— Todo Taller debe remitir a la Gran Secretaria general de su Gran
Logia o del Gran Consejo Federal Simbólico tres ejemplares del Reglamento que
haya adoptado para su régimen interior, firmados, foliados y con certificados al pie
de los folios que contengan, autorizados con las firmas y rúbricas de las tres Luces
del Taller, del Orador y del Secretario.
Dicho Reglamento no podrá contener disposición alguna que contravenga, ni
siquiera indirectamente, lo establecido en la Constitución, o en estos Estatutos y
Reglamentos generales y en las Leyes y Decretos del Grande Oriente.
Art. 48.— Todos los Talleres harán constar en sus Reglamentos interiores
que en caso de disolución, los documentos archivos, libros, sellos y efectos
puramente masónicos, se entregarán al Grande Oriente Español.
Igualmente harán constar, para el caso de disolución cuál ha de ser el
destino de fondos, si existieran en el Tesoro o en la Beneficencia del Taller,
después de pagadas todas las obligaciones de ambos.
Si el Taller por si renunciase a fijar lo consignado en el párrafo anterior,
entonces hará constar en su Reglamento interior que, si existieran fondos en el
Tesoro o en la Beneficencia del Taller, después de pagadas todas las obligaciones
de ambos, se remitirán a la Gran Logia Regional o al Gran Consejo Federal
Simbólico, para que los ingresen en sus cajas de Beneficencia
Art. 49.— Aprobado que sea por el Poder ejecutivo correspondiente el
Reglamento interior en un Taller, se devolverá a éste uno de los ejemplares con la
autorización que le corresponda.
Art. 50.— Hasta que se reciba en el Taller el ejemplar aprobado, el
Reglamento interior no es obligatorio para los obreros del mismo.
Art. 51.— Cuando un Taller juzgue necesario reformar las disposiciones de
su Reglamento interior, someterá las nuevas a iguales formalidades que el
Reglamento mismo.
Art. 52.— Todo Taller tendrá un libro de actas o de Arquitectura para cada
una de las Cámaras en que trabaje. Estos libros se hallarán foliados y con
certificación al principio de ellos, de la Cámara a que se dedican, del número de
sus folios y de las fechas en que empiezan a utilizarse, autorizada dicha
certificación por las firmas y rúbricas del Presidente del Orador y del Secretario, y
con los sellos correspondientes.
En el acto de la instalación de un Taller, los comisionados al efecto por la
Gran Logia o por el Gran Consejo Federal Simbólico autorizarán los libros de
actas con el Visto Bueno que suscribirán al pie de la certificación referida.
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A estos libros deben trasladarse exactamente todas las actas del Taller.
Art. 53.— Cada Taller debe tener, además, los libros registros siguientes:
Primero.— Los libros de contabilidad necesarios a los efectos del articulo 60
de la Constitución
Segundo.- Un libro de Oro.
Tercero.- Un libro Negro.
Cuarto.- Un registro de los miembros activos, con expresión de los nombres
profanos, nombres simbólicos, edad profana, grado, profesión, domicilio o
residencia y las observaciones oportunas.
Quinto.— Un registro de altas y bajas, expresando la afiliación de los
inscritos y las fechas en que aquellas se efectuaren.
Sexto.— Un registro de rechazados, con la mayor suma de datos.
Séptimo.— Un registro de Miembros de Honor.
Octavo.— Un registro de Garantes de Amistad.
Noveno.- Un libro de presencia, donde estamparán su firma y las
indicaciones necesarias los asistentes a trabajos.
Décimo.— Un registro de Títulos o Diplomas particulares que posea el Taller
o cualquiera de los miembro. que lo Constituyan.
Los registros pueden incluirse en uno o en varios tomos.
Art. 54.— En todos los Talleres la contabilidad del tronco de Beneficencia
será independiente de la del Tesoro.
Art. 55.—. Un Taller se considera bajo la obediencia del Grande Oriente
Español desde la fecha en que se halle expedida su Carta Constitutiva.
Art. 56.— La correspondencia regular de los Talleres con las Grandes Logias
Regionales o con el Gran Consejo Federal Simbólico no empieza hasta después
de constituidos legalmente aquellos bajo la Federación del Grande Oriente.
Art. 57.— El Taller a quien se extravíe, inutilice o tenga que reformar su Carta
Constitutiva, deberá solicitar del Cuerpo a que corresponda la inmediata expedición
de la nueva, acompañando a la solicitud los derechos consignados en la Ley
de tributación vigente.
Los documentos expedidos por este concepto llevarán expreso por el Cuerpo
respectivo la razón que lo determina.
Art. 58.— Todos los diplomas, leyes rituales, cartillas periódicos oficiales del
Grande Oriente serán facilitados a los Talleres por conducto reglamentario.
Art. 59.— Queda terminantemente prohibida la publicación o reimpresión de
los documentos y libros a que se refiere el artículo anterior, bajo las penas que
establece la ley profana de propiedad literaria y las que señalan las leyes
masónicas.
Art. 60.— Los masones y Talleres del Grande Oriente Español deberán
encabezar los documentos con la advocación “A la Gloria del Gran Arquitecto del
Universo”, expresada con todos sus vocablos o con las iniciales de cada uno.
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TÍTULO TERCERO
De las Grandes Logias Regionales
CAPITULO PRIMERO
SUS ATRIBUCIONES Y FUNCIONAMIENTO
Art. 61.—Las Grandes Logias Regionales ejercen con plena autoridad en el
territorio de su jurisdicción, las funciones que les están categóricamente señaladas
en la Constitución del Grande Oriente Español.
Art. 62.—Cada Gran Logia está constituida por representaciones de todas las
Logias y Triángulos regulares del Rito Escocés Antiguo y Aceptado,
pertenecientes al Grande Oriente Español, dentro del territorio que les esté
asignado, y es la autoridad superior para el Simbolismo en dicho territorio.
Art. 63.— En el orden legislativo, la Gran Logia puede adoptar toda clase de
resoluciones, siempre que no vayan contra la Constitución y los Estatutos y
Reglamentos generales del Grande Oriente.
La Gran Logia, en el orden ejecutivo, concede Cartas Constitutivas para
establecer Logias regulares dentro de su jurisdicción, y tiene facultades para
suspenderlas o revocarlas.
Expide diplomas de loe grados hasta el 3º, dentro de su territorio.
Organiza y sostiene, como su primer deber, la propaganda masónica,
pudiendo, nombrar comisionados para la fundación de Logias y Triángulos en las
localidades donde no existen, invistiéndolos de las facultades que tienen los
Triángulos para iniciar, afiliar, regularizar y exaltar.
En el orden judicial y en primera instancia resuelve las diferencias que surjan
entre las diferentes Logias y mantiene la disciplina sobre los Talleres del territorio.
En primera instancia, también, procesa y condena a los Talleres de su jurisdicción.
El procesamiento se hará en la persona del Venerable Maestro del Taller.
En segunda instancias resuelve cuantas apelaciones puedan formular los
miembros de las Logias contra las decisiones de éstas.
La Gran Logia puede estatuir libremente sobre sus recursos económicos.
Art. 64.— La Gran Logia puede corregir, suspender o separar a los miembros
de ella cuando con palabras, con sus actos y con sus votos agravien al Supremo
Consejo del grado 33 del Rito Escocés Antiguo y Aceptado o al Gran Consejo
Federal Simbólico. Puede hacerlo asimismo si alguno de sus miembros viola la
Constitución o los Estatutos y Reglamentos generales del Grande Oriente, o las
leyes y tradiciones de la Francmasonería; cuando no acate a las autoridades
superiores, o cuando por incapacidad física o mental, o por no seguir rectamente
los fines de la Institución, no sean convenientes a la Orden.
Para la validez de estos acuerdos será preciso dar audiencia, escrita u oral,
al interesado, y que la mayoría alcance a las dos terceras partes.
La Gran Logia puede Suspender también a cualquiera Francmasón de las
logias de su jurisdicción por iguales motivos y previas las mismas formalidades.
Puede asimismo procesar o condenar a cualquier masón durmiente o dado de
baja que haya pertenecido a uno de sus Talleres, en el caso de que resulte
culpable de la comisión de cualquier delito de los señalados en estos reglamentos
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Art. 65.— La Gran Logia en la Gran Asamblea general anual deberá
examinar la Memoria que presente el Gran Secretario sobre los resultados del
ejercicio que termina; las cuentas que asimismo presentará el Gran Tesorero de
este ejercicio y las proposiciones que remita cada una de las Logias de su
jurisdicción. Discutirá también el Mensaje del Diputado Gran Maestre y resolverá
darle contestación y votar ésta, y ]as directivas del año que va a comenzar.
Art. 66.— De las extralimitaciones que corneta una Gran Logia, en cuanto a
sus facultades, puede recurrirse en queja al Gran Consejo Federal Simbólico,
quien podrá ejercer las facultades disciplinarias de censura o suspensión de la
Gran Logia dando cuenta a la Asamblea General del Grande Oriente.
CAPÍTULO SEGUNDO
DEL PERSONAL QUE CONSTITUYEN LAS GRANDES LOGIAS
Art. 67.—Las luces y dignidades que constituyen cada Gran Logia son las
siguientes:
Un DIPUTADO GRAN MAESTRE.
Un GRAN PRIMER VIGILANTE.
Un GRAN SEGUNDO VIGILANTE.
Un GRAN ORADOR.
Un GRAN TESORERO.
Un GRAN SECRETARIO.
Un GRAN EXPERTO.
Un GRAN LIMOSNERO.
Un GRAN MAESTRO DE CEREMONIAS.
Un GRAN ARQUITECTO REVISOR.
Un GRAN GUARDA TEMPLO.
Y los VOCALES que cada Gran Logia estime oportuno.
Estos cargos durarán el tiempo que las Grandes Logias determinen.
Serán elegidos de acuerdo con lo que disponga el estatuto interior de cada
Gran Logia, excepción hecha del Diputado Gran Maestre que se elegirá por
sufragio universal, interviniendo en la elección que se verificará en cámara de
aprendiz, todos los Talleres y Triángulos adscritos a la Gran Logia.
Art. 68.— Los representantes de los Talleres en las Grandes Logias
Regionales solo podrán ser juzgados por sus Talleres cuando los delitos que
cometan se haya ejecutado dentro de los mismos. En todos los demás casos, y
por los actos que realicen durante el tiempo de su mandato, serán juzgados por
las Grandes Logias.
Art. 69.— El Diputado Gran Maestre será sustituido por el Gran Primer
Vigilante, por el Gran Segundo Vigilante, y a falta de estos por el Maestro más
antiguo de entre los presentes.
El Diputado Gran Maestre designará a los que hayan de sustituir
interinamente a los restantes cargos en caso de ausencia o imposibilidad.
Todos los cargos de la Gran Logia son reelegibles.
Art. 70.— La Gran Logia celebrará sesiones mensualmente, por lo menos.
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CAPITULO TERCERO
FACULTADES DEL GRAN MAESTRE
Art. 71.— Preside las reuniones de la Gran Logia y es, en ella, la suprema
autoridad para mantener el orden en las discusiones, ejerciendo las facultades
disciplinarias que la Constitución del Grande Oriente y estos Estatutos y
Reglamentos le conceden.
Sus acuerdos serán siempre obedecidos, y contra ellos sólo cabe el recurso
de queja ante la Asamblea anual de la Gran Logia y, en apelación, ante la Gran
Asamblea Nacional.
Asume el Poder ejecutivo y judicial cuando la Gran Logia no se halla reunida,
pudiendo resolver todas las cuestiones con las mismas facultades que ésta a titulo
provisional, y conceder licencias provisionales para constituir nuevas Logias.
De todas sus resoluciones dará cuenta en la primera sesión que se celebre
en la Gran Logia, para que sean definitivamente ratificadas o desaprobadas.
Tiene siempre general poder de intervención, instrucción y administración
para el buen régimen de la Gran Logia.
Art. 72.— Como facultades propias permanentes, el Diputado Gran Maestre
tiene:
La de convocar y presidir cualquiera de las Logias de la jurisdicción de la
Gran Logia.
La de dispensar de las formalidades de la iniciación, mediante el
consentimiento o a solicitud de la Logia en que haya de realizarse, o en lugares
donde no existan Talleres para constituirlos.
La de conferir los grados 2º y 3º a los Aprendices que, por sus méritos
excepcionales, fueran merecedores de esta distinción.
La de conceder dispensas, a petición de los Talleres, del tiempo necesario
para pasar del grado 1º al 2º y de éste al 3º.
La de proponer la suspensión de la Carta Constitutiva de cualquier Logia, o
la de un Venerable Maestro de cualquier Taller, convocando una reunión de la
Gran Logia.
La de resolver las apelaciones de los obreros contra las resoluciones del
Venerables Maestro de una Logia.
La de convocar la Gran Logia, con carácter extraordinario.
DEBERES DEL DIPUTADO GRAN MAESTRE
Art. 73.— Son deberes del Diputado Gran Maestre:
Presentar en la Gran Asamblea anual un Mensaje recomendando aquellas
medidas que juzgue necesarias para la buena marcha del organismo.
Instalar Logias cuya Carta Constitutiva haya sido concedida por la Gran
Logia, por sí o por medio de representantes, conforme a los antiguos usos y ritos.
La de Ejercer una general y cuidadosa intervención sobre la Gran Logia y velar
porque sean cumplidas las leyes fundamentales reglamentos y tradiciones de la
Masonería. De igual manera en todas las Logias.
Realizar todos los actos necesarios para el cumplimiento de las funciones de
la Gran Logia, cuando ésta no esté reunida, y dar conocimiento en la primera
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eunión de ella de los acuerdos que haya provisionalmente adoptado en el
ejercicio de esta facultad.
Art. 74.— El Diputado Gran Maestre puede nombrar inspectores para visitar
las Logias de su jurisdicción, cuando lo juzgue conveniente, con la misión de
comprobar la marcha de los trabajos, de los libros y de todos los asuntos de ella y
de informar a la Gran Logia para que juzgue lo que sea necesario.
Art. 75.— El Diputado Gran Maestre en el ejercicio de sus facultades podrá
recabar del Gran Orador su dictamen inmediato para intervenir, con carácter
ejecutivo, en aquellos asuntos que las circunstancias de premura así lo
determinen.
Art. 76.— El Diputado Gran Maestre es responsable ante la Gran Logia.
Puede ser suspenso en sus atribuciones, a petición escrita de once de los
miembros que constituyen la Gran Logia, o por acuerdo de una de sus Asambleas
anuales.
Llegado que sea este caso se pasarán todas las diligencias al pleno del Gran
Consejo Federal Simbólico para que resuelva el asunto en definitiva.
CAPITULO CUARTO
DEL GRAN SECRETARIO
Art. 77.— Llevará los libros, redactará las actas y tendrá a su cargo todos los
documentos y el sello de la Gran Logia.
Sus libros y papeles podrán ser inspeccionados por el Diputado Gran
Maestre de la Gran Logia.
En cada reunión de la Gran Logia dará cuenta de los asuntos pendientes
desde la última sesión.
En Gran Secretario tendrá la custodia de todo lo que es propiedad de la Gran
Logia.
El Gran Secretario percibirá por sus servicios y gastos que se ocasionen, la
compensación que fije la Gran Logia y, en su representación, el Diputado Gran
Maestre, y podrá tener los empleados que juzgue necesarios.
DEL GRAN TESORERO
Art. 78.- Recibirá en depósito todos los fondos recaudados por la Gran
Logia, y presentará a la misma cuenta semestral de ingresos y gastos.
Tendrá la obligación de sujetarse a las reglas de contabilidad que la Gran
Logia determine.
DEL GRAN ARQUITECTO REVISOR
Art. 79.—Ejercerá función fiscalizadora y de intervención en los gastos de la
Gran Logia.
DE LOS DEMÁS CARGOS
Art. 80.—Las obligaciones y derechos inherentes a los cargos de Gran
Primer Vigilante, Gran Segundo Vigilante, Gran Orador, Gran Experto, Gran
Limosnero, Gran Maestro de Ceremonias y Gran Guarda Templo son, dentro de la
Gran Logia, las que se atribuyen a estos mismo cargos en las Logias Simbólicas.
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TITULO CUARTO
Del Personal de las Logias y Triángulos
CAPITULO PRIMERO
DEL ASUNTO EN GENERAL
Art. 81.—Todos los Talleres serán dirigidos por sus Dignidades y Oficiales,
nombrados en escrutinio individual y por mayoría absoluta de votos.
Sus funciones duran un año y son reelegibles indefinidamente, menos el
Venerable Maestro que sólo puede serlo por el espacio de otro año.
Para que un mismo H∴ vuelva a ser elegido Presidente del Taller necesita
que transcurra un espacio de tiempo igual a aquel en que hubiere ocupado el
cargo.
Art. 82.— Para facilitar, preparar y verificar trabajos los Talleres Simbólicos,
designarán comisiones permanentes y especiales. Las primeras tienen carácter
obligatorio y serán nombradas en escrutinio individual por mayoría absoluta de
votos.
Sus funciones duran un año.
CAPITULO SEGUNDO
DIGNIDADES Y OFICIALES DE LA LOGIA
Art. 83.— Las Dignidades y Oficiales de una Logia Simbólica serán los
siguientes:
(El orden de colocación que vamos a mencionar se refiere a las Logias Simbólicas que
trabajan en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, siendo diferente en otros Ritos, para lo cual se
pueden consultar los respectivos rituales).
Primero.— Un Venerable Maestro; se coloca a Oriente.
Segundo.— Un Primer Vigilante, que dirige la Columna del Mediodía (J.); se
coloca al pie de su columna.
Tercero.— Un Segundo Vigilante, que dirige la Columna Norte (B.); se coloca
al pie de la misma.
Cuarto.— Un Orador; se coloca a Oriente, a la izquierda del Venerable
Maestro.
Quinto.— Un Secretario Guarda-sellos; se coloca a Oriente, a la derecha del
Venerable Maestro.
Sexta.— Un Tesorero; se coloca a la izquierda del Orador y a la cabeza de la
Columna Sur.
Séptimo.— Un Primer Experto; se coloca en un asiento delante del Tesorero.
Octavo.— Un Segundo Experto; se coloca a la derecha del Primer Vigilante.
Noveno.— Un Limosnero u Hospitalario; se coloca a la derecha del
Secretario y a la cabeza de la Columna Norte.
Décimo.—Un Maestro de Ceremonias; se coloca enfrente del Primer Experto,
delante del Limosnero.
Decimoprimero.- Un Arquitecto Revisor.
Decimosegundo.- Un Maestro de Banquetes.
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Decimotercero.- Un Archivero Bibliotecario.
Decimocuarto.- Un Arquitecto del Templo (Ecónomo).
Decimoquinto.— Un Porta Estandarte.
Decimosexto.— Un Heraldo.
Decimoséptimo.— Un Guarda Templo interno, cuyo puesto se halla en la
parte interior del Templo y cerca de la puerta.
Decimoctavo.— Un Guarda Templo externo, que ha de hallarse fuera del
Templo y en las inmediaciones de la puerta del mismo.
Decimonoveno.— Tres hh∴ Diáconos, clasificados por orden.
Los cargos del Venerable Maestro y Primero y Segundo Vigilante reciben el
nombre genérico de Dignidades, y también se llaman las tres Luces de la Logia.
Son Oficiales de primera clase el Orador, el Secretario, el Tesorero y el Primer
Experto. Son Oficiales de segunda clase los restantes
Art. 84.— En caso de absoluta necesidad pueden refundirse todos las cargos
en los siete primero expresados por orden en el articulo anterior.
Art. 85.— Todos los cargos serán desempeñados por hh∴ en posesión del
grado de Maestro, excepto los de Porta-Estandarte, Heraldo y Diácono, que
pueden ejercerlo Compañeros y Aprendices.
Art. 86.— Únicamente cuando el número de Maestros Masones de una Logia
no sea suficiente para cubrir los cargos, podrán ejercerlos Compañeros y
Aprendices; pero los desempeñarán Maestros inmediatamente que los haya entre
los miembros activos del Taller.
Los tres cargos de Venerable Maestro y de Primero y Segundo Vigilantes
siempre serán ejercidos por Maestros Masones.
Art. 87.— El Orador, el Secretario, el Maestro de Ceremonias, el Hospitalario
y el Maestro de Banquetes podrán tener adjuntos, los cuales ayudan a los
titulares, y cuando los sustituyen tienen los mismos deberes y gozan de los
mismos derechos y prerrogativas que aquéllos.
Lo propio sucede con todo h∴ a quien se designe para ocupar, momentánea
o accidentalmente un puesto cualquiera en ausencia del titular.
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TITULO QUINTO
Deberes y Atribuciones de las Dignidades y Oficiales de las Logias
CAPITULO PRIMERO
DEL PRESIDENTE
Art. 88 —El Presidente, o el que legalmente le sustituya, dirige los trabajos
del Taller y es el encargado de convocarlo, así para las sesiones ordinarias como
para las extraordinarias.
Es también Presidente nato de todas las Comisiones.
Representa al Taller en todos los casos en que éste no nombra
representante especial.
Su persona es inviolable en el ejercicio de sus funciones. A nadie es licito
censurarle sin caer en falta. Sólo está permitido dirigirle observaciones.
En caso de empate en las votaciones, su voto es decisivo.
Art. 89.—Son deberes del Presidente:
Primero.—Guardar, cumplir, y hacer cumplir y aguardar a todos los obreros
de su Taller, la Constitución, los Estatutos y Reglamentos generales del Grande
Oriente Español, las leyes y decretos de su organismo superior y el Reglamento
interior de su Logia.
Segundo.- Velar escrupulosamente por la regularidad de los trabajos y por el
Prestigio de la Orden.
Tercero.- Conservar en su Poder, en calidad de depósito, la Carta
Constitutiva, con la obligación de devolverla al Cuerpo correspondiente, o
entregarla a su sucesor, previa la promesa de éste de conservarla en igual calidad
y en las mismas condiciones.
Cuarto.- Cuidar de la Prosperidad del Taller y garantizar el disfrute de sus
derechos a todos los obreros.
Quinto.- Mantener el orden más severo en todos los actos interiores y
exteriores del Taller.
Sexto.- Impedir las intrigas y rencillas entre los obreros, procurando que reine
la Paz y la armonía, atendiendo cariñosamente las indicaciones de sus HH∴
respetando y haciendo respetar los acuerdos del Taller, siempre que no se
opongan a la Constitución ni a los estatuido y legislado.
Séptimo .- Sostener en toda su fuerza la igualdad y el respeto que
necesariamente debe existir entre todos los obreros.
Octavo.- No permitir que un H∴ se prevalga de su posición civil para humillar
a otro que no tenga en el mundo profano el rango de aquel.
Noveno.- Autorizar con su firma las actas de las sesiones todos los
documentos que emanen del Taller.
Décimo.- Examinar los libros del Taller, por lo menos cada tres meses,
haciéndolo constar así en el libro examinado, por nota que suscribirá.
Decimoprimero.- Firmar la correspondencia oficial.
Decimosegundo.- Comprobar todos los documentos de contabilidad
Decimotercero.- Ejecutar todos los acuerdos regulares de las Cámaras que
comprenda el Taller.
Art. 90.— Son, además, atribuciones del Presidente:
Primero — Abrir y cerrar los trabajos
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Segundo. Dejar bajo Mallete las proposiciones y planchas cuya lectura no
estime pertinentes.
Tercero. Dirigir las discusiones, concediendo la palabra o retirándola si lo
juzgare necesario para el buen Orden, y señalando si hubiere lugar a ello, la orden
del día para la sesión inmediata.
Cuarto.- Suspender cualquier discusión empezada, siempre que no se hayan
emitido las Conclusiones del Orador.
Quinto.- Recibir y abrir la correspondencia que luego transmite al Orador
para su lectura al Taller, cuando se refiere a asuntos de la competencia de éste y
no se le ha comunicado por autoridad superior con carácter particular o reservado.
Sexto.- Promover deliberaciones sobre todos los asuntos que puedan
interesar al Taller en particular o a la Francmasonería Universal.
Séptimo .- Resumir los debates y pedir al Orador que fije sus conclusiones.
Octavo.- Proclamar el resultado de las votaciones.
Noveno.- Proceder a la iniciación de profanos cuando se hayan cumplidos
los trámites legales.
Décimo.- Conferir los distintos grados en que el Taller trabaja, previo acuerdo
de la Cámara respectiva y después de cumplidos los requisitos de ley.
Decimoprimero.- Afiliar y regularizar a los hermanos que hayan de
pertenecer al Taller por acuerdo de éste y previas las formalidades legales.
Decimosegundo.- Designar secretamente al Secretario los obreros que
deban informar en los expedientes de iniciación, afiliación o regularización.
Decimotercero.- Determinar en cada sesión los HH∴ que deban desempeñar
los cargos de Oficiales cuando no se hallen presente los Titulares.
Decimocuarto.- Acordar directamente un Socorro, dentro de los límites fijados
por acuerdo del Taller o por el Reglamento interior del mismo.
Decimoquinto.- Ordenar los pagos de gastos presupuestados y los que
autorice el Taller.
Decimosexto.- Firmar todos los libramientos que se expidan contra el Tesoro
y Caja de Beneficencia.
Decimoséptimo.- Disponer los pagos de gastos no presupuestados siempre
que sean urgentes, pero quedando obligado a dar cuenta al Taller en la primera
sesión inmediata.
Los Reglamentos particulares de cada Taller pueden limitar estas facultades.
Art. 91.— Son también atribuciones del Presidente:
Primero .- Hacer cubrir el Templo a cualquier hermano, si cree necesaria esta
medida para la regularidad de los trabajos.
Segundo.- Presentar al Taller su queja contra los funcionarios de cuya
conducta no estuviese satisfecho.
Tercero .- Ejercer el poder disciplinario en la forma que se determina en la
Ley de Enjuiciamiento.
Cuarto.- Decidir en caso de empate, en las votaciones, salvo en la elección
de cargos o fallo de los asuntos judiciales encomendados a la competencia del
Taller.
Quinto.- Someter al Juicio correspondiente según los casos, al obrero que
abiertamente desobedeciere o resistiere a su autoridad.
Sexto.— Retirar la palabra al H∴ que se separe del asunto puesto a
discusión o que falte a las conveniencias o a las buenas formas.
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Séptimo.- Hacer salir del Templo al obrero que faltare al orden en la sesión,
previas las tres advertencias o llamamientos al efecto.
Octavo.- Suspender la sesión o levantarla definitivamente, sin ninguna de las
formalidades usadas en la clausura de los trabajos, en caso de que el orden se
turbase o de ser su autoridad desconocida o negada.
Suspendida la sesión por el Presidente en esta forma, no podrá reanudarse
en la misma tenida, ni por él ni por otro miembro del Taller.
Art. 92.— El Presidente tiene facultades para dispensar el pago de cualquier
cuota al obrero que, por circunstancias especiales, no pudiera satisfacerla,
guardando en secreto el motivo de esta determinación.
Art. 93.— El Presidente vela sobre los obreros de su Taller, no solamente en
el mundo masónico, sino también en la sociedad civil. Cuando sepa que alguno de
ellos lleva una vida reprensible, está obligado a procurar, en secreto y con cariño,
volverle a la senda de la sabiduría.
Art. 94.— El Presidente que se reconozca de alguna manera culpable, debe
saberse castigar con más rigor del que emplearía con otro que hubiere cometido la
misma falta. El ejemplo es el medio más eficaz para la conservación del buen
orden.
Art. 95.— No puede el Presidente, por ninguna razón, negarse a suscribir las
deliberaciones del Taller bajo su presidencia.
Art. 96.— En las dudas, el Presidente debe consultar con el Primer Vigilante
y tornar en consideración su parecer.
Art. 97.—En caso de ausencia del Presidente, o por cualquier otro
impedimento corresponde presidir el Taller por Orden jerárquico.
Primero — Al Primer Vigilante
Segundo - Al Segundo Vigilante
Tercero — Al Primer Experto.
Cuarto — Al Segundo Experto.
Quinto - Al Maestro más antiguo.
Si en este último caso hubiere dos en iguales condiciones, ocupará la
Presidencia el de más edad.
El Orador solo podrá presidir estando presente su adjunto.
CAPITULO SEGUNDO
DE LOS VIGILANTES
Art. 98.— Los Vigilantes como Vicepresidentes de los Talleres, siguen en
autoridad al Presidente, según el Orden jerárquico.
Deben poseer, por lo menos, el grado de Maestro.
El Primer Vigilante tiene bajo su dirección la Columna del Mediodía, y el
Segundo Vigilante la del Norte.
Los HH∴ de cada Columna deben pedir a su respectivo vigilante la venia
para emprender cualquier trabajo.
Art. 99.— Los Vigilantes piden la palabra por medio de un golpe de Mallete,
para si y para los miembros de su Columna, y la obtienen directamente del
Presidente.
Los Vigilantes tienen preferencia para todos los trabajos.
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Art. 100.— Son deberes de los Vigilantes:
Primero.- Cuidar de que el Templo esté siempre a cubierto de la indiscreción
de los profanos y de los que posean grado inferior a aquél en que esté trabajando
la Cámara.
Segundo.- Ayudar eficazmente al Presidente para la regularidad y perfección
de los trabajos.
Tercero.- Advertir al Presidente las faltas de los obreros confiados a su
inspección, pero de una manera decorosa.
Cuarto.- Dar ejemplo de subordinación a la Presidencia y mantener el orden
más severo en su Columna, no permitiendo circular por el Templo más que a los
oficiales, y solamente para el ejercicio de sus funciones.
Quinto.- Transmitir a los obreros de su Columna las órdenes del Presidente.
Sexto.— Llamar al orden a los obreros que interrumpan, y velar porque cada
Oficial cumpla sus deberes.
Séptimo.- Autorizar con su firma los documentos que deban tener este
requisito.
Art. 101.— Son también atribuciones de los Vigilantes en su Columna:
Primero.- Instruir a los obreros sobre sus obligaciones en los trabajos.
Segundo.- Pedir gracia para los HH∴ que hayan incurrido en alguna de
aquellas penas cuya imposición por la Ley corresponde al Presidente.
Tercero.- Reclamar la atención de los Maestros de Ceremonias para que se
rindan los honores debidos a los HH∴ que tengan este derecho.
Cuarto.— Instruirse de cuanto pase fuera del Templo y dar las órdenes
necesarias, según las circunstancias.
Quinto.- Imponer silencio al que intentare hacer uso de la palabra sin haberla
pedido o sin estar autorizado para ello.
Sexto.— Conceder permiso para cubrir el Templo y para volver a entrar antes
de circular el Tronco de Beneficencia.
Séptimo.— Pedir al Presidente autorización para los que deseen retirarse
definitivamente.
En este caso no consentirán que un obrero salga del Templo sin que antes
haya cubierto el Tronco de Beneficencia.
Art. 102.- Los Vigilantes no pueden abandonar su asiento sin pedir al
Presidente que los reemplace
Art. 103.— A ningún obrero es permitido censurar la conducta de los
Vigilantes mientras se hallen en funciones.
Sólo el Presidente si dieren motivo para ello, puede reprenderlos o llamarlos
al orden en el curso de los trabajos.
Art. 104.—. En caso de ausencia del Presidente, le reemplazan los Vigilantes
por su orden jerárquico.
Al Primer Vigilante le substituye el Segundo, pero jamás éste puede ser
sustituido por el primero.
CAPITULO TERCERO
DEL ORADOR
Art. 105.— El Orador es el Fiscal del Taller y representante de la Ley y, como
tal, el más obligado a observarla.
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Sobre su mesa deberá estar siempre un ejemplar de la Constitución, de los
estatutos y de los Reglamentos generales y del Reglamento interior del Taller.
En todos los actos oficiales es el órgano del Taller y el encargado de llevar la
palabra en su nombre tanto en trabajos como fuera de ellos.
El cargo de Orador exige que se confiera a persona de espíritu muy justo,
perspicaz e imparcial y, a ser posible, que tenga el don de la palabra.
Art.106.— El Orador obtiene la palabra directamente del Presidente, y
siempre que la pida en interés de la Ley se le concederá inmediatamente y con
preferencia a todo otro H∴.
Art. 107.— Son deberes del Orador:
Primero.- Guardar y cumplir, y hacer cumplir y guardar la Constitución los
Estatutos y Reglamentos generales, los decretos del Grande Oriente, las
disposiciones del organismo superior, el Reglamento interior del Taller y los
acuerdos del mismo.
Segundo.- Oponerse a toda deliberación y a todo acuerdo que sean
contrarios a las leyes y a la ortodoxia del Rito en que trabaje el Taller; y si a pesar
de su oposición se verificase algún trabajo contra Ley, pedirá copia del acta para
dirigirse en queja al Poder ejecutivo correspondiente.
Tercero.-No permitir que se proceda a ninguna iniciación, exaltación,
regularización, ni afiliación sin haberse asegurado antes de que se han cumplido
estrictamente cuantos trámites y condiciones señalan las Leyes y los acuerdos del
Taller en sus Cámaras respectivas.
Cuarto.- Instruir al Taller sobre las fórmulas del Rito en que trabaje.
Quinto.- Dar lectura, de acuerdo con el Presidente, de los documentos
oficiales y de los que contenga el Tronco de Proposiciones
Sexto.- Redactar las exposiciones y planchas que especialmente le encargue
el Taller.
Séptimo.- Leer los artículos de la Constitución, de los Estatutos y
Reglamentos y las demás prescripciones legales cuando lo pretendiere algún
hermano, previa la autorización del Presidente.
Octavo.- Suscribir con el Presidente y Secretario las actas de las sesiones
celebradas.
Noveno.- Autorizar con su firma los documentos que deban tener este
requisito.
Décimo.- Visar la Memoria de los trabajos que anualmente ha de presentar el
Secretario al Taller.
Decimoprimero.- Formular la acusación en todo proceso.
Decimosegundo.- Pronunciar o leer los discursos de ritual en las iniciaciones,
exaltaciones, honras fúnebres y demás solemnidades de la Orden.
Decimotercero.- Explicar a los iniciados y exaltados los símbolos respectivos.
Art. 108.— El Orador tiene también el deber de emitir sus conclusiones antes
de votarse cualquier asunto, una vez declarado suficientemente discutido.
Al pedir el Presidente las conclusiones al Orador, este resume las opiniones,
presenta la cuestión bajo el aspecto más claro, inspirándose siempre en el bien de
la Francmasonería en general o del Taller en particular, con preferencia al bien
individual de los hermanos. Analiza las diversas proposiciones y observaciones;
concilia, en lo posible, los distintos pareceres, y reduce el resultado a dos o tres
puntos de vista concretos, de manera que el Taller pueda fijarse con seguro
criterio en la parte más oportuna para verificar la votación.
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Art. 109.— Emitidas las conclusiones por el Orador, a nadie le es lícito tomar
la palabra sobre el asunto debatido, no quedando a los hh∴ más libertad que la de
votar en favor o en contra de la moción discutida.
Sólo el Presidente, después de las conclusiones, puede hablar del asunto
para aclarar algún extremo.
Art. 110.— Son, además, atribuciones del Orador:
Primero.- Interrumpir la lectura de cualquier plancha arquitectónica no
trazada según el espíritu del Arte Real.
Segundo.- Obtenerla palabra para ilustrar una deliberación y hacer
observaciones, reservándose su última conclusión.
Tercero.- Invocar la autoridad del Presidente para el cumplimiento de la ley y
de las fórmulas del rito.
Cuarto.- Pedir la clausura de los trabajos si algún h∴ o hh∴ traspasasen los
límites de la decencia o si reinase desorden en el curso de la labor.
Quinto.- Intervenir en el escrutinio de las votaciones y producto del tronco de
Beneficencia
Sexto.- Revisar los documentos que emanen del Taller y cualquier pieza de
arquitectura que presenten los hh∴.
La censura del Orador en la revisión de los documentos y piezas de
arquitectura se limita a examinar si el trabajo se ha hecho según las reglas y
principios y en el lenguaje del Arte Masónico.
Art. 111.- EL Orador tiene derecho a tomar de los Archivos del Taller todos
los documentos que necesite para su instrucción, firmando el oportuno recibo.
Art. 112.— El Orador adjunto cubre la vacante del titular, pero no la vacante
definitiva.
Estando en el desempeño del cargo accidentalmente, tiene los mismos
deberes y atribuciones y emitirá conclusiones en toda discusión empezada,
aunque en el transcurso de ella entre en el Templo el titular.
CAPITULO CUARTO
DEL SECRETARIO
Art. 113.—EL Secretario es el fiel guardador de todos los secretos del Taller.
No dará conocimiento a nadie, a excepción del Presidente, de las planchas,
comunicaciones y actas que no hayan sido leídas en sesión.
Para este cargo debe ser elegido un h. ∴ en posesión grado más alto que
trabaje en el Taller, salvo cuando la falta de personal no lo permitiere. En este
caso, jamás puede ejercer sus funciones en Cámara superior a su grado.
Art. 114.—EL Secretario sigue en categoría al Orador, y como éste pide la
palabra directamente al Presidente.
Puede intervenir en las discusiones sin consumir turno para explicar hechos
o conceptos relacionados con su cargo.
No puede abandonar su asiento sin pedir al presidente que le reemplace.
Art. 115.—Son deberes del Secretario:
Primero.-Cumplir las órdenes del Presidente para convocar a las sesiones
ordinarias y extraordinarias.
Segundo.- Custodiar, preparar y tramitar toda la documentación del Taller,
expedientes de iniciación, afiliación, regularización y cuantas informaciones sean
necesarias para los trabajos.
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Tercero.- Redactar con claridad y esmero el acta de los trabajos de la sesión,
que suscribirá en unión del Presidente y del Orador, después de aprobada y
trasladada al libro correspondiente.
Cuarto.- Hacer las inscripciones oportunas, llevándolas al día, en los libros y
registros del Taller que indican los artículos 52 y 53 de estos Estatutos y
Reglamentos, y los que determinen los Reglamentos particulares.
Quinto.— Formar los cuadros del movimiento del Taller que periódicamente
han de remitirse a la Gran Logia o al Gran Consejo Federal Simbólico, según los
casos.
Sexto.— Cuidar bajo la dirección del Presidente, de enviar y pedir a la Gran
Logia o al Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos, la documentación
que los trabajos del Taller exijan.
Séptimo.- Redactar y firmar los certificados que deba expedir de un acta o de
cualquier documento, los cuales deberán ser visados por el Presidente y el
Orador.
Octavo.- Convocar con la anticipación debida, a los individuos del Taller para
las sesiones ordinarias y extraordinarias, así como también a los que formen parte
de Comisiones en los días en que éstas se verifique.
Decimoprimero.- Suministrar cuantos datos y noticias pidan los obreros a la
Secretaría del Taller, siempre que la petición sea hecha en tenida.
Decimosegundo.- Disponer en cada sesión que se coloque en el vestíbulo
del Templo el Libro de Presencia, y cuidar de que lo firmen antes de entrar en
trabajos los que a éstos concurran.
Decimotercero.- Redactar, copiar y registrar toda la Correspondencia que
firmará con el Presidente.
Decimocuarto.- Asistir al Templo media hora antes de la señalada para
empezar la sesión, a fin de preparar los trabajos que han de ser objeto de la
misma.
Decimoquinto.- Recibir los documentos y correspondencia concernientes al
Taller que le remitan, entregándolos inmediatamente, y sin abrir, al Presidente.
Decimosexto.- Anotar el escrutinio en todas las votaciones y el resultado del
Tronco de Beneficencia.
Decimoséptimo.— Presentar anualmente una Memoria de los trabajos
efectuados en el Taller, visada por el Orador.
Decimoctavo.— Facilitar a las Comisiones cuantos datos y antecedentes
necesiten de la Secretaría para verificar sus trabajos.
Decimonoveno.— Dar lectura en sesión a los documentos propios de la
Secretaría.
Vigésimo.— Redactar las planchas, y demás documentos que no se le hayan
encargado especialmente al Orador.
Vigésimo primero.— Leer la lista de los miembros del Taller al final de las
sesiones para anotar convenientemente las faltas de asistencia y las disculpas
justificadas de los obreros.
Vigésimo segundo.— Registrar en un libro, por orden cronológico, los
acuerdos importantes del Taller, especialmente los que tengan carácter
reglamentario, expresando la fecha de la sesión en que fueron aprobados.
Este Registro se denominará “Libro Rojo” y estará sobre la mesa del Orador
durante las sesiones.
Art. 116.— Son también deberes del Secretario:
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Primero.— Extender los libramientos y cargarémes del Taller, que firmará en
unión del Tesorero y del Arquitecto Revisor, visados por el Presidente como
ordenador de pagos.
Segundo.— Llevar el libro diario del Taller.
Tercero.— Auxiliar al Tesorero en la expedición de recibos por todos los
conceptos de la tributación.
Art. 117.— El Secretario no expedirá documento alguno si no en papel que
lleve el membrete y timbre del Taller.
Art. 118.— Cuando por justa causa no pueda asistir a una sesión, el
Secretario lo pondrá en conocimiento del Presidente con la anticipación debida,
enviándole los libros de actas y los documentos que se relacionen con los trabajos
de que en tenida haya de ocuparse el Taller.
Art. 119.— El Secretario no podrá ausentarse de la localidad donde radique
el Taller, sino dando conocimiento al Presidente, el que determinará lo que
proceda.
Art. 120.— EL adjunto ayuda al titular, y cuando le sustituye tiene iguales
deberes y los mismos derechos que aquél.
En caso de quedar vacante el puesto de Secretario, no puede desempeñarlo
en propiedad el adjunto, sino por acuerdo del Taller.
Art. 121.— El Secretario podrá ser gratificado o indemnizado en la forma que
acuerde el Taller.
Art. 122.— El Secretario no puede escribir ni extender ninguna comunicación
oficial sino por orden del Taller o del Presidente.
En las convocatorias expresará siempre el objeto de ellas.
Jamás convocará a sesión extraordinaria, a no ser por disposición del que
tiene derecho a convocarla.
La orden debe recibirla por escrito, para que en todo caso, sirva de
justificativo
Art. 123.— Siempre que haya de verificarse iniciación o exaltación a un
grado, el Secretario lo pondrá en conocimiento del Orador, por lo menos con tres
días de anticipación, para que éste se prepare debidamente
Art. 124.—En la sesión que sigue inmediatamente a la en que el Taller ha
elegido a sus Dignatarios y Oficiales, el Secretario presentará un triple catálogo de
los miembros activos, con indicación del nombre y apellidos profano, nombre
simbólico, edad, estado civil, patria, profesión, domicilio, grado que ostenta en la
Orden, cargo para el que haya sido elegido en el Taller y las observaciones
pertinentes.
De las tres copias firmadas por las tres Luces del Taller, por el Orador y por
el Secretario, una se fija en el vestíbulo del Templo, otra queda en poder del
Secretario, y la tercera se envía a la Gran Logia o al Gran Consejo Federal
Simbólico, según los casos.
Las variaciones que ocurran en el decurso del año, se participarán asimismo
a la autoridad que corresponda por comunicación oficial de la Secretaria del Taller.
Art. 125.— En la primera tenida de cada semestre, el Secretario presenta por
duplicado, y con una firma y rúbrica al pie, un estado de todas las actas,
expedientes y piezas arquitectónicas del Taller que se hayan efectuado en los seis
meses anteriores.
Las tres Luces y el Orador, como comisión inspectora, visan el contenido de
dicho estado.
Una de las copias se archiva; la otra queda en la Secretaría del Taller.
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Esta misma formalidad se verificará siempre que un Secretario cese en su
cargo.
Art. 126.— El Secretario es también el encargado de custodiar los libros de
las leyes masónicas (Constitución, Estatutos y Reglamentos generales), los
periódicos oficiales, los Reglamentos particulares y todas las decisiones de dogma
y máximas del Grande Oriente y Taller mismo.
Art.127.— Durante las tenidas, el Secretario forma las minutas de todos los
trabajos, sin exceptuar ninguno. Ha de tomar exacta nota de los nombres de los
asistentes, clasificándolos (miembros activos, honorarios, visitadores, etcetera), los
cuales figurarán al margen del acta. Si se verifica alguna discusión, está obligado
a señalar la proposición, moción o asunto que la haya originado, consignando las
enmiendas, observaciones o incidentes dignos de mención que se produzcan, y
hará constar con la mayor exactitud las conclusiones del Orador, la forma de la
votación, el número de votantes y el resultado del escrutinio.
Art. 128.— Al concluir los trabajos lee el Secretario en alta voz una síntesis
de los acuerdos adoptados.
Art. 129.— Al empezar cada tenida y después de abiertos los trabajos con
las formalidades rituálicas, el Secretario lee el acta de la sesión precedente. Oída
su lectura y la conclusión del Orador, se somete a la confirmación del Taller y la
autorizan con su firma y rúbrica el Presidente, el Orador y el Secretario.
Art. 130.—El Secretario ha de redactar el acta con sujeción al modelo
siguiente:
“A L∴G∴ D∴G∴D∴ U∴
LIBERTAD - IGUALDAD - FRATERNIDAD
En los Valles de (nombre de la localidad donde trabaja el Taller y fecha
masónica y vulgar) la Respetable Logia ......(título distintivo del
Taller)......número.... (el de orden de la Federación) regularmente constituida, se
reunió por convocatoria ordinaria (o extraordinaria) en el Punto geométrico
conocido solamente de los Hijos de la Viuda, bajo la presidencia del Venerable
Maestro N..., asistido de (nombre de los Dignatarios, Oficiales y de todos los hh∴
presentes, o su referencia a los expresados al margen). El Venerable Maestro,
después de haberse cerciorado de la seguridad del Templo y previa las
formalidades del Rito abrió los trabajos en Cámara del grado de Aprendiz (o de
Compañero o de Maestro), siendo mediodía en punto. (Aquí la exposición de
todos los trabajos; teniendo en cuenta lo preceptuado en los artículos 115 y 117.
Se principia por mencionar la lectura hecha de la plancha o acta de los últimos
trabajos, su discusión, si la hubiere; la conclusión del Orador y la aprobación de la
Logia con las adiciones o ratificaciones que se acuerde. Después se hacen
constar las disculpas y cuantos asuntos de familia e interiores se traten.
Enseguida se expresan las pesquisas practicadas por el Experto en la Sala de
pasos perdidos, de los Visitadores hallados, de las precauciones tomadas para
asegurarse de su cualidad masónica y de los honores que se hubieran tributado.
Siguen los trabajos de recepción, si los hubiere habido, circulación del Saco de
proposiciones, indicando su resultado, discusiones, escrutinios, lectura de la
correspondencia oficial y documentos recibidos en la Secretaría, recesos de los
trabajos, si se verificasen, y su duración, mociones en bien general de la Orden o
de la Logia en particular, llamamiento de los hh∴, mención de los que faltaran con
justa causa, señalamiento de la Orden del día para la tenida siguiente, etcétera, y,
por ultimo, el producto del Tronco de Beneficencia y lectura del borrador de los
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trabajos formados por el Secretario. El acta termina con estas palabras: “El
Venerable Maestro, pagados, despedidos y contentos los obreros, previa la
invocación y batería de costumbre, cerró los trabajos a media noche en punto.”
Art.131.— Toda alteración en el borrador o en la plancha redactada, es falta
que merece pena.
Art.132.— Después de admitida la dimisión que de su destino haga un
Secretario, sólo podrán hacérsele cargos cuando hubiese ocultado algún
documento o plancha de la cual no hubiese tenido el Taller conocimiento
anteriormente.
CAPITULO QUINTO
DEL TESORERO
Art. 133.— EL Tesorero es el fiel depositario de los fondos del Taller, así
como de los objetos preciosos, títulos, láminas y cuantos documentos representan
valores, a excepción de los que pertenezcan al Tronco de Beneficencia.
Con los fondos del Taller satisfará las necesidades y obligaciones del mismo,
previo los trámites y requisitos legales.
El Tesorero es personal y directamente responsable de la seguridad del
Tesoro ante el Taller.
Art. 134.— La cantidad en efectivo que el Tesorero deba tener en su poder y
la. cantidad y forma en que deba estar depositado el resto de las existencias del
Tesoro, serán determinadas en los Reglamentos particulares de cada Taller.
Art. 135.— Corresponde al Tesorero:
Primero.— Recaudar y custodiar, fielmente los fondos del Taller, bajo su más
estrecha responsabilidad.
Segundo.— Dar al Taller o al Presidente cuantos informes le sean pedidos
acerca de los fondos.
Tercero.— Procurar que a cada h∴ se cobre por adelantado la cuota
ordinaria determinada por el Taller.
Cuarto.— Recibir las cantidades ingresadas por cualquier concepto,
suscribiendo el correspondiente cargaréme expedido y firmado por el Secretario y
con el intervine del Arquitecto Revisor.
Quinto.— Hacer los pagos previo libramiento expedido por el Secretario,
firmado por el Presidente y con el intervine del Arquitecto Revisor; nunca sin estos
requisitos ni sin que el pago sea autorizado por el Taller.
Sexto.— Llevar libros talonados de recibos para las cuotas ordinarias y para
las cantidades que recaude por cualquier concepto.
Séptimo.— Autorizar con su firma los documentos que devenguen derechos
al Tesoro del Taller.
Octavo.— Llevar la contabilidad de una manera clara y precisa.
Noveno.— Entregar al Presidente, en la primera sesión ordinaria de cada
mes, una relación nominal de los hh∴ morosos en el pago de la cuota
reglamentaria hasta fin del mes anterior, con expresión del número de cuotas que
deba cada uno.
Décimo.— Rendir cuentas trimestralmente a la Comisión de Hacienda del
Taller en duplicado balance de inventario, dentro de la primera quincena de los
meses de Enero, Abril, Julio y Octubre de cada año.
25

