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HMU 907293<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Ana Mateo<br />
Cuenta la leyenda que los ángeles descendieron del cielo en 1531 para construir la<br />
ciudad que recibió el nombre de Puebla de los Ángeles, situada estratégicamente en<br />
el camino desde la ciudad de México al puerto de Veracruz. Un siglo después la<br />
catedral de Puebla ostentaba una rica tradición musical, basada en la Vieja España e influida por<br />
los ritmos exóticos del Nuevo Mundo y por las ricas armonías de la música africana, llevada a la<br />
América Central por los esclavos de la Costa de Marfíl. Juan Gutiérrez de Padilla fue nombrado<br />
maestro de capilla en 1629. Una década después, el Arzobispo Juan Palafox y Mendoza llegó para<br />
presidir, estimular bajo su patronazgo y apoyar con su riqueza personal un periodo de grandes<br />
logros artísticos.<br />
En 1645, Padilla contaba con un grupo de cantantes, arpistas, organistas, bajonistas y<br />
tañedores de violón que constaba de 28 hombres y 14 niños, el coro más refinado de todos los<br />
dominios españoles. La magnífica biblioteca del Arzobispo fue fundada en 1646 y la nueva catedral<br />
fue consagrada en 1649, con su ábside adornado con una exquisita talla andaluza de la Virgen, del<br />
siglo XVI, y con representaciones de García Ferrer de la Adoración de los Reyes y de la Natividad,<br />
en las que el Arzobispo Palafox aparece retratado como uno de los pastores. La decoración de la<br />
cúpula, de finales del XVII, obra de Cristóbal de Villapando, muestra la Virgen, la Santa Trinidad<br />
y varios personajes del Antiguo y del Nuevo Testamento con un coro de ángeles que cantan y tocan<br />
instrumentos.<br />
En la nave de la catedral, encerrado entre grandes cortinas al modo español, el coro mortal<br />
de Padilla proporcionaba la música litúrgica para las ocasiones convencionales: misas en latín,<br />
motetes, salmos para las vísperas, himnos, responsorios, pasiones, lamentaciones, letanías,<br />
adaptaciones para la Semana Santa, la Pascua y las fiestas marianas. También deleitaban a la<br />
congregación con nuevos villancicos, adaptados a los ritmos sensuales de las danzas populares y<br />
representativos de los patrones de discurso vernáculo de las distintas naturalezas raciales de los<br />
muchos grupos étnicos que poblaban la Nueva España: arrogantes portugueses, duros vascos,<br />
bucólicos campesinos – los villanos –, descarados pilluelos callejeros, indios que mezclaban el<br />
español con su lengua nativa, el Náhuatl, exuberantes bailarines negros de Guinea, Puerto Rico y<br />
Cuba.<br />
El idioma aceptado para la música religiosa se había modelado en la polifonía renacentista<br />
del siglo de oro español. Así como los compositores italianos de la generación de Monteverdi<br />
distinguían la prima prattica de la polifonía religiosa, de la ‘nueva música’ del Barroco, así Padilla y<br />
su predecesor, Gaspar Fernándes, emplearon un lenguaje musical deliberadamente anticuado para<br />
sus composiciones litúrgicas. La seconda prattica, el estilo progresista de la primera ópera italiana,<br />
era una construcción intelectual, una imitación del poder expresivo del drama clásico griego, que<br />
movía las emociones de la audiencia con armonías cromáticas y ademanes melódicos angulares al<br />
modo del recitativo. En contraste con ello, la nueva música de la Nueva España se derivaba de la<br />
cultura popular, e inclinaba los corazones de los oyentes a mover sus pies con los ritmos persuasivos<br />
de danzas sensuales. En la escena hispánica, el uso de melodías de danza concretas da color al<br />
ambiente de cada escena, un equivalente sonoro a la puesta en escena. Algo parecido sucede en la<br />
iglesia: cada danza confiere un carácter particular y una energía rítmica propia a su villancico, y<br />
entretiene además a la congregación con una tonada popular que todo el mundo conoce.<br />
Las obligaciones de Padilla lo llevaban a enseñar polifonía, pero también a componer nuevas<br />
chanzonetas cada año, para fiestas mayores como la Navidad o la Epifanía [la fiesta de los Reyes<br />
Magos]. Muchos textos llaman la atención sobre este amor a la novedad – “escuchen esta nueva y<br />
hermosa xácara”, “novedad de novedades”, “nuevos interludios cómicos” – pero la cultura española<br />
estaba también fascinada por la estética del contrafactum, del arte de crear nuevas obras basadas en<br />
obras maestras existentes. Al igual que las catedrales se construían a lo largo de muchos años, y por<br />
varias generaciones de artesanos, así las obras musicales se edificaban sobre la base de un material<br />
anterior.<br />
De ese modo, observamos una afición por la forma del tema con variaciones, por añadir<br />
nuevas voces contrapuntísticas a la polifonía existente, por repetir estribillos, y por unas eternas<br />
