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pulvis es, in<br />
pulviris reverteris.<br />
La bandera se encuentra a media asta, la marcha fúnebre se siente en las<br />
calles: la ópera se despide de nuestra ciudad, pues ¿qué lugar está a la<br />
altura de la Tetrazzini aparte del Teatro Nacional? ¿Acaso la demolición<br />
del edi5icio signi5icará la desaparición del arte? ¿Acaso las musas<br />
voltearán su mirada y dejarán a México en el más profundo olvido? Puede<br />
que este simple periodista exagere, pero con una mano en el corazón le<br />
puede a5irmar que el arte no será igual después de este<br />
devastador acontecimiento.<br />
Dicen que la nueva construcción será de 5irme mármol, ideal<br />
para un cementerio, pues eso será, con su frialdad<br />
resguardará nuestros recuerdos hechos polvo, pues memento homo, quia<br />
Por toda la ciudad se escuchan las despedidas a aquel recinto tan añorado; au revoir mon cheri, levantemos el<br />
sombrero y saludemos por última vez al Teatro Nacional.<br />
CONVENTO DE SANTA ISABEL<br />
es derribado para ceder su espacio<br />
al Teatro Nacional<br />
(1864- 1867) TEATRO DEL<br />
IMPERIO. Durante el mandato<br />
de Maximiliano de Habsburgo.<br />
HISTORIA DEL TEATRO NACIONAL<br />
(1840-1844) LORENZO DE LA<br />
HIDALGA . Arquitecto encargado<br />
de la construcción del foro.<br />
(1867-1901) TEATRO NACIONAL.<br />
Escenario de ópera, bailes, exposiciones<br />
y demás algarabías. En 1901 el gobierno<br />
porfiriano adquiere el recinto.<br />
TEATRO DE SANTA ANNA. El 10 de<br />
febrero de 1844 es inaugurado con<br />
bailes de carnaval y concierto de Bohxer.<br />
1899. ADAMO BOARI es<br />
contratado por su labor de<br />
arquitecto para la modernización del<br />
viejo Teatro Nacional.
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