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06 Eutanasia - Muerte digna.pdf - Ramón Lucas Lucas, LC

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TEMAS<br />

<strong>Eutanasia</strong><br />

Ensañamiento terapéutico<br />

Cuidados paliativos<br />

Autodeterminación del paciente<br />

1


http://www.elpais.com/articulo/sociedad/25000/firmas/piden/sonde/nuevo/anciana/Huelva/elpepiso<br />

c/20110903elpepisoc_11/Tes<br />

EL PAÍS<br />

Madrid - 03/09/2011<br />

25.000 firmas piden que se sonde de nuevo a la anciana de Huelva<br />

Derecho a Vivir no se rinde. La organización conservadora ha promovido una campaña por Internet que<br />

ha conseguido enviar 25.000 firmas al Fiscal General del Estado para que obligue a poner de nuevo la<br />

sonda que alimentaba a Ramona Estévez. La mujer tiene 90 años, y el 26 de julio sufrió un derrame<br />

cerebral masivo que la tiene "como una máquina de bombear sangre", según explicó su hijo, <strong>Ramón</strong><br />

Pérez. Está en estado vegetal y los médicos coinciden en que no va a recuperarse. La Junta de Andalucía<br />

ordenó la retirada de la vía a petición de la familia.<br />

Estas circunstancias y el hecho de que la mujer no quería que el final de su agonía se prolongara<br />

innecesariamente no arredran a la organización. Esta ya intentó que un juez ordenara que se le volviera<br />

a poner la sonda nasogástrica que le retiraron el 24 de agosto. No lo consiguió. También pidió la tutela<br />

de la mujer. El juez tampoco les hizo caso. Les queda un proceso pendiente: una denuncia contra la<br />

consejera de Salud de la Junta, María Jesús Montero, por una presunta vulneración del derecho a la<br />

objeción de conciencia y un posible delito de omisión de auxilio. A esta iniciativa se añadió ayer la<br />

recogida de firmas.<br />

Hambre y sed<br />

Los firmantes argumentan que se está dejando morir a la mujer "de hambre y sed, contra el criterio<br />

médico básico". Y que con ello se le "causará una agonía lenta y cruel por inanición". Afirman también,<br />

en palabras de la presidenta de la asociación, Gádor Joya, que "si la sonda fuera una forma de<br />

mantenerla artificialmente con vida, al retirársela habría muerto de forma inmediata".<br />

Este criterio es rechazado por la mayoría de las sociedades científicas. La de Cuidados Paliativos y la<br />

de Nutrición Enteral y Parenteral afirman que la sonda nasogástrica es "equivalente a un tratamiento<br />

médico", y que, por tanto, el enfermo o sus representantes legales tienen derecho a renunciar a ello. Esta<br />

práctica está avalada por la ley de autonomía del paciente, que, en este caso, se ve reforzada por la ley<br />

de muerte <strong>digna</strong> andaluza, que establece claramente que existe el derecho de renunciar a un tratamiento<br />

aunque ello suponga acelerar la muerte. Para el hijo de la mujer la decisión es clara: "Ella no quería<br />

estar amarrada a unos tubos. Quería morir tranquila, porque había tenido una vida muy feliz".<br />

2


http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Muere/Ramona/dias/desenchufada/elpepisoc/20110907elp<br />

episoc_6/Tes<br />

EL PAÍS<br />

Madrid - 07/09/2011<br />

Muere Ramona tras 14 días 'desenchufada'<br />

"Se ha ido tranquila, tal como ella quería", afirma su hijo<br />

EMILIO DE BENITO<br />

"Se ha ido tranquila, como ella quería". Con estas palabras intentaba ayer por la tarde José <strong>Ramón</strong> Páez<br />

encontrar consuelo después de la muerte de su madre, Ramona Estévez. La mujer, de 91 años, con<br />

párkinson y en estado vegetativo después del infarto cerebral que sufrió el 26 de julio ha sido, junto con<br />

su familia y sin quererlo, protagonista de una historia pionera en España: la intervención pública de una<br />