referencias cruzadas entre música y literatura. A la xácara xacarilla de Padilla, está estructurada<br />
como un popurrí poético en el que se citan las primeras líneas de uno o más romances famosos en<br />
cada stanza, mientras cada cantante tiene una melodía diferente que cantar sobre un bajo que se<br />
repite y que es, en sí mismo, una secuencia de las variantes de la xácara.<br />
Padilla, cuya misa “Ego flos campi ” conforma la obra central de este programa, nació en la<br />
ciudad andaluza de Málaga. Fue maestro de capilla en Jerez y en Cádiz antes de viajar hasta Puebla<br />
MISSA MEXICANA 1<br />
THE HARP CONSORT
HMU 907293<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Ana Mateo<br />
para aceptar el puesto de cantor y ayudante de Fernándes. Enseñó canto y violón, y dirigió también<br />
un taller de fabricación de instrumentos en el que se vendían a todo el país bajones y chirimías. El<br />
estilo conservador y formal era considerado como un reflejo del antiguo esplendor y de la<br />
solemnidad de la Santa Misa, pero Padilla resucitó las viejas formas con ritmos poderosos y síncopas<br />
chispeantes. Del mismo modo en que el compositor abandonó España para construir su hogar en<br />
el Nuevo Mundo, su estilo musical tomó como base las tradiciones del siglo de oro y se nutrió<br />
después con los colores y los ritmos de la América Central.<br />
Ego flos campi es una de las llamadas “misas parodia”, en las que la polifonía se crea a partir<br />
de miríadas de reelaboraciones de material de un motete existente. En este caso, el motete original<br />
no se ha conservado, pero las técnicas de Padilla pueden observarse en otras misas parodia que<br />
escribió, basadas en sus propios motetes. Algunas frases melódicas memorables, o secuencias<br />
armónicas, se repiten como motivos, especialmente al comienzo y al final de cada movimiento, pero<br />
a menudo con el contrapunto invertido o ligeramente transformado. A veces las voces se combinan<br />
en una genuina escritura a ocho partes; más a menudo se separan en dos coros antifonales e<br />
intercambian frases cortas en ritmos de discurso pegadizos. En Ego flos campi, Padilla se toma<br />
libertades considerables con el texto litúrgico y crea estribillos que sugieren el fervor religioso de<br />
una reunión de gospel y hacen hincapié en el propósito didáctico y evangelizador de la música en<br />
la iglesia colonial: “Paz a todos los hombres de buena voluntad”…“Ten piedad de<br />
nosotros”…“Creo”…“Yo confieso”…“Señor Dios de los Ejércitos”<br />
Incluso en este estilo formal la música de Padilla respira el espíritu de la danza. Detalles de<br />
tipos de danza individuales se conservan en colecciones para guitarra o arpa de compositores como<br />
Santiago de Murcia o Lucas Ruiz de Ribayaz. Muchos de estos libros comienzan con la más famosa<br />
de estas danzas, la xácara, cantada en el dialecto de las calles de los barrios bajos de Madrid y<br />
acompañada tradicionalmente por un grupo de guitarristas vestidos con negras capas españolas, con<br />
dagas escondidas en sus mangas. Esta música callejera del siglo XVII llegó a ponerse de moda<br />
incluso en la alta sociedad, ya que los compositores españoles usaban los ritmos llenos de vida y la<br />
energía danzable de la xácara para desarrollar las intrigas de las óperas y para introducir el<br />
entusiasmo teatral incluso en la música de iglesia. Así, en los villancicos de Navidad de Padilla, de<br />
su sucesor como maestro, Juan García de Zéspedes, y de Francisco de Vidales (organista principal),<br />
el texto llama la atención del oyente a los orígenes profanos de la música: “vaya de xácara”…“se<br />
requiere siempre un estilo y una voz alegre”…“baila el canario y el villano”…“festeja con la<br />
guaracha”…“con el guacambe...”<br />
La actitud de las autoridades eclesiásticas hacia estos villancicos era, en el mejor de los casos,<br />
ambivalente. La xácara y otras danzas similares fueron repetidamente (y de ello se deduce que sin<br />
efecto) condenadas por ser demasiado estimulantes, aunque Pedro Cerone, autor del famoso<br />
tratado del siglo XVII El Melopeo y Maestro, defendió los villancicos, a los que comparaba con las<br />
mascherate que se cantaban en los carnavales italianos: “Se escucha en un momento a un portugués,<br />
en otro a un vasco; una vez a un italiano y otra a un alemán; primero a un gitano, luego a un<br />
negro… No diría que son mala cosa, pues se reciben en todas las iglesias españolas y, si no fuese por<br />
ellos, no sería posible alcanzar esos momentos elevados de celebración solemne… Hay personas tan<br />
faltas de piedad que sólo acuden a la iglesia una vez al año y pierden todas las misas de precepto<br />
porque son demasiado vagas como para levantarse de la cama. Pero hagámosles saber que habrá<br />
villancicos, y no se encontrará nadie más devoto en todo el lugar, nadie más alerta que esas personas,<br />