Art. 136.— El Tesorero no pone su firma a ningún certificado, título, diploma
u otro documento de pago, sin haber antes ingresado en Caja la cantidad o cuenta
que deba abonar en cada caso el h∴ de quien se trate. Se opone a las
iniciaciones, afiliaciones, regularizaciones y aumentos de salarios cuando no se
hayan satisfecho los derechos correspondientes al Tesoro.
Lo verificado contra lo dispuesto en este artículo trae la responsabilidad
personal del Tesorero.
Art. 137.— Con la conformidad de la Comisión de Hacienda, y la aprobación
de cuentas de un trimestre, por acuerdo del Taller en tenida ordinaria, cesa la
responsabilidad del Tesorero en dicho trimestre, empezando cuenta nueva con el
saldo que resulte.
Art. 138.— El Tesorero llevará un libro de Caja en el cual sentará, con
escrupulosidad y por orden riguroso de fechas, las entradas y salidas con
expresión del cargaréme o del libramiento. El saldo de este libro ha de confrontar
con el que figura en Balance trimestral y con el que resulte del libro de
anotaciones del Arquitecto Revisor.
En la primera página del libro de Caja certificará el Secretario el número de
folios útiles y la fecha en que comienza su empleo, poniendo el pie su VºBº el
Presidente.
Art. 139.— Cuando el Tesorero dimitiere o cesare en su cargo, remitirá a la
Comisión de Hacienda todos los documentos y libros de contabilidad que tenga en
su poder para que ésta haga un resumen general y manifieste su conformidad.
La aprobación definitiva de las cuentas por el Taller libra de toda
responsabilidad al Tesorero, después que entregue en Caja los fondos existentes.
Art. 140.— Cuando lo dispusiere el Taller o lo pidiere la Comisión de
Hacienda, estará el Tesorero obligado a presentar los libros de contabilidad, así
como los talonarios de recibos y a rendir cuentas, bajo pena de destitución si a ello
se negare.
CAPITULO SEXTO
DE LOS EXPERTOS
Art. 141.— Los expertos están encargados del orden interior y exterior del
Templo y de la seguridad de los trabajos.
Sustituyen por orden jerárquico a los Vigilantes en ausencia de estos y
reemplazan al Presidente, según el articulo 97.
Art. 142.— Son atribuciones de los Expertos:
Primero.— Cerciorarse de las cualidades masónicas de los hermanos
visitadores, retejándolos y examinando los títulos que exhiban, de todo lo cual
informan al Presidente.
Segundo.— Instruir, en unión de los Vigilantes, a los obreros sobre sus
obligaciones en los trabajos.
Tercero.— Disponer y colocar los objetos necesarios para las iniciaciones y
aumento de grado.
Cuarto.— Preparar y conducir a los candidatos durante las pruebas,
conforme a Rito.
Quinto.- Vigilar por que los obreros guarden en sus columnas la debida
compostura y obedezcan las órdenes del Presidente y de los Vigilantes.
26

Sexto.- Presenciar los escrutinios.
Séptimo.- Procurar que no se presente ningún visitador ni hermano del Taller
que posea grado inferior al en que se trabaje.
Octavo.- Cuidar de la exactitud en el traje, joyas y decoraciones masónicas,
según los grados y empleo de cada hermano con fidelidad a las órdenes que le
comunique el Presidente.
Art. 143.— En los escrutinios, el Primer Experto cuenta los votantes,
distribuye las bolas y papeletas de votación, recoge los votos, los vacía del saco
en la mesa del Orador y asiste al reconocimiento del escrutinio.
Art. 144.- Los Expertos ejercerán sus funciones en orden jerárquico.
Los Talleres, según sus necesidades, pueden aumentar en tres más el
número de Expertos, con las mismas atribuciones y deberes que el primero y
segundo menos la de sustituir al Presidente.
Si vacare la plaza de Primer Experto, le sustituirá el Segundo. Pero si ambas
quedaren vacantes, se procederá a nueva elección.
NOTA: EL Experto de las diversas funciones que ejecuta en trabajos, recibe las
denominaciones de Retejador, Preparador, Terrible, Sacrificador o Censor.
27

CAPITULO SÉPTIMO
DEL LIMOSNERO U HOSPITALARIO
Art. 145.— El Limosnero u Hospitalario de un Taller es el fiel depositario de
los fondos de Beneficencia y el encargado de visitar a los hermanos enfermos,
consolándolos y ofreciéndoles toda especie de socorros posibles.
Art. 146.— La Caja del Limosnero es independiente de la del Tesorero. Sus
fondos están destinados exclusivamente al socorro de los desgraciados, y no
pueden dedicarse a otro objeto bajo ningún concepto.
Art. 147.— La cantidad en efectivo que el Limosnero haya de conservar en
su poder y la cantidad y forma en que deba estar depositado el resto de las
existencias se determinarán por acuerdo del Taller o por el Reglamento interior del
mismo.
Art. 148.— Son deberes del Limosnero:
Primero.— Custodiar fielmente los fondos del Tronco de Beneficencia, de
cuya seguridad es responsable directa y personalmente ante el Taller.
Segundo.— Hacerse cargo en cada tenida del producto del saco de
Beneficencia, así como de las cantidades que arroje cualquier otra cuestación
voluntaria, suscripción, renta, donativo o multa para fines benéficos.
Tercero.— Satisfacer con los fondos de su cargo los socorros que acuerde el
Taller y los que determine el Presidente, dentro de los límites fijados por el
Reglamento interior.
Cuarto.— Exigir que se anote en el acta de cada sesión las cantidades
recaudadas y su procedencia.
Quinto.— Cuidar de que ningún hermano se retire del Templo sin haber
cubierto el saco de Beneficencia.
Sexto.— Circular en las tenidas el saco de Beneficencia, cuyo producto
interviene el Orador a presencia del Experto y anota el Arquitecto Revisor.
Séptimo.— No pagar ni entregar cantidad alguna sin previo libramiento
expedido por el Secretario, firmado por el Presidente y con el “intervine” del
Arquitecto Revisor.
Octavo.— Rendir cuentas trimestralmente a la Comisión de Hacienda en la
forma y fechas fijadas al Tesorero en el articulo 135, párrafo 10.
Noveno.— Dar al Taller o al Presidente cuantos informes le sean pedidos
acerca de los fondos de Beneficencia.
Art. 149.— Son también deberes del Limosnero u Hospitalario:
Primero.— Visitar frecuentemente a los hermanos enfermos, prodigándoles
consuelo.
Segundo.— Averiguar las necesidades en que pueda encontrarse el enfermo
o desvalido, informando de ello al Presidente y al Taller.
Tercero.— Encargarse de entregar a los necesitados las ofrendas que para
estos casos acuerde el Taller o determine el Presidente, dentro de sus facultades.
Cuarto.— Avisar al Taller, en caso de gran aflicción o infortunio de un
hermano, para que se le preste en el mundo profano toda aquella protección
posible que, en virtud y fuerza de reciproco juramento, se le debe.
Quinto.— Procurar, si la enfermedad de un hermano fuera de peligro, que
todos sus papeles, joyas, decoraciones y vestidos masónicos pasen a poder de
algún pariente masón. Si le fueran entregados a él mismo, deberá depositarlos en
28

el Archivo del Taller, para restituirlos al hermano inmediatamente después de su
curación, si ésta sobreviniera.
Sexto.— Dar noticia al Presidente del fallecimiento de un hermano para que
con toda urgencia se disponga lo que proceda.
Art. 150.— El Limosnero u Hospitalario llevará un libro de Caja de
Beneficencia en que consten con escrupulosidad y por orden riguroso de fechas
las entradas y salidas, anotando la procedencia de los ingresos y el numero de
libramiento que justifique los gastos. El saldo de este libro ha de confrontar con el
que figure en balance trimestral y con el que resulte del libro de anotaciones
dedicado a la Beneficencia por el Arquitecto Revisor.
Dicho libro de Caja se hallará autorizado en su primera página por
certificación del Secretario, quien hará constar el número de folios útiles y la fecha
en que comienza su empleo, visándolo el Presidente.
Art. 151.—La responsabilidad del Limosnero u Hospitalario por su gestión en
cada trimestre cesa en la misma forma que la expresada respecto al Tesorero en
el articulo 137.
Art. 152.— Siempre que lo disponga el Taller, o lo pida la Comisión de
Hacienda, el Limosnero u Hospitalario está obligado a presentar los libros de
contabilidad del Tronco de Beneficencia.
Art. 153.— Al cesar en su cargo, el Limosnero u Hospitalario entregará los
libros y documentos del Tronco de Beneficencia a la Comisión de Hacienda, para
que ésta los examine e informe al Taller.
CAPITULO OCTAVO
DEL MAESTRO DE CEREMONIAS
El Maestro de Ceremonias está encargado de dirigir el ceremonial de Rito en
todas las tenidas.
Es también el intermediario entre el Presidente y las Columnas para dar
avisos y comunicar asuntos que no deban publicarse por medio de los Vigilantes.
Puede tener varios adjuntos, según las necesidades del Taller.
Art. 155.— Corresponde al Maestro de Ceremonias:
Primero.- Cumplir y hacer cumplir todo el ceremonial masónico previniendo
en voz baja al Presidente de cualquier falta que note.
Segundo.- Invitar a los obreros del Taller, antes de la hora indicada para la
apertura de trabajos, a que firmen el “Libro de Presencia” y a que se decoren y
entren en el Templo.
Tercero.- Cuidar de que cada hermano ocupe en trabajos el sitio que les
corresponda por su grado y cargo, para lo cual estará provisto del catálogo de
miembros del Taller con las debidas aclaraciones.
Cuarto.- Introducir en el Templo a las Comisiones y a los Visitadores
acompañándolos hasta que ocupen sus respectivos puestos. Antes de darles
entrada, él los anuncia convenientemente por sus nombres y cargos, indicando el
grado y empezando por los que lo tenga inferior; es decir, por orden ascendente.
Quinto.—Asistir a las ceremonias de iniciación o exaltacin en los diferentes
grados, desde el momento en que los Expertos dan entrada en el Templo al
neófito o al iniciado en grado inferior.
29

Sexto.— Proclamar entre Columnas los iniciados, afiliados o regularizados.
Séptimo.— Acompañar en sus baterías de respuesta a los Visitadores y a los
que se le hayan rendido dicho tributo.
Octavo.— Cuidar de que los obreros se hallen provistos de los útiles del
trabajo y de que el Templo esté convenientemente dispuesto.
Noveno.— Indicar al Arquitecto del Templo cuando sea preciso disponer o
preparar en los diferentes trabajos.
Décimo.— Circular el Saco de Proposiciones y entregarlo al Presidente.
Decimoprimero.- Hacer las veces de los Expertos en ausencia de ellos.
Decimosegundo.- Llamar por lista nominal a los hh∴ cuando sea preciso,
siendo en esto preferido el Secretario.
Decimotercero.- Comprobar y llevar al Presidente las palabras de orden,
anual o semestral, transmitidas en las Columnas.
Art. 156.— Los Maestros de Ceremonias Adjuntos ayudan al titular y lo
reemplazan en su ausencia, pero si quedare vacante el cargo, se procederá a
nueva elección.
CAPITULO NOVENO
EL ARQUITECTO REVISOR
Art. 157.—El Arquitecto Revisor es el Contador del Taller y, por lo tanto, el
encargado de intervenir la contabilidad del mismo, así la del Tesorero como la del
Tronco de Beneficencia. Somete sus operaciones a la Comisión de Hacienda.
Art. 158.— Son deberes del Arquitecto Revisor:
Primero.- Intervenir, previa comprobación todos los documentos referentes a
gastos e ingresos realizados por el Tesorero y por el Limosnero u Hospitalario.
Segundo.- Llevar un registro, en el que anote detalladamente y, por orden
riguroso de fechas, el número, concepto y cantidad de cada libramiento y
cargaréme que se refiera al Tesoro, cuyos documentos intervendrá, firmándolos y
sellándolos.
Tercero.- Llevar otro registro en la misma forma que el anterior para los
ingresos y gastos del Tronco de Beneficencia.
Cuarto.- Retener en su poder durante cada trimestre los cargarémes con el
“recibí” firmado por el Tesorero, hasta la definitiva aprobación de las cuentas por el
Taller, pasando después estos documentos al Archivo del mismo.
Quinto.— Comprobar los libros de Tesorería y los del Tronco de Beneficencia
con los que él lleve, siempre que los juzgue necesario, y poner inmediatamente,
bajo su responsabilidad, en conocimiento del Presidente, cualquier falta u omisión
que en ellos notare.
Sexto.— Intervenir las cuentas que pida el Taller en cualquier momento.
Séptimo.— Asistir a las reuniones de la Comisión de Hacienda para el
examen de los asuntos de Tesorería y de Beneficencia, comprobando los asientos
del trimestre.
Octavo.— Firmar con la Comisión de Hacienda los Balances de cuentas.
Noveno.— Dar al Taller, al Presidente y a la Comisión de Hacienda cuantos
informes le sean pedidos respecto a la contabilidad.
Décimo.— Tomar nota en cada tenida del producto del Saco de
Beneficencia.
30

Art. 159.— El Arquitecto Revisor es responsable de cualquiera irregularidad
habida en la contabilidad del Taller, y será juzgado por ello masónicamente.
CAPITULO DÉCIMO
DEL MAESTRO DE BANQUETES
Art.- 160.— EL oficio del Maestro de Banquetes consiste en la dirección y
disposición de las comidas conforme a lo que el Taller tenga establecido al efecto.
El Maestro de Banquetes puede ser auxiliado por una Comisión designada a
este fin.
Art. 161.— Son atribuciones del Maestro de Banquetes:
Primero.- Cumplir exactamente lo dispuesto por el Taller respecto de los
banquete acordados organizándolos con la perfección debida.
Segundo.- Cuidar de que cada h∴ ocupe en la mesa el puesto que le
corresponde.
Tercero.- Atender con toda cortesía a los visitadores, a quienes colocará en
el lugar que de antemano le prevenga el Presidente.
Cuarto.- Procurar, si el banquete se hace por suscripción o cuota voluntaria,
que éste se recaude dos días antes de la fiesta, y si se sufraga de los fondos del
Taller, que el gasto no exceda del presupuesto fijado.
Quinto.— Ajustar el importe y calidad de cada cubierto que haya de servirse
en el banquete y firmar el correspondiente libramiento, que expedirá el Secretario,
intervendrá el Arquitecto Revisor y autorizará el Presidente.
CAPITULO DEClMOPRIMERO
DEL ARCHIVERO BIBLIOTECARIO
Art. 162.— EL Archivero-Bibliotecario es el encargado de la custodia y
conservación de todos los documentos libros, registros y efectos existentes en el
Archivo y Biblioteca del Taller, siendo personalmente responsable de ello.
El h∴ que se designe para este puesto debe poseer el grado 3º, pudiendo su
nombramiento recaer en uno de los Vigilantes, si no hubiere otro.
Este cargo puede unirse con el de Secretario Guarda-sellos.
Art.163.— Corresponde al Archivero-Bibliotecario:
Primero.— Llevar un registro general de los documentos y libros que
Constituyan el Archivo.
Segundo.— Llevar otro registro general de las obras que ingresen en la
Biblioteca, expresando su procedencia y la fecha de su adquisición.
Tercero. — Registrar y custodiar convenientemente los documentos y libros
que hayan surtido sus efectos en la Secretaría o en las distintas Comisiones,
previo el decreto del Presidente de que se archiven por acuerdo del Taller.
Cuarto.— Formar índices exactos y metódicos, tanto del Archivo como de la
Biblioteca.
Quinto.— Poner a disposición de la Comisión de Hacienda los índices que se
mencionan en el párrafo anterior, a fin de que ésta compruebe, siempre que lo
estime conveniente, si existen en la Biblioteca o en el Archivo los libros y
documentos enumerados en los índices.
31

Sexto.— Marcar con el sello del Taller todos los volúmenes y documentos de
la Biblioteca.
Séptimo.—Tomar nota de las obras que se le pidan por los hh∴ o por las
Comisiones, y que no existan en la Biblioteca, a fin de proponer su adquisición de
la manera más ventajosa.
Octavo.— Expedir certificaciones de los documentos de interés personal que
existan bajo su custodia, previa orden del Presidente, entregándolos al Secretario
para el cumplimiento de todos los requisitos de ley.
Noveno.- Suministrar cuantos datos y noticias pidan los obreros al Archivo,
siempre que la petición sea hecha en tenida, Pero nunca si se refieren a
conocimientos superiores al grado que ostente el peticionario.
Décimo.- Permitir la lectura de obras de la Biblioteca, siempre que no se
saquen fuera del local y que no se refieran a grados más elevados del que Posee
el que pretenda leerlas.
Art. 164.— El Archivo y la Biblioteca se instalarán en el local del Templo, y de
ellos no podrá extraerse ningún documento ni libro sino por acuerdo del Taller,
comunicado al Archivero-Bibliotecario por orden del Presidente.
Art. 165.— Los hh∴ autorizados por el Taller, según el articulo anterior, para
sacar fuera del local del Archivo y Biblioteca algún documento o libro, firmarán el
oportuno recibo, el cual servirá de descargo al Archivero-Bibliotecario hasta que se
efectúe la devolución.
Art. 166.- Sólo el Presidente y el Orador tienen facultades para hacerse
consignar por el Archivero-Bibliotecario, con un simple recibo y sin otra
autorización, aquellos documentos y libros que puedan necesitar para su
instrucción y para usos del Taller.
Art. 167.— Los documentos y libros que en todos los casos se extraigan del
Archivo, deberán ser devueltos al mismo dentro de los tres días siguientes a la
fecha en que hubieren sido tomados.
Del incumplimiento de esta obligación dará cuenta al Taller el Archivero-
Bibliotecario para salvar su responsabilidad.
Art. 168.— Cuando en calidad de depósito le sean confiados al Archivero-
Bibliotecario los ejemplares de Rituales, Constituciones, Estatutos y Reglamentos
generales, Reglamentos particulares y cualesquiera otros documentos de valor
que puedan significar ingresos para el Tesoro, entregará como resguardo al
Tesoro un recibo por valor del metálico que dichos libros y documentos
representen.
El importe de este recibo se irá amortizando con los “vales” de entrega que le
expida el Tesorero, intervenidos por el Arquitecto Revisor para retirar las
existencias de dicho depósito.
Art. 169.— Cuando el Archivero-Bibliotecario cese en sus funciones por
elección de su sucesor o por otra causa cualquiera, hará entrega del Archivo y de
la Biblioteca a la Comisión de Hacienda, en presencia del Arquitecto Revisor,
procediéndose a una comprobación general de todas las existencias del Archivo y
de la Biblioteca.
De esta comprobación se pondrá nota en los registros de orden, firmadas por
los hh∴ que la lleven a cabo, y se dará cuenta al Taller.
La responsabilidad del Archivero-Bibliotecario cesa cuando el Taller haya
aprobado el informe de la Comisión de Hacienda respecto al estado del Archivo y
de la Biblioteca.
32

CAPITULO DECIMOSEGUNDO
DEL GUARDA-SELLOS
Art. 170.— El Guarda-sellos es el depositario, bajo su más estrecha
responsabilidad, de los sellos del Taller.
Este cargo puede unirse con el de Secretario o con el de Archivero-
Bibliotecario.
Art.171.— Son deberes del Guarda-sellos:
Primero.- Custodiar fielmente los sellos del Taller, guardándolos en uno de
los armarios del vestíbulo del Templo, sin poderlos traspasar a otra parte.
Segundo.-Tener siempre los sellos a disposición del Taller.
Tercero.— No sellar ninguna plancha ni otro cualquier documento que no
vaya expedido por el Secretario y firmado por el Orador o el Tesorero en los casos
prescritos por las Leyes, pero siempre con el Vº Bº del Presidente del Taller.
Se puede prescindir de esta última disposición en los recibos de cotización
mensual y los expedidos para el cobro de los derechos por iniciaciones,
regularizaciones, afiliaciones y aumentos de salarios.
Cuarto.— Tomar nota de todos los documentos que selle, indicando la fecha.
El Guarda-sellos, al tomar posesión de su cargo, firmará un recibo detallado
de los objetos que se le confían en depósito, intervenido por el Arquitecto Revisor
y que éste conservará.
Art. 173.— Cuando el Guarda-sellos cesa en su cargo entrega los sellos al
Taller, mediante certificación, firmada por el Presidente, los dos Vigilantes y el
Orador, con el “intervine” del Arquitecto Revisor.
Con esta certificación cesa la responsabilidad del Guarda-sellos.
CAPITULO DECIMOTERCERO
DEL ARQUITECTO DEL TEMPLO (ECÓNOMO)
Art. 174.— El Arquitecto del Templo, llamado también Arquitecto decorador o
Ecónomo, es el encargado de custodiar los muebles, adornos, aparatos,
decoraciones, joyas y cuanto encierran las salas del local del Templo.
Art. 175.— Corresponde al Arquitecto del Templo:
Primero.— Hacerse cargo de la custodia y conservación de lo expresado en
el artículo anterior, mediante inventario, pasando copia de éste al Archivo con el
Vº Bº del Presidente.
Segundo.— Proveer a los Expertos y al Maestro de Ceremonias de los útiles
del trabajo y de cuanto sea necesario para las necesidades del Taller.
Tercero.— Proponer la reparación o renovación de los muebles u objetos
que se le confían y la adquisición de los que fueren precisos.
Cuarto.— Cuidar del arreglo interior del Templo, con sujeción al Rito en que
trabaje el Taller.
Quinto.— Presentar planos, diseños, presupuestos o notas detalladas de
cuanto fuere necesario para el decorado y preparación del local en todas las
ceremonias.
33

Sexto.— Intervenir como Maestro decorador en las fiestas, banquetes y
honras fúnebres.
CAPITULO DECIMOCUARTO
DEL PORTA-ESTANDARTE
Art. 176.— El Porta-Estandarte es el encargado de conducir la enseña del
Taller en todas las grandes ceremonias, tanto dentro del Templo como fuera de él,
según lo requieran las circunstancias. Acompaña al Presidente, precediéndole,
llevando izado el Estandarte.
Cuida también de que durante los trabajos el Estandarte se halle enarbolado
a la derecha del Trono.
CAPITULO DECIMOQUINTO
DEL HERALDO O PORTA-ESPADA
Art. 177.— El Heraldo o Porta-Espada no tiene otra atribución que la de estar
a la izquierda del Presidente cuando éste, con ocasión de las fiestas o
recibimientos solemnes, haya de desplegar toda la magnificencia de su dignidad.
Entonces el Heraldo toma de manos del mismo Presidente la espada de honor
antes de bajar del Trono, y le acompaña a dondequiera que vaya. Después de
haber vuelto a subir el Presidente al Trono, el Heraldo le entrega la espada, que
se vuelve a poner sobre el ara.
En las Logias el Heraldo llevará la espada sobre un almohadón de tela roja o
sobre una bandeja con paño carmesí.
CAPITULO DECIMOSEXTO
DE LOS GUARDA-TEMPLOS
Art. 178.—Los Guarda-Templos, tanto el interno como el externo, están
encargados de ayudar a los Expertos en todo lo que se refiere a la seguridad
interior y exterior de los trabajos.
El Guarda-Templo interno debe poseer, a ser posible, el grado más alto en
que trabaje el Taller. En el ejercicio de sus funciones estará armado de una
espada.
Puede ser Guarda-Templo externo un obrero investido del grado más bajo en
que trabaje el Taller, y se destina a este cargo al hermano últimamente recibido;
deberá estar armado de una espada, pero jamás usará el traje ni la decoración de
su grado.
Art. 153.— Son deberes del Guarda-Templo interno:
34

Primero.— Tener siempre cerrada la puerta del Templo con llave o cerrojo, y
si ocurre el abrirla, debe al momento cerrarla de nuevo.
Segundo.— Avisar al Segundo Vigilante si llaman a la puerta masónicamente
o de un modo profano.
Tercero.— No abrir la puerta sino por orden del Segundo Vigilante, después
de haberla recibido éste del Presidente.
Cuarto.— Anunciar al Segundo Vigilante para que éste lo transmita al
Presidente, el nombre, cargo o dignidad y grado del h∴ que haya llamado a la
puerta del Templo y pretenda entrar.
Quinto.— No franquear la entrada a ningún hermano sin la orden del
Segundo Vigilante, quien, a su tiempo, la recibirá del Presidente. Y aun concedida
la entrada en esta forma, el Guarda-Templo no dejará pasar al h∴ si no está
masónicamente preparado y sin antes pedirle y recibir la palabra de paso del
grado en que se esté trabajando.
Sexto.— Exigir y recibir la palabra anual y la semestral de los Visitadores
pertenecientes al Grande Oriente Español antes de franquearles la entrada.
Séptimo.— Hacer saber, por medio de un golpe dado en la puerta, si oye
llamar fuera, que no puede concederse la entrada ni en los momentos de la lectura
del acta, ni cuando el Orador fija sus conclusiones sobre los puntos discutidos, ni
cuando se está verificando una votación.
Octavo.— Avisar, en la misma forma expresada en el párrafo anterior,
cuando llamaren a la puerta y no pueda abrirla porque el Taller se halle ocupado
en trabajos que exijan silencio y atención.
Art. 180.— Son deberes del Guarda-Templo externo:
Primero.— No consentir que persona alguna permanezca en las
inmediaciones de la puerta del Templo.
Segundo.— Vigilar cuanto ocurra fuera del Templo y avisar en casos de
necesidad.
Tercero.— Cuidar de que guarden orden los hermanos que permanezcan en
pasos perdidos.
Art. 181.— Ningún Guarda-Templo puede abandonar su puesto hasta que
los Trabajos del Taller queden cerrados.
Si por cualquier circunstancia un Guarda-Templo se viere obligado a
abandonar su puesto momentánea, o definitivamente, pedirá que se le reemplace.
CAPÍTULO DECIMOSÉPTIMO
DE LOS DIÁCONOS
Los tres hh∴ Diáconos asisten y acompañan, respectivamente, al
Presidente, al Primer Vigilante y al Segundo Vigilante. Deben estar armados de
espadas.
El Primer Diácono se sienta a la derecha del Presidente; el Segundo, a la
derecha del Primer Vigilante, y el Tercero, a la del Segundo Vigilante.
35

CAPITULO DECIMOCTAVO
DE LOS HERMANOS SIRVIENTES
Art. 183.— Los Talleres pueden tener uno o varios hermanos sirvientes,
según las necesidades y medios de satisfacerlas.
Deben saber leer y escribir, y ser de tales costumbres y de tal prudencia, que
no den lugar a temer de ellos indiscreción alguna.
Los Sirvientes han de pertenecer al Rito en que trabaje el Taller.
Art. 184.— El primero de los hermanos Sirvientes debe ser admitido a los
misterios masónicos en las condiciones legales. Los otros sólo necesitan estar
instruidos en el signo de Aprendiz. Unos y otros prestan sus servicios bajo
juramento de fidelidad y silencio.
Art. 185.— El salario de los hermanos Sirvientes se fija por el Taller.
Además de este sueldo, y según las circunstancias, se les puede asignar
gratificaciones extraordinarias.
Art. 186.— Los Sirvientes están dispensados de toda cuota, y no pueden ser
nombrados para ningún otro cargo.
Art. 187.— Son deberes de los hermanos Sirvientes:
Primero.— Obedecer a los Dignatarios y Oficiales del Taller y, sobre todo, a
los responsables del orden, del Tesoro, del local y de las ceremonias.
Segundo.— Responder personalmente de las misiones que se les confíen.
Tercero.— No separarse de la sala de pasos perdidos durante los trabajos, ni
entrar en el Templo sin ser llamados.
Cuarto.— Avisar al Guarda-Templo externo, para que éste lo transmita al del
interior, cualquier advertencia, noticia o encargo que haya de comunicar al Taller o
a algunos de sus miembros.
Quinto.— Repartir las citaciones o convocatorias solícitamente y con toda
exactitud.
Sexto.— Vigilar la entrada del local donde se hallen instalados el Templo y
las dependencias del Taller.
Séptimo.— Cuidar de que el Templo y todas las dependencias estén
constantemente en estado de recibir a los hermanos.
Los Reglamentos particulares de los Talleres pueden determinar
detalladamente los distintos servicios a que hayan de aplicarse los Sirvientes.
Art. 188.— En caso de falta o de infracción, los hermanos Sirvientes serán
juzgados por el Taller que los haya recibido como tales.
Art. 189.— Ningún Sirviente puede ser ayudado por un sirviente extraño o
profano sin autorización especial del Taller.
Art. 190.— A falta de Sirvientes, los masones más jóvenes deberán llenar
parte de sus funciones, alternativamente.
CAPITULO DECIMONOVENO
DE LA COMISIONES
SECCIÓN PRIMERA
36

De las Comisiones en general
Art. 191.— Las Comisiones de los Talleres son de dos clases: permanentes y
especiales.
Art. 192.— Las Comisiones permanentes actúan con carácter obligatorio en
todas las Logias y serán elegidas anualmente.
Pertenecen a esta clases:
Primero.— La Comisión de Justicia.
Segundo.— La de Hacienda.
Tercero.— La de Beneficencia.
Cuarto.— La de Asuntos generales.
Art. 193.— Las Comisiones especiales ejercen sus funciones temporalmente.
Están encargadas de estudiar acuerdos especiales tomados por el Taller.
Serán elegidas cada vez que ocurra el caso de ser necesario su
funcionamiento.
Art. 194.— Al ser elegidas las Comisiones, el Taller designa a los hh∴que
han de desempeñar los cargos de Presidente y Secretario en cada uno de ellas.
El Presidente del Taller es también Presidente nato de todas las Comisiones,
exceptuando la de justicia, pero no tiene voto y puede excusarse de presidirlas.
Art. 195.— Las Comisiones verificarán sus trabajos cuando lo determinan
estos Estatutos y Reglamentos generales y cuando lo disponga el Taller.
Procurarán dictaminar y cumplir su misión en el plazo más breve, dando
cuenta al Taller de las causas que motiven un retraso excesivo en cualquier
dictamen.
Los Talleres tienen facultades para señalar el plazo máximo en que una
Comisión haya de dictaminar sobre cualquier asunto. Se exceptúan los casos en
que la Ley fija dicho plazo.
Art. 196.— El individuo de una Comisión que no esté de acuerdo con el
parecer de los demás, puede formular voto particular.
En tal caso, el informe de la minoría se lee y discute en el Taller antes que el
de la mayoría.
Art. 197.— Son deberes del Presidente de una Comisión:
Primero.— Representarla.
Segundo.— Dirigir sus trabajos.
Tercero.—Convocarlas, tanto para las reuniones ordinarias como para las
extraordinarias.
Cuarto.— Designar a un miembro de la Comisión para que ejerza el cargo de
Secretario de la misma en ausencia del elegido por el Taller.
Art. 198.— Son deberes del Secretario de una Comisión:
Primero.— Dirigir, por orden del Presidente de la misma, las citaciones o
convocatorias a cada uno de los miembros de la Comisión, si no se le hubiese
encargado a la Secretaría del Taller.
Segundo.— Levantar acta de los trabajos de la Comisión o extender la
plancha que contenga el dictamen de la misma.
Tercero.— Dar lectura ante el Taller de lose dictámenes emitidos.
Art. 199.— Para que uno Comisión pueda constituirse en trabajos, se
necesita la asistencia de la mayoría de sus miembros.
Art. 200.— Los miembros de una Comisión constituida en trabajos están
obligados a suscribir o el dictamen emitido por la mayoría, o el voto particular, si lo
hubiere.
37

Ninguno puede abstenerse de ello.
Art. 201.— Las Comisiones de las Logias deberán ser formadas con hh∴
que posean, por lo menos, el grado de Maestro Masón, excepto la de
Beneficencia.
El número de miembros que han de componer las Comisiones permanentes
será el que sigue:
Comisión de Justicia, cinco miembros.
Comisión de Hacienda, tres.
Comisión de Beneficencia, tres.
Comisión de Asuntos generales, tres.
Los Talleres pueden ampliar a siete el número de miembros de la primera y a
cinco el de las tres Comisiones restantes, cuando cuenten con bastante número
de hh∴ del grado tercero.
OBSERVACIÓN PRIMERA.— Si un Taller no contase con cinco Maestros
Masones para formar la Comisión de Justicia, ésta podría constituirse con tres,
pero se completará el número de cinco a medida que la Logia vaya admitiendo en
su seno a otros Maestros Masones.
OBSERVACIÓN SEGUNDA— De la Comisión de Beneficencia pueden
formar parte Aprendices y Compañeros, excepto para los cargos de Presidente y
Secretario.
SECCIÓN SEGUNDA
Comisión de Justicia
Art. 202.— La Comisión de Justicia, constituida en trabajos, es inviolable, y
sus deliberaciones son secretas.
El Presidente del Taller y los Vigilantes no pueden jamás formar parte de
esta Comisión.
A sus reuniones puede asistir el Orador para ejercer funciones fiscales, pero
no tendrá voto.
Los deberes y atribuciones de esta Comisión y el procedimiento que ha de
emplear en sus trabajos se señalan en este Reglamento.
SECCIÓN TERCERA
Comisión de Hacienda
Art. 203.— Esta Comisión celebra sus sesiones ordinarias en la primera
quincena de los meses de Enero, Abril, Julio y Octubre.
Tanto a las sesiones ordinarias como a las extraordinarias asiste el
Arquitecto Revisor, sin voto.
Art. 204.— Es de la facultad de esta Comisión:
Primero.— Procurar el aumento de ingresos en el Taller y vigilar todas las
operaciones del Tesoro y del Tronco de Beneficencia, a fin de que se apliquen
rigurosamente las determinaciones legales y los acuerdos adoptados por el Taller.
Segundo.— Emitir dictamen respecto de las cuentas del Tesoro y del Tronco
de Beneficencia en la primera quincena de los meses de Enero, Abril, Julio y
Octubre, cuyos balances suscribirá en unión del Arquitecto Revisor.
Tercero.— Confeccionar el presupuesto de ingresos y gastos ordinarios para
el año siguiente, presentándolo al Taller en la primera quincena del mes de
Diciembre.
38

