Estatuto del Docente Hondureño - Secretaría de Educación

CAPITULO IV
DEL REGIMEN DISCIPLINARIO
SECCION PRIMERA
DE LA ORIENTACION, LOS MERITOS DISCIPLINARIOS Y
RECONOCIMIENTOS
ARTICULO 32- Se determina como disciplina al conjunto de actitudes y comportamientos
profesionales del personal que contribuyen a procesos y resultados educativos de alta calidad.
El régimen disciplinario es el conjunto de disposiciones jurídicas y administrativas que
estimulan o corrigen esas actitudes y esos comportamientos.
ARTICULO 33- Son méritos disciplinarios las manifestaciones de actitudes y los
comportamientos que superan los niveles del simple cumplimiento y que, por tanto, son
ejemplares.
Para reconocimiento, estímulo y divulgación de los méritos disciplinarios, se establecerán
comités y programas nacionales, departamentales, distritales y locales.
Los comités respectivos serán responsables por la obtención de la participación social y de
organizaciones y gobiernos amigos en el reconocimiento, así como la adquisición y entrega de
estímulos.
ARTICULO 34- Los medios de reconocimiento y estímulo pueden ser, entre otros: Premios
económicos, diferentes a las asignaciones saláriales, distinciones, becas de estudio ó
pasantías, publicaciones y apoyo a proyectos educativos de los establecimientos.
Por aspectos directamente asociados a rendimiento, calidad y desempeño, se estimulará el
trabajo en equipo en los centros educativos, además del reconocimiento a las personas.
SECCION SEGUNDA
DE LAS FALTAS, SANCIONES Y DESPIDO
ARTICULO 35- Se considera falta toda violación u omisión de obligaciones y de las
disposiciones de este Estatuto y demás leyes aplicables, así como las acciones u omisiones
que desmeriten la profesión o disminuyan la calidad del servicio.
Las faltas se clasifican en: Leves, graves y muy graves. Su especificación se establecerá en el
Reglamento.
ARTICULO 36- Las sanciones por faltas leves son:
1) Amonestación oral privada;
2) Amonestación escrita; y,
3) Amonestación escrita, con asiento en el expediente profesional.