Administración para obligar a los médicos a cumplir la ley y respetar la voluntad de los cuidadores de<br />

la enferma y retirarle la sonda nasogástrica, como ella y su hijo deseaban.<br />

El representante de la mujer culpa a los médicos de su sufrimiento<br />

José <strong>Ramón</strong> atendía ayer a duras penas el teléfono. En principio, solo quería dar las gracias a quienes<br />

han colaborado para evitar que la agonía de su madre fuera alargada artificialmente en el Hospital<br />

Blanca Paloma, de Huelva. E intentaba resaltar que el proceso había sido de gran serenidad. "Ha estado<br />

como el primer día, muy tranquila. Solo hoy [ayer para el lector] por la mañana su respiración se ha<br />

agitado, pero los médicos han intervenido para calmarla", afirmaba con la voz entrecortada. El hombre<br />

solo espera que, a partir de ahora, le dejen en paz. Él solo quería que su madre no se viera convertida<br />

en una "máquina de bombear sangre" que ni sentía ni padecía. Pero, sin querer, se ha visto en medio<br />

de una polémica con la asociación conservadora Derecho a Vivir, que ha intentado por todos los medios<br />

torcer su voluntad y que no se aplicara la ley. Ha denunciado a la familia, a la Consejería de Salud<br />

andaluza y a su titular, María Jesús Montero. También organizó una campaña en Internet para<br />

bombardear con correos electrónicos al Fiscal General del Estado para que interviniera.<br />

Cuando se le recuerda lo que ha tenido que pasar -con llamamiento a declarar incluido-, José <strong>Ramón</strong><br />

estalla: "No hay derecho a lo que han hecho con mi familia. Son unos canallas. Se dicen cristianos, pero<br />

han actuado sin caridad y sin misericordia".<br />

Derecho a Vivir no está de acuerdo. "Bajo ningún concepto vamos a permitir que haya quien utilice una<br />

situación traumática para avanzar en una agenda ideológica radical e inhumana. Desde ahora, cualquier<br />

enfermo puede ser tratado con la misma crueldad que Ramona", ha dicho en su web la presidenta,<br />

Gádor Joya. La organización ha visto desestimadas todas sus intervenciones porque no es parte<br />

interesada y porque lo pedido por el hijo se ajusta plenamente a la ley de muerte <strong>digna</strong> andaluza, que<br />

estipula que una persona -o su representante legal- puede renunciar a cualquier tratamiento médico<br />

después de haber sido debidamente informada a pesar de que esa decisión suponga acortar su vida. La<br />

norma fue avalada en el Parlamento andaluz incluso por el Partido Popular, que interpretó que esta era<br />

la manifestación más extrema de lo que ya había plasmado en el Parlamento nacional la ley de<br />

autonomía del paciente que el Gobierno del PP impulsó en 2002. La única parte en la que el PP se<br />

manifestó en desacuerdo fue en el artículo que establece que, dado que renunciar a un tratamiento<br />

médico forma parte de las buenas prácticas de la profesión, los facultativos no tenían derecho a objetar<br />

cuando se encontraran con una petición así.<br />

Precisamente, este aspecto es el que más ha molestado a José <strong>Ramón</strong>. El hombre cree que Derecho a<br />

3


Vivir no es la única culpable de la situación que ha tenido que pasar. "Los principales culpables son los<br />

médicos, que sabiendo que las leyes amparaban lo que pedíamos no quisieron hacernos caso,<br />

obligándonos a hacer público un caso que debería haberse solucionado en la intimidad, como le sucede<br />

a la mayoría de las familias", afirmaba ayer con una voz que se entendía a duras penas.<br />

Él siempre mantuvo que después del infarto de su madre intentó que los médicos no la sondaran -el<br />

primero que la atendió le dijo que en su estado era una crueldad-, porque ella le había manifestado tanto<br />

a él como a las mujeres que la cuidaban que no deseaba acabar su vida "amarrada a unos tubos". Pero<br />

otro facultativo le amenazó con mandarla a casa si no accedía. Entonces cedió, y cuando volvió a<br />

intentar que se cumpliera el deseo de la enferma se encontró con la negativa. "Que esto no pase más",<br />

concluye.<br />

4


http://www.larazon.es/noticia/5859-fallece-la-anciana-a-la-que-retiraron-la-sonda-que-la-alimentaba<br />

