Memoria 2001 - Unión Argentina de Rugby

seguimiento que de forma permanente vaya puliendo las aristas del referee. Esta tarea sólo puede
realizarse por personas con dedicación suficiente y trabajando en equipo.
No puede soslayarse que el hecho que nuestra actividad sea netamente amateur, hace que la
disponibilidad de tiempo y recursos sea escasa, por lo que los medios al alcance se presentan del
mismo modo limitados, pero ello no debe constituir impedimento para tratar de avanzar de acuerdo a
nuestras posibilidades.
El tiempo y dinero que en las Uniones de más alto nivel se dedica a este aspecto, ya que allí parten
del concepto que el aporte del referee al juego, es tan importante como el de los propios jugadores,
precepto que por su parte halla su correlato en la enorme influencia de éste en el desarrollo del
propio juego.
Desde ya que nuestros recursos no guardan relación con los presupuestos que se manejan en los
primeros niveles mundiales, pero tenemos la capacidad e ingenio suficiente para no quedarnos atrás.
Pero como en todas las actividades de la vida, la influencia de los sabelotodo en nuestro ámbito ha
sido nefasta, ya que en la ambición por abortar cualquier intento que no se ajuste a sus pretensiones,
terminan por impedir cualquier manifestación que no se genere bajo su paraguas de conveniencias y
amiguismo.
Es por esta razón que el “leit motiv” de esta gestión, ha sido puesto en la creación de equipos de
trabajo, empezando por la creación del cuerpo de oficiales de desarrollo regionales, cuyo director por
razones presupuestarias recién podrá designarse a principios del año 2002, con el claro propósito de
dotar a la labor de un esquema que no dependa de la voluntad de alguien en particular, sino que
respete las políticas y parámetros aprobados por el HCD.
La intención es seguir con la creación de un cuerpo de asesores, a los que en esta etapa no se podrá
retribuir directamente, como sería aconsejable, pero a quienes se les compensarán sus gastos de
traslado, mientras que las Uniones visitadas sólo deberán aportar una noche de alojamiento, junto a
la que habitualmente brindan a los referees, como hasta el presente.
La intención no es hacer creer que todo ha marchado sobre ruedas, ha habido dificultades y sin
dudas las seguirá habiendo, pero para enfrentarse a ellas los hombres del rugby poseen la
templanza y perseverancia adquiridas al practicar este noble deporte.
Sirva de ejemplo una breve reseña de los hitos más importante que han jalonado la labor de la
Subcomisión de Referees durante el ejercicio vencido, no sin antes hacer un expreso reconocimiento
al HCD, dado que sin la confianza de sus integrantes, no hubiera sido posible concretar ninguno de
estos logros.
- Desarrollo: Creación del Cuerpo de Oficiales de Desarrollo Regionales, experiencia inédita en
nuestro país. El HCD hizo caer las designaciones en los Sres. Osvaldo Ciarrocci (Bs. As.), Miguel A.
Peyrone (Rosario), Gustavo Amstutz (Mendoza), Julio Odstricil (Tucumán) y Gustavo López
(Córdoba)
- Designaciones: En el transcurso del año se realizaron un total de 276 designaciones de referees
para atender los torneos organizados por la UAR e intercambios:
a) 46 para cumplir con el plan de intercambios entre las uniones provinciales, cuyo costo es
íntegramente soportado por éstas;
b) 18 para el Campeonato Argentino de Mayores;
c) 12 para el Campeonato Argentino de Ascenso;
d) 7 para el Campeonato Argentino de Estímulo;
e) 35 para los Campeonatos Argentinos de M20/M18;
f) 18 para el Campeonato Argentino de Ascenso M20/M18;
g) 6 para el Campeonato Argentino M20 Estímulo;
h) 6 para el Campeonato Argentino M18 Estímulo;