49 / Enero 2005 - Index of - Muriel Mirvois

POR GUADALUPE TERRATS
Aunque nació en Hawai, es australiana,
y sobre su singular infancia en Sydney
ha comentado: “Crecí en el seno de una
familia muy activa, interesada en todo,
involucrada en política de izquierda. Mi padre es
psicólogo (…), mi madre es lo que se dice una intelectual
(…), por lo que desde muy chica me vi en
medio de manifestaciones y protestas. Fue muy estimulante”.
Inició sus clases de ballet y teatro a los
10 años. “De niña no me consideraba normal, era
muy alta, llena de pecas y con pelo rojo. Odiaba
esa imagen”. No estaba conforme con su físico,
pero a temprana edad supo que quería ser actriz.
Debutó a los 14 años en la película Bush
Christmas (1983). A partir de ahí, combinó sus estudios
con la actuación, hasta que abandonó la
secundaria para continuar su formación en el
Teatro Australiano para Jóvenes y el Teatro Philip
Street (ambos en Sydney). Luego de tomar parte
en va-rios proyectos televisivos, fue reconocida
como Mejor Actriz del Año por su intervención en
la serie Vietnam (1987). Su desempeño llamó la
atención de directores y fue la plataforma para
obtener un papel en Calma total (1989), su primer
protagónico en Hollywood. Gracias a esta cinta,
Tom Cruise y el productor Robert Towne se fijaron
en ella y le propusieron participar en Días de trueno
(1990), lo que significó su salto a la fama y el
comienzo de la relación amorosa con Cruise que
tanto daría de qué hablar.
Al principio Nicole parecía ser sólo una cara
bonita. Pero poco a poco su capacidad interpretativa
se impuso y cautivó a importantes directores:
Robert Benton, Ron Howard, Harold Becker, Bruce
Joel Rubin, Joel Schumacher, Jane Campion y Griffin
Dunne, entre otros. Al lado de ellos consiguió una
amplia filmografía que lo mismo abarca cintas “serias”
como Retrato de una dama (1996) o la
polémica Ojos bien cerrados (1999), que proyectos
más comerciales como Todo por un sueño (1992),
que le valió el Globo de Oro a Mejor Actriz; Malicia
(1993) o Batman regresa (1995).
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Con el reconocimiento del público y la crítica,
comenzó a buscar mayores retos: aceptó participar
en el musical Moulin Rouge (2001), con el
que obtuvo su primera nominación al Oscar, y la
estupenda Los otros (2001). En 2002 ganó el ansiado
Oscar como Mejor Actriz, gracias a su interpretación
de la escritora Virginia Woolf en Las
horas. A partir de ahí, ha figurado en algunas de
las producciones más exitosas de los últimos años:
Regreso a Cold Mountain (2003), La mancha humana
(2003), Dogville (2003) y Las mujeres perfectas
(2003), entre otras.
A últimas fechas es notorio el carácter de las
féminas que lleva a la pantalla. Ella misma asegura:
“Desde mi divorcio, me inclino –consciente o
inconscientemente– hacia personajes fuertes que
toman el control de su destino personal y profesional”.
Y fue justo a partir de su separación que
ha adquirido más reconocimiento. “La posición de
una llamada actriz ‘poderosa’ es reconfortante para
una mujer soltera como yo. Te da un carácter de
acero templado”.
LA SOLTERA MÁS CODICIADA
Aunque los Cruise-Kidman eran considerados una
de las parejas más sólidas del espectáculo, la noticia
del divorcio desató mordaces comentarios de la
prensa sensacionalista. Tiempo después, Nicole
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La Biennale di Venezia/Image.net