pues no habrá iglesia, oratorio o capilla que no visiten, ni les importará levantarse a mitad de la<br />
noche, con un frío helador, sólo para escucharlos.”<br />
La xácara se escribía habitualmente en Re menor con una simple alternancia de armonías de<br />
tónica y dominante, de ritmo ternario y de hemiolias. Una variante en modo mayor era conocida<br />
como jácaras de la costa, tal vez asociada en origen con la región de Veracruz, en la que las<br />
tradiciones locales han conservado hasta nuestros días muchas características de los instrumentos<br />
del siglo XVII y de la forma de tañerlos. El texto profano para la marizápalos parece ser a primera<br />
vista una inocente balada pastoril, pero cada línea contiene un doble sentido y revela un subtexto<br />
de gran erotismo, una celebración casi espiritual del acto del amor. Sin embargo, incluso este<br />
romance podía ser adaptado a lo divino para crear “una metáfora fidedigna” con melodías<br />
angelicales.<br />
El cumbees es un tipo de danza inspirada en África, ligada a los zarambeques, guacambe,<br />
paracumbe, a la guaracha afrocubana y a los patios afrohispanos de la negrilla. Las variaciones a solo<br />
– diferencias – provienen de un manuscrito para guitarra mexicano, identificado recientemente<br />
MISSA MEXICANA 2<br />
THE HARP CONSORT
HMU 907293<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Ana Mateo<br />
como el libro perdido de música de danza de Santiago de Murcia: los títulos de danza africana<br />
proporcionan sílabas para los cantantes que improvisan. Otras danzas, como la corrente, tenían<br />
origen italiano pero se les daba un inconfundible sabor español por medio de un ritmo ternario<br />
sincopado con el acento en la segunda parte del compás. Este ritmo característico crea el<br />
movimiento y la atmósfera – el aire – de la música hispana del siglo XVII, una cualidad que los<br />
coetáneos ingleses denominaban “el humor español.”<br />
Así como los músicos tocaban diferencias sobre la repetición de la secuencia armónica de la<br />
xácara y otros bajos, los bailarines improvisaban variaciones coreográficas – mudanzas – sobre los<br />
pasos básicos de cada danza. También la música vocal aparecía a menudo en forma de versos (coplas)<br />
y coros (estribillo), y evitaba los contrastes bipolares de la italiana aria da capo a favor de la narración<br />
en el estilo de la balada o de la meditación contemplativa. El exitoso libro de grabados del Nuevo<br />
Testamento, Adnotationes et meditationes, de Jerónimo Nadal, publicado por primera vez en 1595,<br />
muestra un cuadro en el que se identifican con precisión los elementos clave de la historia de la<br />
Navidad que se celebran en los villancicos: la ciudad de Belén, el Niño y la Virgen con la mula y el<br />
buey en humilde compañía, el sencillo portal que también es la puerta del cielo, el coro de ángeles<br />
cantando a los pastores, la estrella que guía a los tres reyes.<br />
También pueden encontrarse algunos conceptos poéticos en muchos villancicos: el contraste<br />
entre el frío invierno fuera del establo y el fuego del amor divino en el interior, el Niño que llora<br />
mientras el mundo se alegra, metáforas de flores y estrellas. Dos soles ahuyentan la oscuridad, uno<br />
en los cielos, otro en la luz resplandeciente del Niño recién nacido. Dios es el juez, el padrino, el<br />
divino gigante; el Cristo niño es el amante, el héroe, la flor entre las espinas; María es la amada, el<br />
amanecer, la perla entre las perlas, la flor entre las flores. Esas descripciones poéticas tan elegantes<br />
pueden encontrarse incluso en una xácara obscena, o junto a los nombres sencillos de humildes<br />
actores callejeros: Antón con su tamboril, Gil bailando al son de la gaita de Antón Pascual, Miguel<br />
vestido de papagayo o Antonio, de mico.<br />
En todas las formas de música hispana, desde las xácaras callejeras hasta las óperas cortesanas<br />
y la elegante música de cámara, la guitarra era considerada como el instrumento característico del<br />
nuevo estilo barroco. Ribayaz explicaba las técnicas de tañer el arpa en términos de acordes para<br />
guitarra; un maestro de castañuelas del siglo XVIII clasifica los patrones rítmicos en relación con el<br />
rasgueado de la guitarra; un cuarteto de guitarras, cada una de distintos tamaño y diapasón,<br />
componía un consort que era, junto con el arpa española, considerado elemento indispensable del<br />
ritmo y la atmósfera del aire español. Un conjunto de seis guitarras barrocas de Veracruz fue<br />
construido especialmente por Tacho y Wendy Utrera para este proyecto bajo la supervisión de Eloy<br />
Cruz en la ciudad de México y según los principios del consort establecidos por el guru de la<br />
guitarra para The Harp Consort, Pat O’Brien.<br />
Arpa y guitarras combinan con la viola bassa, la lira o el órgano en el estilo refinado; con<br />