Cuarto.— Examinar, cuantas veces lo considere conveniente o lo disponga el
Taller, los libros de Contabilidad del Tesoro y del Tronco de Beneficencia.
Quinto.— Firmar el “conforme” de los balances y libros de Contabilidad del
Tesoro y del Tronco de Beneficencia, siempre que se hallen de acuerdo con los
registros y datos aportados con la verdad.
Sexto.— Examinar, cuando lo estime oportuno o lo disponga el Taller, los
índices y registros del Archivo y de la Biblioteca, a fin de comprobar si existen los
documentos y libros en aquéllos enumerados.
Séptimo.— Proponer el aumento o disminución de gastos si lo creyera
conveniente.
Octavo.— Dar dictamen respecto de los ingresos o gastos extraordinarios
que el Taller propusiere, oponiéndose a los gastos que puedan comprometer el
equilibrio económico.
Noveno.— Informar sobre las proposiciones que afecten al Tesoro del Taller.
Décimo.— Indicar, al tratarse de trabajos extraordinarios, de banquetes y
otras fiestas masónicas, cuya realización exija gastos, la cantidad que a ello pueda
destinarse con arreglo a la existencia en Caja.
Decimoprimero.— Emitir su informe en todos los casos en que se solicite por
un miembro del Taller su separación temporal o definitiva del mismo.
Decimosegundo. — Emitir igualmente su informe cuando cesen en sus
cargos el Secretario, el Tesorero, el Arquitecto Revisor, el Limosnero u
Hospitalario, el Archivero-Bibliotecario o el Arquitecto del Templo.
Decimotercero.— Dar posesión de los intereses que se confían a los cargos
expresados en el párrafo anterior, levantando acta de dicha ejecución, en la que el
h∴ interesado expresará la conformidad con su firma.
Decimocuarto.- Evacuar las consultas que el Presidente del Taller le dirija
sobre cualquier asunto relacionado con la administración y fomento de la riqueza
del Taller mismo.
SECCIÓN CUARTA
Comisión de Beneficencia
Art. 205.— Esta Comisión celebra sus reuniones ordinarias cuando lo
disponga el Reglamento interior de cada Taller.
Tanto a las sesiones ordinarias como a las extraordinarias asisten el
Limosnero u Hospitalario y el Arquitecto Revisor, sin voto.
Art. 206.— Corresponde a esta Comisión:
Primero.— Dar dictamen sobre toda proposición o petición de socorro,
informándose de la necesidad de este, y reuniendo cuantos datos sean posibles
referentes a su justificación.
Segundo.- Proponer la cuantía de los socorros, teniendo en cuenta las
existencias en el fondo destinado a dicho objeto.
Tercero.— Informar respecto a las proposiciones que tiendan a aumentar los
recursos para fines benéficos.
Cuarto.— Cuidar de todas las fiestas de Beneficencia y colectas que se
verifiquen para el ejercicio de la caridad.
Quinto.— Auxiliar al h∴ Limosnero u Hospitalario en la distribución de los
socorros que acuerde el Taller.
39

Sexto.— Oponerse a que los fondos del Tronco de Beneficencia sean
dedicados a otros fines.
Séptimo.— Hacer las indagaciones que le encargue Presidente del Taller
respecto de las necesidades de los desgraciados.
SECCIÓN QUINTA
Comisión de Asientos generales
Art.207.— Corresponde a esta Comisión:
Primero.— Emitir dictamen sobre toda proposición que, no siendo de la
competencia de las Otras Comisiones permanentes, le envíe el Taller después
que éste la haya tomado en consideración.
Segundo.—Redactar el Reglamento interior del Taller.
Tercero.- informar respecto de cualquier trabajo instructivo presentado al
Taller por algún obrero del mismo.
Cuarto.— Hacer la corrección de estilo de todo documento o proposición
que, por su excepcional importancia, le encargue el Taller.
40

TITULO SEXTO
DE LA FUNDACIÓN DE NUEVOS TALLERES
CAPITULO PRIMERO
LOGIAS.—SU ORGANIZACIÓN
Art. 208.— Siete Masones provistos de títulos o certificados, de los cuales
tres posean, por lo menos el grado de Maestro, pueden crear un Taller Simbólico,
al que también se llama Logia.
Art. 209.— Este Taller así constituido se denomina Logia provisional, hasta
obtener de la Gran Logia Regional o del Gran Consejo Federal Simbólico, según
los casos, la Carta Constitutiva, y, como tal, elige Venerable Maestro, Primer
Vigilante, Segundo Vigilante, Orador, Secretario, Tesorero y un Primer Experto.
En el caso de no exceder de siete el número de masones que pretendan la
fundación de una Logia, el Tesorero ocupará en trabajos el puesto de Guarda-
Templo interno.
Art. 210.— Esta Logia adoptará un título distintivo ajeno a toda idea política o
religiosa determinada, procurando que no sea igual al adoptado por otro Taller de
la Federación.
Art. 210.— Una vez organizada, celebrará tres sesiones: la de constitución,
la de elecciones y la de instalación de Dignidades y Oficiales, levantando acta de
cada una de ellas.
Estas tres sesiones no podrán celebrase en el mismo DIA.
Art. 212.— Para pertenecer este Taller a la Federación del Grande Oriente
Español procederá a dirigir una solicitud a la Gran Logia Regional o al Gran
Consejo Federal Simbólico, según corresponda a una o a otro, a la cual se
acompañarán los siguientes documentos:
Primero.— Copia de las tres actas de las sesiones a que se refiere el articulo
anterior, autorizada cada una de ellas por las firmas de todos los hh∴ que
constituyan la Logia.
Segundo.— Cuadro Lógico, por duplicado, de todos sus miembros,
expresando sus nombres y apellidos profanos, nombre simbólico, naturaleza,
fecha de nacimiento, estado civil, profesión, residencia habitual, grado, situación
masónica y cargo en Logia.
Tercero.— Los títulos o diplomas y certificados de todos los obreros del
Taller, y si no son ni han sido del Grande Oriente Español, documentos que
acreditan su situación legal.
Cuarto.— Declaración de que acepta la Constitución del Grande Oriente
Español, sus Estatutos y Reglamentos generales, leyes y disposiciones generales
de la Gran Logia respectiva y del Gran Consejo Federal Simbólico.
Quinto.— Tres ejemplares del Reglamento interior del Taller con las
formalidades y prescripciones que señalan los artículos 47 y 48.
Sexto.— Declaración del Rito adoptado por el Taller.
Séptimo.— Declaración del sitio y días en que ha de celebrar sus sesiones y
dirección para la correspondencia.
Art. 213.— A la solicitud expresada en el artículo anterior acompañará el
importe de los derechos y precios señalados a los siguientes conceptos:
Por una Carta Constitutiva.
41

Por tres ejemplares de la Constitución.
Por tres ejemplares de los Estatutos y Reglamentos generales.
Por tres Rituales del grado de Aprendiz.
Por tres Rituales del grado de Compañero.
Por tres Rituales del grado de Maestro.
Por el canje de los títulos y certificados que necesiten este requisito.
Art. 214.— En el caso de no accederse a la constitución de la Logia, se
devolverán los títulos y las cantidades expresadas en los artículos 212 y 213.
Art. 215.— Durante el tiempo en que la Logia provisional se halle en
instancia no podrá iniciar profanos ni exaltar a los grados de Compañero y
Maestro sin previo permiso, para cada caso, de la autoridad jerárquica
correspondiente.
Art. 216.— Todos los masones que figuren en el Cuadro de Obreros de una
Logia provisional en instancia deberá proveerse de títulos o certificados de sus
grados respectivos.
Los que lo posean del Grande Oriente Español, por haber pertenecido a esta
Federación, podrán conservarlos, siempre que no se hallen incursos en el caso
quinto del artículo 11.
Los que poseyeren títulos o certificados de Potencias Masónicas irregulares
los canjearán por los de este Grande Oriente.
CAPITULO SEGUNDO
TRIÁNGULOS MASÓNICOS.--SU ORGANIZACIÓN
Art. 217.— Tres masones regulares, provistos de su correspondiente
documentación masónica personal, y de los cuales uno de ellos, por lo menos,
posea el grado de Maestro Masón, pueden constituir un Triángulo en cualquiera
localidad donde no exista Logia.
Estos Triángulos podrán depender de una de las Logias que radiquen dentro
de su provincia, o directamente de la Gran Logia Regional respectiva o del Gran
Consejo Federal Simbólico, según los casos, siendo potestativo de los mismos
Triángulos acordar de quien hayan de depender. (CONSTITUCIÓN, AR . 7º).
Art. 218.— Reunidos los masones que pretendan la organización de un
Triángulo, deben acordar:
Primero.—Solicitar de la Gran Logia Regional o del Gran Consejo Federal
Simbólico, según el lugar donde radiquen, directamente o por conducto de la Logia
de que deseen depender, la autorización correspondiente.
Segundo.— EL título distintivo del Triángulo, teniendo en cuenta lo prescrito
en los artículos 41 y 42 de estos Estatutos y Reglamentos generales.
Tercero.— Designar los hh∴ que hayan de desempeñar los cargos de
Presidente, Secretario y Tesorero.
La presidencia ha de ocuparla un h∴ que posea, por lo menos, el grado de
Maestro.
Art. 219.— La petición de auspicios deberá ser firmada por todos los hh∴
que pretendan la formación del Triángulo, y harán constar en ella:
Primero.— EL título distintivo del Triángulo.
Segundo.— La adopción del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.
42

Tercero.— Declaración de obedecer la Constitución del Grande Oriente
Español, sus Estatutos y Reglamentos generales, leyes, decretos y demás
disposiciones.
Art. 220.— A la petición expresada en el articulo anterior deberá
acompañarse:
Primero.— Los títulos o certificados de los hermanos que no procedan del
Grande Oriente Español y una relación de los procedentes de él, indicando la
fecha de expedición del documento y su número de Registro.
Segundo.— Lista duplicada de los hh∴ que compongan el Triángulo,
expresando sus nombres y apellidos profanos, nombres simbólicos, naturaleza,
fecha de nacimiento, estado civil, profesión, residencia habitual, Logia de
procedencia, grado y cargo en el Triángulo.
Tercero.— EL importe del precio señalado al Permiso o Carta Constitutiva y a
un ejemplar de la Constitución, de cada uno de los Rituales Simbólicos y de los
Estatutos y Reglamentos generales.
Art. 221.— Los Triángulos contribuirán con arreglo a la vigente ley de
Tributación.
Art. 222.— Un Triángulo no podrá iniciar a profanos, ni conferir los grados de
Compañero y Maestro hasta que posea el Permiso que le acredite como
legalmente constituido.
interior
Art. 223.— Los Triángulos que se constituyan dependientes de una Logia
están obligados a cumplir con ella todos los requisitos y obligaciones señaladas en
este capítulo y además, las condiciones que exija el Reglamento
interior de que dependan.
Art. 224.— Tan pronto como un Triángulo cuente con siete miembros, de los
cuales tres posean, por lo menos, el grado de Maestro, deberá proceder a
constituirse en Logia.
Para ello, cumplirá lo prescrito en los artículos 208 al 214 inclusive de estos
Estatutos y Reglamentos.
Art. 225.— Todo Maestro Masón del Grande Oriente Español que desee
formar un Triángulo y no cuente en la localidad de su residencia con el número
necesario de hh∴, lo pondrá en conocimiento de la Gran Logia de que dependa, o
del Gran Consejo Federal Simbólico, si de él dependiera directamente, y el Alto
Cuerpo, a quien corresponda determinará la forma y condiciones de contribuir a la
realización de tan laudable propósito.
43

TITULO SÉPTIMO
REGULARIZACIÓN DE TALLERES
CAPITULO ÚNICO
Art. 226.— Los Talleres irregulares, ya sean independientes o pertenezcan a
una Potencia Masónica irregular, podrán obtener su regularización o admisión en
el Grande Oriente Español, si lo solicitan en forma legal.
Art. 227.— Los Talleres irregulares que pretendan su regularización enviarán
a la Gran Logia Regional respectiva o al Gran Consejo Federal Simbólico, según
los casos, los siguientes documentos:
Primero.- Solicitud de ingreso firmada por la mayoría de los hh∴ del Taller,
en la que harán constar la promesa de someterse a la obediencia del Grande
Oriente Español y acatar y cumplir su Constitución, sus Estatutos y Reglamentos
Generales, Leyes, Decretos y demás disposiciones.
Segundo.- Certificación del acta de la sesión en que tal acuerdo se haya
tomado por unanimidad o por mayoría de votos y previa convocatoria especial.
Tercero.— La Carta Constitutiva del Taller, si la tuvieren, o manifestación
solemne de no tenerla, y las causas de ello.
Cuarto.— Tres ejemplares del Reglamento interior del Taller, autorizado con
las firmas y rúbricas de las tres Luces, del Orador y del Secretario.
Quinto.— Cuadro de los Obreros del Taller, expresando sus nombres y
apellidos profanos, nombres simbólicos, naturaleza, fecha de nacimiento, estado
civil, profesión, residencia habitual, grado y cargo en el Taller.
Sexto.— Los títulos o diplomas y certificados de todos los Obreros del Taller.
Art. 228.— A los documentos indicados en el articulo anterior deberán
acompañarse los derechos y precios señalados por los siguientes conceptos:
Por una Carta Constitutiva, o por su canje, si el Taller tuviere tal documento.
Por tres ejemplares de la Constitución.
Por tres ejemplares de los Estatutos y Reglamentos generales.
Por canje de los títulos o diplomas y certificados de los obreros.
Art. 229.—En el caso de no accederse a la admisión del Taller, se
devolverán los títulos de los obreros, la Carta Constitutiva irregular del Taller y las
cantidades que se expresan en el artículo 228.
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TITULO OCTAVO
FUSIÓN, REORGANIZACIÓN Y CAMBIO DE
NOMBRE DE LOS TALLERES
CAPITULO PRIMERO
DEL ASUNTO EN GENERAL
Art. 230.— Toda fusión, reorganización y cambio de nombre de los Talleres,
da lugar, previa la aprobación del Poder Ejecutivo correspondiente, a la expedición
de nueva Carta Constitutiva.
Art. 231.—La fusión, reorganización y cambio de nombre de los Talleres sólo
puede verificarse residiendo los resultantes en la misma localidad que los
originarios.
Art. 232.— El Taller resultante por fusión de otros o el que cambie de
nombre, escogerá el nuevo titulo distintivo, teniendo presente lo preceptuado en
los artículos 41 y 42 de estos Estatutos y Reglamentos generales.
Art. 233.— La Cartas Constitutivas expedidas para los Talleres
reorganizados, fusionados o que simplemente cambien de título distintivo, llevarán
expreso el motivo que las determina y la antigüedad del Taller originario.
La antigüedad del Taller resultante por fusión de otros será la del más
antiguo de los que se refundan.
CAPITULO SEGUNDO
DE LA FUSlÓN DE TALLERES
Art. 234.— Para que dos o más Logias pertenecientes al Grande Oriente
Español se fusione en una sola debe tomarse el acuerdo en cada una de ellas
por las dos terceras partes de los votantes, en sesión convocada especialmente a
este objeto, acordándose el nombre que ha de llevar el Taller único.
El acta de esta sesión deberá ser firmada por todos los hh∴asistentes a ella.
Art. 235.— Cada uno de los Talleres que pretendan fusionarse deberá enviar
a la Gran Logia Regional o al Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos,
los documentos siguientes:
Primero.— La petición correspondiente firmada por las tres Luces del Taller,
el Orador y el Secretario.
Segundo.— Copia del acta de la sesión a que se refiere e! artículo anterior,
autorizada también por las tres Luces del Taller, el Orador y el Secretario.
Tercero.— La Carta Constitutiva.
Cuarto.— Cuadro de los obreros activos del Taller en el día que se tomó el
acuerdo de la fusión, expresando los nombres y apellidos profanos, nombres
simbólicos, grado y cargo en el Taller.
45

Art. 236.— El Taller más antiguo de los que pretendan la fusión acompañará
a los documentos expresados en el articulo anterior el importe de los derechos
establecidos por canje de Carta Constitutiva.
Art. 237.— Una vez aprobada por el Poder Ejecutivo correspondiente la
fusión de dos o más Talleres, el nuevo Taller resultante procederá a la elección de
las Dignidades, Oficiales y Comisiones, remitiendo copia del acta de esta sesión a
la Gran Secretaria general de la Gran Logia o del Gran Consejo Federal
Simbólico, según corresponda.
Después de cumplido este requisito se expide la Carta Constitutiva.
Art. 238.— Los Tesoros de los Talleres fusionados, sus Troncos de
Beneficencia, sus Archivos y cuantos intereses, utensilios y enseres pertenezcan a
cada uno de ellos pasan a ser propiedad del nuevo Taller resultante, el que los
confiará a los funcionarios respectivos elegidos en éste.
Art. 239.— Un Taller resultante de la fusión de otros puede regirse por el
Reglamento interior de uno cualquiera de ellos.
Si acordase adoptar nuevo Reglamento propio, se regirá interinamente por el
del Taller más antiguo hasta la aprobación del definitivo, sometiendo éste a lo
prescrito en los artículos 47, 48 y 50 de estos Estatutos y Reglamentos generales.
De la decisión que tome el nuevo Taller sobre este asunto dará cuenta a la
autoridad jerárquica superior, o sea la Gran Logia o al Gran Consejo Federal
Simbólico, según los casos.
Art. 240.— Todo Taller que resulte de la fusión de otros archivará, mediante
inventario, los libros y registros de cada uno de ellos que se determinan en el
artículo 53, proveyéndose de otros nuevos.
Los libros de contabilidad, tanto del Tesoro como del Tronco de
Beneficencia, se abrirán, sentando en ellos el resultado total de los balances
generales hechos en cada uno de los Talleres fusionados.
Art. 241.— Las obligaciones de carácter económico adquiridas por cada uno
de los Talleres fusionados han de ser reconocidas como propias por el nuevo
Taller que resulte de la fusión.
Art. 242.— El Taller a quien se expida nueva Carta Constitutiva por fusión de
otros debe ser instalado con arreglo a lo prescrito para todo nuevo Taller.
CAPITULO TERCERO
DE LA REORGANIZACIÓN DE TALLERES
Art. 243.— Todo Taller que haya abatido Columnas puede reorganizarse
siempre que lo soliciten siete masones que reúnan las condiciones y requisitos
expresados en el artículo 208.
Art. 244.— Por ningún concepto pueden reorganizarse los Talleres que
hayan sido dados de baja en la Columna Federal por fusión con otro u otros del
Grande Oriente Español.
Art. 245.— Para reorganizar un Taller han de cumplirse exactamente las
mismas prescripciones señaladas para la creación de Talleres en los capítulos I y
II del título VI de estos Estatutos y Reglamentos generales.
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Art. 246.— La Carta Constitutiva que corresponda a un Taller legalmente
reorganizado se expedirá en concepto de canje, satisfaciéndose por ella los
derechos señalados a dicho concepto.
Art. 247.— A todo Taller reorganizado el Poder Ejecutivo correspondiente le
hará entrega de los libros, registros, expediente y papeles que figuren en el Gran
Archivo de la Federación y que procedan del Archivo particular del Taller
originario.
Esto se verificará al instalarse el Taller reorganizado y mediante recibo, que
firmarán las tres Luces, el Orador y el Secretario instalador.
Art. 248.— La instalación de los Talleres reorganizados se verificará con
arreglo a lo prescrito para los de nueva creación.
CAPITULO CUARTO
EL CAMBIO DE TITULO DISTINTIVO DE LOS TALLERES
Art. 249.— Para que un Taller pueda cambiar de titulo distintivo es necesario
que lo acuerden las dos terceras partes de sus miembros activos, en sesión
convocada especialmente a este objeto.
El acta de esta sesión deberá ser firmada por todo. los hh∴ asistentes a ella.
Art. 250.— El Taller que pretenda cambiar de titulo distintivo enviará a la
Gran Logia Regional o al Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos, los
documentos siguientes:
Primero.— Solicitud de nueva Carta Constitutiva expresando el nuevo titulo
distintivo acordado. Esta petición deberá ser firmada y rubricada por todos los
obreros que hubieren aprobado el cambio.
Segundo.—Copia del acta de la sesión en que se haya tomado el acuerdo a
que se refiere el art. 249, autorizada por las tres Luces del Taller, por el Orador y
por el Secretario.
Tercero.—La Carta Constitutiva.
A estos documentos se acompañará el importe de los derechos establecidos
por el canje de lo expresado en el párrafo anterior.
Art. 251.—Si un Taller cambiase de título distintivo por segunda vez abonará
por la Carta Constitutiva los derechos señalados a las expedidas para Talleres de
nueva creación.
Se exceptúa el caso en que el cambio de titulo se verifique por fusión del
Taller con otro u otros del Grande Oriente.
Art. 252.— Ningún Taller puede cambiar su título, distintivo durante el año
siguiente al de su instalación en el Oriente, ni al siguiente en que ya hubiese
efectuado otra vez el cambio.
47

TITULO NOVENO
INSTALACIÓN DE TALLERES CAPITULO PRIMERO
DISPOSICIONES GENERALES SOBRE LA INSTALACIÓN DE TALLERES
Art. 253.— Un Taller no puede considerarse perfectamente establecido, y
todo en él es provisional, mientras no posea la Carta Constitutiva y no esté
formalmente instalado.
Art. 254.— La instalación de los Talleres se verifica por uno o varios
comisionados por la Gran Logia Regional respectiva o por el Gran Consejo
Federal Simbólico.
El número de comisionados instaladores de un Taller no podrá exceder de
siete.
Art. 255.— Los nombramientos de comisionados instaladores han de recaer
en obreros activos del Grande Oriente Español.
Además, dichos comisionados han de ser, por lo menos, Maestros Masones.
Art. 256.— Cuando a la instalación de un Taller, por excesiva distancia de la
Sede Federal u otra cualquiera causa, no pueda asistir comisión directa del Poder
Ejecutivo correspondiente, éste delegará en tres miembros de distinto Taller de la
misma localidad, si lo hubiere, siempre que reúnan las condiciones expresadas en
el articulo anterior.
Art. 257.— Si las circunstancias no permitiesen la aplicación del articulo
anterior, los Talleres podrán ser autorizados para instalarse a si propios.
Dicha autorización sólo puede concederla el Poder Ejecutivo
correspondiente.
En este caso, los comisionados instaladores deberán ser el Presidente y los
dos Vigilantes del Taller, quienes serán reemplazados en sus respectivos cargos
durante el juramento o promesa de cada uno de ellos.
Art. 258— En los Triángulos no se efectúa instalación por ser Talleres
imperfectos.
Art. 259.— El acto solemne de la instalación de los Talleres se verifica en la
Cámara inferior del Taller, es decir, en el primero de los grados en que trabaje.
CAPITULO SEGUNDO
DE LA INSTALACIÓN DE LOGIA
Art. 260.— Señalado de antemano el día y hora de instalación, la Logia se
reunirá en tenida magna, previamente citada al efecto.
Art. 261.— El Venerable Maestro electo del Taller abrirá los trabajos según
Rito, y después de aprobada el acta de la tenida anterior, hará introducir en el
Templo a los Visitadores y Diputaciones de otros Talleres con los honores y
formalidades de costumbre y notificará a la Asamblea el objeto de la reunión.
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Al presentarse en el vestíbulo la Comisión instaladora, el Venerable Maestro
designará un Triángulo que, provisto de espada, debe acompañarla en su ingreso
al Templo.
La Comisión entrará solemnemente bajo la Bóveda de Acero, batiendo
marcha los Malletes del Taller.
El Presidente de la Comisión subirá a Oriente, haciéndose cargo del Mallete
del Venerable Maestro mientras los demás comisionados permanecerán al orden
en la Columna del Mediodía.
Acto seguido, el Presidente instalador designará los comisionados para
ocupar las Vigilancias y cargos que deban ser relevados. Hecho esto, mandará
tomar asiento, verificándolo cada Dignidad u Oficial a la derecha del que lo haya
sustituido.
Art. 262.— A seguida el Presidente, auxiliado por las Vigilancias, se
cerciorará de la regularidad de todos los masones que estén en el Templo,
teniendo a la vista el Libro de Presencia.
Art. 263.—Inmediatamente por el Secretario se dará lectura:
Primero.— De los poderes de los comisionados.
Segundo.— Del Decreto de admisión del Taller en la Columna Federal del
Grande Oriente Español.
Tercero.— De la Carta Constitutiva.
Cuarto.— Del Cuadro lógico del Taller.
Art. 264.— Cumplido el articulo anterior, el Presidente se asegurará de la
legalidad en las elecciones de Dignidades y Oficiales de primera clase del Taller.
Para ello hará cubrir el Templo, con los honores debidos, al Venerable
Maestro electo. Después concederá la palabra sobre la elección de este cargo. Si
reinase silencio, no se hiciera protesta alguna grave contra dicha elección, el
Presidente le hará conducir nuevamente al Templo, ordenándole permanezca
entre Columnas. Entonces le preguntará si se halla dispuesto a prestar el
juramento o promesa de su cargo.
Contestado afirmativamente, y estando todos los presentes en pie y al orden
de Aprendiz, el Venerable Maestro electo se acercará al Ara, y ante ella, con la
mano izquierda al orden y la derecha sobre el libro de la Ley, prestará el juramento
o promesa siguiente:
“Juro o prometo por mi honor y fe de caballero cumplir y hacer cumplir la
Constitución del Grande Oriente Español, sus Estatutos y Reglamentos generales,
leyes, decretos y demás disposiciones y no emplear la autoridad recibida de mis
hh∴ más que para el bien general de la Orden y de este Taller en particular.
Prometo igualmente entregar la Carta Constitutiva a mi sucesor o a la Gran
Logia Regional o al Gran Consejo Federal Simbólico, según sea una u otro el
Poder Ejecutivo inmediato, en el caso de que me la pidiere”.
Prestada esta promesa, el Venerable Maestro electo pasará a ocupar
nuevamente su puesto, a la derecha de la Presidencia.
Art. 265.— Acto seguido, y con las mismas formalidades expresadas en el
artículo anterior, los demás obreros del nuevo Taller prestarán el juramento citado,
omitiendo su segundo párrafo. El orden en que lo verificaran será el siguiente:
Primero.— Los dos Vigilantes.
Segundo.- Los Oficiales de primera clase. (Orador, Secretario, Tesorero y
Primer Experto).
Tercero.—El Orador a nombre de los restantes miembros del Taller.
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Art. 266.—Hecho lo antes prescrito, el Presidente instalador, desde Oriente,
llevando la espada en la mano izquierda y el Mallete en la derecha, preguntará:
“Pueblo masónico, ¿juráis o prometéis fidelidad al Grande Oriente Español y
obedecer su Constitución, Estatutos, Reglamentos, sus leyes, decretos y
disposiciones generales?”.
Todos contestarán con el signo de costumbre y con las palabras “juramos o
prometemos”.
Art.267.— Después el Presidente invitará al Maestro de Ceremonias o al
Experto para que presente uno tras otro los libros de actas de las Cámaras de
Aprendiz, Compañero y Maestro.
Al pie de la certificación extendida al principio de cada uno de dichos libros,
el Presidente y los demás comisionados suscribirán el visto bueno
correspondiente expresando que lo hacen en nombre del Gran Consejo Federal
Simbólico e indicando la fecha (articulo 52).
Art. 268.— A continuación, el Presidente anuncia en las Columnas, por
medio de los Vigilantes, que va a proceder a la instalación del Taller, lo cual hace,
estando todos en pie y al orden con la siguiente fórmula:
“A L ∴G∴D∴G∴A∴D∴U∴— En nombre del Grande Oriente Español y de
la Gran Logia Regional (la que sea), en virtud de mis poderes, declaro legalmente
constituida e instalada la Resp∴L∴ .............(1), con el número .............(2) de la
Federación en los Valles de .......(3).”
Al instante, por orden del Presidente, el Maestro de Ceremonias hace la
proclamación entre Columnas.
Entonces el Presidente entrega la Carta Constitutiva al Venerable Maestro
electo, y éste la coloca en el Ara.
Art. 269.— Proclamada la instalación, se formará la cadena mística, y el
Presidente comunicará solamente a los miembros activos del Taller la palabra
anual y la semestral.
Art. 270.— Deshecha la cadena mística, el Presidente ordenará al Secretario
que dé lectura a los nombres del cuadro lógico, y a medida que los vaya
designando pasarán los interesados al Altar de la Presidencia, donde firmarán el
Acta duplicada que ha de contener las fórmulas del juramento y la certificación de
haberse instalado solemnemente el Taller.
Al pie de las firmas de todos los obreros activos presentes se extenderá el
visto bueno de la Comisión instaladora, que será suscrito por los comisionados.
Uno de los ejemplares de dicha acta se envía por los comisionados al Gran
Consejo Federal Simbólico, y el otro ejemplar se guarda en el Archivo del Taller.
Art. 271 .- lnmediatamente, estando todos en pie y al orden, tomarán sus
Malletes, en la forma acostumbrada, las Dignidades del Taller, y ocuparán sus
respectivos puestos los Oficiales sustituidos.
Entonces, todos los comisionados se colocan en Oriente, a derecha e
izquierda del Venerable Maestro.
Art. 272. — Por último, el Venerable Maestro concederá la palabra para
asuntos alusivos al acto, y terminados los discursos, se correrá el Saco de
Beneficencia cerrándose los trabajos con el ceremonial de Rito.
(1) Nombre o titulo del Taller.
(2) Número de orden en la Columna Federal de Talleres activos.
(3) Nombre de la localidad y de la provincia donde radique la Logia.
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TITULO DÉCIMO
DE LAS ELECCIONES DE CARGOS Y COMISIONES EN LOS TALLERES
CAPITULO PRIMERO
ÉPOCA DE LAS ELECCIONES
Art. 273.— Las Logias están obligadas a proceder cada año a las elecciones
generales de sus Dignidades y Oficiales en todo el mes de Diciembre, época del
solsticio de invierno.
4 Art. 274.— Las Logias que se hubiesen instalado después del 30 de junio,
en vez de efectuar nuevas elecciones en la fecha indicada en el Art. 273,
procederán a confirmar las que verificaron anteriormente.
Esta disposición sólo se refiere a los Talleres instalados en el Grande Oriente
Español por nueva creación, por reorganización o por fusión con otros.
Art. 275.— Las Logias procederán a elegir las Comisiones permanentes del
Taller en la primera quincena del mes de Enero de cada año.
CAPITULO SEGUNDO
DEL DERECHO DE ELEGIBILIDAD Y DE ELECCIÓN PARA LOS CARGOS
Art. 276.— Son electores todos los miembros activos del Taller que se hallen
en el pleno uso de sus derechos masónicos.
Art. 277.—No pueden ejercer el derecho de sufragio:
Primero.— Los obreros que adeuden más de tres Cotizaciones mensuales al
Tesoro del Taller.
Segundo.- Los suspendidos de derechos masónicos ya sea preventivamente
o por sentencia.
Art. 278.— Para ser elegido Presidente de un Taller es indispensable:
Primero.— Poseer por lo menos, el grado más alto que confiera el Taller,
teniendo en dicho grado la antigüedad mínima de dos años.
Segundo.- Ser miembro activo del Taller, al menos desde un año antes.
Tercero.- Estar domiciliado en la localidad donde radique el Taller.
Cuarto.- Hallarse a plomo con el Tesoro del mismo.
Art. 279.— Para los demás cargos son elegibles todos los que posean, por lo
menos, el grado más alto en que trabaje el Taller, reuniendo, además, las
condiciones siguientes:
Primera.— Ser miembro activo del Taller con tres meses de anterioridad.
Segunda— Estar domiciliado en la misma localidad donde trabaje el Taller.
Tercera.— Hallarse a plomo con El Tesoro del mismo, o no adeudar más de
tres cotizaciones mensuales.
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Art. 280.— En el caso de no haber en un Taller numero suficiente de obreros
en condiciones de elegibilidad señaladas en el articulo anterior, se observará lo
prescrito en los artículos 84, 85 y 86.
Art. 281.— Cuando en un Taller la falta de personal exija elegir obreros de
grado inferior para algún cargo, o como adjuntos, esto no autoriza para que los
elegidos en dichas condiciones tomen parte en trabajos de grados más elevados
que el suyo.
Art. 282.— No Son elegibles:
Primero.— Los suspendidos de derechos masónicos, ya sea
preventivamente o por sentencia.
Segundo.— Los residentes fuera de la localidad donde radique el Taller.
CAPITULO TERCERO
DE LAS INCOMPATIBILIDADES DE CARGOS
Art. 283.—Todo masón que desempeñe la Presidencia de un Taller no puede
ser Presidente de otro sino en los casos de sustitución reglamentaria puramente
accidentales.
Art. 284.— Hay incompatibilidad entre las funciones de Presidente de un
Taller y cualquier otro cargo del mismo.
Art. 285.— Son también incompatibles los cargo siguientes:
Primero.— Entre sí los siete primeros enumerados en los artículos 83, 88 y
94.
Segundo.— EL de Vigilante con el de Oficial de segunda clase. Sin embargo,
en caso de necesidad, uno de los Vigilantes puede desempeñar el cargo de
Archivero-Bibliotecario.
Tercero.— El Orador con todos los demás del Taller.
Cuarto.— El de Secretario Guarda-Sellos con cualquiera otro, exceptuando
el de Archivero-Bibliotecario y el de Maestro de Banquetes.
Quinto.— El de Tesorero, el de Limosnero u Hospitalario y el de Archivero-
Bibliotecario con el de Arquitecto Revisor.
Art. 286.— Con relación a las Comisiones permanentes son incompatibles
los cargos siguientes:
Primero.— EL de Vigilante con otro cargo inferior al de Presidente de una
Comisión, exceptuando la de Justicia.
Segundo.— El de Presidente de las Comisiones entre si.
Tercero.— El de Orador con el de miembro de toda Comisión.
Cuarto.— EL de Tesorero, el de Secretario, el de Limosnero u Hospitalario, el
de Archivero-Bibliotecario y el de Arquitecto Revisor con el de miembro de la
Comisión de Hacienda.
Quinto.— EL de Limosnero u Hospitalario con el de miembro de la Comisión
de Beneficencia.
Sexto.— El de Presidente de una Comisión con el de miembro de cualquiera
otra.
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CAPITULO CUARTO
DEL MODO Y FORMA DE VERIFICAR LAS ELECCIONES
SECCIÓN PRIMERA
DEL PROCEDIMIENTO EN LAS LOGIAS
Art. 287.— Las elecciones de Dignidades y Oficiales en las Logias se
efectuarán en tenida del grado de Aprendiz, señalando con dos días de antelación
la fecha y hora.
Esta tenida ha de ser exclusivamente dedicada a las elecciones, convocando
al efecto a todos los miembros activos de la Logia, y precisamente por escrito.
Art. 288.— La tenida de elecciones dará principio con las formalidades de
Rito. Leída el acta de la anterior, el Venerable Maestro anunciará el objeto de los
trabajos.
Inmediatamente el Orador pronuncia un breve discurso, haciendo
consideraciones sobre la importancia del acto y sobre la escrupulosidad que debe
observarse en los nombramientos.
A seguida el Experto, invitado por el Venerable, dispone una mesa en medio
del Taller con una urna y recado de escribir y permanece al lado de ella, armado
de espada, cuidando de impedir cualquier desorden o irregularidad.
Art. 289.— EL Venerable en ejercicio anuncia que va a procederse a la
elección del nuevo Venerable.
Todos los aprendices y Compañeros cubren el Templo, quedando reunida la
Cámara del Medio.
Los Maestros designan entonces la terna que ha de presentarse a la Cámara
de Aprendiz.
Art. 290.—La designación de la terna se verifica por votación secreta. Cada
uno de los Maestros va al medio del Templo y escribe tres nombres en una
papeleta, la cual deposita en la urna.
Así que todos hayan depositado su voto, se hace el escrutinio, y los tres
nombres que hayan obtenido mayor número de sufragios constituirán la terna,
significando esta candidatura la que los Maestros de la Logia están obligados
voluntariamente a sostener.
Art. 291.— Si resultasen con igual número de votos dos nombres, se
procederá a elegir nuevamente por papeletas uno de estos nombres, y el de
mayor número de votos precederá en la terna al otro.
Si aún así resultase empate, la suerte decidirá el que haya de preceder de
los dos empatados.
Art. 292.—Inmediatamente de elegida la terna, se cierran los trabajos de la
Cámara del Medio, y se da entrada a los Aprendices y Compañeros.
El Orador lee en alta voz los nombres de los tres candidatos, expresando el
número de orden que a cada uno corresponde en la terna.
A continuación, el Secretario da lectura al cuadro de los miembros activos
electores y al de los Maestros elegibles. Acto seguido, se procede a la votación.
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Art. 293.— En la votación formarán parte todos los electores.
Art. 294.— El acto de la votación se sujeta al procedimiento siguiente:
El Segundo Vigilante llamará, uno a uno, a los obreros de su Columna, por el
orden en que estuvieron sentados. Cada uno de éstos va al medio del Templo,
escribe un nombre en la papeleta y la deposita en la urna, a la vista del Vigilante,
diciendo éste en alta voz: “El hermano Fulano, vota” y él lo hace el último,
anunciando al Venerable Maestro que los obreros de la Columna Norte han
votado.
Después hace lo mismo el Primer Vigilante en su Columna, y cuando éste
haya depositado su voto, avisará el Venerable que ha votado la Columna del
Mediodía.
A seguida, el Venerable Maestro va designando a los hh∴ que se sienta en
Oriente, los cuales depositan sus sufragios en la misma forma prevenida para los
obreros de las Columnas, anunciando aquél en alta voz al h∴ que vote.
Cuando todos, menos el Venerable, hayan votado, el Secretario hará por tres
veces, con un intervalo prudencial, la siguiente pregunta: "¿Hay algún hermano
que no haya votado?”; y seguidamente dirá también en alta voz “Vota el Venerable
Maestro”.
Éste depositará su papeleta en la urna, y dirá al Taller: “Queda cerrada la
votación y se procede al escrutinio.
Verificado y comprobado éste, el Secretario proclamará en alta voz el
numero de electores que hayan tomado parte en la vocación y el número de votos
que corresponda a cada candidato.
Si del escrutinio resultare alguno elegido conforme a ley, el Venerable dirá:
“Queda elegido para el cargo tal el hermano N.”
Este mismo procedimiento se empleará siempre en cualquiera votación por
papeletas.
El elector puede votar a uno de los Maestros de la terna o a otro cualquiera
del Taller, siempre que sea elegible.
Art. 295.— Verificado el escrutinio, será electo el que obtenga las dos
terceras partes de los votos emitidos.
Si no resultase así, se suspenderán los trabajos por diez minutos, y
reanudados éstos, se repetirá la votación en la misma forma expresada en el
artículo anterior, y entonces será electo el que obtenga simple mayoría de votos.
Cuando en esta segunda votación resultan empate, será electo el que decida
la suerte entre los dos que hubiesen obtenido igual número de votos.
Art. 296.— Hecha y proclamada la elección de nuevo Venerable, se
procederá a verificar las tres siguientes elecciones:
Primera.- La de Vigilantes.
Segunda.- La de Orador, Secretario, Guarda-sellos, Tesorero, Primer Experto
y Limosnero u Hospitalario.
Tercera.— La de los restantes Oficiales del Taller.
Art. 297.— Cada una de las dos primeras elecciones indicadas en el artículo
anterior se efectuará por papeletas, que se depositarán en la urna, escribiendo en
ellas el elector tantos nombres como cargos comprenda la elección, indicando
claramente el nombre que corresponde a cada cargo.
La elección de los Oficiales comprendidos en el caso tercero del artículo
anterior, puede hacerse mediante candidatura que presente una Comisión
nominadora designada por el Taller, haciéndose la votación por el signo ordinario
o de costumbre.
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En todos estos casos será electo el que obtenga simple mayoría de votos.
Art. 298.— Los empates que resultaren en las elecciones de los cargos
expresados en el artículo 296 se resolverán sometiendo los empatados a nueva
votación por esferas.
Si a pesar de esta segunda votación resultara empate, la suerte decidirá en
cada caso.
Art. 299.— Todo escrutinio en que el número de papeletas sea mayor o
menor que el de votantes, será declarado nulo. Entonces se verifica nueva
votación.
Art. 300.— En todos los casos los votos en blanco se sumarán a los de la
mayoría, si la hubiere. Esta suma determina el resultado de la votación.
Art. 301.— El resultado de cada votación se escribe y comprueba
ordenadamente por dos Secretarios escrutadores, que el Presidente debe elegir
siempre entre los miembros activos de la Logia.
El escrutinio se hace en la mesa del Orador. Este lee las papeletas en alta
voz, y el Secretario del Taller va anotando el resultado.
Si terminada la lectura concuerdan las anotaciones del Secretario del Taller
con las de los Secretarios escrutadores, se declara válido el escrutinio.
Art. 302.— En la tenidas de elección de cargos, una vez cumplido el objeto
de su convocatoria, el Secretario del Taller da lectura al borrador de los trabajos, e
inmediatamente se circula el Saco de Beneficencia, cerrándose los trabajos con
las formalidades de Rito.
Art. 303.— La elección de Comisiones permanentes se efectuará sometiendo
a la aprobación del Taller la candidatura que forme una Comisión nominadora
designada por el mismo.
CAPITULO QUINTO
DE LAS VACANTES Y MODO DE CUBRIRLAS
Art. 304— Las vacantes de cargos que ocurran en los Talleres se cubrirán
del modo siguiente:
Primero.—Si vacaren los cargos de Presidente, Primer Vigilante y Primer
Experto en los seis primeros meses siguientes al de las elecciones generales, se
procederá a la elección parcial del cargo vacante.
Segundo.— Si los cargos expresados en el párrafo anterior quedaren
vacantes en el segundo semestre, se cubrirán reemplazándolos por orden
jerárquico: la Presidencia será ocupada por el Primer Vigilante, a quien sustituirá
el Segundo, y a éste el Experto. Si hubiere un Segundo Experto, éste reemplazará
al Primero.
Tercero.- Todas las demás vacantes de cargos sin excepción se cubrirán
procediendo a elecciones parciales.
Cuarto.- Si las vacantes a que se refiere el párrafo anterior ocurrieran en el
último mes del año masónico de ejercicio, se cubrirán interinamente por
designación del Presidente del Taller.
Art. 305 .— Las elecciones parciales en los Talleres han de verificarse con
las mismas formalidades que las elecciones generales.
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Art. 306.— De cualquier vacante que ocurra en los Talleres y de las
elecciones parciales que éstos verifiquen, se dará cuenta al Gran Consejo Federal
Simbólico.
Art. 307.— Cuando se declare la invalidación de las elecciones generales de
un Taller, los antiguos Dignatarios y Oficiales conservarán sus funciones
provisionalmente hasta que se proceda a nuevas elecciones, que deberán
celebrarse a la mayor brevedad posible.
Art. 308.— Si un Dignatario u Oficial nuevamente electo no asiste al acto de
instalación y deja pasar tres sesiones ordinarias sin presentarse a prestar promesa
y tomar posesión, o sin excusarse debida y justificadamente, se considerará como
vacante el cargo para que fue elegido.
Lo mismo se observará respecto de los hh.. que compongan las Comisiones
permanentes.
CAPITULO SEXTO
DE LA INSTALACIÓN DE DIGNIDADES Y OFICIALES
Art. 309.— La instalación de cargos ha de verificarse con toda solemnidad en
la tenida siguiente a la de elecciones generales, en la Cámara inferior en que
trabaje el Taller y previa citación al efecto.
Art. 310.— El Presidente nuevamente elegido es instalado por su antecesor,
y en ausencia de éste, por el que le siga en el orden jerárquico.
Inmediatamente después de su instalación, el nuevo Presidente instala en
sus cargos a los demás Dignatarios y Oficiales del Taller.
Art. 311.— En la tenida de instalación, el Presidente antecesor del electo, o
el que haga sus veces abrirá los trabajos conforme a Rito. Leída y aprobada el
acta de la anterior, hará introducir en el Templo a los Visitadores y Diputaciones de
otros Talleres con los honores y formalidades de costumbre, y anunciará en las
Columnas, por medio de los Vigilantes, que se va a proceder a la instalación de
las Dignidades y Oficiales del Taller.
Inmediatamente hará cubrir el Templo al Presidente electo. Después
concederá la palabra sobre la elección de ese cargo. Si reinase silencio, o no se
hiciera ninguna protesta grave contra dicha elección, el Presidente electo será
conducido nuevamente al Templo, acompañado de un triángulo armado de
espadas, y permanecerá entre Columnas. Entonces el Presidente en ejercicio le
preguntará si se halla dispuesto a prestar el juramento o promesa del cargo para
el que ha sido elegido.
Contestando afirmativamente, y estando todos los presentes en pie y al
orden que corresponda, el Presidente electo se acercará al Ara; y ante ella, con la
mano izquierda al orden y la derecha sobre el Libro de la Ley, prestará el
juramento o promesa siguiente:
“A L∴G∴D∴G∴A∴D∴U∴ — En su nombre, bajo los auspicios del Grande
Oriente Español y a fe de masón, juro, o, prometo, observar fielmente los deberes
de mi cargo y no faltar jamás a los trabajos cuya dirección se me confía, excepto
en caso de obstáculo insuperable.
Juro o prometo igualmente cumplir y hacer cumplir la Constitución del
Grande Oriente, sus Estatutos y Reglamentos generales, leyes y disposiciones,
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como asimismo las de la Gran Logia a que pertenezco, y el Reglamento particular
de este Respetable Taller.”
A seguida el Maestro de Ceremonias hace entre Columnas la proclamación
del nuevo Presidente.
Art. 312.— Prestada la anterior promesa y hecha la proclamación, el
Presidente en ejercicio le coloca al proclamado la joya dé su cargo, dándole el
triple abrazo fraternal. Finalmente, le entrega el Mallete, diciéndole:
“Este Mallete, símbolo de la autoridad que recibís de los hh∴, os servirá
para hacer cumplir vuestras órdenes; procurad con amor que vuestros hh∴ las
acepten y acordaos que sois tan sólo el primero entre vuestros iguales.”
A continuación el nuevo Presidente se hace cargo de la Carta Constitutiva.
Después de esto, el Presidente saliente acompaña al nuevo hasta su
asiento, le estrecha la mano e invita al Taller a tributar una triple batería de júbilo,
a la cual el nuevo Presidente contesta según costumbre.
Art. 313.— Cumplido el artículo anterior, el nuevo Presidente dirige la
instalación de los demás Dignatarios y Oficiales, haciendo que los electos cubran
el Templo, concediendo la palabra sobre su elección, recibiendo de ellos el
juramento o promesa de sus respectivos cargos y ordenando la correspondiente
proclamación entre Columnas.
El orden en que se verificará la instalación será el siguiente:
Primero.— Los Vigilantes.
Segundo.— Los Oficiales de primera clase (Orador, Secretario Guardasellos,
Tesorero y Primer Experto).
Tercero.— Los demás Oficiales del Taller.
La instalación de los Vigilantes y Oficiales de primera clase puede hacerse
uno por uno o dos por dos.
La de los Oficiales de segunda clase se hace en conjunto, prestando el
Orador la promesa a nombre de ellos, sin que cubran el Templo.
Art. 314.— En las tenidas de instalación general de cargos no podrá tratarse
de más asuntos que los alusivos a tan solemne acto. Después el Orador pronuncia
un discurso instructivo para los hh∴ instalados.
En todo este trabajo el Taller se conserva en un estado constante de alegría
y de fiesta. Una vez cerrada la tenida, se concluirá con un banquete fraternal.
Art. 315.— El acta de la tenida de instalación será firmada por el Secretario
saliente y por el nuevo.
En ella debe describirse cuanto ha ocurrido en la sesión, y principalmente la
entrega hecha a los nuevos electos de los registros, papeles sueltos, libros, sellos,
instrumentos y muebles de toda especie pertenecientes al Taller, expresando por
quienes han sido recibidos y aceptados.
Esta entrega deberá ponerse en orden con anticipación.
Art. 316.— En la tenida en que se verifique la instalación general de
Dignidades y Oficiales de un Taller, el Secretario entregará a cada uno de los
instalados el diploma o nombramiento de su cargo.
Igual requisito se cumplirá cuando se efectúe alguna instalación parcial.
Art. 317.— Ningún hermano elegido para Dignidad u Oficial puede entrar en
el ejercicio de sus funciones sino después de haber sido regularmente instalado.
Antes de tomar posesión del cargo, debe prestar ante el Presidente la
solemne promesa que le corresponde.
Art. 318.— En los casos de elecciones parciales, los electos toman posesión
de sus cargos en el acto.
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Art. 319.— El Secretario pondrá en conocimiento de los elegidos el oficio
para que han sido designados por el Taller, invitándoles a que se presenten lo
más pronto posible a tomar posesión de sus cargos.
Art. 320.— El hermano instalado en un cargo lo desempeñará hasta que se
instale el sucesor, salvo el caso de vacante por alguna de las causas siguientes:
Primera.- Renuncia aceptada por el Taller.
Segunda.- Plancha de quite.
Tercera.- Ausencia a otros Valles.
Cuarta.- Remoción
Quinta.- Suspensión
Sexta.— Expulsión
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Del asunto en general
TITULO DECIMOPRIMERO
DE LAS RELACIONES DE LOS TALLERES
CAPITULO PRIMERO
DE LAS RELACIONES DE LOS TALLERES
CON LAS GRANDES LOGIAS Y EL GRAN CONSEJO
FEDERAL SIMBÓLICO
SECCIÓN PRIMERA
Art. 321.—Los Talleres en instancia, es decir, que hayan solicitado
pertenecer al Grande Oriente Español por medio de la Gran Logia de su territorio,
o directamente del Gran Consejo Federal Simbólico, si forman parte de territorios
de cosoberanía, no podrán iniciar a profanos, ni conferir grados, ni afiliar, ni
regularizar antes de obtener del Poder Ejecutivo correspondiente la Carta
Constitutiva.
Tampoco podrán, antes de estar instalados, usar timbre ni sello, cuyo
proyecto debe someterse previamente al Poder Ejecutivo que corresponda.
Art. 322.— Los Talleres se entienden directamente con su Gran Logia o con
el Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos, por medio de
comunicaciones oficiales, que reciben los nombres de planchas.
Para que las comunicaciones tengan dicho carácter, han de reunir los
requisitos siguientes:
Primero.- Estar escritas en papel del uso oficial del Taller.
Segundo.- Ser firmadas por el Presidente y por el Secretario, anteponiendo
éste la fórmula: "Por mandato del Taller”, y a continuación el sello de la Secretaría.
Tercero.— Tener estampado el sello del Taller.
Art. 323.— Los documentos oficiales (planchas, comunicaciones etcétera),
han de encabezarse con la advocación “A L∴G∴D∴G∴A∴D∴U∴”, así
expresada o con todos sus vocablos.
También puede escribirse dicha advocación en latín, ya sea expresando
todos sus términos o las iniciales de cada uno.
Debajo de la advocación se inscribirán en una misma línea los lemas
"Masonería Universal” "Familia Española”.
59

