"Siete Años Enterrado Vivo", Biófilo Panclasta
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<strong>Biófilo</strong> <strong>Panclasta</strong> 43<br />
Yo no me sacrifico por nadie; si, soy rebelde, revolucionario,<br />
anarquista… si todo lo he sacrificado por levantar<br />
mi protesta roja contra toda tiranía, es porque mi naturaleza<br />
combativa y sentimental me obliga a luchar en pro<br />
de todo lo “bueno” que para mi es lo “bello”; contra todo<br />
lo “malo” que para mi no es lo “feo”. Así pues, he buscado<br />
mi satisfacción. Nadie me debe nada; como nadie debe a<br />
nadie; a ninguno de los redentores, mártires y sacrificados<br />
que por la humanidad se han inmolado.<br />
Yo sufría, y porque este color era cobarde, de mi, debía<br />
arrojarlo; así, protesté ante el alcalde titular por esa ignominia<br />
de vida y de comida que sufrían mis compañeros,<br />
pero don Cornelio, como es estilo en Gomezuela, no me<br />
atendió… y el subjefe mulato y su zamba favorita, se vengaron<br />
de mi protesta y junto con el ex-cabo marquesita de<br />
Mijares, me encerraron en el mismo calabozo donde fue<br />
victimado de hambre, el infeliz Luís Osorio.<br />
¡Teorías de las cosas libertadoras! El 7 de agosto de 1919,<br />
centenario de la batalla de Boyacá, génesis de la libertad<br />
de Colombia, la grande; yo me hallaba, sufriendo todas las<br />
torturas del hambre, los grillos, el frió, en un calabozo en<br />
la tierra del Libertador.<br />
¡Oh! ¡Qué estériles fueron esos sacrificios!<br />
¡Oh! Cuando falaces son tus manes,<br />
Libertad, Patria, Igualdad, Fraternidad.<br />
Pero, dice Martínez Silva, cuando no es la justicia o<br />
la bondad, la envidia hace otra reparación. El jefe de la<br />
guardia, Coronel Arturo Galavis no miraba con simpatías<br />
el monopolio que de favores amorosos y del saqueo del<br />
rancho, el sub-alcaldete hacía; lo avisó a Fernández, éste<br />
depuso a los alcaldes y autorizó a Galavis para designar<br />
verdugo-mayor. Fue “señala’o” el Capitán Hidalgo, hombre<br />
bondadoso, afable y cumplido.<br />
Pero Trina, lo sedujo y lo corrompió asta el extremo de