Adiós César - Centro de Datos del Cabildo de Lanzarote

teitigiiiosamente giras y Le estam- a 12 sristencia y cooiempia ese iiuevo rando las nubes. Urdimbre de púas
pnn en el circulo petreo de una bur- iinivcrso qüc a la vez quler, la exaltación de lo
h¡;rirc, y ¡a ;,resencia latenle del volriti
ccrno Íondo para todo.
Sit;:',:ron los éxitos, creció la gran
Lriiyeclcria dc César y su colosal
gri.taganisrio por haccr ae L.anzaro-
::. ru obra ínáxirna, univer:;alitó su
isle, en todo momenlo.. Y dsi una y
riiil vcces. siempre, hablábamos. se
estrechaba más y más nucstra aniisiad
... tiiia tarde distinta a las deinás,
alguien me llama tele!'oriicamente,
"&Sabe? ¡Ha muerto César Manri-
qiie!" Al momento surgieron multi-
tud de escenas comuiies, de cordieli-
dad extrema, de aiecto y, como
siempre Lanzarote, en el corazón
que cantara Neruda de España.
No mc lo crco, creo que volveré a
verlo en cualquier calle, en cualquier
exposición y mas aiin no me explico
ir a Laiizarote, sin ver, sin hablar
con Ctsar, como antes hacia con
Agustin de la Hoz ...
El impacto ha sido brutal. Todos
nos sabemos qué hacer para que la
gran obra de César no se pierda. El
dolor es sincero, y consuela el ver que
toda Canarias le llora. Tal vez le iinite
en su ainor por nuestra tierra. Un
canario, también impar. cuando dio cl
último adios a una pran figura dccretc
"Tlianatos y el olvido son logaritmos
vanos". Al "Jesús pie" del réqiiicrn de
Fauré pongo mis últimas palabras, mi
adios paia siempre a César, por cnci-
nia de todo olvido.
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