-hace-15-dias<br />

LA RAZÓN<br />

6 Septiembre 2011<br />

Fallece la anciana a la que retiraron la sonda hace 15 días<br />

Ramona Estévez, la mujer de 91 años a la que se le retiró la sonda nasogástrica el pasado 23 de agosto<br />

después de que la Junta de Andalucía mediara ante el personal médico para ello en cumplimiento de<br />

la Ley de <strong>Muerte</strong> Digna, ha fallecido este martes sobre las 12.00 horas.<br />

Según han informado fuentes cercanas, la mujer ha fallecido este martes 14 días después de la retirada<br />

de la sonda en el Hospital Blanca Paloma en Huelva, donde se encontraba ingresada después de sufrir<br />

el pasado 26 de julio un infarto cerebral, que "se había convertido en un proceso irreversible".<br />

El caso de Ramona Estévez no ha estado exento de polémica, ya que a raíz de su caso, la Asociación<br />

Derecho a Vivir (DAV) interpuso dos denuncias. La primera para pedir el restablecimiento de la sonda<br />

nasogástrica a la paciente y la segunda contra la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María<br />

Jesús Montero, y contra el hospital Blanca Paloma por un posible delito de omisión del deber de socorro<br />

y otro de inducción o asistencia al suicidio.<br />

No obstante, el juzgado ha archivado estas dos denuncias porque, según fuentes de la Fiscalía onubense,<br />

la asociación "no es parte interesada en el procedimiento y no se aportan indicios de que haya habido<br />

delito".<br />

5


http://www.larazon.es/noticia/227-dos-semanas-de-agonia-para-una-muerte-<strong>digna</strong><br />

El fallecimiento de Ramona Estévez, un «ensayo» para la futura ley<br />

Dos semanas de agonía para una «muerte <strong>digna</strong>»<br />

6 Septiembre 2011 - Madrid - E. Montalbán / R. Serrano<br />

Ramona Estévez falleció ayer. Su muerte se produjo catorce días después de que los médicos del<br />

Hospital Blanca Paloma de Huelva le retiraran la sonda nasogástrica que la mantenía con vida, en<br />

aplicación de la ley de muerte <strong>digna</strong> de Andalucía, y bajo la sombra de la ley a nivel nacional que el<br />

Gobierno y el Partido Socialista tienen intención de poner en marcha.<br />

La mujer, de 91 años, fue ingresada el pasado 26 de julio en el Hospital Juan <strong>Ramón</strong> Jiménez de Huelva<br />

en estado de coma irreversible tras sufrir un infarto cerebral. Los facultativos descartaron cualquier<br />

actuación dada la avanzada edad de la paciente y el carácter irreversible del trombo, por lo que fue<br />

trasladada al hospital concertado Blanca Paloma, especializado en el tratamiento de personas mayores.<br />

Una vez allí, y tras varios días de ingreso, el 4 de agosto la mujer fue sondada por los médicos del<br />

centro como medida para ser alimentada.<br />

Reclamación familiar<br />

Después, y a pesar de que inicialmente la familia accedió al tratamiento, José <strong>Ramón</strong> Páez, uno de los<br />

hijos de Estévez, se puso en contacto con la Asociación Derecho a Morir Dignamente, desde donde<br />

recibió asesoramiento para interponer una queja ante la Consejería de Salud para solicitar que se le<br />

retirase la alimentación artificial a su madre, hecho que finalmente se produjo el pasado 23 de agosto<br />

y que acabó ayer con la vida de Ramona.<br />

Para la plataforma Derecho a Vivir (DAV), que denunció los hechos ante la Justicia onubense por<br />

entender que constituían un delito de omisión de socorro y de inducción al suicidio, «este caso debe<br />

servir para que la población tenga muy en cuenta que, a partir de ahora, cualquier enfermo puede ser<br />

tratado con la misma crueldad con que ha sido tratada Ramona Estévez». La portavoz de la asociación,<br />

la doctora Gador Joya, advirtió que, ante estos hechos, «cualquiera que entre inconsciente en las<br />