bajón, chirimía y sacabuche en coros a gran escala; y en la música de danza con todo tipo de<br />
instrumentos tradicionales: tamboriles, grandes tambores africanos, cajas chinas, maracas, la simple<br />
caja tocada por los músicos itinerantes en toda América Latina, pequeñas campanas, palo de lluvia,<br />
salterio e incluso – en las jácaras de la costa – una concha.<br />
Este programa es una exploración musical, no una reconstrucción litúrgica, que une las<br />
adaptaciones religiosas inspiradas en la danza, con sus bailes originales, con las danzas reales que las<br />
inspiraron. La autenticidad no es sólo musical, sino también cultural, y revela el complejo cruce de<br />
influencias entre conservadurismo y experimentación, entre ingenuidad y sofisticación, entre el<br />
gran arte y el arte popular, entre la intelectualidad y la sensualidad que caracterizaron el barroco<br />
hispano. Pues mientras la congregación del siglo XVII y los clérigos de la catedral de Puebla<br />
escuchaban la misa de Padilla salpicada de villancicos festivos, no podían olvidar los bajos orígenes<br />
de la xácara.<br />
– Andrew Lawrence-King<br />
La misa Ego flos campi ha sido editada por Mapa Mundi (© 1992, Vanderbeek & Imrie Ltd);<br />
los Villancicos, por Jack Sage (4,12,13), Clifford Bartlett (4,13) y Helen Coombes (1,7,10,16),<br />
y las danzas, por Andrew Lawrence-King (3,6,9,14).<br />
MISSA MEXICANA 3<br />
THE HARP CONSORT
HMU 907293<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Maricruz Gil<br />
El Harp Consort es un conjunto que domina la improvisación dentro de los distintos<br />
estilos de la música medieval, renacentista y barroca. El grupo toma su inspiración de un “consorte”<br />
de arpa del siglo XVII que tuvo su origen en la corte inglesa del rey Carlos I como oposición a la<br />
orquesta de cuerda homogénea, también formada en esta época. El “consorte” juntó varias clases de<br />
instrumentos solistas — arpas, laúdes, teclado, cuerdas- con voces para añadir nuevas<br />
combinaciones coloristas al estilo de la época. Al igual que el “consorte” del siglo XVII, el Harp<br />
Consort está constituido por instrumentos que giran alrededor del acompañamiento al bajo<br />
continuo y concentra un equipo internacional de músicos que crean una rica variedad de timbres.<br />
Aunque los continuistas tienen una línea de bajo escrita, deben improvisar figuras melódicas<br />
y armónicas en diferentes instrumentos y en el estilo apropiado de la época y el país determinado.<br />
El Harp Consort se basa en el bajo continuo como modelo para todos sus conciertos, combinando<br />
la espontaneidad de la improvisación con una atención minuciosa al colorido peculiar de cada<br />
repertorio.<br />
Los programas del Harp Consort se extienden desde el drama medieval y las canciones a<br />
capela, hasta la ópera barroca; desde nuevas composiciones para instrumentos antiguos hasta<br />
exuberantes suites bailables. Los bailes españoles del siglo XVII, los antiguos planxties irlandeses y<br />
los bailes del barroco alemán que el ensamble ha puesto en escena, han deleitado al público de todo<br />
el mundo. El Harp Consort se ha destacado en gran medida por sus recitales de música de cámara<br />
y por una serie de grabaciones galardonadas.<br />
Andrew Lawrence-King<br />
Virtuoso del arpa barroca e instrumentista imaginativo de bajo continuo, Andrew Lawrence-<br />
King es <strong>mundi</strong>almente reconocido como intérprete líder de la música antigua. Director creativo y<br />
sugerente que ha dirigido desde el continuo óperas barrocas y oratorios en La Escala de Milán, la<br />
Opera House de Sydney, Casals Hall en Tokyo, Filarmonía de Berlín, Konzerthaus de Viena, en el<br />
Carnegie Hall de Nueva York y en el Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México.<br />
Andrew Lawrence-King cursó estudios en el Colegio Selwyn de Cambridge con una beca de<br />
órgano y seguidamente estudió canto y acompañamiento de continuo en el Centro de Música<br />
Antigua de Londres. Rápidamente se estableció como versátil continuista (con arpa, teclado,<br />
salterio, percusión, guitarra, etc.) entre los principales grupos especialistas europeos, uniéndose al<br />
Hespèrion XX de Jordi Savall como arpa solista. En 1988, Andrew Lawrence-King fundó el grupo<br />
de continuo, Tragicomedia, en el que codirigió durante seis años óperas antiguas recuperadas, con<br />
gran entusiasmo del publico. Su interpretación de J. S. Bach recibió el aplauso de la revista<br />
Gramophone por su combinación de “virtuosidad embriagadora y calmada junto a una sensibilidad<br />
poco frecuente”.<br />
En 1994, Andrew Lawrence-King fundó su propio ensemble, el Harp Consort, (ver<br />
siguiente página), con el que ha actuado por todo el mundo. Tras recibir los galardones Noah<br />
Greenberg y Erwin Bodky, Andrew Lawrence-King se convierte en el principal director invitado del<br />
ensemble barroco de Florencia, L’Homme Armé, especializándose en ópera barroca antigua y<br />