Art. 324 .— Las relaciones entre masones y entre Talleres, entre éstos y
aquéllos, o con los Altos Cuerpos y recíprocamente, han de inspirarse en el mayor
respeto, consideración y cortesía, pero evitando formas ampulosas y de sumisión
exagerada.
Art. 325.— Todas las comunicaciones oficiales han le ser claras, concisas y
cultas, y el lenguaje debe corresponder al que se usa entre hermanos que
mutuamente se aman y respetan.
Art. 326.—EL Gran Consejo Federal Simbólico y las Grandes Logias
Regionales se comunicarán con los Talleres en la siguiente forma:
Primero.— Por planchas oficiales. Estos documentos llevarán estampados
los sellos correspondientes.
Segundo.— Por decretos.
Tercero.— Por circulares.
Cuarto..—Por memorándum, en la parte administrativa.
Quinto.— Por medio del Boletín Oficial del Grande Oriente.
Estas comunicaciones se ajustarán en un todo a lo preceptuado en los tres
artículos anteriores.
Art. 327.— La Gran Secretaría del Gran Consejo Federal o de las Grandes
Logias, pueden por sí dirigirse a los Talleres, pero sólo para asuntos no oficiales, y
siempre en forma de carta particular.
Se exceptúa el acto de transmisión de las palabras anual y semestral del
Oriente, después que éstas sean comunicadas de oficio por el Gran Maestre de la
Orden.
Art. 328.— Los Talleres se comunicarán directamente con el Gran Consejo
Federal Simbólico, o su Gran Logia Regional, según los casos, para la remisión de
cuotas y tributos, pagos de cuentas o aclaraciones sobre estos asuntos.
Art. 329.— Los documentos, libros y Boletines oficiales remitidos por el
Grande Oriente y sólo destinados a los Talleres, deben conservarse
cuidadosamente por los Presidentes y por Archiveros.
Son propiedad exclusiva de cada Taller, y nadie puede darles otro destino.
Los Comisionados inspectores deben reclamar que se le presenten.
Art. 330.— Los Talleres no pueden excusarse de contestar las preguntas,
consultas o encargos hechos por el Poder Ejecutivo de que dependan.
Art. 331.—Todo Taller que haga una falsa declaración en los documentos o
informes que les sean exigidos, será procesado.
Art. .332.— De la memoria anual de trabajos que publiquen los Talleres,
enviarán tres ejemplares a la autoridad de que dependan.
Art. 333.— También remitirán los Talleres tres ejemplares de toda producción
masónica o profana que den a la publicidad por medio de la imprenta litografía u
otro procedimiento mecánico.
Respecto a las publicaciones masónicas, se tendrá cuenta lo dispuesto
anteriormente.
Art. 334.— Todo h∴ masón autor de un libro, folleto, hoja suelta o periódico,
está moralmente obligado a remitir al Gran Consejo Federal Simbólico o a la Gran
Logia, un ejemplar de dicha producción, sirviéndole de intermediario su Taller.
SECCIÓN SEGUNDA
60

De los cuadros que deben enviar los Talleres
Art. 335.—Todo Taller está obligado a enviar anualmente, en el primer mes
de cada año natural, el cuadro exacto de todos los miembros activos.
Este cuadro, sellado y firmado por las tres Luces del Taller, por el Orador y
por el Secretario, deberá extenderse en el impreso correspondiente.
Art. 336.— Mensualmente, en la primera decena de cada mes, los Talleres
enviarán a la Gran Secretaría que corresponda, nota del movimiento masónico
ocurrido en ellos durante el mes anterior.
Art. 337.— Igualmente los Talleres darán cuenta de sus elecciones generales
o parciales, dentro de los diez días siguientes al en que las verifiquen.
SECCIÓN TERCERA
De la expedición de certificados, titulas o diplomas
Art. 338.— Los Talleres tienen obligación de solicitar de la autoridad
correspondiente los títulos o certificados para los hh∴ que inicien o exalten en sus
distintas Cámaras.
Igual deber tienen respecto a los hh∴ afiliados que no posean el titulo o
certificado del grado que ostenten legalmente.
Lo mismo observarán para el canje de titulo o certificados de Aprendiz,
Compañero y Maestro masón de los hh∴ regularizados con estos grados en las
Logias.
En cuanto a los masones irregulares que pretendan el reconocimiento y
regularización de grados superiores al de Maestro masón, las Logias cumplirán
exactamente lo dispuesto en estos Reglamentos.
Los Presidentes y Secretarios son responsables de no cumplir estos
requisitos dentro de los treinta días siguientes al en que se verifique la iniciación,
exaltación, afiliación o regularización.
Art. 339 — Ningún Taller, Presidente de Taller, ni funcionario alguno del
mismo pueden expedir títulos, certificados, testimonios, ni otro documento para
que un masón acredite su grado.
Este derecho le está reservado exclusivamente al Gran Consejo Federal
Simbólico o a la Gran Logia respectiva.
Lo único que puede hacer un Taller es expedir recibos autorizados con el
sello del mismo, para acreditar que un masón ha satisfecho los derechos de
iniciación o exaltación.
Art. 340.— Todo Taller que infringiere el articulo anterior será suspendido y
procesado.
Los Presidentes serán suspendidos en sus cargos y privados de derechos
masónicos, como asimismo los funcionarios infractores de dicha disposición.
Igualmente serán suspendidos de derechos los masones que incurran en la
misma irregularidad.
Art. 341.— Las certificaciones de haber sido un masón iniciado en un grado,
sólo podrán expedirlas los Talleres, dirigiéndolas a la autoridad correspondiente, y
serán testimonio del contenido de un acta de la Cámara en que se haya certificado
la iniciación o exaltación.
61

Dichas certificaciones deberán ser expedidas por los Secretarios,
extendiéndolas en papel oficial del Taller; serán visadas por el Presidente y el
Orador, y selladas convenientemente.
Un documento de esta naturaleza en poder de un masón, no tiene valor
alguno para acreditar su personalidad masónica.
Art. 342.— Una vez expedidos por el Gran Consejo Federal Simbólico, o la
Gran Logia Regional respectiva, los certificados, títulos o diplomas, se envían a los
Talleres que lo han pedido, quienes en el acto de entregarlo al h∴ destinatario han
de hacerle poner su firma profana y la rúbrica en el “Ne Varietur”.
Del incumplimiento de esta disposición son responsables, en primer término,
los Secretarios.
De las palabras anual y semestral
SECCIÓN CUARTA
Art. 343.— El Gran Maestre, Presidente del Gran Consejo Federal Simbólico,
o el que ejerza sus funciones, da, con la debida anticipación, las palabras anual y
semestral, que son comunicadas a las Grandes Logias para que éstas a su vez las
transmitan a los Talleres.
La palabra anual se comunica en la época del solsticio de invierno, en
Diciembre.
La semestral se transmite en cada solsticio: la del primer semestre en
Diciembre, la del segundo en junio.
Art. 344.— Las palabras anual y semestral sirven para establecer la unidad
francmasónica dentro de la Federación del Grande Oriente.
Deben ser exigidas por los Guarda-Templos o por los Maestros de
Ceremonias en todos los Talleres a los hermanos de la Obediencia que se
presenten como Visitadores.
Art. 345.— Solamente tienen derecho a recibir las palabras anual y semestral
los Talleres de la Federación que hayan enviado la documentación
correspondiente al semestre anterior y hayan cumplido sus deberes de toda
índole.
Art. 346.— Las palabras anual y semestral se envían bajo sobre cerrado, el
cual sólo puede ser abierto en tenida por el Presidente del Taller o por el que
ejerza sus funciones.
Art. 347.— El Presidente, al recibir la palabra anual o semestral, hará formar
en el Templo la cadena mística con los miembros activos del Taller.
En esta cadena, unidos todos por las manos en la forma acostumbrada, se
colocará a la derecha del Presidente el Secretario y a la izquierda el Orador.
Enfrente se hallará el Primer Vigilante, que tendrá a su derecha al Segundo y
a la izquierda el Experto.
La palabra anual será comunicada por la derecha y la semestral por la
izquierda, ambas pronunciadas en voz muy baja y al oído, y así circularán
respectivamente por todos los hermanos hasta terminar en el Presidente, quien si
la considera justa y perfecta así lo declara, deshaciéndose acto continuo la
cadena.
62