Urgencias de un hospital puede enfrentarse a que un tercero decida sobre si su vida merece la pena ser<br />

vivida», dado que, en el caso de Ramona, no existía ningún testimonio por escrito en el que constase<br />

su voluntad de no prolongar su vida de manera artificial.<br />

Así, el portavoz de DAV en Huelva, Eduardo Gómez, consideró lo ocurrido como un «caso claro de<br />

eutanasia» y de «desamparo ante una voluntad supuesta», ya que únicamente se ha basado la decisión<br />

para terminar con su vida en el testimonio de los hijos de la mujer fallecida. Gómez motivó la muerte<br />

de Ramona «no como consecuencia del infarto cerebral que sufrió, sino por inanición, al no recibir ni<br />

comida ni bebida».<br />

De hecho, para César Nombela, catedrático de Farmacia de la Universidad Complutense y miembro del<br />

Comité Español de Bioética, «la colocación de una sonda nasogástrica para alimentar e hidratar a un<br />

enfermo en estas condiciones, no es una medida extraordinaria, ni un tratamiento especial; es una<br />

medida de soporte vital que los facultativos utilizaron en aplicación de su criterio de acuerdo con la<br />

‘‘lex artis’’. Su retirada por decisión administrativa contradice ese principio, puede acelerar la muerte<br />

y causar un deterioro».<br />

Javier Rocafort, presidente de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos, explica que la paciente,<br />

incluso, podría haber vivido más sin la sonda nasogástrica. «Cada caso tiene su evolución, algunos<br />

pacientes pueden vivir una semana, otros, un mes o mes y medio», asegura. Además, en este caso, ni<br />

la familia ni el hospital han aclarado «si se ha optado por la hidratación cero» o, al menos, se le ha<br />

6


suministrado agua, porque, de acuerdo con Rocafort, «hay muchas formas de hacer las cosas».<br />

Por su parte, la Consejería de Salud de Andalucía se escuda en la ley de muerte <strong>digna</strong> que existe en la<br />

región para justificar el caso, si bien DAV criticó la «arbitrariedad y ligereza» al intervenir con una<br />

orden directa.<br />

«Ya está descansando»<br />

El hijo de la fallecida, José <strong>Ramón</strong> Páez, se mostró ayer aliviado por el hecho de que su madre «ya esté<br />

descansando». En declaraciones a Efe, insistió en que lo único que se ha hecho, en relación a su caso,<br />

ha sido el de cumplir la voluntad que muchas veces la anciana expresó en vida. El hecho es que no pidió<br />

la retirada de la sonda hasta que fue asesorado por la asociación Derecho a Morir Dignamente. Esta<br />

entidad lamentó ayer el «sufrimiento» de la familia.<br />

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http://www.larazon.es/noticia/4789-el-experto-la-eutanasia-entra-por-andalucia<br />

6 Septiembre 2011<br />

EL EXPERTO: La eutanasia entra por Andalucía<br />

Nicolás Jouve<br />

Catedrático de Genética y presidente de CíViCa<br />

La Ley andaluza de Derechos y Garantías de la Dignidad de la Persona en el Proceso de la <strong>Muerte</strong><br />

pretende no ser una ley de eutanasia e ir en favor de la dignidad de la persona, pero tan falso es lo uno<br />

como lo otro. Es de hecho una ley que promueve la eutanasia «pasiva» al permitir la retirada de los<br />

cuidados mínimos, que es lo que se ha hecho, por orden de la consejera de Salud, para precipitar la<br />

muerte de Ramona Estévez a petición de la familia. Han sido 14 días de muerte por inanición desde la<br />