oratoria. En el 2001 dirigió una puesta en escena de Euridice de Jacopo Peri en el Centro Getty de<br />
Los Angeles por el 400 aniversario de la ópera y ha sido invitado a Lima, Perú, para dirigir las<br />
representaciones de la primera ópera americana, La púrpura de la rosa, por el 300 aniversario. Su<br />
trabajo en bailes del siglo XVII con Stephen Player y el Harp Consort han hecho ganar este<br />
ensemble una reputación incomparable en cuanto actuaciones entretenidas y de gran estilo.<br />
Andrew Lawrence-King ahora reparte su tiempo entre recitales como solista, giras <strong>mundi</strong>ales<br />
con el Harp Consort y compromisos como director en Europa, Escandinavia, y las Américas;<br />
incluyendo su último proyecto, Missa Mexicana, que debutó en la Escala de Milán.<br />
Para <strong>harmonia</strong> <strong>mundi</strong> usa, Andrew Lawrence-King ha realizado varias grabaciones<br />
altamente aclamadas, entre las que se encuentran el Banquete de Apolo, música del siglo XVII<br />
publicado por John Playford (hmu 907186); Il Zazzerino de Jacopo Peri (hmu 907234) y ¡Jácaras!,<br />
música de guitarra de Santiago de Murcia. Ha colaborado con el barítono Paul Hillier en French<br />
Troubadour Songs (Canciones de los Trovadores Franceses) (hcx 3957184), Bitter Ballads (baladas<br />
amargas): poesía antigua y moderna adaptada a melodías medievales (hmu 907204), Distant Love<br />
(amor distante): canciones de Jaudre Rudel y Martin Codax (hmu 907203) Como solista invitado<br />
por King’s Noyse, se le puede escuchar en Bailes del Renacimiento Italiano vol.1 (hcx 3957159) y más<br />
recientemente, en Pavaniglia: bailes y madrigales de la Italia del siglo XVII (hmu 907246).<br />
MISSA MEXICANA 4<br />
THE HARP CONSORT
HMU 907293<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Maricruz Gil<br />
Festival de la Abadía de Saint-Michel-en-Thiérache<br />
Fundado en 1987 con la ayuda del Consejo General de Aisne como parte de una iniciativa<br />
para promocionar la música en la región, el Festival de la Abadía de Saint-Michel-en-Thiérache,<br />
próximo a la frontera belga, se inspiró en el potencial artístico de la zona, al ser foco de una<br />
constante restauración y en particular por su valiosísimo órgano de 1714 de Jean Boizard,<br />
reconstruido a su estado original. La acústica de la iglesia, la arquitectura del monasterio y el grado<br />
de primera calidad del instrumento, que ha conservado la mayoría de sus tubos originales, han<br />
determinado la tendencia natural del festival hacia la música barroca.<br />
El festival llena de vida el monasterio cada verano, todos los domingos de junio y julio, con<br />
dos conciertos diarios dedicados a temas específicos, presentando tanto cantantes y músicos solistas<br />
como grupos que son excelentes en este repertorio.<br />
Junto a la música en vivo, el festival sigue una estrategia de grabación trivalente: para<br />
documentar los programas presentados durante la temporada en coproducciones con firmas<br />
discográficas; para albergar proyectos ajenos de los que el monasterio recibe beneficios prácticos y<br />
artísticos; y para el desarrollo del actual programa radiofónico, Tempéraments. Lanzado en 1995 por<br />
Radio Francia y el Consejo General de Aisne como respuesta a las iniciativas inspiradas por el<br />
instrumento del monasterio, Tempéraments explora la mejor música de órgano francesa y europea<br />
escrita para solo o encuadrada en ensamble.<br />
Grabada en Julio del 2000 en la abadía de Saint-Michel-en-Thiérache en colaboración con el<br />
Festival Barroco de Música Antigua, haciéndolo posible el apoyo del Consejo General de Aisne.<br />
MISSA MEXICANA 5<br />
THE HARP CONSORT
1. Villancico Canten dos jilguerillos<br />
Francisco Escalada<br />
Canten dos jilguerillos<br />
al sol infante<br />
porque los pajaritos<br />
al niño acallen,<br />
canten suaves.<br />
Que esta noche de cielo<br />
sus voces salen.<br />
Copla<br />
A esta noche le llaman<br />
la Noche Buena:<br />
para todos de gozo,<br />
de gusto, de gloria,<br />
y adiós de pena.<br />
2. Kirie [Messe Ego flos campi ]<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
Señor, ten piedad.<br />
Cristo, ten piedad.<br />
Señor, ten piedad.<br />
HMU 907293<br />
4. Xácara Los que fueren de buen gusto<br />
Francisco de Vidales<br />
Introducción<br />
‘Los que fueren de buen gusto,<br />
óiganme una xacarilla nueva<br />
que he de cantar en Belén.’<br />
‘¡Siempre el garbo y la voz!<br />
Yo la cantaré también’.<br />
‘¿Cómo qué, cómo qué?’<br />
‘A que só me toca a mí,<br />
y es porque yo me lo sé.’<br />
‘¿Cómo qué, cómo qué?’<br />
‘Pues quitémonos de ruidos<br />
y cantemos a las tres.’<br />
‘Tres a tres y una a una,<br />
¡vaya, vaya de xácara, pues.’<br />
Coplas<br />
En el mesón de la luna<br />
junto a la Puerta del Sol<br />
del cielo de una doncella<br />
en tierra un lucero dio.<br />
