Revista "Paginas Sueltas" - Potosi, mas cerca del cielo
Revista "Paginas Sueltas" - Potosi, mas cerca del cielo
Revista "Paginas Sueltas" - Potosi, mas cerca del cielo
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
apunteshistoriograficos<br />
BiCEntEnario. un PaSo En la HiStoria.<br />
Por.: Luis Felipe Marcelo Cossío Dalence<br />
Si bien faltan 36 años para celebrar el 5to. Centenario de la<br />
fundación de Potosí, paralelamente estamos en <strong>cerca</strong>nías de<br />
celebrar el 2do. Centenario de la memorable gesta libertaria que<br />
emancipó a Potosí de la Corona Española. Esos españoles que<br />
de manera improvisada adecuaron su permanencia con la visión<br />
de una estancia sino efímera por lo menos no muy prolongada y<br />
que, al transcurrir el tiempo y abrirse la posibilidad de acumular<br />
grandes riquezas prolongaron indefinidamente su morada en<br />
estos confines, en condiciones climáticas y telúricas totalmente<br />
agrestes y distintas a las de sus natales origines aunque su<br />
desenvolvimiento social allá fuera miserable, dándoseles la<br />
oportunidad aquí de fungir como caballeros y amos, disponiendo<br />
de gente sometida por el temor y la humillación permanentes.<br />
Emigrantes que edificaron las ciudades de nuestro porvenir<br />
sin visión de futuro, poblaciones sin orientación ni noción de<br />
urbanismo y sin tomar en cuenta las necesidades primordiales<br />
que hacen a los asentamientos humanos que, a la postre, serían<br />
mundialmente significativas. En 1545, en esa vasta extensión<br />
cenagosa que circundaba el majestuoso “Sumaj Orko” se fundó<br />
el Potosí que maravillaría al mundo. Posteriormente, las filas<br />
<strong>del</strong> valeroso Alonso de Ibáñez con sus Vicuñas y las tropas<br />
Vascongadas <strong>del</strong> Corregidor Ortiz de Sotomayor, enemigo<br />
implacable de aquellos, protagonizaron cruentos combates<br />
que sembraron la vigorización de la Independencia de Potosí<br />
y de América. El primero, soñador perpetuo de independencia<br />
y libertad y el otro baluarte de la opresión, sojuzgamiento y el<br />
latrocinio.<br />
El 10 de Noviembre de 1810, después de la épica y victoriosa<br />
Batalla de Suipacha, deviene el levantamiento de Potosí, es<br />
decir, se revoluciona nuevamente la ciudad de Potosí, hecho<br />
con el contribuye a la guerra de los 15 años, tan memorable<br />
en el Alto Perú, hoy Bolivia. Gesta inspirada por patriotas tales<br />
como Matos, Nogales, De la Quintana, los hermanos Millares,<br />
Daza, Barrenechea y otros.<br />
En el albor de éste milenio, estamos prestos a recordar el<br />
Bicentenario de aquel heroico hito de la historia de nuestra ciudad.<br />
Por ello y con la oportunidad<br />
<strong>del</strong> caso convendrá organizar<br />
con la mayor solemnidad el<br />
homenaje respectivo que<br />
resalte la grandeza de nuestro<br />
riquísimo patrimonio histórico,<br />
cultural y económico, sin<br />
descuidar las diferentes y<br />
sucesivas alternativas de<br />
bienestar y crisis que hacen a<br />
nuestro transcurrir. Coinciden<br />
en toda América, festejos de<br />
esta índole pues hace 200 años<br />
la rebeldía e inconformismo<br />
de la América India no soportó<br />
más el yugo al que estaba<br />
sometido y rompió las cadenas<br />
de la opresión para buscar por propia cuenta los derroteros<br />
de su propio destino. Hoy, casi a dos siglos <strong>del</strong> amanecer de la<br />
libertad e independencia se entrevén en el umbral de nuestra<br />
historia emancipada nombres de preclaros ilustres como<br />
Linares, Bustillo, Frías, Campos, Quijarro, Omiste, Arce y muchos<br />
anónimos más que le dieron a este terruño nuestro claridad y<br />
visión, dignidad y orgullo, vigencia y perpetuidad.<br />
Dos centurias atiborradas de frustraciones, de explotación y<br />
saqueo. Dos cientos de años que se hacen quinientos para<br />
seguir lacerando las entrañas de nuestro Cerro Rico, visualizado<br />
en las descarnadas heridas que se muestran en su deformación<br />
y cual rasgaduras de puñal, cada bocamina es un grito lastimero,<br />
un surco de desangramiento y un testimonio de tortura cruel<br />
y despiadada. Centenas de años que no reivindican esa<br />
permanente abnegación <strong>del</strong> Gran Potosí para con la Nación, la<br />
América y el Mundo. El “Vale un Potosí” que sólo es, hoy por hoy,<br />
un cliché cuando otrora era la pauta de admiración que avivaba<br />
nuestra riqueza sin par.<br />
Las páginas incontables que hablan <strong>del</strong> Gran Potosí no son<br />
mínimamente lo que de su Crisol de Riqueza se ha extraído ni<br />
la muerte que ha generado la ambición humana. Doscientos<br />
o quinientos años después, no importa. El homenaje debe ser<br />
consciente y honesto porque siquiera eso merece esta ilustre<br />
urbe.<br />
La coincidencia de similares eventos en América no puede<br />
apañar la trascendencia <strong>del</strong> nuestro. El Potosí de hace 500 años;<br />
el de hace 200 y el de hoy, es aún el magnífico emporio que<br />
atesora en sus entrañas inconmensurables riquezas. Una vez<br />
en la tierra de los “Porcos”, otra en la cima <strong>del</strong> sueño cansado<br />
de Diego Huallpa, bañada por hilos de plata y ahora en la<br />
explotación que araña la médula <strong>del</strong> Cerro Rico y los ingentes<br />
yacimientos de San Vicente.<br />
Como en su momento el mundo rendía pleitesía a la “riqueza<br />
sin par” de nuestra Mole de Plata por los beneficios de la<br />
explotación que ayudaron a salvar sus decaídas economías,<br />
en la hora presente, esa significación histórica debe traspasar<br />
cualquier barrera en el meritorio<br />
homenaje a incalculables días<br />
de sustentáculo que ha dado el<br />
“Rey de Reyes” al mundo entero.<br />
‘<br />
El Bicentenario contiene tantos o<br />
menos días, minutos y segundos<br />
de lo que <strong>del</strong> espíritu de la Cima<br />
de Plata se ha exprimido y la<br />
sangre que ha regado cada una<br />
de las páginas y letras de nuestra<br />
historia. Homenaje excelso<br />
entonces a esta nuevo ciclo de<br />
nuestra habitual morada en la<br />
tierra más generosa de todos<br />
los tiempos. “De ti ¡oh Pueblo!,<br />
brotó la centella, que primero<br />
escribió Libertad…<br />
,<br />
<strong>Paginas</strong>ueltas | 5