retirada de la sonda nasogástrica, con la única finalidad de acelerar su muerte. ¿Es esto muerte <strong>digna</strong><br />

o desamparo? Conviene señalar varias cosas. En primer lugar, y de acuerdo con la Sociedad Española<br />

de Cuidados Paliativos, éste sería un caso claro de eutanasia ya que, con independencia del método, ha<br />

existido la intención y el resultado de provocar la muerte del paciente. En segundo lugar, no existe<br />

ningún método infalible que permita predecir qué paciente en estado vegetativo o en un proceso de<br />

enfermedad grave se recuperará y cuál no. En tercer lugar, este caso es contrario a la ética y supone un<br />

atentado a la objeción de conciencia de los médicos. El reciente Código de Deontología Médica es claro<br />

al descartar la eutanasia como acto médico. «El médico nunca provocará intencionadamente la muerte<br />

de ningún paciente, ni siquiera en caso de petición expresa por parte de éste». Finalmente, estas leyes<br />

son innecesarias y crean inseguridad, ¿no sería mejor dotar bien los servicios de Cuidados Paliativos?<br />

http://www.larazon.es/noticia/4981-el-analisis-cuanto-ha-sufrido<br />

6 Septiembre 2011<br />

EL ANÁLISIS: Cuánto ha sufrido<br />

Álvaro Gánda<br />

Presidente de la Sociedad Madrileña de Cuidados Paliativos<br />

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- ¿Ha sufrido Ramona Estévez durante estos 14 días?<br />

– Espero que, por lo menos, la hayan sedado para que no haya sufrido, y le hayan paliado los síntomas<br />

que produce la retirada de la alimentación y de la hidratación. Los pacientes en este estado neurológico<br />

no suelen sentir mucho sufrimiento, pero pueden tener síntomas como fiebre, o cólicos intestinales que<br />

hay que tratar en un equipo de cuidados paliativos.<br />

- ¿Son muchos 14 días para aguantar sin comida ni bebida?<br />

– Es posible que en su caso hayan mantenido algo de hidratación, aunque no nutrición. Con hidratación,<br />

un paciente en estas circunstancias puede aguantar hasta 90 días. Si no ha estado hidratada, en efecto,<br />

14 días son muchos. Es un período de tiempo extraño.<br />

- ¿Es una medida extraordinaria colocar una sonda nasogástrica a un paciente como Ramona Estévez?<br />

–De acuerdo con la ley andaluza de muerte <strong>digna</strong>, sí, y de acuerdo con algunas interpretaciones de la<br />

Ley de Autonomía del Paciente, también. Otra cosa es la ética. La clave para decidir si es o no adecuado<br />

colocar una sonda nasogástrica está en el pronóstico vital del paciente. Si su pronóstico de vida es<br />

inferior a tres meses, y la colocación de la sonda le va a producir una serie de síntomas, como vómitos<br />

o neumonía, es habitual quitarla, aunque manteniendo la hidratación. Si el pronóstico es superior a tres<br />

meses, lo mejor es implantar la sonda directamente al estómago, porque así se evita que, cuando el<br />

paciente está un poco consciente, se la quite. En este caso, no sabemos el pronóstico que tendría<br />

Ramona Estévez.<br />

- ¿Cómo se decide si se coloca o no la sonda a un enfermo?<br />

– Es importante que un equipo de Cuidados Paliativos hable con la familia y les cuente todos los<br />

detalles del procedimiento. Si ha dejado por escrito su voluntad, no hay problema, pero en este caso,<br />

el problema es que, ¿cómo podemos saber que la voluntad de esta señora es que le retiraran la sonda?<br />

Su hijo aseguró que así se lo había dicho, pero no hay ninguna prueba.<br />

Ver la película Golpes del destino (Million Dollar Baby)<br />

Descripción de la película en Wikipedia:<br />

http://es.wikipedia.org/wiki/Million_Dollar_Baby<br />

Descargar película (por partes):<br />

http://www.youtube.com/watch?v=weOwDCLZi1M&feature=related<br />

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