A ser galán de las almas<br />
el Verbo al hielo nació,<br />
que lo tomó con fineza<br />
pero con poco calor.<br />
Sin duda el Jayán divino<br />
- que nace a morir de amor,<br />
pues cuando se emboza el rostro<br />
me descubre el coraçón.<br />
Por ser de la Trinidad<br />
vino por la redempçión.<br />
Metióse en Santa María,<br />
ya dado en San Salvador.<br />
‘Tres a tres y una a una,<br />
¡vaya, vaya de xácara, pues.’<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Ana Mateo<br />
Metióse en cuna de nieve,<br />
que no es nuevo en su afiçión<br />
dexarse llevar del agua<br />
el espíritu de Dios.<br />
Al soberano Cupido<br />
desde que naçió le hirió<br />
la flecha, que en el desnudo<br />
hiere más presto el harpón.<br />
A matar vino a la muerte,<br />
picado de que el amor<br />
le dio una herida mortal,<br />
y fue porque le encarnó.<br />
Que no se caiga el portal<br />
es un milagro de Dios.<br />
Bien puede el Jayán haçer<br />
cuenta que ha naçido hoy.<br />
‘Tres a tres y una a una,<br />
¡vaya, vaya de xácara, pues.’<br />
Se anda perdonando vidas,<br />
muy preçiado de león,<br />
y le suele haçer llorar<br />
el más pobre pecador.<br />
El naçer en la campaña<br />
es prueba de su valor,<br />
y esperarle cuerpo a cuerpo<br />
es cosa de confesión.<br />
El sangriento açero esgrime<br />
Herodes, que en su región<br />
contener mala conçiencia<br />
deseaba ver de Dios.<br />
¡Bien haya la xacarilla<br />
y el padre que la engendró,<br />
y a las que también la cantan<br />
buenas Pascuas las dé Dios!<br />
‘Tres a tres y una a una,<br />
¡vaya, vaya de xácara, pues.’<br />
5. Gloria [Messe Ego flos campi ]<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
Gloria a Dios en el cielo<br />
y en la tierra paz a los hombres<br />
de buena voluntad.<br />
Por tu inmensa gloria<br />
te alabamos, te bendecimos,<br />
te adoramos, te glorificamos,<br />
te damos gracias.<br />
Señor Dios Rey celestial,<br />
Dios Padre omnipotente,<br />
Señor hijo único<br />
Jesucristo.<br />
Señor Dios Cordero de Dios<br />
Hijo del padre.<br />
Tú, que quitas el pecado del mundo<br />
ten piedad de nosotros,<br />
Tú, que quitas el pecado del mundo<br />
atiende a nuestras súplicas,<br />
Tú, que estás sentado a la derecha del Padre,<br />
ten piedad de nosotros.<br />
Porque sólo Tú eres santo,<br />
sólo Tú, Señor,<br />
sólo Tú, altísimo<br />
Jesucristo<br />
ten piedad de nosotros<br />
con el Espíritu Santo<br />
en la gloria de Dios Padre. Amén.<br />
7. Xácara: A la xácara xacarilla<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
A la xácara xacarilla,<br />
de buen garbo y lindo porte,<br />
traigo por plato de corte<br />
siendo pasto de la villa<br />
a la xácara xacarilla.<br />
Xácarilla de novedad,<br />
novedad de novedades<br />
aunque ha más de mil navidades<br />
que alegra la navidad.<br />
¡Vaya, vaya de xacarilla!,<br />
que el altísimo se humilla,<br />
¡vaya de xácara, vaya!<br />
que amor pasa de raya,<br />
¡vaya, vaya!<br />
Coplas<br />
Ahora que con la noche<br />
se suspenden nuestras penas<br />
y a pagar culpas ajenas<br />
nace un bello Benjamí,<br />
si el Rey me escuchara a mí<br />
¡oh qué bien cantara yo!<br />
Como ninguno canto<br />
del niño más prodigioso.<br />
Con licençia de lo hermoso<br />
rayos desenvaina ardientes.<br />
Escúchenme los valientes<br />
esta verdadera historia<br />
que al fin se canta la gloria<br />
y a él la cantan al naçer.<br />
General se vio el plaçer<br />
que el velo a la tierra envía.<br />
Que en los ojos de María<br />
madrugaba un claro sol;<br />
con celestial arrebol<br />
mostró la aurora más pura<br />
muchos siglos de hermosura<br />
en pocos años de edad.<br />
Si no sol, era deidad,<br />
y el sol es quien la ha vestido.<br />
¡Vaya, vaya!<br />
¿Quién como ella le ha tenido,<br />
quién como ella le tendrá?<br />
Virgen y Madre será<br />
de él que es sin principio y fin;<br />
Serrana, y más serafín<br />
que serrana y que mujer,<br />
porque Dios quiere naçer,<br />
aperçibe su jornada.<br />
La bella bien maridada,<br />
de las más lindas que vi,<br />
bien es que se diga aquí<br />
de su esposo lo galante:<br />
el más verdadero amante<br />
y el más venturoso joven,<br />
sin que los hielos la estorben<br />
dentro de una Ave María.<br />
MISSA MEXICANA 6<br />
THE HARP CONSORT
Muerta de amores venía<br />
la diosa de los amores;<br />
salúdanla ruiseñores<br />
y por madre de la vida<br />
la daban la bienvenida<br />
perla a perla y flor a flor.<br />
A un portal los llevó amor,<br />
y en la noche más helada.<br />
¡Vaya, vaya!<br />
Miran de sierra nevada<br />
altos y encumbrados riscos<br />
En los grandes obeliscos<br />
ya no hay piedra sobre piedra.<br />
Escollo armado de hiedra,<br />
yo te conoçí edifiçio.<br />
Ya se miran por resquiçio<br />
las glorias a manos llenas.<br />
En un retrete que apenas<br />
se divisan las paredes,<br />
