libro SILENCIOS ROTOS DEL PIÑEIRO 04 11 a curvas - Hospital ...
libro SILENCIOS ROTOS DEL PIÑEIRO 04 11 a curvas - Hospital ...
libro SILENCIOS ROTOS DEL PIÑEIRO 04 11 a curvas - Hospital ...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Silencios Rotos del Piñeyro<br />
EL PERRO Y YO<br />
En el trayecto desde y hacia mi casa debo pasar por una hermosa casa con<br />
rejas azules, donde hay un perro de gran porte. Ese perro me miraba con<br />
cara de pocos amigos y me ladraba en forma amenazadora; al principio me<br />
propuse ignorarlo, pues yo pasaba casi todos los días por allí.<br />
Pero transcurrido algún tiempo y como continuaba con su actitud de enojo,<br />
me propuse que no me ladrara más, que cambiara su comportamiento.<br />
Un día me detuve frente a él y lo miré fijamente, con calma y en forma<br />
tranquila.<br />
El animal continuó ladrándome en forma agresiva; eso no me cayó bien.<br />
Entonces recurrí al truco de tomar una piedra y simular que se la iba a tirar;<br />
dejó de ladrar y, lejos de asustarse, comenzó a mirarme en forma<br />
interrogante.<br />
Parecía intrigado.<br />
Me acerqué prudentemente hacia él; me detuve a casi un metro de<br />
distancia, vi que era un perro hermoso y bien cuidado.<br />
Entonces noté que bajaba su cabeza, parecía un afloje de su actitud<br />
anterior.<br />
Como me seguía mirando en forma intrigada le dediqué unas palabras<br />
cariñosas.<br />
El seguía mirándome, ahora en forma sumisa y tolerante, entonces me<br />
animé, me acerqué más y le acaricié la cabeza, entrecerró los ojos y<br />
comenzó a mover la cola.<br />
Esto ocurrió hace algún tiempo, hoy ese perro y yo somos buenos amigos.<br />
“No es cuando desaparece el bullicio que te das cuenta que llegaste a tu<br />
casa, es cuando escuchas tus propios pasos”.<br />
- 40 -