Art. 348.- Los hermanos ausentes reciben las palabras anual y semestral
directamente del Presidente.
Se exceptúan los hermanos suspendidos de derechos masónicos,
preventivamente o por sentencia.
Art. 349.— Siempre que hubiera en un Taller iniciación de profanos, afiliación
o regularización, se formará la cadena mística para comunicar las palabras anual y
semestral.
Art. 350.— Los Talleres de nueva creación, los reorganizados o los
regularizados recibirán las palabras anual y semestral en el acto de su instalación
en el Grande Oriente.
De la inspección de Talleres
SECCIÓN QUINTA
Art. 351.— El Gran Consejo Federal Simbólico, Poder Ejecutivo de los
Talleres, tiene el derecho de la alta Inspección sobre las Logias. Asimismo lo
tienen las Grandes Logias Regionales sobre los Talleres de su jurisdicción
nombradas al efecto por el Poder Ejecutivo correspondiente.
Art. 352.— Los comisionados para inspeccionar un Taller deberán poseer,
por lo menos, el grado superior que en éste trabaje. El número de miembros de
una Comisión inspectora no podrá ser menor de dos ni exceder de cinco.
En los poderes de cada Comisión inspectora se designará el hermano que
haya de desempeñar el cargo de Presidente y el de Secretario.
Art. 353.— Los comisionados para inspeccionar un Taller de la Federación
deben asistir a los trabajos de éste en las sesiones y Cámaras que indique el
Poder Ejecutivo correspondiente.
Con respecto al Taller que Inspeccionen están además obligados a lo
siguiente:
Primero. - Asegurarse de si se cumple fielmente la Constitución, Estatutos y
Reglamentos generales, leyes, decretos y disposiciones del Grande Oriente y de
su Gran Logia.
Segundo.- Examinar los libros de Arquitectura o de Actas, como así mismo
todos los libros y registros mencionados en estos Estatutos y Reglamentos
generales.
Tercero.- Comprobar el estado del Tesoro y de la Beneficencia, investigando
los libros y registros de la contabilidad e informándose de cómo cumplen sus
deberes los funcionarios que se relacionan con la administración económica.
Cuarto.- Hacer un reconocimiento en el Archivo, comprobando sus
existencias con las que figuren en el registro del mismo.
Quínto.- Explorar las aspiraciones del Taller, para transmitirlas al Poder
Ejecutivo a que corresponda.
Sexto.- Informarse de cómo se realizan los trabajos.
Art.354.— Cuando lo determine el Poder Ejecutivo correspondiente, puede el
Presidente de una Comisión inspectora ejercer interinamente las funciones de
Presidente en el Taller que inspeccionan.
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En todo caso el Presidente efectivo, funcionarios y miembros activos del
Taller, acatarán y cumplirán con toda exactitud las órdenes del Presidente
inspector, cuya autoridad será indiscutible en el ejercicio de sus funciones.
Inmediatamente que el Presidente inspector se haga cargo de la Presidencia
del Taller, le será entregada, por el de éste, la Carta Constitutiva y los sellos del
Taller.
La desobediencia a esta disposición lleva consigo una grave responsabilidad.
Art. 355.—Los Comisionados inspectores darán cuenta de su gestión al
Poder Ejecutivo que corresponda en memoria escrita, firmada por todos ellos.
Art. 356.- Los Comisionados inspectores no podrán ejercer sus funciones en
los Talleres de los cuales sean miembros activos.
Se exceptúan solamente al Gran Maestre, Presidente del Gran Consejo
Federal Simbólico, para todos los Talleres sin distinción y a los Diputados Grandes
Maestres de las Grandes Logias Regionales para los Talleres de sus respectivos
territorios.
CAPITULO SEGUNDO
De las relaciones de los Talleres entre si
Art. 357.— Los Talleres de la Federación deben guardar entre sí una
constante, cariñosa y fraternal relación. Se entenderán por medio de
comunicaciones oficiales.
Art. 358.— Todos los Talleres de la misma clase o categoría masónica
deberán cambiar entre sí Garantes de Amistad, acreditados por medio de títulos o
nombramientos expedidos al efecto, respectivamente.
Estos nombramientos recaerán siempre en miembros activos del Taller ante
el cual haya de ostentarse dicha representación y en hh∴que posean por lo
menos el grado superior en que trabajen los Talleres mutuamente representados
Ningún Taller podrá tener en otro más de un Garante de Amistad.
Art. 359.— EL Garante de Amistad procurará mantener constante
correspondencia con el Taller a quien represente, a fin de conservar la fraternidad
colectiva.
Art. 360.— Ningún Taller puede distribuir folleto, circular o documento alguno
a los demás Talleres de la Federación, ni a los dependientes de otra Potencia
Masónica, sin obtener previamente autorización del Poder Ejecutivo
correspondiente
Art. 361.— Los Talleres no pueden afiliarse entre sí. Podrán, no obstante,
trabajar en común, cuando sean de la misma categoría o grado, en sesiones
especiales. Estas sesiones se efectuarán siempre bajo la presidencia,
organización masónica y responsabilidad de un solo Taller.
En las tenidas así verificadas no podrá tratarse jamás de otros asuntos que
aquellos para los cuales se hubiesen concertado dos o más Talleres.
Ocho días antes de efectuar ésto cada uno de los Talleres lo pondrá en
conocimiento de la autoridad correspondiente expresando cuál haya de ser el
Taller director.
• Art. 362.— Cuando dos o más Talleres de una misma localidad, o de
localidades diferentes, pretendan usar del derecho que les concede el artículo 12
de la vigente Constitución del Grande Oriente, se cumplirán las siguientee
disposiciones:
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Primera.- Cada Taller de los que pretendan congregarse, comunicara al Gran
Consejo Federal Simbólico o a la Gran Logia Regional de que dependa, por
plancha oficial, el objeto de las deliberaciones proyectadas y determinarán quién
habrá de ocupar la Presidencia de los trabajos en común, ya se celebren éstos en
reuniones plenas o por delegaciones.
Tercera.- De los acuerdos tomados en dichas congregaciones de Talleres se
dará cuenta a la autoridad correspondiente en el término de ocho días, por medio
de plancha oficial que firmará el Secretario, anteponiendo la fórmula “Por acuerdo
de los congregados” y con el “Visto Bueno” que suscribirán el Presidente de la
reunión y un representante de cada Taller congregado.
Art. 363.— Los Talleres pueden nombrar Comisiones o Diputaciones oficiales
para visitarse mutuamente o con el fin de estrechar los lazos fraternales.
Art. 364.— Ningún Taller puede dirigirse a los demás de la Federación en
demanda o petición de socorro ni proponiendo colectas o suscripciones con fines
benéficos para masones o para profanos, sino por mediación del Poder Ejecutivo
a que corresponda, el cual determinará lo que proceda.
Art. 365.— Los Talleres de una misma localidad están obligados a
comunicarse mutuamente las peticiones de iniciación, afiliación y regularización
que reciban.
Si a alguna de estas se hiciesen observaciones por parte de un Taller, serán
atendidas convenientemente; pero si hubiere divergencia de apreciaciones, se
someterá el caso a la decisión del Poder Ejecutivo correspondiente.
Art. 366.— Un Taller de la Federación puede, en caso de absoluta
necesidad, comisionar a otro de la Obediencia para que, en nombre del primero,
exalte a un miembro activo de éste a un grado.
En tal caso, el Taller peticionario o poderdante se dirigirá al otro por
comunicación oficial que firmarán las tres Luces del Taller, el Orador y el
Secretario, y que será sellada convenientemente.
Una vez cumplido por el Taller comisionado el encargo que recibió, se dirigirá
al poderdante en la misma forma que éste lo hizo con aquél, y le comunicará la
fecha en que cumplió la misión encomendada, incluyéndole certificación o
testimonio de la parte del acta de la tenida en que conste la ceremonia de
exaltación y promesa del exaltado.
Ningún Taller puede señalar derechos de tributación por exaltaciones
efectuadas por el motivo que antecede.
Todo Taller que use del derecho que concede esta disposición, lo pondrá en
conocimiento del Poder Ejecutivo de que dependa.
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CAPITULO TERCERO
De las relaciones de los Talleres con otras Potencias Masónicas
Art. 367.— Los Talleres de la Federación pueden comunicarse directamente
con Talleres de otras Potencias Masónicas reconocidas por el Grande Oriente
Español.
Estas relaciones se circunscribirán a actos de pura cortesía en casos
prósperos, como saludos y felicitaciones; o en momentos de adversidad, para dar
el pésame por el fallecimiento de algún hermano o hacer declaraciones de
sentimientos por cualquier otra desgracia.
El Taller que verifique un acto de éstos lo pondrá en conocimiento del Poder
Ejecutivo correspondiente. Como quiera que la mayor parte de los Orientes
extranjeros no reconocen este derecho a sus Talleres, los de la Federación
procurarán guardar la mayor prudencia en sus manifestaciones relacionadas con
aquéllos, pudiéndolo hacer, no obstante, cuando lo estimen oportuno por conducto
del Gran Consejo Federal Simbólico.
Art. 368.— Las relaciones con los Cuerpos directivo de otros Orientes o
Potencias Masónicas se sostendrán exclusivamente por el Gran Consejo Federal
Simbólico.
CAPITULO CUARTO
De las relaciones de los Talleres con autoridades no Masónicas
Art. 369.— Los Talleres en su vida de relación con autoridades no
masónicas, se ajustarán siempre a las leyes civiles que rijan en los Estados y
localidades donde aquellos radiquen.
Art. 370.- Dentro de cada localidad, los Talleres pueden dirigirse a las
autoridades civiles sólo para fines benéficos.
Art. 371.— Los Talleres solicitarán de las autoridades no masónicas la gracia
de indulto para los sentenciados a muerte; pueden aplaudir actos de la autoridad
que tengan por verdaderamente humanitarios, y censurar en forma de protesta
digna y respetuosa, los actos de barbarie y salvajismo siempre que en cada caso
de éstos exista el acuerdo unánime de todos los miembros activos asistentes a la
sesión, y que, con el carácter de extraordinario, debe convocarse al efecto.
Art. 372.— Queda terminantemente prohibido en territorio español a los
Talleres o a sus individuos cualquier manifestación en la vía pública con carácter
masónico, sin expreso permiso de la autoridad correspondiente.
Art. 373.— Para que un Taller no residente en territorio español pueda
celebrar un acto de manifestación en la vía pública con carácter masónico es
indispensable que el acuerdo sea tomado por unanimidad en la Cámara superior
en que trabaje el Taller y en sesión extraordinaria convocada al efecto.
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Art. 374.— Siempre que un Taller ejercite lo consignado en los artículos 370,
371 y 372, lo pondrá inmediatamente en conocimiento de la autoridad jerárquica
que corresponda
CAPITULO QUINTO
De las relaciones de los Talleres con el Mundo Profano
Art.375. - Ante el mundo profano, los Talleres, lo mismo que los masones,
deben guardarse mucho de revelar o hacer comprender ni el menor de los trabajos
masónicos, ni los secretos o misterios de la Institución.
El incumplimiento de este precepto lleva consigo una gravísima
responsabilidad.
Art. 376.— Los Talleres serán muy parcos y moderados en sus relaciones
con el mundo profano, ante el cual deben hacer resaltar el hecho verdadero de
que entre masones reina siempre la más perfecta unión, el más acendrado cariño
y la fraternidad más absoluta.
Art. 377.— Nunca por ningún concepto, pueden los Talleres sumar su acción
a la de un partido determinado ni a ninguna bandería, secta o asociación profana
ya sean de carácter social, político o religioso.
TITULO DECIMOSEGUNDO
RÉGIMEN INTERIOR DE LOS TALLERES
CAPITULO PRIMERO
Atribuciones de los Talleres
Art. 378.— Los Talleres realizan el trabajo de la Institución dentro de las
facultades concedidas por la Constitución del Grande Oriente y de las
prescripciones de estos Estatutos y Reglamentos generales.
Les corresponde, por consiguiente:
Primero.— Usar del derecho de autonomía en cuanto a sus trabajos de
moralización y propaganda.
Segundo.— Admitir o rechazar candidatos; resolver los asuntos de su
particular competencia y administrar libremente sus caudales.
Tercero.— Corregir a sus individuos por las faltas que cometieren, conforme
a lo prescrito en las leyes masónicas.
Cuarto.— Imponer y exigir a sus miembros activo, las cuotas necesarias para
el sostenimiento del Taller y desarrollo de los fines de la Orden.
Quinto.- Elegir e instalar a sus funcionarios
Sexto.— Fijar las épocas de sus sesiones y el lugar de su domicilio.
Séptimo.— Apelar de las decisiones de su Presidente ante el Poder Ejecutivo
a que corresponda.
Octavo. - Enviar representante a la Asamblea general de su Gran Logia o a
la Asamblea Nacional, según los casos.
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Noveno.- Usar del derecho de petición o proposición ante el Poder Ejecutivo
correspondiente y ante la Asamblea general.
Decimoprimero.- Asociarse con otro Taller u otros Talleres de su misma
jerarquía, para fines masónicos, dentro de las prescripciones legales.
Decimosegundo.- Adoptar en su Reglamento interior las disposiciones que
no se opongan a las de la Constitución, ni a las de los Estatutos y Reglamentos
generales.
Decimotercero.- Suspender sus trabajos por un plazo que no excederá de
tres meses, dando cuenta al Poder Ejecutivo de que dependa.
Esta suspensión de trabajos no exime de la obligación de contribuir al Gran
Tesoro por los derechos de capitación exigidos en la vigente Ley de tributación.
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CAPITULO SEGUNDO
De la Disciplina de los Talleres
Art. 379.— Los Presidentes de los Talleres ejercen el derecho de disciplina
sobre los miembros de los mismos y sobre todos los masones que asistan a sus
trabajos.
Art. 380.— Los Presidentes de Talleres cuidaran escrupulosamente de hacer
desaparecer, en su origen, cualquier germen de desavenencia o disgusto entre los
miembros activos de su Taller.
Si por acaso existiera algún h∴ que, sin faltar a sus deberes masónicos por
su carácter díscolo o por otro concepto se hiciera inconveniente al Taller, el
Presidente lo llamará privadamente y le exhortará con cariño para que reprima su
carácter o haga desaparecer la causa de su inconveniencia, advirtiéndole que, de
no corregirse, propondrá, como medida de disciplina, su separación del Taller por
determinado tiempo o indefinidamente.
Si el amonestado no se corrigiera, el Presidente dará cuenta del caso a la
Cámara del Medio, la cual puede proponer al Taller la separación del incorrecto o
la decisión que ella estime conveniente dentro de sus facultades.
Art. 381.— Ningún masón, bajo pretexto alguno, puede formular quejas o
censuras contra el Presidente del Taller, mientras este ejerza su cargo.
Si alguno contraviniere esta disposición, los Vigilantes le llamarán al orden, y
si insistiere en su mal propósito, se le reputará autor de delito o falta, con arreglo a
la importancia que el hecho tuviere, y se procederá contra el conforme a derecho.
Art. 382.— En caso de desobediencia a su autoridad y en los de irregularidad
o desorden en los trabajos, los Presidentes de los Talleres tienen facultades para
suspender la tenida, para cerrarla y para hacer cubrir el Templo a todo miembro
del Taller o Visitador cuya presencia o cuya conducta considere contraria a la
regularidad y buen orden de los trabajos.
El que se resista al cumplimiento de estas órdenes incurrirá en el delito de
desobediencia y será juzgado según la Ley.
Art. 383.— Es obligatorio para todo h∴ miembro activo de un Taller,
participar, sin demora a su Presidente las desavenencias o disgustos que se
susciten entre los hh∴ del mismo, a fin de que pueda tener cumplimiento lo
prevenido en este Reglamento.
Art. 384.— En cualquier Taller, todo miembro perteneciente a una Cámara,
tiene la obligación ineludible de sostener y defender los acuerdos de ella ante las
Cámaras inferiores, aunque aquél haya sido tomado en su ausencia o contra su
voto.
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CAPITULO TERCERO
De los Grados que comprenden y confieren los Talleres y de las Cámaras
que trabajan orgánicamente.
Art. 385.— Los Talleres Simbólicos (Logias) comprenden y confieren por
iniciación los tres grados siguientes:
Primero.— Aprendiz.
Segundo.— Compañero.
Tercero.— Maestro Masón.
Las Logias trabajan orgánicamente en cada una de estas Cámaras.
CAPITULO CUARTO
Del trabajo que corresponde a los Talleres
Art. 386.— En los Talleres Simbólicos (Logias) el trabajo se clasifica por su
carácter predominante. Este puede ser de tres órdenes: instructivo o de
propaganda, administrativo y trascendental.
El primero se verifica en la Cámara de Aprendiz, el segundo en la de
Compañero y el tercero en la Cámara del Medio.
Art. 307.— Corresponde a la Cámara de Aprendiz:
Primero.— Limitar sus trabajos a las iniciaciones rituálicas, afiliaciones y
regularizaciones, a la instrucción masónica y al despacho ordinario de los asuntos
de Secretaría en la parte correspondiente; todo de conformidad con lo estatuido y
con las prácticas tradicionales.
Segundo.— No tolerar que en bien general de la Orden y particular del Taller,
se aluda a actos, discusiones o acuerdos anteriores. Esta parte de la tenida está
consagrada exclusivamente a los asuntos que respondan a lo que su nombre
indica y, por lo tanto, en ella no debe promoverse ni plantearse discusión alguna.
Tercero.— Evitar que en esta Cámara se entablen discusiones relativas a
aquellos temas políticos y religiosos que puedan alterar la fraternidad masónica, ni
que se formulen censuras al hacer uso de la palabra, pudiendo ejercerse este
último derecho en forma de acusación por escrito, depositada en el Saco de
Proposiciones.
Cuarto.— Teniendo en cuenta que los trabajos de la Cámara de Aprendiz
tienen por objeto principal la instrucción y propaganda, deberán multiplicarse las
conferencias, y de este medio puede usar cualquier h∴ para exponer su criterio
sobre los temas que estime oportunos, siempre que el tema que se proponga
desarrollar no sea contrario al Rito ni al espíritu de la Constitución y de los
Estatutos y Reglamentos generales del Grande Oriente Español.
Art. 383.— Corresponde a la Cámara de Compañero:
Primero.— Discutir, en primer término, las cuentas del Tesoro de
Beneficencia y las reformas administrativas, para que pasen, después de
estudiarse, a la Cámara de Aprendiz.
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Segundo.- Siendo el emblema de este grado el conocimiento de las ciencias
y las artes liberales, dedicar el tiempo preferente a las conferencias y trabajos que
se relacionen con estos asuntos.
Tercero.- Evitar que ningún Aprendiz pueda pasar a esta segunda Cámara
sin acreditar en ella, por medio de examen, la completa posesión de aquel grado.
Art. 384.— Corresponde a la Cámara de Maestro:
Primero.- Efectuar únicamente en ella todos los trabajos de importancia y
trascendencia relacionados con la Francmasonería en general o con las Logias en
particular, dentro del Simbolismo, y teniendo presente la profunda filosofía que
encierra la sublime leyenda del Maestro Hirám, en sus varias interpretaciones.
Segundo.- Preparar trabajos a las Cámaras de compañero y de Aprendiz,
procurando que éstas no queden nunca ociosas.
Tercero.— Tener presente que en los asuntos propios de las Cámaras de
Aprendiz y de Compañero, todos los Maestros deben ser de un mismo parecer, si
realmente poseen la Maestría masónica; pero si ocurriese que un Maestro no
estuviere de acuerdo con lo mantenido por otro, en cualquiera de las dos Cámaras
citadas, acudirá a la del Medio, que en ésta es donde trabaja con entera libertad el
francmasón.
Cuarto.— En las tenidas de Maestro podrán tratarse de toda índole de
asuntos científicos, literarios, religiosos o políticos, dentro del espíritu de más
exquisita tolerancia para las ideas ajenas; pero en modo alguno tomarse acuerdos
que impongan una determinada conducta Política a los obreros masones.
Quinto.- No olvidar que la plancha de trazar está dispuesta a toda clase de
construcciones .
Sexto.- Evitar escrupulosamente por alta conveniencia de la Orden, que
penetre en la Cámara del Medio el masón que no haya sido un laborioso Aprendiz
y un excelente Compañero.
CAPITULO QUINTO
De las Tenidas o Sesiones de los Talleres
Art. 390.- Los Talleres celebran Sesiones o Tenidas ordinarias,
extraordinarias, de instrucción y de familia.
En las ordinarias discuten todos los asuntos de interés general y realizan los
trabajos de iniciación, afiliación y regularización.
Las extraordinarias se dedican al objeto especial para que han sido
convocadas.
Tanto éstas como las ordinarias se celebran con toda solemnidad.
Las de instrucción tienen por objeto dar a conocer el Simbolismo y
significado de los grados, instruir a cada cual de los deberes de su cargo, y de las
leyes a todos.
• Las de familias están dedicadas al examen de cuentas y asuntos del
exclusivo interés para el Taller.
Estas dos últimas cases de tenidas pueden celebrarse sin el aparato de las
dos primeras .
Art. 391.— A las tenidas ordinarias pueden asistir Visitadores.
A las extraordinarias y de Instrucción pueden también asistir, si el Taller así
lo dispone.
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A las de familias sólo asisten los miembros activos del Taller y los honorarios.
Art. 392 .— Los Talleres Simbólicos están obligados a celebrar, por lo menos,
una tenida ordinaria mensual.
Art. 393.— Las tenidas de las Logias no pueden abrirse si no se hallan
presente, como mínimo, siete miembros activos, tres de los cuales, por lo menos,
Posean el grado de Maestro Masón.
Art. 394.—— Los Talleres pueden declararse en vacaciones siempre que así
lo acuerden por mayoría de votos.
Art. 395.- Tan pronto tomen el acuerdo lo comunicarán al Poder Ejecutivo de
que dependan, e igualmente darán cuenta en la Primera Sesión que celebren
después de las vacaciones.
Art. 396 — Respecto de las sesiones ordinarias, los Talleres cumplirán los
siguientes requisitos:
Primero. —- Fijar y comunicar a sus individuos las tenidas que hayan de
celebrarse señalando la hora.
Segundo.- Hacer constar en acta que la tenida es ordinaria.
Tercero. — Abrir siempre la sesión en la Cámara inferior en que trabaje el
Taller.
Cuarto.- Si por cualquier circunstancia dicha tenida hubiere de celebrase en
un día distinto al fijado, se comunicará por escrito a los miembros activos del Taller
con veinticuatro horas, por lo menos, de anticipación al día en que se fijó.
Art. 397.- Para celebrar sesión extraordinaria han de cumplirse las
condiciones siguientes:
Primera:.- Que el Presidente la convoque por si o por acuerdo unánime del
Taller, o a petición escrita de las dos terceras partes de los miembros activos, o
por disposición de la Cámara de Maestros indicando siempre el objeto de dicha
tenida.
Segunda.- Citar por escrito, a todos los miembros activos por lo menos con
una anticipación de cuarenta y ocho horas, expresando también el carácter de la
tenida y su objeto, todo lo cual se hará constar en acta.
Tercera.- No podrá tratarse más que del objeto de la convocatoria bajo pena
de nulidad.
Art. 398.- Cuando el objeto de la tenida extraordinaria fuere del momento,
como el de hacer honores a algún hermano que estuviere de paso o para algún
asunto urgente que no tuviere consecuencias podrá convocarse con el tiempo
suficiente para ser conocida y que puedan asistir los hermanos.
Art, 399.- Las Logias están obligadas a celebrar todos los trimestres una
tenida, por lo menos, de instrucción en cada Cámara.
La instrucción puede también efectuarse en las tenidas ordinarias cuando se
disponga de tiempo suficiente y no se perjudique ni demoren los trabajos de rigor.
Art. 400.— Las sesiones exclusivamente de familia se celebrarán siempre
que lo exija la especialidad de su objeto, con veinticuatro horas de anticipación por
lo menos.
En cada tenida ordinaria o extraordinaria puede, al principio de la misma,
dedicarse un tiempo prudencial a los asuntos de familia.
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CAPÍTULO SEXTO
Del Orden de los Trabajos en las Tenidas
Art. 401.— Es obligatoria la asistencia a las tenidas de los Talleres.
Se exigirá la consiguiente responsabilidad siempre que las faltas de
asistencia no estén debidamente justificadas por licencia, por aviso enviado con
anticipación o por explicación que la justifique, en concepto del Taller, y dada
personalmente o por escrito, en la inmediata sesión.
Pueden ser dispensados del puntual cumplimiento de esta disposición los
masones sexagenarios y los que disfruten de licencia o permiso dado por el Taller.
Art. 402.— En todos los casos de disculpa por las faltas de asistencia a los
trabajos, debe enviarse al Taller el óbolo para el Tronco de Beneficencia.
Art. 403. — El obrero que sin disculpa justificada faltare a tres Sesiones
consecutivas de su Taller, será amonestado por el Presidente.
Si a pesar de la advertencia continuase la falta, será juzgado conforme a
Ley, dándosele de baja en el cuadro de miembros activos
Art. 404. — Media hora antes de la señalada para empezar la tenida se
colocará el “Libro de Presente” en el vestíbulo del Templo o en la Secretaria en él
han de firmar, antes de entrar a trabajos, todos los asistentes.
En dicho libro se indicarán los que sean miembros activos del Taller, los que
concurran individualmente como Visitadores y las Comisiones oficiales o
Diputaciones de otros Talleres
Art. 405. — En todos los Talleres los trabajos se realizan por el orden
siguiente:
Apertura de los mismos con arreglo a Rito.
Lectura y aprobación del acta de la sesión anterior.
Disculpas enviadas por los obreros ausentes.
Asuntos de familia o particulares del Taller.
Recepción de Visitadores.
Lectura de la correspondencia oficial y despacho ordinario o de asuntos de la
Secretaría.
Circulación del Tronco de Proposiciones.
Lectura de las mismas por el Orador si son pertinentes, y discusión de las
que lo merezcan.
Orden del día.
Concesión de la palabra en bien general de la Orden y del Taller en
particular.
Iniciaciones, afiliaciones o regularizaciones si las hubiere.
Llamamiento de los hh∴ por lista nominal.
Circulación del Saco de Beneficencia.
Clausura de los trabajos conforme a Rito.
Art. 406.- El desarrollo de los trabajos indicados ordenadamente en el
artículo anterior, se sujetará a los requisitos siguientes:
Primero.— No someter el acta de la sesión precedente a la aprobación del
Taller sin que el Orador emita sus conclusiones. Después de aprobada, la firman
el Presidente, el Orador y el Secretario.
Segundo.— Anotar por el Secretario las disculpas recibidas de los obreros
ausentes, expresando el motivo alegado y si remitieron el óbolo para la
Beneficencia.
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Tercero.— También anotará el Secretario los hermanos asistentes a la
Sesión, indicando los miembros activos, los honorarios, los Visitadores y las
Comisiones o Diputaciones de otros Talleres, cuyos nombres así clasificados
deberán figurar correlativamente al margen del acta.
Cuarto.— Después de circulado el Tronco de Proposiciones por el Maestro
de Ceremonias, éste lo entregará al Presidente, quien anunciará, por medio de los
Vigilantes, el número total de planchas que obtenga y el de las que haya de leer el
Orador por ser pertinentes.
Quinto.— Al dar cuenta del despacho ordinario se incluirán en él los informes
pedidos por los obreros en sesiones anteriores, los dictámenes de Comisiones
permanentes o especiales y el estado de los expedientes.
Sexto.— En las tenidas magnas de iniciación, y en caso de absoluta
necesidad, por escasez de tiempo u otra circunstancia, puede omitirse la
concesión de la palabra en bien general de la Orden y del Taller en particular. si
no solicitan lo contrario los Vigilantes y el Orador.
Séptimo.—- Las iniciaciones, afiliaciones y regularizaciones tendrán siempre
preferencia a los trabajos ordinarios.
Octavo.- El llamamiento de los hermanos por lista nominal lo efectuará el
Maestro de Ceremonias, con preferencia al Secretario, por el orden del catálogo
de miembros activos del Taller.
Noveno.- Circulado el Saco de Beneficencia, el Secretario leerá el borrador o
minuta de la sesión. En los días sucesivos, el Secretario da forma al contenido de
dicho borrador y lo traslada al libro de actas correspondiente. Así formada y
transcrita al acta, se lee y aprueba en la subsiguiente sesión.
Décimo.- Las actas, como todos los documentos masónicos oficiales, deben
empezar con la advocación siguiente: A L∴G∴ D∴ G∴ A∴ D∴U∴.
Art. 407.— Aprobada un acta no se puede, por ningún concepto, hacer en
ella variaciones, ni supresiones, ni adiciones, ni enmiendas, ni raspaduras de
ninguna clase.
El que infringiere esta disposición será acusado de delito grave y expulsado
de la Orden.
Art. 408. — Los errores que pudiera contener un acta se subsanarán o
rectificarán en la de la sesión donde hayan sido notados, previo acuerdo del Taller.
Art. 409.— Cuando ocurriese lo expresado en el articulo anterior, los
Secretarios cuidarán de hacer una llamada u observación al margen del acta
rectificada, señalando el folio del libro en que se hiciere la rectificación.
A ser posible, dicha observación se escribirá con tinta de diferente color que
la empleada en el texto.
Art. 410.— Si al escribir el acta en el libro correspondiente se cometiese error
y se tachase o enmendase, el Secretario está obligado a salvar la enmienda al
final del acta, expresando claramente la validez de lo tachado o enmendado.
Toda enmienda hecha sin este requisito merecerá censura.
Art. 411.— Durante la apertura y cierre de trabajos, lectura y aprobación de
actas, fijación de conclusiones por el Orador, votaciones y escrutinios, no se dará
entrada en el Templo a ningún hermano, ni aun a las Dignidades del Taller.
Art 412 —Todos los masones están obligados a usar en trabajos las
insignias de su grado.
- Ninguno podrá entrar en el Templo sin hallarse decorado, por lo menos,
como corresponde al grado o Cámara en que se trabaje.
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Los Expertos cuidarán de que se cumpla esta disposición, y los Guarda-
Templos no darán entrada en trabajos al hermano que se presente sin satisfacer
este requisito.
Art. 413.—Nadie puede abandonar su puesto durante los trabajos sin
permiso del Vigilante de su Columna, a menos que su cargo lo exija.
Tampoco se puede pasar de una Columna a otra sin permiso del Vigilante
respectivo.
Se prohíben igualmente durante los trabajos las conversaciones particulares,
las lecturas de periódico, así como todo acto que desdiga de la compostura y
seriedad que requieren las sesiones masónicas.
Art. 414 .— También queda terminantemente prohibida la descompostura en
el uso de la palabra, las interrupciones, el dirigir frases que, por su índole, puedan
molestar a cualquier hermano y la falta de atención a los trabajos.
Art. 415.— El Presidente invitará a retirar la palabra al hermano que hiciere
uso de consideraciones injuriosas o malsonantes. Si el autor de ellas se negase a
dar las explicaciones debidas, será puesto entre Columnas y amonestado por
segunda vez; y si aún así se negare, le hará cubrir el Templo, y la Comisión de
justicia procederá a cumplir la Ley.
Art.416.— Una vez empezadas los trabajos, ningún obrero podrá salir del
Templo sin permiso del Presidente o del Vigilante de su Columna.
Tampoco puede nadie abandonar definitivamente los trabajos sin
autorización del Presidente y sin haber cubierto el Saco de Beneficencia
Art.417.— Cualquier obrero que, previa la formalidad del Rito, entre en el
Templo después de empezados los trabajos, queda entre Columnas y no va a su
lugar hasta que se lo permita el Presidente.
Si el Taller está ocupado en alguna discusión, el hermano que hubiere
entrado tiene el derecho de hacerse informar de ella, a lo que accederá el
Presidente.
Art. 418.— Al golpe del Mallete del Presidente, todos los hermanos
observarán y prestarán atención y obediencia.
Cuando el Presidente dirija sus órdenes al Taller por medio de los
Vigilantes, éstos las trasmiten a las respectivas Columnas por medio de un golpe
de Mallete.
Art. 419.— El Presidente por sí, o a petición del Taller, puede, si lo estima
oportuno, dejar en receso los trabajos del día por breve tiempo, lo cual anuncia
convenientemente.
Terminado el receso, los trabajos se reanudan sólo por orden del Presidente,
sin más ceremonia que el golpe de Mallete y el anuncio previo de que aquéllos
recobran su fuerza y vigor.
Art. 420.— Si después de abiertos los trabajos de un grado en el Taller, éste
pasa a reunirse en Cámara superior, cubren el Templo todos los obreros que no
posean el grado de esta Cámara.
Art. 421 .— Cuando el orden de los trabajos del día se haya agotado, el
Taller podrá ocuparse de otros asuntos, siempre que no sean de los que necesitan
de citación previa, según la ley.
Art.422. — Como el Orador es el responsable de las doctrinas proferidas en
el Taller, no se lee en éste ningún documento presentado por cualquier obrero sin
que antes haya sido comunicado a aquél, con el fin de que se asegure de no
contener nada contrario a los principios masónicos, resoluciones de su Gran Logia
o del Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos, ni a las prescripciones de
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la Constitución, Estatutos y Reglamentos generales, leyes, decretos y demás
disposiciones del Grande Oriente.
Art.423.— No puede excusarse de emitir su parecer sobre un asunto
cualquiera el hermano que sea invitado para ello por el Presidente.
Art. 424 .— Todos los obreros están obligados a cumplir estrictamente las
fórmulas del Rito y las órdenes o indicaciones de las autoridades y demás
funcionarios del Taller, según determinan los deberes y atribuciones de cada uno.
Art. 425.— Solamente las tres Luces del Taller pueden usar de la palabra
sentados en sus puestos. Los demás lo harán en pie y al orden, a menos que
sean dispensados de ello por el Presidente.
Todo obrero, al hablar, se dirigirá al Presidente y nunca en particular a
determinado hermano.
CAPITULO SÉPTIMO
DE LAS PROPOSICIONES Y DISCUSIONES
SECCIÓN PRIMERA
Proposiciones
Art. 426.—Todo francmasón tiene el derecho de hacer proposiciones en un
Taller.
Art. 427.— Las proposiciones han dé reunir los requisitos siguientes:
Primero.- Estar presentadas por escrito y fechadas, con la firma del
proponente o de cada uno de los proponentes.
Segundo.- Ser depositadas en el Saco de Proposiciones o entregadas a la
Presidencia o a la Secretaría.
Tercero.- No contener su texto nada que atente a los principios masónicos ni
a la soberanía e independencia del Grande Oriente Español.
Cuarto.— No referirse tampoco a ningún asunto contrario a los derechos del
Taller, ni que se oponga a la Constitución, a los Estatutos y Reglamentos
generales, leyes, decretos y disposiciones del Grande Oriente ni a las
resoluciones de la Gran Logia respectiva.
Art. 428.— Es potestativo en el Presidente reservarse el estudio de cualquier
proposición.
Si no halla inconveniente en su debate, dará cuenta de ella en la inmediata
sesión ordinaria.
Si lo juzgase necesario, hará uso de la facultad que le concede este
Reglamento.
Art. 429.— Los trámites a que ha de someterse toda, proposición serán los
siguientes:
Primero.— Lectura de ella por el hermano Orador, reservando el nombre del
proponente.
Segundo.— Ser tomada en consideración por el Taller.
Tercero.— Pasar a estudio de la Comisión correspondiente para que ésta
emita dictamen.
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Cuarto.— Discusión del dictamen de la Comisión informadora y del voto
particular, si lo hubiere, recayendo la discusión primero sobre esto.
Quinto.— Votación.
Art. 430.— La proposición que sea presentada con el carácter de urgente
necesitará, después de tomada en consideración, que el Taller acuerde la
urgencia, en cuyo caso podrá inmediatamente discutirse.
Art. 431.— Sobre las proposiciones que se discuten sólo cabe interponer las
mociones siguientes:
Primera.— Suspensión temporal.
Segunda.— Enmienda.
Tercera.— Suspensión indefinida.
Estas mociones se resuelven por el mismo orden que expresa este artículo, y
adoptado acuerdo sobre alguna, no puede tomarse otro sobre el mismo asunto.
Art. 432.— Las proposiciones que el Presidente considere que no deben
discutirse, tales como las comprendidas en los casos tercero y cuarto del articulo
427, y las que puedan alterar la fraternidad, podrán mandarlas quemar entre
Columnas, sin dar lectura de ellas, después de conocidas por la Cámara del
Medio.
Art. 433.— Toda proposición rechazada por el Taller, no puede ser
presentada nuevamente en un plazo de tres meses.
SECCIÓN SEGUNDA
Discusiones
Art. 434.— Todas las discusiones serán dirigidas por el Presidente.
Art. 435.— Cuando el Presidente quiera tomar parte en la discusión, en pro o
en contra, dejará su puesto, que será ocupado por el Primer Vigilante, no
pudiendo aquél volver a la Presidencia hasta que haya recaído votación o la
discusión sea suspendida.
Art. 436.— Al empezar toda discusión, el Presidente lo anunciará al Taller por
medio de los Vigilantes.
Después de este anuncio no podrá tratarse de más asuntos que los
comprendidos en la discusión.
Art. 437.— Empezada una discusión, sólo al Presidente corresponde
suspenderla o aplazarla, siempre que el Orador no haya emitido sus conclusiones.
Esta suspensión será condicional o definitiva.
En el primer caso puede reanudarse en la misma tenida.
En el caso de ser suspendida definitivamente una discusión, no podrá, por
ningún concepto, reanudarse en la misma tenida.
Art. 438.— Ningún hermano puede tomar la palabra sin haberla pedido y
obtenido.
El que desee obtenerla se dirige al Vigilante de su Columna.
Los colocados en Oriente piden directamente la palabra al Presidente.
Art. 439.— A nadie le es permitido declarar el nombre de un proponente, ni
aun al propio autor o a los autores mismos de la proposición.
Art. 440. — Para la toma en consideración de toda proposición se concederá
un turno en pro y otro en contra, salvo que la excesiva importancia del asunto
merezca oír más opiniones, en cuyo caso el Presidente puede ampliar a tres los
turnos en pro y en contra.
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Art. 441.— Los discursos que se pronuncien en pro y en contra de la toma en
consideración de una proposición, serán breves y versarán únicamente sobre la
conveniencia o no de discutirla, sin entrar en el fondo del asunto.
Verificadas las rectificaciones que procedan, el Orador emite sus
conclusiones. Inmediatamente recae votación, la cual determina si la proposición
es o no aceptada en principio por el Taller.
En caso afirmativo, se seguirán los trámites señalados en los números 3º, 4º
y 5º del articulo 429.
Art. 442.— Una vez tomada en consideración cualquiera proposición, ésta
pertenece al Taller y no puede ser retirada por nadie.
Art.443,—En todas las discusiones que promueva una proposición, después
de tomada en consideración, no se concederán mas de tres turnos en pro y tres
en contra.
Para conceder más de tres turnos, el Presidente pedirá su venia al Taller.
Art. 444.— Cuando se discuta el dictamen de una Comisión, ésta, su
Presidente o el que la represente, tiene prelación de derecho para defender o
aclarar el dictamen emitido.
Art. 445.— En toda discusión, a cada hermano que hubiere consumido un
turno se le concederán dos rectificaciones.
Estas deben ser breves y circunscritas a justificar o aclarar las ideas u
opiniones sustentadas cuando se consumió turno; pero nunca encaminadas a dar
nuevos giros a lo sostenido anteriormente.
Art. 446.— La proposición que contenga dos o más partes, o se halle en
forma articulada, lo cual pueda producir divergencia de opiniones, se discutirá
primero en su totalidad y después por partes o articulados.
Art. 447- Las enmiendas se discuten con preferencia, tan pronto como son
presentadas. El Taller las admite o rechaza.
Art. 448.— Todo voto particular formulado en una.........
(página perdida del original 160-161)................................
...............................
a la libertad y a los derechos de la Orden en general, no menos que del Taller en
particular.
Tal hecho constituye motivo de responsabilidad masónica.
SECCIÓN TERCERA
Cuestiones de orden
Art. 460.- A todo H∴ que solicite la palabra para una cuestión de orden, le
será concedida con preferencia, después que haya terminado el que estuviere
hablando.
Art. 461 .--- EL obrero que haga uso de la palabra para una cuestión de
orden, se circunscribirá a señalar concretamente el punto en que, a su entender,
se haya faltado a la ley, expresándose con brevedad y en términos prudentes y de
gran templanza.
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Inmediatamente le será retirada la palabra al que la usare en otro sentido o
se exprese de un modo inconveniente, a juicio del Presidente.
CAPITULO OCTAVO
De las Votaciones
Art. 462. — Las votaciones se verifican de los tres modos siguientes:
Primero.— Por el signo ordinario
Segundo.- Por bolas
Tercero.— Por papeletas
El primero constituye la votación pública, el segundo y tercero la secreta
Art. 463. — La votación por el signo ordinario o de costumbre se emplea en
la aprobación del acta y en los acuerdos sobre asuntos general o que no tienen
gran transcendencia.
Art. 464 - La votación por bolas se efectúa en los casos siguientes:
Primero.- En la admisión de candidatos
Segundo.- Para la afiliación, iniciación, y regularización
Tercero.- Para los acuerdos relativos a gastos o ingresos del Taller.
Cuarto. - Para los que recaen sobre dictámenes de las comisiones.
Quinto.- Siempre que verbalmente lo solicite un hermano.
En los casos 3º y 4º, si ningún obrero pide la votación secreta, puede el
Presidente determinar que se verifique por el signo ordinario.
Art. 465.- Se emplea la votación por papeletas en los casos de elección de
Dignidades y Oficiales.
También puede emplearse esta votación para elegir a individuos de una
Comisión o a cualquier hermano que haya de ostentar alguna representación
especial.
Art. 466.- Para declarar la conformidad en la votación por el signo ordinario,
se extiende la mano horizontalmente y se la deja caer sobre la pierna derecha.
La disconformidad se manifiesta absteniéndose de hacer dicho signo.
Art. 467.— En la votación por bolas se hará uso de esferas blancas y negras.
Las blancas son afirmativas o signo de aprobación. Las negras son negativas
o señal de desaprobación.
La suma de bolas blancas y negras determina el voto del Taller.
Art. 468.— El procedimiento que deberá emplearse en la votación por bolas
será el siguiente:
Hecho el correspondiente anuncio por el Presidente, el Experto entregará a
cada h∴ una bola blanca y otra negra, colocándose luego entre Columnas
provisto del saco o la urna de balotaje y dispuesto a circularlo, como así lo
anunciará el Primer Vigilante.
Después con la venia del Presidente, el Experto procederá a recoger de cada
hermano la bola que represente su voto, empezando por la cabeza de la Columna
Norte, hasta incluir a su Vigilante. En la misma forma recogerá los votos de la
Columna del Mediodía, comprendiendo al Vigilante de ella, y luego, los de Oriente
menos el voto del Presidente. Hecho esto, volverá a colocarse entre Columnas y
allí emite su propio voto.
Entonces, el Primer Vigilante avisa al Presidente que el Experto se halla
entre Columnas, después de haber circulado el saco o la urna de balotaje.
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A continuación, el Secretario hará por tres veces, Con un intervalo
prudencial, la siguiente pregunta: “¿hay algún hermano que no haya votado?”
Transcurrida una breve pausa después de la última pregunta, el Experto llevará la
urna a la mesa del Presidente para que deposite su voto.
Acto seguido el Presidente proclamará en alta voz: "Queda cerrada la
votación, y se procede al escrutinio”; a cuyo mandato el Experto llevará el saco o
la Urna a la mesa del Orador. Este contará las bolas, depositadas, y dirá en alta
voz el número total de ellas y de las de cada color.
A seguida el Experto circula por todo el Taller el saco o la urna de
comprobación, donde cada uno depositará la bola restante.
Empezará por el Presidente, luego, los hh∴de Oriente siguiendo por la
Columna del Mediodía y la del Norte, hasta concluir en la cabeza de ésta,
depositando entonces su esfera.
Inmediatamente llevará la urna a la mesa del Secretario. Éste, en presencia
también del Experto contará el número de bolas recogidas, para la comprobación,
y lo dirá en alta voz, a fin de apreciar si el resultado concuerda con el que
representa el Voto del Taller.
Al instante el Presidente proclamará el resultado del escrutinio.
Art. 469.—Todo escrutinio en que el número de votos no concuerde con el de
votantes será declarado nulo, Procediéndose a nueva votación.
Art. 450.- Para la votación por papeletas la urna se colocará en medio del
Templo, siguiéndose el orden y procedimientos señalados según los casos, en el
capítulo IV del título X.
Art. 471.- El Secretario hará constar en el acta la manera como se ha
verificado cada votación y su resultado, indicando el número de votantes, y el de
los que votaren en pro y en Contra.
Art. 472.— Formará acuerdo el de la mitad más uno de los votantes
Se exceptúan de esta regla los acuerdos en que la ley determina las
condiciones de su aprobación, tales como el número de votantes, la unidad de
votos, o las dos terceras partes de aquéllos.
Se exceptúan también los acuerdos relativos a la admisión para iniciaciones,
afiliaciones y regularizaciones, cuya votación se regirá por las reglas especiales
que para esta clase de trabajos señalan los presentes Estatutos y Reglamentos
generales.
Art.473. — Siempre que en un escrutinio resulte empate, cuando el acuerdo
necesite para ser válido la simple mayoría, se procederá a nuevo escrutinio.
Si los votos en pro y en contra resultasen por segunda vez iguales, se
repetirá la votación en la tenida inmediata.
Si en ésta resultase por tercera vez el empate, el Presidente hará uso de su
voto decisivo.
Art.474. — No podrá verificarse en una misma tenida la votación de
cualquiera proposición que, presentada en aquélla con carácter de urgente, tuviere
por objeto la aprobación de acuerdos que, para tener fuerza legal, necesiten de la
citación previa.
Art. 475.— Ningún h∴ podrá explicar su voto antes de hacerse la votación;
pero sí podrá hablar breve y concretamente para aclararlo después que se haya
proclamado el resultado del escrutinio. Una vez oído, no se permitirá discusión de
ningún género acerca de la explicación que diese.
Antes de votar sólo es permitido pedir explicaciones de alcance y
transcendencia de la proposición pendiente del voto del Taller, las cuales serán
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dadas por el Presidente o por el Orador, sin que puedan ser objeto de nueva
discusión.
Art. 476.— A nadie es lícito abstenerse de votar, a menos que el asunto le
concierna personalmente.
Tampoco se permitirá a ningún h∴ salir del Templo, ni entrar en él, mientras
se verifica una votación.
Art. 477.---- Los hh∴ Expertos deben asegurarse siempre del número de
votantes, con el fin de comprobar el resultado del escrutinio.
Art. 478 — Al que durante una votación hablare a otro, se le llamará al orden.
Si reincidiere perderá el derecho al voto y se le hará salir del Templo.
Art.479.- Los acuerdos tomados por el Taller y proclamados por el Presidente
son obligatorios para todos.
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CAPÍTULO NOVENO
DE LAS LICENCIAS Y PLANCHAS DE QUITE
SECCIÓN PRIMERA
De las licencias
Art. 480. —Ningún h∴ puede ausentarse de la localidad donde resida su
Taller, sin licencia de éste.
El infractor de esta disposición será dado de baja en el cuadro de miembros
activos, por falta de asistencia, a no ser que dentro del mismo mes de la ausencia
acuda al Taller, expresando lo que hubiere ocurrido, y éste aprecie como
bastantes las razones que le obligaron a proceder de tal manera.
Art. .481 .— Todo taller puede autorizar a uno o más miembros activos para
no asistir a la tenidas, así como para conceder licencias para ausentarse del lugar
de la residencia de aquél.
Tanto la autorización como la licencia deben ser comunicadas por escrito a
los interesados.
Art. 482.— La autorización para no asistir a las sesiones o tenidas no exime
del pago de la cuota mensual y demás que acordare el Taller, las que satisfará el
h∴ que disfrutare de este permiso, como si estuviera presente.
Art. 483.- Toda licencia que se conceda para residir fuera de la localidad
donde exista el Taller, será temporal. No podrá exceder de seis meses para el
Estado a Nación en que aquél radique, ni de un año, para el extranjero.
Art. 484.- Cualquier petición de licencia se sujetará a las siguientes
condiciones:
Primera.- Hallarse el interesado a Plomo con el Tesoro del Taller.
Segunda.- Solicitarlo por escrito en plancha, que con la firma y rúbrica del
peticionario, se depositará en el saco de Proposiciones o se dirigirá al Presidente.
Tercera.- Expresar en la petición el lugar o lugares de nueva residencia y el
tiempo o plazo de la licencia que se solicite.
Cuarta.- Satisfacer anticipadamente las cuotas mensuales y tributos que,
según el Reglamento interior o los acuerdos del Taller, correspondan al tiempo de
duración de la licencia.
Art. 485. — El Presidente someterá la solicitud de licencia a la decisión del
Taller en la misma tenida en que se haga, o en la inmediata.
Art. 486.— Cuando causas justificadas obliguen al hermano que solicite
licencia a salir inmediatamente de la localidad, el Presidente podrá conceder un
permiso previo, sin perjuicio del acuerdo que el Taller tome al recibir en forma la
petición.
Art. 487.- Un Taller puede conceder las prórrogas de licencia que se
soliciten, acreditando los motivos, siempre, que se satisfagan por adelantado las
cuotas mensuales o tributos que correspondan al plazo de la prórroga, según los
acuerdos del Taller o las disposiciones de su Reglamento particular.
Los Talleres tienen atribuciones para dispensar del pago total o parcial de las
cuotas o tributos a los obreros que disfruten de prórroga o licencia.
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Art. 488.— Si cumplida la licencia, el interesado no pide y obtiene prórroga
en los seis meses después de terminado aquélla, quedará inafiliado: es decir, será
dada de baja por falta de asistencia a los trabajos.
Art. 489.— Los hermanos que disfruten de licencia cuidarán de visitar los
Talleres regulares que radiquen en las localidades a donde vayan, a fin de
estrechar los lazos fraternales con todos los masones y colectividades de la
Orden.
SECCIÓN SEGUNDA
De las Planchas de quite
Art. 490 .— Se denomina "plancha de quite" al certificado que acredita legal y
regularmente el retiro de los trabajos activos.
Sólo por acuerdo de un Taller se puede expedir plancha de quite.
Art. 491.—- No obstante el deber de todo buen masón de trabajar
activamente en los Talleres regulares de la Orden, conforme a lo establecido en el
articulo 18 de la Constitución, tiene el derecho de solicitar su plancha de quite del
Taller a que pertenezca corno miembro activo.
Art. 492 .— Para tener derecho a obtener plancha de quite, se requiere:
Primero.- Estar a Plomo con el Tesoro del Taller.
Segundo.- No encontrarse sujeto a ninguna corrección disciplinaria.
Tercero.- No hallarse sometido a procedimiento judicial en la Comisión de
Justicia, ni ante ningún Tribunal masónico.
Cuarto.- No sufrir condena, o haberla cumplido, o ser indultado.
Art. 493.— Toda solicitud de plancha de quite se hará por escrito,
fechándola, y firmada y rubricada por el peticionario.
Art. 494.— No es condición precisa manifestar en la solicitud de plancha de
quite los motivos que obliguen a presentarla, pero sí debe redactarse en las más
corteses formas, pudiendo desestimarse las que no reúnan este requisito.
Art. 495.— La Logia tiene facultades para negar la concesión de plancha de
quite a un h∴ que la solicite, limitándose a darle de baja en las listas de los
afiliados; pero tendrá que dar cuenta motivada de este acuerdo a la Gran Logia, a
al Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos, para que éste lo ratifique si
lo cree oportuno. Si no lo ratifica se le extenderá sin más dilación la plancha de
quite.
Art. 496.— Al hermano que solicite plancha de quite no se le expedirán por la
Tesorería recibos de cotización mensual, hasta que el Taller resuelva sobre la
petición.
Art. 497.— Solicitada por un hermano la plancha de quite, se nombrará en
tenida una Comisión de tres miembros activos que se acerquen al peticionario
para indagar los motivos de su pretensión y procurar que permanezca en el seno
del Taller.
Si accede a retirar la petición, lo hará por escrito, dirigiéndose al Taller.
Si persiste en la solicitud, o las causas son justificadas, se expedirá la
plancha de quite, previo el pago al Tesoro del Taller de los derechos que éste
haya señalado por dicho concepto.
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Art. 498.—Al h∴ que ante la Comisión expresada en el articulo anterior
acceda verbalmente a retirar su solicitud de plancha de quite, se le concederá
para que lo haga por escrito, el plazo improrrogable de treinta días.
Transcurrido éstos sin verificarlo, se expedirá dicho documento.
Art. 499 .— Si hubiere que expedir plancha de quite al h∴que ejerza el cargo
de Tesorero, Limosnero u Hospitalario, Secretario Guarda-sellos, Archivero-
Bibliotecario, Arquitecto-Revisor, Ecónomo, u otro cualquiera que tenga bajo su
custodia intereses del Taller, no se le pondrá en posesión de dicho documento
hasta que no haya hecho entrega de todo cuanto concierne a su cargo al que haya
de sustituirle y ante la Comisión de Hacienda.
Art. 500. — El que obtuviere Plancha de Quite no podrá volver a ser miembro
activo del Taller si previamente no manifestase su conformidad con todo lo hecho
por éste desde el tiempo en que lo abandonó.
Los Talleres no podrán consignar en las Planchas de Quite notas de ninguna
clase.
Art. 501.— Las Planchas de Quite que expidan los Talleres deberán ser
visadas por la Gran Logia respectiva o por el Gran Consejo Federal Simbólico. Si
se tratara de Talleres de dependencia directa.
Este visado sólo podrá ser negado en el caso de que las Planchas de Quite
acordadas por un Taller sean en tal número y en fechas tan cercanas las unas de
las otras que se pueda deducir la existencia de divisiones y daños de índole
interior. Cuando se niegue el visado por estas causas, el poder correspondiente
procederá a realizar la oportuna información cuyo resultado someterá al pleno
respectivo. Entonces se resolverá en definitiva.
Art. 502.— La validez de las Planchas de Quite que concedan los Talleres
caducará al año de su expedición para los Aprendices y a los dos años para los
Compañeros y Maestros.
Los compañeros y Maestros podrán solicitar de la Gran Logia respectiva o
del Gran Consejo Federal Simbólico si procedieren de Talleres de dependencia
directa, que sea revalidada su Plancha de Quite por períodos sucesivos de dos
años. Sobre las solicitudes de esta índole puede recaer acuerdo favorable previa
la información correspondiente comprobadora de la veracidad de las causas que
se aduzcan.
El Aprendiz, Compañero o Maestro que exhiba una Plancha de Quite no
válida será considerado para todos los efectos como masón irregular.
CAPÍTULO DÉCIMO
De los HH∴Visitadores
Art. 503. — El derecho de visita es universalmente reconocido por la Orden.
Tiene su fundamento en la unidad de la familia masónica, y sólo es posible
restringirlo accidentalmente por causas y razones justificadas.
Por consecuencia, los Talleres pueden admitir en sus trabajos a las masones
regulares que se presente como Visitadores en condiciones legales.
Todo Visitador debe poseer el grado en el cual estén abiertos los trabajos del
Taller que visite, justificándolo con su titulo o diploma regular y el correspondiente
retejo de signos, palabras y toques.
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Los que pertenezcan al Grande Oriente Español darán además las palabras
anual y semestral corrientes, o las que rigieron en el Semestre anterior.
El Visitador debe cubrir el Templo tan pronto como los trabajos vayan a
comenzar en grado superior al suyo, o el Taller se constituya en tenida de familia.
Art. 504..— El masón que se presente a visitar un Taller donde no haya sido
recibido anteriormente y que no exhiba su título o diploma, podrá, sin embargo,
admitirse, siempre que su grado se compruebe por medio del examen de signos,
palabras y toques, además de que su cualidad sea garantizada por tres miembros
activos presentes en la sesión, los cuales posean el grado superior en que trabaje
el Taller.
En este caso los nombres de los garantes se ponen por nota en el “Libro de
Presencia” y se hacen constar en acta.
Art. 505 .— Los Talleres tienen facultades para negar la entrada a los
Visitadores cuya presencia pudiera producir descrédito; disgusto o perturbación en
el seno de los mismos.
El Visitador que se creyese ofendido con esta resolución puede apelar al
Poder Ejecutivo correspondiente.
Art. 506.—Todo h∴ presente en su Taller tiene el derecho de oponerse a que
un Visitador asista a la tenida que se esta celebrando; pero deberá manifestar las
causas que para ello tiene. Si el Taller las considera fundadas, se dará aviso al
Visitador a fin de que se retire.
Art. 507.— Los Talleres no deben, bajo ningún pretexto, admitir en su seno,
ni aun a titulo de Visitadores, a los hh∴ expulsados o irradiados de otros Talleres,
ni a los suspendidos de derechos masónicos, ni a los que sufren condena.
El Presidente del Taller que falte a esta prescripción se hace acreedor a una
represión del Poder Ejecutivo correspondiente, o a una suspensión temporal.
Art. 508.— Los Visitadores no tendrán entrada en las tenidas sino después
de leída y aprobada el acta y de tratados los asuntos de familia del Taller.
Se exceptúan únicamente el Gran Maestre Nacional y los Diputados Grandes
Maestres Regionales.
Art.509.— Cuando el Gran Maestre de la Orden se presente a visitar una
Logia, será recibido sin dilación con los honores que corresponden a su alta
jerarquía, suspendiendo la lectura del acta, así como en su caso toda discusión y
votación, hasta que haya tomado asiento. Inmediatamente el Venerable Maestro le
entregará el Mallete y le instruirá del estado de los trabajos en aquel momento y
del asunto que se estuviere tratando.
En igual caso siempre se procederá del mismo modo con el Diputado Gran
Maestre de la Regional en los Talleres de su territorio.
Art. 510.— Los Visitadores deben firmar en el “Libro de Presencia”,
expresando sus nombres, grados, representación y Taller de procedencia.
Art. 511 .— Acordada la recepción de los Visitadores, el Maestro de
Ceremonias los anuncia, y se les da ingreso, acoge y coloca según sus grados y
representación.
Art. 512 .— Desde el momento en que el Visitador penetra en un Taller,
queda sometido a la autoridad disciplinaria del Presidente del mismo, y tiene la
obligación ineludible de acatar y respetar las leyes de la Institución.
Art. 513 .— Los Visitadores pueden tomar parte en la discusión de todo
asunto que no afecte al Tesoro ni a la autonomía del Taller.
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Tienen voz y voto cuando se trata del ingreso de masones o de profanos y
en todo lo relativo al bien general de la Orden , si el Presidente los invita a dar su
opinión sobre al asunto que se discuta, están obligados a manifestarla.
Art. 514— Ningún masón inafiliado puede ser admitido a los trabajos en más
de tres tenidas ordinarias, a menos que empeñe palabra de honor de pedir
afiliación en un Taller de la Federación, habiendo de efectuar esto en un plazo que
no exceda de treinta días.
Cada vez que se admita como Visitador se visará su título o diploma.
Art. 515.— Cuando para justificar la personalidad de los Visitadores
presenten sus títulos o diplomas, éstos serán certificados al dorso por el
Secretario, con el Vº Bº del Presidente y sellados según proceda.
Art. 516.— Se negará la entrada a los visitantes portadores de títulos
masónicos emanados de Talleres irregulares; pero no se podrá retenerles sus
títulos.
Sin embargo, si en ellos se indica falsamente que proceden del Grande
Oriente Español, o de un Cuerpo masónico regular, el Taller en que se presenten
debe retener dichos títulos o diplomas y enviarlos al Cuerpo Ejecutivo para que en
su vista resuelva.
CAPÍTULO UNDECIMO
De los Miembros Honorarios
Art. 517.—Todo Taller puede nombrar Miembro Honorario a cualquier masón
regular que haya prestado servicios recomendables al Taller o a la Institución.
Art 518.— A fin de que los Miembros Honorarios de un Taller puedan
ostentar este carácter en todas las Cámaras del mismo, se procurará que
solamente sean nombrados como tales los masones que, por lo menos, posean el
grado más alto en que trabaje el Taller que haga la designación.
Art. 519.— Para acordar dicho nombramiento, se ha de presentar en tenida
ordinaria una petición motivada, con la firma de tres obreros activos del Taller, los
cuales Posean el grado de Maestro.
Si el Taller la aprueba por las dos terceras partes de votos de los miembros
activos presentes, se comunica al interesado para su aceptación, y sabida ésta, se
inscribe su nombre y nuevo carácter en el cuadro del Taller; expidiéndose el titulo
correspondiente al nombramiento
Art. 520.- Los Miembros Honorarios, en el Taller de que lo sean, tienen
derecho a hacer proposiciones y tomar parte en los debates, menos en los que se
refieran a asuntos relacionados con el Tesoro del Taller.
• Art. 521.— Los Miembros Honorarios no disfrutan del derecho de elección
activa ni pasiva.
Están exentos de pago de la cuota mensual y de todos los demás tributos.
Art. 522.— El carácter de Miembro Honorario se pierde:
Primero. — Por acuerdo del Taller que lo hubiese nombrado.
Segundo.- Por renuncia voluntaria.
Tercero.- A los noventa días después de haber obtenido la plancha de quite
en el Taller de que el interesado fuere miembro activo.
Art. 523.— Jamás ni por concepto alguno, pueden los Talleres nombrar
Miembros Honorarios de los mismos a los profanos.
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CAPITULO DUODECIMO
De la adopción de Menores (Lowetones)
Art. 524.— Se llaman Lowetones los menores de edad adoptados por los
Talleres Simbólicos.
Este protectorado masónico es la Solemne Presentación en Logia del hijo
legítimo, natural o adoptivo de un Maestro Masón miembro activo u honorario de la
misma. Su ceremonia Constituye la sanción del compromiso que adquiera el Taller
con el adoptado.
Art. 525.- No obstante lo consignado en el párrafo segundo del artículo 27, los
Talleres tienen amplias facultades para fijar en cada caso las clases y condiciones
de los compromisos morales y materiales que puedan contraer al admitir
Lowetones.
Art. 526.- Todo Lowetón tiene el derecho de ser iniciado gratuitamente en su
Logia adoptante previos los siguientes requisitos:
Primero — Haber cumplido diez y ocho años de edad y no exceder de diez y
nueve.
Segundo.- Solicitarlo del Taller por escrito de su puño y letra, acompañando
el certificado de adopción, o justificando ésta debidamente.
Art. 527.- Los Lowetones no asisten a las tenidas ni deben conocer ningún
secreto del Rito.
Sin embargo cuando la edad y condiciones intelectuales de los adoptados lo
permita, el Taller adoptante tan solo a aquellos trabajos de la Cámara de Aprendiz
que por su índole particular puedan contribuir al desarrollo de su Inteligencia y al
conocimiento elemental de los principias y doctrinas de la Institución
Las Logias serán muy prudentes en invitar a trabajos a sus hijos adoptivos, y
cuidarán de que éstos jamás presencien una iniciación de profanos.
Art. 528.— Para la admisión de Lowetones se cumplirán los requisitos y
condiciones siguientes:
Primero.- Será presentada en Logia la solicitud de adopción, firmada por el
padre o tutor del niño.
Segundo.- Se dará lectura de la solicitud en tenida de familia, y acto continuo
será sometida al juicio del Taller.
Tercero.- Si éste accede a lo solicitado, el Presidente señalará el día en que
haya de efectuarse la ceremonia de adoptación.
Cuarto.- Ninguna propuesta de adopción de menores puede ser presentada
a la Logia con el carácter de urgente.
Quinto.— En las discusiones y votaciones del Taller referentes a la adopción
no pueden estar presentes ni el padre o tutor del niño propuesto, ni los miembros
activos u honorarios unidos a éste por vínculos de consanguinidad.
Sexto.- Una vez efectuada la ceremonia, el Taller expide el correspondiente
certificado de Lowetón, que se entregará al padre o tutor del adoptado.
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CAPITULO DECIMOTERCERO
Del Gobierno de los Talleres
Art. 529.—- Los Talleres son autónomos en su gobierno interior,
principalmente en todo lo que se refiere a su régimen económico, organizando
según sus necesidades sus ingresos y gastos, previa aprobación por los mismos
de sus tarifas y presupuestos.
Art. 530.- Todo Taller tiene facultades para dispensar a sus obreros del pago
total o parcial de las cotizaciones y demás tributos señalados para el Tesoro del
mismo.
Esta exención no podrá nunca alegarse en contra de las obligaciones
señaladas en la Ley de Tributación.
Art. 531.- Cada Taller se regirá interiormente por un Reglamento particular,
que será aprobado por el Poder Ejecutivo correspondiente en cuanto no se oponga
a la Constitución, a estos Estatutos y Reglamentos y a las leyes y decretos del
Grande Oriente.
Art. 532.— El Reglamento particular de un Taller no podrá ser variado ni
modificado sino por acuerdo de las dos terceras partes, por lo menos, de sus
miembros activos.
TITULO DECIMOTERCERO
DE LOS TRABAJOS ESPECIALES DE INICIACIÓN, CONCESIÓN DE
GRADOS, AFILIACIÓN Y REGULARIZACIÓN
CAPITULO PRIMERO
De la iniciación de profanos
Art. 533.— Para ser admitido a la iniciación en la Orden es necesario e
imprescindible el cumplimiento de los requisitos exigidos en el articulo 5º de la
Constitución.
La iniciación de profanos sólo puede verificarse en los Talleres Simbólicos,
salvo autorización especial concedida al efecto por el Gran Maestre Nacional o por
los Diputados Grandes Maestres de las Regionales en los Talleres de sus
respectivas jurisdicciones.
Art. 534.— Todo profano que llene las condiciones exigidas por la
Constitución, y que pretenda ser recibido francmasón, debe siempre ser propuesto
por uno o más Maestros activos del Taller de que desee formar parte.
Esta solicitud debe ser depositada en el Saco de Proposiciones.
Art. 535.— Al presentar o apoyar cualquiera solicitud de iniciación de
profanos, los Maestros Masones deben inspirarse en este precepto esencial:
Si la propagación de la Orden es el más importante de todos los trabajos, las
admisión de un profano en su seno es el trabajo más peligroso.
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Art. 536.— Cuando un Aprendiz o Compañero quiera presentar una
proporción de iniciación, deberá pedir su firma a un Maestro, miembro activo del
Taller, y sólo con este requisito podrá depositarla en el Saco de Proposiciones.
Art. 537.— EL profano que aspire a ser iniciado hará la petición escrita de su
puño y letra, expresando su nombre, apellidos paterno y materno, fecha de su
nacimiento, naturaleza, estado civil, residencia habitual, profesión u ocupación y
domicilio durante los últimos cinco años.
Esta solicitud deberá contener la fecha y al pie de ella la firma y rúbrica del
peticionario.
El Presidente del Taller dejará sin curso la que no llene estos requisitos.
Art. 538.— Leída la propuesta de iniciación, pero no los nombres del
proponente o proponentes, el Venerable Maestro la somete a la consideración del
Taller, quien la acepta o rechaza en votación ordinaria, si ningún hermano solicita
escrutinio secreto.
Si es admitida en principio, el Presidente nombra secretamente una Comisión
de tres Maestros aplomadores entre los miembros activos del Taller.
No pueden formar parte de esta Comisión ninguno de los proponentes.
El nombramiento de aplomador, a la vez se utilizará como plancha de a
plomo escribiendo el informe a continuación de las indicaciones que contenga.
Art. 539.— Los informes versarán sobre la constante probidad del profano en
el curso de su vida, sobre la exactitud en el desempeño de los deberes de su
estado, sobre la prudencia y firmeza de sus principios y sobre el desarrollo de sus
facultades intelectuales.
Art. 5 40.—Los tres comisionados aplomadores dan al Taller, cada uno en
particular y por escrito, los informes o noticias, que suscribirán.
La información será redactada de un modo explicito y terminante, en el
intervalo de tres tenidas ordinarias, y se depositará en el Saco de Proposiciones.
De las tres aplomaciones que se hagan, dos por lo menos serán producto de
informes adquiridos directamente.
Si el profano reside fuera de la localidad donde exista el Taller, el Venerable
señalará a los aplomadores el tiempo necesario.
Cuando los Comisionados consideren preciso una prórroga, la pedirán al
Venerable Maestro, quien se la concederá por un plazo que no podrá exceder de
quince días.
El aplomador que por cualquier circunstancia no pudiese cumplir su
cometido, lo pondrá en conocimiento del Presidente del Taller, el que resolverá lo
que crea más conveniente.
Art. 541.— El Taller, dentro de los tres días siguientes al en que haya sido
presentada la propuesta de iniciación de un profano, dará cuenta de ésta al Poder
Ejecutivo correspondiente.
También se comunicará la propuesta a los Talleres indicados en el artículo
365.
El Orador de la Logia o del Triángulo cuidará de la ejecución de esta
formalidad.
Art. 542.— Además de los Comisionados aplomadores, todos los hh∴ sin
distinción de Taller ni jerarquía, tienen la obligación de tomar cada uno por sí
informes secretos sobre las cualidades del propuesto a la iniciación, y de hacer a
la Logia, o aparte al Venerable, todas aquellas advertencias que crean
conducentes a un asunto de tanta importancia.
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Art. 543.— Respecto de las aplomaciones se cumplirán los Preceptos
siguientes:
Primero.- Se dará lectura en tenida a los informes que aparezcan en el
Saco de Proposiciones omitiendo los nombres de los informantes y haciendo
constar en acta si aquéllos son favorables o desfavorables, sin consignar tampoco
los nombres de los aplomadores.
Segundo.- Si los tres informes son desfavorables, se queman entre
Columnas, y el candidato queda rechazado, archivándose el expediente, al que se
unirá la solicitud de iniciación con las anotaciones correspondientes.
Tercero — Cuando los informes sean contradictorios, el Venerable Maestro
nombra tres nuevos aplomadores los cuales informan en un plazo que no
excederá de quince días.
Cuarto.- Si ampliado el número de Maestros aplomadores, cuatro de los
informes coincidiesen desfavorablemente, queda rechazado el profano. Las
aplomaciones se queman entre Columnas, y el expediente se archiva con la
solicitud de iniciación, haciéndose en lla las anotaciones que correspondan.
Quinto.— Siempre que tres informes de los Maestros aplomadores sean
favorables, se prosiguen los trámites de la propuesta de iniciación.
Art. 544.— Cumplida la formalidad de las aplomadores con resultado
favorable al profano, se han de verificar tres votaciones o escrutinios para que el
candidato sea admitido a las pruebas de la iniciación.
Estas tres votaciones se correrán por bolas en tres tenidas diferentes.
Por acuerdo del Taller los dos últimos escrutinios pueden efectuarse en una
misma tenida, y el último por el signo ordinario, si ningún h∴ reclama la votación
por bolas.
Art. 545.— Para ser admitido un candidato a las pruebas de iniciación
necesita reunir en cada escrutinio la unanimidad de votos a su favor.
Si es favorable el éxito del primer escrutinio, se efectuará el segundo; y si
éste resulta también favorable, se pasará al tercero.
Resultando limpios los tres escrutinios, el Venerable Maestro señala el día en
que el proponente deberá conducir al profano al lugar de la iniciación.
Art. 546.— Cuando resulten una o dos bolas negras en cualquier escrutinio,
se procederá del modo siguiente:
Primero.— Inmediatamente se volverá a hacer la votación, si en esta
apareciese por segunda vez la bola o bolas negras, el Venerable Maestro
suspenderá los trabajos por breves momentos a fin de que el h∴ o hh∴ que las
hubiesen depositado le informen secretamente y fuera del Taller de los motivos
que le hayan impulsado a ello.
Segundo.- Si las causas de la oposición fueran de poca importancia y el h∴o
hh∴ no se decidiesen a retirar su voto en contrario, a pesar de las exhortaciones
del Venerable Maestro, o si fueran de gravedad, el Venerable someterá a la
discusión y aprobación del Taller, sin revelar el nombre del h∴ o hh∴ los motivos
que le hubieran indicado, los cuales serán admitidos o rechazados por la Logia.
Si el Taller los rechaza, el escrutinio se declara puro y limpio.
Si admite las razones expuestas en contra, la propuesta de iniciación no
podrá nuevamente ser presentada hasta que hayan transcurrido, por lo menos tres
meses.
Tercero.- Cuando no se presentaren el h∴ o hh∴ que hubieren depositado
la bola o las bolas negras estas se considerarán como blancas y el escrutinio será
declarado puro y limpio.
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Art. 547.— En caso de tres o más bolas negras en cualquier escrutinio, el
profano podrá volver a ser propuesto dentro de tres meses, sin nueva solicitud por
su parte, sino reproduciendo el proponente la primitiva.
El Taller puede señalar un término más breve.
Artículo 548— Si resultasen cuatro o más bolas negras pero en número
inferior a la tercera, parte de los votantes, el profano podrá ser propuesto dentro
de un año, sin nueva solicitud por su parte, sino reproduciendo la primitiva el
proponente.
En este caso se nombrarán nuevos aplomadores.
Art. 549.— Cuando en un escrutinio resulte una tercera parte o más de votos
contradictorios, el profano será rechazado.
Igualmente lo será el profano que en su segunda propuesta y obtenga tres o
mas bolas negras en un escrutinio.
En ambos casos, sólo podrán pedir, dichos profanos nuevo ingreso a los dos
años, y síise obtuviese en la votación el resultado indicado en el primer párrafo de
éste articulo, serán "definitivamente” rechazados.
Los hh∴ que emitan bolas negras en la votación para admisión de profanos
están en la obligación de comunicar secretamente al Venerable Maestro las
razones que hayan tenido para ello, sin que las manifestaciones que hagan
puedan variar la ejecución de lo preceptuado en el artículo 548 y primer párrafo de
este 549.
Art. 550.— Desde el día en que un profano es propuesto a la iniciación hasta
el en que haya de verificarse ésta, han de. transcurrir por lo menos tres tenidas
ordinarias.
Sólo por motivos muy urgentes y por acuerdo unánime del Taller, puede
abreviarse dicho plazo. Nunca, ni por ningún concepto, es permitido prescindir de
las aplomaciones o informes, ni de los tres escrutinios, según disponen
respectivamente los artículos 544 y 545.
Art. 551.— Admitido el profano para la iniciación, y una vez en el local del
Templo, el experto se hará cargo de él y le recogerá las armas y metales que lleve
consigo.
El profano que se negare a entregarlos será conducido fuera del edificio, sin
proceder a su preparación.
Art. 552.— Queda prohibido terminantemente el encerrar más de un profano
en la Cámara de reflexiones.
Art.553.—El profano sufrirá las pruebas prescritaspor los rituales. La Logia
puede señalar otras extraordinarias, o modificar prudentemente las de costumbre
si el estado físico del profano lo exige, y siempre que no se atente a la esencia del
Rito.
Art.554.— En todo el curso de los trabajos de iniciación, el Experto y demás
hh.. deberán conservar la mayor prudencia y seriedad, a fin de inspirar en el ánimo
del neófito un gran sentimiento de respeto.
Art. 555.— El Experto es el único preparador responsable del profano hasta
que vea la luz masónica, y procurará no molestarle con pruebas impropias del alto
y sublime concepto que debe formarse de la Institución.
Art.556.— El Experto que abusare de la docilidad con que los profanos
suelen prestarse a toda clase de pruebas, pagará una multa con destino al Tronco
de Beneficencia del Taller, y será amonestado por primera vez. Si reincidiere, lo
juzgará la Asamblea de Altas e inmediatas sanciones.
Art. 557.— Se prohíbe iniciar a más de dos profanos en una misma tenida.
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Art.558.— Cuando sean dos los candidatos sometidos a la iniciación, se
procurará que no permanezcan juntos o simultáneamente en el Templo durante
las pruebas. Sólo podrán reunirse los dos candidatos para recibir la luz y prestar la
promesa o juramento.
Art. 559.— Antes de comenzar la iniciación de un profano, el Venerable
Maestro anunciará, por medio de los Vigilantes, que el Taller se constituye en
tenida magna con dicho objeto. Desde tal instante ya no podrá dedicarse la Logia
más que al trabajo de las pruebas y recepción del candidato.
Después de las pruebas, y mientras el profano está fuera del Templo, el
Venerable consulta al Taller sobre la admisión definitiva del iniciado. Decídese por
mayoría y en votación ordinaria.
Si es rechazado el candidato, ya no se le da nuevamente entrada, y su
iniciación se aplaza por tres meses.
Si la votación es favorable, se continúa la iniciación. A seguida de prestar
juramento el candidato, el Orador pronuncia su discurso. Después de esto sólo
podrá usar de la palabra el nuevo candidato, previo el permiso del Venerable
Maestro.
Inmediatamente se circula el Saco de Beneficencia.
Art. 560.— Todo Taller debe entregar desde luego a cada nuevo iniciado la
Constitución, los Estatutos y Reglamentos generales, el Ritual del grado y el
Reglamento particular del Taller.
Igualmente le entregará el certificado o diploma tan pronto como lo reciba del
Poder Ejecutivo Correspondiente.
Art. 561.— Las Logias y los Triángulos darán cuenta al Poder Ejecutivo que
corresponda de todas las iniciaciones que verifiquen, así como de todas las
incidencias que ocurran con los profanos, lo mismo si se aplaza la admisión, que
si son rechazados definitivamente.
Art. 562.— El profano rechazado por un Taller no puede volver a ser
propuesto en otro.
En caso de duda se consultará con el Grande Oriente.
Art. 563.— Si dentro de los quince días siguientes al en que el Taller
comunique su propuesta de iniciación, según determina el artículo 541, el Poder
Ejecutivo correspondiente no ha contestado oponiéndose a ella, se entenderá que
el nombre del profano no figura en el registro de rechazados.
Esta disposición queda sin efecto, por razón de la distancia, para los Talleres
de América mientras existan.
Art. 564.— Si una iniciación no se efectúa dentro de los nueve meses
después de ser presentada la proposición al Taller, ésta se archiva y queda sin
efecto.
Para que la iniciación pueda verificarse, transcurrido dicho plazo, es necesario que
la proposición sea reproducida, y se le somete a los mismos trámites y requisitos
que si hubiera sido por primera vez.
Art. 565.— Cualquier Taller Simbólico puede comisionar a otro de la misma
jerarquía en la Federación, para que éste, en nombre de aquél, inicie a un profano.
Esto sólo puede efectuarse cuando el Taller peticionario haya tramitado
legalmente la propuesta del profano, y éste se halle pendiente no más que de las
pruebas de Iniciación.
La forma y condicionas para comisionar un Taller a otro con este objeto,
serán las mismas que expresa el artículo 366.
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• Art. 566. — Toda iniciación de un profano hecha sin los requisitos que
expresan la Constitución y estos Estatutos y Reglamentos generales, deben
tenerse por nula y sin ningún valor.
CAPITULO SEGUNDO
DE LA CONCESIÓN DE GRADOS (EXALTACIONES)
Art. 567.— Los grados que concede el Grande Oriente Español son los de
Aprendiz, Compañero y Maestro.
Nadie puede ser exaltado a un grado sin estar investido legalmente del
anterior.
Art.568.— Las exaltaciones deberán ser justificadas por la edad profana, por
el tiempo transcurrido de grado a grado y por las condiciones morales e
intelectuales del aspirante o candidato.
Art. 569.— La edad profana necesaria o imprescindible para la posesión de
los grados 1º, 2º, y 3º, es la siguiente:
Primero.— Veintiún años cumplidos para ser iniciado en el grado de
Aprendiz.
Los hijos de masón y los Lowetones pueden ser recibidos Aprendices
cuando hayan cumplido dieciocho años.
Segundo.— Veintitrés años cumplidos para ser Compañero.
El hijo de masón y los Lowetones podrán obtener este grado a los veintiún
años.
Tercero.— Más de veinticinco años para ser exaltado a Maestro masón.
Cuando las necesidades de los Talleres, debidamente justificadas, lo
reclamen, podrán estos solicitar autorización del Poder Ejecutivo correspondiente
para dispensar a los Compañero la edad profana reglamentaria en las
exaltaciones al grado de Maestro.
Los hijos de masón y los Lowetones podrán ser recibidos Maestros después
de cumplir los veintitrés años.
Are 570.— A más de la edad profana expuesta para ser exaltado o
regularizado en los grados 2º y 3º son condiciones indispensables las siguientes
Primera.- Para ser admitido Compañero (grado 2º) justificar cinco meses en
el grado de Aprendiz.
Segundo.- Para ser recibido Maestro (grado 3º), llevar siete meses de
compañero y un año de masón.
El tiempo señalado en los párrafos precedentes se entenderá como
mínimum.
Art. 571.— Además de las condiciones señaladas en los dos artículos
anteriores, para ser exaltado a un grado se han de reunir las siguientes:
Primera..- Ser miembro activo de un Taller.
Segunda.- Poseer el título o diploma del grado anteriormente obtenido.
Tercero.- Haber observado una conducta irreprensible, tanto en el mundo
masónico como en el profano.
Cuarta — Hallarse a Plomo con el Tesorero.
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Quinta.- Demostrar mediante riguroso examen, que se posee una instrucción
completa del grado que se ostente.
Art. 572.— Para la exaltación al grado 2º (Compañero) de cualquier h∴
además de que concurran en él las condiciones anteriores marcadas, se
necesitará que dos Maestros elegidos secretamente por el Venerable Maestro,
aplomen sobre los extremos siguientes:
Primero.— Capacidad intelectual del h∴propuesto para la elección.
Segundo.— Discreción y reserva.
Tercero.— Perseverancia y voluntad.
Cuarto.— Tolerancia.
Art. 573.— Si esos informes fueren favorables, el candidato comentará por
escrito, o de modo oral, en Cámara de Aprendiz un libro sobre política, religión o
sociología.
Art. 574.— Para la exaltación al grado 3º (Maestro) de cualquier h∴, además
de que concurran en él las condiciones anteriores, se necesitará que tres
Maestros, elegidos secretamente por el Venerable Maestro, aplomen sobre los
siguientes extremos:
Primero.— Comprensión, por parte del candidato, del Rito y de su finalidad
en la Orden.
Segundo.— Adhesión a la Institución.
Tercero.— Causas que motivan su permanencia en ella.
Cuarto.— Condiciones de generosidad y altruismo.
Quinto.— Cualidad principal de su carácter.
Art. 575.— Si esos informes fuesen favorables, el candidato comentará en
Cámara de Compañero, por escrito o de modo oral, un libro sobre política, religión
o sociología, y un tema de carácter masónico que le fijará el Venerable Maestro.
Art. 576.— Ninguna Cámara de un Taller puede verificar una exaltación sin
que antes se hayan cumplido los requisitos siguientes:
Primero.— Que la propuesta o solicitud de un candidato sea hecha por
escrito y depositada en el saco de Proposiciones.
Segundo.— Que el candidato haya cumplido las condiciones exigidas en los
siete artículos anteriores.
Tercero.— Que la Cámara lo acuerde en votación secreta por las dos
terceras partes de los miembros presentes.
Art. 577.— La actividad o tiempo de posesión de un grado para los efectos
del artículo 568 se computará sumando el tiempo que el masón haya estado
afiliado al Taller o Talleres correspondientes a su grado.
Art. 578.— Las Cámaras superiores de los Talleres tienen derecho a solicitar
del Poder Ejecutivo correspondiente solicite de la Organización filosófica el
aumento de grado para un miembro activo de aquéllos, siempre que el propuesto
reúna las condiciones legales, justificando además las causas o razones de la
solicitud.
Art. 579.— Los obreros que pretendan aumento de salario deberán solicitarlo
por escrito en la Cámara de su grado o por medio del Saco de Proposiciones.
El Presidente remitirá inmediatamente esta solicitud a la Cámara del grado a
que se aspira.
Art. 580.— La posesión de un grado implica la investidura de uno inferior.
Igualmente la presentación del titulo o diploma de un grado cualquiera
significa la posesión de todos los anteriores, aunque el documento no lo exprese.
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Los grados dan derecho a la representación, al ejercicio de las atribuciones
que la ley concede y al uso de las decoraciones correspondientes.
También dan derecho en el de Maestro a ejercer la instrucción y enseñanza.
Art. 581.— La investidura de Maestro (grado 3º) imprime el pleno carácter de
francmasón, concede la posesión y ejercicio de todos los derechos de la
fraternidad e impone, a la vez, la aceptación y observancia estricta de todos sus
deberes.
Art. 582.— Ningún Taller puede conferir grados a masones que no cuente
entre sus miembros activos.
El acto solemne de conferir la investidura de un grado en cualquier Taller
sólo puede efectuarlo el Presidente del mismo, o el que legalmente ejerza sus
funciones.
Fuera de los Talleres legalmente constituidos en el Grande Oriente Español,
nadie tiene atribuciones para iniciar profanos ni conferir grados, sin expresa
autorización del Poder Ejecutivo correspondiente.
Art. 583.— En las localidades donde no existan Logias ni Triángulos, sólo el
Gran Maestre Nacional, o los Diputados Grandes Maestres en el territorio de su
jurisdicción, tienen facultades para autorizar expresamente, en cada caso, al
Maestro masón miembro activo del Oriente que haya de iniciar a un profano o
conferir los grados 2º y 3º en nombre del Cuerpo a que la localidad pertenezca.
No podrá efectuarse ningún aumento dé grado sin que el candidato satisfaga
por adelantado los derechos correspondientes al Tesoro del Taller en que se
presente la solicitud o propuesta.
Los Talleres tienen facultades para dispensar de dicho pago a los
candidatos.
Esta concesión no exime a los Talleres de satisfacer al Gran Tesoro del
Poder Ejecutivo correspondiente los derechos señalados por la expedición del
titulo o diploma que corresponda, según la ley vigente de tributación.
Art. 584.— EL juramento o promesa para la investidura de un grado deberá
contener, además de la fórmula particular exigida por el Rito, la siguiente:
¿Prometéis, bajo la invocación del Gran Arquitecto del Universo, por vuestro
honor y fe de caballero, cumplir la Constitución del Grande Oriente Español, sus
Estatutos y Reglamentos generales, leyes, decretos y el Reglamento particular de
este Taller, así como haberos bien con el grado que se os va a conferir?
El interrogado, poniendo la mano derecha sobre la Constitución, la que
tendrá una escuadra y un compás, o los atributos que corresponda, contestará:
Sí, prometo.
Después añadirá el Presidente:
Si así lo hicierais, el Gran Arquitecto del Universo, vuestra conciencia y la
Orden os lo premien y si no os lo demanden.
En seguida se le dará la investidura, condecorándolo con las insignias de su
grado.
Art. 585.— Los Talleres pueden reducir no más que a la mitad, a lo sumo, el
tiempo que el artículo 570 señala de intervalo entre los grados, siempre que la
Cámara que reciba la propuesta lo acuerde, por unanimidad de votos de los
hermanos presentes en escrutinio secreto, y sólo en los dos casos que siguen:
Primero.— Si la propuesta se refiere a un masón de mérito singular y
extraordinario reconocido por el Taller.
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Segundo.— Cuando el obrero a favor del cual se solicite dicha revisión de
actividad en el grado, haya de emprender un viaje y permanecer ausente por un
tiempo más largo del que necesitaría para ser promovido.
Esta gracia no puede concederse si por virtud de ella quedase incumplida
alguna de las condiciones señaladas en los artículos 567 y 569.
De todo acuerdo respecto a este asunto se dará cuenta, justificando los
motivos, al Poder Ejecutivo que le corresponda.
Art. 586.— En tenida magna de exaltación, el Orador pronunciará un
discurso que versará sobre la instrucción del grado conferido.
Después se circulará el Saco de Beneficencia, aunque otras Cámaras se
hubiese circulado anteriormente.
CAPITULO TERCERO
DE LAS AFILIACIONES
SECCIÓN PRIMERA
De la afiliación en los Talleres Simbólicos
Art. 587.—Todo masón regular que haya cesado de ser miembro activo de
una Logia o de un Triángulo y posea la correspondiente "plancha de quite" puede
pedir su afiliación en cualquier Taller Simbólico.
La afiliación se pide por escrito, depositando la solicitud en el Saco de
Proposiciones.
Dicha petición deberá ser firmada y rubricada por el solicitante,
suscribiéndola también como proponente un Maestro miembro activo del Taller. En
ella hará constar el peticionario su nombre profano, apellidos paterno y materno,
nombre simbólico, naturaleza, fecha de nacimiento, estado civil, profesión,
residencia habitual, grado, Taller de procedencia y Oriente a que haya
pertenecido.
A la solicitud se acompañará el titulo o diploma del grado que posea el
peticionario y su plancha de quite.
Art. 588.—Toda proposición de afiliación es leída por el Orador en Cámara
de Aprendiz, omitiendo el nombre del proponente.
Tomada en consideración por la mitad más uno de los obreros del Taller, en
votación ordinaria, si ninguno lo reclama por bolas, el Presidente designa en
secreto a tres Maestros aplomadores, los cuales informan a la Logia respecto del
peticionario, en iguales condiciones y cumpliendo los mismos requisitos que los
señalados para las propuestas de iniciación de profanos.
Si las informaciones resultasen favorables al candidato, se procederá a
verificar una sola votación por bolas.
Para que el propuesto pueda ser admitido necesita reunir en su favor las dos
terceras partes de votos de los obreros del Taller presentes en la tenida.
Art. 589.— Cuando el escrutinio de admisión arroje menos de las dos
terceras partes de votos a favor del propuesto, podrá repetirse la votación dentro
del tercer mes siguiente al en que se verificó el anterior escrutinio.
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No resultando en la segunda votación las dos terceras partes de votos
favorables, se verificará una tercera después de otros tres meses.
Si en este escrutinio tampoco resultaren las dos terceras partes de votos a
favor del peticionario, la solicitud será rechazada para siempre.
Art. 590.— Admitida la afiliación, el Secretario invita al afiliado a presentarse
a la Logia a la primera tenida. El Venerable le participa el favor que se le ha
otorgado y le hace prestar al pie del Ara el siguiente juramento:
Juro o prometo por mí honor y fe de masón no haber pertenecido a Logia
alguna desde que recibí mi plancha de quite.
Asimismo juro obedecer y cumplir la Constitución del Grande Oriente
Español, sus Estatutos y Reglamentos generales, leyes y decretos, como el
Reglamento interior de este Respetable Taller.
Después de esto, el candidato es proclamado entre Columnas miembro
activo del Taller.
Art. 591.— Si por causa justificada no puede presentar el que solicite su
afiliación los documentos necesarios, o los presenta incompletos, el Taller abrirá
una información, de cuyo resultado se dará cuenta al Poder Ejecutivo
correspondiente.
La afiliación no podrá verificarse hasta que dicho Alto Cuerpo disponga lo
que proceda.
Art. 592.— Todo masón puede pedir reincorporación al Taller de que haya
salido, mediante los trámites de afiliación.
Art. 593.— El masón expulsado del Taller para siempre o para un tiempo
determinado, por sentencia o por castigo que se la haya impuesto, no puede ser
afiliado en ningún otro Taller.
Art. 594.— Un masón dado de baja en cualquier Taller por falta de asistencia
o por falta de pago, no puede ser afiliado en otro sin quedar antes solvente con el
primero.
Si por cualquier circunstancia no existiese el Taller de su procedencia, el
masón está obligado a satisfacer en el que solicite afiliación una multa para el
Tronco de Beneficencia, cuyo importe será de cuatro cuotas mensuales.
Solamente después de satisfecha esta obligación podrá tramitarse la
solicitud de afiliación.
Art. 595.— Los Talleres procuraran dispensar del pago de los derechos de
afiliación a los masones del Grande Oriente Español que por causa justificada
estén inafiliados, siempre que no hayan transcurrido seis meses desde la fecha en
que hubiesen obtenido su plancha de quite en el Taller de procedencia.
Art. 596.— Los masones propuestos para la afiliación que, por razón de
residencia, no pudiesen asistir personalmente a prestar ante el Ara la promesa
debida, enviarán ésta por escrito.
Dicha promesa será leída por el hermano Secretario en Cámara de Aprendiz,
estando todos los presentes en pie y al orden.
A seguida el Maestro de Ceremonias hace entre Columnas la debida
proclamación.
De este acto se dará conocimiento oficialmente al afiliado.
Art.597.— Ningún miembro activo de una Logia de la Federación puede
pedir afiliación a otra sin antes obtener en la primera su plancha de quite.
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CAPITULO CUARTO
DE LAS REGULARIZACIONES
Art. 598.— Los masones irregulares que pretendan obtener la regularidad en
el Grande Oriente Español, deberán solicitarlo de una Logia o de un Triángulo en
la forma y condiciones señaladas en el capítulo VI, artículos 12 al 19.
Las peticiones de regularización, apoyadas y firmadas por tres Maestros, se
depositarán en el Saco de Proposiciones.
Art. 599.— De toda propuesta de regularización se dará lectura por el Orador
en Cámara de Aprendiz, omitiendo los nombres de los proponentes.
Después quedará sometido a los mismos trámites y requisitos señalados
para las propuestas de iniciación de profanos en los artículos 538 al 544 inclusive.
Art.600.— Para que un masón irregular pueda ser admitido, necesita que la
regularización se apruebe en cada una de las tres votaciones, por las dos terceras
partes de los obreros presentes. Si el primer escrutinio es favorable se pasa el
segundo, y si éste también resulta favorable se verificará el tercero.
Una vez aprobada la regularización en el tercer escrutinio, el Secretario invita
al candidato para que se presente en la Cámara de Aprendiz a prestar el
juramento debido.
Art. 601.— Si en alguna de las tres votaciones para la regularización el
candidato no obtuviese el número de votos expresados en el artículo anterior, la
regularización quedará aplazada por tres meses. En los quince días siguientes a
este plazo podrá reproducirse la propuesta sin nueva solicitud del candidato, y
será otra vez sometida a las tres votaciones.
Si en ésta segunda presentación tampoco obtuviese el número de votos
necesarios en cualquiera de los escrutinios, la regularización no podrá ser
nuevamente propuesta sino al cabo de un año.
En este caso deberá presentarse nueva solicitud, y será tramitada con las
mismas formalidades que la vez primera.
Art. 602.— Toda propuesta de regularización que obtenga en contra la
unidad de votos, o solamente en su favor menos de tres votos, quedará rechazado
definitivamente.
También quedará rechazada para siempre la propuesta que, presentada al
Taller por tercera vez, no obtenga en su favor el número de votos necesarios.
Art. 603.—El juramento o promesa que el masón irregular deberá prestar
ante el Ara para ser regularizado será el siguiente:
"Juro y prometo por mi honor y fe de masón obedecer y cumplir la
Constitución del Grande Oriente Español, sus Estatutos y Reglamentos generales,
leyes y decretos, como también el Reglamento particular de este Respetable
Taller."
Después de esto, el candidato es proclamado, entre Columnas, miembro
activo del Taller.
Art. 604.— Los candidatos que por razón dc residencia no puedan asistir
personalmente al acto de la regularización, enviarán la promesa por escrito al
Taller en que la hubiesen solicitado, procediéndose como dispone el articulo 596.
98