está para haçer merçedes,<br />
que en su primer arrebol<br />
dividido se vio el sol<br />
en breve espaçio de çielo.<br />
Su gloria puso en suelo<br />
con la voluntad más viva.<br />
Quien libertad escautiva,<br />
quien roba la voluntad,<br />
la Noche de Navidad<br />
la tierra vio su alegría.<br />
Al pie de una peña fría,<br />
que es madre de perlas ya,<br />
tierno sol mostrando está<br />
opuesto al hielo y al aire.<br />
¡Vaya, vaya!<br />
HMU 907293<br />
Valentía en el donaire<br />
y donaire en el mirar,<br />
para empezar a pagar<br />
de un criado obligaciones.<br />
.<br />
Bañando está las prisiones<br />
con lágrimas que derrama.<br />
Tiene de campo la cama,<br />
del hielo puesto al rigor<br />
¡Ay verdades, que en amor<br />
siempre fuisteis desgraçiadas<br />
las promesas confirmadas!<br />
El más tosco más se afila,<br />
y a la gaita baila Gila<br />
que tocaba Antón Pascual.<br />
Dejémosle en el portal<br />
con prinçipios de romançes.<br />
Y pues no ha de haber más lançes<br />
y mi xacarilla vuela,<br />
acabóse y acabéla<br />
que era de vidrio y quebréla.<br />
Acabéla y acabóse,<br />
que estaba al hielo y quebróse.<br />
Acabóse y acabéla,<br />
que estaba al hielo y quebréla.<br />
¡Vaya, vaya de xácara, vaya!,<br />
que amor pasa de raya,<br />
¡vaya, vaya!<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Ana Mateo<br />
8. Credo [Messe Ego flos campi ]<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
Creo un solo Dios:<br />
Padre omnipotente<br />
creador de cielo y tierra<br />
– creo –<br />
en lo visible y lo invisible,<br />
y en un solo Señor Jesucristo<br />
Hijo único de Dios<br />
y nacido del Padre<br />
antes de todos los siglos.<br />
Dios de Dios, luz de luz,<br />
Dios verdadero de Dios verdadero,<br />
engendrado, no creado,<br />
de la misma naturaleza del Padre<br />
por quien todo fue hecho,<br />
que por nosotros los hombres<br />
y por nuestra salvación<br />
bajó del cielo.<br />
Y se encarnó por obra del Espíritu Santo<br />
en María la Virgen<br />
y se hizo hombre.<br />
Fue crucificado en tiempos<br />
– creo –<br />
de Poncio Pilato,<br />
padeció y fue sepultado<br />
y resucitó al tercer día<br />
según las escrituras,<br />
y subió al cielo,<br />
y está sentado a la derecha del Padre,<br />
y de nuevo vendrá con gloria<br />
para juzgar a vivos y muertos<br />
y su reino no tendrá fin.<br />
Y en el Espíritu Santo<br />
Señor y dador de vida<br />
– creo –<br />
que procede del Padre y del Hijo,<br />
que con el Padre y el Hijo<br />
recibe una misma adoración y gloria,<br />
que habló con los profetas,<br />
y en la Iglesia que es una<br />
Santa Católica y Apostólica.<br />
Reconozco un sólo bautismo<br />
para la remisión de los pecados,<br />
espero la resurrección de los muertos<br />
y la vida del mundo futuro. Amén.<br />
9. Cumbées<br />
Santiago de Murcia<br />
El Cumbe... Paracumbe... Zarambe...<br />
10. Negrilla A siolo flasiquiyo<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
¡Ay, señor Francisco!<br />
¿Qué manda el señor Tomás?<br />
¿Tenemos todos los instrumentos<br />
templaditos como debe ser?<br />
Sí, señor, bien puede<br />
avisar a su mujer<br />
que ya los morenos están<br />
cayéndose de la risa<br />
y muriendo por bailar<br />
llámalo, llámalo, aprisa<br />
que ha venido el blanco ya<br />
y el niño resplandeciente<br />
se alegrará ha-ha ha-ha<br />
con la zambomba ha-ha ha-ha<br />
con el guacambe, con el cascabel.<br />
Sí señor Tomás<br />
repiquemos el rabel<br />
y a la pandereta de Antón<br />
baylaremos los negros al son.<br />
Responsion<br />
Tumbucutu cutu cutu<br />
y toquemos pasito, quedito<br />
tumbucutu cutu cutu<br />
no espantemos al niño Jesús<br />
Coplas<br />
Todos los negros de Guinea<br />
que venimos convidaremos<br />
A Andrés y su criada<br />
Mongrave con su librea.<br />
Y para que el blanco vea<br />
que del blanco nos servimos<br />
con blanco algodón nos vestiremos<br />
y haremos al niño bu.<br />
Tumbucutu cutu cutu.<br />
De médico y cirujano<br />
se vista Miguel aprisa<br />
pues nos curase su cris<br />
las heridas con su mano.<br />
Baile el canario y el villano<br />
mas no pase por detrás<br />
de mula que da coces<br />
de toro que dice mu.<br />
Tumbucutu cutu cutu.<br />
Antoñito con su sayo<br />
que trujo de Puerto Rico<br />
saldrá vestido de mico<br />
y Miguel de papagayo<br />
Y cuando llegue a adorarlo<br />
al niño le dirá así<br />
si tú lloras por mí<br />
yo me alegraré por ti.<br />
Responsion: Tumbucutu cutu cutu...<br />
MISSA MEXICANA 7<br />
THE HARP CONSORT
HMU 907293<br />
11. Sanctus [Messe Ego flos campi ]<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
Santo, Santo, Santo,<br />
es el Señor Dios del universo,<br />
llenos están el cielo y la tierra<br />
de tu gloria<br />
Hosana en el cielo.<br />
Bendito el que viene<br />
en nombre del Señor<br />
Hosana en el cielo.<br />
12. Marizápalos a lo humano:<br />
