índigo - Reporte Indigo

personaje
IDI
Edipo, rey de Escocia
Amín tomó el poder con el beneplácito
de los británicos.
Obote se había opuesto a la venta
de armas de Londres a Sudáfrica
y había amenazado con nacionalizar
empresas británicas en Uganda.
Tras el golpe, los informes de los servicios
de inteligencia británicos describieron
a Amín como un hombre “benévolo,
pero fuerte” y “con una buena disposición
hacia Gran Bretaña”.
Los británicos le habían enseñado a ser
soldado. Ahora le iban a vender armas. Era,
después de todo, “uno de los nuestros”.
La segunda visita oficial que hizo Amín
fue a Londres. La cancillería británica
recomendó que se le preparara una cama
“extra grande”, advirtió que su “filosofía
política” era “algo confusa”, pero pidió
que la reina le recibiera con todos los
honores.
Todo se cumplió al pie de la letra. La
reina Isabel lo invitó a cenar al Palacio de
Buckingham y desfiló en carruaje por la
avenida Pall Mall.
La conexión entre Amín y los ingleses
empezó a debilitarse a consecuencia de la
decisión que tomó el dictador de expulsar
de Uganda a los 35 mil ciudadanos de origen
asiático, la mayoría indios.
Tras provocar la ira de Londres con la
expulsión de los asiáticos, Amín respondió
humillando a los cerca de 700 británicos
residentes en Uganda, acusándolos de
ser espías y amenazando con mandarlos a
todos al paredón.
Hizo que un grupo de ellos le llevara a
hombros en una silla, como un emperador
azteca, por las calles de Kampala.
Arrestó a otro, un catedrático en la Universidad
de Makerere llamado Denis Hills,
quien estaba escribiendo un libro sobre
las atrocidades de Amín.
La policía secreta del tirano entró en su