Art. 605.— No se procederá a ninguna regularización sin que el propuesto
para ella acredite el pago de los derechos fijados en el Taller por este concepto, y
además los correspondientes al titulo o diploma regular que deba obtener.
TITULO DECIMOCUARTO
DE LA SUSPENSIÓN DE TRABAJOS Y DISOLUCIÓN O SEPARACIÓN DE
LOS TALLERES
CAPITULO PRIMERO
DE LA SUSPENSIÓN DE TRABAJOS EN LOS TALLERES
Art. 606.— La suspensión de un Taller por causa de delito o falta señaladas
en la ley, solo compete a los Tribunales de Justicia a que correspondan.
El Poder Ejecutivo de que dependan los Talleres tiene facultades para
suspender a estos previamente, en los casos y por el tiempo que la ley denomina.
Art. 607.— La suspensión de un Taller no impedirá que se exija la
responsabilidad masónica consiguiente por sus actos a los individuos que la
hubieren contraído.
Art. 608.— Decretada la suspensión de un Taller, éste se halla obligado a
enviar al Poder Ejecutivo de que dependa:
Primero.— La Carta Constitutiva.
Segundo.— Los libros o registros indicados en los artículos 52 y 53 de estos
Estatutos y Reglamentos.
Tercero.— Todos los documentos y sellos.
Cuarto.— El Archivo.
Quinto.— Resguardo de haber depositado con toda clase de garantías los
fondos existentes en el Tesoro y en el Tronco de Beneficencia, después de
pagadas todas las obligaciones de ambos, haciendo constar en este documento
cuál haya de ser el destino de dichos fondos en caso de decretarse por el Poder
Ejecutivo que corresponda la disolución del Taller, de acuerdo en un todo con lo
dispuesto en los párrafos segundo y tercero del artículo 48 de los presentes
Estatutos y Reglamentos generales.
La resistencia al cumplimiento de esta disposición Constituirá caso de
responsabilidad para el Taller.
Art. 609.— El Taller que por sí acuerde suspender sus trabajos por un
período mayor de tres meses, debe dirigirse al Poder ejecutivo correspondiente,
enviando:
Primero.— Copia del acta de suspensión, en que consten las causas o
razones de dicho acuerdo y la forma en que se tomó.
Segundo.— Todos los documentos y efectos enumerados en el artículo
anterior.
Tercero.— Cuadro de los obreros que figuren como miembros activos del
Taller el día en que éste acuerde la suspensión de trabajos.
99

Los Talleres que no cumplimenten esta disposición serán dados de baja en
la Federación del Grande Oriente, anulada su Carta Constitutiva y sus obreros
declarados irregulares.
Art. 610.— Para reanudar trabajos el Taller que los haya suspendidos por su
propio acuerdo y con los requisitos exigidos en el artículo anterior, debe solicitarla
de la Gran Logia o del Gran Consejo Federal Simbólico, según los casos, en
comunicación firmada por cada uno de los obreros que pretendan congregarse
para dicho fin. Si los solicitantes constituyen número suficiente para la regularidad
orgánica del Taller, les serán devueltos todos los documentos, efectos y archivo
recogidos.
Art. 611.— Una vez levantada la suspensión de que haya sido objeto un
Taller por sentencia o preventivamente, le serán devueltos también todos los
documentos y efectos recogidos por el Poder Ejecutivo.
Art. 612.— El Taller suspendido por sentencia de los Tribunales masónicos o
preventivamente, queda exento del pago de la capitación mensual señalada por la
vigente ley de tributación.
Igualmente queda exento de dicho tributo el Taller que por sí acuerde
suspender sus trabajos por más de tres meses.
Dicha exención regirá desde el mes siguiente al en que la suspensión fuere
impuesta, o comunicada al Poder Ejecutivo, según los casos.
Art. 613.— Los Talleres de la Federación están obligados, bajo la más
estrecha responsabilidad, a no entablar relaciones, o a cesar en ellas, con todo
Taller suspendido de trabajos por cualquier motivo.
CAPITULO SEGUNDO
DE LA DISOLUCIÓN O SEPARACIÓN DE LOS TALLERES
Art. 614.— Los Talleres sólo pueden disolverse en las condiciones que
determina el artículo 38 de estos Estatutos y Reglamentos generales.
Decretada la disolución en un Taller, éste se halla obligado a remitir al Poder
Ejecutivo de su jurisdicción:
Primero.— Su Carta Constitutiva.
Segundo.— Todos sus libros, documentos, sellos, el archivo y los efectos
puramente masónicos.
Tercero.— Los fondos existentes en el Tesoro y en el Tronco de
Beneficencia, después de pagadas las obligaciones de ambos, si así estuviese
consignado en su Reglamento interior, en virtud de lo dispuesto en el articulo 48
de los presentes Estatutos y Reglamentos generales.
Art. 615.— Ningún Taller puede reunirse para tomar acuerdo de disolución o
separación de la Obediencia mientras no lo pidieren por escrito siete hermanos
activos y presentes en una tenida.
Art. 616.— Presentada la proposición de disolución o separación en un Taller
Simbólico, se dará cuenta al Poder Ejecutivo correspondiente, y todos los obreros
activos serán convocados a sesión extraordinaria con treinta días de anticipación,
expresando en la papeleta de convocatoria el motivo de la misma. Esta
convocatoria se repetirá tres días antes de la tenida.
100

Si en dicha sesión siete miembros activos declararán querer continuar los
trabajos, no podrá acordarse la disolución ni la separación, ni siquiera discutirse, y
los hermanos que la hubieren propuesto presentarán por escrito e individualmente
sus peticiones de plancha de quite.
Si la declaración de querer continuar los trabajos en la Obediencia la hiciera
un número de hermanos menor de siete y que no baje de tres, entre los cuales
uno de ellos fuera Maestro masón, éstos pueden formar un Triángulo para
reconstruir el Taller.
- Art. 617.— Los hermanos que persistan en mantener el Taller en la
Obediencia, quedan, por este hecho, propietarios de la Carta Constitutiva, libros,
documentos, caudales, mobiliario y demás efectos del Taller, sin que los
dimisionarios puedan alegar derecho alguno sobre dichos efectos.
Art. 618.— Si alguno de los peticionarios de plancha de quite, por razón de
su cargo tuviere en su poder objetos o caudales pertenecientes al Taller, los
entregará en el acto a los que permanezcan en la Obediencia, pues de lo contrario
incurrirá en delito.
Art. 619.— Los hermanos que quedaran constituyendo el Taller, remitirán a
la Secretaría de la Gran Logia Regional o a la del Gran Consejo Federal
Simbólico, según de quien dependan:
Primero.- Su cuadro de obreros activos.
Segundo.- Un estado que acredite la situación económica en que hubiere
quedado el Taller.
Tercero.- Informe detallado de los hechos que hubieren producido la
escisión.
Cuarto.- Lista de los obreros retirados.
El Poder Ejecutivo correspondiente decretará, preexamen de los documentos
anteriores la continuación los trabajos, la suspensión del Taller o su disolución
definitiva.
Art. 620.— En el caso de disolución de un Taller con todos los requisitos
legales, cada obrero deberá obtener su correspondiente plancha de quite,
expedida en el mismo Taller, antes de su disolución.
Si por cualquier accidente o desorden, los obreros no pudiesen obtener su
plancha de quite, ésta será expedida por el Poder Ejecutivo de que dependió el
Taller disuelto, siempre que dicha plancha de quite sea pedida dentro de los
treinta días siguientes al de disolución del Taller, y previa la formación de
expediente en la Gran Secretaría correspondiente
TITULO DECIMOQUINTO
DE LAS FIESTAS Y DE LOS BANQUETES MASÓNICOS
CAPITULO ÚNICO
Art. 621.— Los Talleres tienen facultades para organizar fiestas masónicas,
siempre que el carácter y objeto de ellas no sea opuesto a los fines y doctrinas de
la Institución.
101

Art. 622.— Todos los Talleres están obligados en algunos días del año a
celebrar banquetes masónicos.
Las Logias y Triángulos celebran sus banquetes de obligación en los dos
solsticios del año (1), o en los días más próximos a los mismos.
Los obreros de los Talleres deben asistir personalmente a estos banquetes y
satisfacer la cuota para ello establecida.
Art. 623.— Los banquetes se celebrarán en las salas destinadas al efecto en
el edificio donde se halle instalado el Templo, si fuere posible, Jamás, ni por
ningún motivo, pueden celebrarse banquetes en el Templo.
Art. 624.— Los trabajos de mesa deben ser siempre dirigidos y ejecutados
según los usos masónicos celebrándolos en el grado de Aprendiz.
El modo, forma y condiciones de verificar los banquetes masónicos se
consigna en los Rituales de cada grado.
Art. 625.— En cada banquete de obligación se harán los brindis descritos en
los Rituales. Pueden reducirse a tres, a dos o a uno, comprendidos en términos
precisos.
También se puede, entre un brindis y otro, mezclar una producción literaria.
Si cualquier hermano quiere hacer un saludo o algunas consideraciones sobre el
acto, pedirá para ello el Permiso del Presidente.
El júbilo, la concordia y la sobriedad constituyen el molde característico de
los banquetes masónicos.
Art. 626.— Durante la “masticación”, los sirvientes, tanto masónicos como
profanos, tienen libre entrada en la sala para proveer cuanto en la mesa falte.
Al pronunciar los brindis y ejecutar los demás trabajos de obligación, el
Presidente ordena poner la sala a cubierto de la indiscreción de los profanos.
La disposición de la mesa y la colocación en ella de los hermanos
corresponde al Maestro de Banquetes.
(1) El 21 de Junio y 21 de Diciembre
Falta esta pagina en el original................................................................
.............................. (212- 213)
Art. 631.— Las peticiones de recompensa para los Talleres serán dirigidas al
Poder Ejecutivo correspondiente.
A la solicitud debe acompañarse el acta en que tomó el acuerdo el Taller
peticionario y una Memoria justificada de los méritos y servicios en que se funda.
Art. 632.—Todo Taller poseedor de un título deberá usar de él en sus
documentos oficiales y decorar sus estandartes con la corbata respectiva.
CAPITULO SEGUNDO
DE LOS HONORES Y PREEMINENCIAS EN LOS TALLERES
Art. 633.— Ningún masón, por elevado que sea su grado, puede pretender
otros honores, preeminencias o prerrogativas que los consignados en estos
Estatutos y Reglamentos generales.
102