Marizápalos bajó una tarde<br />
Anonym / Text M. López de Honrubias, 1657<br />
Marizápalos baxó una tarde<br />
al verde Sotillo de Vaciamadrid,<br />
porque entonces, pisándole ella,<br />
no hubiese más Flandes que ver su país.<br />
Estampando su breve chinela,<br />
que tiene ventaja mayor que chapín,<br />
por bordar con sus perlas las flores,<br />
el raso del campo se hizo tabí.<br />
Marizápalos era muchacha<br />
y enamorada de Pedro Martín,<br />
por sobrina del cura estimada,<br />
la gala del pueblo, la flor del abril.<br />
Al sotillo la bella rapaza<br />
de su amartelado se dexó seguir,<br />
y llevando su nombre en la boca,<br />
toda su alegría se le volvió anís.<br />
Al volver la cabeza la niña<br />
fingió de repente el verle venir<br />
y fue tanto su gusto y su risa,<br />
que todo el recato se llevó tras sí.<br />
Recibióle con rostro sereno<br />
y, dándole luego su mano feliz,<br />
aguardarle en la palma le ofrece<br />
toda la victoria cifrada en jazmín.<br />
Dijo Pedro, besando la nieve,<br />
que ya por su causa miró derretir:<br />
«En tus manos más valen dos blancas<br />
que todo el Ochavo de Valladolid».<br />
Merendaron los dos en la mesa<br />
que puso la niña de su faldellín,<br />
y Pedrico, mirándole verde,<br />
comió con la salsa de su perejil.<br />
Pretendiendo de su garabato<br />
hurtar las pechugas, con salto sutil<br />
respondió Marizápalos «¡Zape!»,<br />
llevando sus voces cariños de «¡Miz!»<br />
Al ruido que hizo en las hojas<br />
de las herraduras de cierto rocín,<br />
el Adonis se puso en huida,<br />
temiendo los dientes de algún jabalí.<br />
MISA MEXICANA<br />
Traducción: Ana Mateo<br />
Era el cura que al soto venía<br />
y, si poco antes aportara allí,<br />
como sabe gramática el cura,<br />
¡pudiera cogerlos en el mal latín!<br />
13. Marizápalos a lo divino:<br />
Serafín que con dulce harmonía<br />
Joan Cererols<br />
Estribillo<br />
Serafín, que con dulce harmonía<br />
la Vida que nace requebrando estás;<br />
cántale glorias mirándole en penas,<br />
que amante y quejoso, su alivio es un ¡ay!<br />
¡ay, ay, ay!<br />
Coplas<br />
Tan fragrantes, lucientes y bellas<br />
en cielo y en tierra distantes se ven<br />
las estrellas vestir de colores,<br />
las flores brillar y las selvas arder.<br />
En albergue, aunque pobre dichoso<br />
en nuevos afectos se mira esta vez<br />
una luna que alumbra el empíreo,<br />
y un sol que de aljófar guarnece sus pies.<br />
¡Ay, ay, ay!<br />
En los brazos de alma más pura,<br />
picado de amor un hermoso clavel<br />
desabrocha el color encarnado<br />
del nácar precioso que quiere verter.<br />
¡Oh! mil veces dichosa la culpa,<br />
en cuya sentencia ha llegado a tener<br />
por descargo un tesoro infinito:<br />
un Dios por padrino y un Niño por juez.<br />
¡Ay, ay, ay!<br />
Llora el sol y la aurora se alegra,<br />
la pena y el gozo en sus ojos se ven;<br />
que es afecto muy propio del alma<br />
llorar y reír al amanecer.<br />
Un jazmín entre espinas y abrojos<br />
nos da testimonio en metáfora fiel,<br />
que entre humanos y graves pesares<br />
siempre hay escondido un divino placer.<br />
¡Ay, ay, ay!<br />
Hoy el hombre suspenso y absorto<br />
ignora, cobarde, lo mismo que ve:<br />
pues mirar tan divino lo humano<br />
es cosa que apenas se puede entender.<br />
Una noche de siglos tan largos<br />
dobladas las luces habrá menester,<br />
y por eso amanecen dos soles<br />
que bañan de luz el portal de Belén.<br />
Estribillo: Serafín…<br />
15. Agnus Dei [Messe Ego flos campi ]<br />
Juan Gutiérrez de Padilla<br />
Cordero de Dios<br />
que quitas el pecado del mundo<br />
ten piedad de nosotros<br />
que quitas el pecado del mundo<br />
danos la paz.<br />
16. Guaracha Convidando está la noche<br />
Juan García de Zéspedes<br />
Convidando está la noche<br />
aquí de músicas varias<br />
Al recién nacido infante<br />
canten tiernas alabanzas<br />
Alegres cuando festivas<br />
unas hermosas zagales<br />
Con novedad entonaron<br />
juguetes por la guaracha<br />
Coplas<br />
¡Ay que me abraso, ay, divino dueño, ay,<br />
en la hermosura, ay, de tus ojuelos, ay!<br />
¡Ay como llueven, ay, ciendo luceros, ay,<br />
rayos de gloria, ay, rayos de fuego, ay!<br />
¡Ay que la gloria, ay, del portaliño, ay,<br />
ya viste rayos, ay, si arrojayalos, ay!<br />
¡Ay que su madre, ay, como en su espero, ay,<br />
mira en su lucencia, ay, sus crecimientos, ay!<br />
¡En la guaracha, ay, le festinemos, ay,<br />
mientras el niño, ay, se rinde al sueño, ay!<br />
¡Toquen y baylen, ay, porque tenemos, ay,<br />
fuego en la nieve, ay, nieve en el fuego, ay!<br />
¡Pero el chicote, ay, a un mismo tiempo, ay,<br />
llora y se rrie, ay, que dos estremos, ay!<br />
¡Paz a los hombres, ay, dan de los cielos, ay,<br />
a Dios las gracias, ay, porque callemos, ay!<br />
Textos en español (1, 4, 7, 10, 12, 13, 16)<br />
editados por Jack Sage<br />
MISSA MEXICANA 8<br />
THE HARP CONSORT