Regasificadoras mar adentro - Sedigas

Cartagena,
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MIGUEL LóPEZ RUBIO
Además de su espectacular
entorno, algo más tendrá Cartagena
para haber sido la niña
mimada de cartaginenses, romanos,
visigodos o para que sus habitantes
encabezaran una insurrección que les
llevó a la independencia (y a acuñar
una moneda propia) durante la Primera
República. Más de 2.000 años de historia,
más de 200.000 habitantes, una
superficie que supera los 500 kilómetros
cuadrados y 22 playas censadas
son algunas de las credenciales de
Cartagena, una ciudad siempre unida
a dos mares, el Menor y el Mayor… o
Mediterráneo. Esta distinción que ha
hecho famosa a la zona se debe a la
formación arenosa que los científicos
denominan isla barrera.
puerto de culturas
La Manga del Mar Menor da lugar a la
bahía del mismo nombre y a un conjunto
de calas e islas declaradas Paisaje
Protegido. Su visita, indispensable para
todo aquél que pase por la ciudad,
puede empezar en el Cabo de Palos,
un accidente geográfico reconvertido
en pueblo pescador y turístico que
conserva un característico faro de finales
del siglo XIX y algunos de los fondos
marinos más atractivos del litoral.
Las aguas que unen el cabo con las
vecinas Islas Hormigas constituyen
una Reserva Marina Integral que esconde
praderas de posidonia, colonias
de corales y el Sirio, un buque italiano
hundido que atestigua la difícil navegación
de la zona. Aguas turbulentas
que contrastan con la tranquilidad de
la bahía que constituye el Mar Menor,
Enclave portuario con pasado minero,
literario y modernista, Cartagena se ha
abierto al visitante con una oferta cultural y
de ocio que complementa a la perfección
con las playas que la han hecho famosa.
con una profundidad que no supera los
ocho metros y una temperatura media
que no baja de los dieciocho grados.
Ruinas y modernidad
Las playas pueden atrapar al visitante
pero, si lo hacen, es posible que pierda
la oportunidad de comprobar las
decenas de maneras de descubrir el
casco urbano cartagenero. La ciudad
es una radiografía de su pasado y
discurre entre ruinas romanas perfectamente
documentadas y las apuestas
de arquitectos contemporáneos,
como Rafael Moneo. El arquitecto navarro
firma el museo que sirve de centro
de interpretación de una las joyas
de la ciudad, su teatro romano.
El castillo medieval de la Concepción,
en la otra punta, alberga otro
PLANTA DE
REGASIFICACIÓN
DE CARTAGENA
La historia de Cartagena siempre ha
estado ligada a su actividad portuaria.
Astilleros, industria minera e intercambios
mercantiles han caracterizado a
su puerto que, desde 1989, también
está preparado para recibir gas
natural. Ese año, la planta de regasificación
de Cartagena comenzó su andadura
en la dársena de Escombreras
con un único tanque de 55.000 m 3 y
una emisión de 25.000 Nm 3 /h. Veintiún
años después, la instalación cuenta
con cuatro tanques y una capacidad
de almacenamiento que llega a los
437.000 m 3 de gas natural licuado y
una capacidad de regasificación de
1.350.000 Nm 3 /h.
Actualmente, Enagás está construyendo
un quinto tanque de 150.000 m 3 de
capacidad, cuya puesta en marcha
está prevista en el segundo semestre
de este año. Estas ampliaciones
se suman a las realizadas en 2008,
cuando entró en operación el cuarto
tanque de almacenamiento de GNL.
Foto: ENAGAS.
centro de interpretación de parada
obligatoria, que propone un recorrido
por la abultada historia de la ciudad
habitada por diferentes culturas que
han dejado huella en su patrimonio
artístico. Ésta lleva al visitante a conocer
su segundo (o tercero) esplen-
Oficina de Turismo
Dirección: Plaza Bastarreche s/n, Muralla Carlos III. Cartagena
Teléfono: 968 50 64 83
E-Mail: infoturismo@ayto-cartagena.es
Rutas por la ciudad
El Ayuntamiento cartagenero ofrece al visitante cuatro visitas guiadas para conocer
la ciudad desde diferentes puntos de vista: su pasado romano, sus edificios barrocos
y neoclásicos, la época modernista y, por último, sus enclaves contemporáneos.
Información: www.cartagenapuertodeculturas.com
Dónde dormir y dónde comer
El portal turístico de Cartagena ofrece la visitante una relación de hoteles y restaurantes
para poder planificar su viaje desde casa. También ofrece información sobre
el estado de la playas.
Información: www.cartagenaturismo.es
dor como capital minera y puerto en
el que reconstruir la flota española
tras el desastre del 98. Estos años de
bonanza, que se prolongaron hasta
la Guerra Civil, dejan el Palacio Consistorial,
un edificio de corte modernista
construido en terrenos ganados
al mar. Le secundan varias edificaciones,
como la Casa Clares o la Casa
Cervantes, que rivalizan con las ruinas
de sus otras épocas doradas.
Arquitectura defensiva
La estratégica ubicación de la ciudad,
que facilitaba su defensa, fue
escenario de la Segunda Guerra Púnica,
con la que los romanos arrebataron
el dominio de la ciudad a Cartago.
Desde entonces, sus dirigentes
se han esmerado en su protección
y buena prueba de ello es el fuerte
de Navidad, un símbolo de la importancia
de Cartagena como enclave
militar y actual sede del centro de
interpretación de la arquitectura defensiva
de la zona.
Entre edificios y playas, el visitante no
debe olvidarse de probar algunos de
los platos típicos cartageneros, como
los salazones de pescado (sobre
todo de atún, caballa o melva); el caldero,
un arroz de pescadores a base
de peces de roca; o los michirones,
un guiso de habas secas. Después
de comer, siempre queda repasar la
agenda de la semana. Puede que el
turista tenga suerte y coincida con
La Mar de Músicas, un festival de
referencia que busca lo mejor de las
músicas del mundo y que ahora se
amplía al cine, el arte y las letras.
Foto: Antonio Gil. Faro del Cabo de Palos.