Sin embargo, en el territorio de las Grandes Logias Regionales, por acuerdo
de éstas y sólo para los masones de su jurisdicción, pueden otorgarse los honores
que libremente ellas señalen.
Los Talleres no pueden dispensarse de hacer los honores masónicos sino
cuando los masones a quienes deban ser tributados los rehusen formalmente.
Art. 634.— Los honores masónicos se tributan siempre en los Talleres
estando todos presentes en pie y al orden del grado en que se trabaje, según los
casos y reglas siguientes:
Primero.— EL Gran Comendador, Presidente del Supremo Consejo del
grado 33 para España y sus dependencias y el Gran Maestro de la Orden, o los
que ejerzan legalmente sus funciones, serán introducidos en el Templo por una
Comisión compuesta de siete hh∴ armados de espadas y precedidos del Experto
y del Maestro de Ceremonias, los cuales acompañan a dichas autoridades hasta
la Presidencia, formándose la bóveda de acero y batiendo marcha los Malletes.
De no ocupar la Presidencia los hh∴ investidos de tan altos cargos, tomarán
asiento en Oriente.
Los Diputados Grandes Maestros de las Grandes Logias Regionales gozarán
en el territorio de su jurisdicción de los mismos derechos.
Cuando el Gran Comendador de la Orden o el Gran Maestre Presidente del
Consejo Federal Simbólico, o en el territorio de una Gran Logia su Diputado Gran
Maestre, se hacen cargo de la dirección de los trabajos, tomando el Mallete, el
Presidente de dicho Taller se sentará a la derecha de la Suprema Autoridad.
Segundo.— Las Comisiones del Supremo Consejo del grado 33 y del Gran
Consejo Federal Simbólico serán objeto de los mismos honores expresados en el
número anterior.
Tercero.— Los miembros del Supremo Consejo del grado 33 o del Gran
Consejo Federal Simbólico y Diputados de las Grandes Logias Federales serán
recibidos por el Experto y Maestro de Ceremonias, estando los hh∴ del Taller en
pie y al orden. También toman asiento en Oriente.
Cuarto.— Al Presidente del Taller, si llegare después de abiertos los trabajos,
se le recibirá por sus hermanos armados de espadas y precedidos del Experto y
del Maestro de Ceremonias, formándose la bóveda de acero.
Quinto.— Las Diputaciones o Comisiones oficiales de otros Talleres serán
recibidas como expresa el número anterior, ocupando puesto en Oriente.
Sexto.— Los vigilantes del Taller que llegaren después de empezados los
trabajos serán recibidos estando todos los hh∴en pie y al orden, acompañándoles
a sus puestos el Maestro de Ceremonias.
Séptimo.— Los Visitadores son recibidos en pie y al orden.
Si algún Visitador fuera Presidente de Taller ocupará asiento en Oriente.
Octavo.— Tiene también derecho a sentarse en Oriente el miembro activo u
honorario del Taller que haya sido Presidente del mismo durante el año anterior.
Noveno.— Los mismos honores consignados en los números precedentes se
tributarán respectivamente a las Autoridades, Dignidades, Oficiales, Diputaciones
y Visitadores que pertenezcan a Potencias Masónicas reconocidas por el Grande
Oriente Español.
Los hh∴ a quienes correspondan las distinciones consignadas en este
artículo pueden, al retirarse antes de cerrados los trabajos, dispensar al Taller de
las ceremonias; pero los Presidentes deben ordenar los mismos honores que se
hicieron al entrar, o, por lo menos, poner a los obreros en pie y al orden hasta que
aquéllos hayan salido del Templo.
103

Art. 635.— Ningún Taller ni masón alguno puede exigir ser recibido según
Rito diferente del que practique el Taller que los admita como Visitadores.
Art. 636.— Todo acto o acontecimiento dichoso para un Taller o para la
Orden, así como cualquier hecho masónico llevado a cabo felizmente por un
hermano, puede siempre celebrarse con baterías masónicas.
CAPITULO TERCERO
DE LAS HONRAS FÚNEBRES
Art. 637.— Tan pronto como el Presidente de un Taller tenga noticia del
fallecimiento de uno de los hermanos del mismo, nombrará una Comisión para
acompañar al cadáver al cementerio.
Esta Comisión se compondrá de cinco hh∴ para un obrero sin cargo; de
siete, para un Oficial; de nueve, para un Vigilante, y asistirá todo el Taller para el
Presidente.
Además de la Comisión oficial deben todos concurrir a dicho acto, salvo un
motivo justificado.
Los hh∴ ocuparán en el cortejo y en el cementerio el puesto que se le
designare, y se colocarán en grupo, siendo presididos por las Autoridades
Masónicas, o por su representación.
Art. 638.— Cuando falleciere el Gran Comendador, Presidente del Supremo
Consejo del grado 33, o el Gran Maestre Presidente del Gran Consejo Federal
Simbólico, o en una Gran Logia Regional su Diputado Gran Maestre, asistirá a la
conducción del cadáver, hasta darle sepultura, todos los Cuerpos y Talleres de la
respectiva jurisdicción que residan en la localidad donde ocurra la desgracia, y las
posibles representaciones de los demás.
Los entierros con ceremonial masónico se celebraran según prescriben los
rituales:
Para ostentar insignias o condecoraciones masónicas en el trayecto de la
casa mortuoria al cementerio, se observara lo dispuesto en los artículos 372 y 375.
Art. 640.— El masón investido de mayor autoridad por el Taller entre los
obreros que asistan al entierro de un hermano, echará un puñado de tierra sobre
el féretro al ser inhumado.
Art. 641 .— EL luto que los Talleres Simbólicos guardarán a sus obreros que
fallecieren consistirá en lo siguiente:
Al Estandarte del Taller se le pondrá una corbata de crespón en forma de
lazo. El Ara se revestirá con un paño negro. El nombre del finado será escrito en el
centro de una corona de ciprés o de siempre-vivas, la cual será colocada en la
Columna B, si el fallecido era Aprendiz; en la Columna J, si era Compañero;
suspendida entre Columnas o en medio del Templo, sobre un cojín cubierto de
paños fúnebres, si era Maestro. Cuando fuere Dignidad u Oficial, se cubrirá
también de luto su puesto o Altar respectivo, sobre el cual serán colocados el
mandil, la espada o los tributos e insignias que pertenecían al finado.
Mientras el Taller esté de duelo, se decorarán de luto los hh∴ a quienes
correspondan por su grado o cargo.
Siempre que se trate de rendir honores a la memoria de algún hermano
fallecido, se tributará la batería de luto.
104

Art. 642.— Por el fallecimiento del Gran Comendador Presidente del
Supremo Consejo del grado 33, todos los Talleres y Cuerpos de la Federación,
guardarán luto en la misma forma que por defunción del Presidente de Taller.
Igual tributo rendirán todos los Talleres Simbólicos y Grandes Logias
Regionales de la Federación, en caso de fallecer el Gran Maestre, Presidente del
Gran Consejo Federal Simbólico.
Del mismo modo guardarán luto los Talleres dependientes de las Grandes
Logias Regionales cuando falleciere el Presidente de ellas.
Art. 643.—Los Talleres pueden acordar la celebración de tenidas fúnebres
para honrar la memoria de algún h∴ fallecido. Estas exequias masónicas se
verificarán en la forma que prescriben los Rituales y en la Cámara inferior del
Taller.
Cuando ocurriere el fallecimiento del Gran Comendador, Presidente del
Supremo Consejo del grado 33 será obligatorio en todos los Talleres la
celebración d exequias fúnebres en su memoria.
Igual deber tendrán todas las Logias y Triángulos de la Federación cuando
falleciere el Gran Maestre, Presidente del Gran Consejo Federal Simbólico.
Art. 644.— La duración del luto en los Talleres será el siguiente:
Por el fallecimiento de un H∴ de su seno que no desempeñase ningún cargo
o fuese Oficial de segunda clase, guardarán luto durante tres tenidas ordinarias.
Por un Vigilante u Oficial de primera clase, cinco. Por el Venerable Maestro,
siete.
Por el fallecimiento del Gran Comendador, Presidente del Supremo Consejo
del grado 33, todos loe Talleres del Grande Oriente, guardarán luto durante tres
meses.
Cuando falleciere el Gran Maestre, Presidente del Gran Consejo Federal
Simbólico, guardarán asimismo luto durante tres meses todos los Talleres
Simbólicos y Grandes Logias Regionales.
Igual tiempo de duelo deberán guardar los Talleres dependientes de las
Grandes Logias Regionales, cuando falleciere el Presidente de ellas.
Durante el período señalado en este artículo, se tributará la batería fúnebre
al abrir y cerrar los trabajos.
Art. 645.— Los Talleres procurarán celebrar, por lo menos cada tres años,
una tenida fúnebre, destinada a honrar la memoria de los hh∴ fallecidos durante
ese período de tiempo.
Para estas tenidas se decorará el Templo como por el fallecimiento del
Presidente, y en la corona fúnebre se pondrá la siguiente inscripción: “A la
memoria de los hh∴ fallecidos".
Estos trabajos se efectuarán en la Cámara de Aprendiz con toda solemnidad,
invitándose a los miembros de otros Talleres, y se pronunciará discursos por los
hermanos que se señalen, por el Orador y por el Presidente.
105

TÍTULO DECIMOSÉPTIMO
INSIGNIAS Y DISTINTIVOS MASÓNICOS
CAPÍTULO PRIMERO
DE LAS INSIGNIAS Y DISTINTIVOS DE LOS CUERPOS Y
TALLERES
Art. 646.— El escudo del Grande Oriente Español es el siguiente:
Un compás y una escuadra entrelazados, rodeados de ramas y de acacia.
Art. 647.— Todos los Talleres de la Federación están obligados a usar en
sus respectivos Estandartes la Corbata Federal, en forma de lazo.
Esta insignia consiste en una cinta de tres colores en banda: azul, amarillo y
encarnado, con fleco de oro.
El Estandarte del Gran Consejo Federal Simbólico es azul, con fleco de oro.
Tiene en el centro el escudo del Grande Oriente; en la parte superior la inscripción
de GRANDE ORIENTE ESPAÑOL, GRAN CONSEJO FEDERAL SIMBÓLICO, y
en la inferior la divisa LIBERTAD, IGUALDAD, FRATERNIDAD.
De igual color, y en el mismo escudo, construirán sus Estandartes las
Grandes Logias Regionales, usando las inscripciones GRANDE ORIENTE
ESPAÑOL, GRAN LOGIA REGIONAL DE............(1), con la misma divisa que el
Gran Consejo Federal Simbólico.
Art. 648.— Los Estandartes de los Talleres serán decorados y se ajustarán a
los siguientes modelos:
De seda azul. En el Centro, una colmena u otro atributo de los grados
simbólicos. Alrededor, las inscripciones, GRANDE ORIENTE ESPAÑOL,
RESPETABLE LOGIA ........NUM.......... VALLES DE ................
Las Logias tienen también facultades para, si lo estiman conveniente, usar
en el Estandarte algún símbolo alusivo al título distintivo del Taller.
Art. 649.— Las insignias de los títulos de honor de los Talleres se usarán en
los respectivos Estandartes, Serán las siguientes: —De los "Augustos”, una
corbata de cinta blanca. De los “Beneméritos” otra de cinta verde. De los “Muy
Leales”, otra de cinta morada. Todas estas corbatas llevan fleco de oro.
(1) El nombre distintivo que corresponda.
CAPÍTULO SEGUNDO
DE LAS INSIGNIAS Y DISTINTIVOS DE LOS MASONES EN
LOS TRABAJOS
Art. 650.—Todos los masones del Grande Oriente Español están obligados a
usar, además de la decoración de su grado, las insignias de los Altos Cuerpos a
que pertenezcan, y las de los cargos que desempeñen en ellos y en los Talleres.
106

Los distintivos de miembro del Gran Consejo Federal Simbólico y de
miembro de las Grandes Logias Regionales, podrán ostentarse en todos los
Talleres.
Los Oficiales no pueden condecorarse con las insignias de sus cargos, más
que en el ejercicio de sus funciones, en el Cuerpo o Taller en que las
desempeñan.
Sólo el Gran Comendador de la Orden y el Gran Maestre, Presidente del
Consejo, pueden llevar la insignia del cargo cuando visiten cualquier Taller. De
igual derecho disfrutan los Presidentes de las Grandes Logias Regionales en los
Talleres de su jurisdicción.
El Presidente de Taller puede llevar la insignia de tal cuando representa al
suyo en otro cualquiera.
Art. 651.—Los distintivos en el Gran Consejo Federal Simbólico son los
siguientes:
“Insignias de Consejero”.— Una medalla con el escudo del Consejo, la cual
llevará pendiente de un pasador, con los colores de la Federación (azul, amarillo y
encarnado). La medalla que corresponde al Gran Maestre, es de
oro. La de los demás Consejeros, de plata.
“Joyas de cargos”.—Las mismas que en las Logias.
El Gran Maestre ostentará la de su representación pendiente de un cordón
de hilo de oro en forma de collar.
Las joyas de los demás cargos se llevarán pendientes de un collar de cordón
de tejido de seda azul.
Las Grandes Logias Regionales procederán a semejanza del Gran Consejo
Federal Simbólico.
Art. 652.— Los Talleres usarán las joyas de cargo que indican los Rituales.
Los collares de las joyas serán de cinta moaré, de color azul.
Art. 653.— Todo Taller tiene facultades para acordar el uso en trabajos de
una medalla, escudo o distintivo especial.
Art. 654.— Las insignias masónicas sólo pueden usarse dentro de los
Talleres.
Art. 655.— Los masones no podrán usar durante los trabajos otras
condecoraciones que las masónicas. En los banquetes, tenidas blancas y tenidas
fúnebres podrán ostentarse además las condecoraciones autorizadas en el orden
civil o militar.
Los militares que sean masones podrán, por excepción, asistir a trabajos
vestidos de uniforme.
107

LIBRO SEGUNDO
DE LOS RITOS MASÓNICOS
TITULO PRIMERO
DEL RECONOCIMIENTO Y PRACTICA
DE LOS RITOS
CAPITULO PRIMERO
DE LOS RITOS RECONOCIDOS
Art. 656.—El Grande Oriente Español practica preferentemente el Rito
Escocés Antiguo y Aceptado, cuyo régimen es la base orgánica de sus Talleres.
Sin embargo, dada la unidad de la Francmasonería por su grado y por sus fines, el
Grande Oriente admite, reconoce y respeta los Ritos aceptados regularmente en
la Orden.
Por lo tanto, serán acogidas fraternalmente todas las Potencias Masónicas,
Cuerpos directivos, Talleres y masones regulares que practiquen un Rito
universalmente reconocido.
Art. 657.— Ningún privilegio, exención ni preferencia existe entre los
diferentes Ritos reconocidos por el Grande Oriente Español, sea cual fuere el
número de sus grados.
Art. 658.— Para que un nuevo Rito pueda ser reconocido por el Grande
Oriente Español, es condición necesaria e imprescindible la decisión del Supremo
Consejo del grado 33, cuyo Alto Cuerpo es el único que tiene facultades para
decretar la legalidad de todo Rito.
Art. 659.— Serán considerados como profanos los individuos y
colectividades que, practicando un Rito no reconocido universalmente, pretendan
ostentar la investidura masónica.
CAPITULO SEGUNDO
DE LA PRACTICA DE LOS RITOS POR LOS TALLERES Y
MASONES
Art. 660.— En el Grande Oriente Español las Logias pueden practicar un Rito
diferente del Escocés Antiguo y Aceptado.
Art. 661.— Toda Logia que, al fundarse o constituirse bajo los auspicios del
Grande Oriente Español, no solicite trabajar en Otro Rito por él reconocido, se entenderá
que queda obligada a practicar el Escocés Antiguo y Aceptado.
108

Art. 662.— Para que cualquier Logia que profese un Rito legalmente
reconocido, diferente del Escocés Antiguo y Aceptado, pueda practicar aquél
formando parte de la Federación del Grande Oriente Español, necesitará
autorización especial del Poder Ejecutivo correspondiente, la cual se hará constar
en la Carta Constitutiva.
Art. 663.— Ninguna Logia puede cambiar de Rito, sino para practicar el
Escocés Antiguo y Aceptado, en el caso de no profesar éste anteriormente.
Art. 664.— Todo miembro activo de una Logia pertenece al Rito adoptado
por ella.
Art. 665.— La práctica de cualquiera Rito diferente del Escocés Antiguo y
Aceptado no autoriza ni a los Talleres ni a los masones para el incumplimiento de
ninguna de las disposiciones contenidas en estos Estatutos y Reglamentos
generales.
TITULO SEGUNDO
DEL RITO DE ADOPCIÓN
CAPITULO PRIMERO
CONSTITUCIÓN, NATURALEZA Y OBJETO DEL RITO DE
ADOPCIÓN
Art. 666.— El Grande Oriente Español constituye en sus territorios
jurisdiccionales el Rito de Adopción o de Señoras, rama especial de la Orden
masónica, que ha de existir y funcionar bajo el patronato del Gran Consejo Federal
Simbólico y de las Grandes Logias Regionales y la dirección de las Logias
adoptantes.
Art. 667. — El objeto del Rito de Adopción es practicar la virtud y la
beneficencia, propagar la instrucción, dignificar al bello sexo y hacer de las
afiliadas verdaderos modelos de mujeres tolerantes, sensatas y de buenas
costumbres, constituyendo, en suma, una escuela de educación social, libre de
toda clase de supersticiones.
Art. 668.— El Rito de Adopción comprende los grados siguientes:
Primero.- Aprendiza
Segundo.- Compañera
Tercero.- Maestra
Art. 669.— Para practicar este Rito, las hermanas se reúnen formando
Talleres, que reciben el nombre genérico de Logias de Adopción.
Las leyes orgánicas que rigen a la Masonería femenina así como las reglas a
que se sujetan los trabajos de sus Talleres, se consignan en los Estatutos y
Reglamentos generales del Rito de Adopción publicados en los Rituales
respectivos.
109

CAPITULO SEGUNDO
DISPOSICIONES GENERALES SOBRE EL RITO DE
ADOPCIÓN
Art. 670.— Rigen para la Masonería de Adopción los preceptos siguientes:
Primero.- Ningún Taller de la Federación puede iniciar, afiliar, regularizar ni
conceder aumentos de salario en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, a la mujer.
Segundo.- Los Talleres federados, residentes en Valles donde no exista
ninguna Logia de Adopción, que recibieren Peticiones de iniciación de señoras, y
de afiliación o de regularización de hermanas, las tramitarán según es uso y
costumbre; y terminados los oportunos expedientes, se constituirán en Cámara de
Adopción para iniciar, afiliar o regularizar a las peticionarias en la forma
establecida para la Masonería auxiliar por el Rito de Adopción y por sus Estatutos
y Reglamentos generales.
Si el Taller reside donde exista una Logia de Adopción de la Federación,
deberá trasladar a esta Logia las peticiones que reciba, poniéndolo en
conocimiento de las solicitantes.
Tercero.— Ninguna Logia puede tener en su Cámara de Adopción más de
seis hermanas.
Al pasar de este número, el Taller solicitará del Poder correspondiente la
oportuna Carta Constitutiva de Logia de Adopción.
Cuarto.— Los Talleres se abstendrán de recibir Visitadoras en sus diferentes
Cámaras, no siendo en la de Adopción o en las tenidas blancas.
Quinto.— Las Logias de Adopción no admitirán como Visitadores a los
hermanos Aprendices y Compañeros.
Sexto.— Los Talleres Simbólicos de la Federación pueden crear Triángulos
de Adopción donde no exista Logia federada de este Rito.
Séptimo.— Las hermanas masonas inscritas en las Logias de Adopción y las
que lo sean en las Cámaras de Adopción de los Talleres Simbólicos, tienen
iguales deberes y derechos.
Octavo.— La Masonería femenina no contribuye a cubrir el presupuesto
federal por el concepto de repartos trimestrales.
Noveno.— El Gran Consejo Federal Simbólico o las Grandes Logias
Regionales, según los casos, asumen en nombre de la Federación las
representaciones de la Masonería femenina.
Décimo.- Las Logias de Adopción no tienen voz ni voto en la Asamblea
general de la Federación.
Undécimo.- Las Logias de Adopción que visiten en Cuerpo las Cámaras de
Adopción de los Talleres Simbólicos, serán recibidas con los honores
correspondientes a los Talleres federados.
Duodécimo.- La Masonería de Adopción recibirá por el conducto
correspondiente del Gran Maestre de la Orden la palabra "semestral”, pero no la
"anual”; por lo tanto e! retejo de los masones en las Logias de Adopción y de las
masonas en las Cámaras de Adopción de los Talleres Simbólicos consistirán no
en la comunicación de las palabras sagradas de los grados, sino única y
exclusivamente en dar la palabra “semestral”.
110

Decimotercero.- En el acto de recepción del tercer grado del Rito Escocés, se
comunicará al neófito la marcha y el signo de Aprendiza masona, que usará
únicamente al penetrar en los Talleres de Adopción:
Decimocuarto.- Los masones, cualquiera que sea su grado y cualquiera que
sea la Cámara en que trabaje la Logia de Adopción que visiten, usarán siempre la
marcha de Aprendiza masona.
Decimoquinto.- Las fiestas rituálicas de la Masonería de Adopción son las
mismas que las adoptadas por la Orden.
Art. 671 .—Las hermanas masonas que con anterioridad a la promulgación
de los presentes Estatutos y Reglamentos generales posean grados del Rito
Escocés Antiguo y Aceptado con el correspondiente certificado titulo o diploma,
procederán en la forma siguiente:
Si se hallan en posesión de grados del 1º al 3º inclusive, se inscribirán en la
respectiva Cámara o Logia de Adopción, y le serán reconocidos dichos grados en
el Rito de Adopción, pasando a disfrutar el derecho de visitar las Cámaras de
Adopción del territorio y el de asistir a las tenidas blancas de los Talleres
federados.
111

LIBRO TERCERO
DE LOS PODERES MASÓNICOS
TITULO PRIMERO
DEL PODER LEGISLATIVO
(Asamblea general)
CAPITULO PRIMERO
DE LA FORMACIÓN DE LA ASAMBLEA GENERAL
Art. 672.— Todas las Grandes Logias Regionales y Talleres dependientes
del Gran Consejo Federal Simbólico tienen la obligación de hacerse representar
en la Asamblea General de la Federación por medio de cuatro representantes las
primeras, además de sus Diputados Grandes Maestres, y por medio de un
representante los segundos.
Además pueden nombrar dos representantes suplentes las Grandes Logias y
uno de los Talleres de Dependencia directa.
Art. 673.— Las elecciones generales de Representantes se verificarán en la
fecha que cada agrupación determine, pero siempre con la debida antelación a la
Asamblea general.
Art. 674 . — Los Cuerpos y Talleres levantarán las actas necesarias de estos
nombramientos, entregándolas a los Representantes electos y remitiendo otra a la
Gran Secretaria general.
El acta de Representante servirá de titulo de presentación al elegido.
Art. 675.— El cargo de Representante debe recaer en hermanos que
posean, por lo menos, el grado de Maestro.
Los Representantes son reelegibles.
Art. 676. — El Representante sólo puede ejercer este cargo durante la
Asamblea para la cual sea electo.
Terminada ésta, terminan los poderes recibidos para la representación.
Art. 677.— Ningún Representante puede delegar sus poderes.
Por lo tanto, nadie está facultado para representar a una Gran Logia o a un
Taller, sin antes haber recibido de él los poderes legales.
Art. 678.— No tienen representación en la Asamblea legislativa las Grandes
Logias o Talleres siguientes:
Primero.— Los que hubieren abatido Columnas.
Segundo.— Los suspendidos de derechos masónicos preventivamente o por
sentencia.
Tercero.— Los procesados por los Tribunales masónicos de justicia.
Cuarto.— Los inactivos.
112

Art. 679. — Los poderes de una Asamblea general son ejercidos durante el
tiempo de su celebración.
CAPITULO SEGUNDO
DE LAS REUNIONES EN LA ASAMBLEA GENERAL
Art. 680.— La Asamblea general de la Federación ha de reunirse
necesariamente todos los años en el Templo de una Gran Logia Regional en la
fecha que señale el decreto de convocatoria.
A ser posible, estas reuniones ordinarias se verificaran en la segunda decena
del mes de Junio.
Las reuniones extraordinarias se verificarán en los casos y condiciones que
expresa la Constitución.
Art. 681.— La convocación de la Asamblea, tanto para las reuniones
ordinarias como extraordinarias, deberá decretarse, por lo menos, sesenta días
antes de la fecha en que haya de reunirse.
Se exceptúa únicamente el caso en que algún asunto grave o urgentísimo,
no previsto por la ley, haga necesario la inmediata reunión de la Asamblea.
Entonces deberá ser convocada hasta con diez días de anticipación por el Gran
Consejo Federal Simbólico o por su Presidente.
Art. 682 .— Los Representantes harán su presentación en la Secretaría
general antes de las doce de la mañana del día fijado para la primera reunión de la
Asamblea.
Art. 683.— En la sesión preparatoria se nombrará una Comisión para
examinar las actas de Representantes recibidas en la Gran Secretaría general,
procediendo a clasificarlas convenientemente y formando relación de las que se
ajusten a derecho y de las dudosas o con protestas.
Dicha relación, con su dictamen, se discutirá seguidamente por la Asamblea.
CAPITULO TERCERO
DE LAS ATRIBUCIONES DE LA ASAMBLEA GENERAL
Art. 684.— Corresponde a la Asamblea general, además de las atribuciones
establecidas en la Constitución, estatuir y legislar sobre los casos no previstos en
dicho Código y autorizar a los Poderes Ejecutivos para resolver en asuntos de la
competencia de ella.
113

CAPITULO CUARTO
DE LOS GRANDES DIGNATARIOS, OFICIALES Y COMISIONES DE LA
ASAMBLEA GENERAL
Art. 685.— Al empezar la Asamblea el Gran Maestro la presidirá
interinamente hasta su constitución, y los demás cargos de ella serán ocupados
también interina.
Art. 689.— Los Vigilantes tienen la dirección de sus Columnas, haciendo
guardar en ellas el orden debido; ayudan eficazmente al Presidente en la
regularidad y perfección de los trabajos y le transmiten los nombres de los
Representantes que piden la palabra.
Art. 690.— El Gran Orador de la Asamblea está encargado de guardar y
cumplir y hacer cumplir y guardar la ley.
Sus atribuciones y deberes son los mismos que los establecidos para igual
cargo en los Talleres adaptados a las funciones legislativas y fiscales de la
Asamblea.
Cuando el Gran Orador juzgue que no está suficientemente discutido o
esclarecido un asunto, puede proponer que la deliberación se suspenda hasta la
sesión siguiente. Si la propuesta fuese desechada, prosigue la deliberación.
El Orador firma las actas de la Asamblea después de aprobadas.
Art. 691 .—- Corresponde al Gran Secretario de la Asamblea:
Primero.— Despachar todos los asuntos de la Secretaria conforme a la ley y
de acuerdo con las decisiones de la Asamblea.
Segundo.— Tomar nota de todas las proposiciones y dictámenes que se
presente durante las sesiones.
Tercero.— Extender y redactar las minutas de las actas y trasladar éstas al
libro correspondiente, firmándolas con el Presidente y Orador, después de
aprobadas.
Cuarto.— Convocar a sesión ordinaria o extraordinaria, firmando las
citaciones, en las que deberá prevenir el objeto de los trabajos y la hora en que
han de comenzar.
Quinto.— Suministrar cuantos datos y noticias pidan los Representantes a la
Secretaría, siempre que la petición sea hecha en sesión.
Sexto.— Facilitar a las Comisiones los datos y antecedentes que necesiten
para verificar sus trabajos.
Séptimo.— Redactar los documentos que no se le hayan encargado
especialmente al Gran Orador de la Asamblea.
Octavo:— Asistir al Templo media hora antes de la. señalada para empezar
la sesión, a fin de preparar los trabajos que han de ser objeto de ella.
Noveno.— Anotar el escrutinio en todas las votaciones y el resultado del
Tronco de Beneficencia.
Art. 692.— Los Expertos y Maestro de Ceremonias de la Asamblea ejercen
las funciones propias de sus respectivos cargos. Auxilian al Presidente y hacen
cumplir sus órdenes.
Art. 693.—El Limosnero es el depositario y responsables de todos los fondos
de Beneficencia obtenidos en la Asamblea, y debe circular el saco de pobres en
cada sesión.
114

694.—El Guarda-Templo de la Asamblea no debe dar entrada en el Templo
más que a los Representantes y a los Visitadores autorizados convenientemente.
Debe exigir la palabra semestral.
Art. 695.- Las Comisiones emitirán dictámenes sobre los asuntos de su
competencia.
Los Representantes que formen parte de una Comisión están obligados a
suscribir el dictamen emitido por la mayoría o un voto particular.
No podrá constituirse en trabajos una Comisión si no se hallasen presentes
la mayoría de sus miembros.
CAPITULO QUINTO
ORDEN DE LOS TRABAJOS EN LA ASAMBLEA
Art. 696.— La Asamblea general trabaja en Cámara de Maestro.
Sus sesiones se ajustarán a los preceptos de la Constitución vigente y de los
Estatutos y Reglamentos generales.
Art. 697.— La Comisión de Actas es elegida entre los Representantes cuyos
nombramientos figuren como regulares en la relación que presenta a la Asamblea
la Comisión indicada en el Art. 683.
Art. 698. — El orden de los trabajos de la Asamblea hasta su constitución en
la legislatura anual, es el siguiente:
Primero.— Apertura con arreglo a Ritual.
Segundo.— Rectificación del número de Representantes presentes.
Tercero.— Lectura y confirmación del acta de la Asamblea precedente.
Cuarto.— Elección de la Comisión de Actas.
Quinto.— Discusión y votación del dictamen de la Comisión de Actas.
Sexto.— Proclamación de los Representantes electos.
Séptimo.— Elección de los Dignatarios, Oficiales y Comisiones de la
Asamblea, siendo electores y elegibles los Representantes admitidos o
proclamados.
Art. 699.— Verificada la elección de cargos y proclamando su resultado, el
Presidente electo se acercará al Ara, y ante ella, con la mano derecha sobre el
libro de la Ley, prestará el juramento o promesa siguiente:
"A L∴ G∴D∴G∴A∴D∴U∴ y que ante la representación del Grande Oriente
Español, juro, o prometo por mi honor ser fiel a la Constitución, a los Estatutos y
Reglamentos generales y a las leyes y disposiciones de la Asamblea general.
Asimismo, Prometo observar con exactitud los deberes del cargo para el cual
he sido elegido."
Inmediatamente el Gran Maestro de Ceremonias, hará entre Columnas la
debida proclamación.
Acto continuo, el Gran Maestre, Presidente interina de la Asamblea, dará
posesión del cargo al proclamado.
A seguida el Presidente efectivo de la Asamblea estando todos los presentes
en pie y al orden de Maestro, dirá:
"Venerables hermanos Representantes ¿juráis o prometéis fidelidad a las
Leyes de nuestro Grande Oriente y cumplir con exactitud los deberes de vuestra
representación y de vuestros cargos en la Asamblea?"
Todos, extendiendo la mano en la forma acostumbrada, contestarán
afirmativamente.
115

Acto seguido, los Representantes toman posesión de sus respectivos cargos.
Terminando esto, el Presidente dirá:
"Queda legalmente constituida la Asamblea general del Grande Oriente
Español."
Cuando en el curso de las sesiones un nuevo Representante sea recibido,
prestará ante el Ara la promesa de su representación o cargo.
Art. 700.— Constituida legalmente la Asamblea, el Gran Maestre, Presidente
del Gran Consejo Federal Simbólico, dará lectura a un Mensaje, que será el
programa de los trabajos durante el ejercicio corriente.
Este Mensaje podrá ser adicionado por medio de las enmiendas que la
Asamblea estime convenientes para el bien general de la Orden y del Grande
Oriente.
Art. 701.— Después de dar lectura el Gran Maestre al Mensaje, la Asamblea
verifica sus trabajos fiscales y legislativos, examinando las Memorias presentadas
por el Gran Secretario y Gran Tesorero del Gran Consejo Federal Simbólico
respecto de sus gestiones administrativas y de gobierno en la Federación, y
discutiendo los proyectos de ley y proposiciones que sean sometidos a
deliberación por los Cuerpos y Talleres del Grande Oriente, o por sus
Representantes.
Art. 702.— Cuando la Asamblea se reúne por convocación extraordinaria,
una vez constituida, no puede ejecutar más trabajos que los señalados en el
objeto de la convocatoria.
Art. 703.— Las discusiones y votaciones de la Asamblea se verificarán según
lo dispuesto en la Constitución y estos Estatutos y Reglamentos generales.
Art. 704.— En la última sesión de la Asamblea, una vez acordada la clausura
de ésta, se designará una Comisión compuesta de tres Representantes con
poderes para aprobar el acta de dicha sesión, a fin de que las resoluciones de ella
puedan ser cumplimentadas legalmente por los Poderes Ejecutivos. Esta
Comisión verificará su encargo dentro de los treinta días siguientes al de la sesión
de clausura.
También se designará una Comisión de tres miembros, con encargo de
organizar un banquete masónico, que se denominará de clausura de la Asamblea.
El primer Dignatario de la misma presidirá este banquete, y a él pueden concurrir
todos los masones activos de la Federación.
Art. 705.— Todos los Maestros Masones activos de la Federación tienen
derecho a ser admitidos como Visitadores en las sesiones de la Asamblea
general.
En uso de su soberanía, la Asamblea, después de constituida puede celebrar
sus sesiones en Cámara de Aprendiz. En este caso, serán recibidos como
Visitadores los Aprendices y Compañeros miembros activos de la Obediencia.
Los Visitadores no tienen voz ni voto. Ocupan un sitio distinto y separado del
de los Representantes, les está prohibido hacer demostraciones de aprobación o
de censura. Si perturbasen el orden, el Presidente tiene facultades para hacerles
cubrir el Templo.
Por excepción, y para la mejor ilustración de un asunto, puede concederse la
palabra a los Visitadores, previo acuerdo singular y en cada caso de la Asamblea.
Art. 706.— La Asamblea puede siempre, por orden del Presidente, a petición
del Orador o por acuerdo, constituirse en sesión secreta.
En tal caso cubren el Templo todos los Visitadores.
116

TITULO SEGUNDO
DEL PODER EJECUTIVO DE LA MASONERÍA
SIMBÓLICA
(Gran Consejo Federal Simbólico)
CAPITULO PRIMERO
DE SU FORMACIÓN DEL GRAN CONSEJO FEDERAL
SIMBÓLICO
Art. 707.- EL Gran Consejo Federal Simbólico, Poder Ejecutivo de la
Masonería Simbólica, está compuesto de un Presidente, que toma el nombre de
Gran Maestre, y de los Consejeros que nombran las Grandes Logias Regionales y
los Talleres de dependencia directa.
El nombramiento de los Consejeros es de libre elección de las Grandes
Logias Regionales y Talleres de dependencia directa, debiendo designar un
Consejero por cada doscientos afiliados de los que integran la jurisdicción, o
fracción de ellos.
El mandato se ejerce por tiempo de tres años, en la forma que señala el
Articulo 29 de la Constitución.
Art. 708.— Una vez que las Grandes Logias Regionales y Talleres de
dependencia directa hayan elegido a sus Representantes en el Gran Consejo, lo
que deberá efectuarse inexcusablemente en el mes de Diciembre de cada año, lo
notificarán a la Comisión Permanente del Gran Consejo para que el Gran Maestre
convoque durante el mes de Enero una Reunión Plenaria del Gran Consejo
Federal Simbólico, y en ella y de entre los representantes nombrados se elegirán
los cargos que señala el Art. 34 de la Constitución.
Art. 709.— El Gran Maestre nombrará de entre los Representantes
designados por las Grandes Logias Regionales y Talleres de dependencia directa,
una Comisión permanente integrada por los siguientes Dignatarios.
Un Gran Maestre Adjunto.
Un Venerable Gran Secretario.
Un Venerable Gran Tesorero.
Un Venerable Gran Hospitalario
Un Venerable Gran Arquitecto Revisor.
A esta Comisión permanente se unirá el Gran Orador nombrado por el Pleno
del Gran Consejo Federal Simbólico.
Art. 710.— La Comisión permanente puede ser separada y sustituida en todo
o parte, a excepción del Gran Orador, por voluntad del Gran Maestre que la
nombra.
No se admitirá reclamación de ninguna clase contra las resoluciones del
Gran Maestre en este respecto.
Art. 711 . — Si por acaso entre los Delegados nombrados por las Grandes
Logias Regionales y Talleres de Dependencia directa para que integren el Gran
Consejo Federal Simbólico no hubiere número bastante de residentes en la Sede
Federal para constituir la Comisión permanente, o si entre los allí radicados no
117

considerara oportuno el Gran Maestre elegir todos los cargos, podrá refundirlos
reduciéndolos al Gran Maestre adjunto, Gran Secretario y Gran Tesorero.
Art. 712.— La muerte, renuncia o destitución del Gran Maestre produce
simultáneamente el cese de toda la Comisión permanente por él nombrada.
Llegado que sea cualquiera de estos casos, asumirá la total dirección de los
trabajos masónicos el Pleno del Gran Consejo Federal Simbólico en tanto se
celebre la Asamblea Extraordinaria correspondiente.
Art. 713.— Para ser nombrado miembro del Gran Consejo Federal Simbólico
son condiciones necesarias e imprescindibles:
Primera..— Poseer por lo menos el grado de Maestro Masón con una
antigüedad de seis meses.
Segunda.— Ser miembro activo de un Taller de la Federación.
Tercera.— Hallarse en el pleno uso de los derechos masónicos.
Art. 714.— El cargo de Consejero se pierde:
Primero.— Por destitución o separación acordada por la Gran Logia o Taller
de dependencia directa, que lo haya nombrado.
Segundo.— Por renuncia voluntaria.
Tercero.— Por inactividad en la Federación, siempre que ésta no sea
temporal para pasar de un Taller a otro, y no exceda de treinta días.
Cuarto.— Por suspensión de derechos masónicos.
Quinto.—Por sentencia de los Tribunales Masónicos de Justicia.
CAPÍTULO SEGUNDO
DE LAS ATRIBUCIONES DEL GRAN CONSEJO FEDERAL SIMBÓLICO
Art. 715.— Además de las atribuciones que señala la Constitución,
corresponde al Gran Consejo Federal Simbólico:
Primero.— Instalar a sus Dignatarios y Oficiales.
Segundo.— Ejercer el derecho de disciplina sobre sus miembros y sobre los
Masones que asistan como Visitadores a las reuniones de este alto cuerpo.
Tercera.— Proveer las vacantes que ocurran en los cargos de Dignatarios y
Oficiales, durante el período que medie entre una y otra Asamblea.
Cuarto.— Ejercer autoridad, por el órgano de la Comisión permanente, sobre
todos los Talleres Simbólicos de dependencia directa y Grandes Logias
Regionales de la Federación, con las limitaciones contenidas en la Constitución.
Quinto.— Administrar, por el órgano de la Comisión permanente, los fondos
del Grande Oriente.
Sexto.— Nombrar Consejeros Delegados en los Territorios de dependencia
directa, siempre que lo considere conveniente para los intereses de la Orden. En
una misma localidad no podrán nombrarse dos Delegados.
Séptimo.— Autorizar expresamente, en cada caso, al Maestro Masón,
Miembro Activo de la Obediencia, que haya de iniciar a un Profano o conferir los
Grados Segundo y Tercero, a nombre del Poder Ejecutivo, en localidades que no
estén en el Territorio de ninguna Gran Logia, y no existan Logias ni Triángulos.
Octavo.— Dispensar del tiempo que el Reglamento señala de permanencia
en los Grados Simbólicos, cuando la correspondiente Cámara de su Taller lo
118

solicite justificadamente, y por unanimidad, en favor de un Miembro Activo del
mismo, siempre que reúna las condiciones exigidas por estos Reglamentos.
Noveno.— Iniciar, llevar y proseguir, por el Órgano de su Comisión
permanente, las relaciones del Grande Oriente con las autoridades españolas de
toda índole y con las Grandes Logias, Grandes Orientes y Asociaciones
Masónicas o Profanas del Mundo.
Décimo.— Concurrir, en representación del Grande Oriente Español, a las
Asambleas, Conferencias y Congresos Masónicos Internacionales.
CAPITULO TERCERO
DEBERES Y ATRIBUCIONES DE LOS DIGNATARIOS OFICIA
LES Y COMISIÓN PERMANENTE DEL GRAN CONSEJO
FEDERAL SIMBÓLICO
Art. 716.— Son deberes del Gran Maestre, Presidente del Gran Consejo
Federal Simbólico:
Primero.—Guardar y cumplir, y hacer cumplir y guardar a todos los Masones,
Cámaras y Cuerpos del Simbolismo, la Constitución, los Estatutos y Reglamentos
Generales, Leyes, Decretos y Disposiciones del Grande Oriente y el Gran Consejo
Federal Simbólico.
Segundo.—Velar escrupulosamente por la regularidad de los trabajos de la
Masonería Simbólica y por el prestigio de la Orden en general y del Grande
Oriente en Particular.
Tercero.— Cuidar de la prosperidad de los Cuerpos y Talleres Simbólicos, y
garantir-a éstos y a sus Obreros el disfrute de sus derechos.
Cuarto.—Mantener el orden más severo en todos los actos interiores y
exteriores del Gran Consejo Federal Simbólico.
Quinto.— Responder ante éste de los actos de la Comisión permanente,
cuya responsabilidad le queda por completo atribuida.
Sexto.— Respetar y hacer respetar los acuerdos del Pleno del Gran Consejo
Federal Simbólico, siempre que no se opongan a la Constitución ni a lo estatuido y
legislado.
Séptimo.—Autorizar con su firma las actas de las sesiones, los Decretos, la
correspondencia oficial y cuantos documentos se relacionen con la Organización.
Octavo.— Sostener en toda su pureza el Rito adoptado legalmente por los
Cuerpos y Talleres Simbólicos.
Articulo 717.— Son atribuciones del Gran Maestre, Presidente del Gran
Consejo:
Primero.— Nombrar a la Comisión permanente del Gran Consejo Federal
Simbólico y dirigir y ordenar sus trabajos sin limitaciones de ninguna clase, salvo
las marcadas por la Constitución.
Segunda.— Tomar la iniciativa en todos los asuntos generales de la
Institución.
Tercera.— Convocar las reuniones plenarias del Gran Consejo, presidirlas y
dirigir sus trabajos.
119

Cuarta.— Suspender cualquier discusión empezada, siempre que no se
hayan emitidos las conclusiones del Gran Orador.
Quinta.— Recibir y abrir la correspondencia oficial, de la cual dará cuenta en
las reuniones Plenarias del Gran Consejo, cuando se refiera a asuntos de la
competencia de éste.
Sexta.— Resumir los debates y pedir al Gran Orador que fije sus
conclusiones.
Séptima.— Proclamar el resultado de las votaciones.
Octava.- Determinar en cada Sesión Plenaria los Consejeros que deben
desempeñar accidentalmente los cargos de Dignatarios y Oficiales, cuando no se
hallen presentes los Titulares.
Novena.- Disponer de los fondos de beneficencia del Gran Consejo para
cualquier necesidad.
Décima.— Ordenar todos los pagos presupuestarios y los que puedan
además acordar el Gran Consejo.
Undécima.- Disponer el pago de gastos no presupuestados siempre que sea
por motivos justificados y urgentes, pero quedando obligado a dar cuenta al Gran
Consejo Federal Simbólico en la primera reunión plenaria que se celebre y éste a
la Asamblea Ordinaria de la Federación.
Duodécima.- Comunicar por medio del Secretario General las palabras
“Anual” y “Semestral».
Decimotercera.— Presidir todos los cuerpos y cámaras del simbolismo
cuando lo estime oportuno.
Decimocuarta.— Proponer la suspensión del Gran Consejo de la Orden en
los casos y condiciones expresados en el número del artículo 55 de la
Constitución.
Art. 718.— El Gran Maestre, Presidente del Gran Consejo Federal Simbólico,
no puede por ningún concepto negarse a suscribir los acuerdos de este Alto
Cuerpo adoptados en las reuniones plenarias que se celebren bajo su presidencia.
Artículo 719.— El Gran Maestre adjunto por delegación voluntaria y expresa
del Titular puede ejercer todas las funciones a éste conferidas; menos las de
presidir las Sesiones plenarias del Gran Consejo y las Asambleas Generales de la
Federación, cuyo cometido en ausencia del Gran Maestre, corresponde al primer
Gran Vigilante o a quien le sustituya.
Artículo 720 — Los Vicepresidentes del Consejo, por su orden jerárquico,
tienen en los Plenos del organismo y en las Asambleas Generales los deberes y
atribuciones que se señalan en estos Reglamentos a los de los Talleres
Simbólicos.
Art. 721.— El Gran Orador del Gran Consejo Federal Simbólico es el Fiscal
General del Grande Oriente y representante de la Ley y, como tal, el más obligado
a observarla.
En todos los actos oficiales es el encargado de llevar la palabra en nombre
del Gran Consejo, aparte el derecho superior del Gran Maestre.
Corresponde además al Gran Orador, vigilar el exacto cumplimiento de los
Tratados existentes con las Potencias amigas, informar al Poder Ejecutivo en
todas las cuestiones que afecten a las relaciones internacionales y proponer
cuanto convenga a la Institución en estos asuntos.
El Gran Orador obtiene la palabra en los Plenos del Gran Consejo con
preferencia a cualquier otro Consejero.
120

Por lo demás sus deberes y atribuciones dentro del Gran Consejo son las
que se atribuyen a los oradores de los Talleres.
Art. 722.— El Gran Secretario del Gran Consejo Federal Simbólico es fiel
guardador de los secretos del Grande Oriente y se le denomina Gran Secretario
General.
Lo nombra y puede separarlo directamente el Gran Maestre y ejerce las
funciones de su cargo, que son las mismas que se atribuyen en estos
Reglamentos a los Secretarios de los Talleres Simbólicos, de acuerdo con las
instrucciones que el Gran Maestre le señale.
Art. 723 .— El Gran Tesorero ejerce este cargo en el Gran Consejo Federal
Simbólico y su comisión permanente.
Le nombra y puede separarle directamente el Gran Maestre y de su gestión
es éste responsable ante el Pleno del Gran Consejo Federal Simbólico.
Las funciones del Gran Tesorero son las señaladas a Tesoreros de los
Talleres Simbólicos.
El ejercicio de estas funciones se realizará de acuerdo con las instrucciones
que reciba del Gran Maestre.
Art. 724.— El Gran Arquitecto Revisor, será nombrado y puede ser separado
libremente por el Gran Maestre.
Realizará las funciones de acuerdo con las instrucciones que de éste reciba
y dentro del marco general que a los Arquitectos Revisores de los Talleres
Simbólicos atribuye estos Reglamentos.
Art. 725.— El Gran Hospitalario tiene bajo su custodia los fondos de
Beneficencia del Gran Consejo Federal Simbólico.
Lo nombra y puede separarlo directamente el Gran Maestre, quien responde
de su gestión ante el Pleno del Gran Consejo.
En el ejercicio de sus funciones se atendrá a las instrucciones que reciba del
Gran Maestre. Los deberes del cargo son los señalados a los Hospitalarios de los
Talleres Simbólicos.
Art. 726.— Los Grandes Expertos ejercen en el Gran Consejo Federal
Simbólico las funciones de Auxiliares del Gran Maestre, ocupando interinamente
los cargos de otros Consejeros si para esa ocupación temporal fueren designados.
Art. 727.— El Gran Maestro de Ceremonias del Gran Consejo Federal
Simbólico realiza dentro de sus Reuniones Plenarias, las funciones marcadas a
los Dignatarios del mismo nombre de los Talleres Simbólicos.
Art. 728.— El Gran Guarda-Templo está encargado de ayudar a los Expertos
en cuanto se refiere a la seguridad interior de los Trabajos del Consejo Federal
Simbólico.
Tiene en este Alto Cuerpo los mismos deberes que el Guarda Templo Interno
de un Taller.
Art. 729.— Las facultades y trabajos de las Comisiones Especiales que
pueda nombrar el Gran Consejo Federal Simbólico se ajustan por analogía a lo
preceptuado para las Comisiones de los Talleres.
Art. 730.— La Comisión permanente del Gran Consejo Federal Simbólico,
organizará y dirigirá el Boletín Oficial del Grande Oriente Español y todas las
publicaciones que haga el Gran Consejo.
Art. 731.— A los miembros en general, del Gran Consejo corresponde:
Primero.— Concurrir a las sesiones de este alto Cuerpo.
Segundo.— Velar constantemente por el prestigio de la Institución, por el
cumplimiento de las Leyes y por la regularidad y orden de los trabajos en los
121

Talleres Simbólicos de la Federación, informando al Poder Ejecutivo de las
deficiencias que observaran.
Tercero.— Someterse a los acuerdos del Gran Consejo y cumplir los
mandatos de éste y los que en representación del mismo les confiera el Gran
Maestre o quien legalmente le sustituya.
Cuarto.— Hacer proposiciones y emitir y defender con absoluta libertad toda
opinión que se juzgue útil al bien general de la Orden, del Grande Oriente o del
Gran Consejo en particular.
Quinto.— Desempeñar con celo los cargos y comisiones que se le confíen.
Art. 732.— Los Consejeros de la Orden prestarán en la primera reunión
Plenaria que celebren, ante el Ara y en la forma de costumbre, el juramento o
promesa siguiente:
"A L∴G∴D∴G∴A∴D∴U∴, juro o prometo por mi honor, cumplir y hacer
cumplir la Constitución de nuestro Grande Oriente, sus Estatutos y Reglamentos
Generales, Leyes y Decretos, los mandatos de la Asamblea General y los
acuerdos del Gran Consejo Federal Simbólico.
Igualmente prometo cumplir con exactitud los deberes del cargo que se me
confía."
Art. 733.— El Gran Maestre instala a las Dignidades y Oficiales del Gran
Consejo Federal Simbólico en la Primera Sesión Plenaria que celebre después de
nombrados los Consejeros y designada la Comisión permanente, declarando
inmediatamente su constitución legal.
Los Consejeros que no pudiesen prestar la promesa en la Primera Reunión
Plenaria, lo harán en cualquiera de las sucesivas a que asistan.
CAPITULO CUARTO
ORDEN DE LOS TRABAJOS DEL GRAN CONSEJO
Art. 734.— Las sesiones Ordinarias del Gran Consejo Federal Simbólico se
celebrarán cuatrimestralmente en Cámara de Maestros y conforme a Rito.
Sus trabajos se ajustan al mismo orden que los de un Taller.
Para la validez de loe trabajos se requiere la presencia de siete Consejeros
como mínimun. Caso de no concurrir este número a la sesión convocada se
volverá a citar para el día siguiente, celebrándose entonces la sesión, sea cual
fuere el número de los Consejeros que asistan.
Las sesiones extraordinarias se celebrarán por convocatoria directa del Gran
Maestre, o a petición de tres Diputados Grandes Maestres Regionales o de la
tercera parte de los Delegados que constituyen el Gran Consejo. A las sesiones
ordinarias y extraordinarias del Gran Consejo pueden concurrir como Visitadores
los Maestros activos de la Federación.
Los Visitadores no tienen voz ni voto. Ocupan un sitio distinto y separado del
de los Consejeros.
Cuando el Gran Consejo se reúne en sesión secreta, cubren el Templo todos
los Visitadores sin excepción.
Art. 735.— Las proposiciones, discusiones y votaciones en el Gran Consejo
se ajustarán a lo preceptuado para los Talleres.
122

Toda decisión se tomará por simple mayoría de votos de los Consejeros en
propiedad que asistan a la sesión.
En caso de empate, el Gran Maestre Presidente tiene voto decisivo.
CAPITULO QUINTO
DEL BOLETÍN OFICIAL DEL GRANDE ORIENTE
Art. 736.— El Grande Oriente Español publicará periódicamente un Boletín,
órgano de la Federación, donde se insertarán las leyes, decretos, edictos, avisos,
noticias y cuantas informaciones oficiales puedan ser confiadas a este medio de
comunicación.
Además, el Boletín comprenderá una sección, no oficial, destinada a la
publicación de trabajos doctrinales, propaganda y de información que sean
aceptados por la Comisión correspondiente.
Este periódico se denominará “Boletín Oficial del Grande Oriente Español”.
Art. 737.— Del Boletín Oficial se enviarán ejemplares a cada uno de los
Cuerpos y Talleres de la Federación, estando todos obligados a conservar las
colecciones de esta publicación.
Art. 738.— La parte oficial del Boletín debe leerse por el Orador de cada
Taller Simbólico, en tenida ordinaria.
Se hará mención de esta lectura en el acta.
Art. 739.— La confección del Boletín Oficial estará encomendada a la
Comisión permanente del Gran Consejo Federal Simbólico, a quien corresponde
la Dirección,
El Gran Maestre, hará los nombramientos de redactor jefe y demás cargos
periodísticos y administrativos del Boletín.
CAPITULO SEXTO
DE LA ELECCIÓN Y TOMA DE POSESIÓN DEL GRAN MAESTRO,
PRESIDENTE DEL CONSEJO FEDERAL JURÍDICO
Art. 740.— Dentro del Año Masónico en que vacare el cargo de Gran
Maestre, o en el último de los tres años que ha de durar su ejercicio, decretará la
elección secreta elijan una Terna de Candidatos a la Gran Maestría.
Cuando obre en poder de las Grandes Logias Regionales las Ternas de
Candidatos votadas por los Talleres, convocarán a una sesión de la Gran Logia y
en ella procederán al recuento y escrutinio de los votos que haya obtenido cada
nombre de los consignados en las ternas.
Con los tres nombres que hubieren logrado mayor número de votos, la Gran
Logia Regional formará a su vez una Terna definitiva, que elevará al Gran Consejo
Federal Simbólico consignado el número de votos logrados por cada candidato.
Los Talleres de dependencia directa formarán su Terna asimismo por medio
de votación secreta y la elevarán directamente al Gran Consejo, consignando en
ella iguales datos que los señalados a las Grandes Logias Regionales.
123

Estas operaciones han de realizarse, necesariamente, en los meses tercero y
cuarto del periodo electoral.
Cuarta.— El Gran Consejo Federal Simbólico, recibidas que sean las Ternas
indicadas, formará con los nombres de ellas una última y definitiva lista, indicando
junto a cada nombre los votos obtenidos.
Esta lista se cursará a todos los Talleres de la Federación: por vía directa a
los que dependan del Gran Consejo, y por medio de las Grandes Logias a los que
integran cada territorio regional.
Seguidamente los Talleres procederán a la elección, que habrá de verificarse
en Cámara de Aprendiz, en Tenida extraordinaria convocada al efecto por el
Presidente de cada Taller, y según las condiciones segunda y tercera que expresa
el articulo 397 de estos Estatutos y Reglamentos generales.
Las operaciones indicadas se realizarán, necesariamente, en los meses.
quinto y sexto del período electoral.
Quinta.— El censo de elegibles queda reducido al de los nombres que
figuran en la relación definitiva de que del sucesor la Asamblea General o el Gran
Consejo Federal Simbólico, por mandato de ella.
El decreto de convocatoria para la elección de Gran Maestre deberá
publicarse seis meses antes, por lo menos, de la fecha en que haya de terminar el
periodo electoral.
Art. 741 .— Declarado el período electoral procederán a la elección del Gran
Maestre todos los Talleres Simbólicos de la Federación, así como los Triángulos,
ya dependan de las Grandes Logias Regionales o directamente del Gran Consejo,
Federal Simbólico, atendiéndose a las reglas siguientes:
Primera.— Las Grandes Logias Regionales enviarán a la Gran Secretaría de
la Comisión permanente del Gran Consejo Federal Simbólico, relación de los
Maestros Masones de su jurisdicción con derecho a ser elegidos para el cargo de
Gran Maestre.
Esta relación habrá de remitirse necesariamente en plazo de un mes a contar
desde el día de la Convocatoria.
Segunda.— La Comisión permanente del Gran Consejo Federal Simbólico
formará con estas relaciones y con la lista de Maestros de los Talleres de
dependencia directa que estén asimismo en condiciones de ser elegidos Gran
Maestre, una lista definitiva que cursará a dichos Talleres de dependencia directa
y a las Grandes Logias Regionales.
Ello ha de hacerse necesariamente en el segundo mes del periodo electoral.
Tercera.—- Cada Gran Logia remitirá a sus Talleres copia de esta relación
para que de entre ella, en votación antes se habla, considerándose como votos en
blanco los que se otorguen a personas distintas de las que figuren en la lista.
Sexta.- Las Grandes Logias Regionales y los Talleres de dependencia
directa que dejen de realizar las operaciones antes enumeradas en los plazos que
se indican, pierden todo derecho a hacerlo con posterioridad y habrán de atenerse
a los resultados que arroje en los restantes Talleres el cumplimiento de estas
disposiciones reglamentarias.
Artículo. 742.— La elección de Gran Maestre en los Talleres de la
Federación, se ajustará a los preceptos siguientes:
Primero.- La tenida extraordinaria con este fin, comenzará, según lo
dispuesto por el articulo 288, con la sola diferencia de que, después que el
Venerable Maestro haya anunciado el objeto de los trabajos, el Orador dará
lectura al decreto del Gran Consejo convocando a la elección de Gran Maestre.
124

Segundo.- La votación se verificará según el procedimiento indicado en el
artículo 294.
Tercero.- Una vez concluido el escrutinio y determinado su resultado se
sumarán a los sufragios del candidato que haya obtenido unanimidad o mayoría
de votos, los emitidos en blanco y los de los obreros ausentes.
Asimismo se les acumularán los votos otorgados a persona que no figure en
la lista definitiva de elegibles, de acuerdo con lo dispuesto en la regla quinta del
artículo 741.
No se efectuará la acumulación de los votos antes enumerados a ningún
candidato si al hacerse el escrutinio resulta empate entre dos o más de ellos.
Cuarto.— Inmediatamente después de proclamada la elección de Gran
Maestre, el Taller enviará certificación autorizada a la Gran Logia Regional de que
dependa o al Gran Consejo Federal Simbólico, caso de depender de este
directamente.
Quinto.— Los ejemplares del acta de elección, se ajustarán a las formas
usuales en estos casos.
Sexto.— La remisión de las actas de votación y su escrutinio ha de
realizarse, necesariamente, en los últimos quince días del periodo electoral.
Art. 743.— Terminado que sea el plazo para la emisión de actas de votación,
el Gran Consejo Federal Simbólico, en sesión extraordinaria, procederá al
escrutinio.
Art. 744.— En la sesión nombrada se leerán las actas y computarán los votos
que de ellas resulten, todo lo cual verificado el Gran Presidente proclamará el
resultado del escrutinio. A seguida ordenará la circulación del saco de
Beneficencia, después de lo cual se cerrarán los trabajos, tributándose la triple
batería de Rito.
El Secretario levantará acta, anotando con toda exactitud el número de votos
que haya obtenido cada uno de los candidatos a la Gran Maestría,
El acta de esta sesión, que firmarán todos los Consejeros, se remitirá a la
Asamblea general de la Federación.
Art. 745.— La asamblea general de la Federación se reunirá en sesión
extraordinaria y solemne para recibir la promesa del Gran Maestre electo y para su
proclamación.
En esta sesión, el Presidente, o el que legalmente le sustituya, abrirá los
trabajos conforme a Rito.
Después de leída y aprobada e! acta de la anterior, la Asamblea se
constituirá en Cámara de Aprendiz. A seguida serán recibidos los Visitadores,
pudiendo ser admitidos como tales los Aprendices y Compañeros.
Inmediatamente el Gran Orador dará lectura al decreto de convocatoria para
la elección de Gran Maestre y el acta de la sesión de la Asamblea de Secretarios
escrutadores.
Después, el Presidente concederá la palabra sobre la elección de dicho
cargo. Si reinase silencio entre los Representantes o no se hiciera ninguna
protesta grave contra la referida elección, el Gran Maestro de Ceremonias
proclamará entre Columnas al Gran Maestre electo.
Inmediatamente, cinco Maestros armados de espadas, precedidos del
Maestro de Ceremonias y del Experto de la Asamblea, conducirán al Templo al
electo, quien permanecerá entre Columnas. Entonces el Presidente le preguntará
si acepta el alto cargo para el cual ha sido designado y sí está dispuesto a prestar
el juramento o promesa de ley.
125

Contestando afirmativamente y estando todos los presentes en pie y al
orden, el Gran Maestre electo se acercara al Ara, y ante ella, con la mano derecha
sobre el libro de la ley, pronunciará el juramento o promesa siguiente:
"A L∴G∴D∴G∴A∴D∴U∴,—Elegido por la soberanía del pueblo masónico
Gran Maestre Presidente del Gran Consejo Federal Simbólico del Grande Oriente
Español, juro o prometo, por mi honor, y a fe de caballero masón, cumplir con
todos los deberes que su aceptación me impone, y guardar y hacer guardar la
Constitución, los Estatutos y Reglamentos generales, leyes y decretos y
sostener,,en cuanto de mi dependa, el derecho de todos y de cada uno."
Inmediatamente el Presidente de la Asamblea dirá:
"Si así lo hiciéreis el Gran Arquitecto del Universo, vuestra conciencia y la
Orden os lo premien, y si no, os lo demanden."
Después el Gran Maestre se colocará entre Columnas acompañado del
Maestro de Ceremonias, quien hará la siguiente proclamación:
"Como Gran Maestro de Ceremonias de la Asamblea general, y por mandato
del pueblo masónico, proclamo de Norte a Sur y de Oriente a Occidente, Gran
Maestre, Presidente del Consejo Federal Simbólico del Grande Oriente Español, al
ilustre y Venerable hermano N...... "
Hecho el anuncio de la proclamación por los Grandes Vigilantes de la
Asamblea, en la forma acostumbrada, se tributará la triple batería de Rito en honor
del proclamado.
En seguida el Gran Maestre pasará a Oriente, donde ocupará asiento a la
derecha del Presidente de la
(Falta esta página 264-265)........................................................
..................................,,,...............................................................................
h∴reunirá inmediatamente a los Maestros presentes, quienes constituidos en
Cámara tomarán o no en consideración la denuncia.
Art. 751.— En caso afirmativo, es decir si se tomara en consideración la
denuncia, se transmitirá a la comisión de Justicia del Taller, que se convertirá en
juzgado instructor. En el acto quedará el denunciado suspendido de derechos
masónicos.
Art. 752.— Esta comisión instruirá el expediente oyendo al acusador, al
acusado y a los testigos que el uno y el otro aporten.
Art. 753.— Verificadas que sean estas diligencias se pasará al expediente al
h∴ orador, por plazos de ocho días, para que formalice el acta de acusación.
Art. 754.— De dicha acta y del expediente se dará traslado al acusado quien
por si o por medio de defensor, podrá presentar las exculpaciones que a su
derecho convenga y emitirá sus conclusiones en plazo de ocho días.
Si el acusado nombrara defensor será condición indispensable para la
validez del nombramiento que el designado tenga la condición de miembro activo
de la Federación y lleve seis meses, por lo menos, en el disfrute del grado de
Maestro Masón.
Si el denunciado renunciara a nombrar defensor para el acto de la vista, la
Comisión se lo nombrará de oficio entre los Maestros del Taller.
Art. 755.—Emitidas que sean las conclusiones del Orador y del Defensor, se
procederá a la evacuación de las diligencias restantes hasta el señalamiento de la
vista, en plazo asimismo de ocho días.
126

Art. 756.— El acto de la vista se celebrará en Cámara de Justicia que
integrarán todos los Maestros del Taller. Si no hubiera número bastante para
constituir con ellos la Cámara se nombrará por la Gran Logia el número
complementario de Maestros que necesiten.
Art. 757.— La Cámara después de escuchar al acusado concederá la
palabra al Orador y al h∴ defensor quienes emitirán en viva voz su definitivas
conclusiones.
Inmediatamente después el Presidente propondrá en forma alternativa la
sentencia que haya de dictarse.
Esta propuesta se votará en escrutinio secreto.
Art. 758.— Si la sentencia fuera condenatoria se requerirá para su validez
que reúna por lo menos las dos terceras partes de los votos de los Maestros
presentes.
En la votación no toman parte ni el Orador ni el defensor.
Art. 759.— El fallo se comunicará al acusado dentro de las cuarenta y ocho
horas siguientes de haber sido dictado, utilizando los medios oportunos para que
llegue a su conocimiento, y personalmente a ser posible.
Si el fallo fuera condenatorio se le advertirá en la notificación, del derecho
que le asiste de entablar por escrito recurso de apelación ante el Gran Consejo
Federal Simbólico o ante la Gran Logia Regional que corresponda en el preciso
término de diez días para los Talleres de la Península y treinta días para los de
Canarias, Baleares, Marruecos y Salónica a contar desde aquel en que le haya
sido notificada la sentencia.
Al entablar el recurso el apelante podrá acompañar las nuevas pruebas que
a la mejor defensa de su derecho considere necesarias.
Art. 760,— Cuando haya transcurrido el plazo anteriormente señalado sin
que el acusado entable el recurso de apelación se declarará firme la sentencia y
se aplicará la pena correspondiente.
Art. 761 — Contra las sentencias de las Cámaras de justicia procede también
el recurso de revisión, el cual podrá ejercitarse en un plazo máximo de cinco años,
Siempre que al interponer el recurso se aporten nuevas pruebas que puedan
alterar las bases de conocimiento que sirvieron para dictar el fallo.
Art. 762.— Los delitos masónicos cometidos por los miembros de un Taller o
por los hh∴ Visitadores durante la celebración de una Tenida serán juzgados sin
necesidad de expediente en Cámara de Maestros de Altas e Inmediatas
Sanciones.
Esa Cámara se reunirá ocho días después de ocurridos los hechos. La
integrarán los Maestros, que estuvieren presentes en la tenida donde se cometió
el delito, y dictará sus fallos después de escuchar al acusado y el informe del
Fiscal del Taller.
Art. 763.— Contra el fallo condenatorio de la Cámara de Maestros de Altas e
Inmediatas Sanciones procede únicamente el recurso de apelación en la forma
prevenida en el artículo 759.
Art. 764.— Los recursos de apelación y revisión se resolverán en el plazo
máximo de tres meses, tramitándose de igual manera que la primera instancia.
Art.765.— Los delitos cometidos conjuntamente por dos o más hh∴
perteneciente a diferentes Talleres se tramitarán por una Comisión mixta integrada
por las Comisiones de justicia de ambas entidades presididas por el Venerable
Maestro del Taller más antiguo.
127

La toma en consideración de la denuncia puede hacerla el Taller donde se
presente, comunicándola al otro Taller en que esté afiliado el coautor, cómplice o
encubridor del delito perseguido.
El fallo se dictará por una Cámara de justicia mixta integrada por un número
igual de Maestros de ambos Talleres y presidida por el Venerable Maestro del más
antiguo.
La acusación la ejercerá el Orador del Taller más moderno.
Art. 766.—De todos los fallos de la Cámara de Justicia conocerá
necesariamente la Cámara de Aprendiz del Taller, en la primera tenida ordinaria
que se celebre después de dictados.
Art. 767.—Las penas que pueden imponerse dentrode la orden, son:
reprensión (pública o privada), suspensión de derechos masónicos, baja sin
plancha de quite e irradiación.
Quedan autorizadas las Logias para aplicar la pena de suspensión de
derechos masónicos en la proporción que estimen conveniente.
Art. 768.— El procedimiento marcado en los artículos anteriores se seguirá
por las Grandes Logias Regionales y por el Gran Consejo Federal Simbólico en
los casos que le competan.
La Asamblea del Grande Oriente, cuando se constituya en Cámara de
justicia, seguirá asimismo el procedimiento indicado.
128

TÍTULO CUARTO
DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES
CAPITULO ÚNICO
Art. 769.— El Grande Oriente Español en sus relaciones internacionales,
respeta las diferentes formas del ejercicio de la soberanía de la Institución en
todas las Potencias Masónicas Regularmente constituidas y que por él sean
reconocidas.
Art. 770.— El Grande Oriente Español sostiene sus relaciones
internacionales con las demás Potencias por medio de Garantes de Amistad,
respectivamente nombrados, y por la celebración de Tratados entre los diversos
Estados Masónicos regulares.
Art. 771.— Los Garantes de Amistad que representen a las Potencias
Masónicas extranjeras ante el Grande Oriente Español, así corno los Garantes de
Amistad de éste ante aquéllas, serán nombrados por la Potencia que haya de ser
representada, previa la presentación de lista o terna por la Potencia ante la cual
deban ser acreditados.
Art. 772.— Los Garantes de Amistad nombrados por el Grande Oriente
Español ante las Potencias Masónicas extranjeras, conservarán sus funciones
hasta que una de ambas Potencias, por cualquiera causa, advierta a la otra que
procede un nuevo cambio de terna o lista de presentación.
Art. 773.— La fraternidad constituye la ley suprema para resolver los
conflictos que puedan surgir entre Potencias Masónicas.
La ruptura de relaciones entre dos Potencias Masónicas, no obsta para que
los masones afiliados a las mismas se reconozcan mutuamente como tales.
TÍTULO QUINTO
DISPOSICIONES COMPLEMENTARIAS
CAPÍTULO ÚNICO
ARTÍCULOS ADICIONALES
Art. 774.— Después de efectuada la elección de Venerable Maestro en las
Logias, los hermanos que constituyan la terna y no fueren elegidos, podrán ser
candidatos para otro cargo.
Art. 775.— El Presidente de Taller que cesare en su cargo después de un
año o más de ejercicio, conserva durante el año siguiente al en que ocupó la
presidencia, el derecho de no aceptar cargo alguno en el Taller que antes dirigió.
129

Art. 776.— Si una afiliación o regularización no se efectúa dentro de los seis
meses después de presentada la propuesta a un Taller, ésta se archiva y queda
sin efecto.
Para que, transcurrido dicho plazo, pueda verificarse la afiliación o
regularización, es necesario que la proposición sea reproducida, y se la someterá
a los mismos trámites y requisitos que si hubiera sido presentada por vez primera.
Art. 777.— El examen y las pruebas a que deben ser sometidos los
candidatos en las iniciaciones de profanos y en las exaltaciones a cualquiera de
los grados, se ajustarán al orden, requisitos y prácticas que expresan los Rituales
oficiales del Grande Oriente.
Art. 778.— Los masones en sueños que se presenten como Visitadores en
los Talleres, deberán exhibir la plancha de quite o certificado de retiro que acredite
su situación en la Orden y el Taller de procedencia.
Art. 779.— El importe de las multas impuestas a los obreros en los Talleres,
deberá ingresar siempre en el Tronco de Beneficencia.
Art. 780.— Todos los papeles, libros, registros y demás documentos de un
Taller deberán guardarse en muebles “ad oc”, colocados en la Cámara que
precede al Templo o en el lugar destinado a Secretaría en pasos perdidos.
TITULO SEXTO
DE LA REFORMA REGLAMENTARIA
CAPITULO ÚNICO
Art. 781.— Estos Estatutos y Reglamentos generales podrán ser reformados
únicamente en lo que no afecte a los principios y doctrinas universales de la
Institución ni al Rito preferentemente adoptado por el Grande Oriente Español.
Art. 782.— Para que puedan reformarse estos Estatutos y Reglamentos
generales deberán cumplirse los requisitos siguientes:
Primero— Ser propuesta la reforma a una asamblea general por una Gran
Logia Regional o por la mitad más uno de los miembros activos de la Federación.
Segundo.— Que se tramite con sujeción estricta a lo dispuesto en los
párrafos 2º y 3º del artículo 77 de la Constitución para la reforma de la misma.
Art. 783.— Si por consecuencia de una reforma constitucional fuere
necesario efectuar la de estos Estatutos y Reglamentos generales, la reforma se
circunscribirá a la alteración, adición o desarrollo que exija la primera.
Sólo en este caso podrá prescindirse de los requisitos expresados en el
artículo anterior. -
INSTRUCCIÓN GENERAL
Art. 784.— El masón es fiel amigo de su patria y de todos los hombres.
Jamás perderá de vista que con el juramento o promesa que prestó en su primera
iniciación se despojó de toda distinción profana y de cuanto tiene de hombre
vulgar, para adornarse tan sólo con el dulce título de Hermano. Corresponda su
conducta al titulo que lleva, y la Masonería habrá logrado su fin.
130

DISPOSICIONES TRANSITORIAS
Primera.— Las Logias que no reúnan suficiente número de Maestros
Masones para juzgar a sus miembros activos según determina la ley, instruirán el
proceso, y una vez terminado legalmente el sumario, lo remitirán al Gran Consejo
Federal Simbólico o a la Gran Logia Regional de que dependa, y el Poder
competente nombrará un Tribunal para que juzgue y sentencie.
Segunda y última.— Los presentes Estatutos y Reglamentos generales
anulan lo que en contrario de lo prescrito en ellos haya podido legislarse o
decretarse en el Grande Oriente Español.
Igualmente quedan sin efecto cuantas disposiciones contengan los
reglamentos particulares de los Cuerpos y Talleres de la Federación, que se
opongan a lo consignado en estos Estatutos y Reglamentos.
131

ÍNDICE
LIBRO PRIMERO
TITULO PRIMERO
Páginas
CAPITULO PRIMERO.— De los masones en general 5
CAPITULO SEGUNDO. — Masones regulares 6
CAPITULO TERCERO.—Masones irregulares 7
CAPITULO CUARTO.—Modo de obtener la regularidad 7
CAPITULO QUINTO.—Cualidades, deberes y derechos de los
masones 9
TITULO SEGUNDO
CAPITULO PRIMERO.—De los Talleres en general 15
CAPITULO SEGUNDO. — Disposiciones comunes a todos los Talleres 16
TITULO TERCERO
CAPÍTULO PRIMERO.— De las Grandes Logias
Regionales: Sus atribuciones y funcionamiento 22
CAPITULO SEGUNDO. — Del personal que constituyen las Grandes Logias 24
CAPITULO TERCERO. — Facultades del Gran Maestre 25
CAPITULO TERCERO.—Deberes del Diputado Gran Maestre 27
CAPITULO CUARTO. — Del Gran Secretario 28
CAPITULO CUARTO.— Del Gran Tesorero 29
CAPITULO CUARTO.— Del Gran Arquitecto Revisor 29
CAPITULO CUARTO.—De los demás cargos. 29
TITULO CUARTO
CAPITULO PRIMERO.—Personal de las Logias
y Triángulos: Del asunto en general 30
CAPITULO SEGUNDO.—Dignidades y Oficiales de las Logias 30
TITULO QUINTO
CAPITULO PRIMERO.— Deberes y atribuciones de las Dignidades y Oficiales de
las Logias. Del Presidente 34
CAPITULO SEGUNDO.— De los Vigilantes 39
CAPITULO TERCERO.— Del Orador 42
CAPITULO CUARTO.— Del Secretario 45
CAPITULO QUINTO.— Del Tesorero 53
CAPITULO SEXTO.— De los Expertos 56
CAPITULO SÉPTIMO.— Del Limosnero u Hospitalario 58
CAPITULO OCTAVO.— Del Maestro de Ceremonias 61
CAPITULO NOVENO.—Del Arquitecto revisor. 63.
CAPITULO DÉCIMO.—Del Maestro de banquetes 64
132

CAPITULO DECIMOPRIMERO.—Del Archivero-bibliotecario 65
CAPITULO DECIMOSEGUNDO. — Del Guarda-sellos 69
CAPITULO DECIMOTERCERO. — Del Ecónomo 70
CAPITULO DECIMOCUARTO.— Del Porta-Estandarte 71
CAPITULO DECIMOQUINTO.—De Heraldo o Porta-Espada 71
CAPITULO DECIMOSEXTO.— De los Guarda-Templos 72
CAPITULO DECIMOSÉPTIMO.—De los Diáconos 74
CAPITULO DECIMOCTAVO.—De los Hermanos Sirvientes 74
CAPITULO DECIMONOVENO.— De las Comisiones: Sección primera.—
De las Comisiones en general 76
CAPITULO DECIMONOVENO. — Sección segunda.—Comisión de Justicia 79
CAPITULO DECIMONOVENO.— Sección tercera.—Comisión de Hacienda 80
CAPITULO DECIMONOVENO.—Sección cuarta.—Comisión de Beneficencia 82
CAPITULO DECIMONOVENO.—Sección quinta.—
Comisión de Asuntos generales 83
TITULO SEXTO
CAPITULO PRIMERO.— Logias: Su organización 84
CAPITULO SEGUNDO.-TriánguIos: Su organizacion 87
TITULO SÉPTIMO
CAPITULO ÚNICO. — Regularización de Talleres 90
TITULO OCTAVO
CAPITULO PRIMERO.— Fusión, reorganización y cambio de nombre
de los Talleres: Del asunto en general 92
CAPITULO SEGUNDO- De la fusión de los Talleres 93
CAPITULO TERCERO.— De la reorganización de los Talleres 95
CAPITULO CUARTO.— Del cambio de titulo distintivo de los Talleres 96
TITULO NOVENO
CAPITULO PRIMERO.—Disposiciones generales sobre la instalación de
Talleres 98
CAPITULO SEGUNDO.—De la instalación de Logias 99
TITULO DÉCIMO
CAPITULO PRIMERO. -Elecciones de cargos y comisiones en los
Talleres: época de las elecciones 105
CAPITULO SEGUNDO.—Derecho de elegibilidad y de elección
para los cargos 106
CAPITULO TERCERO.—De las incompatibilidades de cargos 107
CAPITULO CUARTO.—Modo y forma de verificar las elecciones:
Procedimiento en las Logias 109
CAPITULO QUINTO.—Vacantes y modos de cubrirlas 114
CAPITULO SEXTO.—Instalación de Dignidades y Oficiales 116
133

TITULO DECIMOPRIMERO
Páginas
CAPITULO PRIMERO.—Relaciones de los Talleres:
Sección primera: Relaciones con el GranConsejo y
con las Grandes Logias 121
Sección segunda: Cuadros que deben enviar los
Talleres 123
Sección tercera: Expedición de certificados, títulos
o diplomas 124
Sección cuarta: Palabras anual y semestral 127
Sección quinta: Inspección de Talleres 129
CAPITULO SEGUNDO.— De las relaciones de
los Talleres entre sí . 131
CAPITULO TERCERO.— Relaciones de los Talleres con
otros de distintas Potencias masónicas 135
CAPITULO CUARTO.— Relaciones de los Talleres
con autoridades no masónicas 136
CAPITULO QUINTO.— Relaciones de los Talleres
con el mundo profano 137
TITULO DECIMOSEGUNDO
CAPITULO PRIMERO.—Régimen interior de
los Talleres: Atribuciones de los Talleres. 138
CAPITULO SEGUNDO.—Disciplina en los Talleres 140
CAPITULO TERCERO.-De los Grados que comprenden y
confieren los Talleres y de las Cámaras que trabajan orgánicamente 142
CAPITULO CUARTO.—Trabajo que corresponde a los Talleres 142
CAPITULO QUINTO,—De las tenidas o sesiones de los Talleres 145
CAPITULO SEXTO.—Del orden de los trabajos en las tenidas 148
CAPITULO SÉPTIMO.—Proposiciones y discusiones:
Sección primera: Proposiciones 155
Sección segunda: Discusiones 157
Sección tercera: Cuestiones de orden 162
CAPITULO OCTAVO.—Votaciones 162
CAPITULO NOVENO.—Licencias y planchas de quite:
Sección primera: Licencias 168
Sección segunda: Planchas de quite 170
CAPITULO DÉCIMO.—De los hermanos Visitadores 174
CAPITULO UNDECIMO.—De los miembros honorarios 177
CAPITULO DUODECIMO.—De la adopción de Lowetones 179
CAPITULO DECIMOTERCERO.— Gobierno de los Talleres 181
TITULO DECIMOTERCERO
134

CAPITULO PRIMERO.—Trabajos especiales de iniciación, concesión de
grados, afiliación y regularización: Iniciación de profanos 182
CAPITULO SEGUNDO.—Concesión de grados: Exaltaciones 192
CAPITULO TERCERO. — Afiliaciones: Sección primera:
De la afiliación en los Talleres Simbólicos 198
CAPITULO CUARTO. — De las regularizaciones 202
TITULO DECIMOCUARTO
CAPITULO PRIMERO.—Suspensión de trabajos y
disolución de los Talleres: Suspensión de trabajos en los Talleres 205
CAPITULO SEGUNDO.—Disolución o separación de los Talleres 207
TITULO DECIMOQUINTO
CAPITULO ÚNICO.— De las fiestas y banquetes masónicos 210
TITULO DECIMOSEXTO
CAPITULO PRIMERO.—Honores masónicos:
Delos títulos de honor de los Talleres 213
CAPITULO SEGUNDO.—De los honores y
preeminencias en los Talleres 214
CAPITULO TERCERO.—Honras fúnebres. 217
TITULO DECIMOSÉPTIMO
CAPITULO PRIMERO. — Insignias y distintivos masónicos:
De las insignias y distintivos delos Cuerpos y Talleres 221
CAPITULO SEGUNDO.—De las insignias y distintivos
de los masones en los trabajos 222
LIBRO SEGUNDO
TITULO PRIMERO
CAPITULO PRIMERO.— Ritos masónicos:
Su reconocimiento y práctica: De los ritos reconocidos 225
CAPITULO SEGUNDO.—De la práctica de los ritos por los
Talleres y masones 226
TITULO SEGUNDO
CAPITULO PRIMERO.— Rito de adopción: Constitución,
naturaleza y objeto del rito de adopción 227
CAPITULO SEGUNDO.—Disposiciones generales
sobre el rito de adopción. 228
135

LIBRO TERCERO
TITULO PRIMERO
CAPITULO PRIMERO.—Poderes masónicos:
Del Poder legislativo: Asamblea general y su formación 232
CAPITULO SECUNDO.—De las reuniones de
la Asamblea general 234
CAPITULO TERCERO.—De las atribuciones de
la Asamblea general 235
CAPITULO CUARTO.—De los Grandes Dignatarios,
Oficiales y Comisiones de la Asamblea general 235
CAPITULO QUINTO.—Orden de los trabajos en la Asamblea 240
TITULO SEGUNDO
CAPITULO PRIMERO.—Del poder ejecutivo de la
Masonería Simbólica: Gran Consejo Federal
Simbólico: De la ‘formación del Gran Consejo 244
CAPITULO SEGUNDO.—De las atribuciones del
Gran Consejo Federal Simbólico 247
CAPITULO TERCERO.—Deberes y atribuciones -
de los Dignatarios, Oficiales y Comisiones del
Gran Consejo Federal Simbólico 248
CAPITULO CUARTO.—Orden de los trabajos
del Gran Consejo 255
CAPITULO QUINTO.—Del Boletín Oficial del
Grande Oriente 256
CAPITULO SEXTO.—De la elevación y toma de
posesión del Gran Maestre, Presidente del
Gran Consejo Federal Simbólico 257
TITULO TERCERO
CAPITULO UNICO.— Del poder judicial 265
TITULO CUARTO
CAPITULO ÚNICO.—De las relaciones internacionales 270
TITULO QUINTO
CAPITULO ÚNICO.—Disposiciones complementarias:
Artículos adicionales 271
TITULO SEXTO
CAPITULO ÚNICO.—De la reforma reglamentaria 273
INSTRUCCIÓN GENERAL 274
DISPOSICIONES TRANSITORIAS 274
136

La impresión de La Constitución y Reglamentos
Generales de nuestra Potencia Simbólica GRANDE
ORIENTE ESPAÑOL, se verificó en México, D. F., en
Enero de 1947.
Contribuyó a que se pudiera llevar a la práctica, obra de
tanta importancia, la generosidad de la “MUY
RESPETABLE GRAN LOGIA VALLE DE MÉXICO”,
al otorgar asilo a nuestro Alto Cuerpo.
Su Decreto de Hospitalidad ha permitido que se organice
este Gobierno Simbólico y que viva en acción constante.
La tiranía que sojuzga a España sentirá la decisión
solidaria de la Potencia Hermana —a quien rendimos
tributo de gratitud— que abrió sus puertas a los
perseguidos.
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